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Caso EKMEKDJIAN c/ SOFOVICH

1. Analizar los criterios de interpretación a los cuales recurrieron los jueces para
fundamentar la decisión a la cual arribaron.
La mayoría de la Corte comienza haciendo un alegato en favor de la libertad de
expresión, que considera prioritaria para la formación de una opinión pública
independiente del gran poder adquirido por los medios masivos de comunicación,
sino de un eficaz desenvolvimiento de las relaciones entre gobierno y pueblo.
Estima asimismo, que la sociedad no debe depender de cualquier intento de
manipulación por parte de esta nueva fuente de poder nacido merced a la
revolución tecnológica y comunicacional del siglo XX.
Expresa la tensión existente entre dos derechos sustantivos: el derecho de
expresar las ideas en un marco de libertad y el derecho a la dignidad personal y al
honor, los cuales no deben contraponerse entre sí, por ser fundamentales para el
desarrollo de la autonomía personal.
Después pasa a la consideración del derecho de réplica, como una herramienta
tendiente a evitar y subsanar los abusos de los medios de comunicación y pone de
manifiesto su incorporación a las legislaciones provinciales, al derecho comparado
y sus correlatos en la legislación civil y penal.
Posteriormente, gracias al carácter de supra-legal que gozan los tratados
internacionales conforme lo dispuesto en la Convención de Viena, a la cual nuestro
país adhirió, desglosa el art. 14 del Pacto de San José de Costa Rica, dando gran
importancia al mismo y a su supremacía frente a las leyes dictadas por el Congreso.
Entiende que nuestro gobierno al haber ratificado el Pacto de San José de Costa
Rica se comprometió de acuerdo a lo dispuesto por el art. 1º de dicho Pacto a
legislar y amoldar nuestro derecho interno al mismo. Ante el vacío legislativo
estima posible que denuncias internacionales recaigan por dicho incumplimiento. Y
en tal caso, le toca a la Corte determinar sobre la operatividad del citado artículo del
Pacto, y de así estimarlo, interpretar los alcances que tiene el derecho de réplica
cubriendo la ausencia de legislación interna, de acuerdo a lo establecido en
Opinión Consultiva 7 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
La Corte arriba a la conclusión de que la norma del mencionado Pacto es operativa,
haciendo una interpretación literal del art. 14.1, de acuerdo al análisis del tiempo
verbal empleado.
Un tema importante a tratar es dirimir sobre la legitimidad que tiene la parte actora
para esgrimir este derecho. Con respecto a ello se la concede, fundamentando su
decisión en la falta de legislación en el orden nacional en la materia, en la
necesariedad de emitir pronunciamiento por primera vez debido a la trascendencia
de este derecho. Asimismo, considera que esta legitimación no puede ser tomada
como definitiva, sino que concede al demandante una legitimación provisional,
hasta tanto no se reglamente este derecho, por lo cual este instituto podrá ir
mutando a lo largo del tiempo.
A partir de allí la Corte esboza las reglas generales del derecho de réplica, a saber :
Que los intereses ideológicos deben ser tutelados.
Que el derecho de réplica es aplicable a toda persona que se vea afectada en sus
creencias personales por expresiones ilícitas contrarias y agraviantes a sus
sentimientos más profundos.
Que la ofensa sea sustancialmente grave y no una mera opinión crítica. Que sea
superficial y no argumentada.
Que el ofendido en materia de intereses ideológicos es el representante de la
opinión colectiva que se haya sentido ofendida por el mismo motivo.
Que la rectificación o respuesta tutela bienes de naturaleza civil y no políticos ni
electorales.
Que el primero en ejercer este derecho tiene primacía sobre el resto.
Que la vía del amparo es el medio más idóneo dada su naturaleza expedita.
Que el espacio de la respuesta de ningún modo debe ser igual en tiempo al del
hecho que motivó la misma, debiendo ser un espacio razonable de acuerdo a su
finalidad y además, gratuito.
La mayoría de la Corte concuerda en estas consideraciones sobre las formalidades
necesarias para ejercer de el derecho de réplica operativamente establecido en el
Pacto.
En cuanto a los votos disidentes, el de los jueces Petracchi y Moliné O’Connor
señalan que el derecho de réplica no es uno de los derechos implícitos del art. 33
de la Constitución Nacional sino que fue incorporado al derecho interno a través de
la ratificación llevada a cabo por nuestro país al Pacto de San José de Costa Rica, y
por lo tanto es operativo. Estiman que el apelante no tiene legitimidad al no haber
comprendido los alcances del derecho de réplica sentados en dicho Pacto, pues el
art. 14 del Pacto no incluye en su objeto ni en su contenido la réplica de ideas,
opiniones ni creencias, no tiene derecho a responder cualquier persona que se
sienta agraviada en sus más íntimos sentimientos, sino que está autorizada sólo
aquélla que en particular y directamente se vea afectada, resaltando la
intransferibilidad de dicho derecho.
Otra disidencia es la del Presidente de la Corte, Dr. Levene (h) que si bien coincide
en iguales argumentaciones, se ajusta exclusivamente a la letra del art. 14 del
Pacto, no haciendo lugar a la incorporación del derecho de réplica a los derechos
implícitos del art. 33 de nuestra Constitución.
En cuanto a la disidencia del juez Belluscio, que se aparta del resto, resta
operatividad al derecho de réplica según los términos del art. 14 del Pacto,
interpretando que cuando dicha norma hace referencia a “las condiciones que
establezca la ley” mientras tal ley no exista es ajeno a los órganos judiciales dicha
reglamentación, que es propia del Congreso Nacional, desechando por ello la
acción. Aún más, considera que en el caso de que fuera operativa, este caso no
encuadra dentro del derecho de réplica, pues Ekmekdjian no es el directamente
agraviado.
Resumiendo, los criterios que sustentó las Corte son : la preocupación ante el gran
poder que adquirieron los medios de comunicación masiva; los argumentos
favorables al art. 14 del Pacto de San José de Costa Rica y a considerarlo incluido
en nuestro derecho interno, así como el derecho de rectificación o respuesta (8
votos a favor sobre 9); el sustento que el derecho de réplica es operativo y por
ende, tutelable por el Poder Judicial; el hecho de que el Congreso no ratifica los
tratados internacionales sino que los aprueba o rechaza, pues es materia del Poder
Ejecutivo; que una ley del Congreso no puede derogar un tratado, sino que éste es
ratificado por el Presidente; que con este fallo se dejó de lado la vieja postura de
que un tratado no tiene mayor jerarquía que una ley; la cuestión de si el derecho de
réplica puede tener cabida en el art. 33 de la Constitución Nacional como derecho
implícito (voto Petracchi-Moliné O’Connor) ; la postura de que el art. 14 no incluye
en su objeto ni contenido la réplica de ideas, opiniones ni creencias (voto
Petracchi-Moliné O’Connor); el uso del amparo para efectivizar el derecho de réplica
(voto de todos los jueces

Caso Fayt
La modificación de la Reforma del 94 de la Constitución Nacional trajo consigo, como fastidioso
resultado, la modificación del art. 99 inc. 4 respectivo a las atribuciones presidenciales. Dicho
inciso dispuso que los jueces cesen en sus funciones al cumplir 75 años a menos que se encuentren
con sus facultades saludables y al cumplir esa edad necesitan que el PE con acuerdo de dos tercios
del Senado los renueve en sus funciones.
La cláusula transitoria undécima disponía que la duración limitada entraría en vigencia a los 5 años
de sancionada la reforma.
En el año 1999, Carlos Fayt, juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación , ya tenía 75 años al
momento de la reforma pero esperó hasta cumplido el plazo de 5 años dispuesto por la cláusula
transitoria undécima y decidió interponer una acción meramente declarativa (art. 322 CPCCN) para
superar el estado de incertidumbre sobre la existencia y alcance de la garantía constitucional de
inamovilidad de los jueces (art. 110 CN). Esta garantía establece que los jueces duraran en sus
empleos mientras dure su buena conducta. Existen diversas razones que alientan este principio.
Entre ellas podemos encontrar que la permanencia en el cargo alienta a juristas capacitados para
desempeñar tareas judiciales que rechazarían si ellas fueran de precaria duración y que la
estabilidad aparece como elemento vital para asegurar la independencia del Poder Judicial.

Los autos fueron caratulados “Fayt Carlos Santiago c/ Estado Nacional s/ proceso de
conocimiento”.
Fayt invocó la protección de su derecho y el respeto de la garantía de estabilidad y permanencia
vitalicia en su cargo.
Además no se había incluido en el “Núcleo de Coincidencias Básicas” la duración vitalicia de los
magistrados en sus cargos por lo que la Convención Constituyente se habría extralimitado en sus
funciones.
Podía ser reformado el el art. 86 inc. 5 (actual 99 inc. 4 sobre la atribución presidencial de nombrar
magistrados) pero de ninguna manera se incluyó el ex art. 96 (actual 110) sobre la garantía de
inamovilidad de los jueces.

La jueza del Juzgado Contencioso Administrativo No 7, María Carrión de Lorenzón, entendió que
la habilitación del Congreso Nacional a la Convención Constituyente no alcanzó a los jueces de la
Corte y declaró la nulidad del art. 99 inc. 4 en los términos del art. 6 de la ley 24309 (Declaración
de Necesidad de la Reforma).
La Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, sala III, revocó la sentencia del a
quo. Concluyó que la Reforma no fue nula en ese punto sino que la controvertida norma no era
aplicable al caso Fayt ya que la norma hace alusión a los magistrados que serán nombrados en
adelante. En pocas palabras, hace una interpretación literal del inciso en cuestión, se atiene a las
palabras de la ley.
La Procuración General de la Nación rechazó estos argumentos e interpuso recurso extraordinario
ante la CSJN. Sostuvo que no existe una línea divisoria entre magistrados federales nombrados
antes o después de la Reforma, no existen derechos adquiridos frente a la modificación de la norma
que otorgaba el ejercicio vitalicio del cargo. También aclara que la Reforma es válida y que la
duración limitada es una exigencia de carácter objetivo e impersonal.

Finalmente, La Corte resolvió declarar la nulidad de la reforma introducida por la Convención


Constituyente en el art. 99 inc. 4, párrafo tercero y en la disposición transitoria undécima.

Ahora llego el momento de plantear algunos interrogantes que tienen como centro de gravedad este
fallo. Entre ellos:

¿Los jueces tienen legitimidad para invalidar lo decidido por un órgano representativo del pueblo?
¿El Poder Constituido puede controlar al Poder Constituyente?

Límites del Poder Constituyente.

¿Es ético que los jueces no se hayan excusado por representar la presente cuestión una afectación
personal de sus empleos?

El tema del control de constitucionalidad de una reforma constitucional ha sido tratado previamente
en el precedente “Soria de Guerrero c/ Bodegas y Viñedos Pulenta Hermanos S.A.” en el año 63.
Los hechos del caso versan sobre una persona que fue despedida luego de ejercer su derecho de
huelga (art. 14 BIS CN) consagrado constitucionalmente en la reforma de 1957.
En el caso se plantea que el derecho de huelga al no quedar integrado válidamente por la
Convención Constituyente, su vigencia queda cuestionada. No se realizó una reunión posterior en la
que se debía aprobar el acta y la versión taquigráfica de dicha sanción.
El voto de la mayoría estableció que las facultades jurisdiccionales del Tribunal no alcanzan para
examinar el procedimiento de formación y sanción de las leyes. De modo contrario se vulneraría el
principio de la separación de atribuciones mejor conocido como división de poderes, explicado por
Montesquieu en “El Espíritu de las Leyes” como el sistema de frenos y contrapesos. Cada poder
debe ejercer sus facultades con libertad para poder controlarse mutuamente porque el poder
absoluto corrompe absolutamente.
La mayoría dispone que la facultad del Poder Legislativo de aplicar la Constitución Nacional dentro
de los límites de su legítima actividad es una cuestión no judiciable.
Sin embargo Boffi Boggero opina en su disidencia que si la Convención no cumplió con el
procedimiento, esa cuestión debería ser revisada no por el PE o el PL sino por el Poder Judicial. De
esta manera abrió la puerta a la doctrina utilizada en el caso Fayt.

Si la Convención Constituyente se excede de sus facultades privativas y atribuciones es del resorte


de la Corte juzgar los límites traspasados. Ningún poder puede arrogarse mayores facultades que las
que le hubiesen sido conferidas. Por lo tanto, es dable afirmar que hay cuestión judiciable.
Esta idea se desprende del considerando 11 que subraya el hecho de que no se modificó el art. 110
CN que reza que los jueces durarán en sus empleos mientras dure su buena conducta.
El Congreso, en su función preconstituyente había declarado la necesidad de la reforma y el alcance
de la revisión (puntos sujetos a la reforma) que la Convención debía tener en cuenta de acuerdo a lo
dispuesto por el art. 30 CN.
Si bien la Convención goza de facultades implícitas, estas no la habilitan a derogar, modificar o
agregar normas más allá de lo establecido en el art. 2 del Núcleo de Coincidencias Básicas (ley
24309).
Linares Quintana consideraba que el Poder Constituyente solo puede ser reformado por el Poder
Constituyente.
Sabsay considera peligroso que un órgano del Poder Constituido pueda dejar sin efecto en sucesivos
pronunciamientos otros puntos de la reforma de 1994.
Puede revisarse la legalidad y legitimidad de las reformas constitucionales pero este hecho puede
afectar la seguridad jurídica por las consecuencias imprevisibles que puedan traer en el futuro.
Frente a esta reflexión, Adrián Ventura opina que también sería peligroso que no existiese control
de la reforma puesto que este hecho traería consecuencias aún más imprevisibles.
Otro temor que surge es el del gobierno de los jueces a través de sus sentencias. Este hecho
vulneraría la división de poderes, principio republicano eminente.
Quizás la solución más justa sería crear un Tribunal Constitucional para controlar a la Convención
Constituyente.

Por otra parte, si no se hubiese declarado la nulidad del art. 99 inc. 4, estaríamos frente a la figura
del “juez a plazo” que debe negociar con el PE para que este remita el pliego al Senado y seguir en
sus funciones 5 años más. En este caso, el PE estaría manipulando al Judicial condicionándolo en
sus sentencias y vulnerando su independencia.

Respecto del punto de si fue correcto que los jueces no se hayan excusado, opinamos que estuvo
mal que no lo hayan hecho puesto que juristas con postura crítica han afirmado que fallaron en
causa propia ya que protegieron sus propios empleos y evitaron un perjuicio personal al declarar la
nulidad de la limitación de la estabilidad a los 75 años.
El Procurador General de la Nación argumentó que los jueces debieron excusarse ya que esa fue la
postura que adoptaron cuando se discutía la intangibilidad de los haberes de los jueces nacionales.
El único juez que se excusó fue Petracchi.
En nuestra opinión, es más que interesante la disidencia parcial de Bossert cuando expresa: “….tal
limitación no afecta la inamovilidad del juez Fayt puesto que el actor, nacido el 1º de febrero de
1918 ya había superado esa edad al sancionarse la reforma. La limitación del art. 99 inc. 4 alcanza
tanto a los jueces designados con posterioridad a la reforma constitucional como a quienes hemos
sido designados con anterioridad a dicha reforma pero impone como condición un hecho incierto y
futuro limitando su aplicación a quienes con posterioridad a la reforma cumplan 75 años.”
Esta postura no busca el beneficio propio como si lo hizo el resto de la Corte. De todas formas, en el
año 2005, el juez Belluscio tuvo un gesto muy noble al presentar su renuncia al cumplir 75 años
aduciendo que no podía sacar provecho de cómo se orientó su opinión en el caso Fayt.

Vale la pena aclarar las sentencias de la Corte son inter partes. Sus decisiones por importantes que
sean no implican derogación de normas erga omnes, no sustituyen al PL. Sin embargo, la autoridad
y el efecto ejemplificador hacen que las normas inconstitucionales no intenten aplicarse.

MADBURY VS. MADISON

Diciembre de 1801, William madbury, dennis Ramsay, Robert towsend Hooe y William Harper , a
través de su abogado Charles lee(ex ministro de justicia) solicitan al tribunal que ordenara a james
madison manifestar las causas por las cuales la corte debía abstenerse de exigirle la entrega de los
nombramientos en los que se designaban los jueces del distrito de paz de Columbia.

Hechos:
El señor Marshall enterado de esta petición, y Adams (ex presidente) elevo al senado las
nominaciones, el senado aconsejo y asintió las designaciones, y fueron firmadas por el presidente
y el sello de los EE.UU puesto por el presidente (en ese momento secretario de estado Marshall)
pidieron al Madison que les entregara las designaciones pero tuvieron resultado negativo.

Fue emitida una orden para que el secretario de estado diera los causas de sus conducta.
El 24 de febrero de 1803, la corte emite, conducida por el voto del presidente Marshall:

Orden para que el secretario de estado exhibiera los motivos por los cuales se le negaba Madbury
las desinacion como juez de paz del condado de Washington(Columbia).
No se dieron razones, entonces ahora la petición es dirigida a obtener un mandamiento de la corte

La corte considero y decidió las siguientes cuestiones:


1. tiene el solicitante el derecho al nombramiento?
Opinión de la corte:
Cuando un nombramiento fue firmado por el presidente y el sello de los EE.UU. puesto por el
secretario de estado, se considera hecha. Por lo tanto Madbury esta designado.
Como la Ley que crea el cargo le dio el derecho de ejercerlo por 5 años independientemente del
poder ejecutivo el nombramiento es irrevocable.
La retención de ese nombramiento es un acto no respaldado por la ley y violatorio de derechos
legitimos.

2. Si lo tiene y fue violado, ¿ofrecen las leyes del pais una reparacion?
El gobierno de los EE.UU. ha sido llamado un gobierno de leyes y no de hombres. No
merecería ese calificativo si no tuviese una reparación a la violación de las leyes.
Pero, existe algún motivo por el cual madbury deba abstenerse o exima de
investigaciones? El entregar o retener una designación, Es un acto político reservado al
departamento del ejecutivo supremo?
El examen de la legalidad de los actos de los titulares dependientes de PE dependen de la
naturaleza del acto.
Los actos de los funcionarios , son los actos del presidente, no existe ni puede existir poder
alguno que los controle. Las materias políticas, corresponden a la nación, no a derechos
individuales, la decisión del ejecutivo es terminante.
Los actos de ese funcionario dependiente del PE, no pueden ser nunca examinados por
tribunales.Pero cuando los derechos de los individuos dependen del cumplimiento de esos
actos deja de ser funcionario del PE, y pasa a ser funcionario de la Ley.
Por lo tanto, al dependender de derechos individuales vigentes…
La corte determina que Madbury tiene derecho a su nombramiento y la negativa
constituye un acto de violación de las leyes.

3. Es ese remedio un mandamiento que corresponda emitir a esta corte?


Depende de:
A)la naturaleza de la medida que solicita
Si la medida fuera concedida, debe dirigirse a un funcionario del gobierno y el contenido
consistiría en una orden de hacer algo, que atañe a su cargo y deberes y que la corte ya ha
determinado previamente(el mandamiento).
Para que el mandamiento surta efectos debe ser enviada al funcionario al cual pueda dirigírsele, y
la persona solicitante debe carecer de otro recurso legal especifico.
El funcionario al cual se dirige, esta relacionado a la política, tanto que hasta se duda que
corresponda llevar a cabo la investigación.
No es necesario que la corte renuncia a toda su juridiccion sobre esos asuntos.pero…
La competencia de la corte consiste en decidir a cerca de los derechos de los individuos, no en
controlar el cumplimiento de los poderes Ejecutivos ya que por su naturaleza constitucional están
reservados a decisión del PE no pueden ser sometidos a esta corte.

si uno de los titulares del departamento de estado comete un acto ilegal amparándose en su cargo
puede sostenerse que su cargo lo exime de ser juzgado y obligado a cumplir con la ley.

Como puede entonces exeptuarlo de la aplicación?


No es por el cargo que tiene, sino por la naturaleza de lo que se le ordene hacer que se juzga si es
pertinente el mandamiento.pero cuando su acto es encomendado por la ley y su incumplimiento
afecte los derechos individuales, corresponde emitir el mandamiento. Ya que no se especifica
quienes deberían abstenerse de hacerlo.
La corte dice: en este caso la corte puede emitir el mandamiento.

B)el poder de esta corte ¿puede esta corte emitir ese mandamiento?

La ley en los EE.UU que autoriza a la corte suprema a emitir mandamientos, en casos
comprendidos los principios y costumbres del derechos a cualquier tribunal o persona designada
en su oficio.
Pero…
Siendo el secretario de estado un funcionario bajo la autoridad del gobierno de EE. UU. Esta
previsto en dicha ley, y si la corte no esta autorizada a emitir una orden a ese funcionario, es a
causa de la inconstitucionalidad de La Ley, incapaz de dar una autoridad y asignar obligaciones.
La constitución deposita la totalidad del PJ en una corte suprema y tribunales.
Este poder se extiende al conocimiento de las causas.”en todos los casos concernientes a
embajadores, ministrosy consules extranjeros, la corte suprema ejercerá su jurisdicción originaria.

El PE tiene la competencia de asignar la competencia originaria en otros casos, que pertenezcan al


PJ.
Para esta corte pueda emitir el mandamiento debe demostrarse que se trata de un caso por
apelación.

El tribunal ha dicho que la jurisdicción apelada puede ejercerse en diversos modos, siendo la
voluntad del congreso que un mandamiento pueda ser emitido en jurisdicción apelada, debe
obedecer dicha voluntad.(para el mandamiento debe ser apelada no originaria).( Por apelación
abarca casos ya determinados, no los crea)

Por ser originaria dado que se ejecuta contra un ministro no corresponde a la corte. Y tampoco
esta contemplado en la constitución que deba autorizar el PE al PJ para que sea por apelación en
dichos funcionarios.
Esta voluntad originaria organiza el gobierno y asigna diversos poderes, fija limites que no pueden
ser transpuestos por otros poderes.ya que la ley, sale de una autoridad suprema.

La competencia y la obligación del poder judicial es decidir que es ley. Deben exponere interpretar
esa norma, si 2 leyes entran en conflicto el tribunal debe decidir la validez y aplicabilidad de cada
una.si ambas son validad la corte debe determinar cual gobierna el caso. Es la esencia de
administrar justicia. Si deben tener en cuenta la constitución y no la ley, la constitución debe regir
el caso.
El PJ. De EE.UU comprende puntos que versan sobre la constitución.
Pudo ser la intención de quienes concedieron ese poder afirmar que la consitucion no debía
atenderse?
En ciertos casos debe ser examinada e interpretada la constitución por lo jueces.
Entonces…deben cerrar los ojos los jueces y obedecer la ley?.si se les prescribe una regla de
prueba de la que no pueden apartarse.

Es claro que los constituyentes elaboraron este instrumento como una regla obligatoria para los
tribunales y la legislatura.

La terminología de la constitución de los EE.UU. confirma el principio que se supone esencial para
toda la constitución escrita de que la ley repugnante a la consitucion es nula y los tribunales como
los demás poderes están obligados por la constitución

Se rechaza la petición del demandante.


Declaro la inconstitucionalidad de la ley. Pero perdió Madbury.

Orfila

Se presenta a la corte un recurso extraordinario, para determinar si la orden de arresto de un


proceso criminal contra el Dr. Alejandro Orfila por un juez de la provincia de mendoza designado
por el comisionado federal a sido dictada por un juez competente.

La competencia del juez es deconocida


A)según e Art. 105 ni el poder ejecutivo ni el interventor están facultados para nombrar jueces en
la provincia intervenida
B) aunque la facultad fuere legitima los jueces carecerían de jurisdicción para conocer la causa de
delitos con anterioridad. De acuerdo a la garantía del art.18, nadie puede ser juzgado por la ley
antes del hecho, ni juzgado por comisiones especiales

Las provincias eligen sus jueces sin intervención del gobierno federal y solo se mueve dentro de los
casos delegados exclusivamente.regimen de poderes dobles y de reciproca independencia.segun
el Art. 5, el régimen gobierno federal debe garantizar el goce y ejercicion de sus instituciones a
cada provincia y el Art.6 que el gobierno federal solo interviene para garantizar la forma
republicana. Y el art 105 define y consagra la autonomía de las provincias.
La constitución argentina en su art 5. Garantiza 2 cosas: forma republicana de gobierno y el goce y
ejercicio efectivo y regular de las instituciones. En Argentina esta obligado el gobierno federal a
amparar a las provincias cuando la forma republicana ha sido corrompida.

Este poder del gobierno F para intervenir en el territorio de las prov. Ha sido implicitamente
conferido al congreso es a el a quien le corresponde y decidir si esta asegurada o bastardeada la
administración de justicia.ART 5
en la intervención a mendoza ordenada por la ley 11.460 es eso lo que se ha hecho, por haber
llegado el congreso a la conclusión de que no se cumplia las condiciones del art 5. , la declaro
intervida para restablecer la forma representativa republicana de gobierno. Y ordenado al
comisionado federal declarar la caducidad del PE, PL,PJ y autoridades municipales y sus
reorganizaciones.(art. 2)
la facultad que ejerció el congreso al sancionar la ley es de orden político y de incumbencia
política, la corte no esta autorizada para examinar los hechos de la decisión contenida en esa
ley(invadiría el campo del estado que les propio).
El poder que se le consedio por los art 5 y 5 a la nación presupone todos los medios que fuesen
necesarios siempre que no fuesen incompatibles con la Const. El art67(ult.inc) fáculta al congreso
para hacer las leyes y reglamentos convenientes para el ejercicio de los poderes.
Intervenir conlleva sustituir la autoridad local en representación de la nación asumiento toda la
autoridad para llegar a los fines de la intervención.
El interventor es un representante del Presidente de la republica obra en función nacional, para
cumplir una ley del congreso.ejerce los poderes expresos y transitorios de garantía y
reconstrucción. Su nombramiento no toma origen en disposición provincial ni están sujetos a ello
sus actos.
Es cierto que la ley no contiene norma de las facultades del interventor para las designaciones
pero no es menos cierto que promulgada la ley, el presidente debe cumplirla.
En referencia a la caducidad del poder judicial, provoca que la provincia quede sin funcionario que
resuelvan los procesos pendientes.pero la consecuencia de esta ley es la necesidad de proveer
cargos judiciales vacantes y saber a quien le corresponde hacer esas designaciones.
Las leyes reglamentarias y constitución provincial existen, pero no hay quien las ejecute!,
Podría decirse que el juez de sección de mendoza es competente? El art 3 inc 4 de la ley 48 se
refiere a los crímenes que se cometan en lugares donde el gobierno nacional tenga absoluta y
exclusiva jurisdicción. Es una competencia por el lugar que solo comprende los crímenes, aun
dentro de la posibilidad de esta solución quedarían excluidas de la competencia del juez federal
todas las causas civiles y comerciales.
Ni aun en la forma que el congreso uso su poder de jurisdicción en mendoza se puede decir que el
gob. Nacional tenga absoluta jurisdicción. El silencio de la ley, ante los procedimientos de
reorganización del PJ, se deduce que debe ser de acuerdo a la constitución provincial mientras no
se oponga a la nacional.

No hay mas solución que si PE debe cumplir con la ley y la provinciano puede quedar sin justicia
debe reconocerse el derecho del interventor para nombrar cargos judiciales.
Las provincias tienen esas atribuciones, pero lo resultante de la ley, en las modificaciones
judiciales no pueden ser hechas por los poderes de la provincia ya que están caducos.
Pero la ley incorpora las prescriciones de las leyes provinciales procesales, de organización y
competencia, de aplicación obligatoria para la comisión federal, siempre que no se opongan a la
constitución.la designación del interventor es para que asuman la jurisdicion pero de acuerdo a las
leyes de la provincia.
Por ello no se asume que las designaciones sean una violación del art 95 de la const. Ya que los
que imparten la justicia no es el PE sino sujetos designados y facultados para ello.dado su
designación por analogía.El inc 22 del art 86, faculta al presidente a llenar vaciones judiciales
durante el receso, por medio de comisiones que expiran en las siguientes legislaturas equivalente
al art 128.inc 22 de la const de mendoza.
Las facultades del interventor para renovar a los funcionarios judiciales han sido reconocidas en
otro fallo.
2-Habeas corpus
Se examina si los jueces nombrados carecen por su designación de competencia para considerar
delios con anterioridad a su designación.
Los autores del presente Habeas corpus, interponen que fueron sacados de los jueces designados
por ley antes del hecho de la causa con violación de la garantía del art. 18 Const.
La fecha de nombramiento del juez posterior al hecho delictuoso que se le imputa recurrente. Si la
garantía pudiese interpretarse en ese sentido los jueces, no tendrían competencia sobre los
procesos anteriores a su designación.la consecuencia seria que se habría que poner en libertad a
todos los presuntos delincuentes en los que no se hubiese fallado aun.y la intervención se
convertiría en una causa de anarquía.
Como existe en la provincia una organización legislativa previa reglamentaria de la función social.
Que definen la competencia de los jueces y mantienen vigencia.admitido el proveer cargos al
interventor no se diferencian a la jurisdicción y competencia. Los jueces designados están
investidos por jurisdicción que existía, antes del hecho y eso satisface la garantía del art 18.
Los jurados a los que se refiere el art 102 Const. Se designan con posterioridad al delito y no
podría inferirse sin contradicción que la institución lleva en si, un desconocimiento del art 18.

A)la competencia de los jueces designados es general y comprensiva de todos los habitantes de la
provincia, alejando la idea de comisiones especiales
b)los magistrados nombrados por el interventor bajo esta situación son los jueces propios o
naturales de los habitantes de la provincia intervenida para el caso de excepción del art 5 y 6 de la
const. En presencia de una ley como la 11.460, mediante la cual el gobierno ha reconocido la
necesidad de remover las causas que perturbaban el régimen federal y la administración de
justicia.
El remedio no puede consistir en negar o suprimir la facultad legal sino en la reglamentación
legislativa de la misma,que impida el predominio de intereses subalternos sobre el supremo de la
justicia y ley.queda librada al responsable arbitrio de la acción ejecutiva, y cabe confiar en que
armonizara cada dia mas eficientemente con los dictados de la razón publica. Como factores
esenciales de gobierno.
Bajo estas condiciones es evidente la incompetencia del juez federal de sección de la provincia de
mendoza para conocer en el presente recurso de habeas corpus, deducido por Fernando orfila a a
favor de su hermano Alejandro orfila.

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