Guion

Profesora: Lourdes Rojas

Estudiante: Renato Sebastian Rodriguez Rivadeneyra
Título: Monótono

1. Sinopsis:
Salvador es un chico universitario de veinte años, que se siente atrapado en la
monotonía; pero esto no es del todo cierto, pues es incapaz de ver los numerosos
sucesos que lo involucran. En otras palabras, jamás se da cuenta de lo que está
viviendo. Su día a día lo vive igual, no encuentra la más mínima variación en su
vida.
Roger que tiene unos tres años menos; acostumbra observarlo ya que van a la
misma universidad. Le asombra la vida que lleva Salvador, pues le suceden todo
tipo de cosas interesantes, mientras que lo único que él encuentra interesante
es acosarlo.
Ambos se ven involucrados en un asesinato, Salvador intenta evadir cualquier
cosa que lo relacione y Roger buscará demostrarle que esta situación en
particular no podrá evadirla. Poco a poco terminarán buscando juntos
respuestas a lo que vivieron, pues el asesinato fue solo el comienzo de una serie
de sucesos muy extraños, como la desaparición periódica de las personas del
entorno de Salvador.
Salvador encontrará en Roger un gran amigo y colega en su búsqueda de
respuestas, pues por primera vez realmente le interesará saber qué es lo que
sucede. Roger por su parte ganará la total confianza de Salvador, convirtiéndose
así en la única persona a quien le compartirá su vida.
Personajes contrarios pero que se complementan se verán envueltos en una
situación que tiene un origen muy particular.
2. Primera escena
2.1. El accidente
2.1.1. Personajes
 Salvador
 Roger
2.1.2. Escenario
Salvador y Roger acaban de encontrar un cadáver tirado en medio
del pasto en un parque cercano a su universidad. Solo están los dos
y el cuerpo, la calle está desierta. Cubiertos por un cielo gris, y
rodeados de árboles; se dirigen la palabra por primera vez.
2.2. Narración
Salvador y Roger están parados frente al cadáver, el primero mira totalmente
pasmado el cuerpo, mientras empieza a sentir como se revuelve su
estómago. Roger se da cuenta de esto último e intenta calmar al muchacho.

Roger: ¡Hey tú! Tranquilo. Llamaré a la policía. Ya deja de mirarlo.

Salvador: Tienes razón llamemos a la policía será lo... [arcadas] …m...ejor.
Roger: Mejor ni abras la boca, no te ves nada bien.
 Roger marca el 105 y espera a que le contesten.
Salvador no aguanta más y vomita detrás de un árbol.

Roger: Aló. Envíen lo más rápido posible una unidad al Parque Villareal,
hemos encontrado un cadáver… [silencio]… sí ese parque, muchas
gracias… [silencio]… Sí, descuide aquí los esperamos.
Salvador: [Limpiándose el vómito de la boca] ¿En cuánto llegan?
Roger: Dijeron que tardarían unos quince minutos, quieren que esperemos
aquí para hacernos unas preguntas. Por cierto, aún no me dices cómo te
llamas.
Salvador: [Nervioso] ¿Qué? ¿Interrogarnos? Lo siento pero yo me largo. No
creo que sea buena idea eso del interrogatorio.
Roger: Descuida no creo que tarden mucho, además ¿qué podríamos saber
nosotros? Solo coincidimos en el mismo sitio al salir de la universidad. Cierto,
¿qué hacías tú en la universidad a esta hora? Es sábado y casi nadie tiene
clases.
Salvador: Me quedé a estudiar, por lo que veo tú igual. Y disculpa por no
mencionarlo antes, estaba muy nervioso, mi nombre es Salvador.
Roger: ¡Acertaste! Me quedé a estudiar también. Y un gusto Salvador, yo
soy Roger.
Salvador: Qué lástima conocernos en estas circunstancias. ¿Seguro que es
buena idea esperara a la policía? Para serte honesto no tengo el más mínimo
interés en relacionarme con esto, si es que aún no he salido corriendo de
aquí es porque no podía moverme de la impresión.
Salvador: [titubeando un poco] No lo sé, me estás haciendo dudar. Pero creo
que es lo correcto.
Roger: Qué te parece si después de esto vamos a mi casa a charlar un rato,
así nos distraemos un tanto.
Salvador: [confuso] Es… está bien.

Llega la policía, toman fotos de la escena del crimen y marcan un perímetro.

Mientras los nuevos amigos son interrogados por un oficial y observan como
recogen el cadáver. Salvador recién se percata de que se trata de una mujer.
Las patrullas parten y ambos se quedan solos en el parque, otra vez.

Roger: Entonces ¿vamos ya a mi casa?

Salvador: Sí, andando.

3. Segunda escena
3.1. Momento incómodo
3.1.1. Personajes
 Salvador
 Roger
3.1.2. Escenario
Luego del suceso con el cadáver, Salvador acompañó a Roger a su
casa. Roger vive solo en un departamento cercano a la universidad.
Ambos se encuentran en la sala–comedor, y comparten sus
pensamientos de lo que acaban de vivir.
3.2. Narración
Salvador no puede evitar sentirse incómodo en la casa de Roger, pues aún
es un desconocido para él, sin mencionar que el ambiente lo hace sentir
sofocado. Roger intenta ser el mejor anfitrión ofreciendo comida a su nuevo
amigo.

Roger: ¿Vaya día no? [Le entrega un vaso de agua]

Salvador: El peor de mi vida diría yo.
Roger: Oh vamos, ya deja esa cara larga. Estas cosas pasan todos los días.
Salvador: Eso no implica que este acostumbrado, mucho menos que lo tome
como algo normal y correcto.
Roger: ¿Me parece? o estas algo exaltado.
Salvador: [Disimulando] ¿Exaltado? ¿Yo? Por favor, te parece. [Bebe del
vaso de agua apresuradamente]
Roger: Se nota que aún sigues afectado por el incidente, yo también lo estoy
créeme.
Salvador: Difícil creerte después de oírte decir que es normal.
Roger: [Frunce el ceño] Mejor hablemos de algo más.
Salvador: ¿Cómo qué?
Roger: Háblame de ti. Acabamos de conocernos, tengo muchas ganas de
escuchar sobre ti.
Salvador: [Entrando en confianza] Bueno, por dónde empezar…
Roger: Por tu carrera y tu ciclo.
Salvador: Estudio ingeniería eléctrica y voy por el cuarto ciclo.
Roger: Por eso nunca te vi, yo estudio civil.
Roger nota que Salvador se encuentra muy pálido y que tiene los músculos
tensionados.
Roger: ¿Necesitas algo?
Salvador: Roger perdóname. No puedo sacar la imagen del cuerpo de esa
mujer de mi mente.
Roger: ¡Rayos! … [silencio]… La verdad es que yo tampoco.
Salvador: ¿Qué crees que fue lo que pudo pasar? Yo aún no le encuentro
sentido. ¿Qué asesino dejaría un cadáver en un parque a plena luz del día?
Roger: [Muy serio] Tal vez… [silencio]… el asesino buscaba llamar la
atención de alguien…
Salvador: [Perplejo] ¿Llamar la atención de alguien? ¿A qué te refieres?
Roger: Yo sólo digo, que alguien intentaba llamar tu atención. Es mi teoría.
Salvador: [Inquieto] ¿Mi atención? ¿No querrás decir nuestra? [Más inquieto
aún] ¿Y cómo rayos se te ocurre algo así?
Roger: Se me ocurre porque no puede ser que algo tan llamativo, sea pura
coincidencia.
Salvador: [Sintiendo mucho sueño] Aún… n…o… me dices… porque te
refieres solo a mí. Ambos estuvimos ahí a la vez.
Roger: [Sonriente] Porque yo sé que no fue coincidencia.
Salvador: ¿Qué demo…nios dices?
Salvador intenta hablar pero cae profundamente dormido. Roger lo observa
inexpresivo y recoge los platos de comida y vasos.
4. Tercera escena
4.1. Explicaciones
4.1.1. Personajes
 Salvador
 Roger
4.1.2. Escenario
Salvador despierta y se da cuenta de que se encuentra echado en el
piso de un cuarto sin ventanas, está amordazado. Roger está sentado
en una esquina observándolo con una macabra sonrisa. Ambos son
iluminados por la tenue luz de un foco incandescente.

4.2. Narración
Roger se acerca lentamente a Salvador, que quiere gritar pero no puede, por
lo que mira con odio a su captor. Roger se detiene a mitad de camino y lo
observa, como si de una pieza de arte se tratase. Salvador se agita y gruñe
hasta el cansancio. Roger lo sigue observando inmutable. Pasan unos
segundos hasta que Roger le dirige la palabra.
Roger: Absolveré todas tus dudas. ¿Te parece?
Salvador solo logra soltar gruñidos.
Roger: Pero que tonto soy, déjame quitarte eso.
Roger se acerca a quitarle la mordaza de la boca.
Salvador: [Asustado] ¿Qué rayos quieres de mí?
Roger: Buena pregunta. Es difícil de expresar, pero en pocas palabras…
quiero tu vida.
Salvador: Si vas a asesinarme ¿qué esperas?
Roger: No no no. Me entendiste mal, no es solo asesinarte. Quiero tener la
vida que tú tienes, quiero poder vivir situaciones tan interesantes como las
que tú vives.
Salvador: ¿De qué rayos hablas? ¿Situaciones interesantes?
Roger: Llevo un tiempo observándote. No eres capaz de darte cuenta de los
sucesos en los que participas. Más de una vez te he escuchado mascullar
“mi vida es tan monótona”. No logro entender cómo puedes pensar así.
Desde que sales de tu casa te pasa de todo. He visto cómo te acompaña tu
vecino todos los días al paradero. Cómo tu papá te recoge de la universidad.
Te vi salir riendo y jugando con tus amigos. Dime si esos no son claros
ejemplos de sucesos asombrosos.
Salvador: Estas enfermo. Eso se llama día a día y no tiene nada de
asombroso.
Roger: Eres un necio. ¿Realmente no logras ver como influencias en sus
vidas?
Salvador: ¿Influenciar? Supongo que lo hago, pero no es algo que me quite
el sueño.
Roger: [Muy exaltado] Dices eso porque no tienes mi vida. Yo solo se ir a la
universidad y volver. Sin nadie que me acompañe, nadie que me recoja. Yo
si vivo en la monotonía.
Salvador: ¿Y por un motivo así me tienes aquí?... [silencio]… espera… tú la
mataste ¿verdad? Solo para poder tener esta conversación sin sentido.
Roger: Creí que eras inteligente, solo acertaste en una cosa. [con una
sonrisa siniestra] Yo la mate. Pero no fue solo para charlar, te quitaré eso
que tanto anhelo.
Salvador: ¿Y cómo piensas hacer eso?
Roger: ¿Qué no lo ves? Ya salí de mi monotonía. La policía pronto sabrá
que fui yo el asesino. Además te tengo aquí contra tu voluntad. Mi vida nunca
fue tan interesante.
Salvador: ¿Realmente armaste todo esto sólo para salir de tu monotonía?
Roger: Para mí, es la causa más noble.