Identidad en Cristo

Hace muchos años atrás, hace más o menos 4000 mil años, se enciende una zarza en el
desierto, la historia es harto conocida, se enciende la llama, Dios le habla y le dice que vaya al
imperio más poderoso de ese entonces que ere Egipto y que libere a los israelitas que era un
pueblo que en ese momento estaba en esclavitud. Moisés se siente indigno ya que era un
fugitivo, que había matado a un egipcio y estaba allí por 40 años sintiéndose un inútil.

Se considera así mismo porque él no dice, es tope de lengua tiene un problema en el léxico y
sudando le dice, no, no yo no puedo ir y en esa platica con Dios, Moisés cree conveniente
saber quién lo está mandando, él sabe que es Dios, pero él dice, a ver si me preguntan quién
me mando, quien eres, que le digo, y le pregunta la identidad a Dios.

Asi que Dios accede a decirle su nombre a Moisés y le dice Moisés mi nombre es: YO SOY

Yo Soy…… y Dios no termina la frase. Pero pensemos en esas dos palabras, que Dios nos dice
que no tomemos con ligereza el llenar ese espacio en blanco y que a su vez esa es la frase más
potente de todo el universo.

Y el nombre de Dios no necesita una tercera palabra, no necesita decir YO SOY PODEROSO
aunque necesariamente lo es, YO SOY EL MAS GRANDE no, simplemente YO SOY, Dios no
necesita llenar la oración con una tercera palabra, tu y yo si lo necesitamos.

Nadie dice, hola YO SOY…. No, tenemos que poner una tercera palabra, necesitamos anclar
nuestra identidad a algo tangible a algo descriptivo, tenemos que terminar la frase. Pero
consiente o inconscientemente siempre estamos buscando una palabra que nos defina.

Si yo te preguntara, como terminarías la frase yo soy en tu caso, como te describirías, yo soy

latinoamericano, en serio te define la raza, pero cuál es la tercera palabra que te define,
porque todos definimos a Dios, pero cuando a menudo no sabemos quiénes somos ósea cuál
es la palabra que completa nuestra oración la desconexión de lo que Dios quiere hacer contigo
es mortal, porque no se logra concretar su voluntad puesto que no conoces bien quien eres.

Hay una brecha muy grande entre lo que Dios quiere que seas y lo que creemos que somos
cada vez que nos miramos en un espejo. Entonces tenemos que detenernos en esa tercera
palabra que completa nuestra oración.

Bueno yo soy un estudiante relativamente bueno, no soy el mejor pero si bueno, soy terrible
para las tareas del hogar, soy un músico mediocre, yo soy un éxito, yo soy un fracaso, nuestra
tercera palabra podría ser una frase, una lista de cosas, un recuerdo, un trauma.

Yo soy un abusado. Entiendo que eso te robo el futuro, que te anclo al pasado, pero uno puede
llenar ese espacio sin preguntarse si estamos escogiendo bien esa palabra. Porque al fin y al
cabo terminan determinado nuestra existencia.

Ahora hablando de tu vida y la mía, quien tiene ese derecho de llenar ese espacio en blanco, tu
familia, tus amigos, tus circunstancias, quien llena ese espacio en blanco, a veces lo llenan
amigos ocasionales, pero en un bulling te dijeron eres estos y t quedo marcado durante toda la
vida, le dicen gordita, toda la vida y cuando alguien le pregunta quién eres rellenita. Se olvida
hasta como se llama, entonces quien le lleno el espacio en blanco, quien tuvo esa autoridad de
llenarte el espacio en blanco, porque esas palabras internas deciden el curso de tu existencia.
Vernos a nosotros mismo tal cual somos, y eso nos conecta a Dios, cambio mi manera de servir
Dios, cambio mi manera de relacionarme con los demás, cambio la manera en la que hago las
cosas y me gustan esos cambios, me gusta cómo me presento ante Dios, ya no hay tantas loas,
sino entro por otra puerta a su reino, mi protocolo para acercarme a el ha cambiado y no
porque me sienta menos sino porque descubro que Dios sabe que exactamente como soy y a
el no puedo engañarlo.
Si te preguntaran hoy quién eres, cómo te describes, ¿qué palabra utilizarías?
¿cuál sería tu carta de presentación? ¿Tímido? ¿Fracasado? ¿Alegre? ¿Esposo?
¿Doctor? ¿Divorciado? ¿Hispano? Tal vez te resulte difícil elegir una palabra para
describirte, porque somos complejos y, como las cebollas, tenemos muchas
‘capas’ que vamos descubriendo a lo largo de nuestro andar. Algunas de esas
capas nos agradan, otras no, pero todas son parte nuestra y van a definir la forma
de pararnos ante la vida. Reconozcamos y aceptemos nuestros defectos y
nuestras virtudes, porque Dios nos ama como somos, con todas nuestras capas de
cebolla.

Salmo 139, NVI

Dios nos hizo asombrosamente complejos. Dios es único capaz de conocer el corazón del
hombre completo…

Dios conoce todo acerca de ti y de mí, conoce las partes feas, las partes buenas, las partes
disfuncionales. Pero la buena noticia es que él tiene esperanza para ti, tiene un futuro para ti,
tiene pensamientos buenos para ti. Y te sigue amando a pesar de conocerte.

Conoce todas las capas. Y te ama igual.

Salmo 139 él sabía que ibas a tener una crisis, que lucharías por depresión, divorcio, corazón
rotos, todos los días estaban escritos, antes que un solo día pasara.

QUE PRECIOSOS SON TUS PENSAMIENTOS, que preciosos son los pensamientos que tienes
acerca de mí, esos pensamientos no se pueden enumerar. Ni siquiera puedo contarlos, suman
más que los granos de arena. Entonces si Dios tiene pensamientos acerca de ti y no te define
con una sola palabra, porque lo hacemos nosotros, porque una condición nos puede definir.

DIOS NO TE SIMPLIFICA

Dios no te etiqueta y te pone en una estantería, acá están los carnales, acá están los
espirituales. Dios no nos categoriza.

Dios conoce que somos complejos y nos entiende. Si innumerables son los pensamientos que
tiene de ti porque nos simplificamos con una solo frase.

Y Dios nos dice te hare libre de la CAUIVIDAD, y esa cautividad esta en la mente, la religión te
forma barreras mentales porque nos ensena normas que debemos cumplir para llenar
ciertas expectativas y de esta forma ocupar un lugar en el reino.

Oíste que fue dicho pero ahora yo digo…

No hay peor cosa que aprender lo que se aprendió mal. Y esas barreras mentales nos dicen no
puedes, no eres apto, no eres digno fallaste.
PERSONALIDAD, CARÁCTER, CIRCUSTANCIAS, CAPACIDAD, EMOCIONES, RASGOS, EDUCACION,
FAMILIA, CULTURA, SEXO, OCUPACION, ESPIRITUALIDAD

CUAL DE ESAS CAPAS DE DEFINE…

ESO NO TE DEFINE…

TU ERES HIJO DE DIOS.