El objetivo de esta práctica fue obtener de manera experimental un jabón elaborado
a través de un proceso de saponificación, para ello se realizaron dos pruebas; la
primera fue realizar el proceso con carbonato de sodio y aceite de ricino, el resultado fue no obtener la saponificación requerida a cambio de eso de obtuvieron pequeños cristales brillantes de carbonato de sodio. El segundo proceso fue ahora con manteca de cerdo e hidróxido de sodio para lo cual se observaron características como la generación de espuma, el poco tiempo de cuajado y la consistencia solida después del lavado acido; esto hace que el segundo jabón obtenido sea más viable para una producción.