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Licuefacción de Arenas

En aquellos sitios donde el terreno está constituido por depósitos limosos y/o
arenosos de espesor considerable, poco consolidados, con nivel freático a pocos
metros de profundidad y cercanos a zonas generadoras de sismos someros de
magnitud moderada o grande, puede presentarse el fenómeno de licuación de
arenas.

Se habla de la licuefacción de un suelo o también llamada en algunos


países licuación de suelos cuando el terreno pierde su resistencia al corte y por
tanto se comporta como un líquido debido a que se desarrollan presiones
intersticiales de forma rápida (sin drenaje) Este fenómeno ocurre cuando la
presión del fluido contenido en los espacios intergranulares aumenta
repentinamente como consecuencia de la presión inducida por el paso de ondas
sísmicas, haciendo que el contacto entre los granos disminuya a tal grado que el
cuerpo sedimentario llega a comportarse, por unos instantes, como un líquido
denso.

Lo anterior ocasiona deslizamientos en laderas o que los edificios pierdan la


verticalidad en mayor o menor grado aunque sin sufrir, en muchos casos, daño
considerable en su estructura (figura 3.3).

Condiciones licuefacción suelos

Además del tipo de terreno, para que se produzca este fenómeno, el nivel freático
debe encontrarse cerca de la superficie, la compacidad de los materiales suele ser
baja (NSPT<20) y la intensidad del terremoto alta.

Concretamente, según González De Vallejo, 2002, se pueden establecer las


siguientes circunstancias desencadenantes de este fenómeno:

 Sismos de magnitud igual o superior a 5,5, con aceleraciones superiores o


iguales a 0,2g.
 A partir de los 15 m de profundidad no se han conocido fenómenos
de licuefacción en suelos.
 El nivel freático, en la mayoría de los casos en los que se ha presentado la
licuefacción se encontraba a poca profundidad, inferior a 3 m; por debajo de
los 5 m de profundidad, la susceptibilidad a la licuefacción es muy baja.

De modo general, las propiedades que caracterizan a los suelos licuefactables


(González de Vallejo, 2002) son las siguientes:

 Grado de saturación del 100%.


 Diámetro medio D50 entre 0,05 y 1,0mm.
 Coeficiente de uniformidad Cu=D60/D10<15.
 Contenido en finos inferior al 10%.
 Bajo grado de compactación, es decir NSPT<10 para profundidades <10m y
NSPT<20 para profundidades >10m.

O según Wang, 1979, los suelos con las siguientes propiedades:

 Tamiz 0,005 mm ≤ 15%


 Límite líquido LL ≤ 35%
 Humedad natural w ≥ 0,9 LL
 Índice líquido IL ≤ 0,75 (Puedes calcular el índice líquido en el enlace).

Métodos para estimar la susceptibilidad a la licuefacción

Existen numerosos métodos en la bibliografía científica para determinar


la susceptibilidad a la licuefacción. A continuación, se muestran los más utilizados:

2.3.1 Métodos Empíricos.

Se han desarrollado varios procedimientos empíricos para predecir el potencial de


licuación de depósitos de suelo saturado. Muchos de estos métodos fueron
desarrollados inicialmente por el profesor Seed y sus colaboradores durante la
década de 1970 en la Universidad de Berkeley, pero otros investigadores también
han hecho importantes aportes en este campo.

Los métodos empíricos se basan en comparar sitios donde se ha presentado


sismos, y en los cuales ha ocurrido y no ha ocurrido licuación. El potencial de
licuación es calculado cualitativamente y correlacionado con una propiedad del
terreno. A continuación presentaremos una breve descripción de estos métodos:

Métodos basados en la observación y el registro de casos donde se ha


manifestado el fenómeno de licuación

• Kishiba [Kishiba, 1970], con base en los datos obtenidos en tres sitios donde
ocurrió licuación estableció un criterio para determinar bajo sismos de igual
magnitud, sí puede ocurrir licuación cuando el nivel freático está cerca de la
superficie y las características granulométricas satisfacen las relaciones:

0.074mm < D50 < 2mm y Cu < 10


Además se debe cumplir que el estrato de suelo no licuable, arriba del estrato
licuable sea menor de 8 metros y que las relaciones entre las profundidades de
estos sea menor de 1. También estableció que los suelos no son susceptibles a la
licuación si las presiones efectivas de confinamiento son mayores de 200 kPa y la
densidad relativa es superior al 75%.

• Ohsaki [Ohsaki, 1966], también estableció que los suelos con nivel freático
cercano a la superficie pueden licuarse si:

0.2mm < D60 < 2mm y D10 < 0.1mm

Adicionalmente establece que estos suelos tendrán poca probabilidad de licuarse


si el número de golpes en ensayo de penetración estándar es mayor a 2 veces la
profundidad del depósito, considerada en metros.

• Floring e Ivanov [Floring & Ivanov, 1973], desarrollaron un criterio que permite
estimar la susceptibilidad a la licuación de suelos por medio de pruebas de campo,
que consiste en investigar los 10 metros superiores de suelo haciendo explotar
sucesivamente tres cargas de dinamita de 5 Kg, colocadas a una profundidad
media de 4.5 metros y determinando después de cada explosión, el asentamiento
promedio de la superficie dentro de un radio de 4.5 metros. La cantidad y
profundidad a la que se coloca el explosivo se eligen de forma que no haya
expulsión del suelo durante la explosión. Si el asentamiento promedio es menor de
8 a 10 cm y la relación de asentamientos entre explosiones sucesivas es menor
que 0.6 se puede afirmar que ese suelo no es susceptible de licuarse.

Método de Seed e Idriss, 1971

Las investigaciones de Seed e Idriss [Seed et al., 1975], les llevaron a proponer un
procedimiento semiempírico para la determinación de la susceptibilidad de
licuación de arenas sueltas saturadas basados en la observación y registro de
casos donde se ha manifestado el fenómeno, así como en la evaluación de la
condición de los materiales arenosos a partir de los resultados de ensayos de
penetración estándar y de las tensiones cortantes inducidas en la masa de suelo
durante un sismo (este método se explica y utiliza en el capítulo 8). El método
originalmente se desarrolló con base en la prueba SPT pero luego fue modificado
usando ensayos de cono eléctrico. El método modificado consiste en:

— Medir la resistencia a la penetración estableciendo correlaciones entre las


resistencias a la penetración estándar y la medida en el cono eléctrico
(penetración estática). Se pueden utilizar las correlaciones propuestas por
Schmertmann [Schmertmann, 1977], y las correcciones de qc, en función del
estado de tensiones efectivas propuestas por Seed, Idriss y Arango [Seed et al.,
1983], tales como:

𝑄𝑐 = 𝐶𝑞 𝑞𝑐

Donde 𝑄𝑐 es la resistencia por punta del cono eléctrico


Qc es la resistencia normalizada
Cq es el factor de correción obtenido en siguiente la figura:

Estimar el estado inicial de tensiones así como las tensiones de corte inducidas τ
prom, por un sismo mediante la expresión:
— Definir por comparación estadística si el suelo es susceptible de licuación, o
bien aplicando un τ prom a probetas de laboratorio en triaxial cíclico.

— A partir de las investigaciones de campo, estos autores lograron recopilar


información que permite definir para sitios y profundidades particulares, la
resistencia sísmica normalizada τ σ0 0 y la resistencia modificada Qc,
distinguiendo entre depósitos que sufrieron licuación y aquellos en los que no se
presentó el fenómeno.

Método de Youd e Idriss, 2001.

Posteriormente el método de Seed e Idriss fue revisado. En este caso para


determinar la susceptibilidad a la licuefacción de suelos se requiere el valor de
CSR esfuerzo cortante cíclico de un suelo ejercido por un sismo y el valor de CRR
que es la capacidad del suelo de resistir dicho esfuerzo.

El valor de CSR se obtiene de forma igual a la expresión anterior, pero


considerando que el valor de rd se calcula como:

rd = 1,0 – 0,00765z para z ≤ 9,15 m

rd = 1,174 – 0,00765z para z ≤ 9,15 m

En cuanto a el valor de CRR puede ser obtenido a partir del piezocono CPT, del
SPT o de la velocidad de las ondas Vs.

Una vez obtenido el valor del CSR y CRR puede conocerse si un suelo es
susceptible a la licuefacción para distintos contenidos en finos y valor de (N1)60 y
para un terremoto de magnitud 7,5 según el siguiente gráfico.
Métodos Numéricos
Existen básicamente tres formulaciones para analizar la licuación de suelos y las
consecuencias sobre la estabilidad de las estructuras de tierra. Estas
formulaciones se pueden categorizar como:

• Formulación desacoplada en tensiones totales:

— Método lineal equivalente - tensiones totales

— Método lineal equivalente - generación y disipación de presiones de poros.

• Formulación semi-acoplada en tensiones efectivas

• Formulación acoplada en tensiones efectivas

A continuación presentaremos una breve descripción de las anteriores técnicas


numéricas.
Formulación desacoplada en tensiones totales

Dentro de la formulación desacoplada se distinguen dos formulaciones, en primer


lugar el método lineal equivalente, y en segundo lugar el método lineal equivalente
con generación y disipación de presiones de poros.

Método Lineal Equivalente Este método de análisis ha sido ampliamente


utilizado en programas tales como el SHAKE, QUAD-4, LUSH y FLUSH. La
hipótesis fundamental del método lineal equivalente, es que la respuesta no lineal
puede ser aproximada de manera satisfactoria por un modelo lineal elástico
amortiguado si las propiedades del modelo son escogidas apropiadamente. Las
propiedades tensión-deformación, son definidas por un par de curvas que
representan la degradación del módulo de corte secante con la deformación y la
variación del amortiguamiento con la deformación.

Aproximación de las curvas tensión de Variación del módulo de corte y el


corte-deformación de corte en el amortiguamiento con la deformación de
modelo lineal equivalente corte

Debido a que al inicio de los cálculos el nivel de deformaciones no es conocido, se


acostumbra utilizar un nivel de deformaciones correspondiente al 60% del máximo
valor.

El SHAKE en particular, analiza la respuesta de un sistema suelo-roca formado


por capas horizontales y sometidas a la incidencia de una onda vertical de ondas
sísmicas S. También supone que el comportamiento cíclico del suelo puede
aproximarse por medio de un modelo lineal equivalente. El análisis lineal
equivalente de la respuesta del suelo se representa en la figura 2.11. El depósito
del suelo está formado por N estratos de suelo, horizontales e indefinidos, de
espezor hi y con unas características de cada estrato: densidad, módulo de corte y
la relación de amortiguamiento (relacionable con la viscosidad). La ecuación
unidimensional del movimiento asumiendo un material tipo Kelvin-Voigth, está
dada por la siguiente expresión:

Método Lineal Equivalente-Generación / Disipación de presión de poros


Debido a que el método lineal equivalente no es directamente aplicable a suelos
saturados, se acostumbra acoplar los cálculos numéricos con los resultados de
ensayos triaxiales cíclicos no drenados donde se presentó licuación. El
procedimiento consiste básicamente en determinar la historia de tensiones de
corte en el tiempo, para diferentes puntos del sistema, asumiendo para ello una
condición no drenada. Posteriormente, la historia de tensiones de corte en un
punto determinado del sistema es convertida a un número equivalente de
tensiones de corte cíclicas (Neq), y comparada con las tensiones de corte cíclicas
requerida para causar licuación en muestras de laboratorio, esto para las mismas
condiciones de tensiones iniciales encontrada en el campo. Estos resultados son
utilizados para considerar la estabilidad de taludes y presas, o para encontrar la
susceptibilidad a la licuación de un depósito arenoso.

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