Exposición: segunda parte

El que las cámaras digitales posean un fotómetro o exposímetro

incorporado es, respecto de la fotografía analógica, un gran beneficio. Más allá de
que la medición realizada por éste sea sobre la luz reflejada por los objetos a
fotografiar, a diferencia del fotómetro externo que puede generarnos una medida
de la luz incidente sobre los objetos; el poseer un fotómetro o exposímetro
incorporado facilita al fotógrafo la medición de una exposición correcta en
cualquier momento.

Este beneficio, sin embargo, puede llevarnos en algún momento a cometer

ciertos errores de exposición que cambiarían considerablemente el resultado final
de la fotografía. Para evitar esta posible falla, es necesario conocer el
procedimiento mediante el cual el fotómetro incorporado genera la medición de la
luz.

Funcionamiento del fotómetro o exposímetro

Como dijimos en la clase anterior, el fotómetro o exposímetro posee un

conjunto de sensores que miden la cantidad de luz que reflejan los objetos o
sujetos que están encuadrados en la fotografía. Luego de percibir esta
información, hace un promedio producto del cual establece cuándo la imagen tiene
demasiada luz, y cuándo tiene muy poca luz.
 Para hacer este promedio, el fotómetro o exposímetro viene programado
(calibrado) para responder ante una medición de reflectancia estándar de los
objetos y sujetos. Ésta es conocida como el gris medio.

La mayoría de las escenas a fotografiar (paisajes, retratos, objetos de

colores) tienen un nivel de reflectancia que, promediado, se acerca al 18%. Por
eso, el exposímetro viene programado para medir el nivel de exposición de la
imagen en base a ese 18% de reflectancia. Sin embargo, en algunos momentos,
habrá escenas particulares cuya reflectancia sea mayor o menor a la estándar, y
por ello, la medición que hará el exposímetro no será necesariamente correcta.

Por ejemplo, si el fotógrafo quiere tomar una fotografía donde haya mucha
nieve, como la reflectancia del blanco dominante de la nieve es superior al 18%, el
fotómetro o exposímetro de la cámara seguramente nos dirá, tras hacer la
medición, que la imagen está sobre expuesta; y nos pedirá que le bajemos uno o
dos pasos en la escala de exposición para llegar al 0. No obstante, al llevar el
exposímetro a 0 y tomar la fotografía, el resultado será un blanco que ya no es
blanco, sino gris. Esto es producto de que la cámara no sabe qué objeto tiene en
frente, y por ello, mide la exposición en base al 18% de reflectancia de un gris
medio. Es decir, la cámara “consideró” que había demasiada luz cuando en
realidad la exposición era correcta.
 Esto mismo pasa cuando el fotógrafo se plantea capturar escenas con
dominancia negra, como por ejemplo, el cielo nocturno. En este caso, al medir la
exposición, la escala nos marcará uno o dos puntos negativos. Nos pedirá
entonces llevar la exposición al cero (0). Si lo hacemos y luego tomamos la
fotografía, el negro ya no será negro, sino gris. Esto ocurre por la misma razón. El
fotómetro o exposímetro “consideró” que había menos luz reflejada de la que en
realidad había, y por ende, así lo expresó a través de la escala. Al hacerle caso, el
fotógrafo en realidad aumentó en demasía la exposición de la imagen, llevando el
negro a gris. Es decir, en vez de corregirla, la sobre expuso.

Escenas con mayor reflectancia que el 18% del gris medio

Aunque es sólo una aproximación, y el gris medio (18%) aplica en la

mayoría de escenas o motivos a fotografiar, el fotógrafo se puede encontrar con
escenas cuya reflectancia excede la estándar. Éstas pueden ser:

 Nieve en día soleado

 Arena de playa en día soleado
 Pavimento en medio día de verano
 Superficies predominantemente blancas

Escenas con menor reflectancia que el 18% del gris medio

Éstas, aunque son menos recurrentes que las de mayor reflectancia,

generan el mismo error que las anteriores, sólo que en sentido inverso. Es decir,
generan que el fotógrafo sobre exponga la fotografía, llevando el negro a gris.

 Noches con poca iluminación

 Objetos o escenas predominantemente oscuras

Soluciones

Cuando exponemos correctamente (en 0) una escena con mucho brillo, y

nos da como resultado un gris, la solución más inmediata es sobre exponer la
imagen 1 o 2 pasos. Es decir, llevarla al +1 o +2. Esto será el equivalente de
decirle a la cámara que estamos fotografiando una superficie de mayor
reflectancia que el 18% del gris medio.
 No obstante, la forma más exacta y correcta de solventar este problema es
realizando la medición de la luz de la escena sobre un cartón de gris medio al 18%
de reflectancia. Es decir, bajo las mismas condiciones lumínicas que inciden sobre
la superficie blanca, superponer un cartón en gris medio al 18%, y será justo en
ese momento cuando se haga la medición y se buscará lograr la exposición
correcta (0). Luego de lograr la exposición correcta sobre ese cartón en gris
medio, le retiraremos de la escena, y aunque ahora el fotómetro nos señale una
ligera sobre exposición, sabremos que es producto del exceso de reflectancia de
la superficie blanca respecto del gris medio al 18%; por tanto, omitiremos esa
medición y tomaremos la fotografía. El resultado final será un color blanco que
realmente se vea blanco.

Cuando exponemos correctamente en (0) una escena oscura, y el resultado

de ello es que los negros se conviertan en grises, la solución más inmediata será
que sub expongamos en uno o dos puntos. Es decir, descender en la escala del
fotómetro, desde el 0 hasta el -1 o -2. Esto nos dará como resultado un negro
realmente negro.

Sin embargo, al igual que en el caso de la superficie con mayor reflectancia,

la solución más precisa sería exponer correctamente sobre un cartón gris medio al
18%, que debe estar superpuesto sobre la iluminación que incide sobre la escena,
y que por ende, reflectará el 18% sobre el cual promedia la cámara. Al retirarlo, el
fotómetro indicará seguramente una sub exposición de uno o dos pasos, sin
embargo, debemos omitir esa medición y tomar la fotografía. De esta forma se
conservará el tono negro de las superficies encuadradas.

Tipos de medición

Aunque viene programado para elaborar un promedio de cantidad de luz en

base a una reflectancia del 18%, los sensores del fotómetro tienen la capacidad de
hacer la medición sobre distintos puntos de la imagen. De esta forma, cuando en
la misma imagen se encuentran distintas iluminaciones, el fotógrafo puede decidir
sobre qué puntos específicos de ésta se hará la medición.

La medición del fotómetro o exposímetro puede ser:

 Puntual
 Parcial
 Evaluativa
 Promediada ponderada al centro
 Medición puntual

En este tipo de medición, la cámara sólo se ocupará de medir y promediar

la exposición de un espacio reducido de la imagen; equivalente a un radio del 3%
de ésta. En la mayoría de las cámaras este espacio reducido es el centro de la
imagen, sin embargo, en algunas cámaras, se puede escoger el punto de
medición en cualquier punto a lo alto y ancho del encuadre.

Se puede usar cuando en el encuadre el motivo principal de la fotografía se

encuentra en un espacio reducido; y además, cambie drásticamente su
iluminación respecto del resto del encuadre. Ejem (hombre iluminado sobre
escenario negro)

Medición parcial

Al igual que la medición puntual, la medición parcial toma un espacio

determinado de la imagen, y en base a él, genera un promedio de la cantidad de
luz tomando como base el gris medio; sin embargo, el espacio sobre el cual toma
el promedio es de un diámetro mucho mayor que la medición puntual.
 Se puede usar cuando el motivo principal de la fotografía se encuentra en el
medio del encuadre, ocupando un espacio considerable de toda la imagen, por
ejemplo, en un retrato.

Medición evaluativa

En este tipo de medición, el sensor toma información de distintos puntos

colocados estratégicamente por todo lo alto y ancho de la imagen, y con esta
información, genera un promedio general sobre la cantidad de luz presente en la
imagen, esto, en base a la reflectancia del gris medio.
 Es quizá la más usada por cámaras digitales compactas, y se aplica cuando
se pretende fotografiar paisajes con varios tipos de iluminación; esto, siempre y
cuando nada esté excesivamente iluminado o en exceso carente de iluminación.
En este caso, le será prácticamente imposible hacer una medición correcta, pues
se presentarán los problemas con los grados de reflectancia.

Medición promediada ponderada al centro

En este caso, la medición que realiza el fotómetro da preponderancia al

centro de la imagen (puntual), pero sin dejar de medir el resto de la imagen
(evaluativa). Así logra generar un promedio de exposición capaz de medir distintas
iluminaciones.

Por ejemplo, la fotografía de unas velas y con un fondo de lámparas

artificiales.