Fecha de nacimiento: 1985 Edad: 7 años Motivo de consulta: Agresividad con la familia Analizando el caso de Beth Tomas, una niña de 7 años que cuenta sin remordimiento que quiere matar a sus padres y hermano; púes trae consigo una pesadilla y un trauma que la acompaña, ya que cuando apenas tenía un año su madre fallece y la deja al cuidado y protección de su padre, quien es un degenerado que abusa de ella y de su hermanito causándoles tanto maltrato psicológico, como abuso sexual y carnal violento; haciendo con ella todo tipo de vejámenes y dejando los niños en una condición deplorable, en medio de la suciedad y sin nada que comer, creando en ella un desapego emocional muy difícil de curar, ya que ella a causa de ello pierde todo tipo de estigma y valor, convirtiéndose así en una psicópata donde hace daño a los animales y a los padres adoptivos sin ningún tipo de remordimiento y sentimiento humano. ¿Qué podemos decir de ella en este estado? Que al ser maltratada de esa forma ella no quiere formar lasos afectivos con nadie ya que sufre de un trastorno reactivo del apego, condición seria, poco común guardada y a consecuencia de traumas del pasado, provocando actitudes perturbadoras como la masturbación en lugares públicos, maltrato a animales y personas de su entorno; son personas desapegadas, insociables, apáticas en su entorno, se desarrolla cuando es pequeño y aún no se tiene conciencia y no se llega a satisfacer las necesidades básicas como lo son el afecto de quien está a su cuidado, no hay afecto, no hay ternura y nada por lo cual la niña genere conciencia, nunca tuvo reglas, nadie le dio órdenes por eso ella no sabe que está bien y que está mal, esto hace que Beth este imposibilitada mentalmente, por ello no es capaz de crear lasos con absolutamente nadie en su entorno cercano; es aterrador ver con la frialdad que habla esta niña y como dice que quiere matar a su hermano y a sus padres, sin el más mínimo dolor, también cuenta las veces que ha sido lastimada y con la frialdad de los abusos de su padre A pesar de tantos abusos, cosas aterradoras y desapego, pudimos notar que esta niña tuvo un muy buen proceso psicológico en el cual estuvo durante un año, donde aprendió a convivir con personas normales ya que en este programa le enseñaron a ser obediente y a llevar una disciplina donde se maneja el respeto y el amor hacia ella y hacia los demás. Lo que más me gusto y me conmovió de este caso fue ver que al pasar un año con las personas que le enseñaron a fortalecer su carácter y a desarrollar amor, ella al fin identifico lo que estaba bien y lo que no, también lo demostró con un noble llanto donde se notó con claridad que ya tenía sentimientos y apegos como una persona natural, que siente que ve, que sufre.