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Anatomía/Aparato Locomotor

El aparato locomotor o sistema osteomioarticular (SOMA) está formado por el sistema


óseo (huesos, articulaciones y ligamentos) y el sistema muscular (músculos y tendones
que unen los huesos). Permite al ser humano o a los animales en general interactuar con
el medio que le rodea mediante el movimiento o locomoción y sirve de sostén y protección
al resto de órganos del cuerpo
Se fundamenta en tres elementos:

 Huesos.
 Articulaciones
 Músculos
El aparato locomotor no es independiente ni autónomo, pues es un conjunto integrado
con diversos sistemas, por ejemplo, con el sistema nervioso para la generación y
modulación de las órdenes motoras. Este sistema está formado por las estructuras
encargadas de sostener y originar los movimientos del cuerpo y lo constituyen dos
sistemas

 Sistema óseo: Es el elemento pasivo, está formado por los huesos, los cartílagos y
los ligamentos articulares.
 Sistema muscular: Formado por los músculos los cuales se unen a los huesos y por
lo tanto al contraerse provocan el movimiento del cuerpo.
Además de estos, hay que agregar el sistema nervioso, ya que este es el responsable de
la coordinación y la estimulación de los músculos para producir el movimiento.

Hueso:
Se puede definir al hueso como un órgano viviente compuesto
principalmente de tejido óseo. Es un órgano duro, blanco y resistente que forma
parte del esqueleto de los vertebrados.

Esqueleto:
Es el conjunto de huesos que hay en nuestro cuerpo. El número de huesos
es más o menos 206.
El esqueleto sirve de sostén general del cuerpo y proporciona los
mecanismos de articulación que permiten la movilidad. El hueso aunque
físicamente rígido, es una estructura viviente y dinámica. Desde el punto
de vista biológico es plasmático y se remodela de manera constante.
Además de su función de sostén interviene en muchos procesos
metabólicos; por lo tanto, está sujeto a multitud de enfermedades y
trastornos metabólicos locales y generalizados, lo mismo que a fuerzas
fisiológicas y mecánica. El tamaño y las formas finales del hueso del adulto
dependen de factores intrínsecos y extrínsecos. El hueso fetal en cultivo
desarrolla una forma predeterminada por su naturaleza inherente. Esta
forma sin embargo puede ser modificada por diversas influencias externas
que actúan dentro del útero o después del movimiento.

Funciones del esqueleto


1: sostén: los huesos son el soporte de los tejidos blandos, y el punto de apoyo de la
mayoría de los músculos esqueléticos.
2: protección: los huesos protegen a los órganos internos, por ejemplo el cráneo
protege al encéfalo, la caja torácica al corazón y pulmones.
3: movimientos: en conjunto con los músculos.
4: homeostasis de minerales: el tejido óseo almacena calcio y fósforo para dar
resistencia a los huesos, y también los libera a la sangre para mantener en equilibrio su
concentración.
5: producción de células sanguíneas: en la médula ósea roja (tejido conectivo
especializado) se produce la hemopoyesis para producir glóbulos rojos, blancos y plaquetas.
6: almacenamiento de triglicéridos: la médula ósea roja es reemplazada paulatinamente en
los adultos por médula ósea amarilla, que contiene adipocitos.

Estructura de los huesos.


Los huesos se clasifican en diversos tipos según su forma. Un hueso largo (como el
fémur o el húmero) consta de las siguientes partes:
1- Diáfisis: es el cuerpo o porción cilíndrica principal del hueso.
2- Epífisis: son los extremos proximal y distal del hueso.
3- Metáfisis: es el sitio de unión de la diáfisis con la epífisis; su espesor va
disminuyendo con la edad.
4- Cartílago articular: es una capa delgada de cartílago hialino que cubre la parte de
la epífisis de un hueso que se articula con otro hueso.
5- Periostio: es una capa resistente de tejido conectivo denso que rodea la superficie
ósea que no tiene cartílago articular. Protege al hueso, participa en la reparación
de fracturas, colabora en la nutrición del hueso, y sirve como punto de inserción
de tendones y ligamentos.
6- Cavidad medular: es el espacio interno de la diáfisis que contiene a la médula
ósea amarilla grasa.
7- Endostio: es la capa que recubre la cavidad medular, y contiene células formadoras
de hueso.
Elementos anatómicos de los huesos
Tejido óseo compacto
Forma la capa externa de todos los huesos; brinda protección y sostén.
Está formado por unidades llamada osteonas o sistemas de Havers, que constan de:
• un conducto central que tiene un trayecto longitudinal y que contiene un vaso sanguíneo,
llamado conducto de Havers.
• Una serie de laminillas concéntricas que rodean al conducto de Havers, que son anillos
de matriz dura calcificada.
• Lagunas, que son espacios ubicados entre los anillos de las laminillas, y que contienen
osteocitos.
• Canalículos que se irradian desde las lagunas en todas direcciones, llenos de líquidos
extracelular, y que contienen delgadas prolongaciones de los osteocitos; comunican a las
lagunas entre sí y con los conductos centrales.
Las osteonas son circulares y no se ajustan perfectamente entre ellas, y las zonas que
quedan entre las osteonas están llenas de laminillas intersticiales y laminillas
circunferenciales.

Los vasos sanguíneos y linfáticos y los nervios provenientes del periostio penetran en el
hueso compacto, por los conductos perforantes de Volkmann.
Tejido óseo compacto y esponjoso. Sistemas de Havers.
Tejido óseo esponjoso
Consta de laminillas dispuestas en una red irregular llamadas trabéculas. En algunos
huesos, estos espacios están llenos de médula ósea roja. Las trabéculas poseen osteocitos
situados en lagunas con canalículos comunicantes con otras lagunas.
Cartílago
Es de tipo semirrígido y elástico. Posee más sustancia intercelular que células. No tiene
irrigación capilar propia, por eso sus células (los condrocitos) reciben el oxígeno y los
nutrientes por difusión desde el pericondrio (revestimiento fibroso).
Histología del tejido óseo
Tiene una matriz abundante, y células muy separadas entre sí.
La matriz está formada por:
• 25% de agua
• 25% de fibras proteínicas
• 50% de sales minerales cristalizadas.

Las células son:


• Células osteógenas: son células madre, no especializadas, con capacidad de división;
sus células hijas son los osteoblastos; se localizan en la porción interna del periostio
y del endostio.
• Osteoblastos: son las células que construyen los huesos; sintetizan los componentes de
la matriz del tejido óseo e inician en proceso de calcificación. (Sufijo blasto indica
células que secretan matriz)
• Osteocitos: son las células maduras principales del tejido óseo; derivan de los
osteoblastos que quedan atrapados en la matriz; intercambian nutrientes con la sangre.
(Sufijo cito indica células constituyentes de los tejidos)
• Osteoclastos: son células muy grandes, formadas por la fusión de 50 monocitos,
ubicadas en el endostio; producen destrucción del hueso por medio de enzimas
lisosómicas para permitir el desarrollo, crecimiento, mantenimiento y reparación
normales del hueso. (Sufijo clasto indica destrucción)

La dureza del hueso depende de las sales minerales orgánicas cristalizadas que contiene,
y su flexibilidad depende de las fibras colágenas.
Los huesos no son completamente sólidos, ya que tienen muchos espacios. Según el tamaño
y distribución de estos espacios, las regiones de un hueso se clasifican en compactas y
esponjosas. En general el hueso compacto constituye el 80% del esqueleto, y el esponjoso el
20% restante.
Marcas superficiales de los huesos.
Son rasgos estructurales adaptados a funciones específicas. Aparecen donde se insertan los
tendones, ligamentos y fascias, o donde las arterias perforan el hueso; otras dan paso a un
tendón. Ellas son:
• Cóndilo: zona articular redondeada (p.ej., cóndilo femoral lateral)
• Cresta: borde del hueso (p.ej., cresta ilíaca)
• Epicóndilo: eminencia de un cóndilo (p.ej., epicóndilo lateral del húmero)
• Carilla: zona suave y lisa, cubierta por cartílago, donde el hueso de articula con otro
(p.ej., fosita costal superior del cuerpo vertebral para la articulación con una costilla)
• Orificio: paso óseo (p.ej., orifico obturador)
• fosa: zona hueca o deprimida (p.ej., fosa infraespinosa de la escápula)
• Surco: depresión alargada o acanalada (p.ej., surcos arteriales de la calota craneal)
• Línea: elevación lineal (p.ej., línea sólea de la tibia)
• Maléolo: prominencia redondeada (p.ej., maléolo lateral del peroné)
• Escotadura: indentación en el borde de un hueso (p.ej., escotadura ciática mayor)
• Protuberancia: proyección ósea (p.ej., protuberancia occipital externa)
• Espina: prolongación en forma de aguja (p.ej., espina de la escápula)
• Apófisis espinosa: parte que se proyecta en forma de espina (p.,apófisis espinosa de una
vértebra)
• Trocánter: gran elevación roma (p.ej., trocánter mayor del fémur)
• Tubérculo: pequeña eminencia elevada (p.ej., tubérculo mayor del húmero)
• Tuberosidad: gran elevación redondeada (p.ej., tuberosidad isquiática)

Formación y crecimiento de los huesos


El embrión no contiene huesos sino estructuras de cartílago hialino. De manera gradual
se produce la osificación y osteogénesis, a partir de centros de osificación constituidos por
cúmulos de células especiales formadoras de hueso denominadas osteoblastos.
El aparato de Golgi de los osteoblastos se especializa en la síntesis y secreción de
mucopolisacáridos, y su retículo endoplasmático elabora y secreta una proteína denominada
colágeno. Los mucopolisacáridos se acumulan alrededor de cada osteoblasto y los haces de
fibras colágenas de embeben de esa sustancia. Todo esto junto constituye la matriz ósea; las
fibras colágenas le dan resistencia.
A medida que se forma la matriz ósea, empiezan a depositarse en ellas compuestos
inorgánicos como sales de calcio, que le dan al hueso su dureza característica.
O sea que la osificación consta de dos procesos:
1- la síntesis de matriz ósea orgánica por los osteoblastos
2- la calcificación de la matriz.
La osificación comienza en la diáfisis y avanza hacia las epífisis. Y luego aparecen
centros de osificación secundario en las epífisis.
Mientras no ha terminado el crecimiento longitudinal del hueso, queda una capa de
cartílago denominada cartílago epifisario entre cada epífisis y la diáfisis. La proliferación de
las células del cartílago epifisario provoca el crecimiento longitudinal del hueso; cuando los
huesos han alcanzado su longitud máxima, ese cartílago desaparece.
Los huesos aumentan de diámetro por la acción combinada de dos clases de células: los
osteoclastos y los osteoblastos. Los osteoclastos aumentan el diámetro de la cavidad medular
al digerir el hueso de las paredes; los osteoblastos del periostio producen nuevo hueso en el
exterior. Por este doble fenómeno, se produce un hueso con diámetro mayor y con cavidad
medular más extensa.
La formación de tejido óseo prosigue después que los huesos han terminado de crecer.
Durante toda la vida se producen de manera simultánea formación ósea (osteogénesis) y
destrucción ósea (resorción). Durante la infancia y adolescencia, la osteogénesis tiene un
ritmo mayor que la resorción, y los huesos se vuelven más grandes. A partir de los 35 a 40
años la pérdida de hueso excede el aumento del mismo.
Clasificación de los huesos
Según su forma, los huesos se clasifican en:
1- huesos largos, que son tubulares, constan de diáfisis y epífisis. Tiene hueso compacto
en la diáfisis y hueso esponjoso en el interior de las epífisis. Por ejemplo: el húmero
del brazo.
2- Huesos cortos, que son cuboidales, tiene tejido esponjoso salvo en su superficie. Por
ejemplo: huesos del tarso y del carpo.
3- Huesos planos, son delgados compuestos por dos placas casi paralelas de tejido óseo
compacto que envuelven a otra de hueso esponjoso. Brindan protección. Por ejemplo: huesos
del cráneo, esternón, omóplatos.
4- Huesos irregulares, que tiene forma compleja. Por ejemplo: vértebras y algunos huesos
de la cara.
5- Huesos sesamoideos, están en algunos tendones, a los que protegen del uso y desgarro
excesivos. Por ejemplo: la rótula.
Divisiones del esqueleto:
Esqueleto axial: tiene 80 huesos aproximadamente y soporta el peso de todo el cuerpo
además de proteger los órganos internos como el corazón, los pulmones, el cerebro,
entre otros. Está formado por:
a) Cráneo y cara
b) Columna vertebrales
c) Pelvis
 Esqueleto apendicular: tiene 126 huesos aproximadamente, constituidos por las
extremidades superiores e inferiores del cuerpo, como los brazos y las piernas. Los
huesos del esqueleto apendicular realizan mayores movimientos como los de la
muñeca
a) Miembros superiores:
 Clavícula
 Omoplato
 Humero
 Cubito
 Radio
 Carpo
 Metacarpo
 Falanges

b) miembros inferiores:

 Fémur
 Tibia
 Rotula
 Peroné
 Tarso
 Metatarso
 Falanges

Diferencias entre los esqueletos masculino y femenino


Hay diferencias generales y específicas.
La diferencia general es de tamaño y peso, el del varón es más pesado y grande.
Las diferencias específicas se refieren a la forma de los huesos pélvicos y a la cavidad
pelviana. La pelvis masculina es profunda e infundibuliforme, con arco púbico angosto
(menor a 90º). La pelvis femenina es ancha y poco profunda y extendida hacia los lados,
con ángulo púbico amplio (mayor a 90º).
Vascularización e inervación de los huesos
Las arterias penetran en los huesos por el periostio. Las arterias periósticas entran por
muchos lugares para irrigar y nutrir el hueso. Por eso, si se elimina el periostio, el hueso
muere. Una arteria nutricia atraviesa de manera oblicua el hueso compacto para alimentar el
hueso esponjoso y la médula ósea. Los extremos de los huesos se nutren de las arterias
metafisarias y epifisarias.
Las venas acompañan a las arterias a su paso por los orificios nutricios.
Los vasos linfáticos abundan en el periostio.
Los nervios acompañan a los vasos sanguíneos que nutren los huesos. El periostio tiene
una inervación generosa de nervios sensitivos, responsables del dolor. El periostio es muy
sensible al desgarro o a la tensión, lo que explica el dolor agudo de la fractura ósea. En cambio
el hueso apenas tiene terminaciones sensitivas.
Los nervios vasomotores causan vasoconstricción

 Las articulaciones
Una articulación en anatomía es el punto de contacto entre dos huesos del cuerpo. La
articulación es una estructura que se inserta entre las partes rígidas del esqueleto para
permitir el movimiento, relacionan dos o más huesos entre sí en su zona de contacto.
Permiten el movimiento de esos huesos en relación unos con otros.

Las articulaciones son muy variadas; sin embargo, poseen ciertas


características funcionales generales comunes, constituyendo lugares de
unión del esqueleto donde se produce el crecimiento de los huesos y en
muchas de ellas se realizan los movimientos mecánicos del esqueleto,
proporcionándole al mismo, elasticidad y plasticidad.
Clasificación de las articulaciones
Se basa en las características estructurales de su unión, distinguiéndose tres tipos de
articulaciones: fibrosas, cartilaginosas y sinoviales.

ARTICULACIONES FIBROSAS:
Las articulaciones fibrosas: se caracterizan porque los huesos que participan en ellas se
mantienen unidos de forma continua por medio de tejido conectivo fibroso, se desarrollan
directamente del tejido conectivo embrionario por osteogénesis membranosa y carecen de
movimientos.
En las articulaciones fibrosas se pueden distinguir tres variedades: sindesmosis, suturas y
gónfosis, (esquindilesis).
 Las sindesmosis están formadas por membranas y ligamentos. Como ejemplo de
membrana interósea se destaca la unión entre los huesos del antebrazo y de la pierna
y como ejemplo de ligamento interóseo se observa en la unión de las extremidades
distales de los huesos de la pierna y entre los arcos vertebrales.
 Las suturas están constituidas por una delgada capa de tejido fibroso y solo se
encuentran entre los huesos de la cabeza que se desarrollan por osteogénesis
membranosa, o sea, en la calvaría y parte de la cara. Los bordes de los huesos
que componen las suturas presentan formas variadas, llamándose sutura
serrata la que se parece al borde dentado de una sierra, como en los huesos de
la calvaría, escamosa cuando sus bordes están cortados a bisel, por ejemplo: la
unión del temporal con el parietal y plana, la que tiene sus bordes lisos como
se observa entre los huesos nasales.
 La gónfosis es una variedad especial de articulación fibrosa, la cual está
constituida por una superficie ósea saliente en forma de espiga que penetra en
la superficie hueca de otro hueso. Por ejemplo: la implantación de los dientes
en los alveolos dentales.
 La esquindilesis es una variedad parecida a la gónfosis, con la diferencia que la
unión de los huesos tienen distintas formas, en la cual la cresta de un hueso se
encaja en el surco de otro hueso. Por ejemplo: la unión entre el vómer y el
esfenoides.
ARTICULACIONES CARTILAGINOSAS:
Las articulaciones cartilaginosas: se caracterizan porque los huesos se encuentran
unidos de forma continua por tejido cartilaginoso, los cuales se desarrollan mediante
la osteogénesis cartilaginosa y carecen o tienen poca movilidad.
De acuerdo con la estructura del tejido cartilaginoso, ya sea hialino o fibroso, se
distinguen dos variedades de articulaciones cartilaginosas: las sincondrosis y la sínfisis,
que difieren también en su desarrollo y función.
 En las sincondrosis (articulación cartilaginosa primaria), la unión de los huesos
se realiza por cartílago hialino, el cual constituye una parte persistente del
esqueleto cartilaginoso embrionario que actúa generalmente como una unión
temporal, siendo una zona de crecimiento de los huesos hasta que es sustituida
por la sinostosis. Las sincondrosis carecen de movimientos y se observan en la
etapa de crecimiento, como la unión de las tres piezas óseas primitivas del
coxal y el cartílago epifisiario de los huesos largos. En el adulto se encuentra
entre los huesos de la base del cráneo y la primera articulación esternocostal.
 En las sínfisis (articulación cartilaginosa secundaria), la unión entre los huesos
se produce por cartílago fibroso o fibrocartílago, que se halla separada de los
huesos por finas capas de cartílago hialino. Este tipo de articulación es
considerado como una unión permanente, ya que persiste durante toda la vida
y actúan de amortiguadores entre los huesos donde se encuentran,
presentando algún movimiento. Por ejemplo: en la sínfisis púbica de los coxales
y en los discos intervertebrales.

ARTICULACIONES SINOVIALES:
Las articulaciones sinoviales: se caracterizan porque la unión de los huesos es
discontinua al presentar una cavidad entre ellos, lo que le proporciona movilidad,
estando los huesos realmente unidos por una cápsula articular reforzada por
ligamentos. La cápsula articular está tapizada internamente por la membrana sinovial,
de donde recibe su nombre este tipo de articulación.

La cavidad articular es un espacio pequeño, herméticamente cerrado, que está


limitado por la membrana sinovial y las superficies articulares de los huesos llamadas
caras articulares, que se encuentran recubiertas de cartílago articular que facilita el
deslizamiento de las mismas y están constituidos generalmente de cartílago hialino.

Cartílago articular: es el tejido cartilaginoso o hiliano, que ubre a las superficies


articulares de los huesos, estas superficies tienen formas geométricas que pueden ser
esféricas, clipticas, cilíndricas o planas.

La cápsula articular es el medio de unión fundamental de la articulación, que se


dispone en forma de manguito extendido de un hueso a otro, fijándose al contorno
o vecindad de las caras articulares y está compuesta por dos capas:
 una externa o membrana fibrosa que se continúa con la fibrosa del periostio
 interna o membrana sinovial que reviste las paredes de la cavidad articular,
excepto los cartílagos articulares y los fibrocartílagos intraarticulares.

Las membranas sinoviales segregan un líquido ligeramente amarillo llamado sinovia,


que actúa como "lubricante" de la articulación y contribuye a la nutrición del cartílago
articular. La membrana sinovial puede presentar gran número de pequeñas
prolongaciones que reciben el nombre de vellosidades sinoviales y en zonas aisladas
forman prolongaciones más grandes llamadas pliegues sinoviales, que a veces
contienen gran cantidad de tejido adiposo y que actúa como relleno de los espacios
libres entre las superficies articulares.
En algunas zonas débiles de la cápsula articular se observan evaginaciones de la
membrana sinovial en forma de saco, por lo cual se denomina bolsas sinoviales que se
sitúan alrededor de los tendones y músculos cercanos a la articulación, favoreciendo
sus movimientos.
Los ligamentos articulares son otros medios de unión de las articulaciones que
refuerzan la cápsula articular y que están constituidos por tejido conectivo denso
regular. De acuerdo con su localización los ligamentos se pueden clasificar en
extracapsulares, capsulares e intracapsulares.
Movimientos de las diartrosis:
Los movimientos fundamentales son rotatorios y de deslizamiento. Los movimientos
en las articulaciones se efectúan sobre los ejes y planos anatómicos por el cual pueden
ser angulares o rotatorios.
Movimientos angulares:

 flexión: se ejecuta sobre un eje trasversal con desplazamiento del segmento


hacia adelante, en el plano sagital. (en excepción es la flexión de la pierna, en
que la flexión es hacia atrás).
 Extensión: se efectúa sobre un eje trasversal, con deslizamiento hacia atrás en
el plano sagital (la excepción es la pierna).
 Abducción: (separación) se realiza sobre un eje antero posterior con
desplazamiento hacia la línea media, sobre un plano frontal.
 Adduccion: (aproximación) se realiza sobre un eje antero posterior con
desplazamiento hacia la línea media sobre el eje frontal.
 Circunduccion: es movimiento combinado de los anteriores en el cual, el
segmento dibuja un cono suyo vértice está en la articulación y la base en el
extremo libre.
Movimientos rotatorios:

 Rotación: movimiento realizado sobre el eje longitudinal del hueso.


 Pronación: movimientos de rotación que lleva la palma de la mano hacia
atrás.
 Supinación: movimiento de rotación que lleva la palma de la mano hacia
adelante.
 Inversión: (versión interna) movimiento que dirige la planta del pie hacia
adentro (supinación del pie)
 Eversión: (versión externa) movimiento que dirige la planta del pie hacia
afuera (pronación del pie).
 plantiflexion: movimiento que lleva la planta de pie hacia abajo (extensión
del pie)
 Dorsiflexion: movimiento que lleva la planta del pie hacia arriba (flexión del
pie).
Clasificación morfo funcional de las diartrodias:
Esta clasificación se basa teniendo en cuenta la forma de las superficies articulares y
los movimientos que son capaces de realizar. Se reconocen 6 tipos o géneros:

 Enartrosis: formadas por una cabeza que encaja en una cavidad; corresponde al
tipo esférico. Realizan todos los movimientos.
 Condielas: formada por una cabeza alargada a la que se llama cóndilo, y una
cavidad glenoidea. Pueden realizar los movimientos de la enartrosis menos la
rotación
 Encaje reciproco e en silla de montar: las superficies son cóncavas y convexas
en forma inversa, es decir, la concavidad de una coincide con la convexividad
de la otra. Poseen todos los movimientos excepto la rotación.
 Trocleares: las superficies son de un lado, una polea o tróclea y del oro una
cresta para la garganta de la polea. Solo realizan movimientos de flexión y
extensión.
 Trocoides: las cara articulares son, de una parte, un cilindro óseo que rota
sobre un eje, y del otro lado un anillo sote fibroso que lo rodea. Únicamente
tiene movimiento de rotación.
 Artrodias: las caras son planas y solo se realizan movimientos de deslizamiento.
Vascularización e inervación de las articulaciones:
La red vascular arterial y venosa de las articulaciones es muy rica y proviene de los
vasos mayores próximos a ellas.
E forma similar, las capsulas articulares poseen una red linfática que drena los grupos
ganglionares vecinos a la articulación es muy rica y corresponde a dos tipos de
sistemas: dolorosos y propioceptico, este último conduce información del grado y tipo
de desplazamiento sufrido por la articulación. Las terminaciones nerviosas se localizan
en la capsula y membrana sinovial.
La ley Hilton señala que los nervios que inervan una articulación, también inerva los
músculos que la movilizan y la piel que cubre la inserción de estos músculos.

Músculos:
Son órganos que forman la carne roja y blanca del cuerpo. Es cada uno de los órganos
contráctiles del cuerpo humano y de otros animales, formados por tejido muscular. Los
músculos se relacionan íntimamente bien con el esqueleto, forman parte de la estructura
de diversos órganos y aparatos. La unidad funcional y estructural del músculo es la fibra
muscular.

Anatomía muscular.
El musculo es un órgano contráctil que determina la forma y el contorno de
nuestro cuerpo. Cuenta con células capaces de elongarse a lo largo de su eje
de contracción.
La composición química del musculo puede reunirse de la siguiente manera:
 70% de agua
 20% de proteína
 2% de grasas
 1% de carbohidratos
 2% sales minerales

Existen otros componentes en el sistema muscular como lo son:

 El tejido conectivo rodea y protege al tejido muscular.


 Una fascia es una capa o lamina de tejido conectivo que sostiene y
rodea a los músculos y otros órganos del cuerpo.
 La fascia superficial, que separa al musculo de la piel, se compone de
tejido conectivo areolar y tejido adiposo. Provee una vía para el ingreso
y egreso de nervios, vasos sanguíneos y vasos linfáticos al musculo.
 La fascia profunda es un tejido conectivo denso e irregular que reviste
las paredes del tronco y de los miembros, y mantiene juntos a los
músculos con funciones similares.
 el epimisio, envuelve al musculo en su totalidad.
 El perimisio rodea grupos de entre 10 y 100 o incluso más fibras
musculares, separándolas en haces llamados fascículos. Tanto el
epimisio como el perimisio son tejidos conectivos densos e irregulares.
En el interior de cada fascículo y separando las fibras musculares una
de otra, se encuentra el endomisio una fina lamina de tejido conectivo
areolar.

Las tres fascias ya mencionadas pueden extenderse más allá de las fibras
musculares para formar el tendón muscular, un cordón de tejido conectivo
denso y regular compuesto por haces de fibras colágenas que fijan el músculo
al hueso o a la piel.
Cuando los elementos del tejido conectivo se extienden como una lámina
ancha y fina el tendón se denomina aponeurosis.4

Histología
El sistemas muscular está formado por células especializadas en la conversión
de la energía química en fuerza contráctil (véase Fig. 1.17), capaces de
estirarse sobre su eje de contracción. La célula se encuentra cubierta por una
membrana estimulable llamada sarcolema, mientras su citoplasma se
denomina sarcoplasma. Y en ella existen un gran número de mitocondrias
grandes y muchos gránulos de glucógeno, y una característica especial es la
presencia de filamentos proteicos contráctiles, los miofilamentos. Que se
encuentran por toda la célula y solo son visibles en el microscopio electrónico,
se clasifican en dos tipos: finos y gruesos. Los filamentos gruesos consisten en
una proteína la actina, de forma fibrilar, aunque también puede ser de forma
globular. Los filamentos finos consisten en otra proteína la miosina. Cuando los
miofilamentos se agrupan se conocen como miofibrillas.
Tipos:
Existen tres tipos de músculos:
Tejido muscular esquelético. Puede describirse como musculo voluntario o
estriado. Se denomina voluntario debido a que se contrae de forma voluntaria.
Un músculo consta de un gran número de fibras musculares. Pequeños haces
de fibras están envueltos por el perimisio, y la totalidad del musculo por el
epimisio.
2. Tejido muscular liso. Este describe como visceral o involuntario. No está
bajo el control de la voluntad. Se encuentra en las paredes de los vasos
sanguíneos y linfáticos, el tubo digestivo, las vías respiratorias, la vejiga, las
vías biliares y el útero.
3. Tejido muscular cardiaco. Este tipo de tejido muscular se encuentra
exclusivamente en la pared del corazón. No está bajo el control voluntario sino
por automatismo. Entre las capas de las fibras musculares cardiacas, las
células contráctiles del corazón, se ubican láminas de tejido conectivo que
contienen vasos sanguíneos, nervio y el sistema de conducción del
corazón.3

Clasificación según la forma en que sean controlados


 Voluntarios: controlados por el individuo
 Involuntarios o viscerales: dirigidos por el sistema nervioso central
 Autónomo: su función es contraerse regularmente sin detenerse.
 Mixtos: músculos controlados por el individuo y por sistema nervioso, por
ejemplo los párpados.

Clasificación según la forma:


 Largos: son aquellos en los cuales predominan la longitud, como la mayor
parte de los músculos de los miembros.
 Cortos: son aquellos en los de la longitud, la anchura, y el espesor son
sensiblemente iguales, como los músculos intertransversos e
interespinosos de la columna vertebral.
 Anchos: como los que forman las paredes del abdomen son aquellos en los
cuales predominan la longitud y la anchura sobre espesor.

La forma de los músculos


Cada músculo posee una determinada estructura, según la función que realicen,
entre ellas encontramos:
 Fusiformes músculos con forma de huso. Siendo gruesos en su parte central y
delgado en los extremos.
 Planos y anchos, son los que se encuentran en el tórax (abdominales), y
protegen los órganos vitales ubicados en la caja torácica.
 Abanicoides o abanico, los músculos pectorales o los temporales de la
mandíbula.
 Circulares, músculos en forma de aro. Se encuentran en muchos órganos, para
abrir y cerrar conductos. por ejemplo el píloro o el orificio anal.
 Orbiculares, músculos semejantes a los fusiformes, pero con un orificio en el
centro, sirven para cerrar y abrir otros órganos. Por ejemplo los labios y
los ojos.

Clase de contracción muscular:

 Isométrica: el musculo aumenta la tensión de sus fibras pero mantiene la


misma longitud, es decir, no sufre desplazamiento.
 Isotónica: el musculo mantiene la tensión de sus fibras pero se acorta,
produciendo un desplazamiento de uno de sus extremos, aumentando su
diámetro.

Funciones generales:
En estas funciones los músculos juegan un gran papel en la importancia de la
función muscular para la vida normal.
 Movimiento. Las contracciones del músculo esquelético producen
movimientos del cuerpo como un todo (locomoción) o bien de alguna de
sus partes.
 Producción de calor. Las células musculares, como todas las demás,
producen calor por el principio denominado del catabolismo. Sin
embargo dado que las células del músculo esquelético son muy activas
y numerosas, producen una parte importante del calor total del cuerpo.
Por tanto las contracciones del músculo son partes fundamentales del
mecanismo que mantiene la homeostasis de la temperatura.
 Postura. La contracción parcial continua de muchos músculos
(esqueléticos) permiten estar de pie, sentarse y otras posiciones
mantenidas del cuerpo.19

Funciones de los tejidos:


 Esquelético. Las células musculares esqueléticas poseen algunas
características que les permiten funcionar como lo hacen. Una de ellas
es la capacidad de ser estimuladas, denominada con frecuencia
excitabilidad o irritabilidad. Estas células son estimulables por lo que
pueden responder a los mecanismos reguladores, por ejemplo, los
impulsos nerviosos. La contractibilidad de las células musculares, es
decir, su capacidad para contraerse permite a los músculos tirar de los
huesos, produciendo así el movimiento.
 Cardiaco. Delimita las paredes del corazón y se mueve de manera
involuntaria, estimulando el bombeo de la sangre.
 Liso. Presente en la pared de muchos órganos huecos. Principalmente
estimula el movimiento de las paredes de los órganos huecos
(peristaltismo, mezclado).

Características de los músculos:

Se da nombre a los músculos de acuerdo a ciertas características, cabe


agregar que cuando conocemos las razones por las que tienen determinado
nombre es más lógico y por tanto más fácil aprendérnoslo. Estas son:

 La situación: es decir de acuerdo a su localización.


 La función: de acuerdo a como trabaja el musculo, puede ser flexor,
extensor, abductor y aductor.
 La forma: pueden ser divididos en largos, anchos, cortos u
orbiculares.
 Dirección de las fibras: cuando generan un empuje directo pueden
ser fusiforme, acintado, cuadrilátero y triangular. Y en formaciones
más rígidas (fuertes) se dividen en: unnipenniforme, bipenniforme y
multipenniforme.
 Número de cabezas o divisiones: de acuerdo al número de puntos de
origen. Ejemplo bíceps dos, tríceps tres.
 Puntos de fijación: de acuerdo a los puntos de origen e inserción. Por
ejemplo el musculo nasal que tienen origen en las fosas nasales.

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