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Funcion contra forma y otros escritos sobre arquitectura madrilefia, 1927-1935 José Moreno Villa Introduccién, seleccion y notas de Humberto Huergo Cardoso Prdlogo de José Maria Tomas Llavador 9. La oficina y el reclamo luminoso Estoy contestando en mis tiltimos articulos, de un modo y de otto, a esa invita- in cotidiana, un tanto socarrona de: «Seftéleme usted algo que sea realmente ‘moderno»; cuya segunda parte suele ser: «Porque no es que sea enemigo de lo nuevo, es que no lo veo». Es duro decir que basta con fijarse y comprender lo que se ve. Todo lo que yo diga aqui es siempre efecto de esas clos sencillas operacio- nes: ver y pensar un poco por cuenta propia. He aqui una creacién moderna: la oficina, la casa-oficina, La necesidad moderna ha creado un tipo que se llama asi.Todos lo hemos visto nacer:Y creo que no nos da- mos cuenta de la importancia que tiene ya y de la influencia que ha de tener sobre el resto de la arquitectura, Maftana se distinguirén nuestras oficinas como hoy los pala- ios del Renacimiento. Nuestra época, sin palacios, es la de los gigantes edifcios lisos ccuyos cascarones se ordenan con ventanas y reclamos luminosos y no luminosos.? Recuerdo aqui que, visitando El Escorial con Le Corbusier, me dijo delante de aquel magno costado que da sobre el jardin: «Simandan esto al concurso de Palacio para la Sociedad de Naciones, lo hubieran rechazado diciendo:"Es una oficina” Lo decia con soma, porque con esa frase le rechazaron su proyecto; el cual, Jo mejor que tenia, segtin yo, era eso precisamente: e! parecer oficina, Porque, no cabe duda, ésta ha sido una de las creaciones nuestras.Y si hoy gustamos de Fotografia muy original del techo» (foto J. Salgado). E te: Nuevas Formas, Nom. 1 (1935), p. 44, in, de Luis Martinez Fedueli, Fuen: Funcldn contra forma y ors eseritos «No negaréis que ésta es una bella conquista de la épocae. En esta pagina y en la siguiente de izquierta a derecha: Factada del Cine Galatravas, de Manuel de Cabanyes, Fuente: Nuevas Formas, Nim. 7 (1985-36), p. 378; Fachada del Cine Madrid-Paris, de Teodoro de Anasagasti Fuente: Nuevas Formas, Nam. 7 (1935-36), p. 368; Bar Tanger, de Alberto Lépez de Asiain, Fuente: Nuevas Formas, Nim. 4 (1925), 0. 205; Farmacia Palacios en la Calle de Martinez Campos (foto Fériz). Fuente: Arqui- fectura, Nim, 147 (ulio de 1931), p. 218 El Escorial unos pocos es por esa concomitancia que ofrece con lo actual, por ese aspecto de magna casa de trabajo, de formidable business, que en vez de se vertical, como en los Estados Unidos, es horizontal.? Viéndolo, cabe pensar que | toda sociedad grande -religiosa, politica, pedagégica 0 mercantil~ ha encontr do el tipe de casa [de] hoy. HI cenobio es la oficina de Dios. En los monastenos no hay regalo, ni mujer (u hombre, segtin), ni atractivo alguno doméstico, verda- deramente doméstico. Son conglomerados humanos que se disponen a ganar con “orden” una batalla. Igual que ocurre en la Telefénica o en la Sociedad de Naciones, Por esto me parecia bien el cardcter de oficina en el proyecto de Le Corbusier. 194 icra y el relamo lumi Jacién con los estilos pa dos, porque obedecen a una necesidad imperiosa de hoy ofrecen un problema interesante para el arquitecto y para el ptiblico. Nacen sin fa chada, sin fisonomia, por asi decir; pero mo suelen ra icar en los centros urbanos, donde se apifian también los més bulliciosos locales de recreo, oftecen el cascarén a los anuncios luminosos. Y aquf viene el problema, es decir, lo que est en vias de resolucién. La luz. artificial destinada al anun si se reparte sin cAlculo, produce fachadas caéticas que molestan al espectador e invalidan la eficacia del reclamo. En bio, sometida a un orden arquitect6nico, logra la perfecta bilidad, y jus- tamente crea la fachada nocturna (otro fendmeno moderno totalme! te nues r0) Este efecto nocturno de la casa no era posible tenerlo en cuenta historia atras, pero hoy es un factor que no puede olvidar el arquitecto. La faz nocturna de los edificios preocupar cada vez mAs. no sélo para las grandes fabricas, estaciones y tiendas, sino para las casas unifamiliares, Algunas casas del arquitecto Taut tie 135 Fncin contra forma y ottos escrites nen ya, por el célculo de sus huecos luminosos, la cuadricula que los subdivide y las interrupciones (sombras de escalones, por ejemplo) un valor arquitecténico sumamente expresivo en la noche’ No negaréis que ésta es una bella conquista de la época. Poco a poco irén los ojos acostumbrandose a sacar todo lo que hay de bello en el espectéculo nocturno de un navio eficazmente iluminado, de un tren o de una modesta casita de cam- po. Todavia falta mucho en la educacién de ellos para que aprecien las proporcio- nes arquitect6nicas; pero ha de llegar el dia en que la gente se pare a ver la belleza de un simple rectingulo de luz en la silueta negra de una casa. El problema de la faz nocturna no excluye, sin embargo, el de la faz diurna. Las dos caras coexisten.Y seria un error grande resolver el de la primera produciendo la descomposicién de la segunda. Las cosas, por fortuna, son complicadas.Y ofre- con“tela”a los arquitectos, al pablico, a los ayuntamientos y al escritor. No soy de los insistentes, pero creo que he de volver sobre el asunto. El Sol, 4 de julio de 1928, p.1. 1 Nuestra épca, sin palacios, sl de fs giganteselificisliss. Alude al controvertido proyecto del“Pa- lacio" de las Naciones, de Le Corbusier 1928:"L.a palabra’Palacio’ que encabeza el programa, iene un sentido ambiguo. ZEs una volta ala peluca? 2O bien la Sociedad de las Naciones trata de insular a este término anticuado un sentido nuevo?" (p.m); tema sobre el que versba la conferencia" Una casa, un palacio” que dicté en la Residencia de Estudiantes en mayo del 28. 2 Le echazaron su proyecto Proyecto para el Falaio de a Sociedad de Naciones en Ginebra, Un afio antes de la Iegada de Le Corbusier a Madrid, y siendo ya Secretario de Redaccion Moreno Villa, la revista Arguitectra habia publieado el Concurso para el Palacio de la Sociedad de Naciones”, dliendo que «el proyecto més original y més intligente, por no haberse olvidado del paisae, es el de los arquitectos Le Corbusier y Jeanneret [..] El reproche que se le hace a este proyecto es el abuso de la ventana» (Redaccién 1927, p. 290), Una foto del proyecto también se reprodujo en el célebre rmonografico sobre arquitectura de La Gace Liteara, Para otros datos, ease San Antonio 1996, pp. 301-303; y Anzivino & Godoli 1979, 3 EL Escorial Véase la introduecién, 4 La luz sometidaa un orden arquitectinico. Aunque el tema de la iluminacién empezaba a ser cortiente en las revstas de arquitectura de la 6poca, la fuente directa del aticulo de Moreno Villa es La victoria del nuevo estilo constructioo, del arqutecto alemsn Walter Behrendt, algunos de cuyos capitulo tradujo propio Moreno Villa para la revista Armuitectur: «La uminacién se emplea en un sentido funcional, es decir, como una herramienta ttl para configurar el espacio, explica el movimiento y la funcisn espacial, y acentuar y reforzar las tensiones y relaciones espacial (| "asta ahora silo el reclamo lminoso ha sabido explotar esta nueva libertad (Behrendt 2000, p. 138) La traduecién es mia, Véase al respecto Carvajal 1930 y 1931abe; Fontbernat 1932; y Baida 1935ab, entre otros ejemplos, 5 Algunas casas del arquitecto Tet, Aluce ala fotogtafia nocturna de la casa del propio Tautreproducia en su Ein Wohn Haus (Stuttg, 1927), p. 76 136 137

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