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Dimensión Económica

En los últimos cuarenta años el sistema energético de nuestro país ha experimentado cambios
dramáticos. A pesar de que los precios de la energía han aumentado significativamente durante
todo este período el consumo de energía ha crecido de forma abrumadora, lográndose con ello un
mejoramiento general del nivel de vida. Este nivel de progreso, aún lejos de ser satisfactorio
guarda relación con los niveles de consumo de energía. Entre 1970 y el 2013 el consumo de
electricidad se multiplico por once y el de los derivados del petróleo por cuatro veces y medio;
gracias al aumento de los ingresos disponibles de los ciudadanos, que les permitió elevar su
capacidad de compra. Como consecuencia del aumento de consumo de energía del país se ha
hecho más dependiente de las importaciones de petróleo con los consecuentes efectos negativos
para la economía. Actualmente importamos alrededor de 23 millones de barriles de petróleo por
año, las importaciones de derivados de petróleo alcanzaron en 2013 los 2,000 millones de Balboas,
lo que represento el 10% de las exportaciones y el 7% del producto interno Bruto de ese año. Las
fuertes alzas de los precios del petróleo iniciaron un proceso inflatorio pocas veces visto en
nuestro país.

Además de ser un servicio la energía es un sistema integrado. Los combustibles derivados del
petróleo, la electricidad, son igualmente una fuente de energía indispensable para nuestra
economía. Cerca del 35% de la energía eléctrica se genera con derivados del petróleo. Por esta
razón los precios del petróleo tienen un impacto importante en la fijación de los precios de la
electricidad, a pesar de que buena parte se genera con la fuerza hidráulica. Toda la flota de
transporte terrestre, de pasajeros y de carga, depende del diésel y de las gasolinas. En total el
transporte concentra el 60% de las importaciones de petróleo. El diésel y Bunker C y otros
productos como el GLP son productos importados que constituyen un peso importante para la
economía del país. Las posibilidades del transporte eléctrico ya sea colectivo (metro, trenes o
carros eléctricos), tendrán influencia en las futuras importaciones de petróleo y en la generación
de electricidad.

El sistema energético es subsidiario del resto de la economía y responde a las necesidades de la


industria, el comercio, el transporte y de la demanda de los servicios requeridos para que los
ciudadanos lleven una vida digna. La demanda de energía en una sociedad guarda relación con su
nivel de bienestar y con el grado de desarrollo económico. En la medida que el país se moderniza
el consumo de energía aumenta más rápido que el ingreso individual mientras que en los países
con economías más maduras el consumo de energía crece menos rápido que el PIB por habitante.

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