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Delito y Sociedad 33 | año 21 | 1º semestre 2012 | págs.

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Utilizando el marco teórico de Pierre Bourdieu


para comprender la cultura policial˙
Recibido: 01/07/2011
Aceptado: 15/11/2011

Janet Chan
Universidad de Nueva Gales del Sur, Australia

Resumen Abstract
Este artículo describe cómo la teoría de This paper describes how Bourdieu’s theory
la práctica de Bourdieu puede ser utilizada of practice can be used for understanding
para comprender la cultura y la socialización organizational culture and socialization.
organizacional. En particular, los conceptos In particular, Bourdieu’s concepts of field,
de Bourdieu de campo, capital y habitus han capital, and habitus have provided new ways
proporcionado nuevas formas de interpretar la of interpreting the occupational culture and
cultura ocupacional y el proceso de socializa- socialisation process of police officers. The
ción de los funcionarios policiales. Este artí- paper draws on empirical data from a longi-
culo se basa en datos empíricos de un estudio tudinal study of police recruits in Australia in
longitudinal sobre los reclutas de la policía en order to illustrate the utility of this framework
Australia para poder ilustrar la utilidad de este and to discuss the ways in which Bourdieu’s
marco teórico y para discutir las formas en las theory might be extended to understand social
cuales la teoría de Bourdieu podría aplicarse change.
para entender el cambio social.

Palabras clave: Teoría de la práctica de Key words: Bourdieu’s theory of practice,


Bourdieu, capital (cultural, simbólico), cam- capital (cultural, symbolic), field, habitus,
po, habitus, cultura policial, socialización police culture, socialization.

˙ Publicado originariamente en Droit et Société 56–57, 2004, 327–347. Traducción al español de Luciana Ghi-
berto (Universidad Nacional del Litoral).
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Cultura policial y socialización

Tradicionalmente, la socialización es con- Este artículo describe como la teoría de la


cebida como el proceso por el cual un novato práctica de Bourdieu puede ser utilizada para
aprende las habilidades, el conocimiento y comprender la cultura policial y la socializa-
los valores necesarios para convertirse en un ción. Se basa en datos empíricos de un estudio
miembro competente de una organización longitudinal sobre los reclutas de la policía en
u ocupación. En la actividad policial, esto Australia (Chan et al., 2003) el cual cuestiona
implica no sólo aprender las leyes, los pro- el marco teórico en el que generalmente se
cedimientos y las técnicas del cumplimiento entiende la socialización policial. Por medio
de la ley y del mantenimiento del orden sino del análisis de la experiencia de una cohorte de
también adquirir un abanico de habilidades 150 reclutas policiales en un Estado Australia-
organizacionales, actitudes y supuestos que no durante un período de dos años, el estudio
coinciden con los de otros miembros de la muestra que los caminos que ellos tienen para
misma ocupación. El éxito de la socializa- desarrollarse pueden ser mucho más variados
ción a menudo implica una metamorfosis y mucho menos determinantes que los que el
personal que no siempre es positiva. Las sentido común concebiría. De manera más
investigaciones han mostrado consistente- contundente, relacionando la experiencia de
mente que si bien la mayoría de los reclutas esa cohorte con los desafíos contemporá-
se incorporan a la policía con expectativas neos en las condiciones organizacionales y
altas e ideales elevados, al momento en que políticas de la actividad policial, el estudio
se gradúan como agentes de policía, muchos demuestra que la cultura policial es mucho
se han desilusionado y vuelto cínicos sobre menos homogénea y mucho más vulnerable
el trabajo y la organización policial, a pesar al cambio de lo que se asumía anteriormente.
de que continúan firmemente comprometi- Y en un sentido más general, el estudio de
dos con su vocación y la solidaridad con sus caso provee un acercamiento al proceso de
compañeros de trabajo. ¿Por qué sucede esto? socialización en los momentos de transición
La noción de cultura policial es central para de las culturas organizacionales.
explicar la socialización policial – un sistema Este artículo está organizado de la siguiente
de valores y entendimientos compartidos manera. La sección II propone una crítica a
que se pasan de una generación de policías la concepción tradicional de cultura policial
a la siguiente. Comúnmente se sostiene que y resume cómo la teoría de la práctica de
cuando los reclutas se integran a la cultura Bourdieu puede resultar útil para repensar
operacional (a los denominados “policías la cultura. La sección III describe la meto-
de calle”), adoptan actitudes conservadoras dología y los descubrimientos del estudio de
y cínicas y prácticas desviadas. La cultura caso de Australia. La última sección concluye
policial por lo tanto es vista como tierra fértil discutiendo la utilidad del marco teórico de
de prácticas no profesionales, como ha sido Bourdieu para entender las culturas y los
puesto en evidencia por varias indagaciones procesos de socialización.
importantes sobre la corrupción policial en
Australia (ver por ejemplo Mollen Report,
1994 y Wood Report, 1997).
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Utilizando el marco teórico de Bourdieu

En un estudio sobre la reforma policial tivamente estables y más allá del control diario
en Australia (Chan, 1997), planteé críticas inmediato de la organización o del individuo”
variadas sobre el concepto de cultura policial (Van Maanen, 1976: 85). En la presente era de
tal y como se lo entiende convencionalmente. la globalización, la mercantilización y la nueva
Mi preocupación era que los conceptos tradi- responsabilidad en la rendición de cuentas
cionales de la cultura policial fallaban en dar (Ericsson y Stehr, 2000), sin embargo, ya no
cuenta de las variaciones existentes entre las puede suponerse la estabilidad del ambiente
fuerzas policiales y al interior de las mismas; organizacional. Ciertamente, han tenido lugar
trataban a los actores policiales como recepto- cambios dramáticos en el ambiente de la acti-
res pasivos de la cultura, aislaban la práctica vidad policial en los últimos años, no solo en
cultural de las condiciones estructurales de la términos de condiciones sociales, demográficas
actividad policial y fracasaban en proveer una y económicas, sino también en la retórica y la
teoría del cambio cultural (Chan, 1997). En un estrategia de la actividad policial (O’Malley
estudio posterior (Chan et al., 2003), sostuve y Palmer, 1996), la regulación legal (Dixon,
que deben aplicarse consideraciones similares a 1997), el reclutamiento y el entrenamiento
las teorizaciones sobre la socialización policial: (Chan, 1997), la tecnología (Manning, 1992;
una teoría útil sobre la socialización debería ser Ericsson y Haggerty, 1997; Chan, Brereton,
capaz de dar cuenta de las variaciones en los Legoz y Doran, 2001 y Chan, 2003), así como
procesos y los resultados de la socialización, en el gerenciamiento y la responsabilidad en
reconocer el papel activo jugado por los re- la rendición de cuentas (Leishman, Loveday
clutas, situar los procesos de socialización en y Savage, 1996; Chan, 1999 y Ericsson y Ha-
las condiciones socio–políticas de la actividad ggerty, 1997). Ningún modelo que ignore estos
policial, así como también reflejar el impacto cambios podrá dar cuenta adecuadamente del
de cualquier cambio cultural. dinamismo y la complejidad de la socialización
Sin embargo, la mayoría de los modelos de en organizaciones modernas.
socialización que se encuentran en la literatura El marco teórico desarrollado anteriormente
típicamente suponen la existencia de una cul- (ver Chan, 1997 y Chan et al., 2003) para com-
tura organizacional relativamente homogénea prender la cultura policial y la socialización
y estable en la cual los recién llegados son combina la perspicacia de los teóricos organi-
aculturados. Los procesos de socialización zacionales (Schein, 1985; Sackmann, 1991),
son representados como dependientes de la crítica a la cultura de Shearing y Ericsson
las tácticas de socialización utilizadas por la (1991) y los conceptos de Bourdieu de cam-
organización y el aprendizaje y la adaptación po, capital y habitus (Bourdieu, 1990, 1992).
de parte de los recién llegados (Van Maanen Este nuevo marco teórico da cuenta de las
y Schein, 1979 ver también Ashforth y Saks, condiciones estructurales y del conocimiento
1996), pero pocos modelos tienen en cuenta cultural de la actividad policial y enfatiza la
el rol proactivo que juegan los recién llegados centralidad de la agencia en la conexión del
en el proceso de socialización (Morrison, campo y el habitus con la práctica. La teoría de
1993). Las condiciones ambientales —los Bourdieu provee un enfoque particularmente
valores sociales más extendidos, las condi- útil para comprender la formación de la prác-
ciones económicas, las características de la tica cultural. A continuación se describe cómo
comunidad, las normas regionales, etc.— son los conceptos de campo y habitus pueden ser
considerados “para la mayoría […como] rela- aplicados a la actividad policial.
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El campo de la actividad policial

El campo de la actividad policial, como de tipos variados de fuentes o capital. Para


cualquier otro campo, es un espacio social de sobrevivir en la ocupación, los funcionarios
conflicto y competencia que está estructurado policiales requieren tanto de capital social
por jerarquías de premios (capital) y sanciones como de capital cultural. El capital social —en
(capital negativo). El campo de la actividad forma de una red de soporte— es importante
policial existe en una posición subordinada para asegurar que los agentes policiales estén
o dominada dentro del campo de poder: es protegidos, no sólo contra el peligro o la hos-
una ocupación con niveles de prestigio tilidad externos asociados al trabajo policial,
relativamente bajos en términos de capital sino también contra las prácticas arbitrarias
económico, pero disfruta de un alto nivel de de supervisores y superiores administrativos.
apoyo público y del gobierno (capital político La mayoría de las fuerzas policiales todavía
y simbólico). Esto es porque la actividad están organizadas sobre el modelo militar,
policial es intrínsecamente política: es una con uniformes, cadena de mando, ascenso
institución “creada y sostenida por procesos progresivo por jerarquías, reglas disciplinarias
políticos para imponer las concepciones fuertes y entrenamiento formalizado. La
dominantes a cerca del orden público” (Skol- metáfora militar en general se traduce en un
nik, 1972). Como señala Manning (1978), el régimen disciplinario que favorece la prolifer-
derecho en sí mismo es una entidad política, el ación de reglas y regulaciones (Bittner, 1979:
42). La lógica de rendición de cuentas en las
“producto de lo que es correcto y adecuado desde organizaciones policiales tradicionalmente
la perspectiva de diversos segmentos políticamente se focaliza explícita y continuamente en la
poderosos dentro de la comunidad”. disciplina interna (en el código de vestimenta,
en los procedimientos internos a la institución,
Por su posición altamente simbólica en la etc.) más que en controlar cómo los agentes
defensa que la sociedad realiza del poder y policiales toman decisiones y tratan a los
la moralidad, los funcionarios policiales son ciudadanos. Las recompensas se otorgan por
investidos con amplios poderes discrecionales mantenerse al margen de los problemas o por
para parar, cuestionar, arrestar, investigar y “buenos arrestos” (Bittner, 1979: 46). Bittner
detener sospechosos (Dixon, 1997; McBarnet, (1979) describe la relación típica que se da
1979 y Ericsson, 1982). Sin embargo, con el entre agentes policiales y sus superiores como
advenimiento del “nuevo managerialismo pú- aquella en la cual “el personal superior es
blico”, y las dramáticas revelaciones de malas regularmente visto por el personal de base con
conductas policiales en algunas democracias desconfianza e incluso con desprecio”, aunque
occidentales, las organizaciones policiales han para lograr la lealtad de sus subordinados, los
sido cada vez más objeto de requerimientos superiores suelen “encubrir malas prácticas
de rendición de cuentas por su desempeño, que involucran conductas no reguladas es-
ubicando a su gestión administrativa y sus trictamente” o cubrir errores de los funciona-
actividades operativas bajo un escrutinio y una rio policial (Bitnner, 1979: 48). Van Maanen
evaluación más estrictas que las desarrolladas (1983: 280) notó de manera similar un “alto
anteriormente (Chan, 1999). grado de dependencia mutua y reciprocidad”
Dentro del campo de la actividad policial en entre los agentes policiales y sus superiores
sí mismo, los agentes compiten por el control inmediatos. Así, la acumulación de capital
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social requiere cultivar relaciones de apoyo fuerza “disciplinada”. Dentro del modelo
mutuo con colegas, tanto con superiores como policial de lucha contra el delito, la fuerza
con subordinados. y la resistencia físicas se dan por supuestas
La actividad policial también valoriza el como parte indispensable de lo que se requiere
capital cultural en forma de información, para ser un agente policial. Como resultado,
conocimiento y competencia. Dado que las mujeres que son típicamente menos “du-
una parte importante del trabajo policial a ras” a nivel físico, se encuentran aquí en una
nivel operativo se sirve del juicio individual, posición de capital negativo.
respuestas localizadas y decisiones discrecio- El capital simbólico —que está basado en
nales, la actividad policial está caracterizada “la reputación, la opinión y la representación”
por “acciones justificadas situacionalmente” (Bourdieu, 1990: 93)— es definido por el
(Manning, 1997), esto es, las acciones son habitus predominante, pero también puede
llevadas a cabo cuando las situaciones lo ser establecido por medio del derecho o la
demandan y luego son racionalizadas en tér- política. En la visión de la actividad policial
minos de las reglas disponibles. Los agentes como lucha contra del delito, los funciona-
policiales que son capaces de establecer bue- rios policiales que portan el mayor capital
nas redes de informantes, esquivar las reglas simbólico son aquellos que traen “buenos”
legales y burocráticas o acumular un registro arrestos, aquellos a los que se puede confiar
destacado de arrestos y condenas son alta- la protección de otros, y aquellos que tienen
mente valorados. La jerarquía es una forma experiencia o jerarquía. Las nuevas visiones
bien reconocida y visible de capital cultural, sobre la actividad policial, tales como el
así como lo es la experiencia. Los detectives modelo de policía comunitaria o de trabajo
u oficiales especializados también poseen policial orientado a la resolución de problemas
mayor capital cultural que los policías que buscan cambiar esto introduciendo fuentes
trabajan con la comunidad o que son asigna- alternativas de capital simbólico basadas en
dos a tareas generales. Con la introducción a la habilidad para resolver problemas, trabajar
gran escala de la tecnología de la información con miembros de la comunidad y proveer un
a la actividad policial, el policía experto en servicio. A pesar de que el mal comporta-
ella ha pasado a ser altamente valorado (Chan, miento policial siempre ha sido una violación
Brereton, Legoz y Doran, 2001). de requerimientos legales y regulatorios, la
El capital físico —la fuerza, el cuerpo y honestidad, la integridad y el profesionalismo
la tolerancia a condiciones duras— es otra en el trabajo policial no habían sido una
forma valorada de capital en el campo de la forma valorada de capital simbólico hasta
actividad policial. A pesar de que algunos que estallaron los escándalos de corrupción
requerimientos físicos para el ingreso, como en algunas jurisdicciones. Los modelos
el peso, han sido flexibilizados en muchas “nuevos” de actividad policial y las medidas
fuerzas policiales en los últimos años para anti–corrupción buscan, en efecto, “legalizar”
alentar el reclutamiento de mujeres y de al- el profesionalismo o la integridad como una
gunos grupos minoritarios, la fuerza física y forma de capital simbólico, pero su éxito
la agilidad aún son criterios importantes para depende de su poder simbólico para cambiar
incorporarse a la ocupación. El entrenamiento el habitus hasta el punto en que los agentes
físico es visto como un componente crucial acepten su validez o autoridad (Bourdieu,
para la construcción del carácter y de una 1990: 136–138).
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El habitus de la actividad policial

El habitus, según Bourdieu, es un sistema de to axiomático es conocimiento evidente, o lo


“disposiciones” que integra experiencias pas- que Bourdieu llama doxa (Bourdieu, 1977:
adas y habilita a los individuos para hacer fr- 164). La doxa de la actividad policial es la
ente a una diversidad de situaciones imprevis- “verdad” dada por descontada sobre el trabajo
tas (Wacquant, 1992: 18) –disposiciones que policial, que no requiere ser defendida ni es
los agentes adquieren ya sea individualmente, disputada. La policía tradicionalmente piensa
a través de su familia y el sistema educativo su trabajo en términos de “guerra contra del
o como grupo a través de la socialización delito”, mantenimiento del orden y protección
organizacional. Estas disposiciones son de la vida y la propiedad de la personas. Los
similares a lo que Sackmann (1991) describe funcionarios policiales a menudo definen su
como “conocimiento cultural”, pero incluyen trabajo con un sentido de misión (Reiner,
disposiciones físicas y emocionales además 1992: 112).
de conocimientos y valores. ¿Qué sabemos Manning describe la imagen pública de la
acerca del habitus de la actividad policial? policía como una ocupación caracterizada por
Las investigaciones sobre estos temas han la excitación, el peligro y la eficiencia (Man-
descripto algunas de las características básicas ning, 1978: 12–13). La imagen pública herói-
de la cultura de los “policías de calle”. Esas ca de la policía como “atrapa–delincuentes”
características son mejor consideradas como y “luchadores contra del delito” es impulsada
elementos que sirven de base para construir un por los funcionario policiales mismos. El pú-
tipo ideal; no son necesariamente universales blico, a su vez, demanda “una detención de
o inmutables. De hecho, las reformas y los de- delincuentes y una prevención del delito más
sarrollos en la actividad policial en los últimos dramáticas”. Estas demandas son luego con-
años están desafiando continuamente estas vertidas por las organizaciones policiales en
características típico–ideales de la cultura “criterios distorsionados para la promoción,
policial. Una manera conveniente de resumir el éxito y la seguridad” (Manning, 1978: 13).
el habitus de la actividad policial es utilizar Como resultado, la policía realiza regular-
las cuatro dimensiones del conocimiento cul- mente una distinción entre el trabajo policial
tural de Sackmann: conocimiento axiomático, “real” y el trabajo que realiza rutinariamente.
conocimiento de diccionario, conocimiento Sin embargo, el tiempo que estos funcionarios
de guía y conocimiento de fórmulas. Esta policiales pasan en la calle haciendo lo que
tipología, sin embargo, pierde una dimensión ellos consideran que es su “función prima-
importante del habitus de la actividad poli- ria” es muy poco. El trabajo policial “real”,
cial que está vinculada a las disposiciones entonces, se vuelve simultáneamente “una
físicas o corporales –a esta quinta dimensión fuente de satisfacción y de frustración” (Van
la denominaremos, siguiendo a Bourdieu, Maanen, 1978: 122).
“conocimiento corporal”. Otro aspecto importante de la doxa de la
actividad policial está relacionado con la do-
• Conocimiento axiomático: la doxa de la minación masculina. La necesidad de utilizar
actividad policial la coerción en algunas situaciones (Bittner,
Refiere a los supuestos fundamentales sobre 1978) es a menudo equiparada con la necesi-
“por qué las cosas son hechas de determinada dad de utilizar la fuerza física, la lucha agre-
manera” en una organización. El conocimien- siva contra el delito, y la rudeza –a través de
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la asociación entre lo físico y lo masculino, la bierto que los agentes de policía desarrollan
actividad policial generalmente es considera- nociones de apariencias que consideran nor-
da como un trabajo de hombres (Heidensohn, males y anormales en relación a los espacios
1992: 73; Martin, 1999: 111–126). Esto se da a públicos donde patrullan. Estas nociones
pesar de que la mayor parte del trabajo policial de normalidad y anormalidad dependen del
tiene que ver con el mantenimiento del orden, contexto: “Lo que es normal para un lugar es
la prestación de servicios y la resolución de normal para ese lugar en ese momento.” (Sa-
conflictos, tareas que requieren un abanico cks, 1978: 194) En un estudio de una fuerza
de habilidades interpersonales y destrezas policial suburbana Canadiense, Ericson nota
para resolver problemas. La introducción una tendencia similar en los funcionarios de
del modelo de “policía comunitaria” y el patrulla a desarrollar indicadores de anorma-
reclutamiento de mujeres en muchas fuerzas lidad: estos incluyen
policiales en los últimos años (Manning,
1997) puede haber presentado un desafío a “(1) individuos fuera de lugar, (2) individuos en luga-
esta dimensión del conocimiento cultural, res particulares, (3) tipos particulares de individuos,
pero la doxa de los policías como luchadores independientemente del lugar, (4) circunstancias
contra del delito continúa siendo dominante inusuales en relación a la propiedad” (Ericson,
y, consecuentemente, también lo sigue siendo 1982: 86).
la creencia de que el trabajo policial es, toda-
vía, esencialmente un “trabajo de hombres” Reiner también ha observado la distinción
(Appier, 1998). La fuerza de esta doxa es tal que la policía realiza en relación al público
que las cualidades físicas del trabajo han sido en general entre
aceptadas como el orden natural tanto por
las agentes policiales mujeres como por los “los elementos desordenados y los respetables, aque-
hombres y no requiere justificación. llos que desafían o aquellos que aceptan los valores
de decencia de la clase media que la mayoría de los
• Conocimiento de diccionario: categorías policías respetan y admiran profundamente” (Reiner,
policiales 1992: 117–118).
El conocimiento del diccionario provee
definiciones y etiquetas a las personas, las Muir describe una separación similar
cosas y los eventos con los que se encuentra la
policía en el transcurso de su trabajo. Ciertas “de la gente entre gobernables y rebeldes […],
investigaciones han sugerido que aquellos que pueden sublevarse en contra de la au-
toridad policial y aquellos que no lo harían” (Muir,
“el trabajo policial exige que los agentes definan 1977: 156–157).
los elementos principales de situaciones complejas
y ambiguas en un corto período de tiempo y hagan La policía en Australia ha sido acusada
algo al respecto” (Haldaway, 2005), de formar opiniones estereotipadas sobre la
criminalidad de ciertos grupos étnicos (Aus-
por lo que los funcionarios policiales de- tralian Law reform Commission, 1992) y aso-
sarrollan maneras rutinarias de categorizar a ciar regularmente a las personas aborígenes
los ambientes que los rodean y a las personas con el delito y el desorden social (Cunnen y
con las cuales se encuentran en la comunidad. Robb, 1987) El estudio de Ericson en Canadá
Investigadores estadounidenses han descu- encontró tipificaciones similares realizadas
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por la policía sobre las minorías raciales y un Laser rojo (como se menciona en el do-
étnicas y jóvenes con apariencia o conductas cumental televisivo Cop it Sweet). Jóvenes
desviadas quienes eran considerados como congregados en parques, shoppings, salones
“la escoria de la sociedad” (Ericson, 1982: de video juegos, etc., también son blancos
66–67). Los estereotipos étnicos funcionan obvios para las detenciones preventivas.
reforzando el discernimiento de la policía Como se mencionó anteriormente, un rasgo
sobre la respetabilidad y son “un rasgo de la importante del trabajo policial es la capacidad
cultura ocupacional” (Holdaway, 1995). y la autoridad para utilizar la fuerza coercitiva
El conocimiento del diccionario también se si es necesario (Bittner, 1978: 36). La utiliza-
aplica al trabajo policial en sí mismo. La doxa ción de la fuerza o la amenaza de la fuerza por
que considera a la actividad policial como una parte de la policía son vistas a menudo como
lucha contra el delito y lo físico implica que medios legítimos para mantener la autoridad,
las diferencias sexuales estén inmersas en controlar a los sospechosos, obtener infor-
el conjunto de oposiciones que organizan al mación o incluso hacer “justicia en la calle”
trabajo policial: lo físico versus lo emocional, (Westley, 1970; Baldwin y Kinsey, 1982; Van
afuera (en la calle) versus adentro (en la ofici- Maanen, 1978; Chan, 2000). Sin embargo, en
na), trabajo policial real (arrestar delincuen- la vasta mayoría de las situaciones, la policía
tes) versus otro trabajo, uso de la fuerza versus no tiene que recurrir a la fuerza. En cambio,
otros medios de resolución de conflictos, etc. la restauración del orden a menudo requiere
(Martin, 1999; Bourdieu, 2001). un gran número de habilidades interpersonales
para obtener conformidad, resolver conflictos
• Conocimiento de Guía: Métodos Poli- y dar apoyo a las víctimas y a sus colegas po-
ciales licías. La lucha en contra del delito, doxa mas-
El conocimiento de guía informa a los agen- culina de la actividad policial, sin embargo,
tes policiales sobre cómo el trabajo operativo “celebra las proezas físicas y demanda control
se lleva a cabo rutinariamente. Hasta cierto emocional frente al peligro y los ataques”,
punto estos métodos operacionales se derivan mientras que las habilidades interpersonales
de las definiciones y las categorías elabora- y el apoyo emocional son menospreciados
das por el conocimiento de diccionario. Por (Martin, 1999: 116).
ejemplo, en la actividad policial proactiva,
los agentes policiales se encuentran “en una • Conocimiento de Fórmulas: Valores
actitud de sospecha crónica” y son forzados a Policiales
“tomar decisiones inmediatas a cerca de si lo Refiere a la dimensión normativa del cono-
que la gente está haciendo es apropiado o no” cimiento cultural. Sugiere lo que debería o no
(Bayley y Mendelsohn, 1969: 63). Habiendo hacerse en situaciones determinadas. Provee
desarrollado indicadores de normalidad y recomendaciones y estrategias para hacer
anormalidad, rudeza y respetabilidad, los frente al trabajo policial. La investigación de
agentes policiales tienden a focalizarse sobre Van Maanen de una fuerza policial estadouni-
lo inusual y lo no respetable. Seguir estas dense provee observaciones significativas. Por
“pistas” puede ser trabajo policial de rutina, ejemplo, los funcionarios policiales aprenden
pero su efecto sobre las minorías puede ser a “no meterse en problemas” realizando la
serio (Bayley y Mendelsohn, 1969: 93). En mínima cantidad de trabajo requerida; los
Redfern, Sydney, por ejemplo, un individuo agentes “entusiastas” son regularmente ridi-
“fuera de lugar” es un aborigen manejando culizados por sus pares (Van Maanen, 1978:
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125). Los policías también desarrollan una que revelan sus sentimientos a otros funcionarios
actitud escéptica frente a sus supervisores y pueden ser vistos como débiles o desubicados”
superiores y aprenden a no esperar mucho de (Martin, 1999:116).
la organización; sus recompensas vienen en
forma de camaradería y “pequeños favores” A los reclutas se les enseña tempranamente
concedidos por los superiores inmediatos (Van a reprimir la exteriorización de sus emociones
Maanen, 1978: 127). Además, los agentes y a mantener distancia emocional al momento
aprenden a “cubrir sus traseros” para evadir de tratar con el público. Los varones deben
acciones disciplinarias. Consecuentemente, los ocultar el miedo y “actuar como hombres”
registros escritos de los eventos son a menudo mientras que las mujeres tienen permitido
manipulados por los agentes policiales para demostrar miedo, emociones y pedir exencio-
protegerse a sí mismos de posibles controles de nes de tareas difíciles. Las maneras legítimas
los supervisores (Manning, 1997: 168–169). de manejar las emociones incluyen el uso del
Otro aspecto bien documentado del cono- humor, la descarga de tensión a través del
cimiento de receta en la policía es el evidente ejercicio físico, beber alcohol y las actividades
“código de silencio” y la solidaridad entre los sexuales (Martin, 1999:116).
agentes policiales cuando enfrentan acusacio-
nes de mala conducta (Westey, 1970). Reiner
ve a la solidaridad como una respuesta a las • Conocimiento Corporal: Hexis Policial
condiciones laborales de la actividad policial, Refiere a las distinciones físicas o corporales
“como un producto no sólo del aislamiento, que los agentes policiales llevan consigo como
sino también de la necesidad de confiar en los miembros de la ocupación. La doxa que consi-
colegas en medio de un apuro, y una armadura dera al trabajo policial como una lucha contra
protectora que cubre a la fuerza como un todo el delito que requiere fuerza física, justifica las
del conocimiento público de las infracciones” exigencias físicas para ingresar a la ocupación
(Reiner, 1992:116). El código, según Skolnick y la instrucción militar y el entrenamiento
y Fyfe, es típicamente impuesto, antes que por intensivo a los que los reclutas de la policía
medios violentos, son sometidos. Como sucede con el ámbito
militar, el entrenamiento policial implica “el
“por la amenaza del rechazo social, por el miedo a disciplinamiento, el control y la mortificación
que informar pueda llevar a la exposición de las pro- ocasional del cuerpo” (Morgan, 1994: 167).
pias negligencias, y por el miedo a que la asistencia Las inscripciones físicas de esta dimensión
de sus compañeros pueda serles negada durante las del habitus incluyen no sólo los estándares
emergencias” (Skolnik y Fyfe, 1993:110). de los uniformes policiales, el corte de pelo
permitido y la cantidad de vello facial o de
aros en el cuerpo, sino también “maneras de
La doxa masculina del trabajo policial caminar, hablar, pararse, verse, sentarse, etc.”
también sostiene una norma de la “autoad- (Bourdieu, 2000: 141) que expresan autoridad
ministración emocional”, que equipara el y disciplina. Como Fielding observa, el entre-
control de las emociones con la competencia namiento y la instrucción física son maneras
ocupacional: de “construir el carácter” en el trabajo policial:
la tolerancia a las molestias físicas, la obedien-
“Incluso las conversaciones acerca del dolor, la culpa cia, el disciplinamiento estricto y la sumisión
o el miedo son pocas porque los agentes policiales (Fielding, 1988: 60–61). La doxa de la policía
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como luchadores contra el delito y la equiva- nen que aprender a adoptar el porte masculino
lencia que se da por sentada entre el trabajo y un “nuevo comportamiento en relación con
policial y lo físico, provocan que las diferencias las expresiones verbales, faciales y corporales
sexuales sean utilizadas como una justificación que transmiten su autoridad a los ciudadanos”,
natural de la actividad policial como “trabajo incluyendo “aprender a no sonreír […] y evitar
de hombres”. De este modo, para sobrevivir a posturas que indiquen duda o falta de prepara-
la ocupación, las agentes policiales mujeres tie- ción para actuar” (Martin, 1999: 122).

La Relación entre Campo y Habitus

Según Bourdieu, la relación entre campo conscientemente su sentimiento de alienación


y habitus opera en dos sentidos: por un lado, y ansiedad (Schein, 1985).
el campo condiciona el habitus, el cual es el Una crítica a este marco teórico, sin embar-
“producto de la corporización de la necesidad go, es que exagera la conexión “inconsciente”
inmanente de un campo”; y por otro lado, el o automática entre habitus y práctica y no da
habitus constituye el campo al proveer los cuenta de la acción racional (Ver, por ejemplo,
marcos culturales para construir sentido del Alexander, 1995). Bourdieu ha argumentado
campo (Bourdieu y Wacquant 1992 :127). El que la racionalidad raramente juega un papel
habitus permite la creación y la innovación en la acción práctica:
al interior del campo del trabajo policial. Es
un “sentido del juego”; permite una infinita “Las condiciones para el cálculo racional prácti-
cantidad de “movimientos” a ser realizados camente nunca se dan en la práctica: el tiempo es
en una infinita cantidad de situaciones. En- limitado, la información restringida, etc. Y aún así
carna lo que los agentes policiales a menudo los agentes en efecto hacen “lo único que hay para
llaman “sentido común” (Manning, 1997) y es hacer”, mucho más regularmente que si estuvieran
generalmente conocido como “destrezas poli- comportándose al azar. Esto es porque, siguiendo
ciales” (Brogden, Jefferson y Walklate, 1988). las intuiciones de una “lógica de la práctica” que es
Los miembros más antiguos de una organi- producto de una exposición prolongada a condiciones
zación tienden a dar su habitus por supuesto similares a aquellas en las que se ubican, anticipan
porque “cuando el habitus se encuentra con un la necesidad inmanente en el camino del mundo”
mundo social del cual es el producto, es como (Bourdieu, 1990: 11).
‘un pez en el agua’” (Bourdieu y Wacquant
1992: 127). Cuando los reclutas se unen a una Por lo tanto, incluso cuando las prácticas
nueva organización, en cambio, ellos traen policiales pueden tener una apariencia de
consigo el habitus que es un producto del cam- racionalidad, el “código policial” es más bien
po que habitaron previamente. Para invertir la el resultado de una “codificación” realizada
analogía de Bourdieu, en su encuentro inicial por los investigadores y los funcionarios poli-
con la organización, probablemente se sientan ciales que un conjunto de reglas que genera la
como “un pez fuera del agua”. Allí donde práctica. Sin embargo, Bourdieu concede que
existe una cultura organizacional estable, los el habitus puede tener sus “deslices”, momen-
reclutas típicamente aprenden a adaptarse a tos críticos en los que falla o está desfasado,
las sensibilidades y los conocimientos de los por lo que en algunas situaciones es necesa-
grupos de pares, para reducir consciente o in- rio algún grado de “reflexión práctica” para
Delito y Sociedad 33 | año 21 | 1º semestre 2012 71

evaluar la acción o para corregir movimientos últimos hagan consciente aquello que para otros es
equivocados o imperfectos (Bourdieu, 2000: dado por supuesto, porque están forzados a vigilar-
162). Además, la capacidad de confiar en la se ellos mismos y a corregir conscientemente los
guía automática del habitus depende de la “primeros movimientos” de un habitus que genera
situación y de la posición que el actor ocupe: comportamientos inapropiados o fuera de lugar”
(Bourdieu, 2000: 163).
“[…] el grado en el cual uno puede abandonarse
a sí mismo a los automatismos del sentido práctico Esta es una idea importante para entender
obviamente varía con la situación y el área de la la situación de los reclutas, que son más pro-
actividad, pero también con la posición ocupada clives a ser conscientes y cuidadosos en sus
en el espacio social: es probable que aquellos que “primeros movimientos”, porque su habitus
están “en el lugar correcto” en el mundo social, es producto de un mundo distinto. Hasta que
pueden abandonarse o confiarse a sí mismos más, logran adaptar su habitus a aquello que es
y más completamente, a sus disposiciones (esa es apropiado en su nuevo ambiente, les interesa
la “ventaja” de quienes nacen ricos) que aquellos evaluar continuamente sus acciones y corregir
que ocupan posiciones incómodas, como los nuevos cualquier movimiento equivocado.
ricos y los desclasados; y es más probable que estos

La Socialización en un Campo Cambiante

Como se señaló anteriormente, el campo Bajo condiciones cambiantes los miembros


de la actividad policial ha ido cambiando por de la organización con habitus moldeados por
una variedad de razones estructurales: por la “cultura vieja” pueden sentirse tan incómo-
ejemplo, la globalización de los mercados dos como los recién llegados porque el habitus
financieros y las comunicaciones culturales, organizacional que adquirieron ya no encaja
los avances en la información y en las tec- con las condiciones existentes.
nologías biogenéticas, la comercialización
de la actividad policial y de los servicios de “En situaciones de crisis o de cambio repentino,
seguridad, el cambio en la regulación legal y ... los agentes a menudo tienen dificultades para
el control managerial de la conducta policial, mantener unidas las disposiciones asociadas con
y la emergencia de modelos alternativos de diferentes estados o etapas, y algunos de ellos, a
actividad policial. Si la socialización es el menudo quienes estaban mejor adaptados al estado
aprendizaje del habitus policial por parte de anterior del juego, tienen dificultades en adaptarse
los reclutas, ¿qué pasa cuando el mismo cam- al nuevo orden establecido. Sus disposiciones se
po de la actividad policial está cambiando? En vuelven disfuncionales y los esfuerzos que pueden
el marco teórico de Bourdieu los cambios en realizar para perpetuarlas los hunden más aún en el
el campo conducirían a ajustes de los habitus: fracaso.” (Bourdieu, 2000: 161)
los cambios en el campo generan una nueva
“necesidad”, que puede requerir la estructu- Mientras la organización ajusta sus ha-
ración de nuevas estrategias, es decir bitus, los recién llegados encuentran una
cultura diversa y no una homogénea, y al
“las condiciones sociales activan en los agentes mismo tiempo, ellos mismos deben adaptar
ciertas cualidades y capacidades adquiridas de la sus habitus al campo cambiante. Los recién
mente y del cuerpo” (Hage, 1994: 430). llegados tienen una mayor tendencia a ser
72 J. Chan | Utilizando el marco teórico de Pierre Bourdieu...

conscientes o reflexivos acerca de sus propios costo de los errores puede variar desde una
ajustes. Como un nuevo jugador de tenis que leve humillación, siendo blanco de chistes, a
reproduce un golpe errado, el recluta debe perder la confianza o el respeto del público
repensar sus movimientos y estrategias para o de los colegas.
realizar correcciones inmediatas de sus errores De este modo cuando el campo está cam-
iniciales. A diferencia del jugador experi- biando, la socialización es un proceso menos
mentado, el novato no puede “abandonarse” predecible, más diverso y abierto que cuando
a sí mismo al habitus (recién aprendido) para las condiciones son relativamente estables. Los
guiar su práctica (Bourdieu, 2000: 163). reclutas también son mucho más conscientes
En la actividad policial, quizás más que en de sus propias adaptaciones al nuevo ambiente,
cualquier otra ocupación, toda acción se pro- por lo que su proceso de aprendizaje es mucho
duce a plena vista tanto de los miembros del menos automático y mucho más reflexivo.
público como de los propios compañeros y el

Un Caso de Estudio de Socialización Policial


No ha habido muchos estudios sistemáticos para la filosofía, la organización y operativi-
sobre socialización policial. La investigación zación de la actividad policial en New South
de Van Maanen en Estados Unidos (Van Wales. Particularmente, el reclutamiento y el
Maanen, 1973; ID., 1975) y la de Fielding en entrenamiento atravesaron una transforma-
Gran Bretaña (Fielding, 1988) fueron estudios ción bastante radical. La institución estaba
significativos e innovadores al momento de su comprometida a atraer una proporción cada
publicación. El estudio longitudinal de Chan vez mayor de mujeres y personas provenien-
con Devery y Doran (Chan et al., 2003) estuvo tes de comunidades étnicas y aborígenes.
centrado en New South Wales, Australia. Se introdujeron cambios en los criterios de
El Servicio Policial de New South Wales reclutamiento, tales como los requerimientos
(NSWPS) –la organización que participó en educacionales y físicos. El entrenamiento de
este estudio– es la fuerza policial más antigua los reclutas adoptó una filosofía educacional
y extensa de Australia, con más de 13 000 completamente nueva, un curriculum redise-
agentes policiales y un presupuesto anual de ñado, y una política novedosa en relación a
más de mil millones de dólares. Presta servi- la plantilla y a la administración (Ver Chan,
cios en el estado de New South Wales, el cual 1996: 129–136). A mitad de la década de
tiene una población de alrededor de 6 millones 1990, el Servicio Policial fue sometido al
de habitantes y cubre un área que es tres veces escrutinio de una Royal Commission sobre
el tamaño del Reino Unido. Las décadas de corrupción policial. Las conclusiones de la
1980 y 1990 fueron años de cambios rápidos y comisión refirieron a la existencia de un es-
constantes para el NSWPS, aunque la presión tado de “corrupción sistémica y arraigada” en
para el cambio venía acumulándose desde el Servicio Policial (Wood Report, 1997: 84).
las décadas de 1960 y 1970 (Chan, 1997). Se En respuesta a los descubrimientos de la co-
produjeron dos grandes olas de reformas. A misión se introdujeron importantes reformas,
mediados de la década de 1980, luego de una incluyendo mayores niveles de monitoreos
amplia investigación judicial (Lusher Report, y exigencias de rendición de cuentas a nivel
1981), la organización atravesó un número organizacional, de gestión y personal. El
de cambios significativos y fundamentales nuevo comisionado introdujo una ley nueva
Delito y Sociedad 33 | año 21 | 1º semestre 2012 73

para facilitar la expulsión de “funcionarios de honestidad como de profesionalismo, y


corruptos, ineptos, haraganes” (Ryan, 1988: apenas levemente por debajo de los médicos
3). En resumen, la organización atravesó casi y los abogados en cuanto al prestigio. La
dos décadas de cambios continuos y a menu- metamorfosis de un nuevo recluta a un fun-
do radicales. El trabajo de campo abarcó un cionario de policía implicó algunos cambios
período que coincidió a grandes rasgos con centrales en actitudes y valores –cambios en el
los tiempos de la Wood Royal Commission. habitus. Hacia el final de su entrenamiento en
El diseño de investigación hizo uso de la el campo, la mayoría de ellos sintió que había
rica tradición de estudios sistemáticos sobre cambiado como persona. Muchos pensaron
el trabajo policial desde la década de 1970 que se habían vuelto más maduros y más segu-
(Black, 1971: 1087–1111; Reiss, 1971; Eric- ros, a pesar de que habían perdido algo de su
son, 1993; 1982; Ericson y Haggerty, 1997; idealismo e ingenuidad. El entrenamiento que
Mastrofski et al., 1998). Utilizando un enfo- recibieron había “depositado” en sus cuerpos
que longitudinal (Van Maanen,1973; Fielding, y en sus mentes un “sentido del juego” de la
1988), el equipo de investigación siguió el actividad policial sufrieron cambios tanto en
progreso de una cohorte de aproximadamente la percepción y en las actitudes tanto como. En
150 reclutas policiales en intervalos regulares lo que concierne a lo perceptivo, se volvieron
por dos años. Se utilizó una variedad de técni- más observadores, más conscientes y alertas
cas de investigación que incluyeron entrevis- a lo que sucedía alrededor de ellos. Sus acti-
tas cara a cara, cuestionarios y observaciones tudes se habían vuelto menos tolerantes, más
(Para detalles ver Chan et al., 2003). Los desconfiadas de las personas y más cínicas,
cuestionarios fueron administrados a todos aunque estos cambios no fueron de ninguna
los reclutas en cuatro momentos: durante su manera uniformes. Físicamente, tomaron la
primera semana en la Academia, a los 6 meses, postura y las maneras verbales de un funcio-
a los 18 meses y a los 24 meses posteriores nario policial.
al ingreso. Las entrevistas cara a cara fueron No resulta sorpresivo que la cohorte haya
llevadas a cabo con una muestra al azar de 75 tomado algunos elementos típicos del ha-
reclutas, quienes volvieron a ser entrevistados bitus ocupacional del trabajo policial en la
en las mismas tres etapas subsecuentes. El calle: el cinismo, el disgusto por el “pape-
equipo de investigación también pasó más leo” y la desconfianza de la gestión y de los
de 900 horas en el campo, observando a una extraños, incluyendo al público en general
muestra de reclutas en distintas etapas de su (Reiner, 1992; Reuss–Ianni e Ianni, 1983).
entrenamiento. La mayoría de los entrevistados al final de su
Igual que otros reclutas en investigaciones entrenamiento de campo, expresaron un alto
similares, la cohorte analizada en este estudio grado de desilusión con respecto al trabajo.
se unió a la policía porque quería ayudar a las La queja más frecuentemente recabada fue
personas y servir a la comunidad. Habían sido acerca de la cantidad de “papeleo” requerido
atraídos por las posibilidades de hacer carrera (Ericson y Haggerty, 1997: 296–302). La
que brinda la ocupación y porque veían en el frustración estuvo dirigida a las exigencias de
trabajo policial una ocupación de naturaleza rendición de cuentas impuestas por los supe-
variada, no rutinaria y excitante. Ellos gene- riores, Asuntos Internos, y agencias externas
ralmente tenían una muy buena opinión de la como el Ombudsman. Los superiores eran
ocupación, ubicándola en lo más alto de una visualizados como ineficientes o renuentes a
lista de 18 ocupaciones, en términos tanto apoyar a los agentes policiales que trabajan
74 J. Chan | Utilizando el marco teórico de Pierre Bourdieu...

en la calle frente a las quejas del público. Las adaptaban a los estilos y las expectativas
actitudes de los reclutas frente a la comunidad inconsistentes de los diferentes supervisores
se volvieron progresiva y significativamente y compañeros de turno. Las adaptaciones de
más negativas a medida que avanzaban en los aspirantes a su ambiente de trabajo no
los 18 meses de entrenamiento. Una amplia consistían en la aceptación general de todo lo
mayoría dijo que se había vuelto más cínico que se les decía en el campo. Cuando se les
y suspicaz, más consciente de los aspectos daba la oportunidad de expresar sus posturas,
negativos de la vida social y más proclive a algunos aspirantes eran bastante reflexivos; y
estereotipar a las personas. La percepción de también se encontraban deseosos de criticar
la falta de apreciación por parte de las perso- y distanciarse de ciertas prácticas. Los aspi-
nas del trabajo de la policía llevó a algunos rantes formaron juicios acerca del trabajo y la
de ellos a abandonar sus ideales de querer organización policial basados en sus propias
ayudar a las personas, porque las personas experiencias y eran capaces de distinguir
“no quieren que las ayuden”. Otros estaban entre los “buenos” y los “malos” modelos.
decepcionados por los límites de lo que la Algunos entrevistados sintieron que habiendo
policía puede alcanzar. Durante el desarrollo sido expuestos a distintos estilos de actividad
de su entrenamiento, los reclutas desarrollaron policial, habían podido pensar ellos mismos
una actitud más negativa hacia el sistema de en qué tipo de policía querían convertirse.
justicia penal. Esto era verdad especialmente para aquellos
Los datos demostraron, sin embargo, que aspirantes con mayor edad.
los reclutas no fueron pasivamente formados Los datos de las entrevistas sugieren que la
por modelos de conducta negativos. Como cultura policial en New South Wales estaba
nos dijeron en las entrevistas y observamos en un estado de cambio continuo. Cerca de
en el campo, los aspirantes se encontraron con la mitad de los entrevistados nos dijeron que
modelos de trabajo policial tanto “buenos” la cultura policial estaba cambiando o había
como “malos”. De hecho, la gran mayoría de cambiado. Ellos sentían que lo que conside-
los respondientes de la encuesta pensaban que raban como la vieja cultura de tomar mucho
la experiencia del aprendizaje en el campo alcohol y encubrir delincuentes ya no existía.
había sido distinta dependiendo del comando Ya no es más considerado tabú para la policía
del área local donde los enviaban y de las quejarse en contra de otro policía. Unos pocos
personalidades o los estilos de trabajo del entrevistados dijeron a los investigadores que
jefe de ese área, de los supervisores o de sus ellos mismos habían denunciado las malas
compañeros de turno. Las áreas locales podían conductas descubiertas.
diferir en términos de carga laboral, cultura, Como se señaló anteriormente, el campo
cantidad de experiencia y actitudes generales de la actividad policial en New South Wales
hacia el trabajo entre los funcionarios. Los había estado cambiando desde las reformas
jefes de las áreas locales podían ser autori- iniciadas a mediados de la década de 1980.
tarios, inaccesibles y negativos, o podían ser Entre los cambios que fueron introducidos en
amigables, dejar en claro sus expectativas y este período, en este estudio son subrayadas
realizar devoluciones positivas. Estos estilos dos dimensiones: la primera está relacionada
de liderazgo tenían consecuencias en la moral con el rediseño total del currículum del entre-
y la práctica de los trabajadores. namiento de reclutas (PREP) en consonancia
Los aspirantes también realizaron co- con el ideal de profesionalismo y la visión de
mentarios sobre cómo los trabajadores se la policía comunitaria; el segundo involucra el
Delito y Sociedad 33 | año 21 | 1º semestre 2012 75

reclutamiento activo de mujeres para que se como un “cambio cultural” en el Servicio


unan a esta ocupación dominada por hombres. Policial. La policía se volvió más consciente
La adopción de la policía comunitaria y de un de los constreñimientos y los riegos que im-
modelo policial “plenamente profesional” fue plicaba su trabajo y tuvo que aprender cómo
un desafío para el modelo tradicional de lucha moverse en este nuevo campo donde un mal
contra el delito; legitimó una nueva forma de movimiento podía provocar quejas, investi-
capital simbólico en el campo policial –basado gaciones y acciones disciplinarias.
en impulsar el acercamiento a la comunidad, La complejidad y la contingencia del pro-
la resolución de problemas y la provisión ceso de socialización en New South Wales
de un servicio profesional. El reclutamiento fue probablemente el resultado de algunas
de mujeres también supuso un desafío para de estas transformaciones en el campo de la
el modelo tradicional de actividad policial, actividad policial. En particular, las reformas
aunque no tuvo un resultado exitoso porque que siguieron a la Royal Comission conduje-
el capital físico todavía tiende a tener mayor ron a algunos cambios importantes en cuanto
importancia que otras formas de capital sim- a los pesos de los diferentes tipos de capital.
bólico (Ver Chan et al., 2003). Tanto los reclutas como los agentes policiales
La Wood Royal Commission condujo a que ya estaban desempeñándose como tales,
otra ola de cambios radicales en el campo fueron conscientes del aumento del énfasis en
de la actividad policial. Estos incluyeron el la integridad y el profesionalismo como una
establecimiento de un sistema de monitoreo forma de capital simbólico y las consecuen-
permanente para investigar casos serios de cias económicas de ser considerado corrupto
corrupción; la introducción de provisiones le- o incompetente. Bajo condiciones cambiantes,
gales que le dieron poder al jefe para despedir tanto los reclutas como los miembros de la
policías corruptos o incompetentes; la autori- organización ya en servicio eran mucho más
zación para realizar pruebas individuales de conscientes y cuidadosos realizando ajustes
integridad y pruebas de alcoholemia al azar; en sus habitus. El clima político generado
y la introducción de un sistema de rendición por la Royal Comission cambió el balance de
de cuentas basado en el desempeño para los poder, por lo que la integridad –enseñada en
jefes de áreas locales. A pesar de que estas la academia pero devaluada en el campo– era
iniciativas de un nuevo tipo de rendición de una vez más, una forma valorada de capital. El
cuentas fueron impopulares, fueron parcial- juego había cambiado, y la cultura establecida
mente responsables por lo que fue considerado se volvió cada vez débil.

Conclusión

Los modelos tradicionales de socialización contingencia de los caminos de la sociali-


organizacional han tendido a concebir la so- zación (Manning y Van Maanen, 1978) así
cialización como un proceso bastante lineal como dar cuenta de cualquier variación en
y uniforme por el que un recién llegado “en- las estrategias y resultados adaptativos. Esta
caja” en la cultura dominante. La ventaja de contingencia y fluidez son particularmente
reconceptualizar la socialización en términos importantes en organizaciones que operan en
del esquema de Bourdieu de campo y habitus un ambiente social y político volátil.
es que el mismo puede captar la fluidez y la
76 J. Chan | Utilizando el marco teórico de Pierre Bourdieu...

El caso de estudio de New South Wales sus compañeros y supervisores. Pero los
demuestra la utilidad de la teoría de Bourdieu valores de los diferentes tipos de capital no
para comprender la socialización policial. son constantes. Los cambios externos –que
El concepto de habitus es una herramienta pueden ser tanto modificaciones en la posi-
particularmente apropiada para describir el ción de la actividad policial en el “campo del
sistema de disposiciones que los individuos poder”, tales como una caída en el apoyo del
adquieren, inicialmente a través de la historia público como resultado de la revelación de
y la experiencia personal y luego a través de casos de corrupción o cambios en el estilo
la socialización organizacional. Para la acti- prevaleciente de actividad policial como lo
vidad policial, el habitus incorpora diversas fue la introducción del modelo de policía
dimensiones del conocimiento cultural, inclu- comunitaria – pueden impactar en los valores
yendo suposiciones sin examinar, definiciones de las diferentes formas de capital, así como
aceptadas, métodos comprobados, valores en aquello que cuenta como capital simbólico.
compartidos, así como también expresiones Cuando el campo está cambiando, el habitus
corporales y posturas físicas. Bajo condicio- organizacional debe adaptarse. Como resul-
nes normales, los reclutas policiales ajustan tado, los agentes policiales en servicio cuyos
crecientemente sus habitus para “encajar” con habitus son producto de un campo diferente,
la cultura dominante de su lugar de trabajo. están tan incómodos como los reclutas. Por
El habitus adquirido se vuelve entonces un un lado, ellos tratan de desacreditar el cambio
“sentido del juego”, un conjunto estable de y de mantenerse apegados al habitus “viejo”.
disposiciones que generan formas coherentes Por otro lado, se sienten como “un pez fuera
de ver, pensar y actuar, que casi no requiere del agua” en el campo transformado. A menos
pensamiento consciente por parte del actor. que puedan encontrar un enclave de la orga-
Una vez que el recluta ha adquirido el habi- nización donde el cambio no haya ocurrido,
tus apropiado, se sentirá aceptado y cómodo puede que tengan que dejar la organización
como “un pez en el agua”. o “retirarse” abandonando su interés (illusio)
Este marco teórico también contempla la en el “juego”.
posibilidad de que existan múltiples culturas El marco teórico de Bourdieu generalmente
dentro de una organización así como cam- ha enfatizado la reproducción social más que
bios en la cultura organizacional. Aquí es el cambio social. El énfasis en la conexión
cuando el concepto de campo de Bourdieu y “inconsciente” y automática entre habitus
la noción de capital relacionada al mismo se y práctica deja poco espacio para el cálculo
vuelven cruciales. El campo define el “juego” racional o los pensamientos conscientes antes
que provee una comprensión de la posición de la acción. Aún así, como vimos en el caso
de los reclutas en relación a otros miembros estudiado, los reclutas pueden ser altamente
de la organización policial: invariablemente reflexivos y conscientes del proceso de so-
ellos se encuentran en los últimos escalones cialización. Algunas veces manifestaron un
de la jerarquía en términos de casi cualquier grado de cálculo estratégico que rara vez es
dimensión de capital. Su juego, entonces, analizado en los estudios sobre la socializa-
es acumular cuantos conocimientos, ha- ción. En este sentido el caso de estudio ha
bilidades y experiencia (capital cultural); “extendido” el marco teórico de Bourdieu a
buena voluntad, cooperación y camaradería un nuevo plano que reconoce, como Bourdieu
(capital social) puedan; así como una repu- ha concedido recientemente (Bourdieu, 2000),
tación favorable (capital simbólico) entre que las personas que “ocupan posiciones
Delito y Sociedad 33 | año 21 | 1º semestre 2012 77

incómodas” no pueden confiar en la guía actividad policial. Allí donde los reclutas han
automática de sus habitus. En cambio, deben ajustado exitosamente sus habitus en armonía
observarse a sí mismas cuidadosamente y con la cultura tradicional del “policía de la
corregir cualquier movimiento inapropiado calle” o han aprendido un “sentido del juego”
que realicen como resultado de seguir un de la actividad policial operacional, existe un
habitus de su “vida” anterior. En presencia peligro de que se “queden encerrados” en un
de una cultura organizacional estable y homo- modo de aprendizaje de evitamiento de la an-
génea, la mayoría de los reclutas ajustarán a siedad y no puedan avanzar hacia uno orienta-
tiempo sus habitus aproximadamente a lo que do a resolver problemas (Schein, 1991). Puede
es apropiado en su ambiente y sus acciones que para que los agentes se vuelvan capaces
serán guiadas inconscientemente por su nue- de solucionar creativamente los problemas, a
vo habitus. Pero si el habitus organizacional veces tengan que “luchar conscientemente”
es cambiante o fragmentado, los reclutas en contra del habitus que han aprendido. Por
continuarán siendo conscientes y cuidadosos ejemplo, en ciertas interacciones con ciudada-
en la medida en que la cautela sea necesaria. nos, el “buen trabajo policial” puede implicar
En vez de simplemente intentar “encajar”, un esfuerzo consciente por “luchar en contra”
los reclutas toman el habitus de la actividad de la tendencia automática del habitus ocupa-
policial operacional, pero siempre con un ojo cional a estereotipar, asumir una “mentalidad
en cómo las reglas del “juego” pueden estar de fortaleza” o tratar a todos con desconfianza.
cambiando. Puede parecer que la idea de trabajar en contra
El estudio de caso sugiere que una “socia- del habitus propio contradiga el marco teórico
lización exitosa” no se refiere necesariamente original de Bourdieu, pero es probable que
a la conformidad con una cultura organiza- un “individualista creativo” (Schein, 1968),
cional dominante, aún cuando exista una que como otras personas que “ocupan posiciones
sea homogénea y estable. Sólo porque una incómodas” (Bourdieu, 2000) en una organi-
ocupación u organización haya desarrollado zación sean más conscientes y reflexivos al
maneras de ver, pensar y actuar que hayan realizar sus movimientos. Esta es una técnica
“funcionado” en el pasado no significa que que los artistas utilizan regularmente para
sea saludable para la organización eternizar mantener la frescura y la autenticidad en su
la reproducción de esta cultura. La suposición práctica.1 De hecho, la idea de una práctica
de que el trabajo policial es un oficio (Wilson, reflexiva está basada en el mismo principio
1978) que pone el acento en la experiencia que busca apartar la práctica del automatismo
o en las habilidades prácticas, y que sólo irreflexivo del habitus ocupacional. En este
puede ser transmitido a través de un sistema sentido, la socialización exitosa no se trata
de aprendices, ya ha sido desafiado por el tanto de perfeccionar el oficio como de apren-
movimiento hacia un modelo profesional de der el arte de la actividad policial.2

1
El artista Sidney Nolan explicó este cambio constante deberías pelear en contra de ello porque supongo que si
de medios como una forma de “luchar en contra” de la la pintura vale algo es porque se supone que viene de
hexis corporal de un pintor profesional: “Es muy impor- algún lugar en tu interior al que no puedes llegar por
tante cambiar –para mi, por supuesto–, especialmente otros medios […]” en Barber, Noel, 1964: 99.
cuando uno se pone más viejo y domina las técnicas 2
Este artículo contiene extractos de Chan et. al., 2003
para pintar. Verás, hasta los músculos aprenden trucos –todos los pasajes fueron escritos por la autora y no se
[…] más o menos, para producir alguna cosa […]. Sí, referencian por separado.
78 J. Chan | Utilizando el marco teórico de Pierre Bourdieu...

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