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Universidad Nacional de Colombia – Departamento de Filosofía

Sfm. Leibniz – Profesor Gonzalo Serrano


Wilmer Hernández García – 17. 09. 19

Libertad e Imperfección (§40 - §60)

I. Dios como sustento ontológico, “Toda realidad debe fundarse en algo existente”
(T §184).
Leibniz ha presentado la existencia de Dios de tres maneras: a priori, a posteriori, y a
partir de la prueba de las verdades eternas. Todas ellas adjuntan a Dios como un ser necesario,
infinitamente perfecto y originario de las existencias y esencias. En los parágrafos 43 y 44
de la Monadología, Leibniz argumenta que toda posibilidad y existencia dependen de Dios1,
en este sentido, Dios no es solo el creador de todo sino también es el sustento de todo, es
decir, no puede existir nada sin Dios, pues de él depende todo. Una manera de verlo, es la
preocupación por un fundamento del todo que sea existente y actual (M §44), pues siguiendo
esta línea, el que Dios sea intermitente o dejara de existir, significaría que la existencia se
vería afectada.
Ahora bien, una segunda preocupación es que las verdades eternas tengan el mismo status
que Dios, pues aquellas seguirían existiendo a pesar de que Dios no lo haga2, no obstante, al
contrario, que las verdades eternas dependan de Dios significaría que estas serían arbitrarias
según su voluntad ¿Cómo logra solventar Leibniz este problema?

II. ¿Pueden las criaturas ser libres? Grados de libertad y perfección


Desde el parágrafo 47, Leibniz da cuenta de que Dios es el único ser que puede crear,
destruir o derivar Mónadas, pues en él hay la Potencia, el Conocimiento y la Voluntad, cuyas
facultades son infinitas y perfectas. Más aún, Leibniz introduce una analogía: “Y esto es lo
que corresponde a lo que en las Mónadas creadas realiza el Sujeto o Base, la Facultad
Perceptiva y la Facultad Apetitiva” (§48). No es muy claro a qué se refiere Leibniz con estas
facultades, sin embargo, Rescher nos dice que las facultades de Dios también están presentes
en las criaturas, pero en estas últimas están presentes de manera limitadas mientras que en
Dios de manera ilimitada (LM, p168):

Dios Monadas
Potencia Realidad (ser)
Conocimiento Facultad Perceptiva
Voluntad Facultad Apetitiva

1
Véase: “Sin Dios, no sólo no habría nada existente, sino que tampoco habría nada posible” (T, §184).
2
Esta es una preocupación que extrae Leibniz de Bayle, pues le preocupa que dichas verdades por su
regularidad sean extraídas tan solo de la naturaleza, y por ello la naturaleza esté guiada sin la necesidad de Dios.
En este sentido las diferencias no son de tipo sino de grado, es decir, las criaturas y Dios
compartes estas mismas facultades en grados distintos. En lo que sigue, en el parágrafo 49
de la Monadología, Leibniz coordina la perfección de las Mónadas con la Acción, y la
imperfección con la Pasión de forma proporcional, de esta forma, entre más perfecta es una
mónada mejores perfecciones tendrá, contrariamente a si es más imperfecta. Aún más, en lo
que sigue dice Leibniz que “una criatura es más perfecta que otra, cuando se halla en ella
algo que valga para dar razón de lo que ocurre en otra” (M §50) lo que es una implicación de
que Dios, siendo lo más perfecto, sea el creador de todas las mónadas, en ése sentido, las
mónadas más cercanas a Dios, son las más perfectas, y las más lejanas las más imperfectas
pues Dios da razón de todo.
De acá surge el problema de la libertad en las criaturas, pues si ellas son casi tan perfectas
como Dios, entonces estarían determinadas a obrar de manera muy semejante a él, mientras
que si no, estarían propensas a obrar de otras maneras. Ahora bien, en la argumentación del
mejor de los mundos posibles, Leibniz afirma que Dios va a buscar la máxima perfección
posible, esto es, el mundo con más grado de perfección, sin embargo, es claro que si
suponemos un mundo totalmente perfecto, no habría libertad pues actuaríamos conforme a
Dios3, pero gracias a la imperfección de las Mónadas, pues estas son limitadas, existe la
libertad de la forma ‘no estoy actuando por la conveniencia de Dios’. En la Teodicea, Leibniz
argumenta:
Dios produce la criatura en conformidad a la exigencia de los instantes precedentes, según
las leyes de su sabiduría, y la criatura obra en conformidad con esta naturaleza que él le da
creándola siempre. Las limitaciones e imperfecciones nacen aquí de la naturaleza del sujeto
que limita la producción de Dios; es la consecuencia de la imperfección original de las
criaturas; pero el vicio y el crimen nacen por la operación interna libre de la criatura, en
cuanto puede tener lugar en el instante mismo, y que se hace notable por la repetición. (T
§388, énfasis agregado)

El problema es que la libertad estaría ligada a la imperfección y al pecado ¿Cómo


soluciona esto Leibniz? Para ello tendremos que analizar muy de cerca qué entiende Leibniz
por libertad.

III. El mejor mundo posible y el determinismo


El determinismo se ve involucrado dentro de la argumentación sobre el mejor de los
mundos posibles, pues como sólo puede existir uno condicionado a lo que Dios conviene en
grados de perfección (M §53 - §54), entonces las mónadas estarán dispuestas todas a la vez4
para que sea posible que “cada substancia simple tenga relaciones que expresen todas las
demás”5 (M §56).

3
Esto si las en las mónadas no pudiera existir perfección.
4
Véase: “[…] del cual (de Dios) son producidas todas las Mónadas creadas o derivadas” (M §47).
5
Esto también porque en las Mónadas los cambios son dados por un principio interno y no por una causa
externa (M §11).
De esta forma, el modelo del mundo que produjo Dios no puede ser modificado a potencia
y voluntad de los hombres6, pues Dios no solo crea las Mónadas, sino que las fija en
relaciones determinadas desde el principio. En este sentido ¿dónde se encuentra albergada la
libertad?
He observado que estas opiniones, que pueden causar mucho daño, han sido sostenidas,
apoyándose particularmente en nociones confusas tocantes a la libertad, a la necesidad y al
destino; esto me ha movido más de una vez a tomar la pluma para aclarar puntos tan
importantes, y finalmente me he visto obligado a condensar mi pensamiento sobre todas
estas materias tomadas en conjunto, y darlo a conocer al público. Este es el objeto del
ensayo presente sobre la bondad de Dios, la libertad del hombre y el origen del mal. (T
prefacio)

La intención de este esquema, es darle importancia a la concepción de libertad y


determinismo de Leibniz, y sobre todo, analizar de qué forma Leibniz puede responder y
solucionar todos estos problemas.

Bibliografía:
- Leibniz Gottfried
(M) Monadología en Aguilar Argentina S. A de Ediciones. Editorial Orbis, Argentina (1983)
(T) Teodicea ensayos sobre la bondad de dios, la libertad del hombre y el origen del mal. Edición
digital disponible en: http://www.ignaciodarnaude.com/espiritualismo/Leibnitz,Teodicea.pdf

- Rescher Nicholas
(LM) G. W. Leibniz's Monadology An Edition for Students. University of Pittsburgh Press (1991)

6
Véase: “Y los compuestos están de acuerdo con los simples […]” (M §61). “[…] aunque cada mónada
creada representa el Universo entero, representa más distintamente el cuerpo que le afecta particularmente”
(M §62).

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