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ENFOQUE FENOMENOLÓGICO

TÉCNICAS GESTAL - NIÑOS

1. Técnica: Fantasía guiada

Se le describe al niño una historia, un paisaje, o diferentes imágenes que le ayudarán a focalizar su atención sobre lo
que estamos contando.

Permite trabajar con los niños diferentes aspectos en función del contenido de las mismas: enfados, pesadillas,
dolores, preocupaciones, miedos irracionales, autoestima, contacto con sus emociones o cualquier aspecto con el
que el niño necesite tomar conciencia en ese momento

Estructura:

 Prepara el momento

 Respiración: Sentado en posición cómoda, haz que el niño centre su atención en la respiración.

 Concentración: Antes de empezar la fantasía guiada puedes recurrir a una especie de preámbulo que indique
al niño que tras el mismo comenzará la historia. Dejaremos unos segundos de espacio para que el niño
pueda situarse mentalmente en la situación que le hemos descrito.

 Fantasía guiada: Es la historia a través de la cual vamos a guiarle durante la relajación. Algo que puede
hacerse es llevarlo siempre a un jardín especial en el que haya elementos familiares para él con elementos
recogidos de otras fantasías anteriores.

 Actividad Posterior: Puedes invitar a que el niño haga un dibujo o escriba sobre lo que ha visto o descubierto
durante la fantasía guiada.

 Puesta en común: Si el niño así lo desea, pueden hablar de la experiencia, qué ha visto y sentido.

2. La Bandeja de Arena

La arena es un medio maravilloso para trabajar con niños de toda edad. Usarla como medio terapéutico no es ninguna
novedad.

Margaret Lowenfeld, en Play in Childhood (El juego en la infancia), describe los méritos del juego con arena y menciona
brevemente la bandeja de arena, una bandeja de 46 x 69 cms., con un borde de 5 cms. de alto, hecha de madera y con
un forro impermeable.

Lowenfeld usaba la bandeja de arena en conjunto con lo que llamaba material "del mundo": objetos representativos
de la vida real. Muchos terapeutas jungianos utilizan la técnica de la bandeja de arena tanto con adultos como con
niños. Se usan muchos objetos pequeños y juguetes que se prestan para significados simbólicos específicos. La escena
de la bandeja se mira como una secuencia onírica, y a menudo se toman fotografías del trabajo sobre la bandeja
durante un período de tiempo con el objeto de observar, a través de las fotos, el avance de la terapia.

Se compra un saco de arena blanca fina y se usa dentro de un recipiente plástico de menos de 61 cms. por lado,
diseñado originalmente como lavapiés. La bandeja está puesta sobre una mesa baja de plástico y un pasillo plástico
debajo para recibir cualquier derrame de arena. En las repisas hay canastos que contienen muchos artículos (detallados
al final de esta sección). A veces se pide a los niños que elijan cualquier ítem que deseen para hacer una "escena" o un
"cuadro" en la arena, y en otras ocasiones puede que se escoja las piezas para centrarlos en una situación específica.
Son numerosas las ventajas de este tipo de actividad. Las figuras están a la vista en las repisas, así que el niño no tiene
que crear su propio material como lo hace cuando dibuja. La arena constituye una buena base para las figuras,
manteniéndolas en su sitio. Puede ser movida y cambiada para formar cerros, llanuras o lagos (la bandeja es azul). Las
figuras pueden enterrarse en la arena y ser trasladadas para desarrollar una situación. La arena da una agradable
sensación a los dedos y manos, creando una experiencia táctil y kinestésica ideal. La mayoría de los niños no están
familiarizados con la experiencia en la bandeja de arena, y ello despierta mucho su interés. El niño puede crear en la
arena su propio mundo en miniatura. Puede decir muchas cosas a través de este medio sin necesidad de hablar.

3. Técnica: Duelos y despedidas

El trabajo de duelo y despedidas en niños pequeños se elaboran a partir de un dibujo que el niño hace de la persona
desaparecida y de una carta que le escribe donde le dice lo que quiere y se puede despedir de esa persona. En niños
mayores de 10 años y en dependencia de su grado de madurez, puede realizarse una fantasía dirigida que favorezca
el encuentro con la persona ausente y la expresión de sus sentimientos. En lo personal esta técnica me gusta porque
el niño puede expresar sus sentimientos más íntimos en un solo momento y es justo allí donde el trabajo de
acompañamiento se hace evidente.

4. Dramatizaciones

Durante el proceso terapéutico infantil se pueden utilizar títeres, juguetes con forma de animales, a partir de la
producción de un dibujo por parte del niño. También puede utilizar muñecos, juguetes y desarrolla la actuación de
uno o varios roles de su círculo íntimo. El terapeuta actúa de yo auxiliar solo si es necesario.

TÉCNICAS GESTAL – ADULTOS

1. Me hago responsable

Este juego se basa, en algunos de sus elementos, en el continuo de conciencia, pero en él todas las percepciones se
consideran actos. Por ejemplo, cuando un sujeto expresa algo que le está sucediendo, se le puede decir que añada a
esa percepción: "Y me hago cargo de ello". Resulta así: "Me doy cuenta de que mi voz es tranquila, y me hago
responsable de ello". "Me doy cuenta de que estoy nervioso e intranquilo, y me hago responsable de ello". Con esta
fórmula, el paciente deja de echar la culpa al mundo de sus estados, y tiene la oportunidad de hacer algo por sí mismo
para cambiar o disminuir sus consecuencias.

Aunque a simple vista parece mecánico, se ve enseguida que tiene una gran importancia. Sirve para que la persona se
responsabilice de sus percepciones y actos, y para evitar que vaya por la vida echando la culpa de todo lo que le pasa
a los demás.

Le permite darse cuenta de cuáles son sus necesidades y, como consecuencia, satisfacerlas, y si no logra satisfacerlas,
responsabilizarse de ello y no responsabilizar al mundo, donde coloca la culpa y el poder. Este juego le permite ser más
activo en el cambio de su conducta y asumir el poder que esto le proporciona. A partir de esta experiencia tendrá que
aceptar que lo que le ocurre es porque hace o deja de hacer algo, y el resultado es el producto de sus acciones u
omisiones.

2. Técnica de la silla vacía


Consiste en:
 Poner la silla vacía: Se le indica al cliente que parte de su sueño le intriga o inquieta más. se coloca
una silla vacía delante y se le indica que ese elemento esta ahí sentado.
 Animarle a expresar sentimientos o preguntas: Se le indica al cliente que sentimientos le despiertan
al personaje representado en la silla vacía y se anima a expresarle estos sentimientos; si esta confuso
se le pregunta sobre sus objetivos o deseos al respecto y se le anima expresarlos a ese elemento.
 recoger la respuesta del elemento de la silla vacía: cuando el cliente ha agotado sus preguntas o
expresiones de sentimientos hacia el elemento representado en la silla se le pregunta que es lo que
este le responde o hace a sus expresiones o preguntas en la silla, y como le hace sentir esa
respuesta, de modo que se continua de manera circular el contacto entre ambas partes, que en
realidad son del sí mismo/a.
 Cerrar el proceso: Se continua con el proceso anterior hasta que el cliente vivencie algún mensaje o
enseñanza importante para él/ella, que relación tiene con asuntos de su vida, y como podría
ayudarle a manejar esa cuestión fuera de consulta.

Integrantes:
- Bodero Nava, María.
- Bonilla Prieto, Claudia.
- León Vargas, Jimmy
- Rojas Fernandez, Jiannina

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