Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
2do Trabajo
2do Trabajo
Profesor: Estudiante:
Rafael Godoy Antonietta Villalba C.I: V 27.223.188
DEVALUACÓN-
EMPLEO AHORRO INVERSIÓN INFLACIÒN REVALUACIÓN DE LA DÉFICIT FISCAL
MONEDA
El gasto publico puede
El Estado está en la influir en el
obligación de garantizar comportamiento de la
El gasto público puede la inversión en los moneda frente a otra
afectar el nivel de diferentes ámbitos divisas, en la medida
Al existir un incremento
Es una fuente ahorro de la nación, ya sociales (educación, que éste sea financiado
de la demanda a un
importante de que éste está financiado tecnología, salud, etc); con crédito externo. El El gasto público es
ritmo superior que la
generación de empleo, por lo general por pues de lo contrario ingreso de divisa responsable del
oferta, se sufre una
tanto así que el primer ingresos provenientes conllevaría a: producto de la incremento o
tendencia inflacionaria ;
empleador en el país, es de los impuestos. Al malversación de fondo, adquisición de crédito disminución del déficit
el gasto público tiene la
el Estado. La economía incrementar los que no haya capacidad puede conducir que la fiscal de un país, en la
capacidad de
se puede acelerar o impuestos se deja a la para invertir debido a un moneda local se medida que se gasta
incrementar la demanda
desacelerar, según los población con una déficit fiscal, por fortalezca puesto que al más o menos de los
de bienes y servicios, es
gatos incurridos por el menor parte de sus devaluación de la incrementarse la oferta ingresos obtenidos.
decir, producir más
Estado. utilidades lo que moneda o por no de una determinada
inflación
disminuye su capacidad implementar políticas divisa el efecto de la ley
de ahorro. económicas adecuadas y demanda, conlleva a
que conlleva al que el precio de la
bienestar social. moneda local se
revaluo.
Estos pueden ser algunos de los efectos que puede tener el gasto público en
la economía, algunos de ellos con negativos y otros positivos, por lo que se puede
concluir que el gasto público es una herramienta muy importante a la hora de
implementar ciertas políticas macroeconómicas.
¿Cuáles son los efectos del gasto público cunado todo el mundo
hecha dinero a la calle?
Para explicar este caso, usaré un artículo escrito por el economista José Toro
Hardy, donde pronostica que para enero y febrero del 2020 se acabe la explotación
de dólares que hay en Venezuela, una vez analizado esto, lo asociaremos con los
posibles efectos que pudiera tener sobre el gasto público.
“Mucho me temo que entre enero y febrero se producirá una gran resaca
económica cuando el país despierte del mini boom comercial producto de una
dolarización atípica”.
Igualmente el economista sostiene, que ese mini boom comercial es evidente
en zonas de alto poder adquisitivo como es en los sectores de Baruta, Chacao y el
Norte de Valencia entre otras ciudades. Sostiene igualmente “Este fenómeno es
consecuencia de que se está utilizando el dólar, de la cantidad de productos que se
está importando y que se venden en bodegones y automercados. Eso ha movilizado
un poco la economía respecto años anteriores”.
Toro Hardy alertó que para el mes de febrero podría generarse una resaca
económica como resultado de dicha situación, manifestando que no sabe la
sustentabilidad de dicha economía ya que, primeramente no está determinado el
origen de los dólares que la promueve. En virtud que en Venezuela el 97% de los
dólares que entraba a la economía provenían del sector petrolero y es sabido que
actualmente no está aportando divisas al país. El referido economista sostiene que
hay dólares que provienen de las exportaciones no tradicionales y que son
totalmente legítimos así como los que vienen por vías de las remesas. Sin embargo,
destacó que la mayoría de eso giros no llegan en dólares, sino mediante una
persona con cuenta en el exterior que los compra y da a cambio los bolívares.
Muchas personas, asocian la cantidad de efectivo en dólares que existe
actualmente en los mercados venezolanos, con el lavado de dineros, o el
narcotráfico, otros se refieren al mecanismo de contrabando de gasolina a
Colombia, que genera gran ingreso en divisas; estos dólares al no ser contabilizados
se ponen a circular.
El experto si esa masa monetaria sea suficiente para reemplazar los ingresos
de divisas que provenían de la economía formal, recordando que estacionalmente
los meses de enero y febrero son los meses más lentos de la economía, por lo que
piensa que se pude generar un cabio o bien que se demande una situación diferente
hacia una dolarización completa de la economía, forzada a la circunstancias que
actualmente tenemos en el país. Restándole al Banco Central de Venezuela la
capacidad de llevar a cambio esa dolarización formal, en viste de las pocas reservas
líquidas que posee la entidad.
Actualmente en Venezuela, y en viste de lo afirmado por Toro Hardy, puedo
inferir que actualmente no se sabe de donde provienen los fondos en divisas, como
se alimentan los mercados, como participan los diferentes actores, y como es la
actuación del Banco Central de Venezuela ante el control de la masa monetaria
que circula en la Nación.
Indicó que existe una total contradicción en la economía que se desarrolla en
el país aproximadamente hace seis años, y que dicha economía sea asfixiante. Por
cuanto en Venezuela solo está dolarizado el gasto, y la mayoría de las personas
siguen persiguiendo sus ingresos en bolívares; es por lo que sostiene que la gran
mayoría de los venezolanos no pueden participar en ese “mini boom” comercial, lo
que genera gran tensión en el ámbito social.
Con este artículo podemos concluir que en Venezuela a pesar que la
economía siga en constante movimiento, y halla entrada de divisas (por el motivo
que fuese) a los hogares venezolanos no significa que esté habiendo un
crecimiento económico, por el contrario, pudiéramos inferir que existe una recesión
económica. Produciendo el empobrecimiento de la población y dificulta la salida de
la recesión.
El gasto público también se ve afectado por este “mini boom” del que habla
el economista Hardy; de la mayoría de las divisas que entran en el país, no se tiene
un control, interno, por lo que probablemente tampoco el Estado perciba ningún
beneficio producto de esas operaciones. Otra de las actividades que afecta el gasto
público, es la evasión de impuestos por parte de las empresas privadas, es bien
sabido que dejan de facturar los que ingresa en divisas, por tanto el fisco nacional
deja de percibir ingresos producto de los impuestos. Estas actividades afectan el
gasto público, ya que, si el Estado no percibe ingresos, no tendrá como cubrir los
gastos, los cuales son cada vez más crecientes, de igual forma, no tendrá como
invertir la nación.
En todos los países, el Estado estructura un presupuesto anual de gastos
para llevar adelante las funciones básicas que le son inherentes. El financiamiento
de dicho gasto es imprescindible y la forma de ese financiamiento tiene efectos
sobre la economía del país. En este sentido, el gasto público se puede financiar con
impuestos internos, con endeudamiento o con mecanismos de devaluación de la
moneda, así como con una combinación de los anteriores.
La forma idónea de mantenimiento de una sana gestión fiscal es por la vía
del cobro de impuestos: en el mejor de los casos, la mayor cantidad de gasto público
debe ser financiada por impuestos generados por la propia economía. Cuando el
gasto público supera a los ingresos fiscales, estamos en presencia de un déficit
fiscal.
Ahora bien, cuando un gobierno posee el control de las reservas
internacionales (incluyéndolas del Banco Central y otros fondos), porque es
propietario controla la mayor actividad generadora de divisas del país, los déficit
fiscales pueden ser cubiertos inmediatamente con una devaluación de la moneda.
La otra forma de financiar el gasto público es mediante la emisión de deuda interna
o externa. En el primer caso se produce un efecto de alza en las tasas de interés
domésticas del mercado financiero de deuda, producto de la colocación de estas
nuevas emisiones, afectando el costo oferta de dinero para los agentes que
participan en el mercado. En caso de financiamiento externo del gasto público, no
hay impacto sobre las tasas de interés internas ni un impacto importante sobre las
tasas de interés internas ni un impacto importantes sobre la inflación; sin embargo,
los poténciales acreedores exigen un menú de medidas que garanticen el pago
oportuno futuro de los montos solicitados, es decir un plan que garantice la
estabilidad macroeconómica.
En Venezuela el Estado ha mantenido una política fiscal irresponsable,
derrochadora, en la medida que mayor gasto público deficitario se traduce en mayor
deuda con acreedores en el exterior (principalmente China) y a lo interno con el
Banco Central de Venezuela. El problema del gasto público venezolano, radica en
que es improductivo, acompañado de transferencia de rentas a grupos particulares
con mecanismos poco trasparentes o poco legítimos; así como los subsidios
generalizados como el del combustible y la electricidad, entre otros bienes y
servicios básicos, implican un mayor gasto público, con una disminución es los
ingresos nacionales.
¿Qué es inflación?
Según el economista y escritor venezolano José Guerra, define la inflación
como el alza sostenida del nivel de precio de una economía. Para que exista
inflación no basta que se incremente el precio de un bien o servicio en particular,
sino que los aumentos sean generalizados”.
En Venezuela, la medición oficial de la inflación la realizaba el Banco Central
de Venezuela, mediante la estimación del Índice de Precios al Consumidor (IPC)
para el Área Metropolitana de Caracas, usando para ello una canasta de bienes y
servicio que representaba el consumo promedio de una familia típica de esa región.
A partir de enero de 2008, el BCV y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE)
comenzaron a elaborar y divulgar el INPC, el cual cubre las diez principales
ciudades más una muestra de cincuenta y cuatro localidades y el cual el IPC de
Caracas es un componente fundamental.
Tipos de inflación
La inflación en la economía es, por norma general, un aumento generalizado
de precios de los bienes y servicios. Pero tampoco debe pasarse por alto que al
igual que los precios pueden aumentar por varios motivos, también pueden
disminuir o mantenerse estables. Existen, por tanto, varios tipos de inflación.
Deflación: Es cuando los precios disminuyen, siendo lo contrario a la
inflación.
Desinflación: Se refiere al descenso en la tasa de inflación. Los
precios suben pero menos que antes.
Reflación: Es cuando se intenta aumentar la inflación ante presiones
deflacionarias.
Estanflación: Ocurre en épocas de crisis económicas y produce un
aumento en la inflación y el desempleo, al mismo tiempo que realza
un estancamiento del PIB.
Inflación subyacente: Se trata de un indicador que muestra la
variabilidad de los precios de consumo en un corto plazo porque no
incluye los precios energéticos ni los alimentos no elaborados.
Así mismo, la inflación puede ser denominada según el porcentaje de
aumento en:
Deflación: Es la inflación negativa, la disminución de los precios.
Inflación moderada: Es cuando se da una elevación lenta de los
precios, son precios estables con aumentos que no llegan anualmente
al 10%
Inflación galopante: Son niveles de inflación de dos o tres dígitos en
un plazo de un año. Con esto un producto puede triplicar su precio en
apenas un año.
Hiperinflación: Consisten en aumentos del más del 1000% anual. Y
son causantes de graves crisis económicas.
Caso venezolano:
Venezuela vive uno de los peores episodios de hiperinflación registrados en
todo el planeta desde la Segunda Guerra Mundial. Los precios alcanzaron un nuevo
máximo en agosto (2019), por encima del 65.000% anual, según Steve Hanke,
profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Johns Hopkins, en Baltimore
(Estados Unidos), y uno de los mayores expertos en hiperinflación.
Hanke es uno de los autores de la "Tabla de Hiperinflación Mundial", a la que
el país sudamericano ingresó en noviembre de 2016. Entonces, los precios subían
a un ritmo mensual del 219% y se duplicaban cada 18 días. La situación, sin
embargo, empeoró todavía más y, en un contexto de grave escasez de comida y
medicina, los ciudadanos se vieron forzados a usar pilas de billetes para pagar sus
necesidades básicas y diarias.
Y la introducción de una nueva moneda, el bolívar soberano, que le quitó 5
ceros a su antecesor, el bolívar fuerte, no ha solucionado el problema
hiperinflacionario. La situación económica de Venezuela, en la actualidad es
calificada por expertos de diversas corrientes, como una nueva experiencia de crisis
de hiperinflación en el mundo. Steve Hanke, una referencia mundial en la materia
(de tendencia neoliberal), asegura que existe hiperinflación cuando la tasa de
inflación supera el 50% mensual. De acuerdo con el autor, una inflación de 50%
mensual, proyectada de forma anualizada, se calcularía aproximadamente en
13.000%.
- Una reforma fiscal drástica que revierta la tendencia regresiva del actual
régimen tributario.
- Una política de amplio espectro para mitigar las distorsiones del mercado
nacional.
- Por último y no por ello menos importante, de crear y materializar una política
para recuperar el poder adquisitivo de la clase asalariada, lo cual estimularía
el mercado interno y potenciaría de manera objetiva y subjetiva un factor
esencial para la capitalización (la fuerza de trabajo, o talento humano).
1. Hungría, 1946
Datos:
Tasa de inflación diaria: 207%
Los precios se duplicaban cada: 15 horas
En julio de 1946, la inflación en Hungría alcanzó un nivel impactante: 41,9%
trillones. Es el peor caso de hiperinflación que haya quedado registrado.
Los precios se duplicaban cada 15 horas. El valor del dinero que los
húngaros tenían en la cartera cada mañana quedaba reducido a la mitad por la
noche, sin importar cuánto fuera. El billete más alto era de 100 trillones de pengos
(moneda local).
La Segunda Guerra Mundial había borrado el 40% de la riqueza de Hungría;
el 80% de su capital, Budapest, estaba destruida; las vías férreas y las carreteras
habían sido bombardeadas y el gobierno tuvo que pagar una indemnización
millonaria después del conflicto.
El país realizó varios intentos de reanimar la divisa que llevaron a que los
ciudadanos dejaran de referirse a los billetes según su valor y pasaran
a diferenciarlos por su color.
El 1 de agosto de 1946, el gobierno adoptó un programa de estabilización
radical que incluyó una reforma tributaria drástica, la recuperación de
las reservas de oro que habían sido trasladadas al extranjero y la introducción de
una nueva moneda, el florín húngaro, respaldado por sus reservas de oro y divisas
extranjeras. El florín se estrenó con un valor de 400.000 cuatrillones de pengos cada
uno.
2. Zimbabue, 2008
Datos:
Tasa de inflación diaria: 98%
Los precios se duplicaban cada: 25 horas
Tras aplicar a finales de los 90 una reforma agraria polémica que incluía
la expropiación de tierras que pertenecían a hacendados blancos, Zimbabue sufrió
un agudo declive agrícola. La situación empeoró debido a una costosa intervención
en la Guerra del Congo en 1998 y a los efectos de las sanciones que Estados Unidos
y la Unión Europea le impusieron en 2002 al gobierno del entonces
presidente Robert Mugabe.
En los años siguientes, los precios empezaron a subir. En noviembre de
2008, la inflación había alcanzado una tasa mensual de 79.000.000.000%. Las
tiendas incrementaban los precios varias veces al día. Esta caída económica se
tradujo para la población en frecuentes recortes de agua y energía, colas en los
bancos y gasolineras, y una grave escasez de comida en los supermercados.
Muchos cruzaban la frontera a Sudáfrica o Botsuana para comprar bienes de
primera necesidad y el dólar estadounidense y el rand sudafricano se convirtieron
en divisas de facto. En 2009, el Banco de la Reserva de Zimbabue dejó de usar la
moneda nacional y adoptó la estadounidense y la sudafricana.
4. Alemania 1923
Datos:
Tasa de inflación diaria: 21%
Los precios se duplicaban cada 3 días, 17 horas
Tras la Primera Guerra Mundial (1914-18), Alemania se quedó con grandes
deudas y costes de reparación. El gobierno empezó a imprimir moneda en la divisa
nacional, el marco, para comprar monedas fuertes y pagar las deudas.
A medida que se imprimían nuevos marcos, estos iban perdiendo valor. Pero
lo peor de la crisis se produjo cuando Alemania no realizó los pagos que debía en
1923, lo que provocó la ocupación del valle del Ruhr -el corazón industrial alemán-
por parte de las tropas francesas y belgas para exigir el pago en activos fuertes.
Esto provocó huelgas y detuvo la producción.
En octubre de 1923, la inflación se había disparado hasta el 29.500%
mensual, con los precios duplicándose cada 3 o 4 días. Una rebanada de pan, que
costaba 250 marcos en enero de ese año, subía hasta los 200.000 millones de
marcos en noviembre. Las personas recogían sus salarios en maletas. En 1923
retiró del mercado su moneda nacional y mediante el Banco Central (El Reichsbank)
ejecutó la emisión y circulación de una nueva moneda (respaldada en su capital fijo:
tierras e industrias).
Más tarde ese año, el gobierno introdujo una nueva moneda, el "marco
seguro" o rentenmark, sustentado con las tierras agrarias. Los precios se
estabilizaron y posteriormente los acreedores de Alemania acordaron reestructurar
los pagos de la guerra.
5. Grecia, 1944
Datos:
Tasa de inflación diaria: 18%
Los precios se duplicaban cada 4 días, 6 horas