Está en la página 1de 1

La falacia de la predicción: el entorno no puede predecirse con

exactitud; puesto que el futuro del entorno depende del


comportamiento de los competidores, éste es intrínsecamente
impredecible. La falacia de la independencia: la formulación de la
estrategia no puede separarse del proceso de dirección; un
departamento de planificación no puede captar toda la
información necesaria para la formulación estratégica; sólo los
directores manejan algunos de los datos críticos que captan
mientras dirigen. La formulación de la estrategia no es un proceso
formal periódico cuyo resultado es un documento estratégico. La
estrategia debe combinar la formulación formal de la estrategia y
los elementos que surgen en la práctica de la dirección y, por ello,
está continuamente evolucionando.

Por último, la falacia de la formalización: aunque los


procedimientos formales para la formulación estratégica tienen la
ventaja de la sistematización, son insuficientes para hacer frente a
los cambios permanentes en el entorno; para ello, las
organizaciones precisan de los sistemas informales y deben
promover el aprendizaje juntando el pensamiento y la acción.

También podría gustarte