UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

UAPA

Escuela de ciencias Jurídicas y Políticas

Participantes
LUIS MIGUEL FRANCISCO PEÑA
10-3394

Facilitador:
Lic. ARÍSTIDES H. SALCÉ NICASIO

Metería:
DERECHO CIVIL IV

Tema:
SUPUESTO FÁCTICO

Fecha de entrega:
19 de Abril 2019
Santiago, R.D.
 Introducción

En el tercer compromiso que está marcado como la tarea número seis de la materia
Derecho Civil IV, impartida por nuestro facilitador Lic. Arístides H. Salcé Nicasio, se
nos presenta una casuística de un supuesto factico, donde luego de leer y analizar dicho
supuesto tendremos que responder lo siguientes cuestionamientos, ¿A quién (es) le (s)
corresponde la herencia y qué teoría se aplica en este caso?, ¿Poseen estos sucesores
la Saisine? y por último, distribuir en porcentaje lo que les toca a los sucesores.

Para resolver el caso planteado nos basaremos en la fuente de la ley, por tal motivo la
referencia que utilizaremos será nuestro código civil dominicano, el cual estipula todo lo
concerniente a la casuística planeada.
 Supuesto fáctico

El señor Juan Carlos, murió en un accidente, dejando una gran fortuna en bienes
muebles e inmuebles. El señor Juan Carlos nunca se casó, ni se le conoció descendencia
y sus padres murieron en un accidente, en consecuencia, al morir tan joven le sobreviven
sus abuelos de parte de los padres y de parte de la madre y dos tíos.

1. Explique a quién (es) le (s) corresponde la herencia y qué teoría se aplica en este
caso.

La herencia les corresponde en su totalidad a los abuelos del de cujus, tanto de la parte
materna como de la paterna, debido a que las herencias son repartidas en los grados
más próximos de cada línea cuando el fallecido no ha dejado descendientes, colaterales
privilegiados (hermanos), ni sus padres.

En este caso los abuelos heredan la totalidad de la herencia porque se encuentran en la

línea recta de las generaciones y pertenecen al segundo grado y los tíos quedan fuera
de la sucesión por pertenecer a la línea colateral de las generaciones y estar en el tercer
grado.

Los artículos 737 y 738 de nuestro Código Civil Dominicano nos dejan esta parte de las
líneas muy clara, además el artículos 746, estipula bien claro la herencia para los
ascendientes, por tal motivo los tres artículos anteriormente mencionados los
plasmaremos de manera íntegra en el presente legajo para una mayor comprensión dela
casuística.

Art. 737.- En la línea recta se cuentan tantos grados como generaciones hay entre las
personas: así el hijo, con respecto a su padre, está en el primer grado, el nieto en el
segundo, y así recíprocamente lo están el padre y el abuelo, respecto a sus hijos y nietos.
 Art. 738.- En la línea colateral, se cuentan los grados por las generaciones que hay
desde el uno de los parientes hasta el padre común exclusive, y desde éste al otro
pariente.

Art. 746.- Si el difunto no ha dejado ni descendencia, ni hermanos, ni hermanas, ni hijos

de éstos, la sucesión se divide por mitad entre los ascendientes de la línea materna y los
de la paterna.

El ascendiente de grado más próximo tiene derecho a la mitad, designada a su línea,

con exclusión de todos los demás. Los ascendientes del mismo grado sucederán por
cabezas.

Así es que de dos hermanos están en el segundo grado; el tío y el sobrino en el tercero;
los primos hermanos en el cuarto, y así de los demás.

2. ¿Poseen estos sucesores la Saisine?

Afirmativo, por ser estos los más cercanos al difunto, poseen todo el derecho que le
confiere la ley.

3. Distribuya en porcentaje lo que les toca a los sucesores.

Los bienes se dividirán en dos partes iguales, 50% para los abuelos maternos y 50%
para los abuelos paternos.
 Conclusión

Para finalizar con nuestro tercer compromiso que está marcado como la tarea número
seis de la materia Derecho Civil IV, impartida por nuestro facilitador Lic. Arístides H.
Salcé Nicasio, debemos tener en cuenta lo complejo que a veces se tornan las
sucesiones, en el caso específico que se nos plateo al principio de este escrito, tiende
mucho a confundir a las personas pero si leemos nuestro código detenidamente y
recordamos lo que nuestro facilitador nos dijo en su momento con respecto a los
descendientes y ascendientes, así como también sobres los grados de cada línea de
familias, podríamos resolver de manera fácil el caso planteado.

En lo particular, recordaba todo lo que nuestro facilitador había dicho al respecto, pero
no me bastó con eso, ya que también me fui a la fuente de la ley, nuestro código civil
dominicano y una vez allí corrobore todo lo que creía de antemano estaba correcto, pero
en esta ocasión con los reglamento en las manos.

Hay que ser cuidadoso con estos de las sucesiones, porque a veces por ignorancia u
omisión podríamos lesionar los intereses de algún heredero.