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8,4 créditos
Estimados amigos y compañeros:
El dolor es sin lugar a dudas el síntoma más prevalentes en todas nuestras consultas. Sabemos que
este supone una pandemia de tal modo que un 20% de la población en el tercer mundo sufre de dolor
crónico. La causa más frecuente de dolor crónico es el dolor de origen musculoesquelético y este
implica a innumerables especialidades entre otras a: Médicos de Atención Primaria, Rehabilitadores,
Traumatólogos, Reumatólogos, Geriatras, Especialistas de Medicina del Trabajo, Farmacólogos, Psicó-
logos, Enfermería, Algólogos, etc…
Su alta prevalencia, que no sólo no ha disminuido sino que ha aumentado, a pesar de los grandes
avances en el siglo XX, ha sido el motivo fundamental para que este signo vital haya sido considerado
como una enfermedad en si mismo por las Naciones Unidas y su tratamiento un derecho humano. Las
Naciones Unidas instan a todos los gobiernos a poner coto a esta enfermedad que implica un elevado
coste vital (económico, social y moral) y sanitario (con un elevadísimo coste tanto sanitario como en
vida laboral). También en esta resolución se insta a los gobiernos, independientemente de su situación
económica, a evitar este sufrimiento mediante dos armas: la educación y el tratamiento con opioides.
Es evidente que el pilar básico es sin lugar a dudas la educación, existen numerosos cursos que se
enfocan en el tratamiento del dolor. Sin embargo el Aula de Dolor Musculoesquelético no pretende ser
un curso más al uso. Este proyecto nace con el espíritu de ser un curso integral donde el paciente sea
visto desde un punto de vista multidisciplinar. Es el primer curso en el que se integran diferentes espe-
cialidades incluyendo Medicina del Trabajo. Hemos incluido esta especialidad por las implicaciones que
el trabajo tiene en el manejo de estos pacientes en fase de producción laboral pero con problemas de
dolor y bajas laborales, y su integración con las diferentes especialidades. En definitiva, este pretende
ser un manual extremadamente práctico en el que han participado profesionales de diferentes campos
de la medicina pero todos con un conocido currículum docente y amplia experiencia en el tratamiento
del dolor musculoesquelético.
Todos los que hemos participado en el desarrollo de este manual como base para la realización del cur-
so práctico agradecemos profundamente a Mundipharma el darnos la oportunidad de hacer visible el
dolor y su tratamiento, y permitirnos no sólo enseñar, sino aprender de otros compañeros cómo debe-
mos abordarlo, incluyendo su diagnóstico y exploración, valorarlo integralmente, verlo desde diferentes
ópticas y por supuesto conocer y extender los principios básicos de su tratamiento. En el tratamiento
hemos intentado abordar de una forma amplia todos sus aspectos, y dar aspectos básicos de farma-
cología, tratamientos rehabilitadores, intervencionistas, etc pero sin descuidar aspectos prácticos como
cuándo utilizar un fármaco o una técnica y en qué paciente.
Desde el comité científico nos gustaría haceros llegar que, como médicos, todos nosotros tenemos un
papel fundamental en el diagnóstico y tratamiento del dolor musculoesquelético. Que la falta de proyec-
tos sólidos de formación tanto en el pregrado como durante el desarrollo de la especialidad hace que
el dolor siga siendo una epidemia silente. Que esperamos que el Aula ayude a al menos en parte evitar
Las opiniones expresadas en este documento este silencio y que todos podamos juntos luchar contra esta epidemia que es el dolor crónico.
son de exclusiva responsabilidad de los autores Este manual sólo es la base de todo un proyecto en el que pretendemos ahondar en todos los aspectos
y no reflejan, necesariamente, la posición ni la prácticos del dolor musculoesquelético. Proyecto en el que se aportarán diferentes casos clínicos para
opinión de Mundipharma Pharmaceuticals, S.L. abordar y valorar entre todos y se facilitarán a los alumnos una serie de herramientas útiles en la práctica
clínica diaria.
Fdo.: Dra. Concepción Pérez Hernández
ISBN.: 978-84-695-4898-1 Unidad de Dolor. Hospital La Princesa. Madrid
AUTORES:
Dr. Cecilio Álamo González
M A N U A L D E C O N S U LTA Catedrático de Farmacología. Universidad de Alcalá. Madrid
Dr. David Chivite Guillén
AULA DE DOLOR
Servicio de Geriatría. Hospital Universitario de Bellvitge. Barcelona
Dra. Clara Guillén Subirán
Medicina del Trabajo. Ibermutuamur. Madrid
Lorenzo Jiménez Cosmes
Servicio de Medicina Física y Rehabilitación. Hospital Ramón y Cajal.
Madrid
Francisco López Muñoz
Profesor de Farmacología.Universidad Camilo José Cela. Madrid.
Dr. Sergio Maldonado Vega
Unidad de Dolor. Hospital Marqués de Valdecilla. Santander
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M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
ÍNDICE
musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
2.6 Aspectos psicológicos en el tratamiento del dolor..............................176 2.8 El papel de la enfermería en el dolor musculoesquelético..................214
2.6.1 Introducción...................................................................................176 3. Patologías de dolor moderado-intenso...................................................225
2.6.2 Principios generales......................................................................177 3.1 Dorsolumbalgia.....................................................................................226
2.6.3 Influencia de los procesos mediadores en la adaptación 3.1.1 Epidemiología del dolor lumbar....................................................227
al dolor crónico.......................................................................................178 3.1.1.1 Diagnóstico: historia clínica y exploración....................................................... 228
2.6.3.1 Introducción...................................................................................................... 178 3.1.1.2 Pruebas de imagen.......................................................................................... 230
2.6.3.2 Variables psicológicas mediadoras en la adaptación al dolor crónico............ 179 3.1.2 Opciones terapéuticas disponibles...............................................234
2.6.3.3 Círculos viciosos del dolor............................................................................... 179 3.1.2.1 Recomendaciones............................................................................................ 234
2.6.4 Evaluación psicológica..................................................................180 3.1.2.2 Terapia con ejercicios....................................................................................... 234
2.6.4.1 Introducción...................................................................................................... 180 3.1.2.3 Tracciones y manipulación de la columna vertebral....................................... 235
2.6.4.2 Acerca de la contribución del psicólogo a la evaluación de pacientes con 3.1.2.4 Masajes............................................................................................................. 235
dolor crónico: Aspectos generales.............................................................................. 180 3.1.2.5 Escuelas de espalda......................................................................................... 235
2.6.4.2.1 ¿Cuándo está indicada una evaluación psicológica?.............................. 180 3.1.2.6 Terapias psicológicas (incluyendo terapia cognitivo-conductal)..................... 235
2.6.4.2.2 ¿Para qué sirve?..................................................................................... 181 3.1.2.7 Programas de rehabilitación multidisciplinar................................................. 235
2.6.4.2.3 ¿En qué consiste?................................................................................... 181 3.1.2.8 Ortesis lumbares.............................................................................................. 236
2.6.4.2.4 ¿Cómo proceder?.................................................................................... 182 3.1.2.9 Tratamiento farmacológico.............................................................................. 236
2.6.5 Tratamiento psicológico................................................................183 3.2 Síndromes clínicos dolor torácico.........................................................240
2.6.5.1 Construcción de la alianza relacional.............................................................. 183
3.2.1 Dorsalgia de origen cervical..........................................................240
2.6.5.2 Técnicas del Tratamiento Psicológico del dolor.............................................. 183
3.2.1.1 Síndromes clínicos........................................................................................... 240
2.6.5.2.1 Tratamiento Psicológico Cognitivo-Conductual del dolor crónico......... 184
3.2.1.1.1 La dorsalgia alta o el dolor torácico interescapular de origen
2.6.5.2.2 Psicoterapia............................................................................................ 187 cervical bajo (Maigne)............................................................................................ 240
2.6.5.3 Conclusión........................................................................................................ 187
3.2.2 Enfermedad de Scheuermann......................................................244
2.6.6 Familia...........................................................................................187
3.2.3 Dolor por fractura vertebral osteoporótica...................................247
2.6.7 Comunicación................................................................................188 3.2.3.1 Epidemiología y riesgo evolutivo...................................................................... 247
2.7 Valoración de la incapacidad laboral: reincorporación/secuelas 3.2.3.2 Diagnóstico....................................................................................................... 248
(ud1+ap+mt).................................................................................................190 3.2.3.3 Tratamiento...................................................................................................... 252
2.7.1 Contingencia de la incapacidad laboral........................................190 3.2.3.3.1 Fase aguda: tratamiento del dolor y de la fractura................................ 253
3.2.3.3.2 Fase subaguda y crónica: el objetivo es la recuperación funcional
2.7.2 Tipos de incapacidad laboral.........................................................191 y la prevención de las complicaciones o del riesgo evolutivo.............................. 254
2.7.2.1 Incapacidad temporal....................................................................................... 191
3.3 Dolor cervical.........................................................................................259
2.7.2.2 Incapacidad permanente.................................................................................. 192
3.3.1 Diagnóstico....................................................................................259
2.7.3 Criterios de valoración específicos: pronóstico............................195
3.3.2 Etiología y diagnóstico de la cervicalgia . .....................................260
2.7.4 Reincorporación tras dolor lumbar...............................................201
2.7.4.1 Dolor lumbar crónico....................................................................................... 203 3.3.3 Tratamiento...................................................................................267
2.7.4.2 Recurrencia...................................................................................................... 204 3.4 Dolor lumbar..........................................................................................273
3.4.1 Dolor lumbar.................................................................................273
3.4.1.1 Prevalencia....................................................................................................... 273
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
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M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
1 . D olor cr ó nico
y D olor
M usculoesquel é tico
musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
1.1. Introducción Galeno distingue tres tipos de nervios: los nervios fuertes o motores, los nervios débiles
encargados de las sensaciones y un tercer tipo de nervios relacionados con la sensa-
El dolor es una experiencia común a todo ser humano. Desde el nacimiento hasta la ción nociceptiva.
muerte, el individuo está sometido a una interacción constante entre su entorno y su
propia realidad psicofísica y, de ambas vertientes, puede provenir una agresión que se Los progresos en los estudios anatómicos y fisiológicos permitieron demostrar en el
traduzca en dolor. siglo XIX que la raíz anterior de los nervios espinales es la motora y la posterior es la
sensitiva.
El estudio y el alivio del dolor en todas las épocas han suscitado la curiosidad del hom-
bre, reducido durante largo tiempo a especulaciones de orden intelectual. El problema En los últimos años, se han producido avances prometedores tanto en el conocimiento
del dolor es muy amplio e incluye la necesidad de conocer los aspectos anatómicos, de los mecanismos fisiopatológicos de los síndromes clínicos dolorosos como en el
fisiopatológicos, farmacológicos, bioquímicos y, por supuesto, los psicosociológicos. conocimiento de los factores culturales y emocionales del individuo. Todo esto, unido
al progreso farmacológico que han aportado nuevas sustancias y diferentes presenta-
ciones de las ya conocidas, abre un nuevo horizonte en la lucha frente al dolor.
1.2. Historia
El dolor representa una de las preocupaciones del hombre desde el principio de la 1.3. Definición
Historia. En el estudio histórico de cualquier civilización, encontraremos referencias al
mismo. El dolor, a pesar de ser tan antiguo como el hombre, no es fácil de definir. En 1986, la
IASP (Asociación Internacional para el Estudio del Dolor) lo definió como:
El hombre prehistórico entendía el dolor asociado a un traumatismo, mientras que
mistificaba el asociado a enfermedades. En las civilizaciones egipcia y babilónica, se “una experiencia sensorial y emocional desagradable, asociada con una
pensaba que el dolor causado por la enfermedad dependía de la influencia divina que lesión hística, presente o potencial, o descrita en términos de la misma”.
era percibida en el corazón. Budistas e hinduistas reconocen el dolor como una sensa-
En esta definición, se puede entrever que el dolor no es un mero síntoma sensorial,
ción con un importante componente emocional que se percibe en el corazón.
sino que debe entenderse como una experiencia aversiva perceptual y afectiva com-
El concepto del dolor se expresa en el griego antiguo no por un solo término, sino que pleja, determinada tanto por las respuestas biológicas a los estímulos nociceptivos
usa y necesita varios para cubrir todo este campo semántico: achos, algos, odyne, como por el significado de estos estímulos para cada sujeto, con interrelación de múl-
ponos y kedos. Esta es una forma de la misma raíz que el latín algere (“tener frío”), valor tiples factores, tanto físicosensoriales, como psicológicos, emocionales y subjetivos.
conservado del mismo, mientras que en griego cambió el
Precisamente, en esta variedad de factores que influyen sobre la vivencia del dolor por
Fig. 1: Empédocles significado de “frío” a “dolor”. Es decir, la sensación concre-
cada paciente, y en el hecho de que cada enfermo experimenta el dolor de una forma
de Agrigento ta, molesta y dolorosa del frío pasó a interpretarse de una
propia, radica la necesidad de un enfoque terapéutico personalizado y multidisciplinar.
forma más general como dolor.
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paciente musculoesquelético
propias de la percepción dolorosa. Existen determinados sistemas de modulación del horas. Entre estos receptores encontramos los de las cápsulas articulares, los husos
dolor que actúan facilitando o inhibiendo su transmisión. Un estímulo doloroso, desde musculares y los aparatos tendinosos de Golgi.
el punto de origen hasta el sistema nervioso, debe atravesar una serie de estructuras,
las cuales son descritas a continuación. A nivel muscular, las unidades nociceptivas constituyen el 75% de la inervación senso-
rial del músculo esquelético y responden a la isquemia, a estímulos mecánicos de gran
intensidad y a agentes químicos. A nivel óseo, las terminaciones dolorosas inervan tan-
to el periostio como la esponjosa del hueso y, a nivel visceral, existe cierta controversia,
1.4.1 Receptores del dolor o nociceptores (Figura 2) pues parece que el dolor está mediado por fibras aferentes viscerales de los nervios
simpáticos, respondiendo a estímulos mecánicos (distensión y tracción) y químicos
Estos receptores tienen la misión de identificar los estímulos producidos por la lesión
(inflamación).
tisular física o química en el lugar donde se encuentran ubicados. Histológicamente,
no están definidos como estructuras aisladas sino que más bien se relacionan con las
terminaciones nerviosas libres de las fibras mielínicas finas A-δ y las fibras amielínicas
C. Estas terminaciones corresponden a las ramificaciones dendríticas de las neuronas 1.4.2 Fibras nerviosas centrípetas
alojadas en los ganglios raquídeos o sus equivalentes craneales
Las fibras nerviosas centrípetas constituyen la vía de transmisión del impulso eléctrico
Los nociceptores más estudiados son los localizados en la piel, los cuales se dividen originado en los nociceptores hacia el asta posterior de la médula. Estos nervios peri-
en dos tipos: a) los mecanorreceptores de alto umbral de activación (que son ge- féricos están formados por fibras de distinto diámetro y velocidad de conducción. Los
neralmente fibras tipo A-δ), que sólo responden ante estímulos mecánicos de gran somas de dichas fibras se encuentran en el ganglio de la raíz raquídea posterior de
intensidad, con campos de recepción que se encuentran en múltiples puntos de la piel cada segmento medular. Las fibras nerviosas se encuentran envueltas por una doble
(su velocidad de conducción es amplia y su capacidad de adaptación lenta, aunque a capa: el neurilema (formado por las células de Schwann), que está presente en todas
medida que aumenta la intensidad del estímulo, aumenta el nivel de respuesta), y b) los las células nerviosas; y la vaina de mielina (de naturaleza lipoproteica), que no está
nociceptores polimodales (relacionados con fibras amielínicas C), que se caracterizan presente en todas las células. En función del diámetro y la velocidad de conducción,
por activarse ante estímulos mecánicos, térmicos o químicos, por tener campos de se han clasificado las distintas fibras nerviosas en tres grandes tipos: A, mielínicas
recepción pequeños, adaptarse lentamente y responder con más intensidad a estímu- gruesas y rápidas; B, mielínicas de menor diámetro; y C, amielínicas. Las de tipo C
los de larga duración. Otros nociceptores son los termonociceptores, que producen constituyen más de las dos terceras partes de todas las fibras nerviosas periféricas. La
información nociceptiva ante estímulos térmicos de gran intensidad (>47-51˚), los me- sensibilidad nociceptiva es vehiculizada mayoritariamente a través de las fibras finas
canonociceptores y los mecanoterminociceptores. A-δ y C. La estimulación de las fibras A-δ provocaría un dolor rápido, bien localizado y
de duración corta, denominado también “primer dolor”, mientras que la estimulación
Figura 2. Tipos de Una característica especial de todos los re- de las fibras C produciría un dolor difuso, poco localizado y más persistente, también
ceptores sensoriales es que, después de cier- llamado “segundo dolor”.
nociceptores
to tiempo, se adaptan parcial o totalmente a
Mecano- Nociceptor los estímulos. Parece que esta adaptación es Independientemente del lugar de entrada a la médula, la sensibilidad nociceptiva termi-
Termorreceptor rreceptor una propiedad individual de cada tipo de noci- na en el asta posterior de ésta, donde, antes de ascender hacia los centros superiores,
ceptor, como también lo es el desarrollo de un se establecen una serie de conexiones neuronales.
potencial de receptor. Los receptores que se
adaptan poco, los que se adaptan muy len-
tamente y los que no se adaptan hasta el re-
1.4.3 Médula espinal
poso total continúan transmitiendo impulsos
hacia el cerebro mientras persiste el estímulo Las fibras dolorosas entran en la médula y se dividen en una rama ascendente y otra
Glándula
o, cuando menos, durante varios minutos u descendente, y, tras atravesar varios segmentos medulares, lo abandonan para pene-
sudorípara
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paciente musculoesquelético
trar en el asta posterior. El asta posterior de la médula espinal puede dividirse en tres 1.- Fascículo espinotalámico. Está formado por dos fascículos: el espinotalámico la-
zonas: cabeza (a la que llega la información aferente exteroceptiva térmico-dolorosa teral, que vehiculiza la sensibilidad térmica y dolorosa; y el espinotalámico anterior o
y de tacto-presión a nivel cutáneo), cuello (al que llega la sensibilidad propioceptiva) ventral, relacionado con la sensibilidad táctil protopática. Ambos discurren hasta el
y base (a la que llega la sensibilidad interoceptiva). Toda el asta posterior, muy rica en bulbo raquídeo, donde el fascículo anterior se une a las fibras del sistema lemniscal,
fenómenos sinápticos y de integración medular, se encuentra dividida en 10 capas que conduce la sensibilidad táctil epicrítica y propioceptiva consciente. A medida que
o láminas formadas por grupos neuronales. De éstas, la lámina I está especializada las fibras de este haz ascienden hacia el tálamo, se produce una notable reducción en
en la recepción de aferentes nociceptivos y constituye uno de los puntos de origen su número, especialmente en el tronco del encéfalo. Por su parte, el fascículo lateral
del fascículo espinotalámico; la lámina V (que, junto con la IV, constituyen el llamado (nociceptivo) atraviesa sin interrupción el bulbo, la protuberancia y el pedúnculo lateral,
núcleo propio) forma con la lámina I el grupo celular más importante en la transmisión donde vuelve a unirse al fascículo anterior para terminar ambos en el núcleo posterola-
nociceptiva hacia el cerebro. teral del tálamo. A nivel mesencefálico, en el fascículo espinotalámico lateral se presen-
tan dos componentes diferenciados: el neoespinotalámico y el paleoespinotalámico. El
primero es filogenéticamente más avanzado y parece que está formado por fibras de
gran longitud, que contactan directamente con los núcleos ventrolaterales y posterio-
1.4.4 Fibras de conducción ascendente
res del tálamo. Esta es una vía de conducción rápida relacionada con el dolor agudo.
Las fibras de conducción ascendente transmiten la información nociceptiva medular Por su parte, el componente paleoespinotalámico está formado por fibras amielínicas
hacia los centros superiores del sistema nervioso central. De los fascículos ascenden- de trayecto corto con múltiples sinapsis y, por tanto, con una velocidad de conducción
tes que surgen de la médula, se aceptan como transmisores del dolor los dos sistemas mucho más lenta. Se cree que este sistema participa en la transmisión del dolor difuso.
(Figura 3), uno oligosináptico (formado por una o dos neuronas), que está constituido
2.- Fascículo espinocervicotalámico. En el hombre, el papel de este fascículo parece
por las vías espinotalámicas, espinocervicotalámicas y postsinápticas de los cordones
reducirse a conducir estímulos nociceptivos de poca importancia y a integrar las res-
posteriores; y otro multisináptico (formado por múltiples neuronas), en el que se inclu-
puestas motoras procedentes de la corteza.
yen las fibras espinorreticulares y propioespinales multisinápticas.
3.- Fibras postsinápticas de los cordones posteriores. Estas fibras están formadas por
Figura 3. Vías de conducción ascendentes los haces de Goll y de Burdach y, tradicionalmente, se asociaban a la transmisión de la
sensibilidad propioceptiva consciente, sin ninguna relación con el dolor. Sin embargo,
Fascículo Grácil estudios recientes parecen demostrar que un grupo de estas fibras responde a estí-
Fascículo Cuneiforme Tracto mulos de carácter nociceptivo de forma proporcional a la intensidad de la estimulación.
Corticoespinal Lateral
Fascículo Dorsolateral
4.- Fascículo espinorretículotalámico. Si la vía espinotalámica resultaba fundamental
Tracto Rubroespinal en los procesos discriminativos sensoriales dolorosos, la vía espinorreticular lo es en el
Tracto Tracto componente afectivo-emocional del dolor. Ambas ascienden conjuntamente hasta el
Espinocerebeloso Dorsal Reticuloespinal Lateral tronco del encéfalo, donde la vía espinorreticular se separa para hacer sinapsis en las
Tracto Tracto neuronas de la formación reticular.
Espinotalámico Lateral y Reticuloespinal Medial
Espinorreticular 5.- Vías propioespinales multisinápticas. Junto con las anteriores, constituye el sistema
Tracto Tracto Vestibuloespinal multisináptico de transmisión ascendente del dolor. Estas vías propioespinales están
Espinocerebeloso Ventral formadas por neuronas de axón corto, originadas en las láminas más profundas del
Tracto Espinoolivar Tracto Tectoespinal asta posterior medular, que, tras numerosas sinapsis con otras neuronas, se proyectan
Tracto Espinotectal Tracto Corticoespinal Anterior hacia la formación reticular del tallo y, de allí, a los núcleos talámicos intralaminares.
Tracto Fascículo Longitudinal Medial
Espinotalámico Ventral
Fascículo Propios
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paciente musculoesquelético
1.4.5 Centros superiores del dolor (Figura 4) b) Núcleos intralaminares y paralaminares: constituyen el final de la vía
paleoespinotalámica, relacionada con el dolor difuso. También acaba en esta
Dado que el dolor no es sólo una sensación sino que incluye componentes de percepción, zona el componente espinomesencefálico de la vía espinorreticulotalámica.
emoción, cognición y comportamiento, es lógico pensar que existan múltiples estructu- Además, estos núcleos sirven a las vías propioespinales multisinápticas que
ras anatómicas capaces de albergar tales sensaciones. Así, se sabe que el componente conectan la médula con el hipotálamo como estación de relevo.
perceptivo se asienta, en parte, en la actividad cortical de las áreas somatosensoriales
c) Zonas ventroposteriores, posteriores y medias del núcleo ventral posterior:
S1 y S2 de las regiones parietal paracentral e inferior. El componente afectivo involucra
también sirven como zona de finalización del haz espinotalámico.
la actividad del sistema límbico y de las áreas de asociación frontales. El componente
mnesicocognitivo está sustentado en la porción inferointerna del lóbulo temporal y el Tras una primera elaboración de las aferencias nociceptivas, el tálamo interconecta la
componente comportamental implica la actividad del tálamo, el hipotálamo y el córtex. corteza con las estructuras inferiores, como el hipotálamo o el sistema límbico, a través
de dos grandes grupos de fibras talamocorticales, las originadas en el NVP y las que
1.- El tálamo. Es un conjunto de núcleos diencefálicos, donde confluyen todas las vías
se originan en los núcleos intralaminares, que son las que parecen tener una conexión
aferentes. En el caso del dolor, actúa como un verdadero regulador y filtra la informa-
descendente a nivel tálamo-hipotálamo y tálamo-subcortical. Esto pone de manifiesto
ción. Los núcleos que lo componen son los siguientes:
la importancia de las manifestaciones vegetativas que acompañan al dolor.
a) Núcleo ventroposterolateral (NVP): se encuentra en la zona ventral del
2.- El sistema límbico. Está constituido por complicados circuitos neuronales localiza-
bloque lateral. A éste llegan las aferencias de la vía neoespinotalámica. Está
dos debajo de los hemisferios cerebrales. Estos circuitos coordinan la respuesta emoti-
relacionado con el análisis perceptivo de la información nociceptiva vinculada
va, los centros de placer, de la conducta sexual y de la conducta agresiva. Su actividad
con el primer dolor y forma parte del sistema lemniscal. Sus aferencias se
está modulada por otra serie de circuitos establecidos con las áreas conscientes de la
proyectan en las áreas corticales somatosensoriales S1 y S2. También recibe
corteza y funcionalmente controla la conducta y los impulsos emocionales.
aferencias del fascículo espinocervicotalámico.
En la reacción emocional frente al dolor, se encuentra involucrado, principalmente,
el sistema límbico, constituido por la porción telencefálica más primitiva (hipocampo,
Figura 4. Centros superiores del dolor septo y amígdala) y por formaciones más recientes (circunvoluciones del hipocampo y
Cuerpo calloso
del cuerpo calloso, parte rostral de la corteza temporal y área inferoexterna del lóbulo
Circunvolución cingulada Fórnix temporal).
(interviene en el comportamiento Hipocampo
de supervivencia) (interviene en el almacenamiento La conexión entre los sistemas afectivos y las vías de transmisión del dolor puede
de la memoria) producirse por dos mecanismos: a) por debajo del sistema límbico, mediante control
neurohormonal de sustancias endógenas (bradiquininas, iones K+ y serotonina, prin-
cipalmente); b) por encima del sistema límbico y a partir del neocórtex, a través de los
sistemas corticales moduladores de la actividad talámica, troncoencefálica y medular.
Lóbulo frontal
Principalmente, se produce sobre la formación reticular, que influye directamente en
las vías del dolor.
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paciente musculoesquelético
que el dolor carecía de representación cortical, pero hoy se sabe que la estimulación experiencia asociada al sufrimiento. Los elementos discriminativo-sensoriales están
eléctrica de la corteza en humanos puede producir sensaciones dolorosas (Figura 5). mediados principalmente por el complejo ventrobasal y por la corteza somatosenso-
rial, especialmente por las áreas primarias. Los componentes afectivo-emocionales de
La sensación del dolor comprende dos componentes distintos: el componente discri- las sensaciones dolorosas están mediados por núcleos talámicos mediales, el com-
minativo-sensorial, que se encarga de la intensidad, localización, duración y calidad de plejo posterior, los núcleos intralaminares y submedio, así como por las zonas de la
la sensación dolorosa, y el componente afectivo-motivacional, que incluye reacciones corteza que incluyen las regiones prefrontales y, especialmente, la corteza supraorbital.
reflejas vegetativas, cambios hormonales, motivaciones negativas desagradables y la
Nivel medular
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paciente musculoesquelético
1.5 Clasificación Por otro lado, el dolor crónico se divide en benigno, que es aquel provocado por una
enfermedad que no atenta contra la vida del enfermo (migraña, lumbalgia, artrosis,
En la práctica clínica, se concede gran importancia a la localización del dolor y a sus etc.) y maligno, el provocado por una enfermedad que puede terminar con la vida del
características, ya que permiten al médico realizar un correcto diagnóstico etiológico. paciente.
32 33
paciente musculoesquelético
El dolor de origen óseo no está tan bien localizado como el de origen articular. Se 1.5.3.4. Dolor idiopático
describe como un dolor profundo, que puede ser pulsante cuando se acompaña de
fenómenos inflamatorios. El dolor de origen muscular está mal localizado y se describe Su naturaleza y sus mecanismos fisiopatológicos son poco claros. En ocasiones, pue-
como mate. de ser un dolor evocado y se diferencia de los demás tipos por el hecho de que nunca
es espontáneo, siendo necesario para que se ponga de manifiesto recurrir a maniobras
1.3.-Dolor visceral: en presencia de inflamación, la pleura, el pericardio y el peritoneo oportunas. Es un dolor de naturaleza miofascial, por activación de puntos trigger, que
dan lugar a un dolor importante que varía en intensidad con el movimiento y que se evocan dolores en localizaciones distantes, sin conexiones metaméricas.
describe como una puñalada, lancinante, cortante u opresivo. A nivel intestinal, se
origina un dolor de tipo mordiente ante una perforación; o bien otro de carácter inter-
mitente, conocido como cólico, ante una distensión o una obstrucción. Los dolores
de tipo cólico se presentan también en otras estructuras distensibles del interior del
1.5.4 Según su localización y proyección
abdomen tales como la vesícula biliar, los conductos biliares y los uréteres. El dolor osteoarticular profundo puede ser fijo, localizado o propagado (referido). Se
dice que el dolor es localizado cuando es percibido en la estructura profunda que lo
origina. El dolor propagado se percibe en estructuras sanas en un lugar distinto al de la
1.5.3.2. Dolor neuropático lesión, como resultado del daño de otras estructuras de su misma metámera (Figura 6).
2.1.-Dolor del sistema nervioso periférico (SNP): las causas pueden estar en relación El dolor propagado puede ser referido o irradiado. En el dolor referido, no hay parti-
con lesiones o enfermedad de los nervios periféricos, como compresión, irritación, cipación de las vías nerviosas. La lesión se produce en las estructuras esqueléticas
apraxia o enfermedades infecciosas o metabólicas, mezclándose con trastornos sen-
soriales y motores diversos y con una distribución que permite localizar el nervio, raíz
o plexo afectados.
Figura 6. Distribución metamérica
2.2.-Dolor de origen central: en otras ocasiones, pueden estar en relación con lesiones
o enfermedades del sistema nervioso central (SNC), bien a nivel medular o cerebral, y
que afectan a regiones más extensas del cuerpo.
2.3.- Dolor por desaferentación: es un dolor que puede aparecer tras una lesión del
SNC o SNP. Se define como un daño del tejido nervioso que puede originar en un es-
pacio de tiempo variable un dolor persistente y rebelde a las terapias convencionales.
34 35
paciente musculoesquelético
o viscerales y no en las neuronales y éste se extiende desde el lugar de la lesión a El dolor mecánico mejora con el reposo, el tiempo de rigidez después del mismo es
otras estructuras profundas que provienen de la misma metámera. El dolor irradiado generalmente menor de 15 minutos y responde al tratamiento con analgésicos. No
se produce por irritación o compresión de una fibra nerviosa somática a distancia de repercute en el estado general del paciente. Sin embargo, el dolor inflamatorio es de
su terminación y se asemeja en sus características al dolor neuropático. predominio nocturno, no mejora con el reposo, se acompaña de rigidez matutina, el
tiempo de rigidez tras el reposo es prolongado (mayor de 45 minutos) y no responde a
En algunos casos, el cuadro de dolor no se ajusta a ninguna distribución segmentaria analgésicos, pero puede mejorar con antiinflamatorios.
y se acompaña de hiperalgesia e hiperestesia, denominándose en este caso dolor
regional complejo.
1.6 Prevalencia del dolor crónico
El dolor es la alteración de la salud más frecuente, no sólo está presente en la mayor
1.5.5 Según la estructura anatómica lesionada parte de las enfermedades como un signo de alarma o un síntoma primordial, sino que,
constituye por sí mismo una enfermedad.
El dolor puede ser articular, óseo o muscular (Figura 7). El dolor articular está bien
localizado cuando es de tipo agudo, siendo punzante y quemante. En los procesos No se dispone de datos actualizados, recopilados de forma homogénea y globales de
crónicos, aunque el dolor esté bien localizado, se manifiesta como sordo y lancinante. la prevalencia del dolor, a pesar de que es necesario conocer la magnitud de este pro-
El dolor óseo es el que afecta al periostio, no siendo bien localizado y es descrito como blema para determinar sus implicaciones sociosanitarias y económicas y poder llevar
profundo. Por último, el dolor muscular está poco localizado y se describe como una a cabo políticas encaminadas a minimizar y prevenir sus efectos.
molestia difusa.
En Europa, La prevalencia del dolor crónico se sitúa entre el 12 y el 24% dependiendo
de la definición de dolor que se adopte, de los países analizados y de la metodología
empleada en cada estudio. Se considera que, aproximadamente 1 de cada 5 euro-
1.5.6 Según las características del dolor peos mayor de 40 años presenta dolor crónico, afectando aproximadamente a 75
Se puede distinguir entre dolor mecánico e inflamatorio, si se comparan el grado de millones de personas. La situación es más grave a medida que aumenta la edad, ya
mejoría con el reposo, el tiempo de rigidez después del mismo y el tipo de respuesta que un tercio de los pacientes mayores aceptan el dolor como algo inevitable, a pe-
al tratamiento. sar incluso de que un 60% no duerme de forma adecuada. España registra una tasa
próxima al 12%.
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paciente musculoesquelético
Los tipos de dolor crónico más frecuentes y con mayores consecuencias sociales y En ITACA, las mujeres son significativamente mayores que los hombres y se carac-
económicas son el asociado a enfermedad musculoesquelética degenerativa, el dolor terizan por tener menos estudios, no consumir tabaco ni alcohol. Las patologías que
de espalda y el dolor oncológico. presentan son artrosis, osteoporosis con aplastamiento y osteoartritis. Las mujeres
de mayor edad son las que tienen más dolor y peor ECS y, por tanto, consumen más
El dolor de espalda es una de las principales causas de absentismo laboral, y el dolor fármacos.
lumbar es una de las cinco causas más frecuentes de consulta en atención primaria.
Aproximadamente una cuarta parte de los adultos han presentado algún episodio de También existe un grupo de lumbalgia que afecta a hombres jóvenes, sin sobrepeso,
dolor lumbar en el último año. Muchos pacientes presentan episodios autolimitados de con un nivel de estudios superior.
dolor lumbar que no precisan de asistencia médica. La mayoría parte de los que re-
quieren asistencia médica se recupera satisfactoriamente durante el primer mes, rein- El dolor crónico no oncológico tiene una marcada repercusión en la calidad de vida
corporándose a sus actividades habituales y a su trabajo. Un tercio de los pacientes tanto física como psíquica. Los indicadores predictivos de salud física y mental de la
presenta dolor lumbar persistente moderado tras un episodio de dolor lumbar agudo y calidad de vida obtenidos están en relación con el sexo (femenino negativo, masculino
una quinta parte ve significativamente limitada su actividad. positivo), peso (sobrepeso negativo, peso normal positivo), edad (joven positivo) loca-
lización y tipo de dolor (artrosis negativo, dolor visceral positivo).
Existen estudios que tratan de delimitar las características predominantes de los pa-
cientes con dolor crónico. Sugieren que, aunque la edad de inicio del dolor suele ser la Como propuesta de futuro en el tratamiento de estos pacientes con dolor crónico y
adolescencia o el comienzo de la edad adulta, la mayoría de los pacientes tienen entre en particular en el no oncológico no neuropático, deberían orientarse estrategias de
30 y 60 años. También se observa que es más frecuente en mujeres y entre las perso- atención especial. Estas deben estar dirigidas a la población femenina de edad, con
nas de clase baja, sin cualificación profesional y que realizan actividades físicas duras. patología articular osteodegenerativa, por ser un grupo numeroso con afectación pre-
dominante en cuanto a calidad de vida del componente psíquico sobre el físico y que
En el estudio ITACA, sobre epidemiología, prevalencia y calidad de vida del dolor cróni- está asociado a un dolor intenso. En estas pacientes se asocian otros factores poco
co oncológico, la mayor parte eran mujeres de entre 55 y 70 años, que padecen dolor favorecedores que están asociados con la edad superior a 70 años, patología cardio-
crónico lumbar degenerativo o inflamatorio, con una evolución media del mismo de vascular, osteoporosis, sobrepeso, nivel cultural, etc.
5,32 ± 6,31 años. Viven en familia, en zonas urbanas tienen sobrepeso. Se confirmó
una relación directa entre la intensidad del dolor y el grado de afectación de la calidad El dolor es una experiencia emocional, subjetiva y compleja con repercusión física,
de vida de los pacientes y se aprecia una mayor repercusión sobre el índice físico que psicológica, social y laboral. Es una experiencia vital que afecta de manera importante
el mental en la calidad de vida de la población estudiada. a la calidad de vida y genera costes económicos relacionados con la cronicidad y dis-
capacidad que produce.
Esta elevada incidencia de dolor musculoesquelético de causa inflamatoria y degene-
rativa, sobre todo en mujeres, se había demostrado en otros estudios epidemiológicos.
Coincide también con éstos en la frecuencia e importancia que representa la patología
dolorosa crónica lumbar, en Itaca superó la mitad de los casos (52,92%) y la asocia-
ción de dolor radicular en un porcentaje elevado de las lumbalgias (67,33%).
38 39
paciente musculoesquelético
• No se dispone de datos actualizados, recopilados de forma Fuente: Observatorio de Enfermedades Profesionales (DGOSS, 2007, 2008, 2009, 2010, 2011)
homogénea y globales de la prevalencia del dolor crónico, a pesar
de que es necesario conocer la magnitud de este problema para
determinar sus implicaciones sociosanitarias y económicas y
poder llevar a cabo políticas encaminadas a minimizar y prevenir
sus efectos.
40 41
paciente musculoesquelético
Al analizar con detalle los trastornos musculoesqueléticos profesionales, la distribución La concentración de mujeres trabajadoras en ocupaciones particulares conduce a ca-
porcentual según el agente causal es la siguiente: racterísticas específicas de lesiones y enfermedades. El 63% de las neuropatías por
atrapamiento en el ámbito laboral se producen en mujeres.
Gráfico 2: Distribución porcentual según el agente causal Algunos artículos atribuyen más trastornos musculoesqueléticos en mujeres que en
de los trastornos musculoesqueléticos profesionales hombres por diferentes razones: las condiciones de trabajo de las mujeres son dife-
rentes (la tarea asignada es diferente, la interacción entre la persona y su puesto de
Vibraciones Enfermedades 1,130% trabajo, la duración del trabajo, “en años de servicio” con exposición al riesgo es ma-
osteoarticulares o yor); hay diferencias biológicas; existen distintas responsabilidades familiares; factores
angioneuróticas hormonales; las mujeres exponen más sus problemas y factores organizacionales.
Posturas forzadas Bursitis 2,11% En relación con los datos sobre accidentes de trabajo, los trastornos musculoesquelé-
Movimientos repetidos Peritendinosas 70,50% ticos se agrupan bajo el código de sobreesfuerzos, que constituyen el 38.7% del total
Arrancamiento 0,11% de los accidentes notificados y el 5% de los accidentes graves.
AP. Espinosas En los últimos 10 años, el peso porcentual de los sobreesfuerzos en relación con el
Neuropatías 25,32% total de accidentes de trabajo, en jornada de trabajo, con baja ha ido incrementándose
Meniscopatías 0,83% afectando al 70,3% a hombres y el 29,7% a mujeres, aconteciendo en trabajadores/as
con una media de edad de 38,5 años.
El 70.50% de los procesos se produce por afectación peritendinosa y el 25,32% por En términos absolutos, en la mayoría de estos accidentes (41,6%) la lesión ocasionada
neuropatías por atrapamiento. afectó a la espalda.
La distribución porcentual de trastornos musculoesqueléticos por sexo es la siguiente: La estadística de accidentes de trabajo no facilita detalles que podrían ser útiles, por
ello se completa la información con aspectos contemplados en la VI Encuesta Nacional
de Condiciones de Trabajo.
Gráfico 3: Distribución porcentual según sexo de los
trastornos musculoesqueléticos profesionales Las tres causas más importantes de los riesgos de seguridad son atribuidos por el tra-
bajador, en primer lugar, al exceso de confianza o de costumbre, a la fatiga en segundo
VARONES MUJERES lugar y, al mantenimiento de posturas forzadas, en tercero.
Total 54% 46%
El dolor de espalda es el principal motivo de consulta por motivos de salud relaciona-
Enf. osteoarticulares o dos con el trabajo.
angioneuróticas 69% 31%
La Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo aporta datos muy interesantes
Bursitis 81% 19%
sobre la prevalencia de la patología osteomuscular en cuanto a la morbilidad percibida.
Peritendinosas 59% 41% Perfila una población expuesta de forma universal tanto, a componentes de fatiga física
Arrancamiento AP. espinosas 40% 60% (predominando la exposición a posturas estáticas y los movimientos repetidos mano-
Neuropatías 37% 63% brazo) como a determinantes de carga mental (nivel de atención alto, ritmos elevados
y tareas repetitivas de corta duración).
Meniscopatías 89% 11%
El 30.4% de los trabajadores tienen problemas de estatismo (postura mantenida), el
36% movimientos repetidos de mano-muñeca y, el 30% problemas relacionados con
el diseño de su puesto de trabajo.
42 43
paciente musculoesquelético
El 74,2% de los trabajadores señala padecer algún trastorno músculoesquelético, lo- jornada; un 23% está expuesto a vibraciones; un 46% trabaja en posturas incómodas
calizado principalmente en la zona baja de la espalda (40,1%), la nuca y cuello (27%), o inadecuadas al menos un cuarto de su jornada. Así, los movimientos repetidos cons-
o en la zona alta de la espalda (26,65). Por profesiones, los que más señalan molestias tituyen una característica fundamental del trabajo de muchos europeos.
en la parte baja de la espalda son los agricultores, ganaderos, pescadores, marineros,
camioneros, repartidores, taxistas y otros conductores (53,4% y 52,3%). Los adminis- En suma, estos datos reflejan la gravedad y la dimensión del problema y, sobre todo,
trativos son los que refieren molestias en nuca/cuello en mayor porcentaje (42%). La la necesidad de seguir avanzando en la mejora de instrumentos para su prevención y
edad también es un factor a considerar ya que mientras que en los trabajadores entre para su conocimiento.
16 y 24 años la frecuencia es de un 65,8%, entre los de 65 años y más llega al 80%. Los trastornos musculoesqueléticos, en su conjunto y variedad, pueden cursar afec-
La demandas físicas del puesto de trabajo referidas con mayor frecuencia son las de tación psicopatológica, que repercute, obstaculizando los beneficios terapeúticos que
realizar movimientos repetitivos de mano-brazo (55,4%) y las de mantener una misma se aplican, en un primer momento, para posteriormente cronificarse y actuar de forma
postura prolongada (52,4%). También es importante la frecuencia de trabajadores muy independiente al resto del trastorno músculoesquelético que la originó. De la misma
expuestos a “posturas dolorosas o fatigantes” (23,5%), a “manipular cargas”, ya sean forma, el dolor, al principio asociado al trastorno músculoesquelético, deriva en conti-
persona u otras cargar pesadas (24%), y a realizar una fuerza importante (18,5%). Es nuidad, intensidad y duración, independientemente de que haya sido resuelto el origen
bastante similar el porcentaje de hombres y mujeres que realizan movimientos repetiti- músculoesquelético. Esta afectación psicopatológica y el dolor no reciben tratamiento
vos o mantienen una misma postura, en cambio, los hombres deben adoptar posturas idóneo y adecuado a lo largo del proceso músculoesquelético por desconocimiento
dolorosas, manipular cargar y aplicar una fuerza importante con una frecuencia signifi- de la relevancia que poseen y por carencia de información acerca de la necesidad de
cativamente mayor que las mujeres. intervenir en estas áreas, con estrategias psicológicas oportunas y eficaces que permi-
tan reducir la duración y el número de procesos por incapacidad temporal.
Del análisis de la relación existente entre molestias músculoesqueléticas y posición de
trabajo se desprende que son los que trabajan habitualmente en las posiciones más El dolor musculoesquelético es un problema que afecta, de forma creciente y universal,
penosas (agachado con la espalda en flexión, de pie con las rodillas flexionadas o a todos los sectores y ocupaciones y que puede desencadenarse por una compleja
arrodillado, en cuclillas, tumbado) los que manifiestan molestias con mayor frecuencia, red de factores de riesgo. Existe una necesidad urgente de iniciativas preventivas.
resultado que concuerda con todos los estudios realizados al respecto.
Por lo que se refiere a localización de las molestias, también resulta plausible que los
1.7.2 Prevalencia del dolor lumbar crónico
que más molestias manifiestan en la zona baja de la espalda sean los que trabajan
agachados con la espalda en flexión anterior, de pie con las rodillas flexionadas y arro- El dolor lumbar relacionado con la actividad laboral, constituye un problema de es-
dillado, en cuclillas o tumbado; o que de la nuca/cuello se quejen más quienes trabajan pecial magnitud en los países desarrollados. Según diferentes estudios publicados,
sentados sin levantarse o levantándose, pues cabe suponer que mayoritariamente es- entre un 80% y un 90% de la población general sufrirá un problema lumbar en algún
tán haciendo un trabajo que les hace inclinar la cabeza. momento de su vida.
Respecto a las condiciones de seguridad de los trabajadores, se analiza la exposición La V Encuesta Europea de condiciones de trabajo revela que el 30% de los trabaja-
de los trabajadores a riesgos de accidente en su puesto de trabajo, los riesgos más dores europeos sufren dolor lumbar, ocupando el primer lugar en la lista de los tras-
frecuentes y las causas de estos riesgos de accidente. Las causas de los riesgos de tornos relacionados con el trabajo. En un informe de la Agencia Europea sobre Salud
accidente más señaladas por los trabajadores son: las distracciones, descuidos, des- y Seguridad Ocupacional, algunos estados miembros de la Unión Europea refieren un
pistes, falta de atención (45%); que se trabaja con alta exigencia o rapidez en el trabajo notable incremento de las lesiones relacionadas con la manipulación manual y de los
(19,4%); el cansancio o fatiga (17,8%); las causas relacionadas con el tráfico (12,5%) y trastornos lumbares.
las posturas forzadas o la realización de sobreesfuerzos (12,3%).
La gran mayoría de los trabajadores se recuperan de forma prácticamente completa
La V Encuesta Europea de Condiciones de Trabajo refleja que los riesgos físicos persis- tras sufrir un episodio de dolor lumbar (entre un 60-70% se recuperan en las seis
ten. Un 33% de los trabajadores europeos manipula cargas al menos un cuarto de su
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paciente musculoesquelético
primeras semanas y un 70-90% en diez/doce semanas). Entre el 5% y el 15% de los La Organización Mundial de la Salud reconoce que el dolor crónico tiene graves conse-
afectados no responden al tratamiento inicialmente pautado, refiriendo dolor de mayor cuencias socioeconómicas que van desde el aumento exponencial de la discapacidad
o menor intensidad, que tiende a prolongarse en el tiempo y que determina un riesgo y la pérdida de calidad de vida hasta el incremento significativo del absentismo o de las
elevado de cronificarse y terminar en una incapacidad. Este pequeño porcentaje de situaciones de incapacidad temporal.
pacientes que en el plazo de tres meses no se ha recuperado del episodio doloroso
inicial, es el principal responsable del 75-90% del total de los gastos relacionados El dolor es una de las diez enfermedades que más impacto tiene en los presupuestos
con la patología dolorosa lumbar. La mayoría de estos costes, (60%), son gastos por de cuidados sanitarios. Gasto en tratamientos, pérdida de tiempo, de ocio, deterioro
indemnización, y sólo el 40% de los mismos están directamente relacionados con el en la calidad de vida, gastos en exploraciones, terapias consultas y gastos sociales
tratamiento aplicado. (pérdida de productividad, estrés, menos beneficios…).
Entre los pacientes cuyos síntomas se resuelven en los primeros tres meses de evo- Las implicaciones económicas del dolor crónico contemplan costes directos, indirec-
lución, son frecuentes las recurrencias sintomáticas, entre el 22% y el 65% según las tos. El coste global del dolor, incluyendo los gastos directos y los indirectos, está in-
diferentes series publicadas. Un estudio de seguimiento de larga duración, reveló que fraestimado.
el 45% de los pacientes tiene al menos una recurrencia clínica significativa en un pe-
Para el cálculo del coste directo sanitario del dolor crónico se agrega el coste de la
riodo de 4 años después de haber sufrido el primer episodio doloroso. Es importante
atención sanitaria, de la prevención, el diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y aten-
recordar que una vez lesionada, la región vertebral lumbar puede llegar a ser más
ción crónicos. Se analizan principalmente los costes de los profesionales sanitarios,
susceptible de sufrir una nueva afectación, especialmente en presencia de factores de
productos farmacéuticos, tratamientos farmacológicos más utilizados (práctica de
riesgo que no son corregidos.
actividad física, acupuntura, masaje) y otros costes referidos a otras prescripciones
Los trastornos lumbares son especialmente frecuentes en determinados tipos de ac- sanitarias (pruebas de laboratorio, traslados de pacientes, ortopedias, etc) y los gastos
tividades laborales, como agricultores, trabajadores de la construcción, carpinteros, generales y administrativos de las instituciones sanitarias.
conductores, enfermero/as y auxiliares de enfermería y personal de limpieza.
Los costes indirectos están referidos a las consecuencias de la disminución de la
Es una patología de gran variabilidad, siendo capaz de afectar a personas de ambos productividad causada fundamentalmente por el absentismo laboral, reducción de pro-
sexos, de diferentes edades y, con distintas ocupaciones. ductividad no remunerada, indemnización, costes indirectos generados por la familia
y amigos del enfermo que le ayuden y le acompañan en domicilio o centro asistencial.
La incapacidad resultante de la espalda dolorosa se explica mejor con datos relacio- Los costes indirectos abarcan también el coste de oportunidad (descenso de tiempo
nados con el impacto económico que esta patología determina. Benn y Wood, tras laboral y de ocio, AVAC: evaluación económica, costes relacionados con la formación
revisar varios estudios estadísticos de seguros médicos en Gran Bretaña, encontraron del sustituto, costes no sanitarios que cuantifican el coste de tiempo y transporte) y los
que se perdían más de 13 millones de días de trabajo al año como consecuencia del costes intangibles (calidad de vida, dolor, efectos adversos, sufrimiento, frustración,
dolor de espalda, ocupando el tercer lugar de causa de días de trabajo perdidos, tras tiempo de ocio, pérdida de autoestima).
la enfermedad pulmonar aguda y crónica y la enfermedad vascular coronaria ateroes-
clerótica. Se estima que, en los países industrializados, el coste aproximado del dolor crónico
es entre el 2,2% y2,8% del Producto Interior Bruto. A partir de estas estimaciones se
ha calculado que, en España, está comprendida entre los 13.000 y 16.000 millones
de euros al año. Algunos estudios sitúan el coste total del dolor crónico en un nivel
1.8 Impacto socioeconómico del dolor crónico similar al coste producido por el cáncer o las enfermedades cardiovasculares. Más de
un 40% de las incapacidades laborales permanentes y temporales son consecuencias
El trascendental impacto socieconómico del dolor crónico hace necesario que sea del dolor.
abordado de forma urgente pero existen dificultades en la evaluación: la evaluación de
la calidad de vida relacionada con la salud y de los parámetros afectados directamente En España, el absentismo laboral y la pérdida de actividad en el trabajo por dolor cró-
por la enfermedad y tratamiento. nico, supone unas pérdidas económicas de 1.076 millones de euros anuales.
46 47
paciente musculoesquelético
Los costes sociales también son importantes: casi un 20% de los pacientes que de la Comunidad de Madrid, son de origen musculoesquelético. La magnitud de estos
experimentan dolor crónico pierden su trabajo por este motivo y un 13% cambian de datos muestra que la discapacidad para el trabajo de origen musculoesquelético, que
trabajo o de responsabilidad laboral. comprende el desarrollo de episodios de IT y su eventual evolución a IP, tiene un im-
pacto social extremadamente alto y creciente, constituyendo un reto para la empleabi-
En el National Health and Wellness Survey, se afirma que existe una alta prevalencia de lidad de los trabajadores, la competitividad de las empresas, la organización sanitaria,
comorbilidades que acompañan al dolor, sobre todo, patología psiquiátrica (ansiedad, y para viabilidad de los sistemas de seguridad social.
depresión…). La prevalencia de comorbilidades se eleva conforme aumenta la grave-
dad del dolor. También se señala que el dolor crónico tiene un efecto negativo sobre la
calidad de vida, ya que se relaciona con menos posibilidades de encontrar o mantener
un empleo, un aumento significativo del absentismo laboral y una importante utilización 1.8.1 Impacto socioeconómico del dolor lumbar crónico
de los recursos sanitarios.
El dolor lumbar no es sólo un problema de salud sino también un problema económico
El enorme coste social y económico del dolor ha conducido a la búsqueda de trata- de primer nivel. En los Estados Unidos, se estima que los costes sanitarios directos
mientos multidisciplinarios cuyos objetivos son además aliviar el dolor, la disminución producidos por el dolor lumbar están en torno a 26.000 millones de dólares. Además,
del déficit funcional, la reincorporación laboral y el tratamiento de las alteraciones pa- hay que tener en cuenta los costes indirectos relacionados con la pérdida de días de
tológicas asociadas. trabajo asociada al dolor lumbar, ya que un 2% de la población se ausenta del trabajo
por dolor de espalda y ésta es la causa más frecuente de baja laboral. Además, el
Las enfermedades musculoesqueléticas presentan una alta incidencia y prevalencia en pequeño grupo de pacientes que causa baja laboral (5% de los pacientes con dolor
la población general. Alrededor del 30% de los adultos presenta problemas articulares lumbar) consume el 75% de los recursos destinados al tratamiento del dolor lumbar.
o de la columna vertebral, con una repercusión socioeconómica igual o superior a las
enfermedades cardiovasculares o el cáncer: la mayor parte de esta repercusión es Entre el 80% y el 90% de la población adulta experimentará, al menos una vez a lo
debida a la pérdidas de productividad de la población trabajadora, es decir a costes largo de su vida, dolor lumbar de suficiente intensidad como para precisar atención
indirectos de la enfermedad. médica que incluya tratamiento farmacológico, una visita al servicio de urgencias, la
realización de algún tipo de prueba diagnóstica y/o una consulta especializada.
El principal problema de las enfermedades ME es su potencial para producir dolor, que
se asocia a su vez al deterioro funcional y discapacidad en la población general. El elevado gasto asociado a la patología dolorosa lumbar obliga a modificar la pauta
de actuación en relación con la utilización de las numerosas pruebas diagnósticas
En el caso de las enfermedades mas “agresivas”, la artritis reumatoide, el coste total disponibles para estudiar el origen del dolor lumbar. Es preciso conocer cuáles son
por paciente y año supera los 10.000 euros al año con un porcentaje muy importante las mejores indicaciones de cada una de ellas para, que realmente faciliten la labor del
de costes asociados a la discapacidad. Teniendo en cuenta que la artritis reumatoide médico y eviten el excesivo abuso en la solicitud de estas pruebas y el consiguiente
tiene una prevalencia del 0.5% de la población mayor de 18 años en España, el impac- gasto económico derivado.
to de dicha enfermedad es de una magnitud muy considerable.
También, es necesario modificar la actitud respecto al dolor y la incapacidad resultan-
Las enfermedades musculoesqueléticas son la segunda causa más frecuente de dis- tes de la patología lumbar. No sólo debe tratarse el problema físico propio de la espal-
capacidad para el trabajo de corta duración (tras los catarros comunes) y la primera da del paciente, sino que es necesario valorar adecuadamente el comportamiento del
causa de discapacidad para el trabajo a largo plazo. paciente ante su problema clínico y cómo el dolor influye en los diferentes apartados
de su vida. El paciente con dolor lumbar ha de participar de una forma activa en la
Las causas más frecuentes de incapacidad temporal (IT)-musculoesqueléticas suelen evolución clínica de su proceso, asumiendo un elevado grado de responsabilidad en el
ser la lumbalgía, lumbociática, tendinitis, cervicalgias, problemas musculares y enfer- mismo y no se un mero receptor pasivo de tratamientos.
medades inflamatorias.
La información recibida por el paciente sobre los diferentes aspectos relacionados con
Además, alrededor del 30% de las incapacidad permanente (IP) que se conceden por la patología dolorosa vertebral, así como la prevención dirigida a evitar la aparición de
el equipo de valoración de incapacidades del Instituto Nacional de la Seguridad Social
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paciente musculoesquelético
nuevos episodios dolorosos lumbares, especialmente relacionados con la actividad de su vida, un dolor lumbar de suficiente intensidad como para precisar una atención
laboral, ponen de manifiesto la importancia de desarrollar programas específicos des- médica especializada, la realización de pruebas diagnósticas específicas (generalmen-
tinados a enseñar al trabajador las normas básicas de higiene vertebral y ergonomía te de elevado coste) y la utilización de más de uno, de la amplia gama de tratamientos
postural, cuya aplicación posterior le permitan disminuir la elevada incidencia de esta que actualmente constituyen el arsenal terapéutico disponible para el abordaje clínico
patología en el ámbito. de estos procesos.
50 51
paciente musculoesquelético
La elevada incidencia del dolor lumbar, los importantes costes derivados de su croni-
AMBIENTAL Tabaco
cidad e incapacidad y el alto porcentaje de recurrencias, constituyen en definitiva un
problema de proporciones epidémicas. Esta situación ha llevado a que autores como OCUPACIONAL Levantar pesos
Waddell, manifiesten que “el tratamiento médico convencional para el dolor lumbar Giros repetidos
ha fracasado, y el papel de la medicina en esta epidemia, debe ser examinado seria- Inclinarse, encorvarse
mente”. Las posibles razones implicadas en el fracaso terapéutico de estos procesos Condiciones de la superficie del suelo
Sedestación prolongada
pueden ser, la excesiva sobrevaloración de las alteraciones estructurales que frecuen- Vibración mecánica (vehículos / no
temente se objetivan en las pruebas complementarias realizadas, el abuso en la pres- vehículos)
cripción del reposo prolongado en cama como tratamiento inicial de estos procesos,
el elevado número de tratamientos quirúrgicos realizados y por último, una exagerada PSICOSOCIAL Ansiedad Psicosis
Depresión La mayoría de la neurosis
creencia en posibles diagnósticos psicogénicos como responsables de la cronicidad Hipocondría
del proceso. Somatización
Insatisfacción laboral
Para finalizar el análisis epidemiológico del dolor lumbar, no conviene pasar por alto, Estrés
especialmente desde el punto de vista preventivo, la existencia de numerosos factores Histeria
de riesgo definidos en varias clasificaciones, y que deben tenerse en cuenta a la hora
de aplicar los diversos medios terapéuticos existentes, con objeto de poder unificar RECREACIONAL Golf, tenis, fútbol, gimnasia, jogging, Baloncesto, hockey hielo, ski alpino,
ski de fondo otros.
criterios y evitar la confusión que frecuentemente se presenta.
OTROS Múltiples partos
Una de estas clasificaciones es la aportada por Frymoyer (Tabla 1), en la que diferencia Posible influencia genética
factores aceptados/considerados de riesgo para sufrir dolor lumbar y otros no directa-
mente asociados con su posible desarrollo. Fuente: Tomado de Frymoyer JW, Pope MH, Costanza MC et al. Epidemiologic studies of low back pain. Spine 1980; 5: 419.
Tabla 1: Factores de riesgo para el desarrollo de dolor Valoraciones posteriores llevadas a cabo, con el claro objetivo de definir la fuerza de la
lumbar basados en un estudio de población evidencia existente entre los trastornos dolorosos lumbares y determinados factores
de riesgo relacionados con la actividad laboral (Bernard et al. – 1997 – y Hoogendoorn
TIPO DE FACTOR FACTORES DE RIESGO CONOCIDOS FACTORES NO ASOCIADOS CON DOLOR
LUMBAR et al. – 2000 -), han permitido evaluar con mayor precisión la contribución de cada uno
de esos factores en el posterior desarrollo de la patología dolorosa lumbar.
CONSTITUCIONAL Edad Sexo
Estado físico Peso De esta manera, se han establecido las siguientes categorías para definir la posible
- Fuerza muscular abdominal Altura evidencia existente:
- Balance Flexor / extensor Índice de Davenport
- Insuficiencia muscular - fuerte evidencia: proporcionada por hallazgos consistentes en múltiples
estudios de elevada calidad. Dentro de esta categoría se incluiría el manejo
POSTURAL / Escoliosis severa Lordosis
ESTRUCTURAL Ciertas anomalías congénitas Estrechamiento del espacio discal manual de cargas, la vibración mecánica, un bajo apoyo social en el medio
Canal espinal estrecho Nódulos de Schmorl laboral, la insatisfacción laboral, un bajo nivel socio-económico y una historia
Espondilolistesis Espina bífida oculta clínica previa de dolor lumbar;
Fracturas Osteofitos
Enfermedad degenerativa discal Anomalías de transición - evidencia: proporcionada por hallazgos consistentes en un único estudio de
Espondiloartropatías elevada calidad y en uno o más de baja calidad, o en múltiples estudios de
baja calidad. En esta categoría se englobarían las tareas manuales pesadas,
sigue las posturas forzadas o incorrectas y el tabaquismo;
52 53
paciente musculoesquelético
Bibliografía
- Estadística de enfermedades profesionales. Observatorio de enfermedades profesionales.
Ministerio de Trabajo, 2011.
- Vicente T. Lumbalgia. Prevención, valoración del daño corporal y rehabilitación. Lettera Pu- • Para resumir la repercusión socioeconómica del dolor lumbar
blicaciones SL, 2011. crónico, deben destacarse dos indicadores que definen de una
forma precisa la situación actual:
54 55
M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
2. ABORDAJE
musculoesquelético
56 57
paciente musculoesquelético
2.1.- Historia clínica del dolor musculoesquelético Examen físico: Se aconseja un examen general y una valoración minuciosa de las zonas que provocan
dolor. Cuando se considere adecuado se realizará una exploración física completa que debe incluir:
La mejor prueba diagnóstica para valorar el dolor crónico musculoesquelético es una
historia clínica adecuada, con una buena anamnesis y en una exploración adecuada. Examen músculo-esquelético
- Estática postural
La anamnesis permite obtener una primera aproximación diagnóstica a la etiología del - Exploración de la deambulación
dolor y sirve para explorar los factores psicológicos y ambientales que pueden contri- - Exploración articular: simetría y amplitud de movimiento, tamaño, signos inflamatorios,
buir a éste. Además, es el primer paso para planificar el tratamiento. En algunos casos, estabilidad ligamentosa y maniobras de provocación del dolor.
las pruebas diagnósticas no son imprescindibles o aportan pocos datos relevantes - Exploración vertebral: simetría, amplitud de movimiento, dolor a la palpación o estiramiento,
para el diagnóstico. maniobras de provocación .
- Exploración muscular: presencia de amiotrofias, dolor o tumefacción, fuerza, puntos gatillo.
Examen neurólogico
Tabla 1: Historia clínica en la evaluación inicial - Estado mental
del dolor crónico - Pares craneales y nervios periféricos (en el dolor neuropático puede existir una respuesta
exagerada a estímulos normalmente indoloros [alodinia])
Historia del dolor - Reflejos musculares
- Cronología Examen psicológico
- Factores asociados al comienzo - Cribado básico para depresión, ansiedad, abuso de fármacos o consumo de drogas
- Localización - En pacientes con síndromes de dolor complejos y/o historia de abuso de alcohol, drogas o
- Características cualitativas (presivo, sordo, urende, punzante, etc…) adicción y/o historia psiquiátrica previa significativa, se recomienda evaluación especializada.
- Ritmo (mecánico, inflamatorio, mixto)
- Intensidad (escala visual analógica o numérica) Evaluación funcional
- Factores agravantes o que inducen alivio - Capacidades y déficits funcionales
- Impacto del dolor sobre el sueño, emociones, actividades de la vida diaria, relaciones familiares
y sociales
- Síntomas acompañantes
Historial terapéutico (incluyendo remedios “naturales”)
Historia psicológica
Investigar posible historia de ansiedad y depresión, adicción a fármacos o drogas, trastorno somatomorfo,
trastorno de personalidad, etc…
Historia laboral y expectativas del paciente
Historia clínica general
sigue
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2.2.4 Medición del dolor en un único o múltiples episodios), dolor lumbar agudo (aquel dolor que comienza de
forma repentina y que no cumple los criterios establecidos de crónico o recurrente),
Objetivar la intensidad álgica, es decir, medir el grado de dolor en el paciente, resulta y por último, reagudización clínica (sería el periodo de tiempo durante el cual, el dolor
imprescindible, ya que este dato siempre condicionará el tratamiento analgésico. del paciente es de mayor intensidad de lo habitual, por lo que debe ocurrir durante un
dolor lumbar crónico o recurrente, y debe ser al menos de una semana de duración).
Las características clave del dolor musculoesquelético son dolor referido a estructuras
somáticas distales, hiperalgesia en tejido profundo (general y localizado), transición de En lo que sí parece que hay consenso entre los diferentes expertos que tratan estos
dolor agudo a crónico y alteración de la función muscular. procesos, es en la definición de dolor lumbar aislado y dolor lumbar con irradiación
ciática. El primero de ellos, el dolor lumbar aislado, correspondería a aquel dolor que
se localiza por debajo de las costillas y por encima del pliegue glúteo, con mínima
2.2.5 Dolor lumbar crónico irradiación hacia los miembros inferiores (nalgas y muslos), pero nunca más allá de
las rodillas; el dolor lumbar con irradiación ciática (dolor radicular o radiculalgia), es el
La historia natural del dolor lumbar es muy variable, algunos pacientes mejoran sin dolor localizado en la región lumbar que se acompaña de una sensación dolorosa a
ningún tipo de tratamiento en unos días y otros refieren dolores de diferente intensidad lo largo de una extremidad inferior siguiendo un dermatoma definido, extendiéndose
que pueden llegar a prolongarse durante meses o incluso años. En personas aparen- por debajo de la rodilla. Habitualmente suele describirse más intenso que el dolor lum-
temente con el mismo cuadro clínico, existen importantes variaciones en cuanto a la bar, pudiendo acompañarse de alteraciones motoras, sensitivas o de los reflejos, las
severidad del dolor y la repercusión funcional que éste determina, incluso en el mismo cuales tendrían la misma distribución anatómica que la raíz nerviosa responsable de
paciente en distintos momentos evolutivos de su proceso doloroso. la dolencia.
Es importante en primer lugar, establecer las diferentes etapas evolutivas del dolor
lumbar y definir las características de cada una de ellas, lo que permitirá una aproxi-
mación adecuada al problema y la elección de la mejor opción terapéutica, según la 2.2.6 Dolor lumbar agudo
experiencia acumulada y los medios disponibles. Sin embargo, en la literatura científica
El dolor lumbar constituye uno de los motivos más frecuentes de consulta en la prác-
no existe unanimidad en los términos utilizados para definir las diferentes etapas del
tica médica habitual, y supone la segunda causa de absentismo laboral. Ha llegado
dolor lumbar. Así, Nachemson considera el dolor lumbar agudo como aquel que se
a ser considerado como el problema músculo-esquelético más frecuente, costoso e
prolonga entre 0 y 3 meses, y donde el comienzo ha sido brusco (frecuentemente re-
incapacitante de los países industrializados. Sin embargo, a pesar de su extraordinaria
lacionado con un claro mecanismo desencadenante); el dolor lumbar subagudo sería
frecuencia y la repercusión funcional que habitualmente determina, en la gran mayoría
el que está presente entre 0 y 3 meses, pero que comienza de una forma insidiosa
de los casos su duración es autolimitada en el tiempo, interpretándose por lo general
(resulta más difícil definir una relación precisa entre el mecanismo desencadenante y el
como un proceso clínico benigno, aspecto fundamental a considerar a la hora de infor-
posterior desarrollo del cuadro doloroso); el dolor lumbar crónico sería aquel dolor con
mar convenientemente al paciente que lo presenta.
una duración superior a los 3 meses, y por último, define el dolor lumbar recurrente,
como aquel que se presenta nuevamente tras un intervalo libre de síntomas. Deyo afirma, que el 70-85% de todos los procesos dolorosos lumbares mejoran en el
plazo de un mes, con o sin tratamiento o a pesar del tratamiento recibido, y la mejoría
Von Korff discrepa de Nachemson, ya que considera que la diferenciación que realiza
suele ser independiente del especialista que valore y/o trate al paciente. Nachemson
puede conducir a error por su ambigüedad, y plantea el uso de nuevos términos como
ha demostrado, que en la primera semana de evolución de un dolor lumbar, el 60% de
dolor lumbar transitorio (correspondería al dolor lumbar presente durante un tiempo
los pacientes refiere remisión sintomática del dolor inicial; a las tres semanas, el 70%
inferior a 90 días consecutivos y que no vuelve a observarse tras un periodo de 12
nota mejoría, y entre las seis y ocho primeras semanas, cerca del 90% de los pacien-
meses de seguimiento del paciente), dolor lumbar recurrente (sería el dolor lumbar que
tes presenta una mejoría significativa reconocida de su dolor. Sólo el 10% restante no
está presente en menos de la mitad de los días durante un periodo de 12 meses, pero
obedece a este patrón evolutivo y sigue un curso crónico, con un pronóstico funcional
ocurriendo numerosas veces a lo largo de un año), dolor lumbar crónico (refiriéndose
sombrío.
al dolor lumbar presente al menos en la mitad de los días en un periodo de 12 meses,
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
2.2.9 Exploración física en el dolor lumbar Resulta de gran importancia obtener la mayor información posible sobre las caracte-
rísticas clínicas del dolor referido por el paciente, lo que puede conseguirse mediante
Antes de iniciar la exploración física del paciente aquejado de dolor lumbar, es funda- la realización de una serie de preguntas dirigidas, que sin duda alguna facilitarán al
mental al igual que en cualquier otro proceso doloroso, realizar una adecuada historia médico responsable del paciente, el abordaje terapéutico posterior. Se recomienda
clínica, al ser probablemente la mejor herramienta con la que cuenta el médico para por lo tanto, seguir una sistemática definida a la hora de obtener la mayor información
obtener una información precisa acerca de la sintomatología referida por el paciente, posible sobre las características del dolor manifestado:
además de permitir descartar otras posibles causas de dolor lumbar que precisen una
valoración y un tratamiento especializados. Localización: ¿Dónde le duele?, ¿el dolor se localiza en la región lumbar o se va hacia
algún sitio?, la localización del dolor referido de la manera más precisa posible.
Hay una opinión generalizada de que el diagnóstico clínico del dolor lumbar puede
establecerse, en la mayoría de los casos, por medio de un análisis cuidadoso del sín- Recoger la localización del dolor de una forma descriptiva puede resultar poco fiable
drome doloroso. Sin embargo, la apreciación correcta de los aspectos clínicos requiere como comprobaron Nelson y colaboradores. Una forma precisa, rápida y fiable es
la comprensión de sus posibles métodos de producción. pedirle al paciente que señale su dolor sobre una figura del cuerpo humano. Con
frecuencia es preciso incluso que el enfermo se levante de la silla y señale la zona de
Además, existen ciertas pruebas y complementos diagnósticos que son especialmen- localización y/o irradiación del dolor. En el caso de que demuestre imprecisión en la
te útiles para confirmar el diagnóstico o para descartar la posibilidad de otras lesiones. localización de su dolor, se puede esperar al momento de la exploración.
Deberán realizarse estos procedimientos cuando estén indicados.
Duración: ¿Desde cuándo le duele?. Al analizar este aspecto, no es estrictamente
Con objeto de abarcar todos los aspectos significativos necesarios para establecer un necesario ser muy preciso. Resulta útil saber si lleva con el dolor días, semanas, meses
diagnóstico correcto, es conveniente seguir un método definido de exploración, que o años, pero realmente es irrelevante que sean 4 ó 5 años.
comprenderá un meticuloso análisis de los aspectos clínicos subjetivos y objetivos,
juntamente con el intento de correlacionar estas manifestaciones con el proceso pa- Episodios previos de dolor lumbar: ¿Le ha dolido en otras ocasiones o ha tenido
tológico. Sí el examinador escucha con atención la historia clínica del paciente, presta episodios dolorosos similares al actual?. ¿Cuánto tiempo le ha durado?. Conviene re-
una especial atención al curso clínico del síndrome doloroso y, analiza cuidadosamente coger el número de episodios dolorosos lumbares previos, la duración aproximada de
las molestias referidas por el paciente, la evidencia subjetiva puede ser por sí sola, su- los mismos, si ha precisado algún tipo de tratamiento específico y la respuesta clínica
ficiente para establecer un diagnóstico aproximado y señalar la posible localización de a los diferentes tratamientos aplicados.
la lesión, incluso determinar la raíz nerviosa afectada.
Inicio: Hay que diferenciar entre el dolor que aparece de una forma insidiosa del que
Existen diferentes métodos de exploración que, correctamente aplicados, aportarán surge de forma brusca, y definir si el inicio del dolor se relaciona con algún mecanismo
la información necesaria para alcanzar un diagnóstico clínico. Se considera necesario definido que permita establecer una clara relación causa-efecto.
tener en cuenta y analizar estrictamente los aspectos subjetivos asociados al dolor,
así como las manifestaciones objetivas del cuadro clínico actual. Si tras la valoración Ritmo: ¿En qué momento del día tiene más dolor?. Es importante definir si el dolor es
de dichos aspectos es necesario recurrir a ciertas ayudas diagnósticas, se procede- ocasional (aquel que aparece puntualmente en algún momento del día), si es frecuente
rá a su solicitud, incluyendo estudios radiológicos básicos o especiales, mielografías, (aparece prácticamente a diario) o si es constante (está presente las 24 horas del día,
electromiogramas, resonancias magnéticas, etc. Hay que destacar que, para llegar al incluso durante la noche).
diagnóstico, los hallazgos negativos observados en el curso de la exploración física Intensidad y repercusión del dolor: La forma de valorar los aspectos que más se
efectuada son tan importantes como los positivos. relacionan con la intensidad y la repercusión del dolor referido por el paciente, es la
Es importante recoger: el motivo exacto de la consulta médica, que, suele ser, la pre- presencia de dolor en reposo, por la noche, y si interfiere o no habitualmente con el
sencia de dolor lumbar, de intensidad y localización variables, el cual puede o no, sueño, llegando incluso a despertarle; por otro lado, se debe tener en cuenta si el dolor
irradiarse por una o ambas extremidades inferiores. referido dificulta o limita el desarrollo o realización de las actividades normalmente rea-
lizadas por el paciente, incluyendo los diferentes aspectos de su vida diaria, es decir,
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vida laboral, social, familiar y deportiva; también se puede obtener una información adi- la adopción de determinadas posturas del alivio vertebral. Conviene recoger la dosis
cional sobre la intensidad del dolor manifestado por el paciente preguntándole sobre la recibida en los casos de tratamiento farmacológico (y no sólo la prescrita por el médi-
necesidad o no de tomar medicación analgésica de una forma habitual. co), el tiempo de administración de dicha medicación, la eficacia o alivio de cada uno
de los tratamientos recibidos (ninguna mejoría, poca mejoría, mejor o peor), la duración
En pacientes con dolor lumbar crónico, el dolor nocturno es muy frecuente, siendo del alivio conseguido (mejoría pasajera, temporal o duradera) y los posibles efectos
importante analizar con detalle este aspecto por sus implicaciones diagnósticas (su- secundarios que haya tenido tras la aplicación del tratamiento.
giriendo gravedad especialmente sí el dolor le despierta en la mitad de la noche) y
terapéuticas (en un paciente que no duerme habitualmente por el dolor que sufre, lo Es importante, la recogida de datos referentes a los ANTECEDENTES PERSONALES
primordial es conseguir que duerma, dado que si no, el resto del tratamiento estará y FAMILIARES del paciente, que guarden relación directa con la patología vertebral y,
condenado al fracaso con gran probabilidad). sobre todo, con la columna lumbar, con especial énfasis en aquellos casos que hayan
precisado un tratamiento más específico (quirúrgico, rehabilitación especializada, orté-
Factores agravantes/atenuantes: Recogerse aquellos aspectos que el paciente sico), con objeto de determinar la influencia familiar en el desarrollo de la patología que
refiera como agravantes de su sintomatología dolorosa (esfuerzos, posturas, gestos presenta el paciente.
definidos, estornudar, toser…), así como las situaciones que determinen un alivio/des-
aparición de su dolor (sentarse, tumbarse, caminar, la aplicación local de calor). Otro aspecto que puede resultar importante a la hora de enfrentarse a un paciente con
dolor lumbar, es conocer la interpretación subjetiva que el paciente hace de su dolor, ya
En algunos enfermos es imposible conseguir que concreten las características de su que puede orientar hacia un comportamiento inadecuado por su parte o una vivencia
dolor lumbar, al referir un dolor continuo, desde siempre, difícil de localizar con pre- exagerada, aspectos a considerar a la hora de indicar un tratamiento y la posibilidad
cisión, sin claros factores asociados que lo mejoren o empeoren, etc. En estas si- de una valoración psicológica / psiquiátrica que contribuya favorablemente a un me-
tuaciones, no es recomendable insistir, siendo preferible continuar con el resto de la jor control de su proceso. Por este motivo, con frecuencia se recurre a la aplicación
anamnesis, ya que puede ser debido a que el paciente está nervioso o tiene un bajo de cuestionarios específicos que permiten realizar una valoración tanto de la función
nivel cultural, a que el dolor se acompaña de una gran repercusión psicológica (habi- como de la intensidad del dolor, siendo especialmente útiles en pacientes con un dolor
tualmente en forma de somatización o depresión), o a que el paciente exagera o simula lumbar de larga duración.
su sintomatología dolorosa.
Aunque son muchos los cuestionarios utilizados para la valoración funcional de
El hecho en si de que el paciente sea impreciso o incapaz de dar respuestas coheren- pacientes con dolor lumbar (Cuestionario de incapacidad por dolor lumbar de Oswes-
tes a las preguntas efectuadas sobre su dolor lumbar, constituye un dato realmente try, Cuestionario de incapacidad de Roland y Morris, Índice de incapacidad de Waddell
valioso, y debe orientar sobre la forma de continuar con la entrevista clínica y la explo- y Main, Cuestionario de valoración funcional de Millard, Cuestionario de incapacidad
ración física posteriores. Al finalizar la historia clínica, siempre y cuando se enfoque de para el dolor lumbar de Quebec, etc.), es aconsejable decantarse por uno de ellos y
una forma adecuada, es probable que se tenga una idea clara de lo que realmente le recurrir a él de una forma habitual, con objeto de familiarizarse con la información que
sucede al paciente. éste puede proporcionar.
Síntomas asociados: Es importante recoger otros síntomas que pudiera manifestar Se recomienda el empleo del Cuestionario de incapacidad por dolor lumbar de
el paciente, con objeto de ver si tienen o no una relación directa con el dolor lumbar, y Oswestry, que probablemente sea de los más difundidos en la práctica clínica, de los
así poder descartar otros procesos diferentes que pudieran estar provocando un dolor más empleados en la literatura científica para realizar ensayos clínicos controlados, y
localizado sobre la región lumbar. de los más recomendados por diferentes expertos tanto en la valoración como en el
tratamiento del dolor lumbar.
Tratamientos previos: Debe indicarse el tipo de tratamiento recibido hasta ese mo-
mento (farmacológico, ortopédico, rehabilitador, quirúrgico), incluyendo todas aquellas Se trata de un sencillo y práctico cuestionario autoadministrado, desarrollado por Fair-
medidas que el paciente haya empleado para intentar disminuir su dolor, no sólo las bank y colaboradores en 1980, y adaptado en 1995 al castellano por Flórez y García,
prescritas por el médico. Muchos enfermos no consideran tratamiento algunas medi- compuesto por 10 preguntas cerradas. La primera de ellas se refiere a la necesidad
das domiciliarias, como por ejemplo la aplicación de calor local en la zona dolorosa o de tomar calmantes para aliviar el dolor, mientras que las nueve preguntas restantes
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En cada pregunta o ítem el enfermo debe elegir una única opción, aquella que mejor Pregunta 4. Andar
refleje su situación actual, entre seis posibles opciones mutuamente excluyentes, que El dolor no me impide andar
se le presentan en orden creciente de incapacidad. Se trata de una escala ordinal en la El dolor me impide andar más de un kilómetro
que cada cuestión se puntúa de 0 a 5, según la respuesta marcada. De manera que si El dolor me impide andar más de 500 metros
señala la primera opción (ausencia de limitación) se le otorgan 0 puntos, y si marca la El dolor me impide andar más de 250 metros
última (máxima limitación), se le adjudican 5 puntos. Sólo puedo andar con bastón o muletas
Permanezco en la cama casi todo el tiempo y tengo que ir a rastras al baño
En el caso de que señale varias alternativas en una de las preguntas, recibirá la puntua-
ción más alta, correspondiente a aquella que representa un mayor grado de incapaci- Pregunta 5. Estar sentado
dad. Si responde a todas las preguntas, la suma de las puntuaciones correspondientes Puedo estar sentado en cualquier tipo de silla todo el tiempo que quiera
se multiplica por dos y el resultado final se expresa en forma de porcentaje. Puedo estar sentado en mi silla favorita todo el tiempo que quiera
El dolor me impide estar sentado más de una hora
Tabla 3: Cuestionario de incapacidad por dolor lumbar El dolor me impide estar sentado más de media hora
de Oswestry El dolor me impide estar sentado más de diez minutos
Pregunta 1. Intensidad del dolor El dolor me impide estar sentado
Puedo soportar el dolor sin necesidad de tomar calmantes Pregunta 6. Estar de pie
El dolor es fuerte pero me arreglo sin tomar calmantes Puedo estar de pie tanto tiempo como quiera sin que me aumente el dolor
Los calmantes me alivian completamente el dolor Puedo estar de pie tanto tiempo como quiera pero me aumenta el dolor
Los calmantes me alivian un poco el dolor El dolor me impide estar de pie más de una hora
Los calmantes apenas me alivian el dolor El dolor me impide estar de pie más de media hora
Los calmantes no me quitan el dolor y no los tomo El dolor me impide estar de pie más de diez minutos
Pregunta 2. Cuidados personales El dolor me impide estar de pie
Me las puedo arreglar solo sin que me aumente el dolor sigue
Me las puedo arreglar solo pero esto me aumenta el dolor
Lavarme, vestirme, etc., me produce dolor y tengo que hacerlo despacio y con cuidado
Necesito alguna ayuda pero consigo hacer la mayoría de las cosas yo solo
Necesito ayuda para hacer la mayoría de las cosas
No puedo vestirme, me cuesta lavarme, y suelo quedarme en la cama
sigue
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Por último, en presencia de signos de alarma o en el caso de un dolor claramente atí- Es conveniente saber la gran cantidad de información que puede aportar una explo-
pico, es necesario llevar a cabo una minuciosa REVISIÓN POR SISTEMAS, adaptada ración protocolizada del paciente con dolor lumbar. Combinando adecuadamente los
al dolor lumbar, que debe cubrir la existencia de síntomas constitucionales (fiebre, pér- datos derivados de la anamnesis y la exploración física se podrá hacer una valoración
dida de peso inexplicable, alteración del estado general, pérdida de apetito), síntomas diagnóstica inicial, y permitirá decidir si debe pedirse o no alguna prueba comple-
gastrointestinales (dolor abdominal, nauseas o vómitos, alteraciones del ritmo intesti- mentaria que amplíe la información inicial, que finalmente permita establecer un plan
nal), síntomas genitourinarios (molestias al orinar, cambios de coloración en la orina, terapéutico.
alteraciones en la regla o en el flujo vaginal en pacientes del sexo femenino), signos
de infección cutánea (infección reciente en la piel), y rasgos clínicos de rigidez articular Dentro de la exploración física hay una parte que se puede denominar examen bási-
(sensación de envaramiento o dificultad para mover las articulaciones al levantarse por co, que debe hacerse en todo paciente con dolor lumbar, incluyendo la inspección,
las mañanas), por tratarse todos ellos de síntomas indicativos de una patología poten- palpación y movilidad activa de la columna vertebral lumbar. Por otro lado, hay un
cialmente grave como responsable del dolor lumbar, y que precisan una valoración y conjunto de exploraciones que deberán realizarse en función de los datos derivados de
un tratamiento especializado. la anamnesis. Así, si el paciente manifiesta una posible clínica radicular, se explorarán
los posibles signos de irritación radicular a través de las correspondientes maniobras
Una vez recogidos los datos necesarios para la realización de una anamnesis detalla- exploratorias. Si al dolor lumbar se le asocia una debilidad muscular o sensación de
da, es preciso interpretar adecuadamente la información obtenida, valorando minucio- parestesias, se llevará a cabo un examen neurológico dirigido de las extremidades
samente aquellos datos que hagan sospechar un determinado proceso patológico, el inferiores. Si lo que se sospecha es una posible espondilitis o un cuadro de estenosis
cual pueda confirmarse o descartarse por medio de una exploración física dirigida y las de canal vertebral lumbar, deberán efectuarse una serie de maniobras que permitan la
pruebas complementarias apropiadas y médicamente justificadas. confirmación diagnóstica de dichos procesos.
La EXPLORACIÓN FÍSICA del paciente con dolor lumbar debe ser completa y sis- En algunos pacientes, especialmente aquellos con un dolor lumbar incapacitante de
temática, basada en una exploración ordenada por conceptos y aparatos analizados. larga evolución, es conveniente conocer la repercusión física que éste ha producido,
Puede aportar información adicional que permitirá al médico alcanzar determinados midiéndose con precisión la movilidad vertebral y el balance muscular. Ante la sos-
objetivos: 1) confirmar o descartar la sospecha diagnóstica; 2) detectar la presencia pecha de una somatización del dolor lumbar, existen ciertos signos físicos sencillos
de signos de alarma; 3) incrementar el conocimiento de las características clínicas del que permiten detectar componentes no orgánicos en el dolor referido. Por último, en
dolor lumbar y, 4) determinar qué limitaciones físicas ha producido dicho dolor en el el bajo porcentaje de casos en que la anamnesis inicial sugiera una posible patología
paciente valorado. visceral, infecciosa o tumoral, será necesario realizar un examen físico más completo
y específico.
Además, el examen físico constituye en si un método más objetivo y fiable que la
anamnesis para detectar posibles signos no orgánicos, así como conocer cómo se Por lo tanto, para obtener una información clínica útil y no emplear más tiempo que el
comporta el paciente ante su dolor. estrictamente necesario, es preciso seguir un método sistemático de exploración, el
cual comienza en el mismo momento en que el paciente entra en la consulta, y conti-
No es raro que con cierta frecuencia, se preste una escasa atención al examen físico núa cuando el médico se dirige a explorarle, teniendo claro lo que se necesita explorar
y se muestre un mayor interés por las alteraciones objetivadas en las pruebas com- en cada caso. Dado que habitualmente es necesario colocar al paciente en diferentes
plementarias, actuación que pone de manifiesto un enfoque claramente incorrecto. posiciones, habrá que aprovechar cada postura para realizar las exploraciones nece-
Tradicionalmente se proponía, una vez interrogado el paciente, efectuar una examen sarias, y evitar cambios continuos en su posición. La secuencia lógica y más eficaz es
físico completo mediante una secuencia estandarizada, es decir, examen de cabeza comenzar en bipedestación, después en decúbito prono y finalizar la exploración en
y cuello, auscultación cardiopulmonar, palpación abdominal… y finalmente dirigir la decúbito supino.
atención hacia la columna vertebral. Esta sistemática resulta útil en menos del 2-3%
de los pacientes con una afección sistémica y/o potencialmente grave, pero no aporta Para seleccionar las maniobras que se emplearán a lo largo del examen físico, se
prácticamente ninguna información relevante en el 98% restante de los casos. utilizan tres criterios: 1) La forma de realizar la exploración debe estar bien definida.
Se debe describir con claridad la posición que tiene que adoptar el paciente, especi-
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ficando en algunas maniobras ciertos detalles como el tiempo que debe permanecer Finalmente, se valorarán otros datos de la estática corporal que pueden ser útiles
el paciente en la posición elegida, la colocación de nuestras manos, hacia donde se como la presencia de contracturas, actitudes antiálgicas, deformidades, amiotrofias,
dirigirá la presión, etc. 2) Los resultados de la exploración deber ser reproducibles, es tumefacciones o alteraciones cutáneas.
decir, el examinador debe obtener los mismos resultados al evaluar repetidamente al
mismo paciente. Además, diferentes examinadores deben obtener los mismos resul- Es preciso comentar más detalladamente dos de los hallazgos más frecuentes en la
tados al evaluar al mismo paciente siguiendo el protocolo de exploración definido. 3) inspección de la columna vertebral, como son la inclinación lateral y la asimetría pél-
Debe aportar información útil. Además de confirmar o descartar un diagnóstico, puede vica.
servir para otros propósitos, como juzgar la gravedad del proceso, predecir la evolu- Una desviación lateral del tronco se observa aproximadamente en el 5% de los pacien-
ción clínica y el pronóstico, anticipar la respuesta probable al tratamiento, y monitorizar tes con dolor lumbar. Su asociación con dolor, aunque asumida con cierta frecuencia,
su efectividad. no ha llegado a ser demostrada en estudios controlados prospectivos. Cierto grado
En primer lugar, se realizará el examen básico de la región lumbar propiamente dicha, de inclinación lateral del tronco puede encontrarse en sujetos completamente asinto-
que puede complementarse con una exploración completa del resto de la columna máticos, por lo que no debe cometerse el error fácil de considerar dicho signo como
vertebral. Posteriormente, se llevará a cabo una exploración física general que en oca- responsable directo del dolor referido por el paciente. Sin embargo, una inclinación
siones puede aportar datos de interés, y en aquellos casos en que sea necesario, lateral del tronco asociada a síntomas puede sugerir una lesión discal.
se debe valorar el contexto psico-socio-laboral del paciente, que debe ser tenido en Así, en el estudio de Porter, casi la mitad de los pacientes con una inclinación lateral
cuenta especialmente en los casos de dolor lumbar de larga duración, con una explo- sintomática presentaban un cuadro típico de ciática secundaria a hernia discal. La
ración física anodina. asociación de ciática con inclinación lateral del tronco es predictiva por regla general
Debe iniciarse la exploración del paciente en el mismo momento en que éste entra en de un mal resultado en el tratamiento conservador. En el estudio de Porter, el 40% de
la consulta, con objeto de valorar la movilidad espontánea y los posibles gestos antiál- los pacientes con dicha asociación precisó un tratamiento quirúrgico.
gicos que realice. El examen básico se llevará a cabo con el paciente en ropa interior, En algunos textos clásicos se indica que cuando la hernia discal es central, el paciente
inicialmente en bipedestación, a través de la siguiente dinámica exploratoria: tiende a inclinarse hacia el lado de la hernia, mientras que sí es lateral, la inclinación del
tronco es hacia el lado contrario, en un intento por alejar la raíz nerviosa de la hernia
discal que le está presionando y provocando su sintomatología dolorosa.
2.2.9.1 Exploración física: Inspección
Aunque una asimetría pélvica puede ser secundaria a problemas musculares o con-
Se valoran dos aspectos principalmente, que son la estática vertebral y la capacidad tracturas a nivel pélvico, cadera o columna vertebral, la causa más frecuente es una
de deambulación. discrepancia en la longitud de las extremidades inferiores.
Estática vertebral: el paciente debe estar colocado de pie, en ropa interior, mirando Valorar clínicamente el grado de asimetría pélvica mediante la palpación de las espi-
al frente de espaldas al explorador, con los pies separados unos 10 cm, los brazos nas ilíacas antero-superiores no es todo lo exacto que debería ser, pudiendo llegar a
caídos a lo largo del cuerpo y las rodillas extendidas. producirse errores a veces de hasta ± 10 mm. Los métodos radiológicos son bastante
más fiables, con errores que pueden oscilar entre 0 y 2 mm, si bien no está justificada
En la posición indicada, ha de prestarse una especial atención a la existencia de alte- su realización de forma rutinaria.
raciones en las curvaturas fisiológicas de la columna vertebral, tanto en el plano an-
teroposterior como en el plano sagital, utilizando para ello los puntos anatómicos de Las diferencias en la longitud de las extremidades inferiores son frecuentes en indivi-
referencia y observando las curvaturas fisiológicas de la columna vertebral (lordosis duos completamente asintomáticos; así, discrepancias superiores a 1 cm están pre-
cervical, cifosis dorsal, lordosis lumbar y cifosis sacra). Esta valoración permitirá obtener sentes en el 8% al 29% de la población general, y superiores a 5 mm, en más de la
información precisa sobre la existencia de asimetrías a la altura de los hombros y/o es- mitad de la población.
cápulas, a la altura de las crestas ilíacas y en la longitud de las extremidades inferiores.
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La significación clínica de una discrepancia es un tema debatido, ya que mientras que inferiores descansando apoyadas en el suelo, los brazos caídos a ambos lados y la
hay autores que refieren una mayor frecuencia de discrepancia en pacientes con dolor cabeza ladeada – exploración segmentaria del raquis doloroso (TABLA 4) – posición
vertebral, otros en cambio no encuentran una asociación significativa entre la discre- cómoda para el paciente, que borra la lordosis lumbar, facilita la palpación y permite
pancia y la aparición de dolor. determinar el probable segmento responsable del dolor.
Lo que si parece evidente es que en aquellos pacientes en los que el dolor lumbar em- Tabla 4: Exploración segmentaria del raquis doloroso
peora básicamente tras la sedestación prolongada o al agacharse, no tiene demasiado de Robert Maigne
sentido corregir una discrepancia. En cambio, cuando el dolor aparece principalmente
al caminar o durante la bipedestación prolongada, puede realizarse un ensayo de co- Siguiendo la sistematización descrita por R. Maigne, se explorará sucesivamente cada unidad fun-
rrección con un alza al ser un tratamiento sencillo, barato e inocuo. cional del segmento vertebral sospechoso, primero a la derecha y después a la izquierda, tratando
principalmente de provocar el dolor mediante diferentes maniobras:
Exploración de la deambulación: Se ha de valorar la existencia de actitudes antiálgi- 1. Presión axial postero-anterior, mantenida sobre los ligamentos interespinosos (puede utilizarse una
cas durante la deambulación, la presencia de patrones de marcha alterados (con cierta llave).
frecuencia un dolor radicular intenso puede determinar un patrón de marcha patoló-
2. Movilización de las uniones intervertebrales, con una presión lenta y progresiva (en general con los
gico en relación con una claudicación de la extremidad inferior dolorida), así como la pulgares de las manos) sobre las apófisis espinosas:
capacidad para deambular tanto de talones como de puntillas (que permitirá valorar la
- Presión axial postero-anterior.
existencia de déficits motores específicos, sugerentes de un posible compromiso neu-
- Presión lateral.
rológico). En ciertas ocasiones, las alteraciones objetivadas tanto en posición bípeda
como durante la deambulación, son derivadas de actitudes adquiridas por el paciente - Presión lateral contrariada
en un intento por evitar la aparición del dolor o el incremento en la intensidad del ya
existente, determinando una conducta de evitación para no cargar el peso del cuerpo La palpación debe realizarse de forma sistematizada para poder obtener datos fiables.
sobre la extremidad inferior por la que se irradia el dolor. Esta actitud se observa con Se hará lentamente, sin realizar presiones bruscas y sin provocar molestias innecesa-
más frecuencia en pacientes con un dolor de características ciáticas en relación con la rias al paciente. Se comienza realizando una presión firme del pulgar sobre las apófisis
presencia de una hernia discal sintomática. espinosas, desde la parte más alta a la más baja de la columna, llegando hasta el
sacro. Se preguntará al paciente sobre la existencia de dolor, considerando positiva
cualquier respuesta que sea diferente a “no”. Se continuará palpando la musculatura
2.2.9.2 Exploración física: Palpación paravertebral, llegando hasta los triángulos iliolumbares de una forma bilateral. Poste-
riormente se seguirá con las crestas ilíacas, las articulaciones sacro-ilíacas y por último,
Una vez realizada la inspección, se continuará el examen físico con la palpación de las zonas que hayan sido indicadas como dolorosas por el paciente como por ejemplo,
las estructuras vertebrales y paravertebrales, maniobra exploratoria que permite identi- glúteos, trocánteres, etc.
ficar la existencia de alteraciones o deformidades locales (muchas de ellas ya intuidas
durante la inspección), determinar el estado de la musculatura paravertebral, y muy Si se sospecha la presencia de funcionalidad o no organicidad en el dolor lumbar refe-
especialmente, definir zonas selectivas dolorosas a la presión, aspecto clave para co- rido por el paciente, se pasará de forma suave la palma de la mano por ambos lados,
nocer el probable nivel anatómico responsable del dolor que permita establecer o no la con objeto de ver el efecto que tiene en el paciente el tacto ligero. Es conveniente
indicación de un tratamiento de acción local. anotar sobre una figura humana aquellas zonas dolorosas a la palpación, destacando
la presencia de algún punto selectivo de mayor dolor.
La posición del paciente más recomendada para efectuar la palpación varía según los
diferentes autores. Con objeto de conseguir una adecuada palpación del mayor núme- - Palpación de las estructuras óseas: En decúbito prono el único elemento
ro de estructuras lumbares posibles, es recomendable iniciarla siempre en bipedesta- óseo palpable son las apófisis espinosas, ya que las láminas y las articulaciones
ción y en un segundo tiempo en decúbito prono, con el paciente tumbado boca abajo, interapofisarias posteriores están cubiertas por la fascia y la musculatura,
perpendicular a la camilla de exploración, el tronco sobre la camilla, las extremidades resultando por lo tanto inaccesibles a una palpación más profunda.
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paciente musculoesquelético
- Para determinar el nivel vertebral aproximado, pueden utilizarse dos referencias: Se debe valorar tanto la movilidad espontánea (en cada uno de los gestos realizados
1) Palpar con las manos abiertas el punto más alto de ambas crestas ilíacas por el paciente durante su estancia en la consulta) como la movilidad dirigida, prestan-
y unir los dos pulgares en la línea media. El espacio intervertebral situado do especial atención a tres aspectos: 1) la presencia o no de dolor en todos o alguno
a dicho nivel suele corresponder a L4-L5. 2) La vértebra situada entre los de los arcos de movimiento; 2) el ritmo de flexo-extensión, y 3) la amplitud y la simetría
dos “hoyos de Venus” (por debajo del borde inferior de ambas espinas del movimiento realizado.
ilíacas posterosuperiores) corresponde a S2. El dolor selectivo provocado
por la presión postero-anterior de las apófisis espinosas, crestas ilíacas y - Dolor con los movimientos realizados: Hay que identificar los movimientos
articulaciones sacro-ilíacas es un hallazgo más reproducible que la palpación que reproducen la sintomatología del paciente, y cuáles aumentan, disminuyen
dolorosa de los tejidos blandos. o no influyen en la percepción del dolor. La información obtenida permitirá
conocer las características del dolor, además de ser útil para definir el tipo de
- La palpación permite además detectar la presencia de hendiduras a nivel de
ejercicio y/o las normas de higiene vertebral necesarias.
las apófisis espinosas sugerentes de espina bífida, o la ausencia de algún
elemento lumbar o sacro en el arco vertebral posterior. La palpación de un - La movilidad de la región lumbar se compone de 6 movimientos fisiológicos
escalón entre dos apófisis espinosas contiguas es un signo indicativo de definidos: flexión, extensión, inflexión lateral derecha, inflexión lateral izquierda,
espondilolistesis. rotación derecha y rotación izquierda. Varios autores dan importancia a la
presencia de dolor lumbar con el movimiento, de manera que McCombe
- Palpación de los tejidos blandos: La presión dolorosa selectiva a nivel
y colaboradores estudiaron el grado de reproducibilidad en dos series de
de los tejidos blandos es un hallazgo poco reproducible y de cuestionable
pacientes, y observaron que era aceptable para la flexión, extensión e inflexión
valor clínico. Así, Waddell y colaboradores objetivaron un buen acuerdo
lateral, pero muy baja para la presencia de dolor con las rotaciones, por lo que
interobservador (79%) sobre la presencia o no de sensibilidad dolorosa a la
este movimiento puede evitarse en el examen rutinario de la movilidad lumbar.
presión en los tejidos blandos, pero la localización anatómica era muy poco
fiable (sólo había acuerdo entre los observadores en el 30%). Estandarizando - La movilidad se explora con el paciente en bipedestación y de espaldas
la técnica de palpación y representando gráficamente las zonas sensibles o al explorador, y comienza indicando al paciente que se incline lentamente
dolorosas a la palpación, en vez de describirlas, puede incrementarse el grado hacia delante, sin doblar las rodillas, intentando tocar con las yemas de los
de fiabilidad. dedos la punta de los pies, preguntándole si dicho movimiento le produce
dolor. A continuación, se exploran las inclinaciones laterales (inflexiones del
- Establecer la presencia de una contractura muscular por medio de la palpación
tronco) indicándole que se incline hacia cada lado, asegurándose que los pies
carece de validez. Si diferentes médicos exploran a los mismos pacientes, la
permanecen quietos en el suelo. Por último, se le pide que se incline hacia
probabilidad de que coincidan en el hallazgo o no de una contractura muscular
atrás, colocando una mano en su cintura y la otra en uno de sus hombros,
es mínima, por lo que el dato debería ser descartado. Aunque varios métodos
para dar seguridad al paciente y que no tenga miedo a caerse.
terapéuticos (relajantes musculares, estiramientos musculares, etc.) tienen
como objetivo relajar el supuesto espasmo muscular, su documentación - Al finalizar las maniobras realizadas, se le preguntará al paciente ¿cuál de los
objetiva no es posible clínicamente hablando. movimientos realizados le ha provocado más dolor?, pudiendo cuantificarse
la presencia de dolor y su intensidad por medio del esquema en estrella de
Robert Maigne (FIGURA 2).
2.2.9.3 Movilidad de la columna lumbar
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paciente musculoesquelético
Figura 2: Esquema en estrella de Robert Maigne lumbar, su valor clínico es limitado. La movilidad vertebral varía en función de
ciertos factores como la edad, el sexo, la posición en la que ésta se mida, e
incluso con el momento del día en que se realice el análisis del movimiento, lo
Izquierda Derecha que dificulta el establecimiento de unos valores normales. Algunos estudios
Flexión indican que la disminución en la movilidad vertebral se asocia con la presencia
Lateroflexión Lateroflexión de dolor vertebral. Sin embargo, estudios prospectivos recientes no han
conseguido demostrar que sea un factor de riesgo de dolor lumbar, incluso
hay trabajos que sugieren que una disminución de la flexibilidad se puede
considerar un factor protector, mientras que la existencia de hipermovilidad se
asocia con una mayor frecuencia de dolor.
Rotación Rotación Como consecuencia por tanto de su escaso valor clínico, no es estrictamente necesa-
rio medir con precisión la movilidad vertebral de forma rutinaria, aunque es importante
observar si aparecen alguno de estos datos, clínicamente significativos: 1) limitación
marcada de las inclinaciones laterales; 2) asimetría en las inclinaciones laterales; 3)
limitación importante en la extensión y, 4) hipermovilidad anterior y lateral.
Sin embargo, en ciertos casos es realmente necesario medir con exactitud la movilidad
vertebral, especialmente en: 1) pacientes con problemas médico-legales en los que
Extensión vaya a realizarse un informe para determinar el grado de incapacidad o limitación; 2)
procesos lumbares dolorosos de larga duración en los que existen datos subjetivos u
Esquema en estrella de R. Maigne y Y. Lesage. Compuesto por seis vectores radiales, uno por cada movimiento objetivos de una limitación en la movilidad, y donde se va a prescribir un determinado
elemental del segmento vertebral explorado, considerando que los movimientos a la derecha se visualizan en tratamiento dirigido a mejorar dicha movilidad, para valorar pasado un tiempo la efec-
el lado derecho de la estrella, y los movimientos a la izquierda se aprecian en el lado izquierdo. En cada vector tividad o no del mismo; 3) pacientes intervenidos quirúrgicamente, donde es frecuente
se pueden colocar barras o cruces para cuantificar la limitación de la amplitud del movimiento, desde 1 (leve) una limitación post-quirúrgica de la movilidad que es preciso tratar de forma específica
a 3 (importante). En 1989, Maigne propuso colocar cruces si la limitación existente era dolorosa, y barras si no
había dolor asociado al movimiento. La localización Esquema más o menos cercana al origen del vector indica y, 4) en casos de espondiloartropatías para documentar de forma objetiva la evolución
si la limitación aparece al principio o en los grados finales del movimiento. clínica del paciente, en donde domina habitualmente una rigidez vertebral progresiva.
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paciente musculoesquelético
empleados son el método de Shober modificado para medir la flexión anterior del tron- Signos no orgánicos en el examen físico
co y la técnica de Moll modificada para medir la extensión y las inclinaciones laterales.
Estos métodos tienen una aceptable reproducibilidad, pero con el inconveniente de Si en la anamnesis se sospecha componentes no orgánicos o una alteración del com-
que miden en centímetros un movimiento angular, además de no diferenciar la movili- portamiento ante el dolor, es aconsejable explorar una serie de signos que han sido
dad vertebral lumbar y la pélvica, lo que disminuye su validez. bien sistematizados por Waddell. Se trata de cinco maniobras que no responden a
una base orgánica, y que se presentan con gran frecuencia cuando existe una severa
El método más empleado en los centros especializados en el estudio de la patología repercusión psicológica, una amplificación somática del dolor, y en pacientes consi-
vertebral es el inclinómetro, al ser un método exacto, reproducible, rápido, sencillo, derados simuladores (permitirían detectar a pacientes con un dolor lumbar de origen
capaz de diferenciar la movilidad vertebral lumbar de la movilidad pélvica, además de psicógeno, funcional o incluso ficticio).
posibilitar la detección del esfuerzo realizado por el paciente, con objeto de ver si limita
o no voluntariamente el movimiento. Se emplean dos inclinómetros, que se colocan - Sensibilidad dolorosa a la presión superficial o de distribución no
con el paciente en bipedestación en posición neutra, uno sobre la apófisis espinosa anatómica: El roce o los pinchazos en la piel sobre amplias áreas de la región
de D12 y otro en el sacro a nivel de S2. El paciente una vez instrumentado, flexiona el lumbosacra raras veces desencadena un dolor orgánico. Los pacientes con
tronco hacia delante tanto como le sea posible, y se registran las mediciones de los lesiones aisladas de la raíz nerviosa pueden tener un cierto dolorimiento en
dos inclinómetros (el valor del inclinómetro sacro se resta del situado a nivel D12, lo la distribución de una rama posterior, de la misma manera que los pacientes
que permite eliminar el movimiento de la cadera, midiendo únicamente la flexión lum- con puntos gatillo pueden tener áreas muy localizadas de dolorimiento, pero la
bar). El resto de movimientos siguen una pauta similar a la descrita para el movimiento localización difusa y no anatómica, y la naturaleza del dolor no orgánico suele
de flexión anterior del tronco. ser evidente.
- Pruebas de simulación: El paciente refiere dolor a nivel lumbar ante
Mediante la utilización de un sistema electrónico de doble inclinometría, se puede me- maniobras que no es posible que lo produzcan. Se trata de dos pruebas que
dir el recorrido articular, tanto activo como pasivo, del segmento funcional lumbar, se realizan con el paciente en posición bípeda: a) Presión axial. El paciente
permitiendo la determinación de las limitaciones existentes en la movilidad, así como refiere dolor lumbar al ejercer una ligera presión axial sobre la cabeza con
la definición de posibles anquilosis (ausencia de movilidad articular) en los diferentes ambas manos. La carga descendente vertical en el cráneo de un paciente en
planos o arcos de movimiento. bipedestación por medio de las manos del examinador empeora, en general,
las molestias de la columna cervical y torácica, pero el empeoramiento del
Del análisis de los diferentes valores obtenidos en cada una de las mediciones realiza-
dolor lumbar con dicha maniobra carece de una base orgánica conocida. b)
das se puede evaluar finalmente, el porcentaje de discapacidad correspondiente a la
Rotación simulada. Sujetando con las manos los brazos del paciente con sus
limitación del movimiento y/o a la anquilosis que esté afectando a la región vertebral
manos firmemente fijadas al cuerpo, se giran de forma pasiva los hombros y la
lumbar.
pelvis en el mismo plano. En esta posición, los hombros y la pelvis mantienen
La posibilidad de realizar en un momento determinado varias mediciones en cada uno una relación fija, y no hay movimiento a nivel vertebral. Los primeros 30º de
de los posibles recorridos del movimiento analizado, resulta útil especialmente para va- rotación se producen en la articulación de la cadera. Si durante el movimiento
lorar la ganancia progresiva que muchas veces se produce cuando el paciente vence el descrito, el paciente refiere dolor lumbar sugiere un componente no orgánico.
miedo al movimiento, así como para objetivar la tolerancia clínica al dolor desarrollado En presencia de una irritación radicular puede aparecer dolor en el miembro
a lo largo del movimiento activo y/o pasivo. inferior, que puede ser aceptado como orgánico.
- Prueba de distracción: Una maniobra es positiva cuando se realiza de
En el dolor lumbar agudo, en ausencia de signos de alarma en la anamnesis, puede ser forma convencional y deja de serlo al distraer al paciente que deja de ser
suficiente el examen básico descrito con anterioridad. Sin embargo, en aquellos dolores consciente de que se está realizando una maniobra equivalente. En el caso
que se prolongan más allá de la fase aguda de dolor, frecuentemente definidos como que el paciente refiera dolor al realizar la clásica maniobra de elevación de
incapacitantes por parte del paciente que los sufre, es necesario llevar a cabo una eva- la pierna extendida en decúbito supino, se comprueba su validez con la
luación más extensa y exhaustiva que debe incluir el examen de los signos no orgánicos elevación de la pierna con el paciente sentado: en un paciente con una
y de la fuerza muscular del tronco (exploración complementaria del examen básico).
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paciente musculoesquelético
irritación radicular verdadera, cuando se estira la pierna estando sentado, se prolongada o conseguir una incapacidad, también son habituales cuando no existe
produce espontáneamente un movimiento hacia atrás del tronco para evitar una posible ganancia secundaria (por ejemplo, amas de casa). En estos casos, con
el estiramiento y compresión del nervio. Sí el dolor provocado por la elevación frecuencia estos signos desaparecen en sucesivas revisiones tras un tratamiento y
de la pierna en decúbito supino no es orgánico, al elevar la extremidad enfoque adecuados.
inferior con el paciente sentado, éste no es consciente que se está realizando
una maniobra que puede irritar la raíz nerviosa y la prueba en su caso será La repercusión práctica de la presencia en el examen físico de estos signos conside-
negativa, confirmando la inconsistencia del hallazgo previo. Se considera rados no orgánicos es que: 1) indican la posibilidad de un fracaso médico al aplicar
positiva la prueba de distracción cuando hay una gran diferencia (superior a un tratamiento con una base puramente física; 2) obligan a realizar una evaluación
40-45º) en la provocación de dolor entre elevar la pierna en decúbito supino y psicosocial más completa y, 3) plantean la necesidad de un enfoque multidisciplinar
hacerlo de forma inadvertida con el paciente sentado. especializado.
- Alteraciones regionales: Una alteración sensitiva de distribución regional Exploración de la fuerza muscular. El análisis de la fuerza de los músculos rela-
o una debilidad generalizada en la extremidad inferior, indican posibles cionados con la columna vertebral no forma parte de la exploración rutinaria, pero
alteraciones funcionales en el caso de que su presencia no pueda explicarse constituye un aspecto fundamental en la evaluación de pacientes con dolor lumbar
sobre una base orgánica (por ejemplo, una hipoestesia de toda la extremidad crónico incapacitante de larga evolución, o que han sido intervenidos quirúrgicamente.
inferior o por debajo de la rodilla). Hay que tener cierta precaución en pacientes En estos casos, es frecuente que el dolor haya producido un desacondicionamiento fí-
intervenidos a nivel vertebral o con síntomatología sugerente de estenosis del sico, que debe reconocerse y tratarse para conseguir una mejoría clínica a largo plazo,
canal vertebral lumbar, para no confundir una afectación de varias raíces con y así poder reincorporarse a sus actividades previas.
una alteración regional de base funcional.
- Hiperreacción inapropiada: Signos que pueden sugerir una amplificación La exploración de la fuerza muscular es uno de los campos en los que más se ha avan-
somática son: gestos, suspiros y expresiones faciales exageradas de dolor, zado en los últimos años, tanto en los métodos clínicos como en los instrumentales.
utilización de bastones, andadores u objetos del mobiliario para desplazarse, Sin embargo, sólo los métodos clínicos pueden utilizarse en una consulta convencio-
movimientos excesivamente envarados, rígidos y lentos, o llevarse con nal, al no precisar ningún tipo de aparataje de los que se emplean habitualmente en
frecuencia la mano a la zona dolorida en un intento por protegerla. centros especializados con la finalidad de monitorizar el progreso de pacientes que
siguen programas específicos de tratamiento.
La presencia de un signo aislado carece de valor, pero la existencia de tres ó más de
estos signos en un paciente con dolor lumbar, se acompaña de una baja probabilidad En una exploración clínica convencional las maniobras más sencillas, prácticas y mejor
de que una patología orgánica lo pueda justificar, indicando más posiblemente un estandarizadas son las descritas por Waddell y colaboradores, que al comprobar si el
estrés emocional, una simulación y/o un comportamiento inadecuado ante el dolor, paciente puede realizar o no dos gestos definidos, permite detectar la existencia de
determinando la necesidad de investigar en estos casos la posibilidad de simulación o una pérdida significativa de fuerza muscular.
patología psicógena. - ELEVACIÓN ACTIVA BILATERAL DE LAS PIERNAS EXTENDIDAS. Se
Es necesario conocer y diferenciar los signos no orgánicos de los signos físicos con- le pide al paciente, que se encuentra tumbado en la camilla en decúbito
vencionales. Aunque el examen clínico se considera objetivo, no debe olvidarse que supino, que eleve las extremidades inferiores con las rodillas extendidas,
al explorar a un paciente que refiere dolor y se realizan maniobras que provocan dolor, despegándolas aproximadamente unos 15 cm de la mesa de exploración,
no sólo se detectan hallazgos objetivos sino la respuesta subjetiva del paciente ante y manteniendo la posición unos 5 segundos. Los talones y las pantorrillas
ese dolor. deben estar claramente separados de la mesa de exploración. Si es capaz de
mantenerlas elevadas más de 5 segundos se considerará que ha superado la
La existencia de signos no orgánicos no debe interpretarse fácilmente como un dolor prueba.
psicógeno o una posible simulación. Frecuentemente es la manera que el paciente - INCORPORACIÓN ACTIVA DESDE EL DECÚBITO SUPINO. Se indica
emplea, a veces de forma involuntaria o inconsciente, para expresar cómo le afecta su al paciente, que está en decúbito supino sobre la mesa de exploración, que
dolor. Aunque es frecuente su aparición en paciente que busca una baja laboral más
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paciente musculoesquelético
flexione las rodillas 90º y coloque las plantas de los pies sobre dicha mesa. Dolor de distribución ciática. En aquellos pacientes con dolor lumbar irradiado por la
Se bloquea ambos pies con una mano y se le pide que se incorpore e intente extremidad inferior, resulta útil definir el teórico trayecto seguido por el dolor a lo largo
alcanzar con la punta de los dedos de ambas manos las rodillas, manteniendo de la extremidad, ya que ayudaría a determinar el nivel de la afectación y/o la raíz ner-
la posición durante 5 segundos. Si mantiene la posición más de 5 segundos viosa irritada o comprimida.
se considerará que ha superado la prueba.
Así, en los casos de afectación de la raíz L4 (nivel vertebral L3-L4) el dolor se localizaría
Ambas maniobras tienen un buen índice de reproducibilidad en un paciente con dolor en la cara antero-externa del muslo y rodilla, así como por la región interna de la pierna
lumbar crónico de más de 3 meses de evolución. En presencia de un dolor agudo o en y el tobillo; en los casos de afectación de la raíz L5 (nivel vertebral L4-L5), el dolor se
fase de reagudización de un dolor crónico, es conveniente esperar una disminución en localizaría en la cara postero-lateral del muslo y la pierna, desde donde se irradiaría por
la intensidad de los síntomas para considerar los resultados obtenidos como realmente encima del maleolo externo del tobillo, el dorso del pie y llegaría hasta el primer dedo;
fiables. por último, en la afectación de la raíz S1 (nivel vertebral L5-S1), el dolor se localizaría en
la cara posterior del muslo y la pierna, talón, planta y borde externo del pie.
Con la información obtenida a través de la anamnesis realizada al paciente, y los datos
objetivos derivados del examen físico básico llevado a cabo según la pauta descrita, es No es infrecuente por otro lado, y es un dato que debe ser tenido en cuenta, que el pa-
posible obtener una idea aproximada del diagnóstico clínico del paciente. Sin embar- ciente no refiera un trayecto metamérico del dolor irradiado a lo largo de la totalidad de
go, si los datos sugieren una afección concreta como causa del dolor lumbar, deberá la extremidad inferior, sino que la sintomatología se localice únicamente en algún punto
realizarse una exploración complementaria basada en la sospecha diagnóstica, que de la extremidad inferior. Esto mismo puede objetivarse a lo largo del curso clínico evo-
permita descartar o confirmar dicha sospecha. lutivo del dolor lumbar irradiado por la extremidad inferior, y con mayor frecuencia tras
la aplicación de algún tipo de tratamiento, que haya determinado una mejoría clínica en
la sintomatología dolorosa del paciente, aunque sin conseguir una resolución completa
2.2.10 Sospecha de hernia de disco de su proceso patológico.
Ante un paciente que acude a consulta refiriendo la presencia de dolor irradiado por Ante un dolor de distribución ciática, el primer paso que debe darse es diferenciar sí
la extremidad inferior, es preciso descartar una irritación secundaria a una probable el dolor referido por el paciente, se debe o no a una irritación radicular, siendo preciso
hernia de disco. Se sabe que la sensibilidad del síntoma “ciática” es muy elevada, para ello explorar los llamados signos de irritación radicular.
calculándose que en su ausencia, la probabilidad de que haya una hernia de disco
clínicamente significativa es muy pequeña (en torno al 1/1.000). Signos de irritación radicular. Existen diferentes maniobras capaces de explorar la pre-
sencia de una irritación radicular, con cifras variadas de sensibilidad y especificidad.
Sólo un pequeño porcentaje de pacientes, entre el 2% y el 3% aproximadamente, de Dichas maniobras pretenden poner en tensión las raíces nerviosas que salen por los
los que consultan por presentar dolor lumbar tienen una hernia de disco sintomática. agujeros de conjunción intervertebral, y descienden por las extremidades inferiores
Sin embargo, un porcentaje superior al 30% refiere sintomatología en las extremidades para constituir los plexos y nervios periféricos. En condiciones normales, dichas ma-
inferiores en forma de dolor, parestesias o debilidad muscular. La elevada frecuencia de niobras son indoloras, pero en los casos de conflicto y/o compromiso radicular, la
síntomas en las extremidades inferiores en pacientes con dolor lumbar, parece deberse tensión o estiramiento de una raíz inflamada puede provocar un dolor irradiado por la
como demostró Kellgren, a que la irritación de los tejidos blandos en la región lumbar extremidad inferior siguiendo un trayecto metamérico definido, convirtiendo la manio-
puede producir un dolor irradiado distalmente. bra en positiva.
Para el diagnóstico clínico de hernia de disco sintomática se emplean los siguientes La maniobra más sensible y la más popular de todas es la elevación de la pierna ex-
criterios: 1) dolor de distribución ciática; 2) signos de irritación radicular; 3) afectación tendida. Es preciso, con objeto de evitar confusiones terminológicas, comentar que los
neurológica metamérica, y 4) una imagen en las pruebas complementarias realizadas europeos y los americanos denominan de forma diferente a las distintas maniobras ra-
compatible con la sintomatología referida por el paciente. diculares. Así, en algunos países europeos incluido España, a la maniobra de elevación
de la pierna extendida se le denomina signo de Lasegue, mientras que los americanos
reservan esta denominación para otra maniobra.
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paciente musculoesquelético
Es necesario saber qué maniobras deben seleccionarse y por qué, y cómo deben desciende de 10º a 15º y se realiza una dorsiflexión pasiva del tobillo. La maniobra se
realizarse, ya que si no se definen con precisión estos aspectos, los hallazgos pueden considera positiva si reaparece el dolor ciático.
ser variables entre los diferentes expertos.
Elevación de la pierna extendida en rotación interna. La maniobra es positiva si reapa-
1) Elevación de la pierna extendida. Se realiza con el paciente en decúbito rece el dolor ciático con menos elevación de la extremidad que en el signo clásico de
supino. Se apoya el talón del pie en el cuenco de una de las manos y con elevación de la pierna extendida.
la otra se mantiene la rodilla extendida. Desde esta posición, se eleva la
extremidad inferior lentamente hasta que aparece dolor. El paciente debe Signo de la cuerda arqueada. Se eleva la pierna extendida hasta que aparece dolor,
permanecer cómodamente en la mesa de exploración con la cabeza apoyada, momento en el que se flexiona la rodilla, lo que determina una disminución del dolor. Se
sin flexionar el cuello para mirar al examinador, para evitar alterar el resultado apoya el pie en la cara anterior del hombro del explorador y se aplica presión con los
de la maniobra. dedos en el hueco poplíteo a nivel del nervio ciático. Se considera la maniobra positiva
si reaparece el dolor con la maniobra realizada.
Al elevar la extremidad inferior, las raíces nerviosas se desplazan entre dos y seis mm a
nivel del agujero intervertebral, y si el espacio del canal está comprometido, la raíz afec- Signo de Lasegue invertido. Con el paciente en decúbito prono, se realiza una hipe-
tada es sometida a una fuerza tensil y/o compresiva a la que no puede acomodarse sin rextensión de la extremidad inferior con la rodilla flexionada, maniobra que pone en
provocar dolor. La irritación radicular se produce cuando la extremidad inferior se eleva tensión la raíz L4, por lo que en caso de estar afectada, producirá dolor irradiado por
más de 30º, pero más allá de 70º el movimiento de la raíz nerviosa es despreciable. la región anterior del muslo.
Se habla de signo de elevación de la pierna extendida positivo típico cuando se repro- De manera que, si se sospecha una irritación radicular se realizará la maniobra de ele-
duce el dolor ciático entre 30º y 60º de elevación de la extremidad inferior. Se considera vación de la pierna extendida, y si esta es positiva se elevará la pierna contraria, siendo
un signo de elevación de la pierna extendida positivo atípico, si aparece el dolor ciático conveniente añadir al menos una prueba de provocación para confirmar el hallazgo.
por encima de los 60º de elevación. Por último, si sólo aparece dolor lumbar con la El signo de elevación de la pierna extendida permite además monitorizar la evolución
elevación de la pierna extendida, la maniobra se considera negativa. clínica del paciente y la respuesta a un determinado tratamiento, de manera que sí
aumenta el grado de elevación de la pierna extendida necesario para provocar el dolor
Además de la hernia de disco, hay otras causas que pueden en algún momento dar lu- de características ciáticas, el pronóstico se considerará favorable (siempre que se haya
gar a un signo de elevación de la pierna extendida falsamente positivo, como la rigidez descartado un deterioro neurológico severo o progresivo), independientemente de las
de la musculatura isquiotibial, la capsulitis de cadera, el dolor de origen sacroilíaco, el molestias subjetivas referidas por el paciente.
dolor localizado en las articulaciones interapofisarias posteriores, e incluso, el dolor de
origen muscular. Esto hace que cuando el signo sea positivo, sea conveniente confir- Afectación neurológica metamérica. En presencia de dolor localizado en la región lum-
marlo para evitar establecer un diagnóstico incorrecto. bar, sin otra sintomatología asociada, la probabilidad de que exista una afectación
neurológica es realmente baja, por lo que un examen neurológico rutinario es casi
2) La segunda maniobra de irritación radicular más útil, y que debe ser explorada de innecesario.
una forma rutinaria ante un signo de elevación de la pierna extendida positivo es la
elevación de la pierna contralateral extendida, que se considerará positiva si reproduce En los pacientes con dolor de características ciáticas, es necesario diferenciar entre
el dolor ciático referido por el paciente. una simple irritación radicular o una compresión de la raíz nerviosa que produce un
déficit neurológico metamérico, no siendo preciso para ello realizar una examen neuro-
3) Hay algunas pruebas denominadas maniobras de provocación, que es conveniente lógico completo de las extremidades inferiores. El motivo es que cerca del 98% de las
realizar con el único objetivo de comprobar el valor clínico del signo de elevación de la hernias discales clínicamente significativas se localizan en los niveles vertebrales L4-L5
pierna extendida. o L5-S1, con afectación del territorio sensorial y motor de las raíces nerviosas L4 y L5.
Signo de Lasegue. En muchos países europeos esta maniobra se denomina signo de Los déficits neurológicos que suelen encontrarse con mayor frecuencia son la debili-
Bragard. Se explora elevando la pierna extendida hasta que surge dolor, entonces se dad en los dorsiflexores del tobillo y en el extensor del primer dedo (indicativo de una
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paciente musculoesquelético
afectación de la raíz L5), disminución o abolición del reflejo aquíleo (en caso de afec- 4) Examen sensitivo. Un examen completo de la sensibilidad puede llevar mucho
tación de la raíz S1) y el déficit sensorial en la cara externa (raíz S1) y/o en el dorso del tiempo y cansar excesivamente al paciente. Se distinguen mejor diferencias en
pie (raíz L5). la intensidad del dolor con el pinchazo, que diferencias de tacto y temperatura.
Por otro lado, la afectación sensorial es más frecuente en los extremos distales
Teniendo en cuenta esto, se debe explorar la fuerza muscular y la posible existencia de de los dermatomas que en toda su extensión.
parálisis o paresia de algún grupo muscular, que indique la presencia de un probable
compromiso neurológico. Debido a esto, es recomendable comprobar la simetría de la sensibilidad algésica en
los extremos distales de los dermatomas L4, L5 y S1 (cara interna, dorso y cara exter-
1) Fuerza de los dorsiflexores del tobillo. Se explora con el paciente en decúbito na del pie respectivamente). Se debe valorar la existencia de hipoanestesia (disminu-
supino, pidiéndole que flexione el pie contra la resistencia manual del ción de la sensibilidad), disestesia (sensibilidad dolorosa) o hiperestesia (aumento de
explorador. En el caso de una incapacidad para mantener la dorsiflexión del la sensibilidad), que habitualmente tienen una localización similar al trayecto del dolor
tobillo, se considerará la existencia de una debilidad muscular. Es preciso radicular referido por el paciente.
explorar siempre ambos lados, para utilizar el lado sano como comparación.
Es infrecuente que exista una debilidad aislada en los dorsiflexores del tobillo, Es necesario interpretar adecuadamente los resultados obtenidos en la exploración
asociándose habitualmente con una debilidad en la extensión del primer dedo, física llevada a cabo, por lo que ante un paciente con dolor lumbar irradiado por las ex-
así como un déficit sensitivo en el pie. tremidades inferiores, en presencia de maniobras de compromiso radicular positivas,
2) Fuerza del extensor del primer dedo. Se explora igualmente en decúbito la exploración dirigida contribuirá a determinar con más exactitud cuál es la raíz que
supino, pidiéndole al paciente que flexione dorsalmente el primer dedo, como puede encontrarse afectada. En la TABLA 5 se recoge la semiología correspondiente a
sí quisiera llevarlo hacia él, mientras se realiza una resistencia manual por parte la afectación de las raíces L4, L5 y S1, que como se ha comentado con anterioridad,
del explorador. Debe compararse con el lado contrario, que se utilizará como son las que resultan lesionadas con mayor frecuencia en presencia de una patología
comparación. lumbar.
3) Reflejos osteotendinosos. Deben explorarse de forma bilateral, lo que En el caso de que el cuadro clínico del paciente sea atípico o plantee ciertas dudas al
permitirá ver si son normales, si están aumentados, disminuidos o abolidos. médico encargado de su valoración, sería conveniente prolongar la exploración que
La exploración de estos reflejos no debe ser dolorosa, de manera que en permita confirmar la sospecha diagnóstica inicial.
presencia de dolor, se puede sospechar cierta funcionalidad en el paciente.
La afectación de las raíces lumbares superiores (L1, L2 y L3) sólo tiene lugar en el 2%
- Reflejo rotuliano. Indica afectación de la raíz L4. Puede explorarse de varias formas, del total de las hernias discales sintomáticas, y su presencia se sospechará en pre-
en sedestación con las extremidades inferiores por fuera de la mesa de exploración, sencia de dolor y/o parestesias localizadas en la región anterior del muslo. En estos
o en decúbito supino sobre la camilla de exploración, manteniendo la extremidad que casos, el examen neurológico debe incluir el reflejo rotuliano, la fuerza muscular del
vaya a explorarse, ligeramente flexionada a la altura de la rodilla. cuádriceps y psoas, y el examen sensitivo del muslo.
- Reflejo aquíleo. Indica afectación de la raíz S1. Puede explorarse de forma conven- En presencia de un posible síndrome de la cola de caballo, la exploración física incluirá
cional, es decir, con el paciente en decúbito supino, se flexiona la rodilla colocando el un análisis de la sensibilidad perineal, glútea y cara postero-superior de los muslos
pie sobre la otra pierna, se balancea el pie para relajar la musculatura, y se coloca el (anestesia en silla de montar, presente en el 75% de los casos), además del examen
tríceps en ligera tensión provocando una dorsiflexión del tobillo antes de golpear con del tono muscular del esfínter anal mediante la realización de un tacto rectal, que suele
el martillo de reflejos en el tendón. Otra forma de explorar este reflejo es a través del estar hipotónico en el 60-80% de los casos.
método de percusión plantar, con el paciente en decúbito supino, el examinador se
golpea sus propios dedos colocados sobre la superficie plantar del pie, y manteniendo Por último, la presencia de atrofia muscular, que por lo general es indicativa de una
el tobillo en dorsiflexión pasiva. denervación crónica, puede detectarse mediante una simple observación visual, y con-
firmarse mediante la medición de la circunferencia de la extremidad inferior a diferentes
niveles previamente establecidos (utilizando para ello una cinta métrica).
92 93
paciente musculoesquelético
Tabla 5: Exploración de la radiculopatía lumbosacra suelen ser bastante inespecíficos y aportan poco al diagnóstico. En algunos estudios
realizados, los déficits neurológicos más frecuentes fueron la abolición de los reflejos
aquíleos y la disminución de la sensibilidad vibratoria a nivel del pie. Esta situación
Raíz L4 Raíz L5 Raíz S1
obliga a realizar una exploración neurológica completa y dirigida de las extremidades
Origen de la lesión Nivel L3-L4 Nivel L4-L5 Nivel L5-S1 inferiores en los pacientes en los que exista la sospecha de una estenosis espinal.
Trayecto del dolor Cara antero-externa de Cara postero-lateral de Cara posterior muslo y El hallazgo más típico por lo tanto, es la reproducción de la sintomatología con la
muslo y rodilla; cara muslo y pierna, dorso pierna, planta y borde extensión prolongada de la columna lumbar. Puede explorarse de diferentes formas,
interna de pierna y pie del pie, primer dedo externo del pie como por ejemplo mediante el test vertebral de Phalen, maniobra de utilidad diag-
Sensibilidad Igual trayecto que el Igual trayecto que el Igual trayecto que el nóstica que pretende reproducir los síntomas de dolor, debilidad y parestesias en las
dolor dolor dolor extremidades inferiores causados por la isquemia neural. Con el paciente en bipedes-
tación, se le pide que se incline hacia atrás y mantenga la posición durante al menos
Fuerza y trofismo Cuádriceps (exten- Extensor común de los Peroneos, gemelos y un minuto. La prueba se considera positiva cuando reproduce los síntomas, y se sigue
muscular sión de rodilla), tibial dedos, extensor del 1º soleo (flexión plantar, de un alivio sintomático rápido cuando el paciente se inclina hacia delante apoyando
anterior (dorsiflexión dedo (extensión dedos marcha de puntillas),
tobillo) del pie, marcha de glúteo mayor (extensión las manos sobre la camilla de exploración.
talones), glúteo medio de cadera)
(abducción de cadera) Otras formas de exploración, que permiten además realizar un diagnóstico diferencial
con la claudicación de origen vascular, son la prueba de la bicicleta de Van Gelderan
Reflejos Reflejo rotuliano dismi- Reflejo aquileo dismi- (se considera positiva cuando no se reproducen los síntomas al pedalear sobre una bi-
nuido o ausente nuido o ausente cicleta inclinado hacia delante, que sí ocurrirá en pacientes con problemas circulatorios
en las extremidades inferiores) y la prueba de deambulación, donde se le indica que
camine a una velocidad elevada durante 1 ó 2 minutos con objeto de ver si reaparecen
2.2.11 Sospecha de estenosis de canal los síntomas, y a continuación se observa si éstos mejoran al parar de caminar o al
inclinarse hacia delante.
El dato más importante para establecer el diagnóstico de una estenosis espinal es la
historia clínica, con mucho más valor que los hallazgos derivados del examen físico. El conjunto de síntomas que habitualmente despiertan la sospecha de una posible
estenosis del canal vertebral, se engloba dentro del concepto clínico de claudicación
La causa más frecuente de estenosis de canal vertebral lumbar es degenerativa, que
neurógena, ya que suelen reproducirse durante la deambulación prolongada del pa-
se observa con mayor frecuencia en pacientes de edad avanzada, generalmente por
ciente (favorecido por la estática vertebral en extensión de la columna vertebral lum-
encima de los 55 años, salvo en aquellos casos de posible origen constitucional.
bar), y se alivian con el cambio de posición, generalmente con la sedestación y/o la
Se caracteriza por un cuadro clínico insidioso y progresivo de dolor, generalmente incorporación hacia delante del paciente.
localizado en la región lumbar, desde donde se irradia por una o ambas extremidades
La presencia de esta sintomatología, sugerente de una estenosis del canal vertebral
inferiores – región glútea y cara posterior del muslo, habitualmente no más allá de las
lumbar, obliga a realizar un examen clínico dirigido que facilite el diagnóstico diferencial
rodillas -, que en casos evolucionados se puede acompañar de debilidad muscular
con otros procesos clínicos que pueden reproducir una clínica parecida, entre los que
y/o parestesias. Característicamente, la sintomatología referida tiende a reproducirse
podemos incluir la artrosis de cadera y/o de rodilla, la bursitis trocantérea, la claudica-
o intensificarse en las posiciones de extensión lumbar mantenida, situación que puede
ción vascular y la polineuropatía.
ayudar al médico encargado del manejo terapéutico del paciente, al permitir su confir-
mación en el caso de que se sospeche.
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paciente musculoesquelético
Tabla 6: Clasificación de la estenosis de canal vertebral Tabla 7: Diagnóstico diferencial entre claudicación vascular
y claudicación neurógena
Estenosis congénita o por trastorno del desarrollo del canal espinal
Estenosis acondroplásica Síntoma o signo Claudicación vascular Claudicación neurógena
Idiopática Distancia a la que aparece el Fija Variable
dolor
Estenosis adquirida
Estenosis debida a cambios degenerativos Tiempo que necesita detenerse 1 - 3 minutos 5 - 20 minutos
Combinación de estenosis congénita y degenerativa
Forma de aliviar al dolor Basta con pararse Necesita sentarse, tumbarse o
Estenosis por espondilolisis / espondilolistesis inclinarse hacia delante
Estenosis yatrogénica Inclinación del terreno Peor al subir cuestas Peor al bajar cuestas
Post-laminectomía
Tipo de dolor Calambre Dolor sordo, adormecimiento,
Post-artrodesis pinchazos
Post-quimionucleolisis
Localización del dolor Suele incluir las pantorrillas Glúteos, cara anterior de las
Estenosis post-traumática rodillas
Estenosis secundaria a enfermedad ósea Pulsos periféricos Ausentes Presentes
Enfermedad de Paget Piel Signos tróficos Normal
Fluorosis Atrofia Rara Ocasional
Otras Debilidad muscular Rara Ocasional
Hiperostosis vertebral Dolor de espalda Raro Frecuente
Espondiloartropatías
2.2.12 Sospecha de espondilitis anquilosante
Amiloidosis en trasplante renal
El diagnóstico de una espondilitis anquilosante es relativamente sencillo en las fases
avanzadas de la enfermedad, donde la simple inspección visual suele ser bastante
De estos procesos, resulta fundamental establecer un diagnóstico diferencial con la sugerente, especialmente en presencia de una cifosis armónica de gran amplitud, aso-
claudicación de origen vascular, por sus repercusiones funcionales e implicaciones ciada a una proyección hacia delante de la cabeza y el tronco. Lo realmente difícil es
terapéuticas. Existen algunas características clínicas asociadas al dolor referido por diferenciar en las fases iniciales, la espondilitis asociada a sacroileítis del dolor lumbar
el paciente, que pueden resultar de utilidad a la hora de diferenciar ambos procesos de características inespecíficas, siendo conveniente recurrir a diferentes maniobras
patológicos, como los recogidos en la siguiente tabla: que permitan confirmar la sospecha diagnóstica.
Es una patología que afecta más frecuentemente a varones jóvenes, con una locali-
zación preferente sobre el esqueleto axial. Determina un cuadro clínico caracterizado
por la presencia de dolor, de características típicamente inflamatorias, que de forma
habitual se acompaña de rigidez articular matinal.
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paciente musculoesquelético
Existen diferentes maniobras exploratorias que resultan de utilidad, tanto para poder 2.2.13 Dolor en la cara anterior del muslo
realizar una confirmación diagnóstica como para valorar la evolución clínica experimen-
tada por el paciente en respuesta a los tratamientos aplicados. Un bajo porcentaje de pacientes con dolor lumbar, puede presentar un dolor irradiado
por la cara anterior del muslo, situación que obligará a la realización de un examen
Entre las maniobras existentes destacan la medición de la distancia mentón-esternón clínico dirigido, incluyendo la palpación de los agujeros herniarios, la cadera, la explo-
(valora la flexión cervical), la distancia mentón-articulación acromio-clavicular (valo- ración neurológica de las raíces lumbares altas y la palpación abdominal.
ra la rotación cervical), la distancia occipucio-pared (valora la estática de la columna
cervico-dorsal), la distancia de C7 a la pared (similar a la anterior pero con otro punto
anatómico de referencia), el test de Shöber dorsal (valora la flexibilidad de la columna
dorso-lumbar), expansión torácica (valora la rigidez de las estructuras que componen 2.2.14 Sospecha de patología potencialmente grave
la región torácica), la distancia dedos-suelo (valora la flexibilidad de la columna lumbar), En el escaso porcentaje de pacientes con presencia de signos de alarma en la anam-
el test Shöber lumbar (similar a la anterior, valorando la flexibilidad lumbar), maniobras nesis inicial, será preciso llevar a cabo una examen clínico más completo que incluya la
sacroiliacas (pretenden provocar dolor a nivel sacroilíaco como la apertura o el cierre palpación abdominal, el tacto rectal, el examen ginecológico, etc.
de dichas articulaciones, la maniobra de Fabere o la presión directa sobre el sacro en
decúbito prono). Se debe pensar en la existencia de una patología grave en el caso de un paciente con
dolor lumbar asociado a la existencia de síntomas constitucionales (fiebre, escalofríos,
Para establecer el diagnóstico clínico en las fases iniciales de la enfermedad hay que pérdida inexplicable de peso, alteración del apetito, etc.), síntomas gastrointestinales
recurrir a las denominadas maniobras sacroilíacas. Sin embargo, la mayor parte de las (alteración sin causa aparente del hábito gastrointestinal y/o las deposiciones, pre-
maniobras dirigidas a reproducir el dolor a nivel de las articulaciones sacroilícas son sencia de rectorragia), síntomas genitourinarios (alteraciones de la micción), signos de
escasamente reproducibles, lo que contribuye aún más, a aumentar la dificultad en infección cutánea reciente y/o rigidez articular.
alcanzar un diagnóstico definitivo.
La presencia de esta sintomatología asociada al dolor lumbar, obligará a la realización
Las dos exploraciones más específicas son la presión directa sobre las espinas ilíacas de pruebas complementarias que permitan una confirmación diagnóstica y la deriva-
antero-superiores y la presión sobre el sacro. ción al especialista para recibir un tratamiento más específico.
Presión de las espinas ilíacas antero-superiores. Con el paciente tumbado boca arri-
ba en decúbito supino, se presiona con el talón de ambas manos, la cara interna de
ambas espinas ilíacas antero-superiores. El explorador aplica la presión con los brazos
cruzados, hacia abajo y hacia fuera. La maniobra se considera positiva cuando el pa-
ciente refiere dolor a nivel de las articulaciones sacroilíacas.
Presión sacra. Se realiza con el paciente en decúbito prono, presionando hacia abajo
la mitad inferior del sacro. La prueba se considera positiva si el paciente refiere dolor
directamente sobre el sacro o a nivel de los glúteos, siendo negativa si el dolor se lo-
caliza en la unión lumbosacra o por encima de ella.
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paciente musculoesquelético
DOLOR
ENTUMECIMIENTO
DOLOR Cara lateral del Cara lateral del Triceps, c. anterior y C. Medial del
brazo y medial de la brazo posterior de la mitad antebrazo
escápula Pulgar y dedo del antebrazo dedo Dedo anular y Anteromedial Lateral de Parte poste-
índice corazón. Borde me- meñique del muslo y la pierna y rior de la
dial de la escápula rodilla primeros 3 pantorrilla
DÉFICIT MOTOR Deltoides Extensiones de la Triceps, extensores Flexores de los dedos de los lateral del
Supraespinoso muñeca de la muñeca y dedos. pies talón y pies
Infraespinoso (C6) Biceps flexores. Músculos intrínse- dedo del pie
Romboides (C5-6) Pronadores Pectoral mayor. cos de la mano ATROFIA Cuadriceps Menor o no Gemelos y
y supinadores del Latisimo del dorso específico sóleo
antebrazo
DÉFICIT MOTOR Extensión del Flexión dorsal Flexión
EXPLORACIÓN Abducción del Flexión del codo Extensión de los Flexión de los cuadriceps del dedo plantar del
FÍSICA hombro Extensión de la dedos. dedos. gordo del pie dedo gordo
Rotación interna y muñeca. Pronación Extensión del codo. Pellizco, pulgar - y pie del pie y pie
externa del hombro y supinación del Aducción del hombro. índice
Flexión del codo antebrazo Flexión de la muñeca. EXPLORACIÓN Agacharse y Caminar de Caminar de
FÍSICA levantarse talones puntillas
REFLEJOS Bicipital Braquiorradial Tricipital ––
REFLEJOS Disminución Ninguno Disminución
de reflejo de reflejo
rotuliano aquíleo
Giles, L.G.F. & Giles, L.G.F. (2009). 100 challenging spinal pain syndrome cases. ISBN-13:978-0-442-067167. Edinburgh,
Elsevier/Churchill-Livingstone. Giles, L.G.F. & Giles, L.G.F. (2009). 100 challenging spinal pain syndrome cases. ISBN-13:978-0-442-067167. Edinburgh,
Elsevier/Churchill-Livingstone.
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Tabla 10: Exploración de la radiculopatía cervical Tabla 11: Exploración de la radiculopatía lumbar
CADERA
C5 C6 C7 C8 T1
EXTENSIÓN FLEXIÓN
(glúteo mayor) (psoas ilíaco)
Abducción del hombro. Supinación del codo. Aducción del hombro. Flexión de los dedos. Abducción/Separación
1os 90º de elevación - Supinador. Drosal ancho, perctoral Flexor profundo (i), del pulgar. Abductor
Supraespinoso. mayor. flexor superficial (ii) (separador) corto del
2os 90º de elevación - pulgar L5, S1,2 L1,2,3
deltoides
L2,3,4
L5, S1
Rotación externa del Extensión de la Extensión del codo. Extensión dedos. Abducción y aducción
hombro. Infraespinoso. muñeca. Extensor del Triceps Extensor de los dedos. TOBILLO FLEXIÓN DORSAL PIE
Rotación interna del carpio (i), radial largo (i) común de los dedos, Interóseos dorsales y (tibial anterior,
hombro. Subescapu- y (iii) extersor ulnar o (ii) extensor propio del abductor extensor largo de los dedos,
lar, redondo menor cubital índice y (iii) extensor
propio del meñique L4,5 extensor largo del dedo gordo)
Giles, L.G.F. & Giles, L.G.F. (2009). 100 challenging spinal pain syndrome cases. ISBN-13:978-0-442-067167. Edinburgh,
Elsevier/Churchill-Livingstone.
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Exploración física
Inspección; buscando detectar:
- actitudes antiálgicas;
- asimetrías;
- desviaciones;
- deformidades;
- tumefacciones;
- atrofias o hipertrofias.
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Tabla 13: Movilidad activa total y coeficiente de utilidad (a mayor Tabla 14: Movilidad activa total y coeficiente de utilidad (a mayor
coeficiente mayor utilidad de dicho arco) en miembros superiores coeficiente mayor utilidad de dicho arco) en miembros inferiores
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S1 Lateral tobillo y pie Peroneos laterales, Aquíleo Tabla 16: Pruebas complementarias
Gemelos, sóleo
S2-S4 Perianal Intrínsecos pie RADIOLOGÍA TAC RMN ECO
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• TC: aproximadamente entre 12 y 18 meses; - medidas rehabilitadoras: muy importantes. En líneas generales, la valoración
• RM: aproximadamente 1 año; de la capacidad funcional del paciente no debe realizarse hasta que no se
hayan agotados estas medidas. El seguir un tratamiento rehabilitador, no
• ECO: entre 6 y 12 meses.
siempre implica la necesidad de incapacidad temporal, se ha de valorar si la
situación funcional imposibilita o no el desarrollo de la actividad laboral.
Pruebas de laboratorio
Además de ser útiles para el diagnóstico de la enfermedad, en algunos casos sirven
también para evaluar la severidad o agresividad de la misma:
- parámetros genéricos de inflamación; Bibliografía
- pruebas específicas para valoración de enfermedades poliarticulares
- Pérez AM, Méndez MJ, Ruescas MD, Pérez T. Patologías del Aparato Locomotor . En Ma-
inflamatorias; nual de actuación para médicos del INSS. Patologías del Aparato LocomotorInstituto Nacio-
- pruebas de estudio de inmunidad, para valoración de patología autoinmune nal de la Seguridad Social, 2011.
con afectación del aparato locomotor.
- Guía de valoración de la incapacidad temporal para médicos de atención primaria. Escuela
Electromiografía Nacional de medicina del Trabajo, Instituto Nacional de la Seguridad Social, 2011.
Aporta información muy útil. A valorar siempre en el contexto clínico según afectación - Guía de Valoración del Menoscabo Permanente. 2a edición. Tomo 1o. Instituto Nacional de
y evolución de la patología que se evalúa. Medicina y Seguridad en el Trabajo.
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Tabla 17: Pasos a seguir ante el Accidente de Trabajo Tabla 18: Ayuda a la detección de Enfermedades Profesionales
en Atención Primaria
* A partir de enero de 2013 todos los Trabajadores incluidos en el RETA tendrán las mismas coberturas que los del Régimen General.
** La fecha de la baja suele corresponder al día en que se produce el accidente, independientemente de que ese día el trabajador haya
iniciado su jornada laboral.
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Tabla 20: Sistema de notificación de las enfermedades profesionales La Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social es la responsable de la
administración del Sistema CEPROSS, cuyo desarrollo y tratamiento informático se ha
efectuado por la Gerencia de informática de la Seguridad Social.
La comunicación inicial del parte se lleva a cabo dentro de los diez días hábiles siguien-
tes a la fecha en que se haya producido el diagnóstico de la enfermedad profesional.
La totalidad de los datos contemplados en el parte se deben transmitir en el plazo
máximo de los cinco días hábiles siguientes a la comunicación inicial, a cuyo fin la em-
presa deberá remitir la información que le sea solicitada por la entidad gestora o por la
mutua para que ésta pueda dar cumplimiento a los plazos anteriores.
Tabla 21: Plazos para la tramitación del parte de enfermedad profesional (I)
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Tabla 22: Plazos para la tramitación del parte de enfermedad profesional (II) 2.3 Exploración específica en geriatría. El paciente con
deterioro cognitivo
La exploración del dolor en el paciente anciano no difiere de entrada de la que debe
practicarse en un paciente más joven, pero dada la elevada frecuencia de pluripatolo-
gía asociada, deterioro cognitivo y limitaciones para el desarrollo de la función física,
debe incluir una serie de elementos de valoración objetiva y estructurada para resultar
completa. Es bien conocido que el dolor es un síntoma infradiagnosticado, y por lo
tanto infratratado en este segmento de la población, fenómeno que puede condicionar
la aparición de múltiples consecuencias negativas, tanto desde el punto de vista de de
la independencia funcional del paciente (inmovilidad, atrofia muscular, inestabilidad y
caídas, alteración del ritmo del sueño, anorexia...) como del de alteraciones en la esfera
psicosocial, cognitiva y conductual (agitación, agresividad, desesperanza, depresión,
aislamiento social...)
A la información contenida en el sistema CEPROSS podrán acceder, a efectos del En general, los principios de evaluación del dolor en pacientes ancianos se pueden ex-
desarrollo de sus respectivas competencias en esta materia, la Administración de la Se- trapolar a partir de las recomendaciones globales que ofrece la Sociedad Americana de
guridad Social, la Administración Laboral y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Geriatría (SAG) y las recomendaciones más específicas dirigidas a pacientes con alte-
raciones cognitivas en los que la evaluación debe ser más atenta dadas las limitaciones
que los instrumentos de valoración habituales presentan en este subgrupo de pacientes.
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3. Un examen físico exhaustivo, orientado a la detección tanto de las causas más Obviamente, en situaciones de demencia moderada – grave o en pacientes que por
habituales de dolor nociceptivo o neuropático del paciente anciano, como a el motivo que sea no son capaces de comunicarse, parte de esta evaluación deberá
la de las manifestaciones de patología habitual en esta población y que suele ser sustituida por una valoración que dependerá más del concurso de terceros (cuida-
asociarse a la presencia de dolor: dores, familiares) o de la habilidad del examinador como observador para detectar la
a. Dolor nociceptivo: artrosis (especialmente espondiloartropatías y dolor presencia probable de dolor. Las recomendaciones según el tipo de déficit cognitivo
facetario), osteoporosis complicada (fracturas), artropatías inflamatorias presente serían las siguientes:
(condrocalcinosis, gota, artritis reumatoide), enfermedad de Paget,
polimialgia reumática, angina crónica.
b.Dolor neuropático: neuralgia postherpética, polineuropatía diabética, 2.3.1.1 Pacientes cognitivamente intactos o con demencia leve – moderada
radiculopatía asociada a espondilopatía degenerativa, dolor central post-
ictus, dolor miofascial. 1. Orientativamente se trataría de pacientes con un resultado en el MEC no
inferior a 20, un Pfeiffer no superior a 3 – 4 errores y un GDS-FAST no superior
c. Patología aguda habitualmente dolorosa: cualquier enfermedad inflamatoria a 4. En estos pacientes se considera que la forma de valoración más fiable,
aguda, infecciones, lesiones de la piel o las mucosas, constipación, como ocurre en los pacientes con una situación cognitiva conservada,
diverticulitis, retención aguda de orina, fracturas óseas… sigue siendo la respuesta directa al interrogatorio del dolor. Sin embargo,
4. El examen físico en población anciana debe incluir sistemáticamente una es preciso ser cuidadoso, ya que a menudo los pacientes ancianos, incluso
evaluación estructurada de los órganos de los sentidos, el estado de la piel, cuando su situación cognitiva resulta ser objetivamente correcta, precisan de
faneras, mucosas y dentición, así como un tacto rectal, un examen genital/ preguntas más dirigidas, uso de equivalencias semánticas para caracterizar
ginecológico somero, y una exploración neurológica completa que permita el dolor (“molestia, malestar, pesadez, quemazón, resquemor…”) y un tiempo
caracterizar no tan sólo la presencia de déficits sensitivomotores o afectación de respuesta más prolongado para poder contestar adecuadamente al
de pares craneales, sino también la presencia de alteraciones del habla, la interrogatorio.
postura, el equilibrio, el movimiento y la marcha, y la existencia de signos 2. En estos pacientes se debe intentar conseguir una valoración cuantitativa
sugestivos de afectación cortical en demencia (conocidos como “signos de del dolor mediante el uso de escalas a tal efecto validadas, así como intentar
línea media”, tales como el reflejo palmomentoniano, el glabelar, el de prensión administrar instrumentos que evalúan la repercusión multifactorial del dolor,
y el de succión, la ecolalia/ecopraxia, etc). teniendo en cuenta que a priori debe intentar establecerse, mediante la
aplicación de los instrumentos de valoración geriátrica, si el dolor es un
5. Una evaluación detallada de la situación cognitiva del paciente, mediante el epifenómeno sobreañadido a una situación previa de deterioro cognitivo
uso de instrumentos diagnósticos validados (especialmente el Mini examen o transtorno afectivo, o si por el contrario es la causa de las alteraciones
Cognoscitivo), que permita determinar hasta qué punto la evaluación estándar detectadas con las escalas que evalúan estas esferas.
del dolor puede efectuarse de forma parecida a la practicable en población no
a. Los instrumentos numéricos tipo escala visual del dolor (Numerical Rating
anciana, o si por el contrario deben aplicarse instrumentos específicos.
Scale, NRS) y las escalas categóricas verbales (Verbal Descriptor Scale y
6. La evaluación cognitiva, acompañada de una evaluación sistematizada de la Verbal Rating Scale, VDS/VRS) han sido evaluados en población anciana
función afectiva (por ejemplo mediante el uso de la Geriatric Depression Scale sin deterioro cognitivo significativo o deterioro leve y ofrecen un rendimiento
- GDS) y, especialmente en pacientes con enfermedad aguda, de instrumentos similar al observado en población adulta de menor edad; en el caso de
de detección de cuadro confusional/delirium (por ejemplo el Confussion pacientes con deterioro leve parece que la VRS es la que presenta mayor
Assessment Method – CAM) debería permitir también determinar hasta qué efectividad. Opcionalmente se pueden utilizar instrumentos de tipo visual
punto la presencia del dolor es la responsable de la situación de confusión, como las escalas pictóricas (Faces Pain Scale) o los “termómetros” de
depresión o apatía que puede estar experimentando el paciente. dolor, que han sido validadas en pacientes españoles y parecen ser más
apreciadas por aquellos que presentan un pobre nivel de instrucción.
120 121
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b. Por lo que refiere a los instrumentos de valoración multidimensional del también en los circuitos neuronales de reconocimiento de estímulos dolorosas
dolor, los que se recomiendan en población anciana son el Pain Disability y procesamiento de la respuesta dolorosa, tanto de los componentes
Index, el Brief Pain Inventory o, sobretodo, el Geriatric Pain Measure, que puramente sensitivos como de los emocionales, autonómicos o la memoria.
en su versión reducida (GPM-Short Form) consta de tan sólo 12 preguntas:
2. Así, se considera que en la enfermedad de Alzheimer moderada o grave, los
pacientes presentan un umbral de dolor parecido al de ancianos sanos, pero
Tabla 23: Geriatric Pain Measure-Short Form la tolerancia al mismo es superior, con una reducción asociada de la respuesta
(adaptado del original en inglés) autonómica/vegetativa y un embotamiento de los componentes emocionales
asociados a la experiencia dolorosa. Significativamente, la respuesta al efecto
¿Resulta doloroso o ha tenido que dejar de... placebo va perdiéndose a medida que progresa la enfermedad.
1- Realizar actividades de intensidad moderada (pasar la aspiradora, mover una mesa, jugar a bolos…)? 3. La valoración del dolor en estos pacientes es por lo tanto más compleja. A
partir de estudios realizados con otros subgrupos de pacientes que presentan
2- Subir más de un piso de escaleras? dificultades para comunicar las características de la experiencia dolorosa
3- Andar más de 180 metros? (niños pequeños, pacientes en unidades de intensivos) se recomienda utilizar
un abordaje sistemático que tenga en cuenta, y en el orden siguiente, una serie
4- Andar menos de 180 metros? de elementos de valoración:
¿Debido a la presencia del dolor ha tenido usted, en relación al trabajo u otras actividades, que... a. Intentar disponer de una descripción del dolor referida por el paciente,
ya que en ocasiones pacientes con formas moderadas e incluso graves
5- Limitar el tiempo dedicado? (según las puntuaciones del MEC y el estadio GDS-FAST) son capaces
de comunicar aceptablemente sus sensaciones y participar en la
6- Limitar los objetivos derivados?
autoevaluación mediante escalas tipo NRS/VRS
7- Incrementar el esfuerzo necesario? b.Examen físico completo y busqueda activa de patología o lesiones
potencialmente causantes de dolor, tal y como se expuso al inicio de este
8- Aplicar un mayor esfuerzo?
capítulo
9- ¿Le cuesta dormir? c. Evaluación de la respuesta fisiológica al dolor. Si bien la presencia de dolor
suele acompañarse de alteraciones fisiológicas fácilmente detectables
10- ¿Le impide el dolor disfrutar de actividades sociales o recreativas?
mediante el examen físico (taquicardia, hipertensión, taquipnea) o pruebas
11- En una escala de 0 a 10, ¿cuál es la intensidad actual del dolor que usted presenta? de laboratorio (niveles de ACTH, catecolaminas, endorfinas) estas medidas
carecen de la suficiente sensibilidad o especificidad como para recomendar
12- En los últimos siete días, ¿cuan intenso ha sido en promedio el dolor que usted ha presentado? su uso.
d.Detección de conductas o actitudes sugestivas de la presencia de
dolor. En pacientes incapaces de comunicarse, la detección de este
tipo de conductas y actitudes por parte de observadores entrenados,
2.3.1.2 Pacientes con deterioro cognitivo moderado – grave especialmente en el momento en que se llevan a cabo actividades que
pueden generar dolor (transferencias, higiene) puede contribuir eficazmente
1. Conceptualmente se trata de pacientes con un MEC inferior a 20, un Pfeiffer a la detección de éste. Algunas de estas conductas y actitudes son las
que muestra 5 ó más errores y con una clasificación GDS-FAST igual o siguientes:
superior a 5. En estas fases más avanzadas, las lesiones cerebrales asociadas
a la presencia de deterioro cognitivo suelen ser más extensas, repercutiendo
122 123
paciente musculoesquelético
i. Expresión facial: muecas, ceño fruncido, ojos apretados, frente cidentes con todas las conductas y actitudes recogidas por las recomendaciones de
arrugada, parpadeo rápido la SAG. La escala PAINAID es más simple, valora tan solo la presencia e intensidad de
ii. Expresión verbal: quejidos, lamentos, lloriqueo, respiración ruidosa, 5 ítems (respiración, vocalización, expresión facial, lenguaje corporal y consolabilidad)
llamadas de socorro, agresividad verbal en una escala de 0 a 2 para cada uno, para una puntuación máxima de 10.
iii. Movimiento corporal: postura tensa o rígida, balanceos, restricción de e. Valoración de los cuidadores y familiares: tanto los cuidadores habituales
determinados movimientos, alteraciones en la marcha (enfermeras, auxiliares, cuidadores) como los familiares del paciente deben
iv.Estado mental: confusión, irritabilidad, llanto incoercible ser preguntados para ayudar a determinar cuáles son las manifestaciones
v. Relaciones interpersonales: agresividad, resistencia, actitud disruptiva, habituales de dolor y los cambios observados en la evolución
aislamiento social f. Ensayo terapéutico: finalmente, según la intensidad del dolor inferido a partir
vi.Actividades rutinarias: cese de rutinas habituales, pérdida de apetito, de este esquema de valoración, se debe añadir el tratamiento analgésico
alteración del patrón del sueño, deambulación errática potencialmente necesario para el control (dosis moderadas de paracetamol
o de opiáceos) Si el dolor es la causa de las alteraciones detectadas, se
Para estructurar mejor este componente de la evaluación del dolor en pacientes con conseguirá un rápido control sintomático, evitando los efectos secundarios
demencia se han desarrollado múltiples escalas de valoración del comportamiento, de la medicación sedativa de uso habitual para el control de los síntomas
con resultados variables por lo que concierne a su fiabilidad, validez y reproductibili- conductuales cuando no se sospecha el dolor como causa.
dad. La escala ideal debería ser capaz de identificar a aquel paciente cuyas manifes-
taciones de dolor se reducirán significativamente tras la administración de analgesia.
Según el método de observación aplicado se subdividen en:
De todas ellas, las más utilizadas son la PAINAID y la PACSLAC. Ambas se han desa-
rrollado y se aplican en centros de larga estancia y están dirigidas a la valoración del
dolor crónico. La escala PACSLAC incluye 60 ítems agrupados en 4 categorías, coin-
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paciente musculoesquelético
2.4 Pruebas diagnósticas relacionadas con dolor 2.4.1.2 Pruebas complementarias en el dolor lumbar
2.4.1 Pruebas diagnósticas relacionadas con el dolor musculoesquelético La selección de una determinada prueba complementaria dependerá de la sospecha
diagnóstica del médico. En el caso de una posible enfermedad grave, con riesgo po-
La anamnesis y la exploración neurosensorial han de preceder a la realización de cual- tencial para la vida del paciente, es preferible una prueba muy sensible con capacidad
quier prueba complementaria. El resto de técnicas y pruebas diagnósticas son se- para descubrir precozmente pequeñas alteraciones.
cundarias a la hora de diagnosticar el dolor y en ningún caso sustituyen a la clínica.
De hecho, según la evidencia científica, actualmente son pocas las pruebas comple-
mentarias sensibles para la lesión de la vía nerviosa nociceptiva, pudiendo dar falsos
Tabla 24: Signos de alarma, indicativos de la posible existencia
negativos con relativa facilidad. de un trastorno raquídeo grave que precisa un estudio diagnóstico
activo del dolor lumbar
Los objetivos de las pruebas complementarias pueden ser, entre otros:
Signos de alarma
- contribuir al diagnóstico etiológico;
- ayudar a esclarecer los mecanismos fisiopatogénicos que originan los - edad de comienzo <20 ó >55 años (¿tumor?);
diferentes síntomas de dolor; - traumatismo violento (caída de altura, accidente de tráfico);
- colaborar en la evaluación de la eficacia del tratamiento.
- dolor constante, progresivo, no mecánico;
No todas las pruebas están disponibles en todos los medios y algunas de ellas sólo se
usan en la investigación. - dolor dorsal;
- antecedentes personales: carcinoma, tratamiento corticoesteroideo, toxicomanía y VIH;
2.4.1.1 Cinco principios básicos
- síntomas generales: pérdida de peso, fiebre;
- La prueba de referencia obligada en el diagnóstico del dolor es la anamnesis - limitación intensa y persistente de la flexión lumbar;
exhaustiva para la elaboración de una historia clínica completa, junto con
la correcta exploración neurológica somatosensorial. El resto de técnicas - síntomas neurológicos generalizados;
diagnósticas son complementarias y en ningún caso pueden sustituir estas dos.
- deformidad estructural;
- El dibujo topográfico marcando las áreas dolorosas contribuye a acotar el
territorio neurológico dañado, en el cual se valorará cualquier intervención - pruebas positivas: VSG >25; radiografías simples: aplastamiento vertebral u osteolisis;
traumatológica.
Síndrome de la cola de caballo, enfermedad neurológica difusa o ambas
- Las escalas de dolor son un método orientativo para el diagnóstico adecuado.
Junto con la evaluación psicológica y los test de calidad de vida específicos, - trastornos de la micción / retención urinaria;
su aplicación puede ser muy útil en determinados cuadros de dolor crónico.
- hipotonía del esfínter anal o incontinencia fecal;
- Los nuevos estudios neurofisiológicos con potenciales evocados
somatosensoriales con láser (PEL) aportan la posibilidad de evaluar la fibra fina - anestesia en silla de montar (hipoestesia en ano, periné o genitales);
nerviosa nociceptiva.
- deterioro motor progresivo o extenso en las extremidades inferiores o alteración de la marcha;
- Las demás pruebas complementarias, sobre todo de imagen, ayudan al
diagnóstico de las grandes lesiones nerviosas, pero pueden dar muchos falsos - nivel sensitivo.
negativos. sigue
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paciente musculoesquelético
de la historia clínica y la exploración física (TABLA 15), que pueden ser de utilidad para
Enfermedades inflamatorias
sugerir la realización de una determinada prueba diagnóstica. En su ausencia, los exá-
- aparición gradual antes de los 40 años de edad;; menes complementarios pueden retrasarse de 7 a 8 semanas, sin riesgo de dejar de
diagnosticar procesos graves, y reduciendo la probabilidad de relacionar la existencia
- rigidez matutina intensa; de cambios propios de la edad en los estudios de imagen con el desarrollo de un cua-
- limitación persistente de la movilidad vertebral en todos los recorridos; dro doloroso agudo.
- afectación de las articulaciones periféricas; En los pacientes con dolor lumbar de más de 8 semanas de evolución, que no mejo-
ran tras la aplicación de un tratamiento conservador correctamente indicado, y/o con
- iritis, exantemas cutáneos, colitis, exudado uretral; sospecha de una lesión radicular, puede ser útil la solicitud de determinadas pruebas
complementarias.
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paciente musculoesquelético
En líneas generales, las pruebas de laboratorio son de poca ayuda en el diagnóstico - Velocidad de sedimentación globular. Probablemente constituye la prueba de
del dolor lumbar, no recomendándose su realización de forma rutinaria en ausencia de mayor utilidad, después de la historia clínica, para diferenciar las causas graves
datos clínicos de alarma. o inflamatorias de dolor lumbar, de las causas puramente mecánicas. Es un
reactante de fase aguda, cuya elevación sugiere la presencia de inflamación o
Con objeto de conocer las determinaciones analíticas más importantes, y sus posibles lesión tisular, independientemente de cuál sea su origen.
variaciones en procesos que pueden asociarse al dolor lumbar, se destaca brevemente
el valor diagnóstico de las pruebas más importantes. Es importante saber que los valores normales varían en función del sexo y la edad del
paciente.
Tabla 26: Clasificación de pruebas diagnósticas Debido a su elevada sensibilidad es considerada por algunos autores como la prueba
complementarias de screening de mayor valor para detectar afecciones no mecánicas de la columna
vertebral lumbar. Una VSG muy elevada, igual o superior a 100 mm/h o más, se asocia
PRUEBAS DIAGNÓSTICAS SEGÚN EL MEDIO PRUEBAS DIAGNÓSTICAS POR IMAGEN frecuentemente a neoplasia, especialmente metástasis, al mieloma múltiple, infeccio-
UTILIZADO
nes bacterianas agudas, enfermedades del tejido conectivo, y espondilitis anquilosante
- Radiofiagnóstico: radiología convencial, tomografía - Anatomía: radiografía, ecografía, TAC y RMN
axial computerizada (TAC), resonancia magnética en fase activa.
nuclar (RNM), ecografía y otras (epidurografía,
discografía…) - Hematíes, hematocrito y hemoglobina. Es más fiable la cifra de hemoglobina
que el hematocrito. En un paciente con dolor lumbar, sin otra sintomatología
- Medicina nuclear: gammagrafía ósea y tomografía - Funcionalidad y metabolismo:
por emisión protones(PET). o proceso, la presencia de anemia habitualmente supone un proceso
inflamatorio sistémico que determina una disminución en la formación de
- Neurofisiología clínica: electromiografía (EMG), - Funcionalidad y metabolismo: RNM funcional, PET,
técnicas de velocidad de conducción, potenciales SPECT hematíes o un aumento en su destrucción periférica. Las enfermedades
evocados (PES), potenciales evocados por láser inflamatorias del aparato locomotor suelen provocar la llamada anemia de
(PEL), electroencefalografía (EEG) los procesos crónicos, que habitualmente es normocrómica y normocítica,
- Otras: vibrámetro, tesmotest, algómetro, Neurome- aunque en ocasiones presenta un carácter hipocromo y discretamente
ter, punción lumbar, pruebas de estudio molecular, microcítico.
biopsia nerviosa….
Las neoplasias, especialmente las hematológicas, también suelen producir anemia, por
lo general normocrómica y normocítica, aunque la anemia puede llegar a ser intensa.
Tabla 27: Directrices para la evaluación del dolor La administración mantenida de salicilatos y antiinflamatorios no esteroideos, puede
neuropático llegar a provocar microsangrados digestivos, que finalmente pueden determinar la pro-
- Estudios de electrodiagnóstico (estudios de conducción nerviosa y PES): grado A de recomendación; ducción de un ferropenia. La anemia ferropénica se caracteriza por ser hipocroma y
microcítica, con descenso de la sideremia, aumento de la transferrina y caída del índi-
- Reflejos nociceptivos: grado A de recomendación; ce de saturación (las principales causas de ferropenia son las hemorragias crónicas,
y dentro de éstas, destacan en primer lugar las de origen ginecológico, seguidas en
- Potenciales evocados por láser (PEL): grado B de recomendación; frecuencia por las de origen digestivo).
- Neuroimagen funcional: grado B de recomendación; - Leucocitos y fórmula leucocitaria. El número de leucocitos y la fórmula
- Biopsica de nervio periférico: grado B de recomendación. leucocitaria son por lo general normales en el dolor lumbar de características
mecánicas.
(The National Guideline Clearinghouse 2008).
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paciente musculoesquelético
Los pacientes tratados con corticoides pueden desarrollar una leucocitosis más o me-
Tabla 28: Utilidad de las pruebas de laboratorio
nos intensa en función de la dosis administrada, con una mayor proporción de neu-
en el diagnóstico del dolor lumbar trófilos.
Prueba Procesos asociados al dolor lumbar donde puede estar alterado
VSG AUMENTADA:
- Infección espinal B) Determinaciones bioquímicas en sangre
- Espondiloartropatía
- Neoplasia - Fosfatasa alcalina sérica. Puede encontrarse aumentada en cualquier proceso
- Metástasis, mieloma múltiple patológico con aumento de la actividad osteoblástica, fundamentalmente
HEMATÍES, HEMATOCRITO, ANEMIA: la enfermedad de Paget, las metástasis óseas, el hiperparatiroidismo, la
HEMOGLOBINA - Hb >10 g/dl, normocítica, normocrómica: procesos crónicos – osteomalacia, el raquitismo y la fase de curación de las fracturas. Entre las
enfermedad sistémica, inflamatoria, infecciones crónicas
- Hb <10 g/dl, VCM y HCM variable: neoplasia enfermedades que podrían cursar clínicamente con dolor lumbar, las que
- Anemia ferropénica: microsangrados (AINES) presentan valores séricos más elevados de fosfatasa alcalina (por encima de
LEUCOCITOS, FÓRMULA LEUCOCITOSIS: 30 veces su valor normal) son las metástasis óseas y la enfermedad de Paget.
LEUCOCITARIA - Infección espinal
- Espondiloartropatía - Fosfatasa ácida sérica. Niveles elevados, fundamentalmente en varones
- Neoplasia. Metástasis en médula ósea mayores de 50 años, sugiere generalmente, carcinoma prostático metastásico.
- Tratamiento corticoideo
FOSFATASA ALCALINA MUY AUMENTADA: - Calcio en sangre. El hiperparatiroidismo primario cursa habitualmente con
- Metástasis óseas niveles séricos elevados de calcio y disminuidos de fósforo. Otras posibles
- Enfermedad de Paget causas de hipercalcemia son las neoplasias (por diferentes mecanismos como
AUMENTADA: la destrucción ósea – metástasis óseas, mieloma múltiple -, la secreción
- Neoplasia ectópica de paratohormona, la liberación de prostaglandinas, etc.), la
- Fractura
- Hiperparatiroidismo hipervitaminosis D y las inmovilizaciones prolongadas.
- Osteomalacia
Las causas de hipocalcemia crónica también son variadas, destacando el hipopa-
FOSFATASA ÁCIDA AUMENTADA: ratiroidismo, la osteomalacia y todos aquellos procesos que cursan con déficit en la
- Carcinoma prostático
absorción o metabolización de la vitamina D (malabsorción, osteodistrofia renal, dosis
CALCIO, FÓSFORO SÉRICOS HIPERCALCEMIA: elevadas de anticonvulsivantes, etc.). Además, la administración prolongada de corti-
- Hiperparatiroidismo
- Neoplasia ósea. Metástasis coides puede llegar a producir hipocalcemia.
- Trastornos metabólicos
- Proteínas séricas y proteinograma. En las enfermedades inflamatorias
PROTEÍNAS TOTALES, HIPERGAMMAGLOBULINEMIA POLICLONAL: sistémicas crónicas, y en las infecciones crónicas puede estar elevado el
PROTEINOGRAMA - Enfermedad inflamatoria crónica
- Infección crónica nivel de globulinas y proteinas totales, que determina una elevación difusa o
HIPERGAMMAGLOBULINEMIA MONOCLONAL: policlonal en el proteinograma de las gammaglobulinas.
- Mieloma múltiple
Un aumento monoclonal de las gammaglobulinas aparece en el mieloma múltiple y en
La presencia de una leucocitosis neutrofílica obedece por regla general a la presencia algunas afecciones benignas, como las gammapatías monoclonales.
de una infección. También las neoplasias malignas con metástasis en médula ósea,
pueden producir leucocitosis, y determinados tumores (broncopulmonares, hepatobi-
liares, gástricos y renales) pueden producir reacciones neutrofílicas con hiperleucoci-
tosis.
132 133
paciente musculoesquelético
C) Análisis básico de orina. La excesiva valoración de la utilidad real de la radiología en el dolor lumbar y la actitud
defensiva que frecuentemente se adopta en un intento por evitar cometer un error
Un análisis básico y un sedimento de orina pueden ser de cierta ayuda en los casos diagnóstico, se enfrentan con el claro objetivo de limitar en la medida de lo posible, la
en que la historia clínica sugiera un probable origen genitourinario del dolor lumbar. El realización de exploraciones complementarias innecesarias, además de no someter al
hallazgo patológico más común es la leucocituria, sugestiva de infección vesicouretral paciente a radiaciones ionizantes excesivas e inadecuadas.
o renal, que obligará a realizar un cultivo de orina.
Como consecuencia de todo ésto, es preciso conocer los criterios que deben seguirse
La presencia de hematuria obliga a estudiar el tracto urinario, con objeto de descartar para protocolizar la solicitud de estudios radiológicos en el dolor lumbar.
la posibilidad de neoplasia renal o de las vías urinarias, litiasis o infección crónica.
- Significación clínica de los hallazgos radiológicos. La dificultad que en
La proteinuria se asocia a infección, tumor o glomerulonefritis, precisando la realización ocasiones comporta el examen físico de la columna vertebral lumbar ha
de estudios adicionales. conducido a muchos profesionales a depositar una confianza excesiva en las
pruebas de imagen.
Durante años, dominó la creencia de que la mayor parte de los dolores vertebrales
2.4.2 Pruebas de imagen
tenían su origen en procesos de tipo degenerativo, fundamento utilizado frecuente-
2.4.2.1 Radiografía simple de columna lumbar mente para explicar al paciente la posible causa de sus molestias. Por otro lado, la
experiencia de que los signos degenerativos eran ciertamente frecuentes en pacientes
El dolor lumbar, es el síntoma que determina con mayor frecuencia la solicitud de ra- clínicamente asintomáticos, condujo a varios investigadores a llevar a cabo estudios
diografías entre los pacientes no ingresados, por su accesibilidad. dirigidos a comparar poblaciones con y sin dolor lumbar. La conclusión de estas inves-
tigaciones fue, que no existía una relación significativa entre la artrosis radiológica y la
Sin embargo, las diferentes revisiones sobre el tema y la opinión de los expertos en la sintomatología del enfermo, comprobándose además, que por encima de los 50 años,
materia abogan por limitar su uso a pacientes concretos y a un pequeño número de el 80% de las radiografías presentan cambios degenerativos.
proyecciones.
Otros hallazgos radiológicos frecuentes, como las anomalías congénitas de transición
El valor de la radiología simple en el dolor lumbar está limitado por el bajo rendimiento lumbosacra, la osteoporosis, la espina bífida oculta, las escoliosis leves o moderadas,
de hallazgos que alteran el tratamiento, la pobre asociación entre los hallazgos radioló- la hiperlordosis, la hiperostosis anquilosante vertebral, etc., se encuentran casi por
gicos y la sintomatología del paciente, los desacuerdos en la interpretación de dichos igual en pacientes con y sin dolor lumbar.
hallazgos, la considerable irradiación gonadal que pueden producir y finalmente, los
costes asociados. Por otro lado, hay ciertas alteraciones como espondilolisis, espondilolistesis, estenosis
radiológica del canal vertebral, escoliosis lumbar grave, etc., que aunque se asocian
En pacientes con dolor lumbar, sólo en un pequeño porcentaje de casos (entre el 25% habitualmente con un riesgo más elevado de dolor lumbar, se observan con relativa
y el 30%) los estudios radiológicos son normales. En el porcentaje restante, aparecen frecuencia en pacientes clínicamente asintomáticos, lo que dificulta el establecimiento
signos radiológicos que frecuentemente tienen escaso valor para la interpretación y el de una posible relación causa-efecto. Únicamente en el caso de detectar la presencia
tratamiento de los síntomas. Esto ya lo objetivó Nachemson, quien comprobó que sólo de una lesión tumoral, una infección, signos de una espondiloartropatía inflamatoria o
en una de cada 2.500 radiografías de la columna vertebral dorsolumbar de pacientes de una fractura vertebral reciente, se podrá afirmar que la alteración estructural detec-
adultos, aparecían hallazgos de valor diagnóstico no sospechados clínicamente. tada es muy probablemente la responsable directa de la sintomatología dolorosa del
Actualmente se admite que sólo debería solicitarse un estudio radiológico en presencia paciente.
de dolor lumbar, cuando exista la sospecha clínica de una patología específica (tumor, Es importante conocer, que los estudios radiológicos de la región lumbar no tienen
infección, etc.) o en el caso de que el dolor persista a pesar del tratamiento aplicado. capacidad de predecir el riesgo futuro de desarrollar un dolor lumbar. Durante años,
en algunas empresas se realizaban screening radiológicos en un intento por detectar
134 135
paciente musculoesquelético
a trabajadores con un riesgo elevado de desarrollar dolor lumbar. Sin embargo, dife- benigno y autolimitado en el tiempo) y un dolor no mecánico sugerente de una patolo-
rentes estudios publicados han demostrado la ausencia de una asociación significativa gía potencialmente grave.
entre los hallazgos radiológicos y la posibilidad de desarrollar futuros episodios de
dolor lumbar. Por lo tanto, siguiendo las pautas mencionadas en los párrafos anteriores, se indicará
la realización de un estudio radiológico de la región lumbar, o en presencia de alguna
Además de lo comentado, hay otros argumentos que permiten descartar una fuerte de las siguientes situaciones:
correlación entre la clínica dolorosa lumbar y los hallazgos radiológicos, como que las
imágenes radiológicas permanecen inalterables con el transcurso del tiempo, inde- - los casos de dolor lumbar persistente, después de 6-7 semanas de evolución,
pendientemente de que se produzcan cambios importantes en la situación clínica del manejado adecuadamente de forma conservadora;
paciente. - déficit motor evidente y/o progresivo;
- Repercusión de los hallazgos radiológicos en la toma de decisiones - síntomas y signos sospechosos de enfermedad grave (dolor nocturno, dolor
terapéuticas. Supuestamente, la solicitud de una prueba complementaria sólo en reposo, fiebre, escalofríos, etc.);
debería llevarse a cabo en el caso de que existiera la probabilidad de que
aportara información de utilidad para plantear una actitud terapéutica. - antecedentes de neoplasia maligna;
En la mayor parte de los casos, se encuentran alteraciones sin una clara significación
diagnóstica, pronóstica o terapéutica. Otras veces, el hallazgo radiológico puede apor- - sospecha de espondiloartropatía inflamatoria;
tar información diagnóstica (espondilolisis, espindilolistesis, estenosis de canal), pero - adicción a drogas por vía parenteral (ADVP);
sin una clara influencia en el manejo terapéutico inicial, siendo preciso dar un margen
de tiempo y confiar en la eficacia del tratamiento pautado, antes de valorar otras op- - traumatismo reciente;
ciones de tratamiento.
- alcoholismo;
Incluso en presencia de signos positivos de irritación radicular, no es necesario realizar
automáticamente una estudio radiológico de la región lumbar. La mayor parte de estos - corticoterapia prolongada;
episodios suelen resolverse de forma conservadora, y sólo en los casos que no mejo-
- edad > 50 años;
ran después de un tratamiento conservador adecuadamente pautado, después de un
periodo mínimo de 6-7 semanas, es preciso valorar otras posibilidades terapéuticas, - problemas laborales / legales;
incluyendo el tratamiento quirúrgico. Los únicos síntomas de afectación radicular que
precisan un estudio diagnóstico específico de forma urgente, son aquellos que se - Proyecciones radiológicas. Las recomendaciones para la realización de un
presentan en el contexto clínico de un síndrome de la cola de caballo, en presencia de estudio radiológico en el dolor lumbar son muy variadas, pudiendo ir desde
un déficit neurológico progresivo, o en el caso de una afectación plurirradicular (muy una proyección simple posteroanterior y lateral, hasta un estudio radiológico
probablemente en relación con una lesión tumoral). funcional.
Las entidades clínicas en las que es necesario llevar a cabo un estudio diagnóstico Así, la mayoría de los autores consideran que un estudio radiológico centrado en L5-
precoz, al precisar un tratamiento especializado, son fundamentalmente el tumor, la S1 no añade información suplementaria a la radiografía lateral centrada a nivel L4-L5.
infección y la fractura vertebral reciente. En estos casos, es preciso investigar en la Además, concluyen que las radiografías oblicuas no son necesarias de una forma
historia clínica del paciente, buscando datos que orienten sobre alguna de estas pa- rutinaria en la evaluación inicial del paciente con dolor lumbar, estando únicamente in-
tologías, con el objeto de solicitar las pruebas complementarias adecuadas en la con- dicadas en aquellos pacientes con elevada sospecha de presentar una espondilolisis,
sulta médica inicial. La historia clínica del paciente con dolor lumbar de instauración una fractura vertebral de estrés o una pseudoartrosis, siempre y cuando las proyeccio-
reciente, permitirá al médico encargado de controlar la evolución clínica del paciente nes radiológicas simples no muestren adecuadamente la lesión sospechada. Por otro
que lo presenta, diferenciar entre un dolor de características mecánicas (generalmente lado, las radiografías dinámicas, habitualmente empleadas para descartar la presencia
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paciente musculoesquelético
de una inestabilidad vertebral, tienen el condicionante de que es preciso que el pa- complicaciones vasculares o digestivas, como el ileo paralítico que puede producir un
ciente valorado tenga una buena movilidad vertebral, por lo que resulta prácticamente hematoma retroperitoneal, además de la impotencia funcional en el músculo psoas
impensable realizar estos estudios radiológicos en la fase aguda del dolor lumbar, lo (que constituye la estructura blanda que mejor se aprecia en este tipo de proyección).
que disminuye la utilidad de dichos estudios en ciertas fases evolutivas del episodio
lumbar doloroso. La visualización de los pedículos precisa algo de práctica, encontrándose también
perpendiculares a la vértebra en la proyección posteroanterior. La ausencia de uno
- Estudios radiológicos repetidos. El estudio radiológico no debería repetirse por de ellos (constituyendo el llamado ‘’signo del buho’’), es característica de las lesiones
regla general, salvo que apareciera un cambio evidente en la sintomatología líticas metastásicas que pueden asentar en la columna vertebral lumbar.
clínica del paciente o en su exploración física, cambio que hiciera sospechar
la presencia de determinados procesos específicos. También debería Las carillas articulares se visualizan paralelas y simétricas a las espinosas, sirviendo
considerarse su realización, en el caso de que aparecieran signos radiológicos también para observar las posibles anomalías en la rotación vertebral.
sospechosos de una enfermedad importante, en cuyo caso, quizá fuera más La proyección radiológica lateral permite una buena visualización de la columna lum-
indicado recurrir a un especialista o a otras pruebas de imagen con un mayor bosacra, pudiendo analizar la calidad ósea, la existencia de alteraciones degenerativas
poder de resolución. (osteofitos, esclerosis, pinzamiento articular, geodas), la alineación de los cuerpos ver-
- Aspectos a considerar en los estudios radiológicos de la columna lumbar. tebrales, la pérdida de la lordosis lumbar fisiológica que puede traducir un tono muscu-
Estos estudios son adecuados para estudiar la integridad osteo-articular, lar aumentado, o bien la existencia de una hiperlordosis lumbar, que puede determinar
la alineación vertebral, la existencia de curvas patológicas, la ausencia una disminución de los espacios intervertebrales lumbosacros. En condiciones norma-
o no de signos degenerativos y, puede ser útil para descartar patología les, la distancia del espacio intervertebral aumenta desde L1 a L4, produciéndose un
general intercurrente, como por ejemplo, una patología infecciosa, tumoral o estrechamiento de los agujeros intervertebrales en el segmento L5-S1.
inflamatoria. La interrupción de la curva homogénea y suave, de concavidad posterior, formada por
Las radiografías convencionales permiten una buena visualización de las estructuras los rebordes posteriores de los muros vertebrales, es clave para identificar una inesta-
óseas, facilitando el análisis adecuado de la configuración espacial de la columna ver- bilidad de columna.
tebral, que traduzca posibles alteraciones en su alineación o en sus curvaturas fisio- Las partes blandas que mejor se pueden analizar en la proyección lateral son las vas-
lógicas. culares, fundamentalmente la ateromatosis aórtica, que debe orientar hacia una posi-
En la proyección posteroanterior se pueden visualizar las apófisis espinosas, las apó- ble claudicación intermitente cuando se sospecha.
fisis transversas, las carillas articulares, las láminas y los pedículos vertebrales. Las Las telerradiografías de la columna vertebral permiten el estudio global del raquis, per-
apófisis espinosas deben estar alineadas, y es preciso contarlas para evaluar posibles mitiendo valorar posibles repercusiones en la columna lumbar en presencia de su-
anomalías de la transición lumbosacra. La rotación de los cuerpos vertebrales se tra- puestas discrepancias en la longitud de las extremidades inferiores, así como estudiar
ducirá en una alteración de la alineación de la imagen radiológica de las apófisis espi- alteraciones de la estática vertebral en forma de escoliosis, cifosis, hiperlordosis y otras
nosas, dato indicativo de la existencia de una posible deformidad vertebral, además de deformidades vertebrales. Sin embargo, la elevada dosis de radiación que lleva acom-
permitir diferenciar entre una actitud escoliótica – sin componente vertebral asociado paña, debe limitar su utilización a aquellos casos en que la alteración en la estática
– y una escoliosis – desviación de la columna vertebral en el plano frontal acompañado vertebral precise de un tratamiento más específico que el simple manejo conservador.
de un componente de rotación vertebral.
- Protocolización en el proceso de petición de estudios radiológicos (TABLA
Las apófisis transversas se encuentran perpendicularmente simétricas a los cuerpos 29). Considerando los datos apuntados con anterioridad, no es necesario por
vertebrales, siendo necesario realizar un análisis concienzudo de ellas en los casos de lo tanto, pedir una radiografía ni ninguna otra prueba complementaria en la
dolor lumbar de origen traumático, al no ser infrecuente que pase desapercibida una valoración inicial de pacientes con edades comprendidas entre 20 y 50 años,
afectación de estas estructuras, que puede originar no sólo dolor intenso, sino también que presenten un dolor lumbar de características mecánicas de menos de 7-8
semanas de evolución, sin datos de alarma en la historia clínica y en el examen
físico realizado.
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paciente musculoesquelético
2.4.2.2 TC lumbar
Tabla 29: Protocolo para solicitar estudios radiológicos
en presencia de un dolor lumbar En comparación con las radiografías habituales, usa una dosis de radiación relativa-
mente baja. No se considera por lo general un procedimiento invasivo, si bien en oca-
1) Solicitud de radiología simple:
- Visita inicial: siones se inyecta un medio de contraste antes del estudio, con objeto de poder anali-
- Sospecha de etiología específica (“signos de alarma”) zar detalles estructurales y resaltar con facilidad las anomalías existentes.
- Dolor crónico o recurrente (en ausencia de radiografías previas)
- A las 4 semanas: Constituye una técnica bastante útil para evaluar las anomalías anatómicas de la co-
- Menor de 20 años, mayor de 50 años, en situación de incapacidad laboral (desde el comienzo del lumna lumbosacra. Ofrece como se ha indicado, imágenes de cortes transversales a
dolor) diferentes niveles, por lo que aquellas lesiones que no entren en el plano estudiado,
- A las 8 semanas: pueden no ser detectadas. Esto hace, que sea necesario indicar al radiólogo con la
- Dolor persistente (desde inicio del dolor) mayor precisión posible, la zona anatómica que debe ser estudiada, en un intento por
2) Estudio radiológico: mejorar la precisión diagnóstica de la prueba.
- Postero-anterior y lateral
3) Repetición de la radiografía: La visualiza con bastante precisión el tejido óseo, siendo claramente superior a la
- Control y seguimiento de una patología específica diagnosticada previamente resonancia magnética RM para valorar las estructuras óseas de la columna vertebral.
- Sí aparece información médica adicional También permite visualizar los tejidos blandos intra y paraespinales, sí bien la RM es
- Ante la presencia de un cambio evidente y mantenido en la sintomatología muy superior en la evaluación de estos tejidos, por lo que está siendo últimamente
desplazada por esta última. En cualquier caso, su solicitud se reserva a la evalua-
ción de un especialista y se justifica en base a los hallazgos clínicos y/o exploratorios,
pudiendo resultar de gran valor diagnóstico si se utiliza para confirmar los hallazgos
Sólo en el caso de que existan signos de alarma, o el paciente refiera un dolor lumbar obtenidos en la historia clínica, la exploración física y/o en las pruebas radiológicas
de larga duración, superior a las ocho semanas, deberá solicitarse un estudio radioló- inicialmente realizadas.
gico de entrada. Ante un dolor lumbar que persiste más allá de ocho semanas a pesar
del tratamiento realizado, estará indicado solicitar una radiografía posteroanterior y El valor de esta prueba como técnica radiológica en la columna vertebral lumbar no se
lateral de la columna lumbar, junto a una analítica elemental, que incluya hemograma debe, sin embargo, a su resolución de las diferentes estructuras, sino a su capacidad
y VSG. para definir con bastante exactitud la relación espacial existente entras las diferentes
estructuras anatómicas.
Existen otras circunstancias que obligan a solicitar precozmente un estudio radiológico
lumbar, como por ejemplo en los pacientes menores de 20 años o mayores de 50 Al igual que ocurre en la radiología simple, muchos pacientes asintomáticos presentan
años, ya que en estos grupos de edad es más frecuente que se presente una patología imágenes anormales en la TAC. Así, diferentes estudios ponen de manifiesto la elevada
específica, y en casos en situación de baja laboral, donde una exploración negativa frecuencia de hernias discales o estenosis de canal vertebral clínicamente asintomá-
puede permitir confirmar en el paciente la benignidad de su cuadro sintomático, y evi- ticas. En el estudio de Wiesel y colaboradores, más del 35% de las TAC de columna
tar prolongar de forma injustificada la ausencia a su actividad laboral habitual. vertebral lumbar en personas asintomáticas eran patológicas. Como consecuencia de
esto, los expertos advierten sobre la necesidad de correlacionar adecuadamente los
hallazgos de la TAC con la sintomatología referida por el paciente. La sobrevaloración
de las imágenes sin una correcta valoración clínica, puede conducir a errores diagnós-
ticos y terapéuticos de importancia, que pueden oscilar desde restricciones severas de
la actividad física y laboral, hasta intervenciones quirúrgicas no indicadas.
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paciente musculoesquelético
gen, que son bien valorados en los cortes sagitales de la RM. Además, las imágenes en la evaluación preoperatoria de estos pacientes. Al igual que ocurre con la
potenciadas en T2, proporcionan una información similar a la obtenida en un mielo-TC, hernia discal, numerosos estudios ponen de manifiesto que la estenosis de
pero sin la necesidad de pinchar el saco dural. canal asintomática es relativamente común, y su prevalencia aumenta con el
envejecimiento del paciente.
En las imágenes potenciadas en T2, se observa el núcleo pulposo y las fibras internas
del anillo fibroso como una señal de alta intensidad rodeada por una estructura de baja 3) Infección vertebral. La RMN tiene una sensibilidad del 96%, una especificidad
intensidad, que son las fibras medias y externas del anillo fibroso. del 92%, y una precisión diagnóstica del 94% en la osteomielitis vertebral, y
utilizada sin contraste es igual de sensible y específica que la gammagrafía.
La sensibilidad de la RM para la detección de signos de degeneración discal es ele- La sustitución de la médula ósea normal por tejido inflamatorio determina una
vada, aunque según algunos expertos, inferior a la proporcionada por la discografía. señal de intensidad anormalmente baja en T1 e intensidad alta en T2. Tras la
Las imágenes de degeneración discal observadas en la RMN son en primer lugar, inyección de gadolinio-DTPA, se observa un incremento anormal de la señal en
las alteraciones en la señal hiperintensa del núcleo pulposo, pudiendo desaparecer el disco y el cuerpo vertebral infectado.
completamente (el disco intervertebral aparece totalmente oscuro) o apareciendo frag-
mentado (dos o más áreas de color gris claro en el fondo oscuro). En segundo lugar, 4) Tumores vertebrales. La RM posibilita la localización anatómica exacta de las
las alteraciones en la morfología de las fibras más posteriores del anillo fibroso, que lesiones tumorales, tanto extramedular, intradural-extramedular o intramedular,
pierde su morfología plana o ligeramente convexa, haciéndose mucho más convexa, facilitando la realización de un adecuado diagnóstico diferencial. Su
improntando el saco dural (protrusión discal) o desgarrándose (la extrusión discal se sensibilidad es elevada, especialmente en los tumores de origen nervioso, pero
define como una extensión evidente del núcleo pulposo más allá del interespacio, con es poco específica a la hora de predecir la histología del mismo. Generalmente
una base más estrecha que el diámetro del material extruído, con o sin conexión con el los tumores espinales son hipointensos a la médula en T1 e hiperintensos en
disco intervertebral de origen). Sin embargo, la importancia clínica de estos hallazgos T2.
es variable según lo derivado de algunos estudios, donde tras estudiar la correlación
de la RMN con columnas de cadáver, concluyen que la disminución de señal del nú- 5) Traumatismo vertebral y lesión medular. Por lo general no es precisa su
cleo pulposo en T2 no se correlaciona con la anatomía patológica del disco. Aunque la realización dado que los estudios radiológicos simples suelen ser suficientes
verdadera causa de este signo no es bien conocida, sí existe acuerdo en la ausencia en las fracturas vertebrales no complicadas. La RM proporciona menos
de interés clínico de este hallazgo. información que la TC sobre el estado de las estructuras óseas, aunque facilita
más información sobre la integridad del sistema nervioso. En las fracturas
Otros hallazgos considerados inespecíficos, como los aumentos de convexidad del vertebrales graves, la TC sigue siendo la técnica diagnóstica de elección,
disco intervertebral, las protrusiones y los desgarros posteriores del anillo fibroso, apa- aunque en presencia de lesión medular y/o radicular, su empleo disminuye,
recen con elevada frecuencia en personas clínicamente asintomáticas. En un reciente siendo sustituida por la mielografía.
estudio, sólo una tercera parte de las RMN realizadas a pacientes asintomáticos fueron
normales, y más de la mitad de ellos tenían abombamientos y protrusiones discales. La RMN permite diagnosticar otras posibles causas de afectación medular, como la
presencia de una siringomielia o un mielomalacia. Mediante el empleo de técnicas de
Incluso se han detectado verdaderas extrusiones discales en pacientes asintomáticos supresión grasa con inyección de contraste endovenoso (angio-RM), se puede llegar a
con una frecuencia variable entre el 1% y el 24%, lo que conduce a pensar en el esca- diagnosticar fístulas arteriovenosas traumáticas o infartos medulares, sin necesidad de
so valor que puede darse al hallazgo de una hernia discal en la valoración y tratamiento someter al paciente a una angiografía espinal invasiva.
de un determinado paciente.
6) Malformaciones congénitas espinales. Constituye la técnica diagnóstica ideal
2) Estenosis de canal vertebral lumbar. La RMN tiene ventaja sobre la TC y la para el estudio de malformaciones tales como el disrafismo espinal, la médula
mielografía a la hora de valorar las verdaderas dimensiones del saco dural, anclada, la siringomelia, etc., superando claramente a la mielografía y al TAC.
al no precisar la inyección de contraste intratecal y valorar mejor el aumento
de partes blandas, que con cierta frecuencia es la responsable de la causa 7) Valoración del dolor lumbar tras cirugía vertebral discal. Es el único método
de la estenosis, aunque hay autores que piensan que la mielo-TAC es mejor que permite diferenciar una cicatriz fibrosa (fibrosis post-quirúrgica) de una
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paciente musculoesquelético
recidiva herniaria, con una precisión cercana al 98%. Como regla general, en En el paciente con dolor lumbar, está indicada su realización ante la sospecha clínica
la fibrosis no hay efecto masa y se produce un aumento de la señal tras la de una patología específica grave (neoplasia o infección vertebral), derivada de la his-
inyección de gadolinio-DTPA. Por el contrario, la afectación discal produce toria clínica, el examen clínico o la analítica convencional, y cuando la radiología simple
efecto masa y no se intensifica con la aplicación de contraste. es normal o poco evidente.
Entre las posibles contraindicaciones de la RMN, la más importante de todas es la Las principales indicaciones para el empleo de esta técnica en el estudio del paciente
presencia de marcapasos cardiacos, que pueden pasar de funcionar según demanda, con patología dolorosa lumbar son las siguientes:
a funcionar a una frecuencia fija; la existencia de clips metálicos vasculares o cualquier
otro material magnético móvil, contraindica igualmente la indicación de esta técnica 1) Metástasis óseas. Es la técnica más sensible y precoz para su diagnóstico
diagnóstica, ya que pueden torcerse o soltarse. Los implantes no ferromagnéticos, clínico, con una sensibilidad superior a los niveles séricos de fosfatasa
como los de acero inoxidable, no son atraídos por los imanes, aunque pueden provo- ácida, fosfatasa alcalina y a la radiología. Aproximadamente el 80% de las
car artefactos que degradarán la imagen obtenida. Puede ser practicada, condiciona- metástasis óseas asientan en el esqueleto axial. Entre el 10% y el 40% de los
da a la decisión final del radiólogo, en los portadores de prótesis ortopédicas y material pacientes con metástasis y radiografías normales presentan alteraciones en la
de síntesis estable, especialmente sí este es de titanio, ya que no producen artefactos gammagrafía ósea. Ante una imagen hipercaptante única, debe descartarse
paramagnéticos. lesión traumática, tumor óseo primitivo, infección, artropatía degenerativa
o Enfermedad de Paget antes de establecer el diagnóstico definitivo de
Los individuos con claustrofobia pueden presentar grandes dificultades en el espacio metástasis ósea.
cerrado en el que se realiza la prueba y pueden requerir sedación, o la realización de la
prueba en centros específicos dotados de RMN abierta. 2) Osteomielitis vertebral. En presencia de una infección vertebral, las
radiografías pueden ser normales hasta después de 10-14 días tras el inicio
de la enfermedad, mientras que la gammagrafía ósea puede estar alterada
al cabo de un día de su comienzo. Cuando existe la sospecha de una
2.4.2.4 Gammagrafía ósea espondilitis o discitis infecciosa, y la gammagrafía ósea con Tecnecio-99m es
dudosa o negativa, se puede aumentar la sensibilidad y especificidad de la
Es el método exploratorio empleado en medicina nuclear para obtener imágenes del
exploración isotópica empleando citrato de Galio-67, que al administrarse por
esqueleto, que representan la expresión del metabolismo óseo. Constituye una técnica
vía intravenosa, se fija a la transferrina y lactoferrina de los leucocitos e incluso
diagnóstica sensible con capacidad para proporcionar de una forma precoz, informa-
en las propias bacterias, acumulándose en mayor cantidad en los focos
ción fidedigna sobre múltiples alteraciones esqueléticas de origen metabólico, traumá-
infamatorios o sépticos.
tico, infeccioso o tumoral.
3) Fractura vertebral reciente. Dicha alteración produce un aumento de captación
Tiene las ventajas de no ser invasiva, con una tasa de irradiación muy baja en compa-
isotópica, que va disminuyendo progresiva a medida que la fractura se hace
ración con otras, y con un coste inferior a la TC y RM (aunque bastante superior a la
más antigua, demostrando por lo tanto su utilidad a la hora de determinar sí un
radiología simple).
aplastamiento vertebral es o no reciente.
El Tecnecio-99m es el isótopo que se usa más frecuentemente, unido a un difosfonato
Los estudios con radioisótopos tienen por regla general, poca utilidad en el diagnóstico
que tiende a fijarse en el hueso al ser absorbido en la superficie del cristal de hidroxia-
de la patología mecánica de la columna vertebral lumbar, con una única excepción de
patita.
la espondilolisis ístmica no detectable en la radiografía simple.
Clínicamente hablando, constituye una técnica muy sensible para detectar la presencia
de actividad ósea anómala en cualquier región del esqueleto. Resulta particularmente
adecuada cuando las radiografías no son capaces de detectar aún el aumento de
actividad ósea, es decir, en las etapas precoces. El problema radica en su poca es-
pecifidad ante una hipercaptación, que puede significar infección, tumor, fractura, etc.
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paciente musculoesquelético
2.4.2.6 Discografía
La actividad espontánea de denervación tarda en aparecer entre 14 y 35 días (un pe-
Constituye una evaluación radiológica y fisiológica del disco intervertebral, consistente riodo medio de 21 días) después del daño axonal, de manera que no sería detectable
en la inyección intradiscal de un medio de contraste bajo control fluoroscópico, ya sea si el EMG se realiza pocos días después del inicio de los síntomas. Una vez que han
por vía intradural o extradural. En dicha evaluación, se tiene en cuenta la cantidad de aparecido, pueden permanecer hasta que tenga lugar la reinervación o degenere la
contraste que ha sido inyectado, la presión de inyección, el aspecto radiológico del musculatura denervada (entre un año medio y dos años después de la lesión).
disco inyectado y por último, la reproducción de dolor durante la prueba.
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paciente musculoesquelético
La pérdida de unidades motoras al máximo esfuerzo aparece en el momento de la Realmente el estudio EMG es anormal en el 50% de los pacientes con una radiculo-
lesión, aunque sólo puede reconocerse cuando exista una importante pérdida de axo- patía. Cuando la lesión es relativamente reciente (menos de tres meses de evolución) y
nes motores que inervan un determinado músculo, por lo que tiene poco valor en las existe una debilidad motora en la exploración física, su sensibilidad aumenta al 50%. Sin
radiculopatías simples, en las que lo habitual es la afectación de pocas fibras motoras embargo, en pacientes con una radiculopatía crónica, con dolor como único síntoma
en cada músculo. y con una examen neurológico normal, su rendimiento diagnóstico es inferior al 20%.
Al cabo de varios meses (un mínimo de 4 a 6 meses), aparecen los signos de dener- Tras una intervención quirúrgica con descompresión de la raíz supuestamente afec-
vación crónica, consistentes en un aumento en la duración media, y a veces también, tada, las anomalías previas del EMG no desaparecen de forma precoz, independien-
en la amplitud de los potenciales de unidad motora, cambios que pueden permanecer temente del éxito del tratamiento realizado. El EMG realizado a los 2-3 meses, suele
indefinidamente. mostrar pocos cambios con respecto al realizado previamente a la cirugía, incluso los
realizados de 6 a 12 meses tras la cirugía, pueden ser difíciles de interpretar. Conside-
El EMG en una radiculopatía lumbar debería incluir la evaluación de la musculatura pa- rando esto, la única indicación de solicitar un EMG post-quirúrgico sería la sospecha
raespinal (inervada por la rama primaria posterior del nervio periférico mixto), y la mus- de una lesión neurológica de reciente aparición (plexopatía, mononeuropatía, radicu-
culatura del miotoma correspondiente en la extremidad inferior (inervada por la rama lopatía diferente).
primaria anterior). Teóricamente, para el diagnóstico de radiculopatía lumbar deben
evidenciarse signos de denervación tanto en la musculatura paraespinal como en los En un intento por incrementar el rendimiento diagnóstico de esta prueba, es recomen-
músculos de la extremidad inferior inervados por la raíz correspondiente. Además, los dable seguir las recomendaciones dadas por Wilbourn y Aminoff:
cambios deben aparecer en al menos dos músculos (preferentemente más) inervados
por la misma raíz pero por diferentes nervios periféricos. 1) No debe realizarse hasta pasadas al menos tres semanas desde el
establecimiento de los síntomas, o tras un cambio considerable de los
Varios meses después de la lesión, los signos de denervación en la musculatura afec- síntomas en los casos cónicos.
tada desaparecen, aunque persista la radiculopatía, como consecuencia de la reiner-
vación colateral por fibras motoras no afectadas. Esto sucede de manera centrífuga, 2) Si se sospecha una radiculopatía, el examen debe realizarse tan pronto como
es decir, al inicio desaparecen los signos de denervación en la musculatura paraespi- sea posible, después de tres a cinco semanas de evolución, dada la tendencia
nal, y finalmente en la musculatura de la extremidad inferior, por lo que el EMG reali- progresiva a normalizarse con el paso del tiempo.
zado a partir del año de evolución de una radiculopatía lumbosacra puede ser poco 3) Debe realizarse sobre la raíz que se sospecha está comprometida,
relevador. indicándose claramente en la solicitud del estudio.
Esta tendencia a la normalización del EMG puede ser interesante desde un punto de 4) No es conveniente repetir un estudio, si el previo fue poco revelador y la
vista diagnóstico, en un intento por determinar la edad de la lesión, cuando la historia sintomatología del paciente no se ha modificado de forma significativa. Debe
clínica del paciente no está suficientemente clara, si el paciente ha tenido diferentes evitarse por lo tanto repetir periódicamente el EMG en pacientes cuyos
episodios de radiculopatía y no se dispone de datos de exámenes neurológicos pre- síntomas no han cambiado en mucho tiempo.
vios. Si se encuentra un patrón electromiográfico con presencia de potenciales de
fibrilación en la musculatura paraespinal y distal, y sin signos crónicos de denervación, 5) Los estudios electromiográficos post-laminectomía realizados meses después
lo más probable es que se trate de una radiculopatía aguda, entre tres semanas y tres de la intervención quirúrgica, para determinar si la descompresión quirúrgica
meses de evolución. Por el contrario, cuando sólo aparecen signos crónicos de de- ha sido exitosa, generalmente no son útiles y deberían ser evitados.
nervación, a menudo limitados a la musculatura más distal, probablemente la radicu-
lopatía sea antigua y estable. Finalmente, cuando coexisten potenciales de fibrilación 6) Debe solicitarse un EMG en un paciente con sospecha de radiculopatía
con un patrón neurógeno crónico, el diagnóstico más probable será una radiculopatía para confirmar la lesión radicular y realizar el diagnóstico diferencial con otras
crónica progresiva, o bien una radiculopatía aguda añadida a una crónica. posibles causas de la sintomatología referida. Sin embargo, no debe solicitarse
para descartar una radiculopatía, ya que no tiene valor excluyente por la
elevada frecuencia de resultados falsos negativos.
150 151
paciente musculoesquelético
2.4.2.8 Termografía La dificultad que conlleva el estudio y tratamiento de la patología dolorosa lumbar,
derivado de la influencia de numerosos factores (tanto intrínsecos como extrínsecos)
Constituye una técnica no invasiva consistente en la creación de imágenes a partir de en la evolución clínica de esta dolencia, obliga a complementar la información obtenida
la radiación infrarroja o calor emitido por la superficial corporal, estableciendo un mapa a través de la historia clínica, la exploración física y las pruebas complementarias, con
de la temperatura superficial del organismo. datos objetivos que permitan de alguna manera cuantificar la repercusión que dicha
patología determina en el estado funcional del paciente.
Su uso como técnica diagnóstica se fundamenta en que diversas disfunciones neuro-
lógicas, vasculares, de tejidos blandos y musculoesqueléticas, producen alteraciones La valoración clínica de la columna vertebral es similar a otras valoraciones ortopédi-
en el aporte vascular que calienta la piel. Se ha propuesto como una técnica segura, cas. Los efectos de una alteración en la columna vertebral pueden verse modificados
económica y efectiva para detectar una radiculopatía de origen lumbar. Sugiere la exis- por la situación económica y psicosocial del paciente, factores que pueden combinar-
tencia de una lesión radicular, un descenso de temperatura asimétrico en uno o más se para producir grados diferentes de dolor y discapacidad en el mismo paciente. Aun-
dermatomas lumbares de la extremidad inferior, o un aumento ipsilateral de la tempe- que los hallazgos físicos en una valoración son extremadamente importantes, muchos
ratura en la región lumbosacra. estudios sobre el dolor lumbar apoyan la existencia de componentes no físicos, como
por ejemplo los psicosociales, que implican la necesidad de un tratamiento multidisci-
Los defensores de esta técnica diagnóstica señalan que la correlación de una termo-
plinar del paciente. Los resultados finales de la evaluación dependerán por tanto, de la
grafía lumbar anormal con una prueba de imagen patológica es una evidencia convin-
anamnesis, de la exploración física, de las pruebas complementarias, de la valoración
cente de radiculopatía (y una termografía normal podría evitar la realización de otras
del dolor y de la discapacidad producida y además, de un conocimiento adecuado del
técnicas diagnósticas). Sin embargo, los resultados del metaanálisis realizado por Hoff-
estatus económico y psicosocial del paciente que, indirectamente, pueden influir en la
man y colaboradores, ponen de manifiesto que lo publicado hasta la actualidad no
adopción del papel de enfermo.
apoyaría el uso de la termografía para diagnosticar una radiculopatía lumbar o evaluar
el dolor vertebral. Algunos pacientes que consultan por dolor lumbar tienen una patología fácilmente
identificable con técnicas objetivas de valoración, pero en muchas ocasiones, se des-
Como principal conclusión a lo anteriormente expuesto, se puede afirmar que las prue-
conoce la causa exacta del dolor referido. Con frecuencia, la historia natural de los
bas complementarias no deben ser solicitadas de forma rutinaria en el estudio del
trastornos vertebrales lumbares y la respuesta al tratamiento, están claramente influen-
paciente con dolor lumbar. Dada la importancia que tienen, tanto la historia clínica del
ciadas por factores psicológicos y por la procedencia social del paciente. Son factores
paciente como el examen físico realizado, a la hora de solicitar las pruebas comple-
importantes la actividad laboral, la indemnización en un accidente laboral, el beneficio
mentarias adecuadas para alcanzar un diagnóstico clínico que oriente sobre la pauta
por enfermedad e incluso la forma física global.
terapéutica más idónea, es conveniente conocer la pauta a seguir en presencia de un
dolor lumbar en función de su tiempo de evolución. La evaluación de la severidad del dolor lumbar puede basarse en la etiología, en la va-
loración del dolor, en la discapacidad que puede producir, en el daño físico objetivado,
e incluso en la capacidad de trabajar. Dentro de esta valoración es fundamental distin-
2.4.2.9 Valoración funcional lumbar guir entre el daño o lesión y la discapacidad. Según la Asociación Médica Americana,
el daño físico es una alteración anatómica o patológica que conlleva la pérdida de las
El dolor lumbar constituye unos de los problemas socio-económicos y médicos más habilidades normales de la persona, mientras que la discapacidad es el resultado de
importantes de los países desarrollados. Como en otros procesos dolorosos, el dolor la disminución de las capacidades en la realización de las actividades diarias y en el
lumbar, ya sea agudo o crónico, resulta difícil de medir por ser un fenómeno subjeti- mantenimiento de un empleo, o bien, la limitación de la persona en la realización de
vo. Una de las mejores formas de abordar este problema es conocer, además de la actividades comparada con otras personas de la misma edad y sexo.
intensidad, frecuencia y aspectos cualitativos del dolor lumbar, cómo este síntoma
repercute o limita las actividades de la vida diaria, es decir, cuál es su impacto en la Por tanto, el daño físico es una alteración estructural objetiva que podemos detectar
funcionalidad del paciente. mediante pruebas diagnósticas basadas principalmente en técnicas de imagen; en
cambio, la discapacidad es el resultado de la pérdida de la función del sujeto, que pue-
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paciente musculoesquelético
de ser valorada mediante la propia información del paciente en cuanto a la limitación 2.5 Escalas de dolor
en la realización de actividades de la vida diaria, tales como flexionar el tronco para
coger y levantar un peso, sentarse, permanecer de pie, caminar, dormir, etc. Desgra-
ciadamente, en la actualidad no existe ningún método clínicamente aceptado, que sea
capaz de medir y relacionar lo más objetivamente posible la lesión o daño y la disca- 2.5.1 Métodos unidimensionales de medida
pacidad consecuente en los sujetos con dolor lumbar. Es importante tener en cuenta
2.5.1.1 Escalas Descriptivas Simples
que la relación entre el daño físico y la discapacidad no siempre está presente en los
pacientes con dolor lumbar. En general, las escalas de valoración de la discapacidad Las escalas descriptivas tienen un carácter unidimensional y determinan únicamente
existente, se relacionan más con criterios subjetivos del paciente que con criterios ob- la magnitud del dolor.
jetivos basados en el registro de medidas.
La escala descriptiva simple está basada en la calificación del dolor atendiendo a su in-
tensidad como: 0: No dolor. 1: dolor leve o ligero. 2: dolor moderado. 3: dolor intenso.
• 0. No dolor.
• 1. Dolor leve o ligero.
• 2. Dolor moderado.
• 3. Dolor intenso.
Algunos autores consideran que es más eficaz utilizar la escala del alivio del dolor ante
la analgesia, ya que la magnitud de la respuesta no dependerá del grado de dolor inicial
y la distribución de la intensidad del dolor no debe ser idéntica.
154 155
paciente musculoesquelético
El Índice del Manejo del Dolor (IMD) se utiliza para evaluar el control del grado de dolor respecto al tratamiento o al tiempo. También ha demostrado validez en asociación
y asocia el tipo de analgesia recibida con el nivel máximo de dolor declarado por el pa- con estado general, diagnóstico de cáncer o no, pacientes ambulantes o ingresa-
ciente en una escala numérica. Estas dos cualidades se puntúan de la siguiente forma: dos, medidas de estrés psicológico, y medidas globales de calidad de vida. Además,
variaciones en la EVA-I se han asociado con cambios en el estado del tumor y la su-
- Tipo de tratamiento analgésico recibido: pervivencia y cuatro estudios han medido la validez de la repetición de la EVA-I desde
0= sin analgesia; 1= analgesia no opioide; cinco minutos a una semana. Algunos autores han defendido la validez de la EVA para
2= opioide menor; 3= opioide mayor. valorar el comportamiento afectivo del dolor, además de la intensidad de éste, opinión
que no es compartida por otros.
- Nivel máximo de dolor declarado:
- ausencia de dolor= 0 con valor 0; A pesar de la validez de la EVA-I, el principal inconveniente puede ser la mayor com-
- dolor leve= 1-3 con valor 1; plejidad que otros métodos de medición. En otro trabajo que comparó estas escalas,
- dolor moderado= 4-7 con valor 2; para la realización de análisis estadísticos el parámetro más fidedigno para discriminar
- dolor intenso= 8-10 con valor 3. la eficacia analgésica resultó ser la “Puntuación Total del Alivio del Dolor Ordinal”(PTAD),
que se obtiene sumando las puntuaciones del alivio del dolor referidas por los pacien-
Esta escala describe el dolor desde un punto de vista unidimensional, al considerar el tes en cada observación según la escala descriptiva .
aspecto cuantitativo y sin considerar las variaciones cualitativas. Las escalas descripti-
vas son sencillas, por lo que son fácilmente comprendidas y ejecutadas por la mayoría También puede ser eficaz la aplicación de la EVA para la interpretación de la intensidad
de pacientes. Sin embargo, su sensibilidad es baja, ya que el número de respuestas es del dolor por el personal sanitario. Sin embargo, algunos autores han objetivado una
limitado y es difícil discriminar entre dos intensidades. Además, es difícil saber el tama- coincidencia de sólo un 15% entre la valoración subjetiva del dolor por el paciente y la
ño o dimensión de cada una de las categorías, por lo que no se puede asumir que las opinión del observador.
diferencias entre las diversas categorías son siempre iguales. Además, a veces existen
importantes diferencias en la interpretación de los términos de la escala.
Figura 3. Escala visual analógica de la intensidad
2.5.1.2 Escala visual analógica de la intensidad del dolor (EVA-I)
del dolor (eva-I)
Las escalas visuales analógicas (EVA) o “Visual Analogue Scale” (VAS) fueron emplea-
das inicialmente en la valoración del estado de ánimo en Psicología. Dada su simplici-
dad y su teórica facilidad de cumplimentación fueron rápidamente adaptadas para la
medición de la intensidad del dolor (EVA-I).
No dolor Dolor máximo
La EVA-I consiste en una línea, normalmente de 10 cm de largo que tiene marcados
los extremos de intensidad del dolor (de no dolor a dolor extremo), en cada lado de
la línea. La longitud de la línea no debe ser inferior a los 10 cm, ya que cuanto menor
es la misma mayor es el margen de error de la medición. El paciente deber hacer una 2.5.1.3 Escala numérica de la intensidad del dolor (NRS-I)
marca en la línea que representará el nivel de intensidad del dolor, y la distancia medida Para dotar a la EVA tradicional de una mayor sensibilidad se han introducido modifi-
desde “no dolor” hasta la marca será la puntuación o resultado de la EVA. La recogida caciones. Así, las llamadas “Escalas Analógicas Graduadas” presentan una serie de
de la intensidad del dolor debe ser lo más exacta sobre la línea, por lo cual siempre se marcas, graduaciones aisladas o acompañadas de números o términos descriptivos
debe utilizar la misma regla de medición y anotar la medida en milímetros, por lo que ordinales. También, hay escalas donde se sustituyen las definiciones o puntuaciones
es recomendable considerar la línea entre 0 y 100 mm. del dolor por símbolos (escala simbólica de la intensidad del dolor), que pueden ser
La EVA-I ha demostrado sensibilidad de forma consistente en un gran número de aplicados a poblaciones con dificultad de interpretación de lenguaje, como niños o
estudios tanto en la intensidad del dolor como en los cambios asociados al dolor con pacientes con escaso nivel cultural.
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paciente musculoesquelético
La escala numérica de medición de la intensidad del dolor (NRS-I) marca un rango 2.5.2 Escalas multidimensionales
de números, normalmente de 0 a 10 pero también de 0 a 100. Los pacientes deben
puntuar la intensidad del dolor, donde el menor número no representa dolor y el mayor La falta de evaluación de un componente emocional en las escalas unidimensionales
el dolor extremo. Una variante de la NRS-I es la Escala Numérica Compartimentada propició la búsqueda de otros métodos de valoración del componente afectivo. Así se
donde el paciente debe optar por un número que está encasillado entre 0 y 10. crearon instrumentos ya clásicos como la escala multidimensional de McGill o el Wis-
consin Brief Pain Questionnaire (BPQ), que como contrapartida exigen mayor tiempo y
La sensibilidad de estas escalas es alta, son muy veraces y suelen ser muy bien asimi- esfuerzo tanto al médico como al paciente, por lo que con frecuencia quedan relegada
ladas por la mayoría de pacientes. Las escalas NRS-I se usan con menos frecuencia su aplicación sistemática a los estudios investigacionales.
que las analógicas visuales. A pesar de ello, comparten con las EVA-I las principales ca-
racterísticas de sensibilidad y propiedades psicométricas relacionadas como los cam-
bios de dolor asociados al tratamiento, uso de analgésicos, disnea y otros síntomas.
2.5.2.1 Cuestionario de Dolor de McGill (McGill Pain Questionnaire, MPQ)
Figura 5. Escala numérica de la intensidad El cuestionario de Dolor de McGill (MPQ), fue propuesto por Melzack y Torgerson en
1975 para realizar una valoración del dolor desde una triple perspectiva: sensorial,
del dolor (NRS-I)
descripción del dolor en términos temporo-espaciales; afectivo-motivacional, descrip-
ción del dolor en términos de tensión, temor y aspectos neurovegetativos; y evaluativo,
dolor descrito en términos de valoración general. El instrumento consta de 78 adjetivos
distribuidos en 20 grupos, incluyendo cada grupo de 2 a 6 adjetivos que califican la
experiencia dolorosa. Cada uno de los términos descriptivos tiene asignado un número
No dolor Dolor máximo o rango que permite obtener una puntuación de acuerdo a las palabras escogidas, con
lo que se obtiene el denominado “Pain Rating Index” (PRI) o “Índice de Valoración del
Dolor”. Esta puntuación refleja el modo en que el paciente califica su propia experiencia
dolorosa, permitiendo al investigador valorar la influencia que sobre esta experiencia
ejercen los factores emocionales y sensoriales. También, contiene un apartado en que
el paciente refleja la intensidad del dolor que padece, el “Present Pain Index” (PPI) o
“Índice de Intensidad del Dolor”.
No dolor Dolor máximo El MPQ es un instrumento de medida con una amplia aceptación en el tratamiento
del dolor en general y del dolor oncológico en particular. Múltiples estudios han de-
mostrado su validez y fiabilidad en una gran diversidad de pacientes y de síndromes
dolorosos tanto de tipo crónico como agudo. Sin embargo, también ha sido objeto
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El Wisconsin Brief Pain Questionnaire se denominó Brief Pain Inventory o Cuestionario Ningún El peor dolor
dolor imaginable
Breve del Dolor (CBD) en un estudio de validación posterior. Es un cuestionario au-
toadministrado y de fácil comprensión que contiene dos dimensiones: la intensidad y el 5. Por favor, evalúe su dolor rodeando con un círculo el número que mejor describa la intensidad de su
impacto del dolor en las actividades de la vida del paciente, se han realizado versiones dolor ahora mismo
de validación, incluida la española. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
El CBD tiene dos dimensiones: “Intensidad del dolor” (4 ítems) e “Interferencia en las Ningún El peor dolor
actividades (7 items). Cada una de las cuestiones se puntúa por una escala numérica dolor imaginable
del 0, ausencia de dolor o interferencia en la vida diaria, al 10, peor dolor o afectación
máxima de la vida diaria. Además el cuestionario tiene 15 items adicionales que eva- 6. ¿Qué tipo de cosas le alivian el dolor (p. ej., el calor, la medicación, el descanso)?
lúan el nivel de alivio que la analgesia proporciona al paciente, la localización del dolor
y la descripción de las causas del dolor.
7. ¿Qué tipo de cosas empeoran el dolor (p. ej., caminar, estar de pie, levantar algo)?
sigue
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11. Marque con una cruz la casilla que considera adecuada para cada una de las respuestas. 13. Rodee con un círculo el número que mejor describa hasta qué punto el dolor lo ha afectado en los
Creo que mi dolor es debido a: siguientes aspectos de la vida, durante la última semana
SI NO A. Los efectos del tratamiento (p. ej. medicación, operación, radiación, prótesis) C. Capacidad de caminar
D. Trabajo habitual (incluye tanto el trabajo fuera de casa como las tareas domésticas)
12. Para cada una de las siguientes palabras, marque con una cruz “si” o “no” si ese adjetivo se aplica a su
dolor 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Dolorido/continuo SI NO Dolorido/continuo SI NO No me ha Me ha afectado
Palpitante SI NO Agudo SI NO afectado por completo
Irradiante SI NO Sensible SI NO
Punzante SI NO Quemante SI NO
Agotador SI NO E. Relaciones con otras personas
Fatigoso (pesado) SI NO Entumecido (adormecido) SI NO 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Penetrante SI NO Penoso SI NO
Persistente SI NO Insoportable SI NO No me ha Me ha afectado
afectado por completo
13. Rodee con un círculo el número que mejor describa hasta qué punto el dolor lo ha afectado en los
siguientes aspectos de la vida, durante la última semana F. Sueño
A. Actividades en general 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 No me ha Me ha afectado
afectado por completo
No me ha Me ha afectado
afectado por completo
G. Disfrutar de la vida
B. Estado de ánimo 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 No me ha Me ha afectado
afectado por completo
No me ha Me ha afectado
afectado por completo
14. Prefiero tomar mi medicación para el dolor…
1. De forma regular
sigue
2. Sólo cuando la necesito
3. No tomo medicación para el dolor
sigue
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15. Tomo mi medicación para el dolor (en un periodo de un día) Escalas específicas de dolor lumbar
1. No todos los días 4. 5 veces al día
Tabla 37. Oswestry. Escala Visual Analógica de dolor lumbar
2. 1 a 2 veces al día 5. Más de 6 veces al día
y de dolor en miembro inferior
3. 3 a 4 veces al día
1. Por favor, comenzando por la izquierda de la siguiente barra, trace una línea hacia la derecha indicando
16. ¿Cree que necesita una medicación más fuerte para el dolor? la intensidad de su DOLOR DE ESPALDA (DOLOR LUMBAR) en las últimas 4 semanas.
1. Sí 2. No 3. No lo sé
Ningún dolor________________________________ Máximo dolor
17. ¿Cree que debe tomar más dosis de la medicación para el dolor que las que le ha recetado el médico? 2. Ahora, haga igual, indicando la intensidad de su DOLOR EN LA PIERNA (CIÁTICA) en las últimas 4
1. Sí 2. No 3. No lo sé semanas.
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Tabla 38. Escala de evaluación de hombro Ucla Tabla 39. Escala de radiculopatía
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En la actualidad, el dolor es considerado una experiencia perceptiva compleja debida Dimensión Sensorial - Dimensión Cognitivo - Dimensión Motivacional -
a la interacción existente entre procesos fisiológicos, cognitivos y afectivos, siendo discriminativa evaluativa afectiva
además definido como una experiencia multidimensional mediatizada por distintas
variables. A partir de esta definición del dolor, se amplía la perspectiva sobre el trata-
miento del paciente como un individuo global, resaltando la necesidad de abordar no
solamente los factores físicos o biológicos sino también los factores psicológicos. Rasgos de Conductas de dolor Estrategias de
personalidad afrontamiento
Aunque son numerosas las investigaciones que han incluido los aspectos psicológicos
y sociales en el estudio del dolor, será la teoría de la compuerta propuesta por Melzack
y Wall (1965), y la formulación posterior de la teoría de la neuromatriz (Melzack, 1989;
Melzack y Loeser, 1978), el primer intento por desarrollar un modelo integrador, tanto 2.6.2 Principios generales
en la evaluación como en el tratamiento del dolor. El dolor es una experiencia desagradable y compleja que resulta de la interacción de
Este hecho supone la reconceptualización de la experiencia dolorosa, definiendo ésta múltiples factores. Es subjetivo, cada persona que lo padece lo vive de forma única, y
como el resultado de la interacción de: en caso de que se convierta en crónico, acostumbra a ir acompañado del sufrimiento
que comporta ver amenazada la propia integridad y de la incertidumbre respecto a su
- la dimensión sensorial-discriminativa, evolución. El paciente “deja de ser el que era” para centrarse única y exclusivamente
- la dimensión motivacional-afectiva y en el rol dominado por la experiencia del dolor. Sus consecuencias afectan a todos los
- la dimensión cognitivo-evaluativa, siendo en ésta última donde cobran ámbitos de la vida de las personas que lo padecen.
especial relevancia variables psicológicas como pueden ser: los rasgos de
personalidad, las conductas de dolor, la valoración que el paciente hace de su El dolor, cuando se cronifica, es la causa frecuente de conflictos familiares, problemas
dolor o las estrategias de afrontamiento, entre otras. laborales, sociales e incluso económicos (de la mitad a dos tercios de los sujetos con
dolor crónico se encuentran total o parcialmente incapacitados durante días, semanas
Ello conlleva la sustitución de modelos unidimensionales por multidimensionales, que o meses de forma permanente) debido a los intentos realizados por el sujeto para re-
abarcan tanto los aspectos fisiológicos como los psicológicos y sociales defendidos mediar su afección, que incluso pueden acarrearle más dolor.
desde el modelo biopsicosocial de la enfermedad (Engel, 1977), siendo necesario cen-
trarse en aquellas condiciones que mejoran la adaptación de los enfermos a sus recur- En la mayoría de condiciones de dolor crónico es frecuente la aparición de alteracio-
sos tanto personales como sociales. nes del estado de ánimo y trastornos del sueño, que comportan un elevado malestar
afectivo y que se presentan con una prevalencia mayor que la encontrada en otras
De esta forma en el ámbito del dolor crónico, el objetivo principal será que el paciente patologías crónicas.
se sienta capaz de afrontar de forma efectiva su dolor, mejorando con ello directa e
indirectamente su calidad de vida.
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Según la literatura, independientemente de los modelos que observemos, hay varia- 2.6.3.2 Variables psicológicas mediadoras en la adaptación al dolor crónico
bles psicológicas relevantes en los pacientes con dolor:
• Por lo que se refiere a los procesos cognitivos, diferentes estudios hacen
- ánimo depresivo y/o ansioso, hincapié en las relaciones entre: creencias, afrontamiento y adaptación al
- sistema de creencias erróneo acerca del dolor, dolor;
- poca conciencia somática en relación con las emociones, centrándose principalmente en los procesos cognitivo de: locus de control, el
control sobre el dolor, los errores cognitivos, la autoeficacia y las expectativas
- no aceptación de la situación y,
de resultado.
- emociones de rabia e indefensión.
• Por lo que se refiere al afrontamiento del dolor crónico, y en términos
Las revisiones de la literatura científica sobre el impacto del dolor crónico, han de- generales, diferentes estudios han identificado estrategias de afrontamiento
mostrado la justificación de implantar centros de dolor multidisciplinarios. Según Turk potencialmente desadaptativas en relación con el dolor, como puede ser: el
(1990), los centros multidisciplinares reducen los costos médicos en un 58% y en un reposo, una mayor atención sobre el dolor, el catastrofismo o el pensamiento
31% el número de nuevas intervenciones sufridas por dolor de espalda persistente. La desiderativo; encontrándose asociaciones positivas entre estrategias de
frecuencia de la reinserción laboral es de un 68% si se sigue tratamiento en una unidad afrontamiento activas (es decir, que implican un control directo del dolor), e
multidisciplinar mientras que es de sólo un 36% si se sigue tratamiento unimodal. El índices de ajuste físico y psicológico.
abordaje multidisciplinar es uno de los avances más apoyados por los equipos médi- • Por último, en relación a las respuestas emocionales ante el dolor, serán la
cos, en donde se intenta tratar al paciente desde los diferentes aspectos que influyen ansiedad y la depresión las dos respuestas más estudiadas, relacionándose
en su enfermedad. éstas con el mantenimiento y exacerbación del dolor, resultando por todo ello
necesaria la evaluación de dichas dimensiones emocionales en el abordaje
terapéutico del dolor.
2.6.3 Influencia de los procesos mediadores en la adaptación al dolor
crónico 2.6.3.3 Círculos viciosos del dolor (inactividad y aislamiento social depresión
2.6.3.1 Introducción y otros problemas psicológicos reducción de la resistencia física y cansancio
dolor adicional)
En el ámbito de estudio del dolor crónico, uno de los aspectos relevantes en el tra-
tamiento, son los recursos que el individuo utiliza para afrontar el mismo, modulando Cuando el dolor persiste durante un largo período de tiempo, se desarrolla una varie-
éstos tanto la percepción del síntoma como el impacto emocional. dad de círculos viciosos, que paradójicamente conducen a un incremento del dolor y
a la reducción de la tolerancia. Las reacciones más comunes ante un dolor continuado
Desde el modelo biopsicosocial de la enfermedad, y aplicando el modelo transaccional son: incrementar la tensión muscular, protección y desuso de la zona dolorida, an-
del estrés (Lazarus y Folkman, 1984) al dolor crónico, la estimulación nociceptiva o siedad, ira, depresión, preocupación y focalización de la atención en el problema de
cualquier experiencia de dolor, no puede ser considerada a priori como un estresor, dolor. Todas estas reacciones, aunque naturales cuando el dolor persiste, sólo sirven
ya que los procesos mediadores (valoración cognitiva y estrategias de afrontamiento) para incrementar el problema. Atrapado en uno de estos círculos, a menudo sin darse
juegan un papel importante. cuenta, el paciente de dolor crónico se siente cada vez más impotente e incapaz de
romperlos y escapar de ellos.
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paciente musculoesquelético
decir, en aquellos casos en los que los factores o conflictos psicológicos son de gran
Figura 2.
importancia en el inicio, la gravedad, la exacerbación y la persistencia del dolor del que
informa el paciente y los trastornos físicos tienen un papel escaso o nulo en su inicio
o persistencia.
Resistencia física Sin embargo, la evaluación psicológica también es útil en otras circunstancias. Con-
Depresión y cansancio cretamente en aquellos casos en los que se sospecha que los factores psicológicos y
sociales influyen de forma significativa en el problema de dolor. Por ejemplo, en casos
en los que el paciente muestra síntomas claros de encontrarse bajo un malestar emo-
cional considerable, en aquellos en los que el dolor interfiere de forma importante en
Ansiedad Dolor
o ira la vida diaria del paciente, si afecta negativamente a las relaciones interpersonales, y si
crónico se observan claras conductas de evitación, etc.
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3) Factores desencadenantes, agravantes o moduladores del dolor, y acudir al psicólogo, evitando errores de concepto que pudieran ocasionar una actitud
4) Contexto social en el que se mueve el paciente. defensiva y de no cooperación por parte del paciente.
Se espera que la reorganización conductual que promueve la terapia cognitivo-con- El establecimiento de una relación de confianza entre el terapeuta y el paciente es el
ductual en el paciente, tenga un efecto reductor sobre los índices de dolor o sobre la punto inicial de cualquier intervención psicológica y se realiza en base a una serie de
actitud ante el dolor en general. actitudes básicas del terapeuta:
Al ser atendidos por un psicólogo, algunos pacientes pueden llegar a creer que no se a) La primera aproximación se dirige a romper el circuito dolor-tensión-dolor
les toma en serio, que los profesionales médicos consideran que presentan un tras- y reemplazarlo por una reacción incompatible con la situación de tensión
torno mental, que su dolor no es real, quizás que son un caso sin solución y que “el mediante técnicas de autocontrol fisiológico.
sistema” les aparta para dar cabida a otros. b) Desde el enfoque operante se pretenden modificar las consecuencias
positivas que obtiene el paciente con la conducta de dolor (como la
Por tanto, se considera que la evaluación psicológica debe ir precedida de una cierta
atención de sus familiares) y resolver los problemas derivados del exceso de
preparación. A esta preparación puede contribuir, y mucho, la propia actitud del médi-
incapacidad y las expresiones de sufrimiento del sujeto.
co, al facilitar el proceso explicando la necesidad, la conveniencia o la oportunidad de
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c) Por su parte, la aproximación cognitivo-conductual considera la forma en Los criterios de exclusión para este tipo de tratamientos, o variables que reducirían
que los pacientes construyen su mundo y atribuyen significado a sus eventos. de forma significativa la eficacia de este tipo de intervenciones, serían:
Así, en el tratamiento se incluyen los aspectos afectivos y cognitivos de la
experiencia dolorosa. - Dolor oncológico (debido a las necesidades especiales de este grupo de
pacientes).
- Presencia de alteraciones psicopatológicas graves.
Tabla 41. Aproximaciones al estudio del dolor - Deterioro intelectual que impida acceder a significados simbólicos.
desde la psicología clínica
- Ser mayor de 65 años.
ORIENTACIÓN OBJETIVOS TÉCNICAS - Búsqueda y/o mantenimiento de incapacidad: clara ganancia secundaria en
Fisiológica — Control de los factores Relajación torno al dolor (querellas con seguros, demanda de incapacidad laboral, litigios
fisiológicos que subyacen en la Biofeedback con empresas…) o sospecha de rentismo.
génesis del trastorno.
Condicionamiento Operante —Eliminar las conductas de dolor. Modificación de conducta
—Promover conductas adaptadas La Terapia Cognitivo-Conductual ha demostrado eficacia en el tratamiento del do-
incompatibles con las de dolor. lor crónico y hoy día, es un elemento y complemento esencial en al acercamiento
—Generalización en el ambiente clínico a estos síndromes.
natural del paciente.
Cognitivo-Conductual —Modificar los factores afectivos y Inoculación Este tipo de intervención psicológica se aplica mediante un programa estructurado
cognitivos relacionados con la de estrés que incluye psicoeducación, relajación o biofeedback, técnicas conductuales y técni-
experiencia de dolor. cas cognitivas de afrontamiento y de prevención de recaídas.
Psicoterapia —Resolver conflictos psíquicos Relación terapéutica
(Humanismo, Constructivismo…) El Objetivo general de la Terapia Cognitivo-Conductual, es modificar la percepción
que el paciente tiene de su dolor y mejorar sus habilidades de afrontamiento, para que
todos estos cambios reviertan en una mejora en su calidad de vida.
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• Por último, y muy importante, citar algunos estudios que muestran que el 2.6.5.2.2 Psicoterapia
malestar emocional más que el dolor autoinformado influye en el grado de
incapacidad funcional de los pacientes (Holzberg y cols., 1996 y Turk y cols., Los pacientes candidatos a una Psicoterapia, son aquellos que por su vulnerabilidad
1996). psicopatológica previa, a parte del cuadro de dolor crónico y sintomatología asociada,
presentan:
- Aumentar los recursos que permiten adquirir una mejor autorregulación emocional, - Trastornos mentales comórbidos (trastornos de ansiedad, adicciones,
cognitiva y competencial de la vivencia del dolor. problemas de pareja, disfunciones sexuales, etc)
- Incrementar de forma significativa las expectativas de autocontrol acerca de la expe- - Problemática interpersonal importante y/o,
riencia de dolor crónico (Locus de Control Interno). - Problemas emocionales de gravedad (ansiedad fóbica, estrés interpersonal,
• Se ha observado que este tipo de pacientes suelen presentar antes del hostilidad…).
tratamiento, una puntuación media alta en el factor Locus de Control Externo
Este tipo de pacientes requieren un abordaje psicoterapéutico individual más especí-
centrado en“otros profesionales”; en el sentido de que estos enfermos con
fico e intenso, centrado en las particularidades de sus características y en su proble-
dolor crónico “están especialmente convencidos de que, de existir algún
mática personal.
medio eficaz para la mejoría, únicamente los médicos podrían proporcionarlos”
(DSM-IV TR.). Un Locus de Control más interno, garantizará una adecuada
utilización de los recursos sanitarios.
2.6.5.3 Conclusión
- Fomentar la búsqueda y realización de actividades motivantes regularmente progra-
madas, a pesar del dolor. Y reducir o eliminar las conductas de dolor (respuestas de Ante un problema de dolor crónico hay que tener presente que la complejidad del dolor
evitación generadas por el dolor y conductas de queja e incapacidad). crónico hace que el descenso de los niveles de dolor no sea algo que resulte fácilmen-
• Se postula que los pacientes con dolor crónico evitan realizar un amplio te predecible o controlable.
abanico de actividades debido al miedo al dolor. No es muy prudente desde el punto de vista psicológico, por tanto, plantear su elimi-
• Los trabajos realizados en esta línea indican que el miedo al dolor predice el nación o reducción como un objetivo terapéutico; sí lo es, plantear modificaciones en
nivel de actividad y el grado de discapacidad que presentan los pacientes los aspectos emocionales, cognitivos y conductuales implicados y sobre los que el su-
mejor que la intensidad del dolor. jeto tiene control, pues independientemente del impacto más o menos apreciable que
la modificación de estas variables puede tener sobre el dolor, siempre lo tienen sobre la
• Se trata de que el paciente se exponga (realice) de forma gradual aquellas calidad de vida percibida del paciente, quien en el peor de los casos habrá aprendido
actividades que teme que aumenten o favorezcan la aparición del dolor. De a vivir mucho mejor con su problema crónico.
este modo se reduce la ansiedad y el miedo que contribuyen a agravar el
cuadro de dolor crónico, y se aumenta su capacidad funcional, lo que mejora
su estado de ánimo y autoestima y beneficia en su conjunto a la situación
2.6.6 Familia
clínica del paciente (Vlaeyen, 2000, 2001 y 2002).
El tratamiento psicológico del dolor crónico tiene vías alternativas de intervención que
“La actividad mejora la modulación del dolor y la capacidad del paciente”.
pueden ser de utilidad en determinadas ocasiones y síndromes, como el entrenamien-
- Entrenamiento en asertividad y habilidades comunicativas para la mejora de sus re- to de los cuidadores informales del paciente.
laciones (pareja, familia, trabajo, personal sanitario).
En el abordaje de problemas crónicos, la implicación de los familiares, generalmente
- Incrementar la adopción de medidas de cuidado personal tanto físicas como psico- cónyuges, es esencial para que el tratamiento psicológico funcione correctamente.
lógicas.
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paciente musculoesquelético
- Gatchel, R. J., Psychopathology and Chronic Pain: Theoretical and Treatment Implications,
2.6.7 Comunicación Reno; Context Press, 2005.
El dolor, como experiencia multidimensional compleja, afecta a componentes sociales - Jusue Erro, G., Biurrun Unzue, A., Fernández Cuadrado, M. V.: Evaluación de la efectividad
de un protocolo de tratamiento psicológico. Cuadernos de medicina psicosomática y psi-
y familiares de la persona sobre todo cuando se hace crónico y si, además, no está
quiatría de enlace, 58/59, 2001.
controlado puede tener consecuencias muy negativas en estas esferas vitales. Por
tanto, la atención a la familia constituye una prioridad en la planificación sociosanitaria - Miró, J., Dolor crónico: procedimientos de evaluación e intervención psicológca, Bilbao, Des-
y debe integrarse dentro de una atención de calidad, ya que este soporte fundamental clée de Brouwer, 2003.
puede contribuir a superar las dificultades que puedan surgir durante el tratamiento.
- Moix, J., Cara a cara con tu dolor, Barcelona, Paidós, 2006.
Debido a todo ello, es importante potenciar la comunicación entre paciente, familia y el
- Soucase, B., Monsalve V., Soriano, J. F.: Afrontamiento del dolor crónico: el papel de las
equipo terapéutico, así como a analizar los problemas sociales y laborales que el dolor variables de valoración y estrategias de afrontamiento en la predicción de la ansiedad y la de-
crónico provoca, con el objetivo de establecer un abordaje integral del problema. presión en una muestra de pacientes con dolor crónico. Rev. Soc. Esp. Dolor, 12: 8-16, 2005.
El equipo de salud, conocedor de las circunstancias familiares, puede ayudar a esta-
blecer un reparto de tareas en el grupo familiar, que disminuya las tensiones o riesgos
previsibles e informar de los recursos sociosanitarios a su alcance en el caso concreto Puntos claves
y según la etapa de la enfermedad en que se encuentre cada paciente.
• En la actualidad, el dolor es considerado una experiencia perceptiva
compleja debida a la interacción existente entre procesos fisioló-
gicos, cognitivos y afectivos, siendo además definido como una
experiencia multidimensional mediatizada por distintas variables.
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paciente musculoesquelético
El parte de baja, expedido por los médicos del Sistema Nacional de Salud, o de las
Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales de la Seguridad So-
cial (MATEPSS) en el caso de que las contingencias profesionales estuvieran cubiertas
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paciente musculoesquelético
por estas entidades, es el documento que inicia el proceso para el reconocimiento del
Tabla 43. Grados de incapacidad y cuantía de la prestación
derecho a la prestación económica.
El reconocimiento del derecho al subsidio y el pago del mismo corresponden al INSS Incapacidad permanente Es la situación del trabajador, que como La prestación es una cantidad a
parcial para la profesión consecuencia de haber padecido una lesión tanto alzado correspondiente a
o ISM como entidades gestoras de la Seguridad Social, a las MATEPSS o a la propia habitual o enfermedad, tiene una merma en su 24 mensualidades.
empresa, según haya optado el empresario para la cobertura de esta prestación. capacidad laboral superior al 33 %, pero
no le impide la realización de las labores
El derecho al subsidio por IT podrá ser denegado, anulado o suspendido cuando el fundamentales de su trabajo habitual.
beneficiario haya actuado fraudulentamente para obtener la prestación; cuando el be- Incapacidad permanente Es la situación del trabajador que tras La prestación equivale a una
neficiario trabaje por cuenta propia o ajena estando en situación de IT y cuando el be- total para la profesión haber sufrido una enfermedad o lesión, está pensión de cuantía igual al 55%
neficiario rechace o abandone sin causa razonable el tratamiento que le fuera indicado. habitual incapacitado para las tareas fundamentales de la base reguladora.
de su profesión habitual.
La finalización o extinción puede producirse por por ser dado de alta médica el traba- Incapacidad permanente Es la situación del trabajador que tras ha- La prestación equivale a una
jador, con o sin declaración de incapacidad permanente; por el transcurso del plazo absoluta ber sufrido una lesión o enfermedad, esta le pensión del 100% de la base
máximo establecido para la situación de IT; por haber sido reconocido al beneficiario impide la realización de todo tipo de trabajo reguladora.
el derecho a la pensión de jubilación; por la incomparecencia injustificada a cualquier o profesión.
convocatoria para exámenes y reconocimientos establecidos por los médicos del INSS Gran invalidez Es la situación del trabajador que, tras La prestación equivale a la
o por los médicos de la MATEPSS; por fallecimiento del beneficiario o por sanción. haber sufrido una enfermedad o lesión, esta pensión según lo establecido en
no solo le impide la realización del trabajo, los apartados anteriores, más un
En el supuesto de alta por propuesta de incapacidad permanente, además del parte sino que además le impide la realización complemento destinado a que
de la mayor parte de las actividades de la el inválido pueda remunerar a la
de alta, el médico ha de cumplimentar el Informe Propuesta, documento en el que se vida diaria necesitando de la ayuda de una persona que le atienda.
recogen las causas que motivan la misma, y deberá también acompañar el Historial tercera persona.
Clínico del trabajador. Ambas informaciones son necesarias para que el Equipo de Va-
loración de Incapacidades del INSS proceda a la calificación de la incapacidad.
están compuestos por un presidente, que será el subdirector provincial de Invalidez
del INSS o funcionario que designe el Director General y 4 vocales: un médico Inspec-
2.7.2.2 Incapacidad Permanente tor del Servicio Público de Salud de la comunidad autónoma; un facultativo médico,
perteneciente al personal del INSS; un Inspector de Trabajo y Seguridad Social y un
La incapacidad permanente (IP) es la situación del trabajador que, después de haber funcionario titular de un puesto de trabajo de la unidad encargada del trámite de las
estado sometido al tratamiento prescrito y de haber sido dado de alta médicamente, prestaciones de invalidez de la correspondiente Dirección Provincial del INSS que ejer-
presenta reducciones anatómicas o funcionales, graves, susceptibles de determina- cerá las funciones de Secretario.
ción objetiva y previsiblemente definitivas, que disminuyan o anulen su capacidad la-
boral (art. 136 TRLGSS). La IP, cualquiera que sea su causa, se calificara con arreglo a Corresponde a los EVI, examinar la situación de incapacidad de los trabajadores y
los siguientes grados que se recogen en la Tabla 36. formular al director provincial del INSS los dictámenes-propuesta en materia de anu-
lación o disminución de la capacidad para el trabajo por existencia de situaciones de
El artículo 143 del TRLGSS atribuye al INSS, en todas las fases del procedimiento, la incapacidad permanente, calificación de estas situaciones en sus distintos grados,
competencia para declarar la situación de invalidez permanente, a los efectos de reco- revisión de las mismas por agravación, mejoría o error de diagnóstico y establecer la
nocimiento de las correspondientes prestaciones económicas. contingencia determinante.
El Real Decreto 1300/95 de 21 de julio, establece las competencias del INSS en mate- El procedimiento para evaluar la incapacidad se iniciara de oficio, por propia iniciativa
ria de incapacidades laborales y se crean los Equipos de Valoración de Incapacidades de la Entidad gestora o como consecuencia de petición razonada de la Inspección
(EVI) que estarán encuadrados en cada dirección provincial del INSS. Estos equipos de Trabajo y Seguridad Social o del Servicio de Salud competente para gestionar la
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paciente musculoesquelético
asistencia sanitaria de la Seguridad Social, a instancia del trabajador o su represen- Cuando en la resolución se reconozca el derecho a las prestaciones de incapacidad
tante legal; a instancia de las MATEPPS o de las empresas colaboradoras, en aquellos permanente en cualquiera de sus grados, se hará constar necesariamente el plazo a
asuntos que les afecten directamente. partir del cual se podrá instar la revisión por agravación o mejoría del estado invalidarte.
La instrucción de los procedimientos para la evaluación de la incapacidad requiere: En trastornos musculoesqueléticos, habrá que valorar la incapacidad permanente
- aportación del alta médica de asistencia sanitaria y del historial clínico, previo cuando haya:
consentimiento del interesado o de su representante legal, remitido por el - cambios degenerativos moderados/severos, en el contexto de alteraciones
Servicio de Salud o, en su caso, por la MATEPSS o empresa colaboradora, funcionales importantes;
cuando se trate de afiliados que tengan cubierta la incapacidad temporal por - cambios postquirúrgicos graves (artrodesis, artroplastias, amputaciones, etc.);
dichas entidades o, en su defecto, informe de la Inspección Médica de dicho
- signos de afectación neurológica: signos de afectación radicular moderados
Servicio de Salud;
o severos con pocas posibilidades de recuperación; signos de mielopatía
- formulación del dictamen-propuesta por el EVI que estará acompañado cervical en miembros superiores e inferiores o de afectación de la cola de
de un informe médico consolidado en forma de síntesis, comprensivo de caballo con pruebas complementarias confirmatorias;
todo lo referido o acreditado en el expediente, un informe de antecedentes
- si balance articular está conservado menos del 50% (afectándose los arcos de
profesionales y los informes de alta y cotización que condicionan el acceso al
movilidad más funcionales);
derecho;
- balance muscular malo (3 +/ 5) y atrofia muscular evidente establecida.
- emitido el dictamen-propuesta se concederá audiencia a los interesados para
que aleguen cuanto estimen conveniente. - colapsos articulares por osteonecrosis;
- patología inflamatoria con afectación funcional importante fuera de brote
El ponente del dictamen-propuesta es el facultativo médico del INSS, auxiliado por el agudo.
personal facultativo y técnico que se precise, perteneciente a la Dirección Provincial
de dicho Instituto. El es el encargado de elaborar el Informe Médico de Síntesis, que
consta de los siguientes apartados: identificación del médico; identificación de la per- 2.7.3 Criterios de valoración específicos: Pronóstico
sona a examinar; datos del puesto de trabajo; anamnesis y patologías alegadas por
el trabajador; las comprobaciones del médico evaluador: exploraciones y pruebas, Para valorar la capacidad laboral de un paciente con artrosis es necesario valorar:
descritas por aparatos; conclusiones; juicio diagnóstico y valoración; tratamientos re-
cibidos; evolución y circunstancias socio-laborales; limitaciones orgánicas y funciona- - la clínica del paciente, especialmente dolor y limitación de la movilidad;
les; conclusión final; determinación de la contingencia; determinación del tiempo de - el número de articulaciones afectadas y la importancia de éstas en la actividad
revisión; fecha y firma. laboral del paciente;
- la valoración del daño radiológico: la correlación entre los hallazgos
Cuando las características clínicas del trabajador lo aconsejen, o resulte imposible
radiológicos y la clínica es baja y con frecuencia se etiqueta de artrosis todo
la aportación de los documentos preceptivos (alta médica e historial clínico), el INSS
tipo de dolores del aparato locomotor de otras etiologías. El dato radiológico
podrá solicitar la emisión de otros informes y la práctica de pruebas y exploraciones
que mejor correlaciona con la sintomatología es una disminución importante
complementarias, previo acuerdo con los centros e instituciones sanitarias de la Segu-
de la interlínea articular en las articulaciones periféricas.
ridad Social u otros centros sanitarios.
En líneas generales, la artrosis será tributaria de periodos cortos de IT (entre 2 y 6
Los Directores Provinciales del INSS deberán dictar resolución expresa en todos los
semanas) si bien puede llegar a ser causa de incapacidad permanente en casos de
procedimientos incoados, sin estar vinculados por las peticiones concretas de los inte-
importante alteración funcional con discapacidad y acompañada de cambios radioló-
resados, por lo que podrán reconocer las prestaciones que correspondan a las lesio-
gicos moderado-severos.
nes existentes o a la situación de incapacidad padecida, ya sean superiores o inferiores
a las que se deriven de las indicadas peticiones.
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paciente musculoesquelético
Para valorar la capacidad laboral de un enfermo con artritis reumatoide, es necesario Para valorar la capacidad laboral de un paciente con lupus eritematososo sistémi-
valorar la evolución de la enfermedad, la respuesta al tratamiento, las alteraciones co, es necesario considerar:
articulares, las manifestaciones extraarticulares, la respuesta emocional y los requeri- - muchos pacientes pueden presentar una remisión espontánea o que su
mientos laborales. enfermedad puede tener un curso benigno;
En la valoración se distinguen dos tipos de parámetros: - los niveles de anticuerpos pueden ser positivos incluso en fases de remisión;
- sensibles al cambio, que no revelan daño irreversible (como sinovitis aguda, - la presencia de Ac anti DNA suele correlacionarse con fases de actividad
derrame articular, tendinitis, etc) y pueden ser útiles a la hora de valorar un clínica de la enfermedad. Los AC anti ENA (anti Ro/ SSa y anti RNP) tienen
paciente en IT de cara a la reincorporación laboral; valor diagnóstico pero no son útiles en el seguimiento ya que no se han
relacionado con la actividad de la enfermedad;
- situaciones de daño irreversible: con incapacidad funcional mantenida
(destrucción articular), a veces con comorbilidad asociada (renal, pulmonar, - la afectación sistémica (sobre todo renal, cardiológica y neuropsicológica) es la
etc.), que pueden ser causa de IP independientemente de las reagudizaciones que suele determinar mayores limitaciones funcionales;
que tenga la enfermedad. - se recomienda evitar todas aquellas actividades que obliguen a una exposición
continuada a los rayos solares, así como el manejo de ciertos agentes
En la medición de la discapacidad en esta enfermedad puede utilizarse el HAQ, un au- posiblemente lesivos para la dermis como los rayos ultravioletas.
tocuestionario de 20 ítems que mide ocho áreas funcionales (asearse, vestirse, despla-
- los enfermos con enfermedad de Raynaud deben evitar aquellas actividades
zarse, etc). Es el propio paciente el que evalúa su propia discapacidad por puntuación,
que les obligue a una exposición continuada al frio y evitar trabajos que
con el sesgo que eso conlleva.
requieran el uso de martillos neumáticos o maquinaria similar;
Puede ser útil, en un paciente determinado, valorar los factores pronósticos relaciona- - a los pacientes con trombopenias marcadas se les debe aconsejar evitar
dos con la posible evolución de la enfermedad: aquellos trabajos que supongan riesgos de golpes, caídas... para así evitar el
riesgo de hemorragias que puedan comprometer su vida.
Tabla 44. Factores pronósticos relacionados - para el resto de las manifestaciones del lupus, el pronóstico laboral ha de ser
valorada independientemente en cada enfermo.
con la evolución de la artritis reumatoide
- los factores que pueden influir en el pronóstico y la mortalidad son:
Clínicos - inflamación articular durante periodos prolongados (implica el desarrollo de erosiones
articulares más tempranas) • el grado de proteinuria y de uremia.
- mayor nº de articulaciones afectadas • la anemia de cualquier tipo.
- manifestaciones extraarticulares
• la afección del SNC.
Analíticos - niveles iniciales de PCR y VSG y su integración con el tiempo de evolución
- presencia de FR, especialmente si se trata del isotipo IgA Para valorar la capacidad laboral de un paciente con una espondiloartropatía (Es-
- presencia de ciertos anticuerpos (anti-factor perinuclear, anti-citulina, anti-filagrina, pondilitis Anquilosante, Artritis Psoriásica, Síndrome de Reiter, Artritis asocia-
anti-queratina y anti-Sa) de forma temprana
- niveles elevados de Ig galactosilada da a Enteropatía Inflamatoria Crónica…), es necesario considerar que, en general,
el pronóstico laboral de estas personas depende de la afección axial o periférica de
Radiológicos - presencia de erosiones tempranas
- presencia de quistes óseos yuxtaarticulares en la RMN estas enfermedades. Cuando sólo tiene afección axial y no está muy evolucionada,
los enfermos pueden verse limitados para cualquier actividad cuando presentan un
Genéticos - HLA DR4 y DR1.
brote agudo. Una vez pasado el episodio agudo, pueden reanudar progresivamente
las actividades de su vida habitual y laboral, aunque pueden verse limitados para todas
aquellas actividades que obliguen a un esfuerzo para la musculatura de la espalda. En
enfermedades muy evolucionadas, la rigidez e inmovilidad puede ser tan grande que le
dificulte incluso las actividades de su vida cotidiana. Cuando la afectación principal sea
196 197
paciente musculoesquelético
periférica, pueden llegar a tener deformidades articulares importantes que requieran, Normalmente, son pacientes subsidiarios de situaciones de IT, en las fases agudas
en algún momento, algún tipo de incapacidad laboral. con sintomatología dolorosa importante, sin olvidar lo difícil y subjetivo de la valoración
del dolor.
En una valoración clínico–laboral, es necesario considerar las posibles manifestaciones
extraarticulares (intestinales, pulmonares, oculares…). Uno de los pilares básicos del tratamiento de esta patología es la ACTIVIDAD FISICA,
y por ello, es necesario evitar en lo posible periodos prolongados de IT.
Para valorar la capacidad laboral de un paciente con una lumbalgia mecánica, es
necesario considerar lo siguiente: El único instrumento validado suficientemente para valorar el grado de afectación de
- en la mayoría de los pacientes no hay hallazgos OBJETIVOS que justifiquen el estos pacientes es el FIQ, aunque puede ser demasiado subjetivo para emplearlo en
dolor; valoración laboral. Es un instrumento enfermedad–específico que ayuda a la valoración
clínica y se recomienda para los ensayos clínicos de fibromialgia. Existen varias versio-
- es frecuente la mala respuesta del dolor al tratamiento, concurriendo una serie
nes del FIQ, validadas para la población española.
de factores que tienden a CRONIFICAR el dolor: edad, traumatismos previos,
trabajos de esfuerzo físico, patologías asociadas, sedentarismo, insatisfacción Es necesario considerar que:
laboral, etc;
- la exploración física y las pruebas complementarias no sirven como criterios
- muchas veces se solicitan pruebas complementarias innecesarias, o se derivan diagnósticos o de gravedad;
al especialista, en lugar de apoyar la valoración en una buena exploración
- el número de puntos dolorosos no es un criterio de gravedad, sólo un criterio
clínica, prolongándose el periodo de IT;
diagnóstico, que incluso no es aceptado por todos los especialistas;
- normalmente no son procesos que deban dar lugar a una valoración para IP, si
- la gravedad de la FM no puede deducirse por la dosis ni el tipo de analgésicos
bien a veces, la demora en pruebas y tratamientos puede llevar al agotamiento
que recibe el paciente;
del periodo de IT;
- en la mayoría de los casos, la evolución es hacia la cronicidad aunque
- valoración como una posible causa de IP en pacientes con sintomatología
existen factores que mejoran el pronóstico. La concesión de una pensión por
persistente a pesar del tratamiento, apoyado por datos de pruebas
incapacidad no parece mejorar la evolución de estos pacientes;
complementarias y para actividades de altos requerimientos de raquis.
- la presencia de patología psiquiátrica secundaria a la FM no implica que esta
- en el caso de hallazgos en pruebas complementarias (artrosis, protrusiones,
última sea de mayor gravedad, hay personas que presentan un umbral mayor
hernias discales), la situación de IT estará justificada en fases agudas, con
para la aparición de patología psiquiátrica pese a tener una FM que les recluye
limitación funcional, no por el hallazgo en sí.
en casa. No se ha identificado el nexo entre variables psicológicas y la génesis
Cuando la funcionalidad lumbar es compatible con la actividad laboral que desarrolla de la FM;
el sujeto de forma habitual, existe recuperación. - no hay estudios concluyentes que asocien la FM a un tipo de personalidad
característica;
Para valorar la capacidad laboral de un paciente con fibromialgia, no sirven los méto-
- no aceptar el diagnóstico de FM si previamente no se han descartado otras
dos de valoración empleados en el resto de patología musculoesquelética. La principal
patologías.
complejidad estriba en la AUSENCIA de HALLAZGOS OBJETIVOS. En principio, se
trata de una patología poco susceptible de valoración de IP ya que (el diagnóstico de - se trata de un diagnóstico aceptado por la OMS, la ACR, la SER..., por tanto,
fibromialgia por si mismo no implica una enfermedad invalidante), salvo casos excep- no corresponde plantearse su existencia en la labor de evaluación, si bien se
cionales en que la sintomatología dolorosa, produjera un deterioro del estado general, recomienda.
con repercusión importante a nivel de actividad vital del paciente, con importantes
Los tipos más frecuentes en la clínica diaria son la artroplastia de cadera; la de rodilla
requerimientos terapéuticos, en profesiones que supongan unos requerimientos físicos
y la de hombro, aunque con menor frecuencia, se pueden ver en otras articulaciones
importantes.
como la trapeciometacarpiana.
198 199
paciente musculoesquelético
Para valorar la capacidad laboral de un paciente con artroplastia, es necesario con- - hay que tener en cuenta si la sintomatología es continua o aparece de forma
siderar: episódica (nocturna, esfuerzos);
- movilidad residual, en la articulación sustituida; - objetivar las limitaciones en la movilidad de muñeca y dedos, maniobras
- estabilidad de la prótesis sobre todo en las artroplastias de hombro o rodilla; exploratorias especificas positivas (signos de Túnel y Phallen), presencia de
atrofias musculares, alteraciones de la fuerza y la funcionalidad de la mano
- remisión completa del dolor o queda dolor residual;
(presa de agarre, pinza, puño, etc.);
- en general la vida de la prótesis que suele ser de unos 10-15 años;
- la prueba complementaria fundamental en esta patología es el estudio
- posibles complicaciones en caso de dolor: aflojamiento de alguno de sus neurofisiológico, el electromiograma y electroneurograma que mostrarán una
componentes; fractura por fatiga del tallo metálico; luxación; desgaste del disminución en la velocidad de conducción del nervio mediano a través de la
acetábulo e infección. muñeca. Se puede realizar estudio radiológico de muñeca para descartar otras
posibles patologías que podrían producir dolor a este nivel;
La IT está justificada en este tipo de pacientes hasta que se haya completado la re-
cuperación postquirúrgica y la rehabilitación (aproximadamente 150 días). Finalizado - la situación de IT se justifica si hay sintomatología activa y limitación funcional
este plazo procedería la reincorporación laboral, si la funcionalidad de la articulación en la mano afectada, sobre todo si es la dominante, tanto en los casos de
protésica es compatible con la actividad laboral que venia desempeñando. tratamiento conservador como tratamiento quirúrgico. La realización de EMG
postquirúrgico estaría indicada en los casos en los que el paciente refiere que
Cuando la evolución es desfavorable, o bien queda una limitación funcional de la ar- no existe mejoría sintomática y funcional, con el fin de correlacionarla con un
ticulación que no es compatible con la actividad laboral, es necesario valorar IP. En empeoramiento de los parámetros electromiográficos.
general, aquellas actividades que supongan sobrecargas articulares mecánicas im- - una vez que, FINALIZADOS todos los tratamientos posibles, se objetiven
portantes (rodilla, hombro, cadera) son poco recomendables para personas con artro- unas limitaciones DEFINITIVAS e INCOMPATIBLES con su actividad laboral
plastias. También limitarían para requerimientos biomecánicas intensos, de ambulación habitual (excepcional), puede valorarse IP. Existen factores que ensombrecen
prolongada o por terreno irregular y para posturas forzadas. el pronóstico y pueden derivar en situaciones de IP: la ausencia de dolor
Para valorar la capacidad laboral de un paciente con artrodesis, es necesario: o anestesia que indica una afectación severa del nervio y de sus fibras
más internas; la recaída del STC, tanto si se ha realizado tratamiento
- Los tipos más frecuentes de artrodesis son a nivel vertebral, ya sea cervical o quirúrgico como si no. En estos casos sería conveniente realizar estudios
lumbar; a nivel de tobillo (la llamada triple artrodesis) y a nivel del carpo. complementarios (Ecografía) para descartar patologías asociadas y la
- Es importante considerar la variación del dolor, y la capacidad física residual presencia de atrofia indica afectación más severa.
(movilidad), así como la compatibilidad entre las SECUELAS del tratamiento
(perdida de movilidad) y los requerimientos laborales del paciente. Por último mencionar, que el STC se da con mayor incidencia en personas que realizan
- Se mantendrá la situación de IT, mientras durante la recuperación del determinadas actividades que suponen movimientos repetitivos de muñeca, posicio-
procedimiento quirúrgico (unos 90 días aproximadamente). Una vez se nes mantenidas de muñeca en flexión o actividades que exigen gran fuerza. Estas
compruebe la consolidación radiológica de la fijación, hay que determinar si la actividades pueden ser tanto deportivas como profesionales. En el nuevo listado de
perdida de movilidad de la articulación fijada (segmento de raquis, tobillo, etc.) enfermedades profesiones, se encuentra adecuadamente recogida.
es compatible con la actividad laboral habitual que desarrollaba el paciente. Si
no es así, procederá remitirlo para valoración de IP.
2.7.4 Reincorporación tras dolor lumbar
Para valorar la capacidad laboral de un paciente con síndrome del túnel carpiano
(STC), es necesario considerar: Por último, es preciso añadir que la frecuente implicación de factores no puramente
- evolución favorable, salvo en casos de afectación neurológica avanzada en médicos en el curso clínico de las afecciones dolorosas de la región lumbar (accidentes
los que pueden quedar menoscabos funcionales irreversibles que pueden ser de tráfico, accidentes laborales, existencia de seguros de compensación, simulación,
incompatibles con ciertas actividades laborales;
200 201
paciente musculoesquelético
insatisfacción laboral y un componente elevado de funcionalidad), hace que el proble- Es importante conocer si el dolor lumbar referido por el paciente guarda relación direc-
ma al que se enfrenta a diario un número importante de profesionales, con frecuencia ta con un determinado mecanismo desencadenante, o por el contrario, su comienzo
represente un reto difícil de superar, capaz de producir una desconfianza tanto hacia la no se relaciona con ningún acontecimiento definido, dada la necesidad de descartar
eficacia del tratamiento como hacia la conducta del paciente, y una frecuente actitud las llamadas “causas malignas” del dolor lumbar (por el diferente abordaje terapéutico
negativa de enfrentarse al problema real. Además, la ausencia de estudios clínicos que precisan y el peor pronóstico clínico que habitualmente tienen), así como por la
adecuadamente planificados (siguiendo las indicaciones actualmente establecidas de importante repercusión que determinados factores asociados al dolor lumbar tienen
la medicina basada en la evidencia), capaces de demostrar la mayor eficacia de un en el pronóstico evolutivo de estos procesos, muy especialmente cuando el paciente
tratamiento sobre otro, conduce a un mayor escepticismo al respecto y que finalmente interpreta que su dolor lumbar tiene un claro origen laboral.
cada uno termine por prescribir aquello en lo que más confía o sobre lo que tiene un
mayor grado de experiencia profesional.
Es necesario que las clasificaciones empleadas sean útiles desde un punto de vista 2.7.4.1 Dolor lumbar crónico
práctico y pronóstico, y muy especialmente en el caso del dolor lumbar, donde la
Según diferentes autores, la fase de dolor lumbar crónico suele comenzar a partir de
existencia de diferentes estadios evolutivos, permite considerar la posibilidad de recu-
la 7ª ó 12ª semana. Se estima que aproximadamente un 5-10% de los pacientes que
peración de un paciente y su posible reincorporación a su actividad habitual. Por esta
sufren un dolor lumbar agudo evolucionará hacia la cronicidad. Es importante, espe-
razón, se considera adecuada la definición de dolor lumbar agudo cuando dura menos
cialmente desde el punto de vista pronóstico, diferenciar a aquellos pacientes que a
de 7-10 días, dolor lumbar subagudo cuando está presente entre 7-10 días y 12 sema-
pesar del dolor crónico son capaces de realizar sus actividades de la vida diaria, de
nas y dolor lumbar crónico cuando se prolonga más allá de 12 semanas.
aquellos que desarrollan una incapacidad para su actividad laboral. Habitualmente,
Según esta clasificación, aquellos procesos que tengan una mayor duración llevan esta incapacidad no está relacionada con la severidad del dolor inicial o su mayor o
consigo un riesgo más elevado de cronificarse, y por lo tanto, una mayor probabilidad menor persistencia en el tiempo, siendo necesario descartar la posible influencia nega-
de desarrollar una posible incapacidad. Así, en presencia de un dolor lumbar con una tiva de factores externos, no puramente médicos, cuya presencia es preciso identificar
duración entre 8 y 12 semanas, hay un alto riesgo de que éste se cronifique, siendo para disponer los medios terapéuticos que permitan un correcto abordaje.
más difícil conseguir un buen control terapéutico, y determinando una elevada posi-
Resulta asimismo fundamental, transmitir de una forma adecuada al paciente que la
bilidad de desarrollar una limitación funcional severa. Aquellos pacientes, que como
presencia de un dolor lumbar crónico (concepto estrictamente médico) no es necesa-
consecuencia de un dolor lumbar prolongado no se han incorporado a su actividad
riamente indicativo de una dolencia de por vida, por las repercusiones psicológicas y
laboral previa en un periodo de 6 ó más meses, están en una situación de incapacidad
laborales que una información incorrecta puede llegar a determinar en el curso clínico
crónica, y tienen muchas posibilidades de no incorporarse nunca a sus actividades
de este grupo de pacientes.
habituales, siendo los responsables del mayor gasto sanitario (hasta un 85%) y social
por patología lumbar. Por lo general, la gran mayoría de los pacientes se reincorporan a su actividad laboral
en los tres primeros meses, independientemente de la resolución completa del proble-
Desde un punto de vista laboral, Frymoyer considera que el pronóstico habitual del
ma doloroso lumbar. El pronóstico funcional empeorará de forma alarmante, cuanto
dolor lumbar es excelente, con una reincorporación laboral del 90% de los casos en
mayor sea el tiempo que el paciente permanezca ausente de su puesto de trabajo
las primeras seis semanas de evolución. Por lo general, las cifras manejadas referen-
habitual. Se estima que la probabilidad de retornar al trabajo después de haber trans-
tes a la duración media de la incorporación al trabajo tras un episodio agudo de dolor
currido 6 meses de un episodio de dolor lumbar, es de aproximadamente un 50%;
lumbar, oscilan entre 20 y 30 días, aunque la duración habitual de los síntomas es
después de un año, la probabilidad se reduce al 20%; y después de 2 años, la posibili-
levemente mayor, si bien la disminución en su intensidad permite al paciente, en un
dad de que el paciente vuelva a desempeñar las actividades laborales que previamente
elevado porcentaje de casos, retornar a sus actividades laborales previas. Todo esto
llevaba a cabo, es prácticamente nula.
permite aceptar la tendencia a la remisión espontánea de los síntomas dolorosos del
paciente en el mayor porcentaje de los casos. La evidencia se inclina hacia una influencia marcadamente determinante de factores
psicosociales. La experiencia del dolor crónico provoca en el paciente que lo sufre, una
202 203
paciente musculoesquelético
sensación de incapacidad y una alteración del estado de ánimo, lo cual viene a incre- La incidencia de recurrencia en la patología dolorosa lumbar parece ser mayor en
mentar la intensidad del dolor y reducir a niveles claramente patológicos el rendimiento aquellas situaciones en que el dolor lumbar se asocia a dolor ciático o a signos clíni-
socio-laboral de estos pacientes. cos positivos de irritación radicular, cuando la actividad laboral exige un trabajo manual
pesado, cuando el episodio doloroso inicial dura más de 2 semanas, y cuando hay
Otro factor que debe ser tenido en cuenta a la hora de abordar el manejo de los pro- antecedentes personales de episodios previos.
cesos dolorosos lumbares crónicos es el ambiente de trabajo, debido a su importante
repercusión en la incapacidad laboral que frecuentemente lleva asociada. Svensson lo La variabilidad clínica de las recurrencias dolorosas lumbares, en función de la inten-
considera como un factor determinante de incapacidad, con un valor predictivo alto sidad, duración y repercusión funcional es elevada entre pacientes, incluso a lo largo
especialmente cuando se asocia a la creencia de que el ambiente de trabajo es causa del curso evolutivo de un mismo paciente. Así, hay pacientes que refieren una o dos
de lesión. La insatisfacción laboral, las tareas desagradables y repetitivas y los am- recurrencias clínicas al año, frecuentemente sin una causa clara desencadenante, que
bientes ruidosos, se correlacionan con incapacidad. En otros casos, son las relaciones suele durar por término medio de 2 a 3 semanas, y que no interfiere por regla general
interpersonales empleado-patrón, empleado-supervisor o entre los mismos compañe- con la actividad habitualmente desarrollada, sin precisar necesariamente un tratamien-
ros, las que determinan un mayor impacto. to específico. Por el contrario, hay pacientes que presentan varias recurrencias sinto-
máticas al año, en ocasiones relacionadas con algún mecanismo desencadenante y en
La frecuente percepción de que la lesión es fuente de indemnización, ha sido valorada otras, de comienzo insidioso, refiriendo la tendencia habitual a que dichas recurrencias
en relación con los resultados de tratamientos conservadores o quirúrgicos, observán- sean cada vez más frecuentes al año, y a su vez más intensas y prolongadas en el
dose los malos resultados obtenidos, independientemente del tipo de tratamiento rea- tiempo, incluso sin llegar a desaparecer en su totalidad, determinando por lo tanto la
lizado, en aquellos pacientes que se encuentran en trámites legales o de reclamación posibilidad de provocar una severa repercusión funcional y una evidente interferencia
por su condición. con la práctica laboral habitual.
Por último, se debe mencionar la posible relación existente entre ciertos factores de-
mográficos con la prolongación en el tiempo del dolor lumbar, y consecuentemente
con el riesgo de desarrollar una incapacidad. Los trabajos de Deyo y Dionne permiten 2.7.5 Criterios de valoración: Grupos funcionales orientativos
destacar la fuerte correlación encontrada entre el nivel educacional del paciente y los
días de incapacidad, afirmando que un nivel bajo de educación es un factor de riesgo 2.7.5.1 Patologías del raquis
negativo de incapacidad. Otras variables como el estilo de vida o factores ocupaciona-
les, pueden estar implicados en esta relación entre incapacidad y educación.
GRADO 0
Criterios de inclusión
2.7.4.2 Recurrencia
Clínica: No sintomatología, funcionalidad normal.
En estudios de larga duración sobre el dolor lumbar, se ha encontrado una alta tasa
de recurrencias de lumbalgia, que Nachemson estima en un 50-60%, y otros autores Antecedentes de procesos patológicos que han curado sin secuelas y que no
como Troup, entre un 40-80%. Bergquist-Ullmanm y Larson, después de un año de precisan tratamiento continuado ni control asistencial.
seguimiento, calculan que el 62% de los pacientes con dolor lumbar agudo tienen una
o más recaídas sintomáticas, con un tiempo medio de 2 meses de duración. Von Korff Hallazgos casuales, si existen, en las pruebas complementarias.
sugiere que la evolución del dolor lumbar es típicamente recurrente, y que el pronóstico
clínico del dolor lumbar agudo podría ser menos favorable de lo que hasta ahora se ORIENTACIÓN SOBRE CONCLUSIONES: Capacidad laboral completa
ha llegado a considerar, debido a la repercusión funcional que en muchos pacientes
determina una tasa elevada de proceso dolorosos lumbares recurrentes.
204 205
paciente musculoesquelético
GRADO 1 GRADO 1
Criterios de inclusión Criterios de inclusión
Clínica: Síntomas leves, esporádicos o compensados por el tratamiento. Po- Clínica: Dolor crónico leve compensado con tratamiento o crisis álgicas con
demos incluir: raquialgia mecánica, síndrome cérvico-cefálico: (cervicalgia con buena respuesta al tratamiento en el contexto de lesiones tendinosas, patolo-
síntomas de mareos, acúfenos…), síndrome miofascial cervical, raquialgia por gía degenerativa, inflamatoria o post-traumática. El tratamiento en fases álgicas
exacerbación de un proceso inflamatorio, cervicobraquialgia o lumbociatalgia compensa la clínica.
sin hallazgos sensitivos o motores a la exploración.
Exploración física: Balance articular completo que puede ser doloroso en al-
Exploración física: Podemos encontrar desde anodina a contracturas muscu- gunos grados (arco doloroso en el hombro) o pérdida de movilidad en rangos
lares o ligera disminución del rango de movilidad. poco útiles (en general, pérdida de los últimos grados de los distintos rangos de
movimiento) balance muscular bueno (4/5), no atrofias musculares.
Clínica: Dolor ausente o intermitente y poco significativo. ORIENTACIÓN SOBRE CONCLUSIONES: Susceptible de periodos de IT.
- Limitación para tareas que supongan requerimientos muy intensos para la
Antecedentes de procesos patológicos que han curado sin secuelas y que no articularción: levantamiento de objetos muy pesados, carga y transporte de
precisan tratamiento continuado ni control asistencial. paquetes pesados, lanzamiento de objetos a larga distancia y/o sobre la altura
de la cabeza, deportes de competición;
Exploración física: Balance articular completo, balance muscular 5/5, fuerza
y sensibilidad normales. - Susceptible de ser calificados como LPNI en caso de contingencia profesional.
Tratamiento: Innecesario.
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paciente musculoesquelético
Criterios de inclusión
Clínica: Dolor intenso que puede interferir con el descanso nocturno, crepita- GRADO 0
ción…
Criterios de inclusión
Exploración física: Balance articular limitado, conservando menos del 50%
de movilidad y con compromiso evidente de los arcos útiles articulares, atrofia Clínica: Asintomático, exploración funcional sin hallazgos significativos.
muscular evidente, balance muscular malo (3+/5).
Pruebas complementarias: Normales o compatibles con la edad del paciente.
Pruebas complementarias: Alteradas:
ORIENTACIÓN SOBRE CONCLUSIONES: No se objetiva limitación laboral.
- Cambios degenerativos moderados/severos, en el contexto de alteraciones
funcionales importantes;
- Erosiones evidentes, deformaciones articulares (subluxaciones), pinzamiento
importante de la interlínea, osteofitos evidentes, aplanamiento de cabeza
humeral sin colapso, signo de la medialuna, ascenso de cabeza humeral hacia
el acromion;
- Rotura completa del manguito rotador, atrofia muscular intensa.
208 209
paciente musculoesquelético
210 211
paciente musculoesquelético
GRADO 4 - Pérez AM, Méndez MJ, Ruescas MD, Pérez T. Patologías del Aparato Locomotor . En Manual
de actuación para médicos del INSS. Patologías del Aparato LocomotorInstituto Nacional de
Criterios de inclusión la Seguridad Social, 2011.
Clínica: Sintomatología muy incapacitante, pese al tratamiento. Afectación bi- - Rivera et al. Documento de consenso de la Sociedad Española de Reumatologia sobre la
lateral. fibromialgia. Reumatol. Cli.2006;2 Supl 1: S55-66.
Exploración física: Muy patológica con grandes limitaciones de los arcos de - Trastornos y Lesiones del Sistema Musculo esquelético. Ed. Masson. 2000.
movilidad y balance muscular muy disminuido con desestructuración articular - Vicente T. Lumbalgia. Prevención, valoración del daño corporal y rehabilitación. Lettera Pu-
secundaria a distintas patologías. blicaciones SL, 2011.
Pruebas complementarias: Muy alteradas.
Bibliografía
- Artroplastias de sustitución. Monográfico de la revista Rehabilitación, de la Sociedad Españo-
la de Rehabilitación y Medicina Física. Vol. 41- no 6 - Noviembre-Diciembre 2007.
- Guía de Valoración del Menoscabo Permanente. 2a edición. Tomo 1o. Instituto Nacional de
Medicina y Seguridad en el Trabajo.
212 213
paciente musculoesquelético
2.8 El papel de la enfermería en el dolor musculoesquelético El personal de enfermería para completar la valoración integral del paciente tiene que
tener en cuenta los factores de riesgo sabiendo que el paciente presentará unos no
El dolor es uno de los problemas de salud más frecuentes con los que se encuentra la modificables (edad) como potencialmente modificables (inactividad física, hábitos die-
enfermería en los diferentes ámbitos de atención al paciente y su elevada prevalencia téticos, tabaquismo,...) y es en éstos donde el personal de enfermería tiene un papel
requiere una coordinación entre los diferentes niveles dentro del equipo multidisciplinar. fundamental para incidir y concienciar al paciente de su cambio y/o mejora de los mis-
mos para mejorar su estado de salud en relación a su trastorno musculoesquelético.
Como síntoma principal de la enfermedad osteoarticular es el motivo más frecuente
de consulta del aparato locomotor y el personal de enfermería puede contribuir en la A continuación presentamos los diferentes cuestionarios, test e índices de valoración
valoración y tratamiento mediante cuidados de enfermería encaminados a mejorar y/o de enfermería que van a contribuir a realizar una valoración integral del paciente con
paliar el dolor en pacientes con trastornos musculoesqueléticos. dolor musculoesquelético. Tenemos que tener en cuenta que algunos cuestionarios
son autoadministrables y es el paciente quien debe cumplimentarlo y después entre-
En primer lugar, debemos realizar una valoración del paciente con dolor musculoes- gárselo a su enfermera; y otros son heteroadministrables, la enfermera debe realizar
quelético para planificar la orientación terapéutica a llevar a cabo en función de sus las preguntas al paciente.
características. Dicha valoración la realizaremos atendiendo a:
• Cuestionario de Salud General de Goldberg-ghq28: este cuestionario está for-
• Historia clínica: mado por 4 subescalas de siete preguntas en cada una de ella (síntomas psicosomáti-
- Datos demográficos: sexo, edad. cos, ansiedad, disfunción social en la actividad diaria y depresión) con cuatro respues-
- Enfermedades y accidentes previos. tas posibles. El objetivo del cuestionario es determinar si se han padecido molestias o
- Problemas de salud actuales. trastornos y cual es el estado de salud del paciente en las últimas semanas. El paciente
tiene que contestar a todas las preguntas seleccionando las respuestas que se acer-
- Medicación. can más a lo que siente o ha sentido.
- Dolor (localización, duración, características,...).
• Cuestionario “Conozca su salud nutricional”: se trata de un cuestionario au-
• Exploración física: toadministrado de 10 items (p.ejem. Como poca fruta, vegetales o productos lácteos)
- Postura de la persona (erguida, un poco encorvada, ligera elevación de un con dos posibles respuestas (si/no). Cada ítem puntua conforme al peso del paciente
hombro sobre otro, etc.) y su interpretación es la siguiente:
- Marcha.
0-2 3-5 6 ó más
- Movilidad en las actividades cotidianas. Reevaluar la puntuación Tomar medidas para mejorar los Lleve el cuestionario a su médico,
- Masa muscular. nutricional en seis meses. hábitos alimentarios y el estilo de especialista en dietética u otros
vida. Reevaluar en tres meses profesionales de salud cualificados
• Valoración de los hábitos de salud: El personal de enfermería realizará una valoración y pida ayuda para mejorar su
integral del paciente con dolor musculoesquelético para abordar las diferentes necesi- estado nutricional.
dades para elaborar posteriormente un plan de cuidados personalizado e individualiza-
do. Los principales patrones de salud a valorar son los siguientes:
• Autonomía para las actividades de la vida diaria, Barthel modificado por
- Patrón nutricional-metabólico: hábitos alimenticios, peso,... Granger: este cuestionario es heteroadministrable, y es de especial ayuda para valorar
- Patrón sueño-descanso: horas de sueño. aspectos de las personas con problemas funcionales, su movilidad para la rehabilita-
- Patrón actividad-ejercicio: movilidad en las actividades de la vida diaria ción y su movilidad para los autocuidados.
(peinarse, lavarse,...), si las realiza con normalidad o con algún impedimento,
ocupación laboral, hábitos deportivos, uso del ocio y del tiempo libre,....
- Patrón adaptación-tolerancia al estrés.
214 215
paciente musculoesquelético
• Valoración de las actividades de la vida diaria, Índice de Katz: cuestionario • Intolerancia a la actividad.
heteroadministrable de 6 items (baño, vestido, uso del wc, movilidad, continencia y • Incapacidad del adulto para mantener su desarrollo.
alimentación) valorándose la independencia de estas activiades cotidianas.
• Déficit de autocuidados: alimentación.
• Actividades instrumentales de la vida diaria, Escala Lawton y Brody: cues- • Déficit de autocuidados: baño e higiene.
tionario heteroadministrable de 8 items (capacidad de uso del teléfono, realización de • Déficit de autocuidados: vestido y arreglo.
compras, preparación de comidas, cuidado de la casa, lavado de ropa, uso de medios
• Déficit de autocuidados: uso de wc.
de transporte, responsabilidad respecto a su medicación y manejo de asuntos econó-
micos) que valora la independencia de los pacientes. • Trastorno de la imagen corporal.
• Dolor.
• Escala de valoración del equilibrio y la marcha Tinetti: es una escala hete-
• Dolor crónico.
roadministrada que consta de 22 ítems y que se divide en dos subescalas: equilibrio
estático y equilibrio durante la marcha. Tanto el facultativo como el personal de enfermería debe intentar satisfacer las de-
mandas de salud del paciente con trastornos musculoesqueléticos. Por este motivo el
• Cribado ansiedad depresión, Escala de Goldberg: es un cuestionario heteroad-
personal de enfermería puede contribuir mediante unos planes de cuidados individua-
ministrado con dos subescalas, una de ansiedad y otra de depresión.
lizados para promocionar la salud del paciente.
• Cuestionario del dolor español CDE: cuestionario autoadministrable que valora la
La base fundamental de los cuidados generales del paciente con trastorno muscu-
intensidad total del dolor (valor de intensidad de dolor sensorial + afectiva + evaluati-
loesquelético es el alivio del dolor, esto lo conseguiremos mediante medidas farmaco-
va), intensidad de dolor actual (mediante una escala de tipo Likert) y una escala visual
lógicas y/o no farmacológicas.
analógica (EVA).
Dentro de las medidas farmacológicas podemos distinguir los diferentes fármacos
• Cuestionario de afrontamiento ante el dolor crónico: es un cuestionario au-
pautados por los médicos para el alivio del dolor. El personal de enfermería participa en
toadministrado de 31 ítems distribuidos en 6 subescalas (religión, catarsis, distracción,
la educación sanitaria del paciente en cuánto al conocimiento del fármaco, su pauta,
autocontrol mental, autoafirmación y búsqueda de apoyo social). Se utiliza para valorar
los posibles efectos secundarios y tratamiento de los mismos. La administración oral
el afrontamiento del dolor crónico y sus áreas con las estrategias más destacadas para
es la vía preferida ya que es más cómoda, fisiológica y normalmente más económica.
el control y manejo de la percepción álgica.
Cabe destacar la participación del personal de enfermería en la administración de me-
Después de realizar una exhaustiva valoración del paciente con dolor musculoesquelé- dicación por vía intramuscular. La región glútea es el sitio más común y concretamente
tico, estableceremos unos diagnósticos de enfermería que nos proporcionarán la base el cuadrante superior externo para evitar lesionar importantes nervios y vasos sanguí-
para seleccionar las intervenciones de enfermería destinadas a conseguir resultados neos que discurren por los otros cuadrantes entre los que destaca el nervio ciático. Si
positivos para el paciente. fuese posible, es mejor que el paciente esté acostado y si no lo importante es que la
musculatura esté relajada.
Diagnósticos de enfermería asociados a enfermedades del sistema musculoesquelé-
tico: La iontoforesis consiste en la introducción de moléculas o átomos con una carga eléc-
trica en los tejidos empleando una corriente eléctrica. Su aplicación la realiza el personal
• Riesgo de lesión.
de enfermería y está basada en el fenómeno físico de repulsión y atracción de cargas
• Riesgo de traumatismo. eléctricas. En la administración de medicación mediante esta técnica hay que tener en
• Riesgo de síndrome de desuso cuenta la polaridad del fármaco, introduciendo el mismo mediante la corriente eléctrica.
• Deterioro de la integridad de los tejidos. Su efecto es local y está indicado para puntos trigger en dolor musculoesquelético.
• Deterioro de la movilidad física. Además el personal de enfermería colabora en la preparación de ozonoterapia. La
• Riesgo de disfunción neurovascular periférica. ozonoterapia consiste en administrar ozono generando reacciones bioquímicas. Es un
216 217
paciente musculoesquelético
oxidante, actua como modulador de diferentes funciones celulares y activa mecanis- Tanto la pirámide como la rueda de los alimentos son elementos didácticos donde
mos antioxidantes endógenos y así frena el proceso oxidativo responsable de la des- vemos representados los diferentes grupos de alimentos y la importancia cuantitativa
trucción celular presente en procesos tales como la inflamación; por tanto disminuye que debe tener en nuestra alimentación.
la inflamación y el dolor en procesos musculoesqueléticos.
Tanto el peso como la alimentación del paciente es fundamental para contribuir a la
En cuanto a las medidas no farmacológicas, podemos distinguir las modalidades físi- mejora del estado de salud en trastornos musculoesqueléticos. Para terminar, decir
cas y psicológicas: que como todos sabemos el sobrepeso no favorece al paciente, y un desajuste en la
ingesta de ácidos grasos omega 3 y omega 6 y vitamina E tampoco, ya que intervienen
• TENS (estimulación eléctrica percutánea): consiste en la estimulación en los procesos inflamatorios y dolorosos.
controlada eléctrica de bajo voltaje aplicada a fibras nerviosas periféricas
mediante electrodos cutáneos para inhibir la transmisión del dolor. No efectos
colaterales (figura 1). Recomendaciones alimenticias
• Interferencial: es un dispositivo de electroestimulación nerviosa transcutánea
FRUTA 3 piezas / día
interferencial de baja intensidad para conseguir alivio del dolor. Esta corriente
se genera en el cruce temporo-espacial de dos ondas bifásicas bipolares con VERDURA 300 grs./ día
frecuencias distintas. Ayuda al control del dolor acelerando la curación de los LECHE Y DERIVADOS 1 L. / día
procesos inflamatorios (figura 2). LEGUMBRES 2-3 / semana
HUEVOS 3-4 / semana
Figura 1 Figura 2 CARNE 2-3 / semana
PESCADO 4-5 / semana
AZÚCARES DE ABSORCIÓN LENTA (pan, patatas, pasta, arroz,...) A diario
AZÚCARES DE ABSORCIÓN RÁPIDA (azúcar, pastelería, bollería,...) Recomendable evitarlos
GRASAS Aceite de oliva
AGUA 2 L. / día
Educación sanitaria:
- Alimentación. Sin darnos cuenta abandonamos los buenos hábitos alimentarios per-
judicando a nuestra salud. La correcta alimentación depende de una serie de factores
tales como la edad, sexo, peso, actividad física...La dieta debe ser equilibrada y la
alimentación tiene que aportar la cantidad necesaria de nutrientes para llevar a cabo
los procesos metabólicos, suministrar suficientes nutrientes con funciones plásticas y
regeneradoras y que las cantidades de cada uno de los nutrientes estén equilibrados
(Proteínas 15% del aporte calórico total, glúcidos 55-60% y lípidos 30%).
218 219
paciente musculoesquelético
Es muy fácil entender lo importante que es adoptar unos correctos hábitos posturales,
tenemos que organizar nuestras actividades de forma que no estemos mucho tiempo
en la misma posición, tenemos que descansar entre tareas para relajarnos y estirarnos,
y si fuese necesario, modificar nuestro entorno.
Al caminar o estar de pie, siempre poner un pie más adelantado, no estar de pie para-
do mucho tiempo y usar zapato cómodo de tacón bajo. cas individuales de cada persona pero de manera general no es recomendable dormir
menos de 6 horas diarias y la siesta es saludable entre 15-20 min y no tumbado. Lo
En cuanto a actividades con los brazos, hay que hacerlas a una altura adecuada. que tenemos que cuidar es la calidad de este tiempo reparador; tenemos que cuidar
el espacio, la temperatura, el silencio y nunca acostarnos enfadados y mejor dormir
Si estamos sentados, la espalda tiene que estar ergida y alineada, nos tenemos que
después de reirnos.
sentar con la columna bien apoyada y lo más atrás posible. Los sofás o sillones de-
masiado blandos son perjudiciales. Si estamos sentados en una mesa, ésta tiene que La postura ideal es la que nos permite tener la columna alineada, por tanto decúbito
estar próxima a la silla. prono no es recomendable. El colchón y somier tienen que ser firmes y rectos, ni muy
blandos ni muy duros.
Para recoger objetos hay que flexionar las rodillas, con apoyo firme de los pies y sólo
levantar hasta la altura del pecho, si tuvieramos que transportarlos lo haríamos con el - Tabaquismo. En el caso de que el paciente sea fumador tendremos que promover un
objeto bien pegado al cuerpo. cambio de actitud para que abandone el consumo de tabaco, ya que es responsable
directo de muchas enfermedades y perjudicial en el dolor musculoesquelético.
- Ejercicio. Todos conocemos la impor-
tancia de realizar ejercicio para mejorar • Frio o calor: el paciente debe elegir el que mejor le funcione. Pueden usarse indi-
nuestra calidad de vida en cuanto a man- vidualmente o en combinación. El calor hace que los músculos doloridos se relajen
tener el tono muscular, a evitar problemas (véase el artículo “Compresas húmedo calientes como intervención para reducir el
posturales y dolores, y a sentirnos mejor dolor musculoesquelético. Análisis de la evidencia”. Revista Sociedad Española del
con nosotros mismos. Por este motivo te- Dolor v.15 n.5 Narón (La Coruña). Junio-julio 2008). El frio puede disminuir el dolor
nemos que acostumbrarnos a la práctica adormeciendo el área a tratar.
deportiva, sabiendo que a cada edad el
cuerpo tiene unas necesidades. • Acupuntura: es una técnica de medicina tradicional china, introduce y manipula
agujas en el cuerpo para el bienestar y restaurar la salud del paciente.
Existen tablas de ejercicios de estiramien-
to y de relajación de la musculatura orien- • Relajación: es un método para disminuir el nivel de ansiedad y estrés del paciente,
tadas a mejorar nuestra salud en cuanto ayuda a controlar o aliviar el dolor que siente el paciente reduciendo la tensión mus-
a los trastornos de dolor musculoesque- cular. Puede ayudarle a dormir mejor, a tener más energía y hacer que otros métodos
lético. para aliviar el dolor funcionen mejor.
- Sueño. Los estudios más recientes es- Se considera que las técnicas de relajación están dentro del ámbito de la enfermería.
tán desmitificando el número de horas. La ANA (American Nurses Association) sostiene que las técnicas de relajación pueden
Hay que tener en cuenta las característi- ser realizadas por la enfermería.
220 221
paciente musculoesquelético
• Creación de imágenes mentales: el paciente usa su imaginación para crear imá- Bibliografía
genes o situaciones en su mente agradables y que le hagan sentirse feliz. Aumenta
la confianza del paciente y su capacidad de controlar el dolor, no sustituyendo otras - Alimentos y nutrición en la práctica sanitaria de VV.AA. Editorial: EDICIONES DÍAZ DE SAN-
medidas de alivio del dolor. TOS, S.A. 2003.
222 223
M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
3 . P atologías de
dolor moderado -
I ntenso
musculoesquelético
224 225
paciente musculoesquelético
3.1 Dorsolumbalgia interés. Cualquier lector interesado en profundizar sobre alguno de los aspectos que se
detallan a continuación está invitado a revisar estos textos originales, que son de gran
Introducción. Se define dolor dorsolumbar como dolor y disconfort que se localiza interés por su concisión o por lo exhaustivo de su revisión (ver bibliografía del capítulo).
en la columna vertebral dorsal y lumbar y hasta el pliegue glúteo inferior, llevando aso-
ciado, o no, dolor en la extremidad inferior. Se define dolor dorsolumbar agudo como
un episodio de dolor dorsolumbar que dura menos de seis semanas. Se define dolor
dorsolumbar subagudo como dolor dorsolumbar cuya duración se extiende entre 6
3.1.1 Epidemiología del dolor lumbar
y 12 semanas. Aunque clásicamente se define dolor dorsolumbar crónico como un La prevalencia del dolor dorsolumbar en la población general ha sido estudiada en pro-
episodio de dolor dorsolumbar que se extiende más de 12 semanas se incluyen los fundidad. Walker realizó un metaanálisis y encontró 30 estudios de calidad adecuada.
sujetos con dolor dorsolumbar subagudo en el grupo de dolor crónico. En lo que La prevalencia puntual de dolor dorsolumbar en la población general era de entre el
respecta a este texto se considera sólo el dolor dorsolumbar en pacientes adultos y 12 y el 33%, con una prevalencia anual del entre el 22% al 65% y una prevalencia a lo
se excluyen niños, adolescentes y mujeres lactantes. Asimismo se excluyen pacientes largo de la vida del 11% al 84%. En ancianos se han realizado también análisis siste-
que presentan dolor dorsolumbar asociado a procesos conocidos como infección, máticos encontrando resultados similares a los de la población general.
tumores, osteoporosis y fracturas vertebrales o procesos inflamatorios y reumáticos
como la espondilitis anquilosante, así como dolor dorsolumbar de origen fuera de la El dolor dorsolumbar característicamente fluctúa a lo largo del tiempo y no son infre-
columna vertebral. cuentes las reapariciones o exacerbaciones del dolor. A largo plazo, parece que un
primer episodio de dolor dorsolumbar causa dolor que persiste a partir del año del
El dolor dorsolumbar es una de las cinco causas más frecuentes de consulta en Aten- episodio inicial entre un 42% y un 75% de los casos, estando un 16% de los casos
ción Primaria. Aproximadamente un cuarto de los adultos han presentado algún epi- en situación de incapacidad laboral a los 6 meses; aquellos pacientes que mejoraban
sodio de dolor dorsolumbar en el último año y el 8% de la población americana ha lo hacían frecuentemente en el primer mes mientras que los que no se recuperaban
presentado un episodio de dolor dorsolumbar agudo grave en el último año. Muchos en el primer mes rara vez lo hacían a los 6 y 12 meses. Un 60-70% de los pacientes
pacientes presentan episodios autolimitados de dolor dorsolumbar y ni siquiera ne- con un episodio aislado de dolor vuelven a padecer otro y el 30% perderán algún día
cesitan asistencia médica. Sin embargo un tercio de los pacientes presentan dolor adicional de trabajo.
dorsolumbar persistente al menos moderado tras un episodio de dolor dorsolumbar
agudo y un quinto tiene limitación significativa de su actividad. El estudio Pain in Europe de 2003 realizó una encuesta telefónica en más de 46.000
adultos europeos y halló dolor crónico moderado o grave en el último año en uno de
El dolor dorsolumbar no es sólo un problema de salud sino también un problema eco- cada cinco sujetos, de éstos el 18% referían dolor dorsolumbar crónico para una pre-
nómico de primer nivel. valencia total para dolor dorsolumbar moderado o grave del 3,4%.
En los EE.UU. se estima que los costes sanitarios directos producidos por el dolor Todos estos datos están referidos habitualmente a dolor dorsolumbar no específico
dorsolumbar en 1998 fueron de 26.000 millones de dólares. Hay infinidad de alternati- que supone el 85% del dolor lumbar. Algunas de las causas conocidas de origen espi-
vas para el diagnóstico y tratamiento del dolor lumbar. Pero hay poco consenso sobre nal de dolor dorsolumbar tiene una prevalencia significativa en la población general: el
cuáles son las medidas adecuadas para la evaluación clínica y el manejo terapéutico 4% de los pacientes con dolor dorsolumbar en Atención Primaria tienen una fractura
de estos pacientes, en particular debido a que son con frecuencia múltiples facultati- vertebral y el 1% un tumor. La prevalencia de escoliosis es del 1 al 4% según esta sea
vos de especialidades distintas los responsables del tratamiento de estos pacientes y definida y la prevalencia poblacional de espondilolisis y espondilolistesis es del 5%,
utilizaban estrategias diagnóstico-terapéuticas muy distintas. aunque muchos pacientes que tienen estos problemas están asintomáticos.
Este texto se basa en múltiples fuentes pero principalmente en una serie de esfuer-
zos realizados por distintos grupos americanos y europeos en realizar revisiones sis-
temáticas de los distintos procedimientos diagnósticos y terapéuticos para el dolor
dorsolumbar y que se han plasmado en revisiones y guías clínicas extensas de gran
226 227
paciente musculoesquelético
3.1.1.1 Diagnóstico: historia clínica y exploración Tabla 1. Banderas rojas en el diagnóstico de pacientes
Una historia clínica detallada y una exploración física general con exploración neuro- con dolor lumbar
lógica detallada son esenciales en la evaluación de los pacientes con dolor lumbar. El • Edad de inicio de síntomas antes de los 20 años o a partir de los 55 años
clínico debe averiguar la localización del dolor, frecuencia de los síntomas y duración
del dolor así como una historia de síntomas previos, tratamientos previos y su grado • Historia reciente de un traumatismo violento
de efectividad. La palpación y la exploración del rango de movimiento de la columna • Dolor constante, progresivo de naturaleza no mecánica (que no mejora con reposo en cama)
parece que tiene una utilidad limitada. • Dolor torácico
• Historia médica previa de un tumor maligno
Como en la mayor parte de los casos (hasta un 85%) no va a ser posible llegar a un
diagnóstico anatómico preciso sobre la etiología del dolor, el clínico debe centrarse en • Uso prolongado de corticoides
clasificar a los pacientes dentro de tres grupos generales: • Abuso de drogas
• Dolor dorsolumbar debido a un trastorno específico de columna vertebral • Inmunosupresión (incluido infección por VIH)
• Dolor dorsolumbar radicular o producido por estenosis de canal • Malestar general
• Pérdida de peso no explicada
• Dolor dorsolumbar no específico.
• Síntomas neurológicos difusos (incluido síndrome de cauda equina)
En primer lugar se debe intentar determinar si el dolor que sufre el paciente es de ori- • Deformidad estructural
gen musculoesquelético y descartar patología no originada en la columna. Se deben • Fiebre
tener en cuenta diagnósticos como pancreatitis, nefrolitiasis, aneurisma de aorta o
enfermedades sistémicas como endocarditis o viriasis. El paso siguiente es determinar Una vez que se ha descartado un problema extraespinal o un trastorno estructural
si el paciente presenta un trastorno espinal grave. Para completar estos dos pasos se grave de la columna se debe evaluar si el paciente presenta dolor radicular o estenosis
han descrito una serie de síntomas y signos que se han identificado como indicadores de canal.
de problemas espinales graves o banderas rojas.
Los síntomas de dolor en la espalda y en la extremidad inferior con una historia típica
Estas “banderas rojas” son factores de riesgo que se identifican en la historia y ex- de ciática (dolor referido con distribución radicular) tienen una sensibilidad alta para el
ploración de pacientes con dolor dorsolumbar y se asocian a un riesgo aumenta- diagnóstico de hernia discal pero una especificidad discutible. Casi todas las hernias
do de presentar un trastorno grave, requiriéndose un estudio más exhaustivo. Se discales (>90%) ocurren en los niveles L4-L5 y L5-S1. Se debe realizar una exploración
deben buscar factores de riesgo de cáncer e infección. No están claros los signos neurológica completa que incluya evaluación motora, sensitiva y de reflejos de la extre-
que orientan a un trastorno infeccioso pero la presencia de infecciones recientes o la midad inferior así como una maniobra de Lassegue. Cuando el Lassegue es positivo
inmunosupresión deben ser tenidos en cuenta, así como también hay que sospechar (reproducción del dolor ciático entre los 30º y 70º de flexión) tiene una sensibilidad del
fracturas vertebrales en pacientes ancianos con osteoporosis o antecedentes de uso 90% y una especificidad del 25% para hernia discal. El Lassegue contralateral es más
de glucocorticoides. Indicadores de problemas de tipo inflamatorio son la mejoría con específico (casi 90%) pero menos sensible (30%).
el ejercicio, la rigidez matutina y el que el paciente se despierte en la segunda mitad
de la noche. La utilidad de la historia y la exploración para el diagnóstico de estenosis de canal es
indudable. Parece que el equilibrio entre sensibilidad y especificidad es difícil y signos
El diagnóstico de sospecha de síndrome de cauda equina se establece en el contexto como la claudicación y el dolor irradiado son solo indicativos. El hecho de que la sinto-
de un paciente que describe disfunción vesical (generalmente retención urinaria, que matología sea variable en el tiempo o que empeoren al ir cuesta abajo es más útil para
tiene una sensibilidad del 90%, o más raramente enuresis por rebosamiento), disfun- el diagnóstico.
ción esfinteriana, anestesia en silla de montar, debilidad global o progresiva de las
extremidades inferiores o alteraciones de la marcha. Este trastorno se considera una Las variables psicosociales que intervienen o el grado de estrés emocional que pre-
emergencia y el paciente debe ser referido de inmediato a un servicio de urgencias. sente el sujeto. Esto es esencial porque se ha demostrado que estos factores predicen
228 229
paciente musculoesquelético
mejor el resultado y evolución del paciente que la historia clínica y la exploración. La va- que siempre existe debe ser tenida en cuenta. Realizar una resonancia magnética (RM)
loración de estos problemas psicosociales permite identificar a aquellos pacientes con o una tomografía computerizada (TC) de forma rutinaria tampoco mejora los resul-
peor pronóstico y que se podrían beneficiar de estrategias terapéuticas más agresivas tados funcionales de los pacientes y tiene el inconveniente que permite diagnosticar
con rehabilitación multidisciplinar. No hay evidencia que sustente estrategias especí- alteraciones radiológicas que tiene poca correlación con los síntomas y pueden llevar
ficas para valorar evacuadamente esta dimensión psicosocial del problema, pero la a procedimientos innecesarios.
presencia de depresión, actitudes pasivas ante el problema, insatisfacción en el puesto
de trabajo, niveles de incapacidad elevados, somatizaciones o problemas de litigios Está indicada la realización de una radiografía simple si se sospecha una fractura verte-
relacionados con compensaciones laborales deben ser tenidos en cuenta. De igual bral, o en una determinación inicial del grado de espondiloartrosis. Cuando se sospe-
manera que en los trastornos orgánicos se han descrito unas “banderas amarillas” cha una espondilolisis (pacientes más jóvenes, antecedente traumático y dolor mecá-
(tabla 2) que deben de alertar al clínico sobre estos aspectos. nico) está indicada la realización de proyecciones oblicuas. Las radiografías dinámicas
en flexo-extensión tienen una utilidad limitada en estos pacientes.
230 231
paciente musculoesquelético
El SPECT parece más sensible para detectar alteraciones sutiles que la GO y puede Causa posible Datos clave en la historia Técnicas de Imagen* Estudios adicionales *
estar recomendado en estos grupos de pacientes aunque no existe evidencia de que clínica y la exploración
esta mayor sensibilidad cambie el curos de acción o mejore el pronóstico.
Síndrome de cauda Retención urinaria RM Ninguno
La discografía es una técnica con poca utilidad a la hora de determinar la causa del equina Déficit motores a varios
problema en pacientes con dolor dorsolumbar dado que tiene una tasa muy alta de niveles
falsos positivos y la validez de la discografía de provocación es escasa. Incontinencia fecal
Anestesia en silla de
Los registros electromiográficos de superficie son inefectivos para distinguir a los pa- montar
cientes que presentan dolor dorsolumbar bajo de pacientes asintomáticos y los regis-
Fractura vertebral por Historia de osteoporosis Radiografía simple Ninguno
tros con agujas están indicados solamente en pacientes que presentan estenosis de
compresión Uso de corticoides lumbosacra
canal grave o radiculopatía en el contexto de una evaluación previa a la cirugía.
Edad avanzada
En el año 2007 la American Pain Society y el Colegio Americano de Médicos estable- Espondilitis anquilosante Rigidez matutina Radiografía simple VSG y/o PCR
cieron unas recomendaciones y estrategias diagnósticas para el manejo inicial de los Mejoría con el ejercicio anteroposterior de pelvis HLA-B27
pacientes con dolor lumbar, que se resumen en la siguiente tabla. Dolor en nalgas
alternante
Despertar por dolor en
la segunda mitad de la
noche
Tabla 3. Evaluación diagnóstica en pacientes con dolor lumbar
y sospecha de trastorno espinal objetivable Edad joven
Déficit neurológico Debilidad motora RM Valorar EMG
Causa posible Datos clave en la historia Técnicas de Imagen* Estudios adicionales * progresivo progresiva
clínica y la exploración Hernia de disco Dolor lumbar con dolor Ninguno Ninguno
Cáncer Historia de cáncer y dolor RM VSG en la extremidad inferior
lumbar de aparición con distribución radicular
reciente L4, L5 o S1
Pérdida de peso Radiografía simple Test de Lassegue o
inexplicable lumbosacra lassegue contralateral
Ninguna mejoría tras positivo
un mes Síntomas presentes RM Valorar EMG
Edad mayor de 50 años durante más de un mes
Presencia de múltiples Radiografía simple o RM Estenosis de canal Dolor a miembro inferior Ninguno Ninguno
factores de riesgo irradiado
Infección vertebral Fiebre RM VSG y/o PCR Edad avanzada
Abuso de drogas (la claudicación es un
intravenoso predictor débil)
Infección reciente Síntomas presentes RM Valorar EMG
sigue durante más de un mes
*El nivel de evidencia de la evaluación diagnóstica es variable
232 233
paciente musculoesquelético
3.1.2 Opciones terapéuticas disponibles dad funcional, aunque los programas con ejercicios realizados después de concluir el
tratamiento pueden prevenir la recurrencia del dolor de espalda.
A continuación se hace una descripción breve de las distintas opciones terapéuticas
disponibles en el tratamiento del dolor lumbar. Como es de esperar en un problema de
tal prevalencia existen incalculables opciones terapéuticas.
3.1.2.3 Tracciones y manipulación de la columna vertebral
234 235
paciente musculoesquelético
este y otros estudios posteriores coinciden en la utilidad de este tipo de terapias para el 3.1.2.9 tratamiento farmacológico
dolor dorsolumbar crónico. Hay evidencia fuerte de que un programa de rehabilitación
multidisciplinario intensivo biopsicosocial reduce el dolor, mejora la función y acorta Se han utilizado múltiples estrategias farmacológicas para el tratamiento del dolor dor-
el tiempo hasta la reincorporación al trabajo en pacientes con dolor lumbar. Existe solumbar crónico.
evidencia moderada de que estos abordajes son mejores que programas de rehabili- Paracetamol. Para el tratamiento de dolor agudo lumbar el paracetamol no ha de-
tación tradicional, menos sofisticados. mostrado ser especialmente efectivo. Su eficacia es inferior frente a AINES.
AINEs. En dolor dorsolumbar agudo y crónico los AINE parecen ser mejores que pa-
Tabla 4. Diferentes técnicas de electroterapia racetamol. Los AINEs selectivos para la Cox-2, se recomiendan para reagudizaciones
ya que los riesgos relacionados con el uso prolongado de AINE (principalmente gas-
Técnica de electroterapia Recomendaciones trointestinales) deben de ser tenidos en cuenta.
TENS No se puede recomendar este tipo de terapias de forma aislada, aunque hay
Benzodiacepinas y relajantes musculares. Son efectivos para el control del dolor
argumentos que apoyan la investigación de su utilidad en asociación con otras
agudo cuando se compara con placebo. En dolor dorsolumbar crónico no parecen
técnicas
existir ventajas respecto a placebo y debido a la prevalencia relativamente alta de efec-
Electroterapia Escasa efectividad cuando se comparó con tracciones asociadas a masaje tos secundarios en el sistema nerviosos central asociados al uso de estos medicamen-
interferencial tos hace que se desaconseje su uso rutinario, limitando su utilización a casos que los
Terapia con láser Difícil de analizar porque se aplica de formas muy distintas. Existen resultados AINE y paracetamol hayan sido inefectivos.
contradictorios, por lo que esta terapia no puede recomendarse en vista de la
evidencia Antidepresivos. Hay buenas razones para utilizar antidepresivos en dolor dorsolum-
Onda corta Existen pocos estudios de calidad suficiente. La escasa información hace que bar crónico, teniendo además un efecto sedante asociado que puede mejorar la ca-
no se pueda recomendar este tipo de tratamiento para el tratamiento del dolor lidad del sueño. No mejoran la función. Se recomienda su uso como mediaciones
dorsolumbar crónico. coadyuvantes.
Ultrasonidos terapéuticos No existe evidencia disponible de calidad para recomendar su uso Antiepilépticos. Existen pocos estudios de calidad que analicen el efecto de los an-
Calor / termoterapia La aplicación de calor local (manta eléctrica o paños húmedos calientes) tiepilépticos en el dolor dorsolumbar crónico. Se recomienda su utilización en aquellos
parece ser más efectivo que placebo o dosis terapéuticas de ibuprofeno o casos donde se asocie un componente neuropático.
paracetamol para el tratamiento del dolor dorsolumbar crónico
Opioides. Existe evidencia moderada de que tanto los opioides menores como opioi-
des potentes eran efectivos para el control del dolor, debido a que se asocian a una
3.1.2.8 Ortesis lumbares alta tasa de efectos adversos.
No existe suficiente evidencia de que el uso de ortesis fuese efectivo comparado con
placebo o otras terapias como manipulación espinal o TENS por lo que no se reco-
mienda su utilización.
236 237
paciente musculoesquelético
238 239
paciente musculoesquelético
Estos dolores interescapulares pueden manifestarse de forma aguda y/o crónica. Los
dolores torácicos comunes son sentidos en la región interescapular y media torácica.
3.2.1 Dorsalgia de origen cervical Por el examen, este dolor en el nivel torácico se manifiesta mediante síntomas y signos
constantes y característicos. El dolor también puede ser descrito como intratorácico.
Introducción Puede aparecer después de un traumatismo, una manipulación mal realizada, o una
mala postura en tensión, etc. El dolor por lo general tiene un inicio insidioso.
El dolor “benigno” o “común” torácico del adulto es una entidad menos reconocida en
nuestra práctica clínica habitual, y en parte es debido a que la literatura relativa a esta Aunque el dolor sea crónico, hay episodios de empeoramiento, a menudo asociado
entidad es escasa. La mayor parte de los estudios que comentan este tipo de dolores con los periodos de fatiga, horas extra, o tensión psíquica. Personas con ciertos tipos
no llegan a conclusiones clínicas y tienden a relegar esta condición al área funcional, de ocupaciones (p.ej., mecanógrafos, operadores de teclado, las costureras) de vez
acentuando la importancia o consideración a factores musculares y psíquicos en su en cuando sufren de este dolor. En general, el dolor disminuye con el descanso. En
aparición o como causas esenciales de esta patología. La dorsalgia común es una algunos casos, el dolor es sentido o aumentado por la mañana, al despertar, siendo
afección frecuentemente encontrada en patología vertebral y puede ser reveladora de debido a la mala colocación postural del cuello durante el sueño, sobre todo en la
diversas patologías. gente que duerme con el cuello en rotación completa. El dolor puede iniciarse como
un dolor agudo debido a un esfuerzo importante o a un movimiento brusco del cuello.
Diagnóstico:
El dolor desaparece con el tratamiento cervical.
El primer objetivo médico es hacer un diagnóstico correcto, sobre todo, eliminar cau-
Exploración clínica:
sas importantes. El dolor puede venir del interior del tórax (corazón, grandes vasos,
pulmones, esófago…); lesiones pancreáticas, sobre todo cánceres, pueden producir 1. Examen de la espalda:
el dolor torácico proyectado, igual que las úlceras del estómago o del duodeno; puede
tener su origen en las propias estructuras dorsales a este nivel de la columna debido En el nivel torácico, dos signos son característicos de dolor torácico de origen cer-
a un mieloma múltiple, metástasis, discitis o fracturas osteoporóticas vertebrales de vical: - Un punto particularmente constante y doloroso, localizado en los niveles
compresión y también puede ser un dolor referido del cuello. paraespinales de T5 o T6, llamado el “punto cervical de la espalda o del dorso”.
- Una zona celulálgica adyacente a este punto y que se extiende lateralmente hacia
el acromion. a) Punto cervical del dorso o espalda (Maigne): Este punto doloroso se
localiza aproximadamente a 1 ó 2 cm de la línea mediana en el nivel de T5 o T6. Este
3.2.1.1 Síndromes clínicos
punto vertebro-interescapular es constante y parece reflejar el dolor de la columna
3.2.1.1.1 La dorsalgia alta o el dolor torácico interescapular de origen cervical bajo cervical inferior. El dolor puede tener cualquier tipo de origen, benigno, maligno, arti-
(Maigne) cular, discogénico, o tumoral. El paciente se coloca sentado con la cabeza doblada,
manos sobre el regazo, en relajación completa. El examinador usa el dedo medio o el
Una forma particular de dolor en la región torácica alta son las algias interescapulares índice para presionar, deslizándose paralelamente a la línea de las apófisis espinosas,
que han sido descritas por R. Maigne en el 1964. Se caracterizan por la asociación a una distancia de un través de dedo. Aplica con firmeza una presión continua y cons-
de signos torácicos y cervicales. El dolor es sentido como un “punto” entre ambos tante con la pulpa del dedo, ejecutando al mismo tiempo una pequeña fricción hacia
omóplatos y la presión sobre este punto, latero-vertebral, situado al nivel de T5 repro- arriba y abajo, repitiendo el movimiento cada centímetro, tal como si quisiera movilizar
duce precisamente el dolor espontáneo del paciente. Es el “punto interescapular”, fijo los tejidos subcutáneos sobre los músculos subyacentes. Si éste es realmente un
y constante de un paciente a otro. punto cervical del dorso, hay una zona de celulalgia adyacente cubriendo el omóplato
del mismo lado y extendiéndose lateralmente. b) Banda de celulalgia medio-torácica:
El punto cervical de la espalda por lo general tiene una zona de celulalgia grande ad-
yacente que es demostrable mediante la prueba del “pinzamiento rodado” o “signo
240 241
paciente musculoesquelético
del pliegue”. La zona se extiende lateralmente del punto cervical de la espalda hacia La electroterapia cervical puede ser útil cuando los dos tratamientos precedentes no
el acromion, en una anchura de 6 a 8 cm. Los tejidos cutáneos y subcutáneos de di- pueden ser usados. En los casos agudos de sinovitis, las medicaciones antiinflamato-
cha zona son espesos y dolorosos al signo del pliegue. Una o dos bandas tensas de rias por vía general pueden ser eficaces para desactivar la disfunción. En los pacientes
músculo a veces ocurren asociadas con la celulalgia, son localizadas en los músculos que tienen más dolor por la mañana, la razón es generalmente postural, malposición
paraespinales. del cuello durante el sueño (durmiendo sobre el abdomen). Un collarín cervical durante
unos días en los casos agudos también puede ser beneficioso. En los casos crónicos,
2. Examen del cuello es a veces necesario tratar las manifestaciones de celulalgia residual y los cordones
miálgicos musculares de forma específica. Si la zona de celulalgia no desaparece com-
Generalmente el paciente no se queja del cuello. Si el paciente siente dolor cervical, el
pletamente con el tratamiento cervical, el masaje que usa la maniobra del pinzamiento
dolor cervical y el dolor torácico pueden no estar relacionados. El examen, a veces,
rodado o la técnica de amasamiento realizada superficialmente es, a veces, bastante
demuestra alguna disminución en los movimientos del cuello. En casos raros, puede
eficaz. Este tratamiento es frecuentemente bastante doloroso y, es mejor intentarlo
afectarse la rotación e hiperextensión extremas. En general, los movimientos del cuello
después de una inyección anestésica sobre el ramo posterior de T2 o directamente so-
son libres e indoloros.
bre los tejidos subcutáneos. Esta inyección es seguida inmediatamente de maniobras
Columna cervical y dolor torácico de amasamiento. Las diversas modalidades físicas analgésicas pueden complementar
La relación entre el dolor torácico posterior alto, el punto doloroso paravertebral en T5, a la terapia por manipulaciones e infiltraciones.
la zona de celulalgia adyacente, y la columna cervical puede ser demostrada mediante
El paciente depresivo o la presencia de factores simplemente neuróticos con frecuen-
la aplicación de tratamientos en el raquis cervical y comprobar la resolución del dolor.
cia exageran el dolor torácico y están a menudo presentes. En estos pacientes la
Cualquier tratamiento sobre el segmento doloroso cervical debe influir o mejorar el seg-
relajación puede ser un adyuvante útil. Es imperativo tratar el estado de psicológico.
mento volviéndole indoloro en el nuevo examen segmentario, así como la eliminación del
dolor torácico. En la posterior exploración física, los signos característicos de dolor se- Prevención
rán valorados sobre su persistencia o desaparición. Dos de las terapias más utilizadas Debemos recordar que el trastorno es cervical y las medidas higiénicas cervicales
en este cuadro, provocado comúnmente por disfunciones segmentarias, como son las deben ser asociadas. La prevención es esencial en el manejo de estos desórdenes.
manipulaciones cervicales o la infiltración facetaria y su correspondiente mejoría son la Se debe enseñar a los pacientes a evitar las posturas de rotación de cuello extremas
prueba satisfactoria más clara para considerar el origen cervical del dolor interescapular. (como dormir en la posición prona, etc.), cerrar la puerta de atrás de un coche estando
sentado adelante; poner o tomar algo del asiento trasero, Es indispensable estudiar
El examen radiológico
las posturas y gestos del trabajo y del entorno, así como mantener una buena mus-
El examen radiológico es generalmente normal; sin embargo, pueden verse anomalías
culatura.
menores benignas o asociadas que no están relacionadas con el dolor. Las radiogra-
fías de la columna cervical y torácica son indispensables para excluir todas las lesiones
serias, así como el estudio radiográfico del tórax
Bibliografía
Tratamiento
- Maigne R. Diagnosis and treatment of pain of vertebral origin. Edited by Walter L. Nieves.
El tratamiento del dolor torácico interescapular de origen cervical es esencialmente Second Edition, 2006
cervical. Si es debido a un TIM, la causa más frecuente, la manipulación cervical es
el tratamiento de elección, cuando el estado de la columna lo permite y cuando es - Maigne R., Le Corre F. - L’algie interscapulovertébrile, forme fréquente de docsalgie bénigne.
técnicamente posible. Es precedida de movilizaciones progresivas y debería ser rea- Son origine cervicale. Annales Med. Phys., 1964, 1, 260-277,
lizada de forma precisa, suave, estrictamente unilateral, según la regla del no dolor y
- Maigne R. La dorsalgie inter-scapulaire :manifestation de la souffrance du rachis cervical infé-
del movimiento contrario. Generalmente, las maniobras más útiles son la rotación con rieur. Le point cervical du dos. Sem Hôp Paris 1977;53:1067-72.
el paciente en decúbito supino y lateroflexión con el paciente en decúbito lateral. La
manipulación puede ser substituida o complementada por una inyección en la unión fa- - Maigne R. Le point douloureux inter-scapulaire paramédian des dorsalgies comunes. Rôle
cetaría cervical descubierta por el examen segmentario de C5-6, C6-7, o C7-T1. Se in- de la branche postérieure de la racine T2. Annales de Médecine Physique 1968.11:247-52
filtra 0.5 ml de un derivado corticosteroide. El tratamiento es repetido dos o tres veces.
242 243
paciente musculoesquelético
3.2.2 Enfermedad de Scheuermann de los hombros. No obstante la exploración física no ha demostrado sensibilidad ni
especificidad en este tipo de deformidad vertebral. La flexibilidad o reductibilidad de la
La enfermedad de Scheurmann es una deformidad vertebral en adolescentes que pue- curva en este caso torácica o toracolumbar, podrá valorarse en el “test de cifosis”en bi-
de cursar con dolor. Siguiendo los criterios de la SRS se define por una cifosis con un pedestación, con inclinación del tronco hacia delante, los brazos extendidos y pidiendo
valor angular superior a los 40º (ángulo de Cobb) y asociar acuñamientos vertebrales al niño que trate de elongar la columna y “borrar” o disminuir la curva. De esta forma
por encima de 5º en tres o más vértebras consecutivas. podemos observar si la curvatura disminuye o no, indicando si es reductible o por el
contrario está ya estructurada, y por tanto sus posibilidades de mejoría con el trata-
Actualmente su etiología permanece desconocida, participan tanto factores genéticos
miento ortopédico disminuyen y su pronóstico es más sombrío. También la exploración
como mecánicos. La prevalencia estimada del Scheuermann varía entre el 1 y el 8%.
en decúbito supino y después en prono nos permite hacernos idea de la reductibilidad
Predomina en el sexo masculino según algunos autores (Lowe TG, 1999) y parece
de la curvatura.
asimismo que los varones de talla alta tienen más riesgo de desarrollar formas severas
de la enfermedad. En el plano frontal deberemos descartar asimetrías o gibosidades en flexión, carac-
terísticas de la escoliosis, que puede asociarse al Scheuermann, generalmente en
formas leves (Denis R, 1999). Podremos valorar también la movilidad de la columna
Clínica lumbar en flexión mediante el test de Shöber, y la elasticidad de la musculatura de
miembros inferiores (psoas, tensor de la fascia lata, cuadriceps e isquiotibiales funda-
Se han descrito dos patrones diferentes de curvatura de la columna en la cifosis de mentalmente). Buscaremos también pliegues en la región abdominal, que se asocian
Scheuermann. El patrón torácico (localizado entre T7 y T10) es el más común y se aso- a las formas toracolumbares.
cia a una hiperlordosis no estructurada a nivel lumbar y cervical. Este patrón es el que
se relaciona con las formas clínicas más dolorosas. El patrón toracolumbar (localizado El estudio radiológico es esencial en el diagnóstico y consiste en una telerradiografía
a nivel de T12-L1) es menos frecuente pero progresa a menudo en el adulto. anteroposterior y una lateral de la columna vertebral. Permiten establecer el diagnós-
tico, medir el valor angular, valorar el equilibrio de la columna en ambos planos, y la
En su forma típica es una cifosis de los adolescentes que, al contrario que en las cifosis madurez esquelética (test de Risser). Si se descartan alteraciones en el plano frontal, el
posturales, es dolorosa, y no reductible por completo ni de forma permanente por el seguimiento incluirá únicamente las placas de proyección lateral.
paciente. La frecuencia de dolor de espalda en pacientes con enfermedad de Scheuer-
mann oscila entre un 10 y un 60% según los autores. Lo más común es presentar dolor Alteraciones radiológicas:
antes de los 20 años, en forma de dorsalgias que calman con el reposo y aumentan - Comúnmente aparecen signos de distrofia raquídea, con irregularidades de los
con el sobreesfuerzo o determinadas posturas. Los motivos por los que se solicita platillos vertebrales que adoptan un aspecto laminado, disminución de altura
consulta médica son: la deformidad estética, y el dolor que suele ser leve o moderado. de los discos y un aspecto pseudofracturario (signo de Knutsson).
- En la forma típica se encuentran hernias intraesponjosas (nódulos de Schmorl)
y retromarginales asociadas a deformidad en cuña de más de 5º de los
Diagnóstico cuerpos vertebrales con una disminución del crecimiento de la parte anterior
de los cuerpos vertebrales.
Aunque el comienzo de la enfermedad ocurre en el inicio de la adolescencia, el diag-
nóstico puede ser tardío en ausencia de síntomas, dado que la curvatura torácica se Aunque existen diferentes criterios diagnósticas para establecer la enfermedad de
atribuye a menudo a un problema postural. Scheuermann, los mas aceptados son los definidos por Bradford DS, (1973):
- un aspecto irregular de las mesetas o platillos vertebrales
En la exploración física, la inspección del paciente en posición de bipedestación nos
permitirá sospechar la deformidad vertebral. En la exploración es importante valorar la - pérdida de altura del disco
distancia dedos-suelo, el equilibrio occipito-sacro, las felchas cervical y lumbar. En la - deformidad en cuña de al menos un cuerpo vertebral de mas de 5º
hipercifosis torácica, es común la posición adelantada de la cabeza y la antepulsión - cifosis superior a 40º.
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paciente musculoesquelético
1.- Cinesiterapia e higiene postural: La fractura vertebral se manifiesta generalmente por un dolor en relación con una caí-
da desde la posición de pie, es la causa mas frecuente, otras veces por un esfuerzo, un
- La SOSORT en el año 2009 ha publicado un consenso en el tratamiento de acceso de tos o con un gesto banal de la vida corriente. Con gran frecuencia suceden
la cifosis basándose en diferentes trabajos de autores: Estiramientos de los de forma silenciosa; en estos casos la relación entre los dolores y la imagen radiológica
músculos con retracciones. Mejorar la movilidad, tonificación musculatura es más difícil de interpretar.
extensora, la reeducación equilibrio pélvico, autocrecimiento, reeducación
postural. Teniendo en cuenta el envejecimiento esperado de la población el número de estas frac-
2. Tratamiento ortopédico: turas se incrementará en los años venideros con sus consecuencias discapacitantes.
- La mayoría de los estudios disponibles son retrospectivos, con diferentes 3.2.3.1 Epidemiología y riesgo evolutivo
criterios de inclusión, no tienen grupos control. Sin embargo, a pesar de estas
La fractura vertebral es la manifestación mas frecuente de la osteoporosis después de
deficiencias, el tratamiento con corsé es considerado como el tratamiento
los 65 años. La prevalencia es difícil de conocer porque muchas de las fracturas son
efectivo en la cifosis de Scheüermann sobre el paciente con inmadurez
asintomáticas y, por lo tanto, no son diagnosticadas; se precisaría practicar radiogra-
esquelética.
fías de columna dorsal y lumbar a la población para estimar la prevalencia de las frac-
- Los OBJETIVOS son: Disminución de las presiones mecánicas en la parte turas vertebrales osteoporóticas. Sólo el 30% se manifiestan clínicamente. Otro motivo
anterior de las vértebras, la prevención de la agravación cuneiforme y de la es establecer la distinción entre normalidad y anormalidad en los cuerpos vertebrales;
hipercifosis (¿reconstrucción vertebral?) y el efecto antiálgico. puede haber confusiones con deformidades del desarrollo (enfermedad de Sheüer-
3.- Cirugía: mann), congénitas y alteraciones degenerativas.
La indicación de la cirugía esta sujeta a una gran variabilidad y sus indicaciones La prevalencia es más elevada en los países escandinavos. Este factor Norte-Sur es
permanecen poco claras, las más actuales son: cifosis de > 75º o cifosis de > menos marcado para las fracturas de la extremidad superior del fémur (ESF). A pesar
65º con dolor que no cede con tratamiento conservador. de las diferencias en cuanto a la prevalencia e incidencia en las publicaciones, lo que
es innegable es que se trata de un problema epidemiológico de gran magnitud y en
crecimiento (700 a 800 por cada 100.000 habitantes y año). Esta relevancia le convier-
te en un problema de salud pública muy importante.
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Sin embargo, ninguno de estos signos es totalmente específico. La realización de otras Otras veces los aplastamientos vertebrales se manifiestan en su fase aguda por dolor
pruebas de imagen complementarias (TAC, RM) es necesaria para confirmar la au- intenso a nivel de la espalda, de localización dorsal o lumbar, en relación con la vér-
sencia de signos que sugieran otro origen, en particular tumoral. El origen maligno del tebra afectada después de una caída desde la posición de pie o al hacer un esfuerzo
aplastamiento puede ser afirmado en caso de afectación lítica extensa en el arco pos- (manejar una carga). Se trata de un dolor de ritmo mecánico, netamente aliviado por el
terior, o la extensión de un proceso tisular por allá de los límites del hueso, en particular decúbito y agravándose por la menor movilización. La impotencia funcional puede ser
hacia el espacio epidural. severa. El dolor cede habitualmente después de una o dos semanas de tratamiento
analgésico y reposo que puede ir desde la posición de reposo absoluto en decúbito a
Exploraciones complementarias: un reposo de la región afectada mediante una ortesis. Estas fracturas pueden acom-
pañarse de trastornos del tránsito intestinal. El estado general del paciente es conser-
a) Densitometría ósea:
vado y el examen neurológico es normal.
La medida de la densidad ósea puede ayudar al despistaje de las fracturas y a distin-
guir el dolor causado por la fractura osteoporótica del dolor atribuible a otras causas Los dolores crónicos pueden estar ligados a microfracturas de los cuerpos vertebrales
(discopatía degenerativa o lesiones de las articulaciones facetarias). o resultar de la modificación de los tejidos blandos que rodean a la fractura y de los
trastornos de la estática, la hipercifosis torácica e hiperlordosis lumbar. Como hemos
El conocimiento de una fractura de origen osteoporótico (su descubrimiento en radio-
referido, los dolores de la espalda son de características nociceptivas o mecánicas,
grafías), o el descubrimiento mediante el interrogatorio o la presencia de varios fac-
es decir, se agravan con los esfuerzos, la actividad, los movimientos extremos, las
tores de riesgo de osteoporosis y la realización de una osteodensitometría permite
posturas de bipedestación o sedestación prolongadas y son aliviados con el reposo.
confirmar la existencia de una densidad mineral baja. Por lo tanto, la presencia de un
aplastamiento vertebral implica practicar una densitometría ósea que permite medir la El dolor osteoporótico como toda afectación musculoesquelética o neuromuscular in-
densidad ósea a nivel lumbar. El diagnóstico de osteoporosis marca cifras inferiores de fluye desfavorablemente sobre el desequilibrio y la movilidad. Así mismo la reducción
-2,5 T Store. de la actividad, conlleva a su alrededor, un debilitamiento de los músculos y aumenta
el riesgo de las caídas.
b) Exploraciones biológicas:
Deben ser realizadas sistemáticamente: velocidad de sedimentación y electroforesis
de proteínas séricas, calcemia, fosforemia, creatinemia con aclaración y 25OHD3. En
la orina de 24 horas calciuria y creatinuría. b) Repercusión sobre la estática vertebral:
Las fracturas osteoporóticas también, frecuentemente, pueden expresarse asociadas
c) Gammagrafía ósea: a una pérdida de talla y aspecto redondeado del dorso. Los aplastamientos vertebrales
La gammagrafía ósea también puede detectar las fracturas en los pacientes que sufren modifican las curvas de la columna originando deformidades en la misma, siendo las
de dolor de espalda. En casos de duda, la gammagrafía ósea puede aportar argumen- más frecuentes la hipercifosis torácica e hiperlordosis lumbar y, menor grado, esco-
tos a favor del carácter reciente del aplastamiento, pero en la práctica no será conside- liosis. Otras veces, los aplastamientos anteriores de las vértebras lumbares producen
rada mas que después del fracaso del tratamiento sintomático o en caso de sospecha un borramiento o reducción de la lordosis lumbar provocando un adelantamiento o
de una localización ósea maligna (metástasis o mieloma). inclinación del tronco del paciente hacia delante y disminuyen el equilibrio, necesitando
la ayuda de un bastón.
Consecuencia clínica de las fracturas vertebrales:
En las cifosis de las personas mayores intervienen además de los aplastamientos ver-
a) Sobre el dolor:
tebrales por la osteoporosis, discopatias degenerativas múltiples (envejecimiento de
En la mayoría de los casos la fractura vertebral osteoporótica es asintomática o si-
los discos) y una disminución de la fuerza de los músculos extensores.
lentes, es decir, muchos aplastamientos se producen sin grandes dolores y pasan
desapercibidos. Otros se manifiestan por dolores que son confundidos con dolores
comunes de espalda a los que no se les practica estudios radiológicos.
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paciente musculoesquelético
c) Pérdida de talla: La pérdida de talla, más o menos importante, es la traducción Es importante en el manejo y tratamiento de un paciente con una fractura vertebral
de los aplastamientos osteoporóticos múltiples, que como se ha referido, a veces no osteoporótica tener en cuenta la edad, la situación funcional previa del enfermo y el
son dolorosos. Los pacientes se asombran cuando la talla medida en la consulta no tipo de fractura.
coincide con la que ellos dicen, puede alcanzar 5 a 10 cm. de diferencia.
Las medidas a adoptar guardan relación con la fase aguda o crónica del proceso y con b) Analgésicos
el grado de discapacidad. Sobre los medios a utilizar contamos con medios farmacoló- El tratamiento farmacológico analgésico es particularmente útil para aliviar el dolor en la
gicos, ortopédico-rehabilitadores o físicos (corsés, fisioterapia), quirúrgicos, educación fase aguda de la fractura vertebral y durante la convalecencia después de la fractura.
sanitaria y cuidados generales de enfermería. El paracetamol y los antiinfamatorios no esteroideos son eficaces en ambas fases del
dolor agudo y crónico. Dependiendo de la intensidad del dolor podemos utilizar los
Los tratamientos no medicamentosos de la osteoporosis y las fracturas osteoporóticas opiodes débiles (codeína, tramadol) y fuertes (oxicodona-naloxona, parches de fenta-
son una parte esencial del manejo y tratamiento de esta enfermedad. Tienen como nilo transdérmico, buprenorfina, morfina, etc.).
objetivos: la disminución del dolor y de la duración de la inmovilización, la reducción
del periodo de incapacidad después de la fractura, prevenir o mejorar la deformidad
vertebral, el enlentecimiento de la pérdida ósea y la prevención de las caídas (disminuir 1.2.- Tratamiento de la fractura:
el riesgo de caída).
Las medidas a adoptar están en relación con el tipo de fractura y el dolor.
El tratamiento y manejo de estos pacientes va a contemplar varios aspectos: dolor,
fractura, la deformidad, el tratamiento de la osteoporosis y la educación y prevención a) Reposo en cama: Si se considera necesario el reposo en cama para el tratamiento
de los factores de riesgo. de la fractura es conveniente la colocación de una almohada debajo de la vértebra
252 253
paciente musculoesquelético
fracturada quedando la espalda en hiperextensión para evitar la cifosis en el foco de La neuroestimulación eléctrica transcutánea (TENS) inhibe la transmisión de señales
fractura permitiendo expandir la vértebra. nociceptivas a nivel medular y alivia el dolor crónico en la osteoporosis reduciendo el
consumo de analgésicos.
b) Corsés: Los corsés son el medio más común para tratar inicialmente una fractura
vertebral dolorosa. La acción de los corsés desde el punto de vista biomecánico es Las guías clínicas sobre el dolor en la osteoporosis no indican nada especial sobre los
múltiple: inmovilizar el foco de fractura, eliminan o reducen el tiempo de inmovilización procedimientos físicos a utilizar (calor superficial, crioterapia, TENS, interferenciales,
permitiendo la deambulación e iniciar la actividad física de forma rápida; disminuyen el microonda, onda corta, láser, ultrasonido, magnetoterapia, terapia manual). No hay
dolor y actúan contra el colapso vertebral y las consecuencias sobre la estática (cifosis, ningún ensayo con grupo control en osteoporosis.
escoliosis, alteraciones de la lordosis lumbar). La selección o elección del tipo de corsé
(lumbar, toracolumbar, rígido o semirrígido) está condicionado a varios factores como La utilización pertinente de los procedimientos físicos se apoya sólo en opinión de
son las fracturas (número, localización e importancia de la fractura), edad y morfología expertos. Los más utilizados son la electroterapia, la terapia manual, el ultrasonido y el
del paciente, patología acompañante, estado de la piel, etc. En las fracturas de la char- láser. Parece ser que la termoterapia superficial y el TENS son las dos alternativas más
nela toracolumbar generalmente se prescriben corsés con apoyo en tres puntos (es- recomendables; no precisan desplazamiento a un centro sanitario y carecen práctica-
ternal, pubis y espalda). Los aplastamientos lumbares medios y bajos pueden tratarse mente de efectos secundarios.
con corsés mas cortos, lumbares. Una vez que los problemas inmediatos ligados al Las manipulaciones están desaconsejadas pues pueden ser responsables de nuevas
aplastamiento se han reducido, se puede indicar un programa de ejercicios “mas a me- fracturas o aplastamientos vertebrales.
dida” para reforzar el esqueleto, mejorar la funcionalidad y reducir el riesgo de caídas.
El ejercicio: La utilización del ejercicio es esencial de forma continuada en todo el
c) Vertebroplastia y cifoplastia: Si a pesar de todo persiste el dolor, en los últimos proceso de la osteoporosis, prevención, educación, durante la fractura y en el periodo
años se están utilizando las técnicas de la vertebroplastia y cifoplastia que consiste en de recuperación después de la fractura, así como en la investigación relacionada con la
la introducción en la vértebra fracturada de varios centímetros de polimetilmetacrilato osteoporosis. Los principales objetivos del ejercicio son: restablecer la función física y
por vía transpedicular. En la cifoplastia se introduce un balón hinchable transpedicular ayudar al paciente a moverse con confianza, aliviar el dolor, promover una postura co-
hasta la fractura y expandirla para posteriormente meter polimetilmetacrilato. El objeti- rrecta, enseñar ejercicios para mejorar el equilibrio, la postura y la función respiratoria.
vo de ambas técnicas es recomponer la altura perdida del cuerpo vertebral.
- El ejercicio participa también en el manejo de la hipercifosis fortaleciendo los
músculos extensores de la columna y en los periodos postquirúrgicos de las
complicaciones de la osteoporosis.
3.2.3.3.2 Fase subaguda y crónica: El objetivo es la recuperación funcional y la pre-
vención de las complicaciones o del riesgo evolutivo El ejercicio físico es fundamental en la prevención de nuevas fracturas vertebrales y de
la evolución de las secuelas, entre las que destacamos la tendencia a la inmovilidad y
La rehabilitación juega un papel importante en el tratamiento de los pacientes que los trastornos de la estática como la hipercifosis. Para prevenir la hipercifosis torácica
acaban de sufrir una fractura dolorosa por aplastamientos vertebrales. Actúa sobre la (joroba de la viuda) se les evalúa y enseña las posturas adecuadas, la prescripción de
función y la autonomía. En el dolor postagudo y crónico o a largo plazo, el médico y ejercicios de reforzamiento de los músculos extensores vertebrales, así como los esti-
los pacientes deben considerar modalidades no farmacológicas para aliviar el dolor y ramientos de los músculos pectorales. Son conocidos los trabajos de Sinaki sobre la
mejorar la calidad de vida disminuyendo la necesidad de medicación analgésica. importancia y eficacia del fortalecimiento de la musculatura extensora en la prevención
y reducción del número de fracturas vertebrales osteoporótica.
2.1.- Medidas no farmacológicas:
Después de haber evaluado los objetivos del paciente y del tratamiento, el médico
Las medidas de fisioterapia que se utilizan para aliviar el dolor común de espalda
prescribe un programa de ejercicios personalizado basado (si es posible) sobre las
osteoarticular son igualmente válidas para aplicar en el dolor de las fracturas osteopo-
preferencias del paciente, los factores limitantes y la accesibilidad a instalaciones de-
róticas.
portivas y de equipamientos para hacer ejercicio. El programa puede incluir ejercicios
que movilicen las grandes articulaciones (deportes de raqueta, cursos de acondicio-
254 255
paciente musculoesquelético
namiento, marcha rápida), otros con peso para reforzar músculos y ejercicios postu- - Dubourg G, Orcel P. Traitement d’une fracture vertébrale ostéoporotique récente. In: de Sèze
rales. Se les enseña a limitar los movimientos de flexión y rotación vertebral durante el S, Ryckwaert A, Kahn MF, Kuntz D, Meyer O, Bardin T, Orcel P, Guérin C, editors. L’actualité
esfuerzo y trabajo diario, ya que son actividades que aumentan el riesgo de fractura. rhumatologique 1998. Paris: Expansion Scientifique Publications; 1998. p. 406–21.
2.2. Tratamiento ortopédico - Englund U, Littbrand H, Sondell A, Pettersson U, Bucht G. A 1-year combined weight-bea-
ring training is beneficial for bone mineral density and neuromuscular function in older wo-
Las ortesis vertebrales son soportes físicos que en su función de descarga ayudan man. Osteoporos Int 2005;16: 1117–23.
también a reducir el dolor. - Fink H.A., Ensrud K.E., Nelson D.B., Kerani R.P., Schreiner P.J., Zhao Y., Cummings M.C.
Disability after clinical fracture in postmenopausal women with low density: the fracture inter-
Un concepto a eliminar sobre los corsés es que no se ha demostrado que produzcan
vention trial (FIT). Osteoporos Int. 2003 janv.: 14’1) : 69-76
atrofia en los músculos. Pasada la consolidación de la fractura se tiende a indicar cor-
sés semirrígidos. En el 2004 Pfeizer y cols. presentaron un estudio randomizado sobre - Frank JW, Kerr MS, Brooker A, DeMaio S, Maetzel A, Shannon HS, et al. Disability resulting
los efectos de una ortesis vertebral demostrando un incremento de la fuerza muscular from occupational low back pain. Part I: What do we know about primary prevention? A
y una mejora en la postura en los pacientes con fracturas vertebrales por osteoporo- review of the scientific evidence on prevention before disability begins. Spine 1996;21:2908-
sis. Así mismo, el grupo de pacientes estudiados presentaba mejoría de la calidad de 17.
vida, reducción del dolor, disminución de las limitaciones en las actividades cotidianas - Grunze M, Ziegler R, Leidig-Bruckner G 1998 Reduced pulmonary function in patients with
y aumento del bienestar, concluyendo que el uso de una ortesis representaba un eficaz spinal osteoporotic fractures. Osteoporos Int 8:261–267.
tratamiento no farmacológico de las fracturas vertebrales por osteoporosis.
- Health Professional’s Guide to Rehabilitation of the patient with Osteoporosis. National Os-
teoporosis Foundation. Osteopor Int 2003 14 (Suppl 2): S1-S22
256 257
paciente musculoesquelético
- Marshall D, Johnell O, Wedel H. Meta-analysis of how well measures of bone mineral density 3.3 Dolor cervical
predict occurrence of osteoporotic fractures.BMJ 1996; 312:1254–9.
El dolor cervical es una de las causas más frecuentes de consulta para el especialista
- Mayoux-Benhamou MA, Roux C, Perraud A, Fermanian J, Rahali- Kachlouf H, Revel M. Pre-
dictors of compliance with a home-based exercise program added to usual medical care in
en traumatología y en atención primaria.
preventing postmenopausal osteoporosis: an 18-month prospective study. Osteoporos Int
El 60% de la población sufre de cervicalgia en algún momento de su vida. La incidencia
- Mayoux-Benhamou MA, Revel M. Ostéoporose et rééducation. Encycl.Med. Chir. (Éditions de dolor a este nivel puede tener una prevalencia de 83 por cada 100.000 habitantes.
Scientifiques et Médicales Elsevier SAS, Paris,tous droits réservés), Kinésithérapie–Médecine No hay patrón de edad pero se estima que el intervalo donde se registra más inciden-
physique–Réadaptation, 26-586-A-10, 1999, 10 p. cia de dolor cervical es entre 13 y 90 años, siendo más frecuente en el sexo masculino
que en el femenino. En el 15% de los casos, en la mayoría de estudios y guías consul-
- McGill S. Update on the use of back belts in industry: more data, same conclusions. Dans:
tados, hay un antecedente traumático como etiología. El resto se debe a mala higiene
Karwowski W, Marras W, sous la direction de. Occupational ergonomics handbook. Boca
Raton (FL): CRC Press; 1999. p. 1353-8.
postural, sobrecargas en el lugar de trabajo o enfermedades degenerativas como la
artrosis o la espondilitis. Sin embargo, un tercio de los pacientes con dolor cervical
- Pfeifer M, Begerow B, Minne HW 2004 Effects of a new spina orthosis on posture, trunk tienen correlación en las pruebas de imagen como la presencia de una profusión discal
strength, and quality of life in women with postmenopausal osteoporosis: A randomized trial. o hernia. Aún así, el dolor cervical es menos frecuente que el dolor lumbar.
Am J Phys Med Rehabil 83:177–186.
El patrón de presentación puede variar pero lo normal es que los pacientes padezcan
- Physioterapy Guidelines for the management of Osteoporosis. Chartered Society of Physio- dolor durante al menos tres meses antes de consultar con el especialista y lo normal
terapy (UK): 2002
es que haya períodos de reagudización o mejoría a lo largo del año.
- Sinaki M 1990 A new back support in rehabilitation of osteoporosis program exercise: Pos-
ture training support. In: Christiansen C, Overgaard K (eds.) Osteoporosis 1990. Osteopress
Es una de las causas más frecuentes de incapacidad laboral transitoria.
ApS, Aalborg, Denmark, pp. 1355–1357.
El otro ámbito donde el dolor cervical adquiere mucha relevancia es el aspecto médi-
- Sinaki M, Khosla S, Limburg PJ, Rogers JW, Murtaugh PA. Muscle strength in osteoporotic co-legal, en lo relacionado con las secuelas producidas por un accidente de tráfico, el
versus normal women. Osteoporos Int 1993;3:8–12 típico latigazo cervical.
- Sinaki M, Itoi E, Wahner HW, Wollan P, Gelzcer R, Mullan BP, et al. Stronger back muscles re- Como en cualquier patología, la anamnesis y la exploración son las claves para llegar a
duce the incidence of vertebral fractures: a prospective 10 year follow-up of postmenopausal un diagnóstico de presunción. El conocimiento de la anatomía cervical, la exploración
women. Bone 2002; 30:836–41. neurológica exhaustiva y la interpretación de las pruebas de imagen, nos llevarán hacia
- Svan MM, Khan JM. Physiotherapy and osteoporosis: practice behaviors and clinicians’ per-
un diagnóstico acertado. Últimamente se está poniendo de moda el incluir las llama-
ceptions- a survey. Man Ther 2005; 10:21-7. das “maniobras exploratorias de simulación”, es decir, las destinadas a comprobar si
el paciente está falseando su sintomatología con algún propósito espurio como una
- Van Poppel MN et al. Mechanism of action of lumbar supports. A systematic review. (33 compensación económica o una baja laboral no justificable de otra forma.
estudios con grupo control) Spine 2000; 25: 2103-13
258 259
paciente musculoesquelético
Otras menos frecuentes son las proyecciones oblicuas, si hay dudas en la lateral, o la debido a mala higiene postural, cargar peso con un solo brazo como ocurre
proyección especial trasoral, para descartar una lesión en la apófisis de C2. Es muy en los reponedores o amas de casa. Es un dolor intermitente y se suele deber
importante que en la proyección lateral se visualicen las 7 vértebras cervicales. La sis- a un proceso artrósico o degenerativo. Es importante conocer que cuando
temática de visión de la Rx debe ser de anterior a posterior y de proximal a distal. Hay el cuello duele debido a la artrosis cervical, ésta debe estar muy avanzada.
que prestar atención a la alineación de la columna cervical, si hay rectificación de la La causa del dolor suele ser la contractura muscular de los trapecios o de la
curvatura fisiológica cervical que es la lordosis, acuñamientos o sospecha de fracturas. musculatura paravertebral cervical. Suele durar menos de 6 semanas.
En casos especiales se pedirán Rx funcionales que consisten en la proyección lateral • El dolor de tipo inflamatorio es menos frecuente y su etiología es multifactorial
pero en máxima flexión y máxima extensión, al objeto de descartar inestabilidades. y compleja de diagnosticar. Suele ser continuo y no ceder ante el reposo, por
lo que el sueño está alterado. La etiología en la que debemos pensar suele ser
TAC. Supuso una revolución es las pruebas de imagen, no sólo a nivel músculo-es-
reumática, tumoral o infecciosa. Suele durar por encima de los 3 meses.
quelético. Como ventajas podemos señalar la mejor visualización de los cuerpos ver-
tebrales y del arco posterior; mejor valoración del tamaño del canal raquídeos, recons- Atendiendo al criterio de localización del dolor, debemos distinguir entre:
trucción tridimensional de fracturas o lesiones. Sin embargo, tiene sus desventajas
• El dolor localizado es aquél que se provoca con la espinopresión cervical y
como la imposibilidad de visualizar la continuidad de la columna cervical en el plano
está situado en la vecindad de la región cervical.
axial, no poder observar una alteración del eje de la columna como ocurre en las es-
coliosis, visualización poco clara del canal raquídeo, sobre todo en las porciones más • El dolor cervical referido desde otra localización como ocurre en algunos
bajas, ya que el menor diámetro a ese nivel lo dificulta. procesos cardiológicos, relacionados con el esófago o pulmonar. También
cuando se produce por alteraciones de la articulación acromioclavicular,
RMN. En la secuencia T1, la intensidad de la señal se relaciona directamente con el esternoclavicular, o la témporo-mandibular.
grado de magnetización de los tejidos; un T1 corto, demuestra una alta intensidad de • El dolor radicular. Éste es debido a una compresión neurológica o de una
señal como ocurre en el caso de la grasa; un T1 largo como el músculo o las coleccio- raíz nerviosa, provocando una cervicobraquialgia. La localización de la raíz
nes líquidas o purulentas, tendrán una señal baja. comprimida es la que va a correlacionarse con el lugar donde se percibe el
dolor (Tabla 6)
En la secuencia T2, se oscurecen todos los tejidos, excepto los que tienen una mayor
cantidad de agua libre, que tendrán un T2 largo, o lo que es lo mismo, una alta inten-
sidad de señal. Esto ocurre especialmente en los procesos tumorales que literalmente
“brillan”, por lo que son fácilmente diagnosticables. Tabla 6
Es la exploración de referencia hoy día para confirmar o descartar lesiones a nivel cer- Raíz afectada Clínica
vical, como puede ser una hernia discal.
Raíz C5 (alteración en el El paciente refiere dolor en la región anterior del hombro y del brazo. Ojo en el
espacio C4-C5) diagnóstico diferencial con el síndrome subacromial o patologías del manguito
de rotadores. Se puede alterar el reflejo bicipital.
3.3.2 ETIOLOGÍA Y DIAGNÓSTICO DE LA CERVICALGIA Raíz C6 (alteración en el El dolor aparece en la cara externa del hombro, brazo y antebrazo, y puede
espacio C5-C6) llegar hasta el pulgar. Se puede presentar alteraciones en el reflejo bicipital y
La cervicalgia debe considerarse como un síntoma y no como un diagnóstico en sí. Ya
estilorradial.
se ha comentado que puede aparecer a cualquier edad.
Raíz C7 (alteración en el Dolor en la cara posterior y externa del brazo y antebrazo. El ROT que puede
Respecto al tipo de dolor, se puede clasificar el dolor cervical como mecánico o como espacio C6-C7) afectarse es el tricipital.
inflamatorio. Raíz C8 (alteración en el El dolor se puede irradiar a la cara interna del brazo y antebrazo pudiendo
• El dolor mecánico es aquel que empeora con el movimiento y mejora con el espacio C7-T1) llegar al 4º y 5º dedo. El ROT cúbito-pronador puede estar abolido.
reposo, por lo que el paciente no suele tener problemas para dormir. Suele ser
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paciente musculoesquelético
Existen multitud de trastornos que pueden causar cervicalgia (Tabla 7). Tabla 8. Etiología del dolor cervical
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paciente musculoesquelético
Hernia discal. - Foraminales: Es la localización más común y con frecuencia cursa con
síntomas radiculares.
Se pueden obtener clasificaciones de las hernias discales cervicales atendiendo a di-
ferentes aspectos: d) Según su relación con el ligamento longitudinal posterior:
- Contenidas: Se aprecia una hernia discal del nucleo pulposo de más de 4 mm
a) Según su mecanismo de producción:
pero contenidas por este ligamento o la parte más externa del annulus.
- Hernia discal aguda traumática: se produce una migración del material discal
- Extruidas: El material discal se encuentra más allá de los límites del ligamento
hacia el canal a través de una rotura del anillo fibroso de forma traumática.
longitudinal posterior.
La instauración es brusca y rápida, con dolor muy intenso, y acompañado
con frecuencia de síntomas neurológicos. El estudio con RMN muestra la - Intradurales: Pueden llegar a producir síntomas piramidales con alteraciones
existencia de abundante material discal que puede llegar a estar extruido y sensoriales unilaterales y síntomas piramidales aislados.
libre. Afecta a población joven.
- Hernia discal subaguda o crónica. Es un cuadro clínico de instauración Esguince cervical.
subaguda a insidiosa con antecedentes personales de cervicalgia previa. Esta
forma es característica en las hernias de disco producidas en la evolución El término latigazo cervical se refiere a la transferencia al cuello de energía por un me-
de una discopatía degenerativa asociada a fenómenos uncovertebrales y canismo de aceleración-desaceleración que resulta de un choque por alcance poste-
osteofitos posteriores. Se produce una profusión a través del anillo de material rior o lateral, normalmente por colisión entre dos vehículos, aunque puede darse por
discal que comprime la raíz y descompensa el equilibrio clínico existente. La otras razones.
salida de material discal intracanal es sólo una parte del problema, pero es El mecanismo de aceleración-desaceleración incluye una fase de desplazamiento en
un factor precipitante, ya que existía un compromiso previo del espacio por S itálica con flexión de la columna cervical alta y extensión de la columna cervical baja
la evolución del proceso degenerativo. Este tipo de hernia se observa en seguida de una fase de hiperextensión con desplazamiento en C de toda la columna
adultos, entre 35 y 50 años y es la más frecuente. Es más frecuente en el sexo cervical y, posteriormente, una fase de hiperflexión por contragolpe. Esta curva bifásica
masculino. supone una alteración en la curva simple lordótica cervical. La columna cervical baja es
b) Según su naturaleza: más proclive a lesionarse durante ambos recorridos y la columna cervical alta es más
fácil que se lesione durante la fase de extensión.
- Hernia discal blanda: son aquellas cuyo contenido son fundamentalmente
elementos del núcleo pulposo que han salido a través de puntos del anillo Estas lesiones se conocen como síndrome del latigazo cervical, esguince cervical,
fibroso. En el 85% de los casos, la hernia discal se encuentra en el espacio distensión cervical o lesión de partes blandas de la columna cervical.
C5-C6 (el más frecuente) o C6-C7. Es más frecuente en varones.
- Hernia dura: Se llaman así porque la compresión radicular se produce Las lesiones por aceleración-desaceleración describen tanto un mecanismo lesional
fundamentalmente por tejido fibrótico y hueso. Se comportan clínicamente como un conjunto de cuadros clínicos derivados de aplicar una fuerza indirecta so-
como hernias foraminales. Se producen por la suma de fenómenos que bre la cabeza y la columna cervical. Los mecanismos lesionales y la evolución clínica
originan una disminución del agujero de conjunción, con la consiguiente siguen presentando aspectos controvertidos, pese a los múltiples estudios biomecá-
compresión de la raíz nerviosa a ese nivel. nicos y médicos.
c) Según su localización: Aunque la mayora de los pacientes se recupera rápida y completamente, una impor-
tante proporción desarrolla síntomas crónicos e intratables. A los seis meses de sufrir
- Posteromedial: pueden ser asintomáticas o ser causantes principales de
una lesión por latigazo cervical, entre el 20-60% de los pacientes tiene molestias y
síntomas mielopáticos y constituyen el 5%.
entre el 13-50% siguen de baja o no pueden realizar sus actividades habituales. A
- Posterolateral: suelen dar síntomas motores en forma de pérdida de fuerza y largo plazo se calcula que entre el 15-40% desarrolla dolor persistente y un 10% dolor
atrofia. constante intenso 1 año después del accidente.
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paciente musculoesquelético
Hay dos formas clínicas principales de manifestación del latigazo cervical: 3.3.3 TRATAMIENTO
• El Síndrome cervicoencefálico o Síndrome de Barre-Lieou: se ha relacionado
El dolor cervical, con o sin la presencia de síntomas neurológicos, es muy frecuente y
con lesiones en las facetas articulares de C2 y C3, a irritación intrarraquídea
puede llegar a frustrar tanto al médico como al enfermo. Es muy importante plantear
de las raíces nerviosas y también con cambios en las estructuras vasculares
un correcto diagnóstico en cuanto a la causa que provoca el dolor y descartar una
de la columna cervical. La sintomatología incluye visión borrosa, vértigos,
lesión neurológica a ese nivel, que supondría la necesidad de recurrir al tratamiento
desequilibrios, acúfenos, afonía intermitente, fatiga, cambios de temperatura
quirúrgico. De hecho, la única indicación de cirugía secundaria a una mielopatía, por
y disestesias en las manos, cefalea irradiada a la zona temporal y orbitaria. Se
ejemplo, por hernia discal, es la presencia de déficit neurológico, sobre todo motor,
correspondería con el concepto legal de síndrome postraumático cervical. Los
que se mantiene o agrava a pesar del tratamiento médico. Otra indicación quirúrgica
signos objetivos de alteración neurológica están ausentes y se ha postulado
es la presencia de hernias discales centrales con sintomatología piramidal, parapare-
que existe una hipertonía del sistema nervioso periférico, reforzado por la
sias. El 90% de las radiculopatías por hernia discal responden satisfactoriamente al
respuesta a los bloqueos simpáticos.
tratamiento médico conservador; es preciso mantenerlo entre 8 y 12 semanas antes
• El síndrome cervical inferior producido por afectación de los segmentos considerar la opción quirúrgica
cervicales bajos (C4-C7). Causa cervicalgia con dolor irradiado a la columna
dorsal alta, hombro o a los miembros superiores que incluye el dolor cervical
con irradiación a miembros superiores y alteraciones de la percepción visual.
Informar al paciente: La primera medida debe ser informar al paciente acerca de la
Según la etiología existen una serie de signos y síntomas de alerta que deben de ser causa que provoca el dolor y sus posibles soluciones. En el caso de la hernia discal
valorados con meticulosidad por el clínico (Tabla 9). cervical, en la gran mayoría de los casos se alcanza una mejoría completa.
Datos clínicos que Inicio insidioso de la clínica En el caso del esguince cervical, el valor de las ortesis cerviales y su utilidad no está de-
sugieren mielopatía Síntomas neurológicos: debilidad en las manos, parestesias en MMSS mostrado. Su uso se mantiene por la prevención de posibles lesiones ocultas. Aquellos
Signos neurológicos: atrofia, hiperreflexia, signo de Lhermitte +, alteración de la pacientes que permanecen activos pese al dolor, tiene mejor pronóstico que aquellos
propiocepción de manos y pies y del estímulo vibratorio que presentan una mayor intensidad de dolor que les obliga a permanecer de baja.
Datos clínicos que Fiebre En el resto de etiologías de cervicalgia, el collarín representa un recordatorio para el
sugieren inflamación, Pérdida de peso paciente de la situación en la que se encuentra y, evitar así excesos que pueden hacer
patología tumoral o Antecedentes personales de patología tumoral o infecciosa. retroceder la recuperación. El collarín debe ser blando y mantiene el cuello en una po-
infecciosa Linfadenopatias sición antiálgica. Hay controversia acerca del tiempo que debe mantenerse el collarín.
Traumatismo Antecedente de ATF o caída. La mayoría coincide en que hay que mantenerlo mientras haya una sintomatología do-
Antecedente personal de osteoporosis lorosa evidente y su retirada debe ser progresiva. Sin embargo, estudios y metanálisis
Factores de riesgo de osteoporosis (posmenopausia, tabaquismo consumo de como el de Binder en 2004, concluyen que NO hay evidencias de la ventaja del uso
esteroides) del collarín en la cervicalgia no específica como la debida a un proceso degenerativo.
Etiología vascular Sensación de mareo
Caídas frecuentes
Hipotension ortostática Tratamiento fisioterápico y ejercicios
Los ejercicios han de mantenerse en el tiempo. Las mejores pautas han de combinar
fortalecimiento y resistencia, además los ejercicios intensos parecen ser mas efectivos
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que los ligeros aunque no han probado ser superiores a hacer las actividades norma- Paracetamol. Es el fármaco inicial para el tratamiento de la artrosis; es el primer pel-
les. Los programas multidisciplinares pueden reducir el dolor, mejorar la movilidad y la daño terapéutico, debido a su eficacia, su escasa asociación con efectos secundarios
función, y disminuir la incapacidad. La terapia física, incluyendo ejercicios activos, es graves y su escasa interacción con otros tratamientos. Su dosis es de 3-4 gr por día.
más recomendable que el uso de ortesis. Su nivel de evidencia científica para el alivio de los síntomas es 1B.
La evidencia más fuerte en cuanto a la revisión de la literatura en el tratamiento de la Antiinflamatorios tradicionales (AINES). Poseen poder analgésico y antiinflama-
cervicalgia subaguda o crónica son los ejercicios combinados con manipulaciones. torio. Se asocian al paracetamol cuando éste fracasa. Deben ir acompañados de un
Los ejercicios se indican ya que producen una relajación de la musculatura y, los ejerci- protector gástrico en pacientes de riesgo. Pueden alterar las funciones dependientes
cios isométricos mantienen el tono muscular y combaten el espasmo y la contractura. de la COX-1 como es la gastroprotección, la función renal, la homeostasis vascular y
También es de gran ayuda la realización de ejercicios de movilización activa asistida, la función plaquetaria. Su uso es en dolor moderado. Su nivel de evidencia en cuanto
acompañado de pequeñas tracciones manuales y ejercicios de potenciación muscular a la eficacia en el alivio de la sintomatología es 1 A.
de la musculatura del cuello y de la espalda. El ejercicio aerobico sin impacto también
puede ser de gran ayuda. Inhibidores selectivos de la COX-2. Únicamente inhiben la COX-2 que es la me-
diadora de la inflamación, del dolor y de la fiebre, efectos que son los que realmen-
te queremos eliminar cuando tomamos un antiinflamatorio. No interaccionan con la
agregación plaquetaria. Frente a los AINE clásicos ofrecen beneficios: mayor rapidez
Terapia física de acción, efecto duradero con una sola toma al día (lo que facilita el cumplimiento) y
efectividad comparada similar a las dosis altas de AINES tradicionales (indometacina,
El frío local se usa en la fase inflamatoria para combatir el espasmo muscular. El calor
diclofenaco) en cuanto a alivio del dolor y la inflamación. El nivel de evidencia científica
se emplea para combatir la contractura muscular. Al incrementar el flujo sanguíneo
en cuanto a la eficacia en el alivio del dolor, la inflamación o la rigidez es 1B.
debido a la vasodilatación por el calor, mejora el proceso inflamatorio. Sin embargo,
su efecto es muy superficial. Pero las evidencias en la literatura médica acerca de la Opiáceos. Su uso se recomienda como tercer escalón terapéutico, cuando el para-
terapia física no son favorables, ya que no hay suficientes evidencias con una solidez cetamol y los AINES no son eficaces o son mal tolerados por el paciente. Su nivel de
estadística que lo apoye. evidencia es 1B.
La electroterapia es otra opción para acelerar la recuperación. Su efecto consiste en Corticoides. La inflamación de los elementos neurales parece desempeñar un papel
la transformación de la energía que penetra más profundamente en calor. Los tres muy importante en la presencia del dolor cervical, pero sobre todo del radicular. De
tipos de tratamiento más frecuente son las corrientes de alta frecuencia (diatermia), las ahí que el tratamiento corticoideo sea efectivo en la fase aguda del dolor. Su uso se
radiaciones electromagnéticas (microondas) y los ultrasonidos. La asociación de ultra- justifica por efecto antiinflamatorio y, si no hay contraindicación, la dosis puede ser de
sonidos con diatermia es la más efectiva. El tratamiento debe ser diario, en sesiones de hasta 60 mg/ día de prednisona, 4 mg de dexametasona con complejo vitamínico B.
15 minutos. Si es efectivo, el alivio del dolor es rápido. Sin embargo, no hay evidencias El uso vía parenteral es el más usado ante la rapidez de su biodisponibilidad en sangre,
científicas sólidas que apoyen el uso de electroterapia. más que la vía oral. Se pueden emplear también por vía epidural, asociándolos o no a
corticoides locales.
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Tabla 9. Esquema de tratamiento de la cervicalgia • Hay una correlación directa entre la sintomatología que refiere el paciente y los
hallazgos encontrados en las exploraciones complementarias.
Fase aguda (3-4 primeras semanas): • La etiologia del dolor cervical es la que marcará la técnica quirúrgica a realizar.
• Tranquilizar al paciente acerca de lo frecuente que es esta dolencia y de las soluciones a tomar para La discectomía en el caso de una hernia discal, la colocación de prótesis de
solucionar el problema. disco, o la artrodesis tras la descompresión.
• En cuanto el dolor vaya cediendo, intentar que el paciente vaya recuperando sus actividades de la vida No debemos plantear la intervención en aquellos casos de dolor de etiología discóge-
cotidiana, excepto conducir mientras tenga limitada la movilidad del cuello. na y sin componente radicular y debido a causas degenerativas.
• El collarín cervical debe ser limitado a las situaciones descritas con anterioridad. Se debe usar entre 2 y 4
días bajo la supervisión médica. Es necesario conocer las expectativas del paciente ante la cirugía antes de plantearle
• Mantener la baja laboral mientras el paciente se encuentre dolorido y prolongarla en trabajadores de esta posibilidad.
fuerza.
En el caso de hernia discal cervical, la mayoría de los autores son partidarios del abor-
• Corregir los hábitos de vida inadecuados y la higiene postural ya que con seguridad nos van a llevar a una daje anterior, ya que permite un perfecto acceso a la región anterior y lateral del disco
recaída. intervertebral. Además permite una buena resección de los osteofitos anteriores me-
• Tratamiento analgésico ya comentado y bajo la supervisión médica. diante visión directa así como poder visualizar todo el proceso uncovertebral y el liga-
• Comenzar tratamiento rehabilitador para aliviar la sintomatología. mento longitudinal anterior por si hay que resecarlo. Se puede restaurar la lordosis cer-
Fase subaguda (4-12 semanas): vical y se puede acceder a diferentes niveles por si hay más de un proceso herniario.
• Continuar con el tratamiento rehabilitador si las molestias no han cedido.
La técnica más habitualmente empleada es la discectomía anterior con o sin artrodesis
• Valorar opciones de no mejoría ante el tratamiento como los aspectos médico-legales asociados al
intersomática mediante un implante de tantalio, evitando así la necesidad de extraer
esguince cervical, ansiedad y depresión, síndrome miofascial.
autoinjerto del propio paciente y la morbilidad que esto asocia.
Fase crónica:
• Continuar la fisioterapia si el paciente refiere alivio con ella. Evitar el tratamiento pasivo como los masajes La otra indicación quirúrgica es la espondilosis cervical. Las técnicas deben actuar allí
o la electroterapia. donde se produce una compresión, resecando los osteofitos que provocan la compre-
• Considerar la posibilidad de añadir antidepresivos a la medicación analgésica. La duración del tratamiento sión, asociando una artrodesis del segmento cervical afectado.
viene condicionada por la respuesta a la sintomatología.
• Valorar la posibilidad de ser valorado por la Unidad del Dolor.
• Dependiendo de la etiología responsable del dolor, plantear la posibilidad de tratamiento quirúrgico
Tratamiento quirúrgico
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Se puede dividir en agudo cuando dura menos de 12 semanas, pasadas las cuales
comienza a ser crónico.
- Kay TM, Gross A, Goldsmith C, Santaguida PL, Hoving J, Bronfort G; Cervical Overview El dolor lumbar es más prevalente en los países industrializados; no hay diferencias de
Group. Exercises for mechanical neck disorders. Cochrane Database Syst Rev. 2005 Jul sexo, aunque a partir de los 60 años se hace más prevalente en mujeres.
20;(3):CD004250
Las causas más frecuentes en el dolor lumbar crónico son las degenerativas y traumá-
ticas. Aunque como se ha dicho, el 90% de las lumbalgias tienen un curso autolimita-
do, las que cronifican utilizan el 80% de los recursos destinados al dolor de espalda.
La columna lumbar soporta el peso del cuerpo y a diferencia de la columna a nivel torá-
cico no tiene soportes laterales y es relativamente móvil. Consta de estructuras óseas,
discos entre las vértebras, ligamentos y músculos que forman una unidad funcional y
albergan los últimos segmentos de médula espinal, raíces nerviosas lumbares y sa-
cras. Todos estos elementos pueden ser origen de dolor lumbar y pueden ser varios
los implicados.
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Los discos intervertebrales están compuestos por un anillo fibroso y por un núcleo Además, es frecuente la existencia de dolor muscular o miofascial asociado, que se
pulposo. La porción interna del anillo fibroso encapsula al núcleo y provee al disco de produce por el aumento mantenido del tono y la tensión debido al espasmo muscu-
una gran resistencia durante la compresión. El núcleo pulposo en gente sana ocupa lar y la contracción excesiva, viéndose pequeños nódulos de contracción (3-6 mm)
más de los 2/3 del área del disco y soporta más del 70% de las cargas compresivas. llamados puntos triger que a la palpación desencadenan el dolor. Su patogenia es
Este núcleo está compuesto de grandes proteoglicanos que pueden captar agua has- desconocida pero están implicadas alteraciones de los reflejos espinales segmentarios
ta en un 250% de su peso. Esto permite captar agua y nutrientes, esta capacidad y un aumento persistente de la acetilcolina en la unión neuromuscular que perpetúa el
de difusión se pierde con la edad debido a que se producen microtraumatismos que círculo.
producen roturas encapsuladas del anillo fibroso que impiden una correcta nutrición
del núcleo. Estas roturas pueden confluir entre ellas y permitir que el núcleo migre al Por último, existe también dolor de origen espinal. En la transmisión de los estímulos
espacio epidural y produzca compresión nerviosa. Además conforme el disco degene- nerviosos periféricos a través de las fibras A-δ C se produce la liberación de glutamato
ra y disminuye de tamaño las fuerzas que soporta la columna lumbar se redistribuyen y aspartato que actúan sobre el receptor NMDA produciendo la liberación de sustan-
afectando más al tercio posterior produciendo una sobrecarga de las articulaciones cias algógenas como SP, PRGC, VIP que producen inflamación y desarrollan hiperal-
interapofisarias (las facetas), dando lugar a una degeneración (artrosis) y aparición de gesia y alodinia e hipersensibilización central activando las neuronas de amplio rango
osteofitos. Con el tiempo, la consecuencia es un estrechamiento progresivo del canal dinámico y producen también una activación del sistema nervioso simpático (existe un
lumbar y compresión nerviosa. aumento de noradrenalina en las zonas dolorosas). La estimulación del asta dorsal de
la médula espinal puede proceder de diferentes estructuras como son el anillo fibroso
En el dolor discogénico lo que ocurre es que por diferentes factores ambientales o del disco, las articulaciones facetarias, ligamentos, músculos, etc.
físicos (ejemplo microtraumatismos) se produce una disminución de la nutrición del
disco junto con una bajada del pH, liberación de sustancia P (SP), péptido relacionado Como se puede ver, la etiología y la fisiopatología del dolor lumbar es compleja y no
con el gen de la calcitonina (PRGC), péptido intestinal vasoactivo (VIP) y una cascada bien dilucidada (tabla 11).
inflamatoria (fosfolipasa A2, PGE2, interleukinas IL-1, IL-6, IL-10 y TNF-α) y liberación
de óxido nítrico (NO). Si todos estos fenómenos son causa o efecto no esta claro.
Tabla 11. Etiología del dolor lumbar
En el dolor radicular se han propuesto diferentes etiologías como compresión neural, is-
quemia, inflamación y factores ambientales/bioquímicos. A diferencia de los nervios peri- Dolor lumbar mecánico Enfermedades sistémicas
féricos los nervios espinales carecen de una barrera intraneural adecuada lo cual permite 1.- Discopatía 1.- Metástasis
la formación de edema ante la compresión nerviosa, esto aumenta la presión endoneural 2.- Síndrome miofascial 2.- Infección epidural discitis
y produce una disminución del flujo capilar y produce fibrosis intraneural, esta fibrosis 3.- Espondilolistesis 3.- Espondiloartropatía inflamatoria
impide una correcta nutrición desde el líquido cefalorraquídeo (LCR) y se produce hiper-
4.- Fractura vertebral o aplastamiento vertebral 4.- Enfermedad ósea (osteoporosis)
estesia e hiperalgesia. A esto se le une la existencia de las sustancias inflamatorias antes
señaladas. Todo esto produce una fisiopatología compleja y multifactorial. 5.- Estenosis del canal 5.- Enfermedad vascular (Vasculitis,
6.- Aracnoiditis arteriosclerosis)
El síndrome facetario (dolor en las articulaciones facetarias) se produce entre el 15 y Dolor no mecánico Dolor referido:
el 50% de los pacientes con lumbalgia crónica, es la degeneración artrósica de estas
1.- Mielopatía 1.- Enfermedad gastrointestinal
articulaciones sinoviales y en su fisiopatología están implicados los mismos factores
que en la artrosis de otras articulaciones sinoviales (ver capítulo 2). Produce dolor que 2.- Plexopatía lumbar 2.- Enfermedad genitourinaria
a veces se confunde con una falsa radiculopatía pero que no llega por debajo de los 3.- Neuropatía 3.- Enfermedad ginecológica
muslos. 3.- Mononeuropatía 4.- Aneurisma de aorta abdominal
4.- Miopatías 5.- Patología de la cadera
En el dolor sacroilíaco es producido por la artrosis de estas articulaciones sinoviales 5.- Distonías
y produce dolor en glúteos, región lumbar baja, muslos e ingle. Es la causa del dolor
desde un 2 a un 30% de los casos.
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Cerca del 90% de las lumbalgias evoluciona a la curación. El pronóstico vital es bueno En el caso de existir componente radicular asociado el tratamiento debe ir encaminado
siempre y cuando no exista una enfermedad subyacente (ejemplo: tumor). hacía estos síntomas y están indicados neuromoduladores o anticonvulsivantes (ejem-
plos: pregabalina, gabapentina), antidepresivos tricíclicos (ejemplo: amitriptilina y nor-
triptilina) o duales (inhibidores de la recaptación de Noradrenalina y Serotonina como la
3.4.1.6 Tratamiento
Duloxetina y Venlaxafina) y de tercera opción opioides débiles como el Tramadol (con
El tratamiento de la lumbalgia depende de si es aguda en el cual el tratamiento es acción dual sobre receptores opioides μ e inhibidor de la recaptación de la serotonina
llevado desde el médico de atención primaria (MAP) con analgésicos simples y ejer- y noradrenalina) y opioides potentes como la Oxicodona.
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En realidad no existen evidencias clínicas de mayor eficacia con el uso de técnicas qui-
rúrgicas (descompresivas con o sin instrumentación) para la espondilosis degenerativa
comparadas con la evolución natural de la misma, placebo o tratamiento conservador.
Por ello no esta indicada la cirugía si no existen signos neurológicos acompañantes.
4.- Infiltraciones:
Existen múltiples técnicas de infiltración. Las más conocidas son los bloqueos epidura-
les, los bloqueos facetarios, los bloqueos de un ganglio dorsal o de una raíz nerviosa,
infiltraciones con toxina botulínica y las infiltraciones con ozono.
Se sabe que los bloqueos epidurales son eficaces en el caso de radiculopatía y los
facetarios en la lumbalgia. Ambos necesitan de estudios randomizados controlados
frente a placebo para poder catalogar su eficacia real. Los bloqueos nerviosos selec-
tivos son eficaces para evitar la cirugía discal en pacientes con dolor radicular. Existen
estudios que demuestran la eficacia por lo menos a corto plazo de la Toxina botulínica
tipo A en el dolor miofascial. En este sentido también se han comenzado a utilizar blo-
queos con Ozono pero no se disponen de estudios que hayan demostrado eficacia y
seguridad.
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Gráfico 1. Diagnóstico de dolor lumbar crónico sin hernia Tabla 15. Recomendaciones sobre medidas no farmacológicas
de disco
- Reposo en cama. Puede ser una consecuencia inevitable del dolor, cuando es intenso e incapacitante
Dolor Lumbar (sobre todo en la fase aguda), pero no debe considerarse un tratamiento. Recomendar al paciente que
continúe realizando sus actividades, si la intensidad del dolor se lo permite, parece la alternativa más
correcta.
Evaluación clínica
- Programas de Ejercicios. No son eficaces en la fase aguda del dolor radicular. En pacientes con síntomas
persistentes de dolor radicular secundario a hernia de disco pueden ser útiles los programas de ejercicios
Bloqueo faceta Epidural Bloqueo sacroilíaco de estabilización dinámica o los de extensión de McKenzie. En estenosis de canal y espondilolistesis
degenerativa se pueden recomendar, si el paciente los tolera, ejercicios en flexión; en la espondilolisis o
espondilolistesis ístmica ejercicios de estabilización dinámica y en el síndrome piramidal, los ejercicios
Positivo Negativo Positivo Negativo Positivo Negativo de estiramiento. Los programas de ejercicios, supervisados o realizados en domicilio, a partir de la 4-6ª
semana de la cirugía discal permiten que la disminución del dolor y la recuperación funcional sea más
rápida.
Discografía Bloqueo faceta Bloqueo faceta
- Tracción Lumbar. No se recomienda su aplicación rutinaria aunque es probable que sea útil en
determinados subgrupos de pacientes.
Positivo Negativo Positivo Negativo Positivo Negativo - Estimulación Nerviosa Transcutánea (TENS). Aunque los datos procedentes de ensayos clínicos son muy
limitados, el TENS parece una alternativa razonable como tratamiento sintomático en pacientes con dolor
bien delimitado de distribución radicular. Entre sus ventajas destaca que es un método sencillo, barato,
Bloqueo sacroilíaco Discografía Discografía con mínimo riesgo de efectos secundarios y que permite una estrategia de ensayo-error. Podemos probar
varios parámetros de estimulación y diferentes posiciones de los electrodos. Si el paciente refiere alivio
sintomático se le puede instruir para que utilice el TENS en su domicilio de forma independiente.
Positivo Negativo Positivo Negativo Positivo Negativo - Ortesis. Los datos disponibles indican que las ortesis lumbares limitan la movilidad vertebral, permiten
modificar el grado de lordosis lumbar y podrían tener un efecto a nivel de la propiocepción. Pueden ser
útiles en el paciente con dolor radicular en el que determinadas actividades o movimientos aumentan
Epidural Bloqueo sacroilíaco Epidural significativamente los síntomas. En el dolor radicular secundario a patología discal, donde el dolor aumenta
con la flexión anterior, se recomienda una ortesis que mantenga la lordosis fisiológica. En estenosis de
canal o espondilolistesis se podría utilizar una ortesis en flexión (con corrección parcial de la lordosis).
Positivo Negativo Positivo Negativo Positivo Negativo Hay que indicar al paciente que utilice la ortesis sólo en los periodos de dolor y principalmente durante
las actividades de riesgo (trabajo, tareas domésticas) con el objetivo de que pueda continuar/reiniciar sus
actividades habituales.
Parar Parar Parar - Otras modalidades pasivas (terapia manual, laser, ultrasonido, magnetoterapia...). Los datos
proceso proceso proceso disponibles son insuficientes para poder formular recomendaciones.
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3.5 Síndrome de espalda fallida Riesgo: El riesgo de pobres resultados quirúrgicos se incrementa en los casos de
mala selección de pacientes, una historia de éxito de una cirugía anterior, y en un in-
El Síndrome de espalda fallida o síndrome Post-laminectomía se refiere a la persisten- dividuo con una historia previa documentada de la depresión clínica u otro trastorno
cia del dolor tras la realización de una laminectomía y su consiguiente discapacidad. La psiquiátrico.
laminectomía es un tipo de cirugía de la espalda lleva a cabo para aliviar la compresión
del nervio (radiculopatía) o lesión de la raíz nerviosa de la columna causada por una Incidencia y prevalencia del síndrome post-laminectomía: alrededor de 450 casos de
hernia de disco o el estrechamiento del canal espinal (estenosis espinal) en relación hernia de disco requieren cirugía por cada 100.000 en los EE.UU. La incidencia del
con los cambios degenerativos. síndrome post-laminectomía se correlaciona con los datos sobre el número de cirugías
realizadas, de los cuales se estima que entre el 10% y 15% se consideran sin éxito
El canal espinal está formado por la parte posterior de las vértebras que rodean la (Wheeler).
médula espinal y protegen y limitan los nervios espinales. Una hernia discal o estenosis
espinal pueden causar presión sobre la médula espinal y/o una o más raíces nervio-
sas espinales. La cirugía consiste en la extracción de una sección del arco óseo, o la
lámina que forma la parte posterior del canal espinal (laminectomía) lo que permite la
3.5.1 Diagnóstico
descompresión de los nervios. Historia: La historia médica de las personas con síndrome post-laminectomía varía
considerablemente, sin embargo, todos los individuos previamente habrán tenido ci-
El síndrome post-laminectomía se refiere específicamente al dolor asociado con los
rugía de la espalda y aún experimenta dolor lumbar y/o dolor en la pierna (ciática). El
síntomas que no se alivian tras la laminectomía. Sin embargo, a menudo el término
individuo puede quejarse de una variedad de síntomas que incluyen rigidez, dolor local,
se utiliza más ampliamente para describir los malos resultados después de cualquier
malestar generalizado, y el dolor se irradia a la pierna, lo cual puede ser indicativo de
tipo de cirugía de columna. El término laminectomía clásica a menudo se utiliza para
afectación de los nervios.
describir una laminotomía parcial, que es la eliminación de sólo una porción de la lá-
mina para proporcionar acceso a una hernia de disco. La intervención quirúrgica más Examen físico: El individuo se examinará acostado (decúbito supino), sentado y de
frecuente antes de un diagnóstico de síndrome post-laminectomía es la discectomía pie. La palpación de la columna vertebral puede revelar áreas de sensibilidad local de
lumbar. La cirugía de la columna se puede realizar en pacientes que no mejoran con la cirugía previa. El médico evaluará la postura, la marcha y la amplitud de movimiento
el tratamiento no quirúrgico (conservador), a pesar de que los resultados quirúrgicos y puede observar la asimetría, deformidad, o curvatura de la columna. El examen in-
son menos predecibles en la ausencia de correlación entre los hallazgos clínicos es- cluirá una evaluación neurovascular completa y un examen músculo-esquelético para
pecíficos y los resultados del estudio de imagen. En esos casos, la descompresión descartar todas las causas posibles de otros síntomas al síndrome post-laminectomía.
puede no proporcionar un alivio, y el resultado es en un porcentaje nada desdeñable
de síndromes post-laminectomía. Pruebas: Radiografías de la columna vertebral en flexión y extensión, para determinar
el post-operatorio si la inestabilidad está presente, es una fuente potencial de dolor
Las causas de los malos resultados o el síndrome de espalda fallida tras cirugía, in- persistente. RM con contraste y TC / mielografía se pueden llevar a cabo para evaluar
cluido el síndrome post-laminectomía y el dolor persistente después de otros procedi- la compresión del nervio persistente, discitis o la enfermedad de otro disco, y para
mientos de la columna vertebral, incluyen la fusión espinal, la selección de pacientes no descartar una infección o un tumor. Los estudios de laboratorio incluyen análisis de
precisa (es decir, que se opera cuando la compresión de los nervios no existía), lesión sangre para detectar la infección (por ejemplo, glóbulos blancos [GB], velocidad de
de la raíz nerviosa en el momento de la cirugía, retraso de la cirugía, la infección en el sedimentación globular [VSG]). Si se sospecha una infección, una gammagrafía ósea
espacio en el disco o el espacio epidural, la estenosis espinal o lateral de la inestabi- (exploración nuclear de imágenes de los huesos) y / o resonancia magnética puede
lidad no reconocida, la aracnoiditis, y recurrencia de la hernia. En raras ocasiones, la ser obligado para examinar el tejido óseo y blando con más detalle. Pueden realizar-
primera cirugía se ha llevado a cabo en el lado equivocado, o en el nivel equivocado se estudios de conducción nerviosa y la electromiografía (EMG) para evaluar el dolor
(mala praxis). La cirugía puede haberse llevado a cabo de manera adecuada y corregir radicular. A menudo, estos estudios no logran identificar una fuente específica para el
la patología, sin embargo, los factores psicosociales pueden contribuir al dolor crónico dolor continuo. Tanto la evaluación psicológica y una segunda opinión quirúrgica debe
que se desarrolla después de la cirugía, así como la lesión nerviosa establecida en el ser obtenido antes de que la cirugía de columna se repita.
momento de la cirugía, a pesar de una técnica quirúrgica adecuada.
286 287
paciente musculoesquelético
La estimulación de la médula espinal es otra técnica de manejo del dolor que emplea
una unidad implantable, con baterías que proporciona una estimulación constante de
la médula espinal. El alivio de los síntomas se presenta en aproximadamente el 50% Epidural
de los pacientes (North). Epidurolisis
Repetir la intervención quirúrgica (discectomía, la fusión vertebral, y / o laminectomía
Ozono RF de ganglio dorsal
adicional) está indicado sólo ocasionalmente, y sólo cuando un diagnóstico claro ha RF Ramomedial Toxina Botulínica RF por vía caudal
sido establecido. Las personas con dolor de espalda recurrente sin una causa física
identificable pueden beneficiarse de un tratamiento por un especialista en el dolor y la
psicoterapia.
Bibliografía
3.5.3 Pronóstico
- Epstein, N. E. “Lumbar Laminectomy for the Resection of Synovial Cysts and Coexisting
El resultado del síndrome post-laminectomía es muy variable, puede ir desde el alivio Lumbar Spinal Stenosis or Degenerative Spondylolisthesis: An Outcome Study.” Spine 29 9
completo a una vida de dolor que empeora. Mientras que la cirugía se realice por razo- (2004): 1049-1055. National Center for Biotechnology Information. National Library of Medi-
nes adecuadas puede dar buenos resultados, en pacientes que no mejoran, segunda cine. 2 Dec. 2008 <PMID: 15105680>.
o cirugías adicionales tienen resultados menos predecibles. La tasa de éxito disminuye
- Fischgrund, J. S., et al. “1997 Volvo Award Winner in Clinical Studies. Degenerative Lumbar
con cada cirugía adicional. Múltiples cirugías en las personas mayores suelen tener Spondylolisthesis with Spinal Stenosis: A Prospective, Randomized Study Comparing De-
peores resultados. Sin resolver los factores psicosociales (por ejemplo, problemas de compressive Laminectomy and Arthrodesis with...” Spine 22 24 (1997): 2807-2812. National
pareja o sexual, insatisfacción laboral, un litigio pendiente) y la depresión clínica docu- Center for Biotechnology Information. National Library of Medicine. 12 Feb. 2008 <PMID:
mentada u otro trastorno psiquiátrico puede retrasar o impedir la recuperación. 9431616>.
288 289
paciente musculoesquelético
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3.6 Radiculopatía lumbar
tion. National Library of Medicine. 2 Dec. 2008 <PMID: 2052378>.
3.6.1 Introducción
- Sleigh, Bryan, and Ibrahim Nihum. “Lumbar Laminectomy.” eMedicine Consumer Health.
La radiculopatía lumbar es un conjunto de síntomas en forma de dolor neurogénico en
Eds. Joseph A. Salomone, Francisco Talavera, and Richard Harrigan. 5 Oct. 2005. Medsca-
pe. 13 Mar. 2009. la región baja de la espalda y las extremidades inferiores, originado en las raíces nervio-
sas lumbares. Además del dolor, el paciente con radiculopatía lumbar puede presentar
- Soin, A. “Functional Outcomes in Patients with Chronic Nonmalignant Pain on Long-term adormecimiento, debilidad y pérdida de reflejos. Las causas de la radiculopatía lumbar
Opiod Therapy.” Pain Practice 8 5 (2008): 379-384. son la hernia discal, la estenosis foraminal, los tumores, la formación de osteofitos y,
en raras ocasiones, la infección. Se encuentra extendido el uso del término ciática para
- Wheeler, Anthony H., James R. Stubbart, and Brandi Hicks. “Pathophysiology of Chronic
Back Pain.” eMedicine. Eds. Michael J. Schneck, et al. 9 Jul. 2007. Medscape. 13 Mar. 2009. referirse a este conjunto de síntomas de la radiculopatía lumbar.
290 291
paciente musculoesquelético
1. Factor edema: hay que valorar siempre los fenómenos irritativos-inflamatorios, de metamérica característica. Si la inflamación no se trata, el proceso inflamatorio aumen-
tensión y estiramiento, que afectan a la fibra nerviosa y a la vascularización. El proceso ta y se cronifica. El edema y la isquemia causan fibrosis perineural e intraneural.
inflamatorio debido a microtraumatismos, o bien por autoinmunidad frente a las proteí-
nas liberadas del núcleo pulposo tras una lesión discal y la compresión, que dificulta el La lesión vascular, la fibrosis y la inflamación juegan un importante papel y explican la
retorno venoso, conducen a la formación de edema, que aumenta, a su vez, la tensión existencia de dolor lumbar, incluso cuando no existe un factor mecánico evidente. El
interfascicular e interfiere en la función nerviosa. edema intrarradicular causado por alteración de la barrera capilar sangre-nervio es el
factor más importante en la disfunción de la raíz nerviosa debido a compresión crónica.
Si la raíz edematizada está dentro de una estructura rígida, que es lo que ocurre cuan-
do la raíz atraviesa el canal radicular y sale por el agujero de conjunción, se produce La compresión crónica conduce a la desmielinización y fibrosis. Después de un mes,
un síndrome compartimental, entorpeciendo la microcirculación, aumentando el com- se observa engrosamiento de la aracnoides y duramadre, con edema intrarradicular.
promiso vascular y produciendo un compromiso axoplásmico. Esto explica el dolor A los tres meses, se observa una pérdida de fibras mielinizadas con disminución de
radicular de tipo neurítico, vehiculizado por fibras C, cuyos axones están dañados e la velocidad de conducción. En pocas semanas, se inicia la degeneración waleriana
hiperalgésicos, manifestando una sensación de quemazón y disestesia de distribución y fibrosis con formación de cortocircuitos en el interior de la raíz entre fibras gruesas
292 293
paciente musculoesquelético
propioceptivas y nociceptivas. Entre los seis y doce meses, la degeneración waleriana dad citotóxica directa. La liberación de histamina por los mastocitos favorece la extra-
y la fibrosis son completas. vasación plasmática y el edema. La radiculitis química ocurre no sólo en el lugar de la
compresión, sino también en la zona degenerada y es una causa importante de dolor
2. Factor vascular: la obstrucción venosa podría ser un factor importante en la produc- en la patología de compresión de la columna lumbar, estenosis de canal, compresión
ción de fibrosis peri e intraneural. discal o compresión de la raíz durante la cirugía.
Normalmente, los vasos de la membrana perineural son muy delgados, pero en la fi- 5. Factor neural: en el dolor radicular, los factores de compresión, vasculares e inflama-
brosis intraneural, estas vainas están engrosadas y tienen una lámina subendotelial de torios son causa y efecto. La raíz nerviosa, por su especial estructura, aporte vascular
aspecto amorfo. Se supone que es debido al daño endotelial secundario a la isquemia y metabólico, puede responder a la sobresolicitación mecánica y a los procesos infla-
local. Esta lesión microvascular aumenta la permeabilidad y se desarrolla edema. A matorios de manera diferente a como lo hacen los nervios periféricos. El aporte nutri-
falta de un buen drenaje linfático, el edema se elimina muy lentamente, aumentando cional de la raíz depende en gran parte del líquido cefalorraquídeo, y la inflamación y la
la fibrosis. fibrosis pueden obliterar esta fuente. Se ha demostrado que existe actividad neuronal
espontánea consecutiva a la isquemia, que hace que los nervios sean más sensibles
Varios estudios han demostrado un defecto importante de la actividad fibrinolítica en
a la estimulación mecánica.
pacientes con radiculopatía, comparándoles con los grupos control. Esta alteración
fibrinolítica es secundaria al daño mecánico, pero, si persiste, puede convertirse en un La inervación de la columna es compleja y existen zonas vulnerables con abundancia
factor patogénico más, colaborando así con la cronicidad del problema. Estos defec- de nociceptores. El estímulo doloroso inicia la información aferente, pero, a su vez,
tos de la actividad fibrinolítica son un buen marcador de daño vascular. provoca la liberación de péptidos vasoactivos que actúan sobre los vasos sanguíneos
y células cebadas en sentido retrógrado, aumentando la sensibilización periférica y
La alteración de la microcirculación radicular, incluso en ausencia de compresión ex-
perpetuando el proceso inflamatorio. El edema de la raíz y su deficiente nutrición em-
trínseca o inflamación, puede causar lesión neural y dolor. Se ha encontrado relación
peoran la lesión del axón, generándose impulsos ectópicos que sensibilizarán a las
entre el estado de las arterias lumbares y la clínica, lo que apoya la importancia de
neuronas del asta posterior de la médula. Los fenómenos de plasticidad del sistema
evaluar el estado vascular del paciente dentro del contexto clínico de la patología de la
nervioso central perpetúan definitivamente el dolor.
espalda, al igual que preguntar por su historia de tabaquismo y/o empleo de anticon-
ceptivos orales.
3. Factor inmunitario: las proteínas que constituyen gran parte de la estructura del 3.6.5 Manifestaciones clínicas y signos
núcleo pulposo están aisladas de la circulación general y, por tanto, actúan como
cuerpos extraños cuando se vierten en el espacio epidural como consecuencia de un Como resultado de la compresión radicular, hay dolor irradiado según el territorio de la
desgarro del anillo. Se ha observado en discos herniados, la presencia de inmunocom- raíz: ciática en el caso de las raíces L5 y S1 (cara posterior del muslo hasta un nivel que
plejos frente a las IgM e IgG cerca de zonas vascularizadas, lo que concede a estos sobrepasa el hueco poplíteo) o cruralgia en el caso de las raíces L4 y L3 (cara anterior
mediadores de la inflamación un papel patogénico asociado en la persistencia de la y medial del muslo), ver tabla 2.
lumbalgia. Así pues, parece demostrado que una reacción de autoinmunidad es una
de las causas de la inflamación de la raíz y del origen del dolor.
294 295
paciente musculoesquelético
Entre las manifestaciones clínicas aparece una alteración de la estática en ligera flexión
y frecuentemente inclinada hacia un lado. En ortostatismo el paciente adopta una pos- 3.6.6 Diagnóstico
tura antiálgica flexionando ligeramente el muslo y la pierna. La marcha es claudicante.
La movilidad del raquis está muy limitada y su valoración se hace midiendo la distancia El diagnóstico de la compresión radicular es fundamentalmente clínico, en función de
entre la punta de los dedos y el suelo. las características del dolor y las manifestaciones neurológicas. En cuanto a las prue-
bas de imagen solicitadas ante este cuadro, la resonancia magnética de la columna
El dolor aumenta con el movimiento, con las maniobras de Valsalva (tos, estornudo, lumbar sería la que contribuye a identificar de forma más precisa la lesión causante.
defecación) y con la elongación de la raíz afectada. También pueden aparecer entume-
cimiento y parestesias en el territorio de la raíz afecta, al igual que debilidad y falta de Otras pruebas de imagen:
coordinación de la extremidad. Podemos desencadenar el dolor radicular del paciente
1) Radiografías. En dos proyecciones anteroposterior y perfil incluyendo articulacio-
mediante las maniobras de elongación radicular, de las cuales, las más frecuentemente
nes sacroilíacas, ambas caderas y la totalidad de las vértebras lumbares. En la pro-
practicadas son:
yección de perfil pueden valorarse mejor la altura de los discos y desplazamientos
1.-Maniobra de Laségue (Figura 1): consiste en la reproducción del dolor vertebrales.
radicular al elevar la pierna afectada con la rodilla en extensión. Es valorable
2) Mielografía. No se emplea de forma rutinaria por no estar exenta de riesgos y ha
cuando aparece en ángulos inferiores a los 45˚.
caído en desuso desde la utilización de la TAC y la RM.
2.-Maniobra de Bragard: suele ser complementaria de la anterior y consiste en
la aparición del dolor radicular cuando se eleva la pierna afectada con la rodilla 3) TAC. En la tomografía axial computerizada se pueden observar dos tipos de altera-
en extensión hasta un nivel inmediatamente inferior a la maniobra de Laségue ciones discales. El primero es el abombamiento anular que impacta contra el saco du-
y se realiza flexión dorsal del pie. ral y oblitera la grasa epidural y que correspondería a una profusión discal. El segundo
3.-Maniobra de Laségue contralateral: consiste en la aparición del dolor en la tipo sería una protusión nodular más concreta y que comprime el saco dural o una raíz
pierna afectada cuando se eleva la contralateral con la rodilla extendida. nerviosa y que sería la imagen propia de un disco extruido.
4.-Maniobra de Laségue invertido: es la elongación de las raíces L3 y L4. Es 4) Resonancia Magnética. Se observa menor intensidad de señal en T2 cuando se
positiva cuando se desencadena el dolor al colocar al paciente en decúbito trata de un disco degenerado y es causado por la pérdida de agua y reducción en el
prono, extendiéndole la cadera con la rodilla flexionada. contenido de mucopolisacáridos. Además puede aparecer un abombamiento del dis-
co. En las hernias discales al dirigirse la mayoría de ellas hacia la parte posterolateral,
aparece una redondez anormal que desplaza el saco dural y las raíces.
296 297
paciente musculoesquelético
5) Discografía. Tiene escaso interés, únicamente para localizar el espacio discal pre- La administración oral de esteroides es indicada por algunos autores en el dolor ra-
viamente a la fusión y destruir el disco mediante quimionucleolisis. dicular agudo, en ciclos cortos. A veces acudimos también a las inyecciones locales
sobre las estructuras dolorosas (articulares posteriores, nódulos de fibrositis) y a las
6) EMG. proporcionan la información neurofisiológica sobre el estado real de cada raíz infiltraciones epidurales.
individual y sobre el plexo lumbar.
La repercusión psíquica del dolor agudo puede producir en el paciente una fuerte ansie-
dad que no debe descuidarse aplicando un tratamiento con psicofármacos adaptado a
este componente emocional.
3.6.7 Tratamiento
Los objetivos médicos del tratamiento en la fase aguda son: calmar el dolor y prevenir o
reducir la discapacidad, evitar la cronicidad y prevenir las recurrencias. REPOSO O CONTINUAR LA ACTIVIDAD
URGENCIAS TERAPEÚTICAS El tratamiento de reposo en cama mantenido hasta una desaparición importante de los
dolores, ha sido considerado durante largo tiempo como un dogma terapéutico, indis-
Es importante en el manejo de la fase aguda valorar lo que se considera una urgencia
pensable para aliviar las lumbalgias hiperálgicas ya que parecía favorecer la evolución
diagnóstica y terapéutica:
favorable del proceso. Los trabajos de Nachemson habían reforzado este criterio mos-
a) La ciática hiperálgica, definida por un dolor sentido como insoportable y trando que las presiones intradiscales eran mínimas en la posición de reposo en cama.
resistente a los antiálgicos mayores (opiáceos).
Los objetivos de la prescripción del reposo en cama que se han manejado han sido los
b) La ciática paralizante, definida como un déficit motor rápido inferior a 3 (escala siguientes:
de Lovel) y/o un déficit motor progresivo.
c) La ciática asociada a un síndrome de cola de caballo, caracterizado por la - Reducir el estrés y las tensiones en los diversos elementos vertebrales
aparición de signos esfinterianos, sobre todo de una incontinencia o retención - Mejorar los mecanismos naturales de curación o cicatrización
urinaria; de una hipoestesia perineal o de los órganos genitales externos y un - Prevenir la agravación del proceso
déficit neurológico grave o progresivo en los miembros inferiores.
En la actualidad se ha comprobado que el reposo excesivo es perjudicial por nume-
rosas razones: sensación mental de enfermedad grave, pérdida de masa muscular y
MEDIDAS FARMACOLÓGICAS flexibilidad, pérdida de masa ósea, disminución de la nutrición del disco, síndrome de
desacondicionamiento cardiovascular y pérdidas económicas.
La lucha contra el dolor es muy importante para reducir la incapacidad sentida en esta
fase. La lumbalgia y la lumbociática aguda son la indicación de elección de los analgé- Son de destacar los trabajos que han estudiado la repercusión muscular del reposo en
sicos, los antiinflamatorios y de los relajantes musculares. Hay que prescribir un trata- cama. En el manual de Jeffrey se hace mención a una pérdida de 1-3% de la fuerza
miento antiálgico eficaz. Los analgésicos son utilizados de forma gradual según su po- muscular por día o un 10-15% a la semana.
tencia (nivel I, II y III recomendados por la OMS) solos o asociados a los antiinflamatorios
y relajantes en caso de resultar insuficientes. ¿Cuánto tiempo de reposo?
Los analgésicos tipo aspirina, paracetamol, tramadol o aines pueden ser suficientes. - Para las categorías diagnósticas 1 a 3:
Debemos tener en cuenta que en casos de dolor intenso esta justificado la utilización de • Los diversos grupos de expertos han elaborado las siguientes
opiodes mayores. Disponemos en la actualidad de fármacos opiodes mayores con gran recomendaciones: El reposo en cama no debe ser prescrito, solamente
eficacia analgésica y con mínimos efectos secundarios que facilitan la tolerancia. Los autorizado si la intensidad de los dolores lo precisa. El informe Québec afirma:
relajantes musculares son más efectivos que el placebo para disminuir la sintomatologia “El reposo en cama no es necesario para el dolor lumbar sin una irradiación
298 299
paciente musculoesquelético
significativa. No prescribir reposo en cama, autorizarlo solamente si la tura la presión intradiscal alcanza su valor más inferior (Nachemson, 1964). La posición
intensidad de los dolores lo necesita. Cuando se prescribe, no debe de durar de decúbito lateral o “posición fetal” también es considerada una buena posición para
más de dos días”. El reposo en cama debe ser lo más corto posible. Más allá aliviar el dolor lumbar o lumbociático. La posición de decúbito prono incrementa la lor-
de 5 días de reposo en cama, todo debe ser preparado para incitar al paciente dosis lumbar y es más irritante. Esta situación puede aliviarse cuando flexionamos una
a retomar progresivamente sus actividades. de las piernas.
Se han propuesto diferentes tipos de programas de ejercicios según la causa del dolor
¿Qué posición de reposo en cama? radicular: hernia discal, estenosis de canal, espondilolistesis...
En la fase aguda el propio paciente identifica la posición menos dolorosa o antiálgica.
Suele ser la posición de decúbito supino, con caderas y rodillas en flexión. En esta pos-
300 301
paciente musculoesquelético
TRACCIÓN LUMBAR
ORTESIS
La tracción lumbar es la técnica de tratamiento no farmacológico más y mejor analizada
en dolor radicular. Existen muchas modalidades de tracción. Aunque el mecanismo de Los corsés pueden tener su indicación y eficacia de forma puntual. Un corsé lumbar
acción no está claro, se basa en estirar las estructuras posteriores del raquis y aumentar reduce la carga en los discos lumbares realizando una “descarga externa” y limita mo-
el espacio intervertebral lo que sólo se consigue con fuerzas de tracción que superen el vimientos extremos perjudiciales y también ayudan a la incorporación rápida de las
40-50% del peso corporal. actividades habituales. Pueden realizarse mediante la colocación de un yeso o en ter-
moplástico. Y está especialmente indicado en los casos de inestabilidad de columna,
Revisando la literatura científica, la tracción lumbar en pacientes con radiculopatía pare- espondilolistesis o después de la cirugía de columna.
ce que reduce el dolor a corto plazo pero no modifica otros parámetros como la vuelta
a la actividad laboral. Las ortesis lumbares son una de las principales alternativas del tratamiento conserva-
dor de las espondilolísis y espondilolistesis sintomáticas del adolescente y adulto joven
y de las espondilolistesis degenerativas. Los datos disponibles indican que las ortesis
ESTIMULACIÓN ELÉCTRICA NERVIOSA TRANSCUTÁNEA (TENS) lumbares limitan la movilidad vertebral, permiten modificar el grado de lordosis lumbar y
podrían tener un efecto a nivel de la propiocepción. La indicación ideal sería un paciente
Es una técnica que trata de aliviar el dolor aplicando energía eléctrica a los nervios con dolor radicular en el que determinadas actividades o movimientos aumentan sig-
periféricos a través de electrodos colocados en la piel sobre la zona de máximo dolor. nificativamente los síntomas. En el dolor radicular secundario a patología discal, donde
Es una terapia que se suele utilizar como coadyuvante con otras medidas terapéuti- el dolor aumenta con la flexión anterior, se recomienda una ortesis en extensión (que
cas. Su modo de acción radica en el bloqueo de la transmisión nerviosa del impulso mantenga la lordosis), en estenosis de canal o espondilolistesis se podría utilizar una
doloroso. Es importante tener en cuenta la forma de onda, la duración del impulso, la ortesis en flexión (con corrección parcial de la lordosis).
frecuencia del pulso, y la intensidad de la corriente. Se pueden colocar sobre la zona la
zona dolorosa, a nivel del nervio periférico, sobre las raíces nerviosas o en puntos es-
pecíficos (puntos motores, puntos gatillo, de acupuntura...). El más habitual es colocar
los electrodos sobre la zona dolorosa o proximal en caso de hiperestesia o mala tole-
302 303
paciente musculoesquelético
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3.7.1 Introducción
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La radiculopatía cervical se define como la disfunción de la raíz nerviosa a nivel verte-
in a rat model of complex regional pain syndrome type II. Phys Ther. 2006;86(5):698-709.
bral provocando dolor y parestesias en los dermatomas correspondientes, debilidad
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treatments incorporating braces for low-back pain patients with retrodisplacement, spon-
dylolisthesis, or normal sagittal translation. Spine. 1993 ;18(13):1839-49. Es importante diferenciar clínicamente el dolor cervical común de la radiculopatía cer-
vical. El dolor cervical común, generalmente, cuando se irradia lo hace por la parte
- Standaert CJ, Weinstein SM, Rumpeltes J. Evidence-informed management of chronic low proximal del miembro superior y, aunque excepcionalmente la irradiación puede alcan-
back pain with lumbar stabilization exercises. Spine J. 2008 ;8(1):114-20. zar la parte más distal, no es típico, y no se asocia a signos neurológicos. Las raíces
- Tallarico RA, Madom IA, Palumbo MA. Spondylolysis and spondylolisthesis in the athlete. nerviosas más comúnmente afectadas son la C7 y C6, y eso se debe a la disposición
Sports Med Arthrosc. 2008;16(1):32-8. anatómica de la columna cervical, produciéndose una disminución del espacio fora-
minal desde C2-C3 hasta C6-C7. Las raíces nerviosas cervicales salen a través de los
- Thorsteinsson G, Stonnington HH, Stillwell GK, Elveback LR. Transcutaneous electrical sti- orificios intervertebrales por encima del cuerpo vertebral correspondiente, y se estima
mulation: a double-blind trial of its efficacy for pain. Arch Phys Med Rehabil. 1977;58(1):8-13. que la raíz nerviosa ocupa aproximadamente el 25-33% del espacio foraminal.
- Unlu Z, Tasci S, Tarhan S, Pabuscu Y, Islak S. Comparison of 3 physical therapy modalities for
El dolor radicular frecuentemente se irradia hasta la zona más distal de miembro superior
acute pain in lumbar disc herniation measured by clinical evaluation and magnetic resonance
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pudiendo alcanzar la zona de la mano, sobre todo en la afectación C6 y C7, asociado
a otros síntomas típicos de la radiculopatía como son la debilidad, las parestesias y las
- Valle-Jones JC, Walsh H, O’Hara J, O’Hara H, Davey NB. Hopking-Richards H. Controlled alteraciones de la sensibilidad en cada uno de los dermatomas y miotomas afectados.
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tion and treatment of low back pain. Cochrane Database Syst Rev. 2008 Apr 16;(2):CD001823.
Las radiculopatías pueden producirse por mecanismos compresivos o no compresi-
- Van Poppel MN, de Looze MP, Koes BW, Smid T, Bouter LM. Mechanisms of action of lum- vos. Entre las causas no compresivas se encuentran los procesos infecciosos (herpes
bar supports: a systematic review. Spine. 2000 15;25(16):2103-13. zoster, enfermedad de Lyme), avulsión de las raíces, infiltración tumoral y la infiltración
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La mayoría de las radiculopatías se originan por compresión de las raíces nerviosas. La
- Walsh DM, Howe TE, Johnson MI, Sluka KA. Transcutaneous electrical nerve stimulation for patogénesis de la radiculopatía permanece siendo desconocida, y se considera que
acute pain. Cochrane Database Syst Rev. 2009 15;(2):CD006142. la causa mecánica no es suficiente para provocar dolor, siendo necesario mediadores
químicos dentro de un proceso inflamatorio asociado que afecta tanto a las neuronas
- Walsh DM, McAdams ET, Shealy N. TENS: clinical applications and related theory. New York: sensitivas como al disco intervertebral. Las causas más frecuentes son la hernia del
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disco cervical y la artrosis cervical, influyendo en la fisiopatología factores mecánicos
- Weiss HR, Dallmayer R. Brace treatment of spinal claudication in an adult with lumbar scolio- e inflamatorios.
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En la población joven, la radiculopatía cervical es el resultado de una hernia de disco
- Ying KN, While A. Pain relief in osteoarthritis and rheumatoid arthritis: TENS. Br J Community o una lesión traumática. La hernia de disco supone el 20-25% de los casos de la ra-
Nurs. 2007;12(8):364-71. diculopatía cervical.
312 313
paciente musculoesquelético
En la población anciana, las causas de la radiculopatía cervical se deben a los fenó- Exploración
menos degenerativos, a la disminución de los agujeros de conjunción por la formación
osteofitos, la perdida de altura del disco, los cambios degenerativos de las articulacio- El examen físico debe incluir inspección, la palpación, la movilidad tanto activa como
nes unco-vertebrales y facetarias. pasiva, y las maniobras específicas. El examen neurológico no está indicado de mane-
ra rutinaria en el dolor cervical común, pero adquiere especial relevancia en los casos
Los factores de riesgo asociados son aquellas actividades con cargas pesadas que re- de dolor radicular.
quiere el levantamiento de pesos, ser fumador, conductores y operarios de actividades
con vibración. Otras causas menos frecuentes incluyen los tumores de columna, los La exploración física es fundamental en la orientación diagnostica de una radiculo-
quistes sinoviales, la condromatosis sinovial en las articulaciones facetarias, la arteritis patía, sin embargo, los hallazgos físicos no nos permiten excluir el diagnóstico de
de células gigantes de las arterias cervicales y las infecciones de columna. radiculopatía. Lauder y colaboradores demostraron que pacientes con evidencia de
diagnóstico de radiculopatía mediante estudios electrofisiológicos en al menos el 31%
Epidemiologia: En EEUU la prevalencia es de 3,5 casos/1000 en la zona cervical, sien- de ellos no se encontraron datos de debilidad muscular, y en el 45% no se detectaron
do el pico de edad de presentación en torno a los 60 años. Dentro de los factores alteraciones de la sensibilidad. Basándose en este estudio es fácil encontrarnos con
de riesgo asociados, además de la edad, son los episodios previos de dolor cervical, una exploración normal en un paciente con radiculopatía. Como se ha mencionado an-
factores de ocio y ocupacionales. teriormente existe un solapamiento en la distribución sensorial de los dermatomas por
la inervación de más de un nervio espinal y, ocurre de manera similar en la distribución
de los miotomas, pudiendo no apreciarse la debilidad muscular hasta casos severos
de radiculopatía.
3.7.2 Diagnóstico
La exploración neurológica es fundamental cuando se sospeche una radiculopatía, y
Es importante la realización de una historia clínica detallada. En la anamnesis hay que
debe incluir la exploración de la fuerza muscular, sensibilidad y reflejos osteotendino-
recoger los aspectos más relevantes de su sintomatología (dolor y su repercusión fun-
sos de los miembros superiores.
cional, parestesias, pérdida de fuerza). El paciente con una radiculopatía típica presen-
ta un dolor cervical irradiado por el miembro superior de comienzo insidioso. Es típico Función motora
que el dolor se irradie por el borde medial de la escapula.
Hay que hacer especial hincapié en la valoración de la fuerza muscular para detectar
En ocasiones, los pacientes van a referir reducción de la sintomatología dolorosa ra- la presencia de una afectación radicular y detectar la debilidad de los músculos del
dicular con la abducción del hombro y colocando la mano por detrás de la cabeza. miotoma afecto. Para ello, se debe colocar el miembro afecto en una posición antigra-
vitatoria y aplicar una resistencia de proximal a distal. La fuerza se puede cuantificar
Esta sintomatología dolorosa se acompaña de alteraciones sensoriales a lo largo del
mediante la gradación del 0 al 5 de la escala de la British Medical Council (BMC).
dermatoma de la raíz nerviosa que incluye la perdida de sensibilidad, el adormecimien-
to y los calambres. Las alteraciones motoras se expresan en forma de debilidad de los De acuerdo al nervio afectado, la clínica será:
miotomas afectados.
- Radiculopatía C5: se caracteriza por la debilidad en la abducción del hombro.
También es importante analizar los factores desencadenantes o agravantes, estos El test en la exploración es solicitar al paciente la abducción del hombro contra
pacientes refieren un aumento del dolor con las posiciones del cuello que provocan la resistencia del explorador. Foto 5
una disminución foraminal como la extensión, la flexión lateral o la rotación lateral hacia - Radiculopatía C6: se caracteriza por debilidad en la flexión de codo y
el lado sintomático. Los factores que pueden aliviar la sintomatología es la posición del extensión de muñeca. Foto 6
paciente cuando coloca su mano detrás de la cabeza. - Radiculopatía C7: se caracteriza por debilidad extensión codo y flexión de
muñeca.
- Radiculopatía C8: se caracteriza por debilidad en la extensión del 1º dedo y
desviación cubital de la muñeca.
314 315
paciente musculoesquelético
Sensibilidad: en el examen sensorial es importante recoger la disminución o la per- diferentes situaciones patológicas como la esclerosis múltiple, lesiones traumáticas
dida de sensibilidad en la distribución del dermatoma correspondiente. Sin embargo, en la región cervical, tumores medulares cervicales, artrosis cervical y deficiencias de
existe en la actualidad una falta de consenso para precisar la localización específica de vitamina B12.
los dermatomas por las conexiones existentes entre las raíces nerviosas, las diferentes
modalidades sensoriales en una zona concreta, y la dificultad para delimitar el derma- Existen limitaciones en la literatura científica disponible sobre la efectividad del signo de
toma correspondiente. Lhermitte para el diagnóstico de la radiculopatía cervical (Malanga)
Reflejos osteotendinosos: Es el signo clínico más objetivo en la exploración neuro- Test de abducción del hombro
lógica y son importantes a la hora de valorar a los pacientes con afectación radicular El signo de abducción del brazo consiste en el alivio del dolor de la extremidad supe-
cervical. Cualquier nivel de amplitud de reflejos puede ser normal si son simétricos, rior al abducir el brazo y flexionar el codo, lo que se consigue llevando la mano de la
en caso de hiporreflexia habría que pensar en una causa periférica (plexo, raíz, nervio extremidad afecta a la parte superior de la cabeza.
periférico), en caso de piramidalismo (exaltación de reflejos con aumento de área, re-
flejo cutáneo plantar extensor y/o signo de Hoffman positivo en miembros superiores) El test es positivo si el paciente se encuentra más cómodo en esta posición y el dolor
habría que sospechar un origen central de la lesión (cerebral, espinal). de la extremidad superior se alivia parcial o completamente.
El reflejo del biceps braquial se obtiene golpeando en el tendón a nivel de la fosa cubi- Aunque existe poca evidencia disponible sobre la sensibilidad y la especificidad de
tal anterior. Este reflejo se produce a un nivel C5-C6. El reflejo braquiradial se obtiene esta prueba diagnóstica, se ha considerado una prueba predictiva de la excelente
golpeando sobre el aspecto radial de la muñeca, y refleja un nivel C5-C6. El reflejo respuesta al tratamiento quirúrgico.
tricipital se obtiene golpeando el tendón distal en la cara posterior del codo con una El test de abducción de hombro tiene un efecto positivo de mejoría de los síntomas.
flexión de 90º. Este reflejo representa un nivel C7-C8.
Distracción manual cervical
Otra maniobra específica es la distracción manual cervical. El paciente se coloca en
Test de maniobras especificas posición supina y se realiza una distracción manual que provoca una reducción de la
sintomatología tanto a nivel cervical como de la extremidad en los pacientes con radi-
El test de compresión foraminal o el test de Spurling culopatía. Al igual que en el test de Spurling, esta maniobra exploratoria presenta un
Es probablemente el mejor test para confirmar el diagnóstico de radiculopatía cervical. baja sensibilidad y una alta especificidad.
Revisiones recientes en los últimos años demuestran que éste test tiene una baja sen-
sibilidad y una alta especificidad. En un estudio reciente realizado en el año 2004 lleva- En resumen, debemos sospechar una radiculopatía cervical ante un paciente con dolor
do a cabo por Shah and Rajshekhar encontraron que este test tiene una sensibilidad cervical que se irradia por el miembro superior y zona escapular, junto a otros sínto-
del 92% y una especificidad del 95%, llegando a la conclusión de que esta prueba es el mas como parestesias, adormecimiento, debilidad y alteración de los reflejos osteo-
test de referencia para evaluar la radiculopatía cervical. Se realiza colocando el cuello musculares. Los test clínicos específicos más recomendados son el test de Spurling
del paciente en extensión y la cabeza rotada, aplicando una presión hacia debajo de la y el test de abducción del hombro en aquellos pacientes con signos y síntomas con
cabeza. Se considera positivo si el dolor se irradia por el miembro ipisilateral del lado sospecha de radiculopatía.
de la cabeza hacia donde esta rotada. Este test se considera que es muy específico
(93%) pero poco sensible (30%) para el diagnóstico de una radiculopatía aguda, pero
aunque no es útil para el diagnóstico de screening es útil para confirmar el diagnóstico 3.7.3 Diagnóstico diferencial
de una radiculopatía cervical.
En el diagnóstico diferencial de la patología compresiva de la raíz nerviosa a nivel cer-
Signo de Lhermitte vical debe considerarse otras patologías musculo-esqueléticas. En el cuadro clínico de
Se define como la sensación eléctrica producida con la flexión del cuello que se irradia dolor irradiado y parestesias es necesario hacer el diagnóstico diferencial con las neu-
distalmente a lo largo de la columna y extremidades. Este hallazgo esta descrito en ropatías periféricas compresivas del nervio mediano o cubital, y con menor frecuencia
316 317
paciente musculoesquelético
la alteración de los nervios de la extremidad superior. También con otros cuadros clíni- PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
cos como el síndrome del desfiladero torácico (raíces más afectadas son la C8-T1) jun-
to con alteraciones vasculares en las maniobras de exploración, el tumor de Pancoast Radiografía:
que, junto con las alteraciones motoras y sensitivas de las raíces nerviosas se produce La radiografía cervical es una de las principales pruebas diagnósticas que se suele
el síndrome de Horner caracterizado por miosis y ptosis palpebral. El síndrome de Par- indicar ante un dolor cervical. En los casos que se sospeche una radiculopatía está in-
sonage Turner es una alteración rara que se caracteriza por dolor agudo y brusco en dicada la realización de una radiografía en proyección oblicua para valorar la estenosis
la zona del hombro junto con una parálisis flácida de toda la musculatura del hombro. foraminal en el nivel que se sospeche la radiculopatía.
Otro trabajo realizado por DePalma y Sabin comparo el tratamiento conservador con A continuación se describen los diferentes tratamientos farmacológicos recogidos en
el quirúrgico en 384 pacientes con radiculopatía cervical y se encontraron que sólo la literatura para el tratamiento del dolor de manera específica en la radiculopatía, aun-
el 29% de los pacientes con tratamiento conservador obtuvieron mejoría de los sín- que en muchas ocasiones se asimile al dolor neuropático general provocado por otras
tomas. Un estudio relativamente reciente realizado por la Mayo Clinic demuestra que causas.
alrededor del 90% de los pacientes presenta síntomas leves o están asintomáticos a
Analgésicos no opioides
los 4-5 años de seguimiento, pero hasta en un quinto de los pacientes el tratamiento
El paracetamol se utiliza de elección en el tratamiento del dolor lumbar y también pude
no mejora la sintomatología y es necesaria la cirugía. Las recurrencias pueden aparecer
utilizarse en los pacientes con radiculopatía. A pesar de la falta de evidencia que apoye
hasta en un 12,5% durante un periodo de seguimiento de 1 a 2 años.
la eficacia del paracetamol en el tratamiento de la radiculopatía, el American College
of Physicians recomienda su utilización como primera línea de tratamiento analgésico.
318 319
paciente musculoesquelético
Opioides - Los antidepresivos tricíclicos (TCAs) son fármacos bien estudiados para el
También se utilizan en el tratamiento. Se ha demostrado la eficacia de los opioides en manejo del dolor neuropático con una acción analgésica independiente de su
el manejo del dolor neuropático de la radiculopatía cervical, aunque la mayoría de los efecto antidepresivo, y bien tolerados excepto a dosis elevadas.
estudios disponibles se han realizado sobre pacientes con dolor neuropático provoca-
do por otras causas diferentes a la radiculopatía cervical o lumbar. Antiepilépticos
Existen estudios que han demostrado la eficacia de la gabapentina en el manejo del
Antiinflamatorios (AINES) dolor radicular observándose alivio del dolor, y mejoría de la función motora y sensitiva.
Los AINES pueden ser utilizados a corto plazo en el manejo del dolor a causa de una Un estudio similar con pregabalina sobre 1.304 pacientes comparado con paraceta-
radiculopatía, pero no están indicados como uso crónico, especialmente en la pobla- mol, AINES o tramadol, encontraron una reducción significativa de la severidad del
ción anciana, por sus efectos secundarios y el riesgo de lesiones gastrointestinales. dolor en aquellos que habían sido tratados con pregabalina, tanto en síndromes de
Tienen tanto propiedades analgésicas como antiinflamatorias. Entre los diferentes ti- dolor neuropático periférico como central. Ambos fármacos son bien tolerados y tienes
pos existentes existen pocas diferencias en cuanto a tolerabilidad, sin embargo, exis- unos efectos secundarios similares, no habiéndose demostrado una eficacia superior
ten pequeñas diferencias en eficacia. de uno frente al otro.
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paciente musculoesquelético
322 323
paciente musculoesquelético
Cuando se ha ido mejorando el recorrido articular y la fuerza muscular se puede iniciar - Pena M. Etodolac: analgesic effects in musculoskeletal and postoperative pain. RheumatolInt
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el programa de ejercicios de fortalecimiento en un solo plano que incluye la flexión,
extensión, inclinación lateral y la rotación. Además, la estabilización de la musculatura - Saldaña MT, Navarro A, Perez C, et al. A cost-consequences analysis of the effect of prega-
escapular, incluido el trapecio, el romboides, el serrato anterior, deben iniciarse el forta- balin in the treatment of painful radiculopathy under medical practice conditions in primary
lecimiento isotónico. La realización de los ejercicios debe realizarse sin dolor. El trabajo care settings. Pain Pract 2010; 10 (1): 31-41.
muscular de fortalecimiento se realiza mediante técnicas de resistencia muscular y
- Shin BC, Kim SD, Lee MS. Comparison between the effects of Chuna manipulation theraphy
técnicas de propiocepción.
and cervical traction treatment on pain in patients with herniated cervical disc: a randomized
El ejercicio isocinetico cervical y del miembro superior no son funcionales y no están clinical pilot trial. Am J Chin Med 2006; 34: 923-5
recomendados como técnica de tonificación en estos pacientes. - Spurling R, Segerberg L. Lateral intervertebral disk lesions in the lower cervical region. JAMA
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Los pacientes deben realizar de manera individualizada un programa de estiramientos
y fortalecimiento y continuar con esa pauta después del aprendizaje bajo una super- - Walker MJ, Boyles RE, Young BA et al. The effectiveness of manual physical therapy and
visión. exercise for mechanical neck pain: a randomized controlled trial. Spine 2008; 33: 2371-8.
También se aconseja la educación postural tanto para la actividad diaria como depor- - Best Evidence] Kuijper B, Tans JT, Beelen A, Nollet F, de Visser M. Cervical collar or physio-
tiva. therapy versus wait and see policy for recent onset cervical radiculopathy: randomised trial.
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326 327
paciente musculoesquelético
3.8.1 Introducción El diagnóstico es clínico: el paciente refiere dolor puntual circunscrito a un nódulo den-
tro de una banda tensa palpable en un músculo, y reconoce el dolor evocado por la
Un punto gatillo miofascial (PGM), tal y como definió J. Travell, es una zona hiperi- presión de ese punto sensible como “su dolor”.
rritable en un músculo esquelético, asociada a un nódulo palpable e hipersensible, lo-
calizado en una banda tensa. Estos puntos gatillo son dolorosos a la compresión (dolor Las exploraciones complementarias que podemos utilizar son los test de laborato-
directo) y pueden provocar un dolor referido característico (punto “gatillo), así como rio y pruebas de imagen para descartar otras patologías, la electromiografía (EMG) de
hipersensibilidad a la presión referida, disfunción motora y fenómenos autonómicos, lo aguja o de superficie para estudiar las disfunciones motoras.
que constituye el llamado SDM.
3.8.5 Tratamiento
3.8.2 Etiología
El tratamiento es básicamente manual, utilizando técnicas Musculares, dirigidas a
La hipótesis de los PG combina aspectos electrofisiológicos e histológicos, que indican la inactivación del punto gatillo.
que un PG es esencialmente una región de múltiples placas motoras disfuncionales,
Técnicas de masaje: incluye el masaje de deslizamiento profundo y las técnicas de
cada una de las cuales se asocia a una sección de la fibra muscular contraida al máxi-
fricción. El objetivo es eliminar o disminuir el tamaño del PG y su inactivación mediante
mo (nodo de contracción, o contractura mantenida de las sarcómeras).
tracciones o deslizamientos dirigidos hacia las inserciones siguiendo la banda tensa
La activación de un PG se asocia habitualmente a un traumatismo, una sobrecarga con los dedos desde la inserción distal del músculo hasta la región proximal. Alternati-
muscular, aguda, mantenida o repetitiva, o una compresión nerviosa (en el caso de vamente se puede asociar técnicas de fricción longitudinal y transversal.
músculos paravertebrales).
Técnicas de compresión: se trata de oprimir estática y dinámicamente el PG duran-
te un tiempo variable para conseguir su inactivación. Existen diferentes modalidades,
compresión plana, rodada, con manipulación, con estiramiento directo o con termote-
3.8.3 Clínica rapia con frio. La cantidad de presión que debe realizarse es variable.
Los pacientes se quejan de dolor regional sordo, mal localizado, frecuentemente el Técnicas de estiramiento: el estiramiento puede hacerse con frio intermitente, me-
dolor se refiere a distancia del PG, en un patrón característico de cada músculo, que diante la estimulación cutánea con frio mientras se realiza el estiramiento del músculo
puede simular desórdenes médicos graves, que debemos descartar. Además pueden afecto. El estimulo térmico inhibe la contracción y permite que se estire el músculo sin
presentar alteraciones sensitivas, disfunciones autonómicas (sudoración anormal, dolor. Otra modalidad dentro de las técnicas de estiramiento es el estiramiento pasivo
salivación ó lacrimeo persistentes, alteraciones propioceptivas...) alteraciones moto- que se utiliza poco debido a que puede provocar más dolor.
ras (espasmo muscular, debilidad muscular, baja tolerancia al esfuerzo...) y alteracio-
nes del sueño. Técnicas neuromusculares. Están basadas en los principios neurofisiológicos de la
función motora y contracción muscular y se basan en tres principios fundamentales:
El examen del músculo revela un dolor puntual (nódulo), dentro de una banda tensa la relajación post-contracción, la inhibición recíproca y la facilitación central. Dentro de
palpable de fibras musculares (en ocasiones la banda tensa es inaccesible a la pal- las técnicas neuromusculares hay que destacar las técnicas de energía muscular, en
pación) La presión de dicho nódulo genera un dolor local así como dolor referido que las que el paciente realiza contracciones musculares dirigidas por el clínico con un fin
sigue los patrones descritos por J. Travel, una respuesta de espasmo local (REL) y terapéutico. Dentro de estas técnicas se puede realizar la contracción isométrica con
una limitación dolorosa de la amplitud de movimiento al estiramiento además de cierta inhibición recíproca mediante la contracción de los músculos antagonistas con el obje-
debilidad en ese músculo. to de relajar los músculos agonistas acortados, con PG. La contracción isométrica con
relajación pos isométrica sin estiramiento mediante la contracción de los agonistas,
328 329
paciente musculoesquelético
aumentando poco a poco el arco articular, sin estiramiento franco. Y la contracción - Estimulación magnética periférica repetitiva
isométrica con relajación postisométrica con estiramiento. Se contraen los agonistas y Se ha comunicado inactivación a corto y medio plazo de PG tras el tratamiento con
tras la relajación, se estira el músculo y se aumenta el arco articular. pulsos magnéticos superficiales, con 10 sesiones de estimulación repetitiva (4000 es-
tímulos magnéticos en 5 trenes de 20 HZ durante 20 minutos), sobre puntos miofas-
La relajación muscular post-isométrica es una técnica muy utilizada dentro del trata- ciales (Smania, 2003).
miento miofascial. Durante los movimientos respiratorios se favorece la contracción du-
rante la inspiración y la relajación durante la espiración de la mayoría de los músculos. - Láser de baja potencia
El Láser, al igual que el TENS, se ha utilizado en un amplio abanico de procesos doloro-
Técnicas de liberación miofascial so crónicos. También ha sido recomendado en el tratamiento del SDM, con indicacio-
Dentro de esta denominación se encuadran diversas prácticas de estiramiento de par- nes siempre controvertidas y gran variabilidad en la selección del tipo de láser, la dosis
tes blandas, estiramiento del tejido conjuntivo y de la fascia subyacentes que pueden y el modo de aplicación. Se han descrito mejoras del dolor y del umbral doloroso con
conseguir un efecto indirecto de inactivación de los PG. el láser de baja potencia combinado con el estiramiento (Hakguder, 2003).
Una de las maniobras más practicadas consiste en realizar pliegues de tejido celular - Iontoforesis
subcutáneo en sentido inverso, entre ambos pulgares estirando la zona a tratar en La iontoforesis consiste en la introducción de un medicamento a través de la piel me-
direcciones contrarias. diante la aplicación de corriente galvánica. Se realiza aplicando el electrodo activo so-
bre la zona a tratar con un colector o una esponja empapada en el fármaco. El electro-
Pinzado rodado y despegamiento de tejidos: consiste en despegar la piel y el tejido
do opuesto se sitúa en la línea en la que se desea que se introduzca la medicación. La
celular subcutáneo de los planos subyacentes mediante el simple levantamiento o es-
migración de la corriente galvánica de uno a otro polo se acompaña de la movilización
tiramiento o el pinzado entre el pulgar y el índice. Este tratamiento se recomienda para
iónica del fármaco, cuya ubicación en ánodo o cátodo dependerá de la propia carga
PG superficiales y también para PG asociados a cicatrices dolorosas.
iónica del preparado.
Técnicas de Electroterapia
Se ha utilizado la iontoforesis con anestésico local, concretamente con lidocaína al 1
- Ultrasonido (US)
% y se ha descrito una mejoría estadísticamente significativa, pero con un tamaño de
El US es, posiblemente, el método electroterápico más utilizado en el tratamiento del
efecto de dudoso valor clínico (Evans, 2001).
SDM, por sus efectos físico, mecánico y térmico.
Parches de anestésico local
- Estimulación eléctrica nerviosa transcutánea (TENS)
Se ha utilizado parches de procaína o de lidocaína situados sobre PG superficiales. Se
El TENS es una modalidad de electroterapia analgésica muy difundido. Se ha utilizado
sitúa una cantidad de pasta anestésica (similar al volumen de una avellana) sobre la
en numerosos cuadros de dolor crónico que han mostrado utilidad en el alivio del do-
zona a tratar y se encierra en un apósito oclusivo. Al cabo de 45 minutos el anestésico
lor. Alguna de las modalidades sugeridas para el tratamiento específico de los PG es
se absorbe por vía percutánea y, en caso de haber alcanzado el PG, puede conseguir
un TENS de baja frecuencia (10 HZ), durante 20 minutos, con los electrodos situados
su inactivación (Dalpiaz, 2002). Se recomienda añadir estiramiento posterior.
sobre la zona de irradiación del dolor.
Punción Seca
- Estimulación eléctrica interferencial
El tratamiento del dolor miofascial mediante la punción seca es otra alternativa para el
Existen numerosas variantes de electricidad aplicada con objetivos analgésicos. Uno
tratamiento de los puntos gatillo.
de ellos es la terapia interferencial denominada así porque se produce un campo eléc-
trico entre los electrodos de aplicación. Se ha sugerido también que esta corriente, La punción seca se basa en la inactivación de los puntos gatillo por un estímulo me-
cuyo efecto analgésico es bien conocido, puede ser útil en la inactivación de PG (Jen- cánico directo. Se han descrito diversas técnicas para la inserción de las agujas, así
son, 2002). Una modalidad recomendada consiste en aplicar derivaciones bipolares o como algunas variaciones en el tiempo de duración del tratamiento.
tetrapolares con frecuencias de interferencia bajas (80-100 HZ), alrededor del PG, en la
dirección de las fibras musculares y con una intensidad umbral.
330 331
paciente musculoesquelético
- Estimulación eléctrica nerviosa percutánea (PENS): - Hakguder A, Birtane M, Gurcan S, Kokino S, Turan FN. (2003). Efficacy of low level laser the-
En esta técnica se integra la técnica oriental con la neuroanatomía occidental. rapy in myofascial pain syndrome: an algometric and thermographic evaluation. Lasers Surg
Med. 2003;33(5):339-43.
Las agujas se insertan a lo largo de los dermatomas, miotomas y esclerotomas incrimi-
nados en el dolor. Las agujas son estimuladas por corrientes de diversas frecuencias - Jenson MG. (2002) Reviewing approaches to trigger points decompression. Physician assis-
tant, (2002). 26 (12): 37-41.
para buscar un efecto analgésico. Este procedimiento se basa e en el concepto de
dolor miofascial neuropático, según el cual la aparición de puntos gatillo se produce - Smania N, Corato E, Fiaschi A, Pietropoli P, Aglioti SM, Tinazzi M. (2003) Therapeutic effects
por una irritación segmentaria y radicular (Weiner, 2004). of peripheral repetitive magnetic stimulation on myofascial pain syndrome. Clin Neurophysiol.
2003 Feb;114(2):350-8
- Infiltración muscular:
Se pueden realizar en esteroides con/sin anestésico local o sólo con anestésico local. - Weiner DK, Ernst E. (2004). Complementary and alternative approaches to the treatment of
En pacientes determinados se puede realizar con toxina botulínica (ver capítulo de persistent musculoskeletal pain. Clin J Pain. 2004 Jul-Aug;20(4):244-55.
intervencionismo). - Wheeler AH. (2004) Myofascial pain disorders: theory to therapy. Drugs. 2004;64(1):45-62.
332 333
paciente musculoesquelético
3.9 Artrosis: grandes articulaciones: rodilla y cadera 3.9.2.2 Relación de la prevalencia e incidencia con factores poblacionales
334 335
paciente musculoesquelético
prevalencia de la artrosis de rodilla en España se estableció en el 10.2% (IC 95%: 8.5- 3.9.3.1 Cartílago articular
11.9). Con respecto a la artrosis de manos, el 8.1% de los encuestados refirieron tener
dolor en una o las dos manos en el día de la encuesta, o la mayoría de los días del mes 1.- El condrocito. Es la única estirpe celular del cartílago articular y es el elemento cla-
previo. De todos éstos, el 54.2% cumplía los criterios diagnósticos clínicos de la ACR ve en el mantenimiento de la homeostasis de la matriz extracelular cartilaginosa. Para
para la artrosis de manos. La prevalencia de la artrosis de manos se estimó, por tanto, perpetuar dicha homeostasis, es importante el mantenimiento del número de células.
en España en el 6.2% (IC 95%: 5.9-6.5). Dicho mantenimiento depende de un equilibrio entre la mitosis y la muerte celular. En
la artrosis, se produce una importante disminución del número de células, en la que
En relación a la calidad de vida de estos pacientes, estudiada también en el estudio juega un papel muy relevante la muerte celular por apoptosis. Este mecanismo se de-
EPISER, se puso de manifiesto que la enfermedad produce una disminución de dicho tecta principalmente en las zonas superficiales e intermedias del cartílago. Aunque no
valor, tanto en el componente físico como en el mental. todos los mecanismos que conducen a la apoptosis son conocidos, sí parece clara la
implicación de mediadores celulares identificados como el óxido nítrico (NO), la inter-
leuquina 1-beta (IL-1β) y el factor de necrosis tisular alfa (TNF-α).
3.9.3 Etiopatogenia El NO inhibe la proliferación condrocitaria y es un importante inductor de apoptosis.
El NO presente en el proceso artrósico, así como las alteraciones que provoca en la
La destrucción del cartílago articular (Figura 1) es el hecho más característico de la
cadena respiratoria mitocondrial, conducirían a un aumento de la apoptosis.
artrosis, así como el tejido en el que se inicia la enfermedad. En los últimos años, se
está considerando al cartílago articular y al hueso subcondral como una unidad fun- 2.- Metaloproteasas. Desde un punto de vista enzimático, el elemento más impor-
cional interdependiente, que constituiría la verdadera unidad fisiopatológica. El hueso tante en la degradación del cartílago son las proteasas. Existen cuatro familias de pro-
subcondral no es un tejido silente y, de hecho, existen factores catabólicos producidos teasas: metaloproteasas, serinproteasas, cisteinproteasas y aspartatoproteasas. En
en el tejido óseo subcondral que son capaces de penetrar en el cartílago, favoreciendo esta degradación intervienen, sobre todo, las metaloproteasas. Son endopeptidasas,
su ruptura. Por otra parte, últimamente se está considerando a la membrana sinovial capaces de cortar a las proteínas en el interior de las cadenas peptídicas. Se dividen en
como uno de los máximos responsables en la progresión de la enfermedad. diferentes grupos en función de la preferencia de sustratos. Dentro de ellas, se encuen-
tran las colagenasas, las cuales son, hasta el momento, las enzimas proteolíticas más
estudiadas. Su principal función radica en la degradación de los colágenos fibrilares.
Figura 1. Cartílago articular En condiciones normales, el metabolismo del colágeno es extraordinariamente lento.
Los niveles de dichas enzimas se elevan en determinados procesos patológicos como
la artrosis, donde se dan fenómenos de destrucción matricial.
336 337
paciente musculoesquelético
Por otro lado, algunos de los marcadores relacionados con la inflamación de la mem- Hueso subcondral
brana sinovial, como el propéptido amino-terminal del colágeno tipo II, la COMP, el áci- El hueso subcondral de las articulaciones afectas de artrosis es rígido y de aspecto
do hialurónico y la proteína C reactiva se han relacionado también con la enfermedad denso, aunque recientes estudios demuestran en dicho hueso un defecto en la mi-
artrósica y su progresión. neralización. No se conocen de forma completa los mecanismos que conducen a los
cambios observados en el hueso subcondral de los pacientes artrósicos, pero deter-
Los mecanismos por los cuales la sinovitis se relacionaría con el proceso artrósico minados estudios demuestran que no se deben únicamente a las repercusiones de la
son diversos. En este sentido, se han propuesto como factores desencadenantes las sobrecarga mecánica sobre un determinado tejido. Así, por ejemplo, se han encon-
sobrecargas mecánicas de la articulación, los microcristales y determinados produc- trado niveles elevados del factor de crecimiento de la insulina (IGF) en estos pacientes
tos procedentes de la degradación del cartílago, capaces de actuar como partículas en zonas alejadas de la articulación afecta, lo que sugiere que, en las personas que
antigénicas en respuesta a las cuales la membrana sinovial sintetizaría una serie de padecen artrosis, puede estar aumentada la rigidez ósea.
mediadores bioquímicos que son, a su vez, reconocidos componentes del sistema
catabólico de destrucción de la matriz cartilaginosa. Además, en el hueso subcondral de las articulaciones artrósicas, se detecta una des-
proporción del cociente RANKL/osteoprotegerina (OPG) a favor de RANKL, lo que
2.-Mediadores de la inflamación. La IL-1β es el prototipo de molécula proinflamato- conlleva a un aumento de la reabsorción ósea (Figura 2).
ria favorecedora de los procesos catabólicos del condrocito. Es conocida también su
capacidad para activar la isoforma inducible de la sintetasa del NO (iNOS), aumentan- Figura 2. Sistema RANK-RANKL/OPG
do, de esta forma, los niveles de NO. Interviene también impidiendo los intentos de re-
paración de la matriz cartilaginosa, inhibiendo la síntesis de colágeno tipo II y agrecano
y aumentando la producción de colágeno tipos I y III. PRECURSOR
OSTEOCLASTO DIFERENCIA
El TNF es también una citoquina importante en el proceso de destrucción matricial y, CIÓN Y
ACTIVACIÓN
en consecuencia, estaría presente en el cartílago de pacientes afectos de artrosis.
RANK
- Eicosanoides: es un hecho conocido que el cartílago de pacientes artrósicos tiene la
N
capacidad de liberar PGE-2, que, a su vez, juega un papel importante como mediador BICIÓ
de la inflamación articular. La PGE-2 desempeña también un papel en el proceso de RANKL INHI
destrucción tisular, al facilitar el aumento de metaloproteasas y de otros mediadores
del fenómeno inflamatorio, facilitando la angiogénesis. OPG OSTEOCLASTO MADURO
Y ACTIVO
- Óxido nítrico: el NO es un radical libre gaseoso producido por la iNOS. Diferentes RANKL
estudios demuestran que la producción excesiva de NO por los condrocitos, como OPG
respuesta al estímulo de diversos factores catabólicos como la IL-1β, TNF-α, IL-17 OSTEOCLASTO / CÉLULAS OPG
e IL-18, juega un papel importante en la perpetuación de la destrucción cartilaginosa ESTROMALES
en la artrosis. Por otro lado, se detectan concentraciones aumentadas de nitritos en
el líquido sinovial, así como la presencia de iNOS en sinoviocitos y condrocitos en pa-
cientes afectos de esta enfermedad. Cargas biomecánicas y artrosis
Las cargas mecánicas sobre las articulaciones son necesarias para el mantenimiento
El NO tiene un papel importante en la destrucción de cartílago a través de múltiples de la homeostasis de la matriz extracelular, que es, en definitiva, la que confiere al
mecanismos, como son la inhibición de la síntesis de colágeno y proteoglicanos, la cartílago sus propiedades fisicoquímicas. De hecho, el cartílago es un tejido avascular,
activación de metaloproteasas, la apoptosis y el aumento de la capacidad lesiva de cuya nutrición depende de un proceso de difusión simple desde la superficie articular
otros oxidantes. o desde el hueso subcondral. En este sentido, tanto la inmovilización como un exceso
de presiones sobre el cartílago provocan una reducción de la síntesis de elementos
338 339
paciente musculoesquelético
estructurales de la matriz cartilaginosa. Existen evidencias ex vivo de que las cargas Tabla 1. Factores de riesgo de artrosis
articulares pueden modificar la composición y la función del sistema de proteasas y
mediadores proinflamatorios, promoviendo, finalmente, el catabolismo de la matriz.
Factores no modificables Factores modificables
Sistema nervioso y artrosis 1.-Edad: la incidencia de la enfermedad aumenta con 1.-Obesidad: causa de artrosis
Diferentes neuropéptidos juegan un papel destacado en la fisiopatología de la artrosis. la edad
De hecho, la sustancia P y otros neuropéptidos, como la metencefalina, han sido iden- 2.-Sexo: predominio sexo femenino 2.-Actividad física: deporte de alta competición
tificados en los condrocitos de las áreas más dañadas de las articulaciones artrósicas. acelera la enfermedad
3.-Raza: afroamericanos mayor frecuencia de 3.-Actividad laboral: relación con artrosis de manos,
Cristales y artrosis
gonartrosis. Caucásicos menor afectación de cadera. rodilla y cadera
Los cristales más frecuentemente asociados a la artrosis son los de pirofosfato cálcico
dihidratado (Figura 3) y los de fosfato cálcico básico. En cuanto a la relación patogé- 4.-Factores genéticos: contribución genética 50-65% 4.-Hormonas sexuales: aumento de prevalencia en
nica entre éstos y la enfermedad, cabe decir que se ha observado que, en formas postmenopausia
hereditarias de condrocalcinosis, la detección radiológica de los cristales precede a los 5.-Densidad mineral ósea: relación inversa con
signos degenerativos radiográficos de artrosis. Posteriormente, estudios prospectivos artrosis
han demostrado que la presencia en el líquido sinovial de estos cristales es capaz de 6.-Nutrición: papel protector vitaminas C y D
predecir una mala evolución clínica y radiológica de la artrosis. A nivel experimental, se
ha observado que los cristales que contienen calcio son capaces de inducir in vitro la Clasificación
secreción de diversas metaloproteasas.
Existen múltiples clasificaciones para la artrosis, siendo la más conocida aquella que
las divide en primarias y secundarias, en función a su etiopatogenia (Tabla 2). Por otra
Figura 3. Cristal de pirofosfato cálcico dihidratado parte, también debe destacarse la clasificación según criterios topográficos, que divide
a la enfermedad en formas localizadas y generalizadas (siendo estas últimas aquellas
que afectan a tres o más localizaciones).
1.- Idiopática
-Localizada:
-Rodilla
-Cadera
-Mano
-Pie
-Columna
-Otras articulaciones
-Generalizada
sigue
340 341
paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
La afectación de la cadera en los pacientes con artrosis, aunque puede ser de evolu- 1.-Genética: No hay dudas sobre la influencia genética en la artrosis, que se estima
ción lenta, provoca dolor y cojera, alterando la calidad de vida de los enfermos. Como de entre el 40 al 65%, independientemente de factores ambientales o demográficos
en otras localizaciones, se aprecia una discordancia clínico-radiológica, especialmente conocidos. Esta conexión no sólo se basa en genes concretos de ciertos cromoso-
en fases iniciales. mas, en los que pueden aparecer mutaciones, sino que también pueden influir en el
desarrollo de la enfermedad por su efecto sobre el metabolismo de diversas proteínas
3.9.5.1 Epidemiología que participan en el metabolismo del cartílago o la matriz. Otra forma de actuar es por
propia influencia en los factores de riesgo de la enfermedad. Estudios en gemelos han
1.-Prevalencia. Como ocurre con la artrosis en general, la prevalencia de la enferme-
encontrado que el factor genético para el desarrollo de coxartrosis es de aproximada-
dad se incrementa con la edad. Varía, según los estudios, entre el 1-3% en menores de
mente el 60%. Uno de los genes más implicado es el del procolágeno tipo 2 (COL2A1),
50 años y entre el 3.5-5.6% en mayores de esta edad. Sin embargo, alcanza el 10% en
que es el componente más abundante del cartílago. Se ha descrito la mutación de este
población mayor de 80 años. En diversos estudios, a partir de los 60 años, se aprecia
gen en la coxartrosis.
un ligero aumento en las mujeres.
2.-Edad: Como ocurre con la artrosis en general, la coxartrosis también se relaciona
La cadera no es una localización preferente en pacientes con poliartrosis, aunque la
con la edad, al producirse una disminución del número de condrocitos en el cartílago
presencia de artrosis en manos aumenta en 3 veces el riesgo de coxartrosis.
articular.
Existen variaciones geográficas, algunas llamativas, como el aumento de hasta 5 ve-
3.-Sexo: Se sabe que el condrocito presenta receptores estrogénicos. Niveles ele-
ces de la prevalencia en Islandia, relacionado con un potente componente genético.
vados de estrógenos pueden aumentar el riesgo de artrosis. En general, existe un
2.-Incidencia. Aunque son escasos los estudios de incidencia de coxartrosis, los re- incremento de la artrosis en el sexo femenino. En el caso de la artrosis de cadera,
sultados son variables. En Estados Unidos es de 0.5 por 1.000 personas y año y, en antes de los 50 años, la prevalencia es mayor en los varones y aumenta a partir de la
cambio, en Holanda alcanza el valor de 1.25 por 1.000 personas y año. menopausia.
Cadera normal Cadera con Artrosis 7.-Traumatismos: Se estima que alrededor del 12% de la artrosis de miembros in-
feriores depende de traumatismos. La subluxación y la fractura de cadera son los
344 345
paciente musculoesquelético
factores más importantes en este caso. Con mayor frecuencia, afecta a varones y es 3.9.5.3 Clínica
unilateral.
Las manifestaciones clínicas clásicas son dolor, rigidez y limitación para los movimientos.
8.- Otros:
1.-Dolor: es el síntoma principal. En general, es de tipo mecánico: aparece con el mo-
- 8.1.-Artrosis de manos: diversos recientes estudios demuestran que la vimiento articular y mejora con el reposo. Se relaciona con periodos prolongados de
presencia de artrosis en las manos aumenta el riesgo de artrosis de cadera y inactividad, se desencadena al inicio de la marcha y puede empeorar tras un ejercicio
rodilla, actuando como factor independiente. Este hecho apoyaría el concepto prolongado. Sin embargo, en etapas avanzadas, puede presentarse precozmente y
de artrosis sistémica, en el que el factor genético es superior al mecánico para continuar en reposo. La aparición de episodios de dolor agudo sugiere inflamación,
la aparición de artrosis. que puede estar en relación con artritis por cristales.
- 8.2.-Displasia de cadera (Figura 6): se asocia a coxartrosis prematura tanto
El cartílago no está inervado, por lo que el dolor proviene de las estructuras vecinas,
en hombres como en mujeres. Puede afectar a una o a ambas caderas. El
que sí lo están. Por el ello, el dolor de la coxartrosis puede aparecer en diversas lo-
mecanismo se basa en la disminución de la superficie para la transferencia de
calizaciones, dependiendo del nervio afectado: región inguinal (nervio femoral), región
cargas en la cabeza femoral, provocando degeneración precoz del cartílago.
posterior del glúteo y muslo (nervio ciático), y cara anterior del muslo (nervio obturador).
- 8.3.-Estatinas: se han demostrado en las estatinas efectos antiinflamatorios
y de reducción del riesgo de osteoporosis. Por otra parte, aumentan la 2.-Rigidez: es un dato característico de la artrosis. Aparece al despertarse o tras pe-
producción de óxido nítrico, con la correspondiente afectación de la matriz del riodos de inactividad. Suele durar menos de 30 minutos. Aunque con menor frecuen-
cartílago y la disminución en la vida del condrocito. cia en la cadera, se puede acompañar de crujidos, siendo éste un dato de enfermedad
- 8.4.-Densidad mineral ósea: los pacientes con coxartrosis presentan mayor avanzada.
masa ósea que los controles y menor riesgo de fractura de cadera.
3.-Limitación de la movilidad: se manifiesta afectando de forma lenta y progresiva
a actividades cotidianas (caminar, vestirse, cruzar las piernas sentado) que impliquen
a la cadera, provocando en la exploración, la disminución de los arcos de movimiento
Figura 6. Coxartrosis derecha secundaria a displasia de cadera
normales. En fases más avanzadas, se afectan la abducción, la rotación y la extensión
y, finalmente la flexión. Todo ello provocará cojera y, por lo tanto, alteración de la mar-
cha, pudiendo llegar a la atrofia muscular por desuso.
3.9.5.4 Diagnóstico
1.-Criterios. La mayoría de los autores sigue los criterios de clasificación del Colegio
Americano de Reumatología (ACR), que combina datos clínicos y parámetros bioló-
gicos y radiológicos, clasificándose como coxartrosis si presenta el primer punto y, al
menos, dos de los cuatro siguientes:
1.1-Dolor en cadera la mayoría de los días del mes anterior a la consulta
1.2-Presencia de osteofitos femorales o acetabulares en la radiografía
1.3.-Velocidad de sedimentación globular (VSG) < 20 mm/h
1.4.-Pinzamiento del espacio articular en la radiografía (superolateral, axial o
medial)
346 347
paciente musculoesquelético
Con estos datos, se alcanza una sensibilidad del 91% y una especificidad del 89%.
Figura 7. Signos radiológicos de artrosis de cadera bilateral
Con respecto al diagnóstico radiológico, los criterios más empleados son los de Kell-
gren-Lawrence (Tabla 3):
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
- 1.3.-Infiltración intraarticular: se emplea con menor frecuencia que en la rodilla. Figura 8. Signos artrósicos en rodilla
En general, la punción se realiza guiada con ecografía o radioscopia. Con el
uso de corticoides (nivel de evidencia Ib), se consigue una mejoría rápida,
Hueso
mientras que con la inyección de ácido hialurónico (nivel de evidencia Ia), la
Erosión del subcondral
respuesta suele ser más prolongada.
cartílago
3.-Cirugía: la cirugía mediante prótesis total en los pacientes con artrosis de cadera
se reserva cuando fracasa la combinación de los tratamientos anteriormente comen-
tados. Esta cirugía es efectiva en cuanto al dolor y a la limitación funcional y es coste-
efectiva en los pacientes con dolor muy importante, asociado a incapacidad funcional
y baja calidad de vida. En general, más del 90% de las prótesis de cadera se mantie- Osteofitos
nen sin complicaciones durante 10 a 15 años y, en algunos pacientes, hasta 25 años.
Sin embargo, en los pacientes más jóvenes, pueden tener una duración menor por el
aumento de su actividad diaria.
Erosión
del menisco
3.9.6 Artrosis de rodilla (gonartrosis) (Figura 8)
La rodilla es una articulación sinovial compleja que, si bien se considera constituida Los estudios de incidencia de artrosis de rodilla muestran resultados variables según la
por dos subarticulaciones, una femoropatelar y otra femorotibial, funcionalmente es edad y el sexo, ya que en un seguimiento de pacientes de 45 años durante 12 años,
una sola articulación. Por otra parte, en la estabilidad de dicha articulación intervienen dicha incidencia fue del 25% en mujeres y de un 10% en hombres. En un seguimiento
numerosos elementos periarticulares, como meniscos, ligamentos y tendones, confi- a 5 años de personas entre los 75 y los 79 años, se mostró que el 4.5% desarrolló
riéndole una gran complejidad. artrosis de rodilla en dicho periodo.
3.9.6.1 Epidemiología La artrosis de rodilla es una enfermedad de distribución mundial, existiendo escasas
variaciones geográficas. Por ejemplo, la gonartrosis es más común en negros de Esta-
Según el estudio EPISER, el 29% de la población española de más de 60 años pre- dos Unidos que en los de otras zonas.
senta artrosis sintomática de rodilla. Los estudios de prevalencia basados en criterios
radiológicos son muy variables, ya que muchos de ellos fueron realizados según los Por lo tanto, podemos concluir que la prevalencia de la artrosis de rodilla es alta en la
criterios radiológicos de Kellgren y Lawrence, en los que el hallazgo radiológico signifi- población general y que aumenta claramente con la edad, siendo más frecuente en el
cativo son los osteofitos, los cuales son una manifestación tardía del proceso artrósico. sexo femenino.
Por otro lado, están apareciendo estudios de prevalencia radiológica de la enfermedad
3.9.6.2 Etiopatogenia
que consideran otros parámetros como el pinzamiento o estrechamiento del espacio
articular. Por lo tanto, según consideremos un criterio u otro, los datos de prevalencia La etiopatogenia de la artrosis es compleja y en ella influyen tanto factores sistémicos
varían entre el 7 y el 14% en edades medias de la vida. como locales.
En Europa, la prevalencia de artrosis de rodilla en el segmento de edad de los 70-79 1.-Factores locales.
años se estima entre el 30- 43% en el caso de las mujeres y en el 15-25% en los - 1.1.-Traumatismos y fracturas en huesos próximos a la rodilla pueden originar
hombres. una incongruencia articular, con un reparto de cargas asimétrico y, por lo tanto,
ocasionar alteraciones en el cartílago y el hueso subcondral.
352 353
paciente musculoesquelético
- 1.2.-La obesidad se relaciona con la artrosis de articulaciones de carga y, - 1.4.-En relación a los factores nutricionales, se han implicado las vitaminas A, C
especialmente, con la artrosis de rodilla, presentando un aumento del riesgo si y D como agentes antioxidantes y reguladores de la respuesta inflamatoria, lo
el índice de masa corporal (IMC) es > a 30 kg/m2. cual puede influir en el desarrollo del proceso artrósico.
- 1.3.-Las deformidades epifisarias, tanto genéticas como adquiridas, como - 1.5.-Con respecto a la ocupación y la actividad física laboral, para las rodillas,
ocurre en el caso de la osteonecrosis del cóndilo femoral (Figura 9). el factor determinante más significativo es la hiperflexión frecuente en
- 1.4.-Las alteraciones de la alineación, como ocurre en el genu varo y en el determinadas profesiones, como ocurre en albañiles, soladores, jardineros,
valgo. etc., así como ciertas actividades deportivas de competición, como la de los
futbolistas, etc.
- 1.5.-La enfermedad de Paget en los huesos de la rodilla.
- 1.6.-Por último, enfermedades sistémicas como la diabetes mellitus, la
- 1.6.-La debilidad muscular del aparato extensor cuadricipital se ha relacionado
acromegalia, la ocronosis, el hipotiroidismo, la enfermedad por depósito de
con la gonartrosis.
cristales, el hiperparatiroidismo y la hemocromatosis, se han relacionado con
- 1.7.-El deterioro procioceptivo de la articulación de la rodilla, como ocurre en la una mayor prevalencia de artrosis de rodilla.
artropatía neuropática, se asocia a artrosis de dicha articulación.
3.9.6.3 Clasificación
2.-Factores sistémicos. El Colegio Americano de Reumatología (ACR) ha propuesto una serie de criterios para
- 1.1.-La edad se relaciona claramente con la gonartrosis. la clasificación de la artrosis de rodilla (Tabla 5). Estos criterios permiten clasificar la en-
- 1.2.-Con respecto a los factores genéticos, se ha comprobado que las fermedad de acuerdo con diferentes combinaciones de parámetros clínicos, analíticos
alteraciones en el gen del colágeno tipo II (COL2A1) se relacionan con y radiológicos.
displasias espondiloepifisarias, en las que se afecta la rodilla, produciéndose
artrosis precoces de dicha articulación. Tabla 5. Criterios de clasificación de la artrosis de rodilla
- 1.3.-En cuanto a la raza, se sabe que la artrosis en general es más frecuente
en la población de raza blanca que en la de raza negra. Parámetros clínicos Parámetros clínicos y de Parámetros clínicos y
laboratorio radiológicos
Figura 9. Osteonecrosis del cóndilo femoral Dolor en rodilla la mayor parte de Dolor en rodilla la mayor parte de Dolor en rodilla la mayor parte de
los días del último mes + por lo los días del último mes + por lo los días del último mes + por lo
menos 1 de: menos 5 de: menos 1 de:
-Edad > de 50 años -Edad > de 50 años -Edad > de 50 años
-Rigidez < 30 minutos -Rigidez < 30 minutos -Rigidez < 30 minutos
-Crepitación -Crepitación -Crepitación
-Dolor óseo a la presión -Dolor óseo a la presión -Osteofitos en radiografía
-Hipertrofia ósea -Hipertrofia ósea
-Sin calor local -Sin calor local
-VSG < 40 mm/h
-Factor reumatoide -
-Líquido sinovial con < 2.000
leucocitos/mm3
Sensibilidad: 95% Sensibilidad: 92% Sensibilidad: 91%
Especificidad: 69% Especificidad: 75% Especificidad: 86%
354 355
paciente musculoesquelético
3.9.6.4 Clínica con dicho movimiento. La limitación de la movilidad articular puede ser secundaria a
alteraciones de la superficie articular, fibrosis capsular, contractura muscular o a topes
La gonartrosis es una enfermedad con una gran variabilidad clínica y las manifestacio- óseos producidos por osteofitos o cuerpos libres intraarticulares.
nes de este proceso pueden venir determinadas por las lesiones propias de la patolo-
gía pero, además, pueden existir una serie de síntomas que aparecen en la articulación 4.-Deformidad. Puede existir tumefacción articular relacionada con derrame sinovial,
artrósica y la zona periarticular y que no son específicos de esta enfermedad. Los así como atrofia cuadricipital. También puede haber genu varo o valgo, en función del
síntomas de la gonartrosis son el dolor, la rigidez, la impotencia, la limitación funcional compartimento afectado.
y la deformidad.
3.9.6.5 Diagnóstico
1.-Dolor. El dolor de la rodilla es, sin duda, el principal síntoma de la gonartrosis. Es de
carácter mecánico, es decir, se desencadena cuando el paciente se levanta e inicia la 1.-Laboratorio. No existen alteraciones analíticas propias de la gonartrosis. Los reac-
marcha, y mejora con el movimiento, para volver a reaparecer con la deambulación pro- tantes de fase aguda como la VSG y la PCR son normales o, a lo sumo, algo elevadas
longada, cediendo o mejorando con el reposo. Por otro lado, un 40-50% de los pacientes en las fases inflamatorias de la enfermedad.
con gonartrosis presenta dolor en reposo y hasta un 30%, tiene incluso dolor nocturno. El análisis del líquido sinovial muestra un aspecto normal, con coloración amarillenta,
Según el compartimento afectado de la rodilla, el dolor puede presentar características transparente y con filancia conservada. La celularidad es escasa, < de 2.000 células/
distintas: mm3 y los niveles de glucosa y proteínas son normales.
-En la artrosis de predominio femoropatelar, el dolor vendrá referido a la cara 2.-Pruebas de imagen.
anterior de la articulación y, sobre todo, se producirá en los movimientos - 2.1.-Radiología simple. Existe una disociación clínicorradiológica en muchos
que impliquen el deslizamiento de la rótula por la tróclea femoral (subir/bajar de los pacientes con gonartrosis, de tal manera que hay enfermos con
escaleras, arrodillarse). Es muy característica la aparición de dolor al presionar manifestaciones radiológicas evidentes y nula sintomatología, mientras que
la rótula contra la tróclea femoral y al deslizar lateralmente dicha rótula (signo en la gonartrosis prerradiológica, ya existe deterioro del cartílago e, incluso,
de Strasser, signo del cepillo). alteraciones en el hueso subcondral, que no son patentes en la radiografía. A
-En la artrosis de predominio femorotibial, el dolor será lateral, posterior o pesar de ello, la radiología simple sigue siendo un instrumento de diagnóstico
difuso y aumenta con la deambulación y la bipedestación. importante ante la sospecha de gonartrosis.
Como resumen, podemos decir que el origen del dolor en la gonartrosis
es muy diverso y puede deberse a múltiples causas, como la isquemia - Las alteraciones radiográficas de
subcondral y el incremento de la presión intraósea; las proliferaciones óseas; la rodilla, al igual que las de otra
Figura 10. Signo del bostezo en
la presión sobre el hueso expuesto; las contracturas musculotendinosas localización, muestran en los estadios
iniciales, pinzamiento de la interlínea gonartrosis
periarticulares; la compresión de partes blandas y nervios periféricos; la
inflamación sinovial y de ligamentos y tendones; y la patología del periostio, articular, así como leve esclerosis
entre otras. subcondral. Dicho pinzamiento
depende del compartimento afectado
2.-Rigidez. La rigidez es otro de los síntomas de la gonartrosis, siendo característica- (femoropatelar o femorotibial),
mente matutina o tras el reposo, moderada y de corta duración, no superando los 30 siendo de manera característica
minutos. irregular o asimétrico, es decir, el
espacio articular se reduce en el
3.-Impotencia y limitación funcional. Como consecuencia del dolor, se produce compartimento que suele ser el
una impotencia funcional en la rodilla, que cursa con cojera y limitación para la reali- de carga y aumenta de manera
zación de la flexo-extensión. También se producen chasquidos y crujidos articulares compensatoria en el contralateral Pinzamiento y esclerosis subcondral en artrosis
(signo del bostezo) (Figura 10). de rodilla.
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paciente musculoesquelético
- En fases más avanzadas (Figura 11), aparece el hallazgo radiológico más Figura 9. Osteonecrosis del cóndilo femoral
característico, que es el osteofito, el cual surge en los márgenes de las
plataformas tibiales, cóndilos femorales y rótula. También pueden observarse
las geodas subcondrales, que se deben a áreas de microfractura de la
esponjosa del hueso subcondral.
- Los criterios radiográficos comúnmente utilizados en la evaluación de los
grados de afectación radiográfica son los descritos por Kellgren y Lawrence
(Tabla 6).
- 2.2.-Ecografía. Permite la visualización de estructuras intraarticulares como el
cartílago, así como la presencia de osteofitosis y alteraciones meniscales, y
también de estructuras extraarticulares, como ligamentos, bursas y tendones.
Permite valorar además la presencia de derrame articular y el estado de la
membrana sinovial.
- 2.3.-Tomografía computarizada (TAC). Útil para valorar el compartimento
femoropatelar y los cuerpos libres intraarticulares.
- 2.4.-Gammagrafía ósea. Útil para el diagnóstico diferencial de la gonartrosis
con procesos neoplásicos, inflamatorios, distrofia simpático refleja y fracturas. - 2.6.-Artroscopia. Técnica invasiva especialmente importante en la rodilla.
La imagen gammagráfica muestra una hipercaptación focal y segmentaria Sus indicaciones en esta patología incluyen el lavado y desbridamiento
relacionada con lesiones subcondrales en los cóndilos femorales y los platillos artroscópico, la extirpación de cuerpos libres y osteofitos, el diagnóstico
tibiales que, de manera característica, suele ser asimétrica. y tratamiento de la enfermedad meniscal, la realización de biopsia y/o
extirpación sinovial, si es necesario, y el tratamiento de las rigideces de rodilla,
- 2.5.-Resonancia magnética (RM). Excelente técnica para valorar todas entre otras.
las estructuras de la articulación artrósica. Es capaz de detectar lesiones
preclínicas, identificar factores de riesgo para desarrollar gonartrosis y 3.9.6.6 Tratamiento
monitorizar la respuesta terapéutica y de progresión de la enfermedad. Las
lesiones del cartílago aparecen como pérdida del grosor, con defectos en su El tratamiento de la artrosis de rodilla es fundamentalmente sintomático y tiene tres
interior cuando existen fisuraciones y erosiones de éste. objetivos: aliviar el dolor, mejorar la capacidad funcional y retardar la progresión de la
enfermedad.
1.-Tratamiento no farmacológico.
Tabla 6. Clasificación radiológica de la artrosis de rodilla - 1.1.-Educación del paciente. El enfermo debe conocer su enfermedad y, en
según Kellgren y Lawrence particular, su evolución.
Grado 0 Normalidad - 1.2.-Pérdida de peso. Existen estudios que demuestran la influencia de la
Grado 1 Dudoso estrechamiento del espacio articular. Posible osteofitosis. pérdida de peso y la mejoría sintomática en la rodilla.
Grado 2 Posible estrechamiento del espacio articular. Osteofitosis. - 1.3.-Medidas de descarga articular. Las medidas de protección articular, como
Grado 3 Estrechamiento evidente del espacio articular. Osteofitosis moderada múltiple. Esclerosis las ortesis, han demostrado su eficacia en el alivio del dolor y la facilidad
subcondral. Posible deformidad de los extremos óseos. para la marcha. Asímismo, el uso de un bastón en la mano contralateral a la
de la articulación afectada permite descargar la carga efectiva en un 50% y,
Grado 4 Marcado estrechamiento del espacio articular. Abundantes osteofitos. Importante
además, disminuye el riesgo de caídas.
esclerosis subcondral. Deformidad de los extremos óseos
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paciente musculoesquelético
- 1.4.-Medidas de protección articular. El reposo funcional regional alivia el dolor - 2.6.-SYSADOA. El sulfato de glucosamina, el condroitín sulfato y la diacereína
en momentos cortos de tiempo, sobre todo en fases agudas del dolor. Hay muestran su eficacia en el control del dolor y la mejoría funcional en pacientes
que evitar realizar movimientos de hiperflexión, así como caminar por terrenos con artrosis de rodilla (los 2 primeros, con nivel de evidencia Ia y el tercero, Ib).
irregulares y evitar la bipedestación prolongada. Existe un trabajo que demuestra la eficacia de la combinación de sulfato de
- 1.5.-Ejercicio. El ejercicio aeróbico de baja intensidad incrementa la fuerza glucosamina y condroitín sulfato.
muscular y la capacidad funcional, mejorando la circulación, el dolor y la Por otro lado, el condroitín sulfato ha demostrado su eficacia en la disminución
movilidad articular. del consumo de analgésicos y AINEs en pacientes con gonartrosis.
- 1.6.-Termoterapia. La aplicación de frío local en casos de sinovitis o derrame - 2.7.-DMOAD. Son fármacos con un potencial modificador de la estructura y,
ha demostrado eficacia en la mejoría de los síntomas funcionales, así como por lo tanto, pueden ser capaces de frenar la evolución de la enfermedad.
aumento de la fuerza y amplitud del movimiento. Incluyen los mismos que en el apartado anterior. Se ha demostrado que, tanto
- El calor local mejora el espasmo muscular y la rigidez articular de la rodilla. el sulfato de glucosamina como el condroitín sulfato y la diacereína reducen el
estrechamiento articular radiológico en comparación con placebo, pero sólo
los dos primeros lo han demostrado en la rodilla.
2.-Tratamiento farmacológico.
- 2.1.-Paracetamol. Ha demostrado su eficacia en varios estudios para el 3.-Tratamiento quirúrgico. Los objetivos del tratamiento quirúrgico incluyen el con-
dolor en la artrosis de rodilla y la evidencia disponible actualmente apoya las trol del dolor y la restitución de la función articular perdida, así como, en determinados
recomendaciones de usar paracetamol como tratamiento inicial de la artrosis, casos, el retraso del proceso en fases iniciales. Las indicaciones del tratamiento qui-
según las guías ACR y EULAR (nivel de evidencia Ib). rúrgico en la gonartrosis incluyen el dolor intenso nocturno o en reposo y la dificultad
- 2.2.-AINEs. Según la evidencia disponible, los AINEs son más eficaces importante para la marcha o para realizar las actividades básicas de la vida diaria. Las
para el control del dolor que el paracetamol (nivel de evidencia Ia), pero el técnicas quirúrgicas de las que se dispone son: denervaciones selectivas, lavado y
tratamiento ha de individualizarse y se deben tener en cuenta los posibles desbridamiento artroscópico, osteotomías, artroplastia de cadera, artrodesis e injertos.
efectos secundarios de los mismos. Mención aparte merece el grupo de
los inhibidores selectivos de la COX-2, los cuales presentan un mejor perfil
de seguridad gastrointestinal pero deben ser empleados con precaución en
personas con hipertensión arterial y comorbilidades cardiovasculares.
- 2.3.-AINEs tópicos. Son eficaces para reducir el dolor y mejorar la funcionalidad
de los pacientes con artrosis de rodilla en comparación con placebo, con un
nivel de evidencia Ia. Por otro lado, existe un fármaco que no es AINE y que
se utiliza de manera tópica, la capsaicina, que ha demostrado ser eficaz para
reducir el dolor y mejorar la funcionalidad en la gonartrosis.
- 2.4.-Opioides. El tramadol, solo o en combinación con paracetamol, ha
demostrado su eficacia en el tratamiento del brote de dolor en el paciente
con gonartrosis cuando no responden al tratamiento de base o están
contraindicados los AINEs. Los opioides mayores presentan un nivel de
evidencia Ib.
- 2.5.-Infiltraciones con corticoides. Son efectivas a corto plazo para el control
de los síntomas de dolor, especialmente en los brotes agudos de la artrosis
de rodilla, presentando un nivel de evidencia Ib. También están indicadas las
infiltraciones con ácido hialurónico, obteniendo una respuesta más prolongada.
360 361
paciente musculoesquelético
Existen pruebas de la asociación de la AR con alelos específicos del HLA-DR4 (70% 1.-Manifestaciones articulares. La artritis de las AR es típicamente simétrica
frente al 30% del grupo control) y HLA-DR1 (epítopo compartido). En concreto, pacien- y poliarticular. Comienza de forma habitual como artritis de las pequeñas
tes que presentan leucina, glutamina, lisina, arginina y alanina en la posición 70 a 74 de articulaciones de las manos. Las articulaciones metacarpofalángicas (MCF)
la tercera región hipervariable de las cadenas HLA-DR (presentadoras de antígenos).
362 363
paciente musculoesquelético
e interfalángicas proximales
Figura 1. Etiopatogenia artritis Tabla 1. Manifestaciones extraarticulares de la artritis
(IFP) del segundo y tercer
dedo de las manos se afectan reumatoide reumatoide
frecuentemente al inicio de Tipo Manifestaciones
la enfermedad. Después, se 1.-Cutáneas Nódulos reumatoides (Figura 3)
van afectando otras pequeñas
2.-Oculares -Epiescleritis
articulaciones de las manos y
los pies, grandes articulaciones -Escleritis
y columna cervical, de forma 3.-Síndrome de Sjögren Queratoconjuntivitis
simétrica. Las articulaciones -Xerostomía
interfalángicas distales (IFD) 4.-Vasculares -Vasculitis (acra, cutánea o sistémica)
de las manos y las de las 5.-Neurológicas -Neuropatía por atrapamiento
columnas dorsal y lumbar se -Mononeuritis múltiple
mantienen intactas. En un
-Polineuritis sensitivo-motora
número pequeño de pacientes,
-Polineuritis sensitiva
puede ocurrir una presentación
oligoarticular y simétrica. -Afectación del sistema nervioso central
-Subluxación atlo-axoidea
- La persistencia del proceso
inflamatorio favorece la 6.-Cardiacas -Pericarditis
destrucción articular y la -Miocarditis
aparición de deformidades. Las -Valvulopatías
más características son (Figura 7.-Pulmonares -Pleuritis
2): desviación en ráfaga cubital -Enfermedad intersticial difusa
de los dedos, hiperextensión FigurA 2. Deformidad característica -Nódulos reumatoides
de IFP con flexión de IFD de articulaciones IFPs e IFDs -Bronquiolitis obliterante constrictiva
(cuello de cisne), flexión de (dedos en cuello de cisne y -BONO
IFP y extensión de IFD (en en ojal)
ojal), flexión de IFD (dedo en -Hipertensión pulmonar
martillo) y, en el primer dedo, 8.-Renales - Nefropatía de la AR
hiperextensión de la MCF con 9.-Amiloidosis -Hepatopatía, nefropatía, neuropatía, cardiopatía
flexión de la IF.
2.-Manifestaciones
extraarticulares (Tabla 1). Las Dentro de las manifestaciones extraarticulares, cabe mencionar el denominado síndro-
manifestaciones extraarticulares me de Felty, consistente en un cuadro de AR crónica, esplenomegalia y neutropenia.
suelen aparecer asociadas a la En ocasiones, también pueden aparecer anemia y trombopenia. Es más frecuente en
sinovitis, aunque, en ocasiones, casos de AR de larga evolución con niveles altos de factor reumatoide (FR), nódu-
pueden constituir el signo los subcutáneos y otras afectaciones sistémicas. Suelen presentar inmunocomplejos
principal de actividad de la circulantes y consumo sistémico del complemento. Estos pacientes presentan una
enfermedad. mayor tendencia a las infecciones asociada a la neutropenia.
364 365
paciente musculoesquelético
Figura 3. Nódulo reumatoide en codo 1.3.-Proteína C reactiva (PCR) y velocidad de sedimentación globular (VSG):
la inflamación induce cambios en la producción hepática de reactantes
de fase aguda como la PCR, siendo ésta, por lo tanto, un indicador de la
inflamación. De igual modo, la VSG también define la actividad inflamatoria
de la enfermedad.
- 1.4.-Anemia normocítica normocrómica.
- 1.5.-Trombocitosis: se relaciona con el grado de actividad inflamatoria de
la AR.
2.-Técnicas de imagen
- 2.1.-La radiología simple es la técnica de imagen estándar en la AR. Los
primeros signos radiológicos de la enfermedad son la osteoporosis periarticular
y el aumento de las partes blandas articulares. Posteriormente, se evidencia
una disminución del espacio articular. Hasta el 50% de los pacientes,
presentan erosiones radiológicamente detectables en el primer año de la
enfermedad.
3.10.1.4 Diagnóstico - 2.2.-Los ultrasonidos y la resonancia magnética son técnicas muy sensibles
que se encuentran en fase de validación.
1.-Datos de laboratorio. No existe ninguna prueba específica para el
diagnóstico de AR. Sin embargo, algunas de ellas ayudan a confirmar el Criterios de clasificación de la artritis reumatoide
diagnóstico y a anticipar el pronóstico de la enfermedad.
El American Collegue of Rheumatology (ACR) propuso unos criterios con fines clasifi-
1.1.-Factor reumatoide: los factores reumatoides son anticuerpos catorios de la enfermedad. Aunque pueden usarse con un objetivo diagnóstico, no se
dirigidos contra la fracción Fc de la inmunoglobulina IgG. Los tests que deben retrasar éste ni el tratamiento de la enfermedad en un paciente con una afecta-
se emplean en la práctica clínica detectan anticuerpos de isotipo IgG. ción poliarticular crónica erosiva a la espera de que cumpla los criterios referidos. Son
El FR se encuentra en el 70-80% de los pacientes con AR. Los títulos los siguientes:
elevados se asocian en general con una enfermedad más grave, con
nódulos reumatoides y peor evolución. Se ha detectado FR en el suero de Cuatro o más de los siguientes criterios deben estar presentes para el diagnóstico de
pacientes con AR años antes de la aparición de los síntomas y en el suero la artritis reumatoide:
de pacientes con artritis indiferenciada. Se pueden encontrar en el 1% de 1.-Rigidez matutina.- Durante al menos 1 hora. Presente durante al menos 6
la población sana mayor de 60 años y en pacientes con enfermedades semanas.
reumáticas autoinmunes, infecciones bacterianas crónicas, infecciones 2.-Tumefacción.- (Observado por un médico). De 3 ó más articulaciones
virales, disproteinemias, enfermedades crónicas hepáticas, enfermedades simultáneamente. Durante al menos 6 semanas.
crónicas pulmonares y tumores.
3.-Tumefacción.- (OPM) De carpo, articulaciones metacarpofalángicas o
1.2.-Anticuerpos antipéptido cíclico citrulinado (anti-CCP): la determinación interfalángicas proximales. Durante 6 ó más semanas.
de estos anticuerpos tiene valor en la confirmación de la enfermedad en
pacientes con artritis inicial y en la identificación de pacientes con peor 4.-Tumefacción articular simétrica.- (OPM)
pronóstico. Se han detectado estos anticuerpos en el suero de pacientes 5.-Cambios radiológicos típicos.- En manos. Deben incluir erosiones o
años antes de la aparición de los síntomas de la AR. descalcificaciones inequívocas.
6.-Nódulos reumatoideos.
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paciente musculoesquelético
7.-Factor reumatoide sérico. Por un método que sea positivo en menos del 5% 2.2.-Penicilamina. De uso restringido debido a su toxicidad.
de los controles normales. 2.3.-Antipalúdicos (cloroquina e hidroxicloroquina). Quelantes metálicos.
(Arnett FC, Edworthy SM, Bloch DA, et al. The American Rheumatism Inhiben la liberación de prostaglandinas y enzimas lisosomales, la
association 1987. Revised criteria for the classification of Rheumatoid Arthritis. proliferación linfocítica y la producción de inmunoglobulinas.
Arthritis Rheum 1988, vol 31: 315-323). 2.4.-Sulfasalazina. Mecanismo de acción desconocido, aunque se cree que
actúa a nivel de los linfocitos B principalmente.
Impacto de la artritis reumatoide en el paciente 2.5.-Metotrexato. Antimetabolito del ácido fólico. Actúa a nivel celular y su
acción es inmunosupresora. Rápido y seguro.
La enfermedad puede afectar a las esferas física y mental del paciente. Por este mo-
tivo, para la definición del impacto de la enfermedad del paciente, pueden emplearse 2.6.-Azatioprina. Es un análogo de las purinas que tiene acción
los siguientes cuestionarios o escalas: inmunorreguladora (bloqueando la producción de linfocitos T y B) y
antiinflamatoria (inhibiendo la división de células precursoras de monocitos,
1.-Escala analógica visual (EVA) de dolor limitando la infiltración de éstos a zonas inflamadas).
2.-Escala analógica visual de actividad de la enfermedad por el paciente 2.7.-Ciclofosfamida. Inhibe la replicación de ADN, disminuye la población
3.-HAQ (Health Assessment Questionnaire): valora la capacidad funcional del de linfocitos B e interfiere en sus funciones, produciendo una disminución
paciente. en la producción de inmunoglobulinas.
4.-SF-36 (Short Form-36): contiene 35 ítems agrupados en ocho categorías: 2.8.-Leflunomida. Derivado isoxazol, inhibe de forma selectiva y
función física, limitaciones del rol por problemas físicos, dolor, percepción de reversiblemente la dihidroorotato deshidrogenasa y la tirosina-quinasa,
la salud general, vitalidad, función social, limitaciones del rol por problemas enzimas fundamentales en el ciclo celular y la activación de los linfocitos T.
emocionales y salud mental. Valora la calidad de vida del paciente. - 3.-Fármacos que actúan sobre la base biológica, relacionados con la
producción de citoquinas, ya que existe una expresión exagerada de algunas
3.10.1.5 Tratamiento de ellas:
3.1.-Infliximab: anticuerpo monoclonal quimérico IgG1-κ, antagonista del
Existen tres líneas de tratamiento farmacológico: TNF.
- 1.-Destinados a disminuir la sintomatología (antiiflamatorios y analgésicos). 3.2.-Etanercept. Proteína de fusión resultado de la unión de la porción p75
Acción rápida. del receptior del TNF y el fragmento Fc de la IgG1.
1.1.-AINEs: Los más empleados en el tratamiento inicial de la AR por su 3.3.-Adalimumab. Anticuerpo monoclonal humano IgG1, antagonista del TNF.
importante acción antiinflamatoria: afectan a la función de los linfocitos, 3.4.-Rituximab. Anticuerpo monoclonal, de origen murino, humanizado,
monocitos y neutrófilos y, sobre todo, disminuyen la producción de dirigido contra el antígeno CD20, que se expresa en los linfocitos B.
prostaglandinas. 3.5.-Abatacept. Proteína de fusión CTLA4/FcIgG1, que inhibe la unión del
1.2.-Corticoides: Se emplean con frecuencia dada su clara acción antígeno CD80/86 y CD28, inhibiendo la segunda señal de activación de
antiinflamatoria y la evidencia de que su uso a dosis bajas disminuye la los linfocitos T.
aparición de erosiones. 3.6.-Golimumab. Anticuerpo monoclonal IgG1κ humano producido en
- 2.-De acción más lenta, son los fármacos antirreumáticos modificadores de la una línea celular de hibridoma murino, mediante tecnología de DNA
enfermedad: inmunosupresores y citotóxicos. recombinante.
2.1.-Sales de oro. Inhiben la capacidad fagocítica de los neutrófilos, 3.7.-Certolizumab pegol. Fragmento Fab’ de un anticuerpo humanizado
inactivan parcialmente la cascada del complemento, bloquean las recombinante contra el factor de necrosis tumoral α (TNFα) expresado en
funciones de los linfocitos T y monocitos. En desuso por sus relevantes Escherichia coli y conjugado con polietilenglicol (PEG).
efectos secundarios.
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paciente musculoesquelético
3.8.-Tocilizumab. Inhibidor del receptor de la IL-6. 3.11 Patología del hombro y otras articulaciones
3.9.-Anakinra. Antagonista del receptor de la IL-1.
El dolor localizado en o alrededor del hombro viene provocado por alteraciones en sus
Con respecto al tratamiento rehabilitador, incluso en fases de inflamación articular, es articulaciones o partes blandas adyacentes. Es la causa más frecuente de consulta
muy conveniente mantener una buena musculatura alrededor de la articulación infla- sobre patología del hombro.
mada, pero sin mover dicha articulación. Es útil aprender a contraer los músculos. Son
los denominados ejercicios isométricos. En esencia, consisten en poner en tensión El dolor de hombro es un síntoma muy frecuente, se considera que es la tercera causa
los músculos que hay alrededor de las articulaciones, pero sin que éstas se muevan. de incapacidad d origen musculoesquelético.
Mantener contracciones musculares de 20 segundos de duración 10 veces al día pro-
porciona un adecuado tono muscular.
3.11.1 Hombro congelado/periartritis escápulo humeral /capsulitis
Por último, en cuanto al tratamiento quirúrgico, es posible que, durante la evolución adhesiva
de la enfermedad, alguna articulación resulte especialmente dañada y sea necesario
realizar algún tipo de cirugía reparadora. Es un síndrome que cursa con dolor y restricción del movimiento articular glenohume-
ral, como consecuencia de la retracción y fibrosis de las partes blandas periarticulares,
fundamentalmente la cápsula. Su etiología es múltiple. Puede aparecer tras periodos
de inmovilización prolongada y es más frecuente en personas con ictus, enfermedad
de Parkinson, enfermedad pulmonar y diabetes mellitus.
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paciente musculoesquelético
- Reactiva que es secundaria a una inflamación aguda que pasa por tres Las roturas completas del maguito pueden dar lugar a dos cuadros clínicos diferentes:
estadios: • Rotura con movilidad activa conservada con dolor y pérdida de fuerza
• Precalcificante en el que existen cambios circulatorios intratendinosos • Hombro seudoparalitico: impotencia funcional completa y dolor variable.
que favorecen el depósito de los cristales de calcio, y se acompaña de
moderado dolor con mínima impotencia funcional El nivel de dolor y de afectación funcional es por tanto variable. El 50% de los sujetos
• Calcificante en el que existen ya los depósitos de calcio de la sustancia que presentan una rotura asintomática acabarán desarrollando síntomas en 3 años, y
tendinosa, y se acompaña de un dolor muy agudo y marcada impotencia el 40% de ellos pueden presentar una progresión de la rotura.
funcional
• Postcalcificante en el que el tendón reabsorbe tales depósitos
remodelándose de nuevo el estadio fisiológico original, con franca mejoría 3.11.5 Artrosis glenohumeral
de la sintomatología.
La degeneración del cartílago articular puede complicar todas las artropatías de hom-
bro (artrosis secundaria) y también se puede presentar de forma aislada en la artrosis
3.11.3 Síndrome subacromial/bursitis subacromial primaria. La artrosis primaria representa el 1% de los hombros dolorosos y el 2% del
total de las artrosis. Afecta por igual a ambos sexos, y por lo general pacientes mayo-
Es una causa habitual de dolor de hombro. Compresión de las estructuras existentes res de 65 años. Dentro de la artrosis secundaria encontramos una serie de trastornos
en el espacio entre el acromion y la cabeza humeral durante la elevación del brazo. La que provocan la lesión del cartílago articular que incluyen la artritis reumatoide, la en-
bursitis subacromial puede ser causa aislada de dolor o más frecuentemente asociada fermedad por depósito de cristales, postraumática, artropatía por lesión manguito o
a otras patologías como tendinosas o artrosis acromio-clavicular. El principal síntoma necrosis avascular.
clínico es el dolor que suele ser continuo, de moderada intensidad, pero que se acen-
túa cuando el paciente eleva el brazo por encima de los 90º.
• En la mayor parte de los casos las lesiones del manguito rotador son de origen
degenerativo asociado a excesiva sobrecarga del tendón por traumatismos 3.11.7 Tendinitis Bicipital
repetidos laborales o deportivos. Los factores favorecedores son la alteración
anatómica (estrechez subacromial por engrosamiento del arco coraco-acromial Causa dolor de la cara anterior del hombro que se irradia a antebrazo. Se produce por
o presencia de acromion tipo III), la edad avanzada, isquemia del tendón y el impacto repetido del acromion y ligamento toracoacromial sobre el tendón. Puede
enfermedades músculo-esqueléticas que condicionan debilidad muscular. asociarse a lesión del manguito de los rotadores. La lesión crónica del tendón del
• Un menor porcentaje de lesiones se producen tras un traumatismo directo bíceps puede provocar la ruptura espontánea de la porción proximal del tendón, que
único, o posterior a una luxación gleno-humeral. provoca un dolor espontáneo brusco en región anterior del hombro con equimosis
asociada.
La enfermedad del manguito de los rotadores incluye un espectro continuo desde el
pinzamiento leve, pasando por la rotura parcial, la rotura completa, la rotura masiva y
finalmente la artropatía.
372 373
paciente musculoesquelético
Balance muscular. Los tendones del manguito rotador se examinan mediante contrac-
ción isométrica resistida del explorador.
Clínica
Maniobras especificas de provocación. Son muy sensibles pero poco específicos. De-
Los síntomas más frecuentes que aparecen son: ben ir dirigidas según la sospecha clínica. Destacar el test del supraespinoso, test del
1. Dolor. Es la principal queja, difícil de cuantificar y en ocasiones es el parámetro para infraespinoso, test del subescapular o Test de Gerber, del bíceps, etc.
definir el resultado de un tratamiento. Palpación. Debe realizarse en último lugar para no provocar dolor en la exploración.
- El dolor de hombro en el síndrome subacromial suele ser de inicio gradual,
en la zona antero-lateral del hombro, con irradiación hasta la mitad del brazo.
Empeora al levantar el brazo, por la noche y al apoyar el brazo, pudiendo
Pruebas complementarias
interferir el sueño. Se alivia con el reposo del brazo junto al cuerpo.
- La capsulitis retráctil: es un proceso autolimitado de meses-años. Al principio • Radiografía simple. Es diagnostica en patología articular, traumática o
el dolor es muy intenso y se van limitando los movimientos activos y pasivos. degenerativa y en calcificaciones. El ascenso de la cabeza si el espacio es
En las fases finales el dolor se reduce y predomina la restricción de la menor de 5-7 mm es sugestivo de rotura del manguito.
movilidad. • Ecografía: Es la técnica de elección para la patología de partes blandas. La
ecografía tiene una sensibilidad del 91% para la detección de patología del
2. Rigidez. Es el segundo síntoma que debe tenerse en cuenta. Debe medirse al inicio
manguito y permite realizar un estudio dinámico.
y al final de la rehabilitación. La recuperación de las amplitudes pasivas debe preceder
al trabajo de las amplitudes activas. • Resonancia Magnética (RM): Permite valorar partes blandas además de
cartílago articular, labrum, musculo tendón, ligamento y bursas.
Exploración física. Es importante examinar el cuello, ambos hombros y regiones esca-
pulares. • TAC: Estructuras óseas, cuando hay que valorar fracturas complejas.
374 375
paciente musculoesquelético
Tratamiento Pueden tener serios efectos secundarios, cuando son usados en tratamientos de lar-
ga duración, como osteoporosis con fracturas, úlcera sangrante, efecto cushingoide,
Antiinflamatorios no esteroideos. El uso de antiinflamatorios no esteroideos es útil aumento de la glucosa en sangre, inmunosupresión y supresión del eje hipófiso-su-
en el tratamiento de patología osteoarticular, reduciendo la producción de prostaglan- prarrenal.
dinas y disminuyendo la inflamación y el dolor, pero se asocia a una amplia variedad
de efectos indeseables. Los resultados del tratamiento con corticoides en el dolor crónico de hombro son con-
tradictorios, perdiendo efectividad con la evolución de la enfermedad y con una alta
En general, el uso de AINEs se considera beneficioso en el manejo del dolor tasa de efectos secundarios.
agudo por una tendinitis o bursitis.
No existe evidencia científica que justifique el uso de corticoides orales en
Infiltraciones con corticoides. Consisten en administrar un corticoide de liberación pro- pacientes con hombro congelado ya que no ha demostrado ser superior
longada junto con un anestésico local. Se pueden administrar en las siguientes loca- al placebo, ni existen estudios que evalúen su uso en otros grupos de
lizaciones: patologías.
• Articulación glenohumeral
Métodos físicos. En general, el tratamiento con medios físicos se utiliza de manera
• Espacio subacromial
coadyuvante al programa de ejercicios.
• Vainas tendinosas
• Puntos gatillo
Tabla 1.
Podemos decir que existe escasa evidencia para recomendar el uso de
infiltraciones en el tratamiento del dolor de hombro. Técnica Indicación
Láser Hombro congelado. Menor grado de evidencia en el síndrome subacromial
Se deben hacer unidas a técnicas de Rehabilitación.
Ultrasonidos Tendinopatías calcificantes
Producen buenos resultados a corto plazo pero pierden efectividad a largo plazo Ondas de choque Tendinopatías calcificantes
Campos electromagnéticos Tendinopatías calcificantes
En estudios comparativos con diferentes técnicas de fisioterapia, también logran me-
Iontoforesis Tendinopatías calcificantes
jores resultados a corto plazo, pero sus resultados a largo plazo son equiparables. Si
parece obtener mejores resultados con la combinación de infiltraciones seguida de una
rehabilitación intensiva a los 3 y 12 meses. Técnicas de rehabilitación. La recuperación de la amplitud pasiva debe preceder a
la recuperación de forma activa. Los ejercicios pendulares, con pesas de 1 a 3 kilos
No se han encontrado diferencias entre los distintos tipos de corticoides y en los dife- contribuyen a la recuperación de amplitudes pasivas y flexibilidad de las estructuras
rentes estudios no se evalúan las complicaciones del tratamiento. Estas son escasas periarticulares.
pero existe un mayor riesgo de infección, rotura tendinosa, osteonecrosis y necrosis
grasa. Cada patología tiene su específica técnica de recuperación funcional.
Corticoides orales. Los corticoides orales, tales como la prednisolona o la predni- En general, un adecuado programa de ejercicios puede tener resultados
sona, disminuyen el dolor y la inflamación, por inhibición de la enzima fosfolipasa A2, equiparables a la cirugía.
reduciendo los metabolitos del ácido araquidónico. Reducen la descarga ectópica de
los segmentos nerviosos lesionados ejerciendo un efecto estabilizador de membrana
sobre las fibras C nociceptivas.
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3.12.2 Epidemiología
Aunque la fibromialgia es una enfermedad de alta prevalencia, los datos epidemio-
lógicos disponibles actualmente es probable que no reflejen la realidad. En Estados
Unidos, la FM tiene una prevalencia de 3-5% en mujeres y del 0.5-1.6% en hombres.
En Canadá, la prevalencia es similar (3.3%) y, en España, según el estudio EPISER,
se sospecha que hay alrededor de 700.000 personas mayores de 20 años con FM.
La prevalencia en mujeres es de 4.2% y, en hombres, de 0.2%, con un pico entre los
40 y 49 años. En las consultas de Reumatología, se diagnostican hasta un 20% de
pacientes con FM.
Estudios recientes han demostrado una agregación familiar en pacientes con esta en-
fermedad y el riesgo de que parientes de primer grado la presenten es 8 veces mayor.
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3.12.3 Fisiopatología Figura 1. Receptor nmda - Detección de un aumento de la concentración de mastocitos en la biopsia de piel.
Hay numerosos estudios de neuroimagen que correlacionan la FM con diferentes áreas 1.-Manifestaciones neurológicas:
de aumento de flujo sanguíneo en la resonancia magnética (RM) funcional cerebral. - Hipertonía/hipotonía muscular, disfunción asimétrica musculoesquelética.
También se describió que el área de materia gris cerebral es menor. La espectroscopia - Parestesias y temblores atípicos.
por RM de protones demuestra diferencias en la concentración de ciertos metabolitos
cerebrales en la corteza prefrontal y dorso-lateral derecha, correlacionándose con la - Contracturas.
sintomatología del paciente. Recientemente, se han descrito alteraciones en la relación - Debilidad muscular-fasciculaciones.
glutamato/glutamina en el funcionamiento cerebral de estos pacientes. - Cefaleas.
Existen trabajos que demuestran alteraciones periféricas: - Disfunción de la articulación temporomandibular.
- Aumento de interleuquinas en los puntos dolorosos, con discrepancias - Debilidad generalizada.
entre unos y otros estudios sobre qué citoquinas están alteradas, si las - Alteraciones de la percepción.
proinflamatorias o las protectoras, y qué relevancia tienen éstas en la - Inestabilidad.
sintomatología. - Hipersensibilidad sensorial.
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6.-Rigidez:
- Generalizada o localizada, y preferentemente al levantarse.
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Sin embargo, el ACR ha publicado recientemente unos nuevos criterios diagnósticos La ansiedad ha sido menos evaluada, en general, y de forma menos homogénea y
que complementan los hasta ahora utilizados. Los criterios actuales no requieren el menos clínica. Así, se han utilizado principalmente:
contaje de los puntos sensibles, contemplan aspectos sintomáticos hasta ahora no 1.-El State-Trait Anxiety Inventory (STAI), si bien en unos casos se ha utilizado la
incluidos y utilizan unas escalas: WPI - Widespread Pain Index (The ACR preliminary medida de ansiedad rasgo y, en otros, de ansiedad estado.
diagnostic criteria for Fibromyalgia and measurement of symptom severity. Arthritis
2.-La Hospital Anxiety and Depression Scale (HADS) es un cuestionario diseñado
Care and Research 2010; 62(5):600-610) y SS – Symptom Severity Scale) para con-
para evaluar ansiedad y depresión en enfermedades médicas.
cretar el diagnóstico y determinar la gravedad de los síntomas. Se trata, en definitiva,
de aplicar al diagnóstico formal de la enfermedad unos criterios más amplios, que
recogen la totalidad de las esferas que se han detectado afectadas por la enfermedad,
admitiendo que pueden existir pacientes con FM en los que el dolor no sea el compo- 3.12.6 Tratamiento
nente fundamental. Además, hay un concepto radicalmente diferente, ya que incluyen
un criterio de exclusión: que no exista otro proceso que pueda explicar el dolor. Tras los pasos iniciales del diagnóstico y la evaluación individual de cada paciente,
se debe planificar el tratamiento con base en la mejor evidencia disponible sobre las
A nivel europeo, también se han elaborado unos nuevos criterios que tienen en co- distintas modalidades terapéuticas. El conocimiento que el paciente adquiera sobre
mún con los actuales de la ACR el que no es imprescindible la exploración física del su enfermedad, el tratamiento farmacológico, la realización diaria de ejercicio físico
paciente, que abarca la multisintomatología del enfermo, no sólo el dolor, y que están moderado y el tratamiento psicológico son los principios básicos del tratamiento en
orientados para el diagnóstico del síndrome en Primaria. estos pacientes.
El cuestionario de Impacto Funcional (FIQ) es el sistema más práctico para poder eva- 1.-Analgésicos y opioides.
luar el grado de afectación de la calidad de vida y los cambios que se consiguen con
las diversas intervenciones (Figura 3). Los analgésicos únicamente tienen el papel de mejorar el dolor nociceptivo que oca-
sionan otras enfermedades asociadas que actúan como generadoras de dolor en la
Aspectos psicopatológicos y psicosociales FM, como puede ser la artrosis.
Una valoración psicológica ha de formar parte de la evaluación de los pacientes con El tramadol solo y asociado a paracetamol se mostró eficaz en un estudio sobre 313
FM, con el objeto de plantear la estrategia terapéutica más adecuada. Se pueden eva- pacientes. Los opioides mayores como la morfina o la oxicodona no tienen estudios
luar distintos aspectos psicológicos del paciente. que avalen su eficacia en la FM.
Para el cribado general psicopatológico: Ciertos opioides con efectos inhibidores de la recaptación de la serotonina también
1.-El General Health Questionnaire (GHQ28) es un cuestionario de salud general podrían ser eficaces para la FM.
que, por su brevedad, puede ser de gran utilidad en la práctica clínica.
2.-El Symptom Checklist-90-Revised (SCL-90R) es el más utilizado, aún cuando
su longitud (90 ítems) y su carácter exploratorio no siempre justifican su uso. 2.-Antidepresivos.
3.-El Minnesota Multiphasic Personality Inventory (MMPI) también ha sido La amitriptilina es el fármaco más prescrito para el tratamiento de la FM. Un gran nú-
bastante utilizado, aunque su extensión es todavía mayor. mero de ensayos clínicos han demostrado evidencias clínicamente importantes, con la
Más común es evaluar la depresión. Para ello, se utilizan fundamentalmente el cues- mejora de los síntomas en entre el 25-45% de los pacientes.
tionario Beck Depression Inventory (BDI), que es sencillo de completar.
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La hormona de crecimiento se ha ensayado debido a que la sintomatología de su défi- 3.13 Hombro doloroso
cit ocasiona síntomas similares a la FM, como son fatiga, dolorimiento, disminución de
la capacidad funcional, intolerancia al frío, debilidad muscular y distimia, mejorando el
test de capacidad funcional (FIQ) y el número de puntos dolorosos.
3.13.1 Introducción
Tratamiento físico
El dolor de hombro es un síntoma muy frecuente, se considera que es la tercera causa
No hay evidencia de eficacia analgésica con los habituales tratamientos electrotera- de incapacidad de origen musculoesquelético.
péuticos empleados: la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS), los ultra-
sonidos y el láser. La magnetoterapia puede producir cambios positivos, como anal- Hasta en el 90% de los casos el origen del dolor puede ser de los tejidos blandos
gesia y acción antiinflamatoria. Tampoco hay evidencia de alivio del dolor con ozono, extracapsulares y sus causan pueden ser múltiples. La guía de la AAOS reconoce los
quiropraxia u osteopatía. Sí hay una evidencia moderada de mejoría con la acupuntura. siguientes cuadros clínicos con dolor de hombro:
a) Patología Manguito Rotador;
El ejercicio aeróbico ha mostrado un efecto beneficioso. Produce mejoría en el síntoma
b) Hombro congelado;
dolor, la salud mental, el grado de ansiedad y el impacto global de la enfermedad en
el paciente. c) Inestabilidad GH;
d) Artrosis GH;
Tratamiento psicológico
e) Patología A – C;
Su objetivo es controlar los aspectos emocionales de la ansiedad y la depresión, cog- f) Osteolisis clínica,
nitivos, conductuales y sociales, que agravan el cuadro clínico de los pacientes con g) Fibromialgia
FM.
En este apartado nos vamos a centrar en la patología del síndrome subacromial, el
El tratamiento cognitivo-conductual es la intervención psicológica que ha demostrado hombro congelado y la inestabilidad gleno-humeral.
más eficacia para el tratamiento de la ansiedad y la depresión, el dolor crónico, el dolor
inflamatorio y la FM.
Existe un fuerte grado de evidencia de que la combinación de tratamiento psicológico 3.13.2 Síndrome subacromial
y ejercicio físico reduce el impacto global de la FM en la vida de los pacientes.
Es una causa habitual de dolor de hombro. Engloba diversas alteraciones del espacio
subacromial: tendinosis del manguito rotador, del bíceps, tendinopatía calcificantes,
bursitis subacromial y rotura del manguito. Puede ser primario como consecuencia de
alteraciones del acromion, o secundario por insuficiencia del manguito en su función
de estabilización del hombro durante el movimiento de abducción.
Las roturas completas del maguito pueden dar lugar a dos cuadros clínicos diferentes:
- Rotura con movilidad activa conservada con dolor y pérdida de fuerza
- Hombro seudoparalítico: impotencia funcional completa y dolor variable.
La prevalencia real es desconocida, puede cursar sin síntomas y aumentar con la edad
avanzada.
388 389
paciente musculoesquelético
Etiología: existe controversia. La causa principal es la degeneración del manguito con • Episodios previos
la edad más que el sobreuso. Hasta en el 70% ocurre en personas sedentarias. Tam- • Síntomas asociados
bién se ha descrito una zona avascular cerca de la inserción del TSE que aumenta
• Tratamientos previos y actual (respuesta y tolerancia)
el riesgo de rotura. Otra de las posibles causas son la alteraciones morfológicas del
acromion, y éstas son mas frecuentes en edad avanzada. • Antecedentes médicos
2.- Síntomas
DOLOR
3.13.3 Capsulitis adhesiva Es la principal queja, difícil de cuantificar y en ocasiones es el parámetro para definir el
Es frecuente tras periodos de inmovilización prolongada. Su causa no es conocida resultado de un tratamiento.
salvo una etiología previa extrínseca o intrínseca. - El dolor de hombro en el Síndrome subacromial (SS) suele ser de inicio gradual,
en la zona anterolateral del hombro, con irradiación hasta la mitad del brazo.
Entre los factores de riesgo: ictus, Parkinson, enfermedad pulmonar y diabetes mellitus. Empeora al levantar el brazo, por la noche y al apoyar el brazo, pudiendo
interferir el sueño. Se alivia con el reposo del brazo junto al cuerpo.
- La capsulitis retráctil: es un proceso autolimitado de meses-años. Al principio el
3.13.4 Inestabilidad glenohumeral dolor es muy intenso y se van limitando los movimientos activos y pasivos. En
las fases finales el dolor se reduce y predomina la restricción de la movilidad.
Abarca un amplio espectro de trastornos. Se define cuando la laxitud del hombro pro-
duce síntomas. RIGIDEZ
Es el segundo síntoma que debe tenerse en cuenta. Debe medirse al inicio y al final de
Se puede clasificar sg diferentes criterios, según su grado (luxación completa, subluxa- la rehabilitación. La recuperación de las amplitudes pasivas debe preceder al trabajo
ción o inestabilidad), su frecuencia (aguda, recurrente o crónica), su causa (traumática de las amplitudes activas.
o espontanea), y la dirección (unidireccional, bidireccional o multidireccional).
DÉFICIT DEL MANGUITO
Frecuencia
El sufrimiento del manguito suele asociarse a un conflicto subacromial primario por alt
Hasta en un 96% las luxaciones son anteriores y de causa traumática. En menores de del acromion, o secundario, por un ascenso de la cabeza del húmero.
25 años recurren hasta el 60-90%, y en mayores de 45 años solo un 15%. La posterior
3.- Exploración física
puede darse por alteraciones óseas. La Inestabilidad puede asociarse a lesiones del
labrum. Es importante examinar el cuello, ambos hombros y regiones escapulares.
Es importante recoger los siguientes aspectos. Se debe valorar la postura, cicatrices, deformidades articulares, atrofias, asimetrías.
1.- Anamnesis La escapula alada a veces puede ser un hallazgo asilado o deberse a patología cervi-
cal. La dinámica de la escapula puede ser un signo de patología indirecta en los casos
• Características del Dolor: Localización, irradiación, duración, ritmo, intensidad,
de rotura completa del manguito.
inicio, factores que alivian y mejoran el dolor.
• Repercusión funcional: Se recomienda utilizar escalas específicas, algunas de 3.2.- Balance articular
ellas son la escala de Cosntant, la escala Dash o la escala Spadi. También es
necesario recoger si es la mano dominante y el tipo de actividad profesional y Se debe valorar de forma activa antes de ver el recorrido pasivo. Se recomienda el
recreativa. Sistema de Medidas de la Academia Americana de Hombro y codo:
390 391
paciente musculoesquelético
Si el recorrido articular está limitada o hay que ver si se debe al dolor o debilidad. Una
limitación activa y pasiva sugiere una patología capsular o articular
Los tendones del manguito rotador se examinan mediante contracción isométrica re-
CONFLICTO SUBACROMIAL
sistida del explorador.
3.4.- Maniobras especificas de provocación
Son muy sensibles pero poco específicos. Deben ir dirigidas según la sospecha clínica
TEST TSE
- Dolor anterosuperior
- Amiotrofia
Palpación
- Aumentan en todas las maniobras de provocación
Debe realizarse en último lugar para no provocar dolor en la exploración.
TEST INFRAESPINOSO
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
- Provocación del dolor espontáneamente
Radiografía simple
- Disminución de la fuerza en rotación externa
Es diagnostica en patología
articular, traumática o dege-
nerativa y en calcificaciones.
TEST SUBESCAPULAR:
TEST GERBER El ascenso de la cabeza si el
espacio es menor de 5-7 mm
es sugestivo de rotura del
manguito.
392 393
paciente musculoesquelético
RM: permite valorar partes blandas además de cartílago articular, labrum, musculo Consisten en corticoides de liberación prolongada junto con un anestésico local. El
tendón, ligamento y bursas. número debe limitarse, y la localización se hace de acuerdo al estudio clínico.
La ecografía tiene una sensibilidad del 91%, similar a la Rm para la detección de pato- La infiltración subacromial es eficaz a corto plazo respecto a placebo en tendinopatías
logía del manguito, es más barata y permite el estudio dinámico. pero el efecto no se mantenía y no era superior a AINES orales.
TAC: estructuras óseas, cuando hay que valorar fracturas complejas. La infiltración intraarticular aislada resultaba más eficaz a corto plazo que la fisioterapia
aislada en el hombro congelado. También se ha propuesto la infiltración con ácido
Los hallazgos en las imágenes hay que relacionarlos con la clínica. hialurónico.
Los AINES pueden ser superiores al placebo para mejorar la abducción en la tendino-
1.3.-REPOSO O MODIFICACIÓN DE LA ACTIVIDAD
patía de los abductores.
Aunque existen diferentes orientaciones, en general, se recomienda evitar aquellas
Los corticoides sistémicos (10-40 mg al día) se han empleado en las fases iniciales del
actividades que provocan dolor.
hombro congelado, durante periodos cortos de 3 semanas y en dosis decrecientes,
pero las evidencias son escasas y están contraindicados en diabéticos.
394 395
paciente musculoesquelético
Los masajes pueden ser relajantes especialmente en los trapecios. CONFLICTO SUBACROMIAL
Son la modalidad mas estudiada sobre todo en el SS y existen diversos ecas que
Las técnicas de decoaptación tiene efecto antialgico en las patologías del conflicto
muestran su eficacia.
subacromial y del manguito de los rotadores, igual que los movimientos pendulares.
Los programas de ejercicios consisten en estiramientos de la capsula anterior y pos-
terior y, sobre todo, en el fortalecimiento del manguito rotador (arcos cortos con resis-
2.- RECUPERACION FUNCIONAL tencias progresivas) y de los músculos escapulares. Se suelen utilizar bandas elásticas
crecientes. Existen estudios que sugieren que los programas de ejercicios bien diseña-
La recuperación de la amplitud pasiva debe preceder a la recuperación de forma ac- dos pueden tener resultados similares a la cirugía
tiva.
Hay que diferenciar:
TÉCNICAS DE REHABILITACIÓN - Tendinopatías sin rotura: Recentrado dinámico evitando el conflicto
La recuperación de la elevación se lleva a cabo en el plano del omoplato, 30º por de- - Tendinopatías con rotura: Desarrollar las compensaciones musculares.
lante del plano frontal de abducción, con el objetivo de posibilitar el trabajo muscular
del deltoides mientras se protege el manguito y se asegura un buen centrado de la HOMBRO CONGELADO
cabeza humeral. Hombro congelado: Deben adecuarse al estadio evolutivo e incluir cuando sea posi-
ble ejercicios activos, autoasistidos y estiramientos graduales y mantenidos durante al
La rotación externa se trabaja con el codo junto al cuerpo en decúbito durante las menos 10 segundos en elevación en el plano de la escapula, rotación interna, externa,
primeras sesiones y aducción cruzada. Es preferible evitar los movimientos en abducción pura para evitar
el SS: Tiene que ir predichos de ejercicios pendulares con un peso ligero en la mano,
La rotación interna: Al principio se trabaja junto con la rotadores externos, y después durante 2-3 minutos, y si hubiese dolor, tomar calmantes y aplicar calor-frio.
por detrás de la espalda una vez que se han alcanzado los 45º de elevación anterior y
30º de abducción. Cuando se recupere la movilidad y ceda el dolor se pueden ir realizando ejercicios de
fortalecimiento.
Los ejercicios pendulares, con pesas de 1 a 3 kilos contribuyen a la recuperación de
amplitudes pasivas y flexibilidad de las estructuras periarticulares INESTABILIDAD
En la inestabilidad glenohumeral, además de los ejercicios de fortalecimiento muscular
progresivo y selectivo con bajas resistencias y numerosas repeticiones, es necesario
3.- TRABAJO MUSCULAR ACTIVO restablecer el equilibrio de los pares de fuerza alrededor de las articulaciones glenohu-
meral y escápulotoracica.
PRINCIPIOS GENERALES
- ESTABILIDAD Y MOVILIDAD ESCAPULO-TORÁCICA: La fijación del omoplato Peculiaridades:
permite obtener una buena movilidad de la artc gleno-humeral y un punto fijo - Inestabilidad anterior: Fortalecimiento de rotadores internos, aductores y
de acción del manguito de los rotadores. flexores. Prohibidos la flexión con abducción a 90º con rotadores externos. Se
- RECENTRADO DE LA CABEZA DEL HUMERO: Movilización de los depresores trabajan mediante contracciones concéntricas, excéntricas
largos: dorsal ancho, porción larga del bíceps, y después de los depresores - Inestabilidad post: Fortalecimiento de rotadores externos y extensores. Se
cortos: tse e Infraespinoso. trabajan de manera concéntrica. Movimiento prohibido: Aducción con flexión y
- PREVENCIÓN DE MOVIMIENTOS INADECUADOS: Musculación excesiva e rotadores externos.
inadecuada, trabajo en posición de conflicto subacromial.
396 397
paciente musculoesquelético
3.14 Síndrome doloroso regional complejo de las 3.14.2 Mecanismos fisiopatológicos que pueden conducir a la aparición del
extremidades SDRC- I.
La fisiopatología de la enfermedad no es conocida. Se han establecido una serie de
3.14.1 Introducción
factores desencadenantes, siendo los de mayor frecuencia los traumatismos con o sin
El término síndrome doloroso regional complejo (SDRC) se utiliza para definir una va- lesión ósea, con o sin inmovilización, procedimientos quirúrgicos, accidentes cerebro-
riedad de situaciones dolorosas, que aparecen tras determinadas lesiones, que se vasculares, extracciones dentarias, etc., aunque en ocasiones no es posible determi-
manifiestan de forma espontánea, de distribución regional y predominantemente distal narlo.
en una extremidad. Habitualmente los síntomas exceden en magnitud y en el tiempo
En pacientes con SDRC-I se han descrito una serie de hechos fisiopatológicos que
al curso esperado de la lesión causal y provocan una significativa alteración de la fun-
podrían explicar el proceso:
ción motora. Existen alteraciones sensitivas como alodinia e hiperalgesia. El edema es
constante en el curso de la enfermedad y se asocia a disfunción del sistema nervioso 1. Alteración de la inervación cutánea después de la lesión, con disminución
autónomo y signos de atrofia. fibras C y Aδ, con una anormal inervación alrededor de los folículos pilosos y
glándulas sudoríparas.
En el año 1994 un comité de expertos de la International Association for the Study of 2. Sensibilización periférica y central. La actividad periférica secundaria a la
Pain (IASP), establecieron los criterios de diagnóstico y cambiaron la denominación de lesión tisular y/o nerviosa, provoca una sensibilización central responsable
la distrofia simpático-refleja y de la causalgia, por síndrome doloroso regional complejo de la hiperalgesia, aparición espontánea de dolor y dolor ante estímulos
tipo I y tipo II, respectivamente. El tipo II debe de tener como antecedente una lesión no dolorosos (alodinia), con una disminución del umbral de los estímulos
nerviosa, y presentará una fisiopatología y un curso clínico diferente. dolorosos, extensión del campo receptivo y una mayor actividad espontanea.
Esta nueva situación dará lugar a una hiperalgesia de la zona con respecto
al área contralateral, aumento de los factores proinflamatorios y a un efecto
3.14.1.1 Datos epidemiológicos amplificador del dolor.
3. Alteración de la función del SN Simpático. Se produce una reducción bilateral
La incidencia del SDRC es alta y muy variable. Tal vez la causa desencadenante más
de la capacidad vasoconstrictora y ausencia de vasoconstricción al frio en
evaluada por ser la de mayor frecuencia sea la fractura de extremidad distal del radio.
casos agudos y exagerada vasoconstricción en los crónicos.
En ella, Biskerstaff y Kanis, así como otros autores, establecieron una incidencia del
28%, que disminuye a partir del primer año al 1 - 2%, debido a una evolución a la re- 4. Variación en los niveles de catecolaminas circulantes. Existe una menor
solución de la enfermedad en el 87% de los casos tras la fractura de extremidad distal cantidad de noradrenalina circulante en el miembro afectado frente al
del radio. La incidencia es mayor en mujeres que en hombres. contralateral y una hipersensibilidad de los receptores que ocasona una
exagerada respuesta.
Estudios epidemiológicos realizados en Holanda calculan una incidencia del 40,4 en 5. Factores inflamatorios. Se produce un aumento local, sistémico y cerebro-
mujeres y 11,9 en hombres, por 100.000 personas año en riesgo. espinal de las citokinas pro-inflamatorias TNF-α, interleukina 1β, 2 y 6,
descenso de los niveles sistémicos de citokinas antiinflamatorias como
En un reciente estudio llevado a cabo por Sandroni y cols., sobre la población de
la interleukina 10, incremento de los niveles sistémicos de neuropéptidos
Olmsted County, Minnesota, de 106.470 habitantes, durante el periodo comprendido
proinflamatorios (péptido del gen relacionado con la calcitonina, bradiquinina y
entre 1989 a 1999, el SDRC tipo I presentó una incidencia de 5,46 por 100.000 per-
sustancia P).
sonas año en riesgo, con una prevalencia durante este periodo de 20,57 por 100.000
personas año en riesgo. Afectó más a mujeres en una proporción de 4:1 con una edad 6. Plasticidad neuronal. Se han descrito cambios cerebrales consistentes en una
media de 46 años y a los miembros superiores sobre los inferiores en una proporción reducción de la representación de la extremidad afectada por el SDRC-I en la
de 2:1 y al igual que en otros estudios, la causa predominante fue la fractura de extre- corteza somatosensorial, que da lugar a dolor de gran intensidad, hiperalgesia,
midad distal del radio (46%), presentando un curso favorable en 3 de cada 4 casos. alteración de la discriminación táctil y percepción de sensaciones fuera de la
398 399
paciente musculoesquelético
Trastornos tróficos.
3.14.3 HISTORIA NATURAL DE LA ENFERMEDAD
Con la evolución, aparece una atrofia muscular y alteraciones de la faneras cutáneas,
Los síntomas de la enfermedad aparecen después de un periodo de tiempo variable con pérdida pilosa y lesiones en las uñas.
tras la acción del agente desencadenante.
Comorbilidad asociada.
Dolor.
La presencia del SDRC, se asocial a una intensa comorbilidad. Las profundas alte-
El dolor es el síntoma principal y debe tener una serie de características: raciones que aparecen hacen sentir al paciente como si la extremidad fuera extraña
y necesitase de la atención mental y visual para moverla. El mantenimiento del dolor
1. Ser un dolor continuo y espontáneo. Los pacientes describen el dolor como
crónico y de las alteraciones sensitivas en la extremidad afectada, son las principales
una sensación de quemazón y pinchazos. Son constantes la presencia de
causas de discapacidad y deterioro de la calidad de vida del paciente.
parestesias. Su aparición no precisa de estímulo alguno, aunque se describe
un empeoramiento con la movilidad de la zona. Con el paso del tiempo
comienzan a aparecer alteraciones sensitivas, motoras y tróficas.
2. Su localización tiene que ser distal y no tener una distribución metamérica. 3.14.4 Diagnóstico
Se describen múltiples localizaciones, aunque es más frecuente que aparezca
Su diagnóstico es clínico, estando basado en el cumplimiento de los criterios de la
en la parte superior del cuerpo. La distribución regional es otra característica
IASP del año 2003.
definitoria, pudiendo existir una extensión del dolor más allá de esta
localización regional en algunos pacientes e incluso en el área contralateral
dando lugar a un patrón en espejo.
3. En general es desproporcionado al dolor provocado por el factor
desencadenante.
400 401
paciente musculoesquelético
Criterios de diagnóstico revisados para realizar un diagnóstico clínico del SDRC. La ausencia de erosiones intraarticulares permite diferenciarlo de las enfermedades
inflamatorias articulares.
1. Dolor continuo y desproporcionado al agente causal
2. Presencia de un síntoma de al menos 3 de los siguientes grupos: La gammagrafía ósea revela un acúmulo del radionúclido tecnecio99m-pertenectato
en regiones periarticulares, mayor que el área contralateral, al parecer por un incre-
2.1. Sensitivos: Hiperestesia o alodinia
mento del flujo sanguíneo.
2.2. Vasomotores: Diferencia de temperatura, alteración en la coloración de la
piel o cambios en la coloración de la piel con respecto al área contralateral Las imágenes de resonancia magnética (RM) suelen ser normales en la mayoría de los
2.3. Sudomotores/edema: Edema, alteración en la sudoración o asimetría en pacientes, o mostrar cambios inespecíficos en las partes blandas o rara vez edema
la sudoración en la médula ósea o atrofia muscular. En la fase aguda de la enfermedad, la RM con
potenciación con gadolinio, puede determinar señales hiperintensas en T2 y en T1,
2.4. Motores/tróficos: Reducción de la movilidad, disfunción motora
que corresponden a la presencia de anormalidades hemodinámicas causadas por una
(debilidad, temblor, distonía) o trastornos tróficos pilosos, ungueales o de la
microangiopatía y/o anormalidades del SNS, que pueden conducir a una isquemia
piel
muscular.
3. Un signo clínico de los siguientes en el momento del diagnóstico de al menos
2 de los siguientes grupos: De forma general, los hallazgos radiológicos y gammagráficos están presente en am-
3.1. Sensitivos: Evidencia de hiperalgesia al pinchazo; alodinia táctil, térmica, bas extremidades, siendo más intensas en una de ellas.
a la presión o con los movimientos articulares
3.2. Vasomotores: Evidencia de asimetría térmica de al menos 10 C, cambios
Tratamiento rehabilitador
de coloración de la piel o asimetría
3.3. Sudomotores/edema: Evidencia de edema, cambios de sudoración o El objetivo es conseguir la máxima recuperación funcional y evitar estados discapaci-
asimetría en la sudoración tantes. Para ello contamos con un programa global progresivo.
3.4. Motores/tróficos: Evidencia de limitación de la movilidad, disfunción 1.- El principio de recuperación funcional está basado en la progresión continua
motora (debilidad, temblor, distonía) o alteraciones tróficas en el pelo, uñas desde la realización de movimientos activos muy suaves hasta la realización de
o en la piel carga de la extremidad afectada.
4. Ausencia de otra explicación mejor de los síntomas y signos 1.1.- Programa de “carga” de Watson y Carlson mediante la aplicación de las
Los hallazgos radiológicos más importantes pero inespecíficos, son el aumento técnicas de Scrubbing y Carrying.
de partes blandas y la osteoporosis regional. Se identifican 5 tipos de resorción
ósea: “Scrubbing”: En la técnica de “scrub” el usuario parte de la posición cuadrú-
- Resorción en región metafisaria en banda o en parches peda, utilizando un cepillo de madera liviana, que moviliza en cuatro tiempos
hacia delante y luego regresa a la posición inicial, con apoyo completo sobre
- Resorción del hueso subperióstico, similar al que se produce en casos de el segmento afectado. Cuando no se pueda adoptar esta posición, los au-
hiperparatiroidismo tores indican el ejercicio en bípedo apoyando el segmento sobre una mesa.
- Resorción de hueso intracortical
- Resorción de hueso endóstico que ocasiona un festoneado de la superficie El programa es progresivo aumentando la duración de la actividad y la can-
endóstica que da lugar a un ensanchamiento del canal medular tidad de peso de forma gradual.
- Erosión subcondral y yuxtacortical, que puede dar lugar a pequeñas erosiones “Carrying”: implica la carga de objetos en el segmento afectado, con pesos
periarticulares que oscilan entre 1 y 5 libras, mientras el paciente permanece de pie o cami-
nando. La progresión en carga y tiempo se hace de acuerdo con la tolerancia
del usuario.
402 403
paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
3.15 Tratamiento del sdrc Aunque es preferible la monoterapia siempre que sea posible, es necesaria con frecuen-
cia la “polifarmacia racional” en el tratamiento del SDRC para optimizar la analgesia.
408 409
paciente musculoesquelético
similar, pero aunque no se encontraron diferencias significativas, el grupo de DMSO 3.15.2.3 Antidepresivos
en general fue mejor. El análisis de subgrupos reveló que para los SDRC que cursan
en fase caliente fue mejor el DMSO, mientras que los pacientes con CRPS frío fueron Hay escasa evidencia que apoye el uso de antidepresivos en el SDRC (en su mayoría
mejor con NAC. Pero aunque la magnitud de los resultados fue grande, la falta de un de nivel de evidencia 4) .Sólo los ADT (antidepresivos tricíclicos tienen alguna evidencia
grupo de placebo disminuye la fortaleza de este estudio. en estudios no ciegos y no randomizados (nivel 3 de evidencia).
En el SDRC existe una cascada exagerada de citoquinas inflamatorias que pueden A pesar de ello y con las mismas premisas con las que utilizamos los anticonvulsivan-
contribuir a las alteraciones sensoriales y autonómicas vistas en los pacientes. Actual- tes se utilizan los antidepresivos tricíclicos (a bajas dosis y con precaución en ancianos)
mente existen estudios que valoran la posibilidad de tratamiento inmunosupresor o y los que son inhibidores duales de la recaptación de Serotonina y Noradrenalina (Du-
inmunomodulador y existen estudios en animal con ciclosporina, talidomida, y meto- loxetina y Venlafaxina).
trexato que respaldan esta teoría. Talidomida (TNF-α e IL 1-e inhibidor -6, entre otros
Si el paciente tiene como comorbilidad un estado de ansiedad o depresión añadida se
efectos inmunomoduladores) ha mostrado alguna promesa, en primer lugar en caso
debe prescribir un antidepresivo dual porque los tricíclicos a las dosis empleadas en el
de casos clínicos y en estudios abiertos. Del mismo modo la lenalidomida podría ser
tratamiento del dolor no son antidepresivos.
útil. Sin embargo en la práctica clínica estos tratamientos son reservados para casos
muy puntuales debido a la posibilidad de efectos secundarios (entre otros una poli-
neuropatía mixta en más del 40% de los casos y el riesgo de alteraciones congénitas
asociadas al uso de talidomida), la falta de evidencia y el precio. Otras terapias biológi- 3.15.2.4 Opioides
cas como el etanercept e infliximab han sido utilizadas en casos puntuales. Pero no se
Existe controversia sobre la utilidad de los opioides en el tratamiento del SDRC. En
puede recomendar su uso por los mismos motivos expuestos anteriormente.
general se cree que los opiáceos son menos eficaces en el dolor neuropático en opo-
sición a su uso en dolor nociceptivo. Sin embargo, hay evidencias que demuestran que
los opioides puede reducir el dolor y mejorar la calidad de vida en pacientes con dolor
3.15.2.2 Anticonvulsivantes neuropático, aunque no existen estudios bien controlados que demuestren mejoría a
largo plazo en el dolor neuropático en pacientes tratados con opiáceos.
La utilización de estos fármacos en el SDRC se hace en base a la posible implicación
de los mecanismos fisiopatológicos, pero existen escasas evidencias en la literatura El dilema a largo plazo el uso de opioides en el SDRC es que el uso prolongado de
médica que avalen esta práctica. opioides puede resultar en problemas como la tolerancia, hiperalgesia, en consecuen-
cia, aunque los opioides el tratamiento pueden ser prescritos para reducir el dolor y
Sólo existe un ensayo con gabapentina que demuestra un efecto moderado, aunque
mejorar la función, el tratamiento puede dar lugar a más dolor y disfunción en algunos
en el mismo hacían periodos de tratamiento y de lavado sin tratamiento, lo cual es
pacientes. Por otro lado, en la clínica el desarrollo de estos problemas no es frecuente
poco extrapolable a la práctica clínica habitual.
y no existen muchas alternativas en pacientes que como estos tienen un dolor mixto y
En general en la práctica clínica se utilizan las guías de dolor neuropático periférico en pocas expectativas en el tratamiento.
el SDRC con la utilización de anticonvulsivantes (como Gabapentina y Pregabalina) en
primera línea de tratamiento si ha fracasado el tratamiento tópico.
3.15.2.5 Bifosfonatos
Tienen efecto en la comorbilidad asociada (ansiedad) la Gabapentina y la Pregabalina.
Los bifosfonatos (como por ejemplo, pamidronato, clodronato, alendronato) inhiben la
resorción ósea y son de los pocos tratamientos que tienen evidencia en el tratamiento
del SDRC. Aunque el mecanismo primario de estos agentes se ha pensado para ser
la prevención de la osteoporosis asociada con SDRC, otros mecanismos periféricos y
centrales pueden ser relevantes.
410 411
paciente musculoesquelético
En dos ensayos controlados con placebo de los bifosfonatos para el tratamiento del La ketamina es un antagonista de NMDA fuerte que ha sido utilizado por vía intraveno-
SDRC, alendronato (7,5 mg por vía intravenosa al día durante 3 días) o clodronato (300 sa para el tratamiento del SDRC y otras condiciones de dolor neuropático. Reciente-
mg por vía intravenosa al día durante 10 días) demostraron una mejoría en dolor, en mente se han publicado estudios a dosis relativamente bajas por vía intravenosa (10-
comparación con el placebo. Más recientemente, el alendronato (40 mg al día durante 30 mg / hora) en pacientes con SDRC durante varios días a 2 semanas en un centro
8 semanas) fue estudiado en un ensayo aleatorizado, controlado con placebo. Todos hospitalario. En este estudio retrospectivo, observaron una significativa mejoría a largo
los pacientes tratados con alendronato tuvieron una marcada mejoría en los niveles de plazo. La ketamina intravenosa también se ha utilizado en el SDRC pacientes en dosis
dolor espontáneo, la tolerancia de presión, y movilidad de la articulación. mucho más altas (5-7 mg / kg / hora) para la duración de 5 a 7 días en una unidad
de cuidados intensivos, aunque estos resultados sólo se han presentado en forma de
póster y se necesitan más estudios para avalar su uso en la práctica clínica. La prin-
cipal limitación de la ketamina son los efectos secundarios como nauseas, vómitos
3.15.2.6 Calcitonina
mareo, somnolencia y efectos psicomiméticos que hacen más compleja su utilización.
La calcitonina es una de los fármacos más estudiados en el tratamiento del SDRC.
Dextrometorfano, la memantina y amantadina son bloqueantes del NMDA mucho más
La calcitonina proporciona algunos efectos analgésicos y regula el metabolismo de
débiles con menos efectos secundarios que la ketamina pero con escasa eficacia en
los huesos y del calcio en la sangre. Existen meta-análisis con un número limitado de
la clínica.
estudios controlados (nivel de evidencia 1) que demuestra el valor de la calcitonina
intranasal a dosis de 100-300 U por día en el SDRC. Sin embargo, otros dos ensayos
clínicos con calcitonina en SDRC, de alta calidad dieron resultados contradictorios: en
un estudio se vio una mejoría significativa en la intensidad del dolor después de la ad- 3.15.2.9 Fármacos adrenérgicos
ministración de 100 UI calcitonina tres veces al día durante 3 semanas y en el otro no
se observo mejoría después de la administración de 200 UI calcitonina dos veces al día Fármacos antagonistas α-adrenérgicos (por ejemplo, fentolamina, fenoxibenzamina,
durante 4 semanas. Con estos nuevos estudios no podemos concluir en la evidencia la clonidina y reserpina) se han utilizado clínicamente para el tratamiento del SDRC
sobre la eficacia de la calcitonina en el SDRC. sin una buena evidencia en estudios prospectivos aleatorizados. La justificación de su
utilización es el papel reconocido del sistema nervioso simpático en el SDRC y la teoría
de que el bloqueo del mismo produce un alivio del dolor.
3.15.2.7 Bloqueantes de los canales del sodio Fentolamina en forma intravenosa se ha utilizado para evaluar el dolor mantenido sim-
páticamente, con escasas evidencias.
La lidocaína intravenosa bloquea de manera potente los canales del sodio y ha de-
mostrado su eficacia en varios estudios no controlados de dolor neuropático y en el La clonidina oral no ha demostrado una eficacia significativa en el dolor neuropático
tratamiento del SDRC. Nuestra experiencia es muy positiva a dosis de 1,5 a 3 mg/kg/ y es desaconsejada debido a su perfil de efectos secundarios, además de no haber
día en periodos de 10 a 15 sesiones. demostrado datos convincentes en las revisiones sistemáticas. Sin embargo, se ha
empleado con más éxito por vía intratecal en casos seleccionados.
412 413
paciente musculoesquelético
3.15.2.10 Agentes tópicos pacientes 6 fueron sometidos al implante de una bomba intratecal y fueron monitoriza-
dos durante 1,7 años como parte de un ensayo abierto con diversos grados de éxito.
Los agentes tópicos incluyen un parche de lidocaína al 5%, mezcla eutéctica de crema
de anestesia local, y la capsaicina, ninguno de los cuales se ha estudiado directamente En general el dolor, la alodinia y los trastornos autonómicos mostraron buena res-
en el SDRC con los ensayos controlados. Además, otras mezclas de compuestos (por puesta a esta terapia. Sin embargo los principales efectos secundarios del proceso
ejemplo, la ketamina, antidepresivos tricíclicos) se han prescrito, a pesar de que los de selección y la necesidad de conocer y tratar los efectos secundarios del baclofeno
beneficios con el uso de estas cremas compuestas es anecdótica. junto a la escasa evidencia hacen que no sea una terapia recomendada excepto en
casos excepcionales.
El parche de lidocaína está aprobado para el tratamiento de la neuralgia postherpéti-
ca pero se utiliza cada vez más para el SDRC. La lidocaína que produce el alivio del
dolor a través de la disminución de descargas ectópicas en los nervios periféricos
aferentes sensoriales, produciendo un alivio del dolor en ausencia de anestesia local. Bloqueo simpático por vía intravenosa
Su principal ventaja es los escasos efectos secundarios y la falta de interacciones Los bloqueos regionales endovenosos (procedimiento que permite la colocación del
medicamentosas. fármaco directamente en la extremidad afectada) con guanetidina, clonidina, reserpina
y droperidol se han valorado en dos meta-análisis y una revisión sistemática viéndose
La capsaicina es el ingrediente activo de los pimientos picantes. Es un compuesto que que los bloqueos simpáticos intravenosos no tienen ningún valor añadido (reducción
actúa sobre los receptores vaniloides y que produce dependiendo de las concentra- del dolor), en comparación con el placebo en pacientes con SDRC-I.
ciones desde una liberación y depleción de la sustancia P (a bajas concentraciones)
hasta una regresión de los nociceptores (a altas concentraciones) Existe algún estudio Hay indicios de que 10-20 mg de ketanserina intravenosa reduce el dolor en pacientes
abierto que avala su uso, pero faltan más estudios que lo confirmen. La utilización en con SDRC-I
pomadas de baja concentración no es muy eficaz por la falta de cumplimiento habi-
tualmente. En el futuro el parche de capsaicina nos podrá quizás aportar resultados en
esta patología pero ahora sólo existen casos clínicos sin control. Bloqueo simpático percutáneo
Según las diferentes evidencias de la literatura, la administración rutinaria de la simpa-
tectomía percutánea en pacientes con SDRC-I no es útil
3.15.2.11 Tratamiento intervencionista Sin embargo, el gran problema es la dificultad de encontrar estudios que definan si el
Toxina botulínica bloqueo simpático era correcto o no. Existen criterios (definidos por Malmqvist y col)
No hay pruebas suficientes de que la toxina botulínica A sea eficaz en el tratamiento de para definir el éxito en el que se necesitan 4 de 5. Estos criterios son: (1) la producción
la distonía en pacientes con un SDRC-I, por lo que aunque existen algunos estudios de un Síndrome de Horner; (2) el aumento de la temperatura de la piel> 34C, (3) el
no se recomienda su uso. aumento del flujo sanguíneo de la piel> 50% en la flujometría láser Doppler, (4) la abo-
lición de la resistencia de la piel a la presión ulnar, y (5) la abolición de la resistencia de
la piel a la presión radial. Por ello la tasa de bloqueos fallidos o incompletos es alta y
estas revisiones no han tomado en cuenta este factor (que era analizado en menos del
Baclofeno intratecal 20% de los estudios). En resumen, hay cierta evidencia (aunque limitado, nivel 2) para
La terapia con baclofeno intratecal (ITB) es una técnica invasiva que sólo se ha inves- la eficacia del bloqueo simpático en el tratamiento del SDRC, aunque su mayor utilidad
tigado en dos pacientes con SDRC-I sólo y en siete pacientes con SDRC-I y distonía es demostrar la importancia del componente simpático en algunos de estos pacientes
asociada resistentes a todas las terapias convencionales. En el caso de los pacientes frente a aquellos que mantienen un dolor simpático independiente.
con distonía asociada este estudio fue precedido por uno doble ciego controlado con
placebo cruzado para determinar si los pacientes eran elegibles. La comparación con Cuando realizamos un bloqueo simpático y el paciente obtiene analgesia y mejoría clí-
un placebo reveló que el baclofeno significativamente mejora los resultados, de estos 7 nica, está indicado realizarlo periódicamente para mejorar la eficacia de la fisioterapia y
así lo establecen todas las guías de consenso de tratamiento del SDRC.
414 415
paciente musculoesquelético
En conclusión la EME puede ser útil en pacientes con SDRC cuidadosamente selec-
cionados y con una fase de prueba positiva y a largo plazo consigue una reducción del
dolor y mejora la calidad de vida, pero no mejora la función.
416 417
paciente musculoesquelético
Historia
Exploración física
418 419
M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
4. MANEJO DEL
PAC I E N T E G E R I ÁT R I C O
musculoesquelético
420 421
paciente musculoesquelético
La evaluación y tratamiento del dolor en el paciente anciano supone un reto para los
profesionales responsables de su atención, puesto que en esta población existen una
serie de condicionantes que dificultan el proceso diagnóstico y terapéutico. Estos con-
4.1.2 Las barreras diagnósticas
dicionantes derivan tanto del propio proceso de envejecimiento como de la comorbili- El mejor indicador del tipo e intensidad de dolor es aquello que el propio paciente
dad, la situación funcional, cognitiva y afectiva, a menudo confluentes en el caso de los expresa de forma espontánea o en el proceso de anamnesis. En el paciente anciano,
pacientes ancianos “frágiles”, y se pueden resumir en los siguientes puntos: pese a todo, las habilidades para comunicar la experiencia dolorosa pueden estar
menguadas por el uso de sedantes, patología neurodegenerativa, cuadros de delirium,
déficits sensoriales, trastornos afectivos o un bajo nivel de instrucción, que pueden
4.1.1 La presbialgia aparecer de forma más o menos simultánea en un número no despreciable de casos.
La evaluación del dolor en esta población obliga por lo tanto a practicar una evaluación
A pesar de que encara el concepto, no está muy definido y existen opiniones discre- integral del paciente siguiendo los principios de la valoración geriátrica, combinando
pantes, cada vez parece más aceptado que el “dolor geriátrico” constituye, como otros una anamnesis exhaustiva y dirigida con una exploración física meticulosa y una eva-
síndromes geriátricos, una entidad clínica con rasgos diferenciales respecto al dolor en luación funcional (sobre todo tests de capacidad motora que pueden poner de mani-
el adulto. Las diferencias fundamentales estarían relacionadas con factores psicoso- fiesto dolores que no se detectan en condiciones de reposo), a menudo difícil de llevar
ciales (la “adaptación” al dolor, entendido como un rasgo inseparable y escasamente a cabo de forma completa en un paciente hospitalizado pero que no tiene que faltar
modificable del proceso de envejecimiento, muchas veces asociado a componentes en ningún caso. La valoración cognitiva y de los déficits sensoriales ayudará a elegir
afectivos como la depresión y la ansiedad), la percepción de los diferentes tipos de aquellas herramientas diagnósticas más apropiadas para el segmento de población
dolor (mayor vulnerabilidad al dolor neuropático) o la menor capacidad de respuesta anciana con demencia, patología neurológica aguda o déficits sensitivos crónicos o
orgánica frente a la lesión tisular o neuronal en las lesiones agudas, con riesgo de hi- desconocidos no susceptible de responder de forma adecuada a los instrumentos de
peralgesia más prolongada. evaluación del dolor de uso habitual. Los trastornos afectivos, sobre todo la ansiedad
y la depresión, tienen que ser detectados mediante entrevistas estructuradas o he-
Además de las diferencias en las causas del dolor y la presencia habitual de otra pa- rramientas de screening validadas en población anciana, puesto que existe una clara
tología asociada, existen datos que parecen demostrar que el envejecimiento “per se” correlación entre estos trastornos y la presencia de dolor.
422 423
paciente musculoesquelético
4.1.3 Comorbilidad y fragilidad vejecimiento y la patología comórbida preexistente. Es una forma habitual de presen-
tación de las enfermedades en el paciente de edad avanzada y exigen una cuidadosa
La fragilidad es un fenotipo clínico característico (aunque no exclusivo) del paciente valoración de su significado y etiología para realizar un correcto tratamiento.
anciano, que denota un estado de vulnerabilidad ante la presencia de eventos estre-
sores (enfermedad aguda, cambios en la medicación, déficits sensoriales…), como Pese a la importancia de estos cuadros, existen pocos estudios que aborden su eva-
consecuencia de la disminución experimentada por los mecanismos de “reserva ho- luación y tratamiento, manteniéndose incluso en muy ancianos el patrón habitual de
meostática” del organismo, cuya existencia supone un riesgo futuro elevado de acon- enfermedad concreta e individualizada y, en el mejor de los casos, su repercusión fun-
tecimientos adversos relacionados con el estado de salud. Se han propuesto múltiples cional y mental. Suelen ser fuente de incapacidad funcional o social del enfermo que
definiciones operativas de aquello que caracteriza a un estado de fragilidad, siendo la los padece. Su conocimiento resulta imprescindible para realizar una correcta valora-
más conocida el fenotipo de Fried, caracterizado por la presencia objetiva de 3 de los ción geriátrica, ya que de no ser así pueden o bien pasar desapercibidos o bien inducir
siguientes datos: a la práctica de exploraciones o instauración de tratamientos de escaso o nulo valor en
• Pérdida no intencionada de peso orientados a la búsqueda y curación de una enfermedad “concreta”, con un potencial
de yatrogenia no despreciable.
• Debilidad muscular (escasa fuerza prensora)
• Cansancio/escasa resistencia al esfuerzo La primera sistematización de estos síndromes se debe a Kane (en su libro Essentials of
• Lentitud en la marcha Clinical Geriatrics de 1989), mediante una nemotécnica conocida como regla de las «íes»:
• Gasto calórico bajo — Immobility: inmovilidad.
— Instability: inestabilidad y caídas.
La fragilidad no es sinónimo de comorbilidad, entendida como la presencia simultánea
— Incontinence: incontinencia urinaria y fecal.
de varias enfermedades, aunque en muchas ocasiones ambas coexisten y es la pre-
sencia de patología aguda o crónica la que pone de manifiesto las consecuencias de — Intellectual impairment: demencia y síndrome confusional agudo.
la presencia del fenotipo “frágil”, cuya presencia en ancianos implica un riesgo mucho — Infection: infecciones.
más elevado de morbimortalidad. — Inanition: desnutrición.
En los pacientes frágiles, la presencia de dolor actúa como un factor agravante que — Impairment of vision and hearing: alteraciones en vista y oído (deficits
limita aún más la función física de los pacientes, favoreciendo entre otras complica- sensoriales)
ciones la aparición de caídas, pérdida de masa muscular, ansiedad o depresión. En — Irritable colon: estreñimiento, impactación fecal.
un estudio reciente (CHAMP), Blyth et al. demostraron la existencia de una correlación — Isolation (depression)/insomnio: depresión/insomnio.
significativa entre la presencia del fenotipo de fragilidad y la presencia e intensidad de — Iatrogenesis: yatrogenia.
dolor intrusivo en una cohorte de pacientes ancianos, siendo aquellos que presenta-
ban tanto elevada comorbilidad como fragilidad de forma simultánea los que presenta- — Inmune deficiency: inmunodeficiencias.
ban este tipo de dolor en mayor número y con mayor magnitud. — Impotence: impotencia o alteraciones sexuales.
De todos ellos, el síndrome de inmovilidad, las caídas y la impactación fecal son los
que presentan una asociación potencialmente mayor con la presencia de dolor.
4.1.4 Los síndromes geriátricos
Los síndromes geriátricos son formas de presentación de la enfermedad caracterís-
ticas del paciente anciano. Pueden definirse como cuadros clínicos de expresión fe- 4.1.4.1 Síndrome de inmovilidad
notípica característica, que pueden ser debidos a varias causas (no necesariamente
El síndrome de inmovilidad se suele definir como una disminución de la capacidad para
concurrentes), facilitados por la presencia de los cambios fisiológicos asociados al en-
desempeñar las actividades básicas de la vida diaria (ABVD). Se caracteriza por una
424 425
paciente musculoesquelético
reducción marcada de la tolerancia al ejercicio y progresiva debilidad muscular que Las consecuencias funcionales son
imposibilitan la deambulación Es un proceso dinámico debido a periodos prolongados • Aparato osteo-articular: La inactividad física conduce a la atrofia de los
de inactividad que inducen cambios en diversos órganos con un grado de afectación ligamentos, con fibrosis capsular y contracturas dolorosas. El paciente
variable en función del estado basal, de las etiologías implicadas, del tiempo transcu- inmovilizado es más susceptible a artritis, miofascitis y tenosinovitis,
rrido y de la actitud del paciente y de sus cuidadores para su resolución. que ocasionan impotencia funcional e inmovilidad por dolor. A su vez se
agravan las artropatías preexistentes que conducen a anquilosis articular,
El 18% de las personas mayores de 65 años tiene problemas para moverse sin ayuda y
adoptándose posturas fijas, generalmente en flexión. Los cambios objetivables
a partir de los 75 años más del 50% tienen problemas para salir de casa, de los que un
en la movilidad articular comienzan a detectarse en la primera semana de
20% quedan confinados en su domicilio. La etiología suele ser multifactorial, aunque
inmovilización. Es especialmente alto el riesgo de contractura en la articulación
la causa principal es el encamamiento prolongado por convalecencia tras procesos
de la rodilla con el reposo en cama, también el equinismo y el flexo de cadera.
agudos, sobre todo tras una hospitalización prolongada. Son muchas las enfermeda-
La inactividad acelera también la aparición de osteoporosis. La pérdida de
des que pueden relacionarse con el síndrome de inmovilidad, destacando los trastor-
calcio es más intensa en los primeros días de la inmovilización, estabilizándose
nos músculoesqueléticos (enfermedades reumatológicas, fracturas…) y los trastornos
después, pero siempre se sitúa por encima de lo normal. Aunque la masa
neurológicos (enfermedad cerebrovascular, enfermedad de Parkinson o demencias en
ósea se restaura posteriormente después de la inmovilización, el índice de
fases avanzadas, neuropatías periféricas, atrofias multisistémicas, hidrocefalia normo-
restitución es cuatro veces menor que el índice de perdida de masa ósea. Los
tensiva…).
déficits residuales pueden persistir en el cuello femoral y en la columna lumbar.
Los principales cambios fisiopatológicos que la inmovilidad confiere al sistema muscu- La consecuencia más directa de la pérdida de masa ósea es la producción de
lo-esquelético son: fracturas espontáneas o ante traumatismos mínimos, más frecuentes a nivel
de columna, fémur y extremidad distal de radio, zonas con alto contenido de
• Atrofia muscular: El músculo inmovilizado pierde masa. Los músculos con
hueso trabecular, que es el que más se afecta.
fibras tipo I (rojas) se atrofian en mayor medida que los ricos en fibras tipo II.
La atrofia muscular se corresponde con una disminución del grosor de las • Sistema cardio-respiratorio: la redistribución de los líquidos corporales puede
miofibrillas, sin modificación del número de éstas, existiendo una disminución facilitar fenómenos tromboembólicos por éstasis venoso en miembros
del tamaño de las sarcómeras. inferiores debido al bombeo insuficiente de los músculos de las pantorrillas y el
estado de hipercoagulabilidad, inducido por reducción del volumen plasmático
• Pérdida de fuerza: En reposo absoluto el músculo pierde entre el 1 y 3% de
y la deshidratación. A nivel respiratorio se observan modificaciones de la
su fuerza cada día, por lo que al cabo de un mes habrá perdido un 50%. Los
mecánica respiratoria, disminución de los volúmenes respiratorios pulmonares,
músculos de los miembros inferiores, sobre todo los antigravitatorios, pierden
ineficacia de la aclaración mucociliar y desequilibrios en la relación ventilación-
fuerza a doble velocidad que los de los miembros superiores durante el reposo
perfusión. Todo ello favorece la aparición de atelectasias, neumonías,
en cama; asimismo, los músculos grandes se debilitan a mayor velocidad que
sobreinfecciones pulmonares e hipoxias.
los pequeños.
• Sistema digestivo: disminución del apetito y de la ingesta, a menudo asociado
• Disminución de la resistencia a la fatiga: Es debida a los cambios histoquímicos
a una reducción de la movilidad del colon que conduce al estreñimiento.
que se producen en el músculo inmovilizado, que consisten en menor
capacidad oxidativa de las mitocondrias, menor tolerancia al déficit de • Otras alteraciones: el encamamiento puede ser un factor desencadenante de
oxígeno, más rápida acumulación y menor tolerancia al ácido láctico y mayor retención urinaria, ya que las micciones tardías por falta de acceso al WC y las
dependencia del metabolismo anaeróbico. micciones incompletas por la postura facilitan la estasis urinaria, debilitando
la musculatura de la pelvis y el músculo detrusor. El vaciado incompleto de
• Rigidez muscular: el músculo inmovilizado pierde rápidamente su elasticidad,
la vejiga predispone a la formación de cálculos en la vejiga y a la infección.
extensibilidad, contractibilidad y otras propiedades tensiles por aumento del
La inmovilidad se asocia con la aparición de úlceras por decúbito en zonas
tejido conjuntivo en el endomisio y perimisio, que es mayor en los músculos
corporales con prominencias óseas. En aquellos puntos del cuerpo en que
con fibras tipo I, muy ricas en capilares, por lo que se reduce la circulación y
la fuerza de la gravedad excede la presión capilar se producirá isquemia y
esto a su vez conduce a mayor fibrosis. Estas alteraciones son mayores si el
músculo está inmovilizado en posición acortada.
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paciente musculoesquelético
la superficie de la piel se necrosa si este fenómeno se mantiene durante Los factores de riesgo se subdividen en:
varias horas. Finalmente, la inmovilización supone una disminución de 1) Intrínsecos:
estímulos cinestésicos, visuales, auditivos, táctiles y sociales, lo que conduce
a) Inestabilidad asociada al envejecimiento: depende de múltiples
a alteraciones en la coordinación, el equilibrio y la percepción, y a un mayor
factores como el aumento el tiempo de latencia en la respuesta refleja
riesgo de desarrollo de cuadro confusional.
motora inconsciente, la disminución de la sensibilidad propioceptiva,
los transtornos visuales propios del anciano (degeneración macular,
4.1.4.2 Caídas glaucoma..) o el presbivértigo que caracteriza a las edades avanzadas.
b) Factores conductuales y cognoscitivos: las alteraciones en la atención
Las caídas son una de las principales causas de lesiones, deterioro funcional e incluso
y el estado de alerta, los déficits de memoria, la presencia de depresión,
defunción en los ancianos. Pueden definirse como la precipitación al suelo que ocurre
los trastornos del sueño y el deterioro cognitivo actúan como factores
de forma repentina e involuntaria, no motivada por un evento intrínseco mayor (por
facilitadores de caídas.
ejemplo un ictus) o una fuerza externa (por ejemplo un atropellamiento), con o sin lesión
secundaria, confirmada por el paciente o testigo. c) Comorbilidad: Son múltiples las patologías que aumentan la propensión de
los ancianos a caer, desde la patología degenerativa osteoarticular hasta
Para una adecuada movilización son necesarias la estabilidad antigravitatoria en po- las lesiones del sistema nervioso central, pasando por las polineuropatías,
sición erecta, el control postural y del equilibrio y la coordinación del movimiento. Las la patología cardiovascular (hipotensión ortostática, síncopes, bloqueos
estrategias desarrolladas durante la postura para evitar caer se encuentran alteradas de conducción), la hipoxemia, la hipoglucemia, así como los efectos
en el anciano; la inestabilidad se incrementa con el paso de los años, en parte debido secundarios de múltiples fármacos (todos lo hipnosedantes, lo
a alteraciones en las vías sensoriales eferentes y la inadecuada respuesta motora aso- neurolépticos, lo hipoglucemiantes, los vasodilatadores…) de uso común
ciada al enlentecimiento de los procesos coordinadores centrales. en esta población.
Caer es un indicador de fragilidad en la vejez y son predice mortalidad (las caídas están 2) Extrínsecos: son las condiciones del entorno del paciente que facilitan la
entre las seis primeras causas de muerte en esta población). La incidencia anual de posibilidad de caer en pacientes que están predispuestos a ello.
caídas entre los ancianos que viven en la comunidad es de alrededor del 25% entre los a) Actividad que desarrolla el paciente: en ancianos la mayor parte de caídas
65-70 años y asciende al 35% para los mayores de 75 años. El 50% de los ancianos derivan de tropiezos en las transferencias o durante la deambulación, no
que caen lo hacen en forma repetida con posibilidad de fractura hasta en un 5% que suelen acontecer en situaciones de mayor riesgo (subir a una silla p.ej.).
aumenta con cada nuevo accidente. La presentación de caídas es mayor en ancianos
b) Barreras arquitectónicas: escaleras, bordillos…
institucionalizados alcanzando un 50%; ellos caen por lo menos una vez al año, fractu-
rándose hasta en un 25%. Con una mayor prevalencia en el sexo femenino, hasta los c) Elementos del domicilio: mobiliario, alfombras, suelos deslizantes.
75 años, a partir de esa edad, las cifras son similares para ambos sexos. La mayoría d) Vestido y calzado: ropa larga, calzado no ajustado.
de las caídas no tienen consecuencias graves, aunque en su gran mayoría son genera- e) Condiciones ambientales: humedad, agua, calor.
doras de dolor; las lesiones de tejidos blandos ocurren en un 5% y otro 5% presentan
fracturas. Las fracturas son una importante causa de incapacidad física posterior al Globalmente, se considera que la edad avanzada, el deterioro funcional y cognitivo,
accidente, teniendo en cuenta que menos de la mitad de los que sobreviven a ella no las alteraciones visuales, las alteraciones objetivadas en equilibrio y marcha y el ante-
recuperan nunca el nivel de funcionamiento previo. Las secuelas psíquicas son de gran cedente de caídas previas son los principales factores de riesgo de futuras caídas en
importancia: el miedo a volver a caer o un estado continuo de ansiedad, pérdida en el paciente anciano.
la confianza y aislamiento social pueden resultar perjudiciales y con un alto riesgo en
restricción de autonomía.
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Geriatric Concept. J Am Geriatr Soc 2007;55:780-91(**). Revisión global del concepto de
síndrome geriátrico
- Leveille et al. Chronic Musculoskeletal Pain and the Occurrence of Falls in an Older Popula-
tion. JAMA 2009;302:2214-21(**) Analiza la influencia del dolor como causa de caídas en el
paciente anciano Puntos claves
- Miró J et al. Pain in Older Adults: A Prevalence Study in the Mediterranean Region of Cata- • El dolor es un síntoma muy prevalente en ancianos, con
lonia. Eur J Pain 2007;11:83-92(*) Una aproximación local a la prevalencia del dolor en la características diferenciales con relación a la población adulta,
comunidad frecuentemente poco o mal valorado y a menudo infratratado
432 433
paciente musculoesquelético
4.2 Síndrome de inmovilidad - Geriatria con contracturas en flexión de los miembros y disminución de la fuerza muscular, neu-
ropatías periféricas, atrofias multisistémicas, hidrocefalia normotensiva, etc...
4.2.1 Introducción
Las principales complicaciones en el sistema musculoesquelético son:
Una de las principales consecuencias del paciente anciano es la inmovilidad y la inci-
dencia de caídas con las consecuencias funcionales que esto conlleva. 1.1- Atrofia muscular: El músculo inmovilizado pierde masa. Los músculos
con fibras tipo I (rojas) se atrofian en mayor medida que los ricos en fibras tipo
El anciano inmovilizado es considerado un paciente de alto riesgo para la aparición de II. La atrofia muscular se corresponde con una disminución del grosor de las
complicaciones médicas. miofibrillas, sin modificación del número de éstas, existiendo una disminución
del tamaño de las sarcómeras.
El síndrome de inmovilidad se suele definir como una disminución de la capacidad para
1.2-Pérdida de fuerza: En reposo absoluto el músculo pierde entre 1 y 3% de
desempeñar las actividades básicas de la vida diaria (ABVD). Se caracteriza por una
su fuerza cada día, por lo que al cabo de un mes habrá perdido la mitad. Los
reducción marcada de la tolerancia al ejercicio (respuesta taquicardizante, hipertensión
músculos de los miembros inferiores, sobre todo los antigravitatorios, pierden
arterial, disnea..), y una progresiva debilidad muscular que imposibilitan la deambu-
fuerza a doble velocidad que los de los miembros superiores durante el reposo
lación. Es un proceso dinámico debido a periodos prolongados de inactividad que
en cama y asimismo los músculos grandes se debilitan a mayor velocidad que
inducen cambios en diversos órganos con un grado de afectación variable en función
los pequeños.
del estado basal, de las etiologías implicadas, del tiempo transcurrido y de la actitud
del paciente y de sus cuidadores para su resolución. 1.3-Disminución de la resistencia a la fatiga: Es debida a los cambios
histoquímicos que se producen en el músculo inmovilizado, que consisten en
menor capacidad oxidativa de las mitocondrias, menor tolerancia al déficit de
oxígeno, más rápida acumulación y menor tolerancia al ácido láctico y mayor
4.2.2 Epidemiología dependencia del metabolismo anaeróbico.
El 18% de las personas mayores de 65 años tiene problemas para moverse sin ayuda, 1.4-Rigidez muscular: el músculo inmovilizado pierde rápidamente su
y a partir de los 75 años más del 50% tienen problemas para salir de casa, de los que elasticidad, extensibilidad, contractibilidad y otras propiedades tensiles por
un 20% quedan confinados en su domicilio. aumento del tejido conjuntivo en el endomisio y perimisio, que es mayor en
los músculos con fibras tipo I, muy ricas en capilares, por lo que se reduce la
circulación y esto a su vez conduce a mayor fibrosis. Estas alteraciones son
mayores si el músculo está inmovilizado en posición acortada.
4.2.3 Causas de inmovilidad
La etiología suele ser multifactorial, aunque la causa principal que observamos es el
encamamiento prolongado por convalecencia tras procesos agudos, sobre todo tras
una hospitalización prolongada. Son muchas las causas que pueden relacionarse con CONSECUENCIAS FUNCIONALES
el síndrome de inmovilidad: 1.- Aparato osteo-articular:
Las enfermedades más frecuentes que pueden cursar con inmovilidad son los trastor- La inactividad física conduce a la atrofia de los ligamentos, con fibrosis capsular y
nos musculoesqueléticos, como las enfermedades reumatológicas que conllevan in- contracturas dolorosas. El paciente inmovilizado es más susceptible a artritis, mio-
movilidad por dolor y deformidad, fracturas de cadera y miembros inferiores. También fascitis y tenosinovitis, que ocasionan impotencia funcional e inmovilidad por dolor. A
los trastornos neurológicos por enfermedad cerebrovascular, enfermedad de Parkin- su vez se agravan las artropatías preexistentes que conducen a anquilosis articular,
son o demencias en fases avanzadas, que conllevan una alteración del tono muscular, adoptándose posturas fijas, generalmente en flexión. Los cambios objetivables en la
434 435
paciente musculoesquelético
movilidad articular comienzan a detectarse en la primera semana de inmovilización. Es postura facilitan la estasis urinaria, debilitando la musculatura de la pelvis y el músculo
especialmente alto el riesgo de contractura en la articulación de la rodilla con el reposo detrusor. El vaciado incompleto de la vejiga predispone a la formación de cálculos en
en cama, también el equinismo y el flexo de cadera. la vejiga y a la infección.
La inactividad acelera la aparición de osteoporosis. La pérdida de calcio es más inten- La inmovilidad se asocia con la aparición de úlceras por decúbito en zonas corpo-
sa en los primeros días de la inmovilización, estabilizándose después, pero siempre se rales con prominencias óseas. En aquellos puntos del cuerpo en que la fuerza de la
sitúa por encima de lo normal. Aunque la masa ósea se restaura posteriormente des- gravedad excede la presión capilar se producirá isquemia y la superficie de la piel se
pués de la inmovilización, el índice de restitución es cuatro veces menor que el índice necrosará si esta presión elevada se mantiene durante varias horas. Los pacientes
de perdida de masa ósea. Los déficits residuales pueden persistir en el cuello femoral ancianos tienen más riesgo.
y en la columna lumbar. La consecuencia más directa de la pérdida de masa ósea es
la producción de fracturas espontáneas o ante traumatismos mínimos, más frecuentes La inmovilización supone una disminución de estímulos cinestésicos, visuales, auditi-
a nivel de columna, fémur y extremidad distal de radio, zonas con alto contenido de vos, táctiles y sociales, lo que conduce a alteraciones en la coordinación, el equilibrio
hueso trabecular, que es el que más se afecta. y la percepción.
También existen una serie de alteraciones a nivel cardiovascular con redistribución de En el síndrome de inmovilidad, nuestros objetivos van encaminados a determinar la
los líquidos corporales. Todas estas alteraciones pueden facilitar fenómenos tromboe- etiología, la repercusión funcional, las complicaciones asociadas y los objetivos de
mbólicos por éstasis venoso en miembros inferiores debido al bombeo insuficiente de rehabilitación.
los músculos de las pantorrillas y estado de hipercoagulabilidad inducido por reduc-
4.2.4.1 Anamnesis
ción del volumen plasmático y la deshidratación.
• Antecedentes personales
A nivel respiratorio el encamamiento prolongado produce modificaciones de la mecá- • Situación basal: tipo de ejercicio físico habitual que realizaba y frecuencia,
nica respiratoria, disminución de los volúmenes respiratorios pulmonares, ineficacia uso de ayudas técnicas para la marcha.
de la aclaración mucociliar y desequilibrios en la relación ventilación-perfusión. Todo
• Forma de aparición y grado de inmovilidad: desde cuándo está
ello favorece la aparición de atelectasias, neumonías, sobreinfecciones pulmonares e
inmovilizado y la repercusión sobre ABVD (índice de Barthel), que se hayan
hipoxias.
muy relacionadas con la movilidad y AIVD (escala de Lawton) que determinan
si un sujeto puede ser capaz de vivir de forma totalmente independiente en la
comunidad.
3.- Sistema digestivo • Historia farmacológica: en especial psicofármacos y antihistamínicos que
En el aparato digestivo las complicaciones gastrointestinales consisten en disminución pueden alterar la movilidad.
del apetito y de la ingesta y en una reducción de la motilidad del colon que conlleva al • Detectar factores de riesgo para la inmovilidad: Patología crónica,
estreñimiento. estado mental, visión y audición, estado nutricional, historia previa de caídas,
antecedentes de fracturas, enfermedad aguda reciente, cambio de domicilio.
• Analizar factores psicosociales: Nivel socioeconómico, entorno social y
4.- Otras alteraciones familiar, recursos sociales.
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paciente musculoesquelético
438 439
paciente musculoesquelético
• Inicialmente se puede utilizar un andador, posteriormente un bastón o sin pasiva continua son eficaces para mantener el arco articular en pacientes
apoyo. Hay que vigilar la tolerancia cardiorrespiratoria. El objetivo es conseguir inmovilizados tras fracturas y cirugía osteoarticular.
que el anciano sea capaz de deambular por su domicilio y realizar las AVD con • Para el tratamiento de la contractura establecida se recomienda el estiramiento
el menor grado de ayuda posible. suave, progresivo y lento, más efectivo que el estiramiento rápido.
5-Mantenimiento • Para prevenir la osteoporosis en el paciente inmovilizado, son de mayor utilidad
los ejercicios isométricos que los isotónicos por la tracción axial que producen
• Debe adecuarse al grado de tolerancia física del paciente. El programa
en el hueso. Las actividades físicas que proporcionan carga vertical (marcha,
debe incluir ejercicios respiratorios, flexión y extensión de los miembros,
carrera, etc.) son las más idóneas para incrementar el contenido mineral óseo.
levantarse y sentarse, dar paseos cortos varias veces al día. El objetivo
La cinesiterapia utiliza los ejercicios de taloneo, realizados en sedestación o
fundamental es reforzar los grupos musculares directamente implicados en
bipedestación, como forma de choque osteogénico.
asegurar la autonomía en las actividades de la vida diaria, sobre todo para la
deambulación. La coordinación puede potenciarse con la realización seriada • Los ejercicios activos pueden minimizar en el enfermo encamado la perdida de
de un determinado ejercicio. Las manualidades son una buena alternativa. coordinación. Si el paciente está paralizado y está preservada la sensibilidad,
las movilizaciones pasivas mantienen la cinestesia articular y preparan para el
movimiento activo.
4.2.5 Prevención y tratamiento de las complicaciones
4.2.5.1 Complicaciones osteomusculares
4.2.5.2 Complicaciones respiratorias
Se realizarán lo antes posible movilizaciones pasivas y/ o activas y ejercicios isomé-
Los cambios fisiopatológicos en la función respiratoria y la mayor incidencia de compli-
tricos, según el estado del paciente, para luchar contra la atrofia muscular, así como
caciones respiratorias durante el encamamiento, hacen necesario establecer un pro-
estiramientos musculares diarios de 30 minutos de duración.
grama de rehabilitación respiratoria encaminado a mejorar la ventilación, favorecer la
Las contracciones isométricas están indicadas cuando la movilidad articular es impo- eliminación de secreciones y mantener la fuerza de la musculatura respiratoria. Las
sible, está contraindicada o es dolorosa. técnicas utilizadas son los cambios posturales, los ejercicios respiratorios y las técni-
cas de drenaje bronquial.
• La estimulación eléctrica es también efectiva en el mantenimiento del
trofismo muscular. En el músculo denervado se utilizan las corrientes de • Los cambios posturales permiten mejorar la ventilación pulmonar y la
baja frecuencia, de pendiente exponencial, que evitan el fenómeno de oxigenación, y favorecer la movilización de secreciones.
acomodación, y en el músculo inmovilizado o lesionado las corrientes • Mediante la realización de ejercicios respiratorios se pretende modificar la
bifásicas, que pueden acelerar el proceso de rehabilitación. frecuencia, profundidad y distribución de la ventilación y corregir la actividad
• Cuando el paciente abandona el encamamiento, la cinesiterapia debe tener muscular innecesaria durante la respiración, consiguiendo una mejor
como objetivo el reentrenamiento, que debe reproducir tan estrechamente ventilación y mayor oxigenación, disminuyendo el trabajo respiratorio y
como sea posible la tarea o actividad que se pretende recuperar o manteniendo la fuerza de los músculos respiratorios. Se realizaran ejercicios
perfeccionar. Los ejercicios más utilizados en esta fase son los isotónicos. diafragmáticos y de expansión torácica en decúbito supino y lateral. También
se harán ejercicios de inspiración máxima mantenida con inspirómetros
• La prevención de las rigideces articulares y contracturas musculares consiste
incentivos, para mejorar la fuerza de la musculatura inspiratoria. Para mejorar
en la movilización activa, o en su defecto, pasiva, lenta y cuidadosa de todas
la fuerza de los músculos espiratorios, necesaria para movilizar y expectorar
las articulaciones inmovilizadas. Un número mínimo de movilizaciones (de 6
secreción bronquial, se tonificará la musculatura abdominal mediante la
a 10), repartidas en dos sesiones diarias, puede ser suficiente. Es importante
realización de ejercicios abdominales suaves.
situar las articulaciones en posición funcional para evitar el acortamiento de
las estructuras capsuloligamentosas. Se modificaran las posiciones articulares • Las técnicas de drenaje bronquial pueden clasificarse en autónomas: drenaje
siguiendo un plan rotatorio preestablecido. Los aparatos de movilización postural, tos y expectoración dirigida, y asistidas: clapping y vibración torácica.
440 441
paciente musculoesquelético
El drenaje postural consisten colocar al paciente de modo que se favorezca el • Los bastones ingleses se utilizan en casos de debilidad muscular en ambos
drenaje de secreciones desde áreas especificas de los pulmones por medio miembros inferiores, incapacidad para apoyar uno de ellos, o afección
de la gravedad. Las posiciones utilizadas se basan en la anatomía del árbol importante del equilibrio.
bronquial y, mediante ellas, las secreciones acumuladas en un determinado El empleo de bastones aumenta el gasto de energía en la deambulación
segmento broncopulmonar se mueven hacia bronquios segmentarios, hasta en un 60%, por lo que debe potenciarse la resistencia y la fuerza de
desde donde pueden ser fácilmente movilizadas mediante técnicas de tos extremidades y tronco.
y expectoración asistidas. El conjunto de las técnicas de drenaje bronquial
• El andador, cuyo uso es recomendable tras periodos prolongados de
favorecen la eliminación de secreciones, reducen la resistencia de la vía
inmovilidad con debilidad generalizada o si la marcha no es estable. Existen
aérea, mejoran la ventilación y la oxigenación y reducen la incidencia de
distintos tipos y la elección dependerá de las características del enfermo.
complicaciones respiratorias.
• Si a pesar del tratamiento preventivo surgen las complicaciones, la actitud
4.2.5.5 Prevención del inmovilismo
sobre las mismas será intensificar estos tratamientos.
La mejor medida preventiva es mantener el grado de movilidad. Diversos estudios
4.2.5.3 Complicaciones cutáneas coinciden en señalar el ejercicio y en general la actividad física, como principal factor
para prevenir la inmovilidad. Los beneficios del ejercicio no disminuyen con la edad,
La aparición de úlceras por presión es una de las complicaciones más graves en el así se produce un aumento de la capacidad cardiovascular, de la musculatura y de la
paciente inmovilizado. Las actividades preventivas a realizar son: densidad ósea, disminuye la ansiedad, la hostilidad y los síntomas depresivos y favo-
rece la socialización.
• Cambios posturales: Deben seguir una rotación determinada, respetando la
alineación corporal. Se deben realizar los cambios cuidadosamente, sin arrastrar El anciano que lleva un tipo de vida autónoma y activa con la realización regular de
al paciente, evitando las fuerzas de cizallamiento y fricción. Repartir el peso ejercicio tiene disminuido estadísticamente su riesgo de mortalidad. Los mayores que
del cuerpo por igual a fin de evitar dolores musculares por contracturas de han hecho ejercicio desde siempre envejecen mejor y presentan menor incapacidad
compensación. En pacientes acostados deben hacerse cada 1-2 horas, para funcional. Según diversos estudios, la población que realiza menos ejercicio físico son
minimizar los efectos de la presión continuada sobre las prominencias óseas. los ancianos muy mayores y de sexo femenino.
En pacientes sentados se realizarán cada 10 minutos, levantando al mismo
durante 10 minutos, para evitar la aparición de úlceras por presión a nivel Es necesario estimular al anciano a mantenerse activo y proponerle que acuda a clu-
sacro. bes de ancianos o centros de día, si es posible. Además es importante permitir al
anciano que realice o participe todo lo que pueda en las actividades de la vida diaria y
• Cuidado de la piel y utilización de superficies especiales para el manejo de la
a su propio ritmo.
presión y protección de las zonas específicas de riesgo.
442 443
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444 445
paciente musculoesquelético
Escalones 4 - Precisa ayuda para tareas como finanzas domésticas, planificar comidas,
• 10 Independiente: capaz de subir y bajar un piso de escaleras sin ayuda o compra→ Demencia leve; MEC 20,0±4,8
supervisión, aunque utilice barandilla o instrumentos de apoyo. 5 - Precisa ayuda para seleccionar la ropa de vestir adecuada→ Demencia
• 5 Necesita ayuda: supervisión física o verbal. moderada; MEC 14,4±4,8
• 0 Dependiente: necesita alzamiento (ascensor) o no puede salvar escalones. 6 → Demencia moderada-grave; MEC 11,1±5,1
6a - Precisa ayuda para vestirse
Valoración: 100 independiente; 60 – 95 dependiente leve; 35 – 55 dependiente mo-
6b - Precisa ayuda para bañarse adecuadamente
derado; 20 – 30 dependiente grave, 0 – 15 dependencia total
6c - Precisa ayuda para secarse, etc.
6d - Incontinencia urinaria
4.3.2 Test de Pfeiffer 6e - Incontinencia fecal
7→ Demencia grave; MEC 0,3±0,8
1. ¿Cuál es la fecha de hoy? (mes, día y año)
7a - Lenguaje con escasas palabras inteligibles
2. ¿Qué día de la semana es hoy?
7b - Lenguaje con una sola palabra inteligible
3. ¿Cuál es el nombre de este lugar?
7c - Incapaz de deambular
4. ¿Cuál es su número de teléfono? o ¿Cuál es su dirección? (si no tiene
7d - Incapaz de sentarse
teléfono)
7e - Incapaz de sonreír
5. ¿Qué edad tiene usted?
7f - Permanece inconsciente
6. ¿Cuál es la fecha de su nacimiento? (mes, día y año)
7. ¿Cómo se llama el presidente del Gobierno?
8. ¿Quién era el presidente anterior? 4.3.4 Índice de Charlson
9. Diga el nombre y los apellidos de su madre
1 punto por ítem
10. Restar de 3 en 3 a partir de 20 (mínimo 2 restas)
1. Infarto de miocardio: debe existir evidencia en la historia clínica de que
Valoración: 0 – 2 errores probablemente sin deterioro cognitivo; 3 – 4 deterioro leve, el paciente fue hospitalizado por ello, o bien evidencias de que existieron
5 – 6 deterioro moderado; 7 a 10 deterioro severo. Permitir un error más en analfabetos cambios en enzimas y/o en ECG
y uno menos en personas con estudios superiores
2. Insuficiencia cardiaca: debe existir historia de disnea de esfuerzos y/o
signos de insuficiencia cardiaca en la exploración física que respondieron
favorablemente al tratamiento con digital, diuréticos o vasodilatadores. Los
4.3.3 GDS-FAST pacientes que estén tomando estos tratamientos, pero no podamos constatar
que hubo mejoría clínica de los síntomas y/o signos, no se incluirán como tales
1 - Sin alteraciones→ Individuo normal; MEC:29±1,7
3. Enfermedad arterial periférica: incluye claudicación intermitente, intervenidos
2 - Dificultad subjetiva para encontrar las palabras→ Individuo de edad de by-pass arterial periférico, isquemia arterial aguda y aquellos con aneurisma
avanzada, normal 28,2±2,7 de la aorta (torácica o abdominal) de > 6 cm de diámetro
3 - Dificultad para desarrollar su actividad laboral→ Demencia incipiente; MEC 4. Enfermedad cerebrovascular: pacientes con AVC con mínimas secuelas o
23,8±4,0 AVC transitorio
446 447
paciente musculoesquelético
5. Demencia: pacientes con evidencia en la historia clínica de deterioro cognitivo 6 puntos por ítem
crónico
18. Tumor o neoplasia sólida con metástasis
6. Enfermedad respiratoria crónica: debe existir evidencia en la historia clínica, en
la exploración física y en exploración complementaria de cualquier enfermedad 19. Sida definido: no incluye portadores asintomáticos
respiratoria crónica, incluyendo EPOC y asma En seguimientos prolongados, se recomienda añadir un punto por cada década de
7. Enfermedad del tejido conectivo: incluye lupus, polimiositis, enfermedad mixta, edad a partir de los 50 años. A mayor puntuación mayor riesgo de mortalidad a un año.
polimialgia reumática, arteritis células gigantes y artritis reumatoide
8. Úlcera gastroduodenal: incluye a aquellos que han recibido tratamiento por un
ulcus y aquellos que tuvieron sangrado por úlceras 4.3.5 Confussion Assesment Method (CAM)
9. Hepatopatía crónica leve: sin evidencia de hipertensión portal, incluye • Criterio 1
pacientes con hepatitis crónica
- Comienzo agudo y fluctuante: Hay evidencia de un cambio agudo/reciente en
10. Diabetes: incluye los tratados con insulina o hipoglicemiantes, pero sin el estado mental del paciente respecto a su situación basal; esta conducta o
complicaciones tardías, no se incluirán los tratados únicamente con dieta estado mental anormales fluctúan durante el día.
• Criterio 2
2 puntos por ítem - Desatención: El paciente tiene dificultad para concentrarse, se distrae o pierde
el hilo de una conversación fácilmente.
11. Hemiplejia: evidencia de hemiplejia o paraplejia como consecuencia de un
AVC u otra condición • Criterio 3
12. Insuficiencia renal crónica moderada/severa: incluye pacientes en diálisis, o - Pensamiento desorganizado: El paciente tiene una conversación vaga,
bien con creatininas > 3 mg/dl objetivadas de forma repetida y mantenida incoherente, ilógica o irrelevante, con flujo de ideas o cambios no justificados
13. Diabetes con lesión en órganos diana: evidencia de retinopatía, neuropatía de un tema a otro.
o nefropatía, se incluyen también antecedentes de cetoacidosis o
descompensación hiperosmolar • Criterio 4
14. Tumor o neoplasia sólida: incluye pacientes con cáncer, pero sin metástasis - Nivel de conciencia alterado: el paciente presenta bajo nivel de conciencia
documentadas (somnoliento, estuporoso o comatoso), o bien permanece en situación de
hipervigilancia con alta sensibilidad a estímulos ambientales.
15. Leucemia: incluye leucemia mieloide crónica, leucemia linfática crónica,
policitemia vera, otras leucemias crónicas y todas las leucemias agudas Para establecer la sospecha de síndrome confusional se requiere la presencia de los
16. Linfoma: incluye todos los linfomas, Waldestrom y mieloma criterios 1 y 2 de forma obligada + al menos uno de los criterios 3 y 4.
17. Hepatopatía crónica moderada/severa: con evidencia de hipertensión portal (asci- Valoración de la depresión en ancianos. Añadir 1 punto a las respuestas “sí” de las pre-
tis, varices esofágicas, encefalopatía) guntas 2,3,6,8,9,10,12,14 y 15 y a las respuestas no de las preguntas 1,5,7,11 y 13.
• Normal: 0 – 4
• Sugestivo de depresión leve: 5 – 11
• Sugestivo de depresión mayor: 12 - 15
448 449
paciente musculoesquelético
A continuación hay una serie de preguntas subraye “SI” o “NO” a cada una de ellas, 4.4 Uso de analgésicos en el paciente anciano
dependiendo si la frase refleja cómo se sintió usted la semana pasada.
450 451
paciente musculoesquelético
• En ancianos, los analgésicos opioides son la primera elección cuando el Cuando el dolor es episódico (p.ej., crónico recurrente o no continuo), los analgésicos
paracetamol no logra la eficacia deseada. Los analgésicos opioides son útiles opioides deben ser prescritos según necesidad más bien que por horario. Cuando el
para aliviar el dolor moderado a severo. En pacientes polimedicados el uso de dolor es continuo se deben utilizar analgésicos de acción larga o de liberación soste-
analgésicos transdérmicos es ideal. nida, p.ej., en dolor moderado:
• Los pacientes con uso de AINE a largo plazo deben ser monitorizados
Tramadol de liberación prolongada, en dolor severo: oxicodona o morfina de liberación
periódicamente para detectar hemorragia gastrointestinal oculta, insuficiencia
prolongada; otra opción importante son los sistemas transdérmicos, p.ej., buprenorfi-
renal, interacciones fármaco-fármaco (p.ej., disminución de la eficacia del
na o fentanilo.
antihipertensivo) o fármaco-enfermedad.
• Los ancianos que toman analgésicos deben ser monitorizados estrechamente El dolor progresivo debe ser identificado y tratado mediante el uso de analgésicos de
y frecuentemente para determinar la eficacia del fármaco y la presencia de inicio rápido y de acción corta. El dolor progresivo incluye las siguientes categorías:
efectos colaterales durante el inicio, el ajuste, o en cualquier cambio de la • El fracaso de fin de dosis: es el resultado de niveles sanguíneos bajos del
dosis de los medicamentos. analgésico, con incremento del dolor antes de la administración de la siguiente
dosis.
Consideraciones para la terapia analgésica en ancianos:
• El dolor incidental: es usualmente causado por actividades que pueden ser
Eliminar las barreras de comunicación: anticipadas; por lo tanto, se pueden usar esquemas profilácticos.
• Dar información verbal y escrita (conscientemente repetitiva) • El dolor espontáneo, como en el dolor neuropático, a menudo disminuye o
• Considerar el deterioro cognitivo y sensorial desaparece y es difícil de predecir.
• Concertar citas cortas pero frecuentes
4.4.3.1 Titulación
4.4.3 Recomendaciones para el uso racional de analgésicos opioides La titulación (ajuste gradual de la dosis) debe hacerse cuidadosamente.
Dolor en ancianos: uso de analgésicos opioides. • La titulación debe basarse en la necesidad individual y en el uso de
medicamentos para el dolor progresivo.
Implicaciones de los cambios farmacodinámicos y farmacocinéticos que se presentan • La titulación debe basarse en la farmacocinética y farmacodinamia específicas
con la edad: del anciano y debe considerar el riesgo de acumulación del fármaco. Los
• Se deben seguir las recomendaciones de la OMS con relación a la escalera efectos adversos de los analgésicos opioides son predecibles y es fácil
analgésica y las recomendaciones de la AHA con relación al riesgo anticiparlos haciendo profilaxis.
cardiovascular.
Cuando los efectos adversos se presentan deben tratarse oportunamente.
• Se debe hacer titulación lenta de la dosis (“comience lento, vaya despacio”)
• Los controles deben ser más frecuentes
• Se debe intentar reducir la polimedicación al mínimo 4.4.3.2 Manejo del estreñimiento
• Reducir la dosis inicial en un 30% - 50%
• Tener precaución con la administración simultánea de sedantes, antidepresivos Se debe hacer profilaxis desde el comienzo de la terapia analgésica con opioides:
y neurolépticos • Estimular una adecuada ingesta de líquidos y de fibra.
• Controlar la función renal • Estimular el ejercicio, la ambulación y la actividad física.
• Hacer profilaxis del estreñimiento • Se debe evaluar la función intestinal en cada visita de seguimiento.
452 453
paciente musculoesquelético
• Si es necesario, se debe prescribir un agente osmótico o estimulante de la Manejo del estreñimiento inducido por opioides
motilidad, para facilitar una evacuación intestinal regular.
Medidas básicas
• Si hay signos o síntomas de obstrucción no se deben utilizar agentes que
estimulen la motilidad. • Nutrición rica en fibra / suplementos de fibra (plántago)
• Si hay impactación fecal, debe aliviarse con enema o retirada manual. • Abundante suministro de líquidos
• La combinación oxicodona-naloxona ha demostrado prevenir la función • Evitar el sedentarismo, estimular actividad física suficiente
intestinal. Terapia farmacológica
• Picosulfato de sodio 10-20 gotas
4.4.3.3 Manejo de la sedación • Macrogol 1-3 x un frasco
• Lactulosa 3 x 1 (15-30 ml)
Cuando se inician analgésicos opioides debe anticiparse una leve sedación y una alte-
ración del desempeño cognoscitivo. Hasta tanto se haya desarrollado tolerancia para • Sorbitol
estos efectos: Medicamentos con acción antiemética
• Se debe instruir a los pacientes para que no conduzcan vehículos, ni usen • Metoclopramida • Corticosteroides • Haloperidol • Benzodiazepinas
maquinaria peligrosa. • Ondansetrón • Canabinoides • Dimenhidrinato.
• Los pacientes y cuidadores deben ser advertidos acerca del potencial de
caídas y accidentes.
4.4.3.4 Manejo de la náusea
• Monitorizar la sedación profunda, la inconciencia, o la depresión respiratoria
(definida como frecuencia respiratoria menor de 8 por minuto o saturación de Náusea y vómito: principios de la terapia farmacológica
oxígeno menor del 90%), que puede ocurrir cuando se hace titulación rápida • La administración de los antieméticos debe hacerse a intervalos regulares, bien
con dosis altas de opioides. sea de forma profiláctica o terapéutica.
Se debe utilizar naloxona I.V. cuidadosamente para evitar una reversión abrupta con la • Usar dosis terapéuticas plenas: es frecuente la subdosificación del antiemético
consecuente reaparición del dolor y la aparición de una crisis autonómica. • Si es necesario, se pueden combinar antieméticos con diferentes mecanismos
de acción.
Estreñimiento – Laxantes
• Hacer la elección del medicamento de acuerdo con la causa de la náusea y el
Sustancia activa Mecanismo de acción vómito. La náusea puede requerir manejo con antieméticos, según necesidad.
La náusea leve usualmente se resuelve espontáneamente en pocos días.
• Plántago • Formación de masa
• Si la náusea persiste, puede ser apropiado ensayar un opioide alternativo.
• Lactulosa • Osmótico • Los antieméticos deben ser elegidos entre aquellos con más bajo perfil de
efectos colaterales en los ancianos.
• Bisacodil, Picosulfatode Na • Alteración de la absorción intestinal de fluidos
y de electrolitos
4.4.3.5 Otros síntomas
• Parafina • Lubricante
El prurito severo puede ser tratado con antihistamínicos (p.ej., cetirizina).
• Sorbitol • Reflejo de defecación
Las mioclonias pueden ser aliviadas por el uso de opioides alternos o en casos severos
con clonazepan.
454 455
paciente musculoesquelético
4.4.4 Uso de aine en ancianos • Los AINE deben evitarse en pacientes con diátesis hemorrágica.
• También deben evitarse cuando hay hipertensión o factores de riesgo
• Los AINE deben ser utilizados con extrema precaución en población mayor.
cardiovascular.
• Deben evitarse los AINE en dosis altas y por plazos largos
• Se debe evitar el uso de más de un AINE al mismo tiempo. Las limitaciones del
• Cuando se usan los AINE en forma crónica, deben ser utilizados según “efecto techo” deben ser anticipadas (p ej., no emplear dosis máximas por el
necesidad, más bien que en forma diaria o por horario. riesgo de toxicidad).
• Los AINE de acción corta deben ser de primera elección para evitar
acumulación de dosis.
4.4.5 Uso de combinaciones analgésicas
• Los AINE deben evitarse en pacientes con función renal anormal.
• La combinación debe hacerse con compuestos que tengan demostrada
Profilaxis y manejo de los efectos colaterales en la terapia con opioides asociación sinérgica y complementaria. (p.ej., opioides más paracetamol,
Efecto colateral, Frecuencia, Tolerancia, 1er Paso, 2º Paso: naproxeno más paracetamol, tramadol más gabapentina, opioide más AINE)
• Las combinaciones de dosis fijas (p ej., paracetamol / tramadol) pueden ser
El estreñimiento aparece en aproximadamente el 95% de los pacientes, debe pautarse utilizadas para el dolor leve a moderado.
laxante, y si es insuficiente debe hacerse un cambio de la vía de administración. • La dosis máxima recomendada de cada medicamento usado en la
Náusea / vómito en aprox. 30% debe añadirse un antiemético y si es insuficiente rea- combinación, no debe ser excedida, para minimizar así la toxicidad.
lizar una rotación de opioides.
Sedación en aprox. 20% puede ser necesaria la rotación de opioides e incluso la apli- 4.4.6 Uso de coanalgésicos
cación espinal.
Los coanalgésicos (principalmente antidepresivos tricíclicos, antidepresivos ISRSN, y
Prurito en el aprox. 2%, se debería realizar rotación de opioides o añadir antihistamíni- antiepilépticos gabapentinoides) pueden ser apropiados en pacientes con dolor neu-
cos o antagonistas opioides. ropático y algunos otros síndromes dolorosos crónicos.
Alucinaciones con una frecuencia aprox. 1% deberá realizarse rotación de opioides o a) La carbamazepina u oxcarbamazepina es el medicamento de elección para la
tratarse con haloperidol. neuralgia trigeminal.
b) Se deben elegir preferencialmente los medicamentos con los perfiles más
AINE – Efectos Colaterales
bajos de efectos colaterales.
• Cardiovasculares: aumento del riesgo de eventos aterotrombóticos (AINE y c) Los coanalgésicos pueden ser utilizados solos, pero a menudo son más
coxibs) útiles cuando se utilizan en combinación y para mejorar la eficacia de otras
• Gastrointestinales: sangrado, ulceración, perforación (principalmente con AINE) estrategias de manejo del dolor.
• Renales: retención de agua y sodio, reacciones alérgicas (AINE y coxibs) d) La terapia con coanalgésicos debe comenzar con la dosis más bajas posible
e incrementarse lentamente, debido al potencial de toxicidad de muchos
• Piel: reacciones alérgicas / pseudoalérgicas (AINE y coxibs)
agentes.
• Hígado: hepatitis colestásica, falla hepática (p.ej., lumiracoxib)
e) Los pacientes deben ser monitoreados estrechamente para detectar y tratar
• Médula ósea: leucocitopenia, anemia aplásica, trombocitopenia los efectos colaterales.
• Plaquetas: inhibición de la agregación, aumento del tiempo de sangrado (AINE) f) Los objetivos principales del uso de coanalgésicos son: disminución del dolor,
• Los AINE deben evitarse en pacientes con historia de enfermedad úlcero- incremento de la función, mejoría en el comportamiento y el sueño.
péptica.
456 457
paciente musculoesquelético
• El clínico debe revisar periódicamente la validez de la indicación del - Amella EJ. Geriatrics and palliative care: Collaborationfor quality of life until death. Journal of
medicamento prescrito, investigar posibles desviaciones del uso e investigar el Hospiceand Palliative Nursing. /www.medscape.com Posted 02/10/2003
uso de drogas ilícitas (esto es muy raro en la población anciana). - American Academy of Pain Medicine and American Pain Society. The use of opioids for the
• El clínico debe preguntar acerca de prescripciones de opioides por parte de treatment of chronic pain: A consensus statement. http:// www.ampainsoc. org.
otros médicos.
- Bair MJ, Robinson RL, Katon W, Kroenke K. Depression and pain comorbidity: A literature
• El clínico debe estar alerta acerca del uso de opioides en indicaciones review. Arch Intern Med. 2003; 163(20):2433-45. Berger A; Dukes EM; Edelsberg J; Stacey
inapropiadas (p ej., ansiedad, depresión). BR; Oster G. Use of tricyclic antidepressants in older patients with painful neuropathies. Eur
• Las solicitudes de dosis adicionales deben atenderse con una evaluación de J Clin Pharmacol. 2006; 62(9):757-64
la tolerancia, progresión de la enfermedad o presencia de comportamiento
- Gil Gregorio P, Moreno A, Rodríguez MJ, Zarco J. Pain management in elderly people in
inapropiado. primary care. ADA Study. Rev Clin Esp. 2007; 207(4):166-71.
• Estas evaluaciones deben hacerse con la misma ecuanimidad que acompaña
el manejo a largo plazo de otros medicamentos potencialmente riesgosos (p - Lin EH, Katon W, Von Korff M, et al. Effect of improving depression care on pain and functio-
ej., antihipertensivos) con el fin de no transferir al paciente, o a su familia, una nal outcomes among older adults with arthritis: A randomized controlled trial. JAMA. 2003;
290(18):2428-9.
preocupación excesiva o temores innecesarios que promuevan la “opiofobia”.
- Mossey JM, Gallagher RM, Tirumalasetti F. The effects of pain and depression on physical
functioning in elderly residents of a continuing care retirement community. Pain Med. 2000;
4.4.8 Errores frecuentes en la prescripción 1(4):340- 50.
Finalizar esta revisión remarcando los errores más comunes en el manejo de analgési- - Verma S, Gallagher RM. Evaluating and treating co-morbid pain and depression. Internatio-
cos en la población mayor. nal. Review of Psychiatry. 2000; 12(2):103-14
• El dolor en el anciano a menudo no se comunica, no se aprecia, se evalúa mal - Won A.B et al. Persistent nonmalignant pain and analgesic prescribing patterns in elderly
y, por último, se trata insuficientemente. nursing home residents. J Am Geriatr Soc 52(6):867-874, 2004.
• Erróneamente se acepta que el dolor es un componente normal del
envejecimiento y se considera el dolor como algo inevitable.
• Los pacientes de edad avanzada pueden recibir “demasiado” (p. ej., los
medicamentos de acción prolongada pueden aumentar la toxicidad en caso
de disminución de la excreción renal o del metabolismo hepático).
• Los ancianos con dolor pueden recibir “demasiado poco” p ej., una dosis
subterapéutica puede motivar la suspensión del tratamiento por supuesta falta
de eficacia.
• Con frecuencia no se prescriben analgésicos más potentes por la falsa
creencia de que producen adicción.
458 459
paciente musculoesquelético
Puntos clave
• En el anciano el dolor es infravalorado en muchas ocasiones, o
infratratado en otras.
460 461
M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
5 . T ratamiento
musculoesquelético
462 463
paciente musculoesquelético
5.1 Analgésicos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) Tabla 1. Clasificación atc de los aine
Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son un grupo de fármacos que han sido
considerado durante décadas como el primer nivel en el tratamiento del dolor. Se han Grupo terapéutico
utilizado clásicamente en el tratamiento del dolor incidental o cotidiano, dolor de tipo M01AH COXIBS
muscular, articular, menstrual, etc., y, preferentemente, en el dolor de origen inflama- • ETORICOXIB (Acoxxel; Arcoxia; Exxiv)
torio. Los AINE están indicados prácticamente en todos los tipos de dolor, excluyendo • CELECOXIB (Celebrex; Artilog)
la fibromialgia, con la condición de que el dolor sea de baja o moderada intensidad, • ROFECOXIB (Vioxx; retirado 2004)
reservando el tratamiento del dolor de alta intensidad a los denominados analgésicos • PARECOXIB (Dynastat; Diagnóstico hospitalario)
‘mayores’ u opioides. En el dolor musculoesquelético, su uso es una práctica aceptada M01AX OTROS AGENTES ANTIINFLAMATORIOS Y ANTIRREUMÁTICOS NO ESTEROIDEOS
por diferentes guías terapéuticas y sociedades científicas. • NABUMETONA (Relif)
• ÁCIDO NIFLUMICO (Nicflactol)
Los AINE son uno de los grupos terapéuticos más utilizados a nivel mundial, su utiliza- • ISONIXINO (Nixyn Hermes)
ción se ve limitada, sin embargo, por la posible aparición de efectos adversos, poten- • CLONIXINATO DE LISINA (Dolalgial)
cialmente letales, como la enfermedad ulcerosa péptica, la hemorragia digestiva, los • DIACEREINA (Artrizan; Galaxdar; Glizolan) (No AINE)
problemas cardiovasculares o la insuficiencia renal. N02B OTROS ANALGÉSICOS Y ANTIPIRÉTICOS
N02BA ÁCIDO SALICÍLICO Y DERIVADOS
• ÁCIDO ACETIL SALICILICO (Aspirina; EFG)
5.1.1 CLASIFICACIÓN DE LOS AINE • ÁCIDO SALICILICO (Tópico)
• DIFLUNISAL (no comercializado en España)
Todos los AINE, en mayor o menor medida, son capaces de inhibir la síntesis de pros- • FOSFOSAL (Aydolid; Disdolen; Protalgia; retirado 2007)
taglandinas, al bloquear el sistema enzimático de las ciclooxigenasas (COX). Entre • SALSALATO (no comercializado en España)
éstos se incluyen al AINE prototipo, que es el ácido acetilsalicílico (AAS), a los con-
siderados AINE tradicionales (como el ibuprofeno, naproxeno o diclofenaco), y a los N02BB PIRAZOLONAS
• METAMIZOL (Nolotil; EFG)
inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa 2 (COX-2) denominados COXIB. Aunque el
paracetamol carece de propiedades antiinflamatorias, sus propiedades analgésicas y N02BE ANILIDAS
antitérmicas, mediadas por la inhibición central de la síntesis de prostaglandinas, per- • PARACETAMOL (Efferalgan, EFG)
miten incluirlo en este grupo.
Los AINE son fármacos muy heterogéneos desde el punto de vista químico y podemos
clasificarlos, de acuerdo con la clasificación anatómica (ATC), tal como se recoge en
5.1.2 Farmacología básica de los AINE
la Tabla 1. 5.1.2.1 El sistema de las ciclooxigenasas y el mito de las prostaglandinas “buenas”
y “malas”
464 465
paciente musculoesquelético
Figura 1. Esquema de la síntesis de prostanoides y sus receptores. acetilsalicílico, que empleamos en clínica desde el año 1898, con capacidad de inhibir
inespecíficamente los distintos tipos de COX, ejercerían de forma simultánea sus efec-
La existencia de receptores en distintos órganos y tejidos condiciona
tos terapéuticos reconocidos sobre el dolor, inflamación y fiebre, pero de forma para-
la función de las diferentes prostaglandinas lela afectarían al tracto gastrointestinal y riñón, al inhibir las PG protectoras subsidiarias
(modificada de Hata y Breyer, 2004; Warner y Mitchell, 2004).
de la COX-1. Contrariamente, los agentes capaces de inhibir la COX-2, denominada
inducible o inflamatoria, serían eficaces analgésicos, antiinflamatorios y antipiréticos, a
la vez que no provocarían efectos adversos de tipo gastrointestinal, ni renal.
En el año 1999 fueron comercializados celecoxib y rofecoxib como los primeros AINE
inhibidores selectivos de la COX-2. El entusiasmo fue tal que algunos autores les deno-
minaron “la aspirina sin úlcera” o más pretenciosamente “superaspirinas”.
Los efectos de cada prostanoide liberado van a depender de los receptores existentes
en los tejidos dianas (Figura 1). Existen al menos cinco grupos de receptores que se
dos por esta enzima, se encargan del correcto funcionalismo renal, la integridad de la corresponden con sus correspondientes PG. Así, se ha podido comprobar que los an-
mucosa gástrica y la homeostasis. Esta enzima se localiza en altas concentraciones tagonistas del receptor EP1 disminuyen el dolor visceral, mientras que los antagonistas
en plaquetas, en el endotelio vascular, en la mucosa gástrica y en el túbulo colector de del receptor EP4 pueden provocar colitis en humanos.
las nefronas, donde sintetiza eicosanoides (PGI2 y PGE2 fundamentalmente) con fun-
ciones eminentemente protectoras. Por todo ello, de una manera un tanto simplista, Así, la expresión constitutiva de la COX-2 ha sido descrita en tejido gástrico, riñón,
se las ha considerado como las PG “buenas”. Por el contrario, la COX-2 se expresa, útero, ojo y cerebro de diferentes especies animales y humanos. Especial importancia
fundamentalmente, por estimulación de células que están involucradas en la inflama- tiene la presencia de COX-2 a nivel vascular, donde se expresa de forma constitutiva en
ción (macrófagos, sinoviocitos, monocitos, etc.), por lo que algunos la denominan “in- endotelio, medula renal, vasos de la mácula densa, y participa en la regulación vascular
flamatoria o inducible” y se las considera como PG “malas”. mediante la liberación de ciertos derivados prostanoides, siendo con toda probabilidad
la fuente fisiológica de la PGI2 “in vivo”. Esta PGI2, junto con el TXA2, producido funda-
Según esta hipótesis, las PG responsables de la inflamación, dolor y fiebre eran pro- mentalmente por las plaquetas, constituye el prostanoide más importante en la regula-
ducidas solamente por la inducción de la vía de activación de las COX-2, mientras que ción fisiológica de la homeostasis vascular, ejerciendo además efectos contrapuestos
las PG protectoras del tracto gastrointestinal y riñón serían subsidiarias de la actividad en la agregación plaquetaria. La inhibición de la COX-2 podría explicar los efectos
fisiológica constante de las COX-1. En este contexto, los AINE clásicos, como el ácido adversos cardiovasculares descritos con algunos de los fármacos responsables de
466 467
paciente musculoesquelético
La base del empleo de los AINE, tanto los clásicos como los COXIB, en la inflamación
es su capacidad de inhibir la síntesis de PG. En efecto, en muchos tejidos normales no
se expresa prácticamente COX-2, pero en presencia de un proceso inflamatorio esta
enzima es inducida y aparece, al cabo de horas, en cantidades importantes. Como
consecuencia de la inducción de esta COX-2 aumenta la síntesis de PG. Las PG in-
flamatorias presentan múltiples efectos a nivel local sobre los tejidos. En este sentido,
causan vasodilatación, que es la responsable del eritema y calor local, así como del
edema. Además, las PG disminuyen el umbral de estimulación postsináptica, por lo
que incrementan la excitabilidad y por ende la conducción de los impulsos nocicepti-
vos a lo largo de los nervios periféricos. Este proceso se conoce como “sensibilización
periférica”.
468 469
paciente musculoesquelético
5.1.2.3 Aspectos farmacológicos de la inhibición de la síntesis de PG: De los AINE la COX-1. El meloxicam tiene una selectividad entre 3 y 77 veces mayor para la COX-2,
clásicos a los COXIB aunque esta selectividad disminuye al aumentar la dosis del fármaco. La nimesulida se
autorizó en España en 1996, aunque fue retirada por hepatotoxicidad en 2002. Pre-
5.1.2.3.1 AINE clásicos senta una selectividad sobre la COX-2 entre 5 y 16 veces mayor que para la COX-1, y,
Los inhibidores por excelencia de la síntesis de PG son los denominados AINE clási- al igual que en el caso anterior, a partir de dosis elevadas se pierde esta selectividad.
cos, que son capaces de inhibir las distintas formas de COX conocidas, en especial La afinidad relativa entre COX-1 y COX-2 viene recogida gráficamente en la Figura 3.
la COX-1 y la COX-2. Estos agentes forman un amplio grupo de sustancias, química-
mente heterogéneo, que pueden catalogarse en tres grupos diferentes de acuerdo con Figura 3. Selectividad relativa de COX-1 y COX-2 humana por diferentes
su capacidad de inhibir a la COX: AINE. Se expresa logarítmicamente la CI80 (concentración de fármaco
a) Un primer grupo de AINE, representados por el ibuprofeno, piroxicam, que inhibe el 80% de la actividad enzimática).
ácido mefenámico y naproxeno provocaría una inhibición reversible, simple y Los agentes situados en la línea 0 inhiben por igual a ambas COX.
competitiva con el sustrato (ácido araquidónico) por la zona activa de la COX. Los compuestos con valor negativo son inhibidores selectivos de la COX-2,
b) Un segundo grupo, al que pertenecen la indometacina, flurbiprofeno, ácido con mayor o menor selectividad, mientras que los de valor positivo
meclofenámico, diclofenaco y paracetamol, producen, en una primera fase, inhiben ambas COX
una inhibición reversible y competitiva, mediante la unión a la zona activa de la (modificada de Warner y Mitchell, 2004; Álamo, 2005).
COX, formando un complejo inhibitorio enzimático reversible. Si este complejo
es retenido durante el tiempo suficiente, provoca un cambio conformacional
de tipo no covalente en la proteína. El efecto inhibidor del paracetamol sobre la
COX es muy débil, en comparación con el resto de los AINE.
c) Finalmente, el ácido acetilsalicílico y algunos derivados acetilados, producen
una inactivación irreversible de la enzima, por acilación de la serina situada
en la posición 530 de la cadena peptídica de la COX. Este hecho implica
la destrucción de la actividad catalítica de la misma, que no se recupera
hasta que la célula sintetice nuevas moléculas de la enzima. Mediante este
mecanismo, el ácido acetilsalicílico provoca una alteración definitiva de la
conformación molecular, con pérdida de la actividad de la COX, pero sin alterar
a la hidroperoxidasa. El ácido acetilsalicílico presenta un mecanismo de acción
doble: el ya comentado inactivador irreversible y como inhibidor reversible no
competitivo, del que es responsable el salicilato procedente de la acción de las
esterasas plasmáticas.
470 471
paciente musculoesquelético
En 1999 se comercializó el grupo de inhibidores selectivos y específicos de la COX-2: Figura 4. Representación esquemática de las COX y su inhibición:
rofecoxib y celecoxib (Figura 3). Su uso fue aprobado para el tratamiento de la artritis
reumatoide, osteoartritis y dolor agudo. Ninguno de estos medicamentos tiene activi- a) Formación de PGG2 como consecuencia de la metabolización del ácido
dad antiagregante e inducen un número menor de complicaciones gastrointestinales, araquidónico por la COX-1 en condiciones basales.
al menos en tratamientos a medio plazo. El celecoxib y rofecoxib son inhibidores muy b) La COX-2 metaboliza asimismo, en condiciones basales, al ácido
selectivos de la COX-2, con un rango de entre 200 y 800 veces más selectivos para araquidónico.
la COX-2 que para la COX-1. A dosis terapéuticas, estos compuestos actúan sobre la c) Los AINE clásicos penetran en la bolsa que forma la isoleucina en posición
COX-2 inhibiéndola, pero no se ha observado que inhiban prácticamente la COX- 1. 523 de la COX-1 gracias a su pequeño tamaño molecular.
Los AINE clásicos, con menor tamaño molecular, pueden penetrar en ambas COX, d) Asimismo, los AINE inhiben a la COX-2 con facilidad.
mientras que los COXIB ven impedido el acceso al lado hidrofóbico del canal por la e) Los COXIB no pueden penetrar en la bolsa formada por la cadena lateral de la
cadena de la isoleucina (Figura 4). isoleucina en posición 523, por lo que no son capaces de inhibir a la COX-1.
f) Sin embargo, no existe ningún impedimento para inhibir la COX-2, ya que la
valina en posición 523 no forma ninguna bolsa.
Figura 4. Representación esquemática de las COX y su inhibición
Sin embargo, la inhibición de la COX-2 por parte del paracetamol explica la aparición
de alarmas sobre la tolerabilidad cardiovascular de este fármaco. De hecho, en un
reciente estudio controlado, doble-ciego, realizado en pacientes con enfermedad co-
ronaria, se demuestra por primera vez que el paracetamol (1g / 3 veces día) induce un
aumento significativo en la presión arterial ambulatoria en estos pacientes. Por lo tanto,
472 473
paciente musculoesquelético
el uso de paracetamol en pacientes con riesgo cardiovascular debe evaluarse, al igual A nivel cardiovascular: El Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la
que sucede con los COXIB. Finalmente, la opinión clínica del Consenso de la Sociedad Agencia Europea de Medicamentos (EMEA) ha considerado que los datos disponibles
Española de Reumatología (SER) parece avalar los argumentos comentados, ya que mostraban con claridad que los COXIB aumentan el riesgo de que aparezcan diversos
hubo un acuerdo alto en relación con que el paracetamol actuaría como analgésico a trastornos cardiovasculares, sugiriendo además una relación con la dosis y la duración
dosis bajas (< 2g / día) y comparte la toxicidad de los AINE a dosis altas (> 3g / día). del tratamiento. Los resultados de ensayos clínicos controlados muestran que este
Por lo tanto, si se emplean dosis altas, como las recomendadas para el tratamiento de grupo de antiinflamatorios se asocia a un incremento del riesgo de acontecimientos
la artrosis o en enfermos con otros procesos inflamatorios, debe tenerse en cuenta que trombóticos (infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular) en relación a pla-
su toxicidad gastrointestinal será comparable con la de un AINE. cebo y a antiinflamatorios no esteroideos. La Agencia incluye en la nota unas restric-
ciones de uso de estos agentes (AEM, 2005).
La Sociedad Española de Reumatología (SER), junto con el Colegio Mexicano de Reu-
matología, recomienda que en pacientes con alto riesgo gastrointestinal, con edad A día de hoy se reconoce que los COXIB tienen un riesgo cardiovascular mayor cuan-
avanzada, historia de úlcera complicada con empleo de AINE durante un tiempo pro- do se comparan con placebo, pero su perfil de riesgo cardiovascular parece ser muy
longado o uso de anticoagulantes, incluyéndose los antidepresivos que inhiben la re- similar al de diclofenaco, lo que hace que, en principio, los AINE tradicionales no estén
captación de serotonina (ISRS), se debe evitar, en la medida de lo posible, el uso de exentos de riesgo cardiovascular. Existe alguna evidencia aislada de que el perfil car-
AINE y, en caso de ser necesario, se recomienda utilizar un COXIB junto con un inhibi- diovascular del naproxeno podría ser más beneficioso que el de otros AINE, aunque
dor de la bomba de protones (IBP). En pacientes con riesgo gastrointestinal medio, no no está del todo clara.
anticoagulados ni con antecedentes ulcerosos, pero con otros factores de riesgo, se
pueden usar los COXIB solos o los AINE tradicionales asociados a un IBP con igual se- En pacientes con insuficiencia cardiaca congestiva, edema o hipertensión arterial no
guridad. Finalmente, en pacientes con riesgo gastrointestinal bajo, los IBP se pueden controlada, se deberán restringir los AINE. La hipertensión arterial aislada no es una
utilizar en el caso de que el paciente presente dispepsia asociada al AINE. contraindicación de AINE, aunque es obligado su control durante el tratamiento. En
estos casos, muy comunes en la práctica clínica diaria, previamente habrá que definir
Especial trascendencia tienen las PG, a nivel renal están implicadas en el control del el perfil de riesgo cardiovascular y aplicar las recomendaciones pertinentes según di-
flujo sanguíneo renal, controlan la homeostasis y aumentan la perfusión renal, dismi- cho riesgo. Cuando hay además, alguna de estas patologías, se recomienda valorar
nuyendo la resistencia vascular y vasodilatando el lecho vascular, las producidas por cuidadosamente la indicación, evitar el uso de AINE en la medida de lo posible, usar la
la COX-2, la PGE2, exhiben efectos diuréticos y natriuréticos, responsabilizándose del dosis más baja durante el menor tiempo y establecer las medidas de vigilancia que se
balance de fluidos. consideren oportunas. Por otro lado, en los pacientes anticoagulados se aconseja res-
tringir el uso de AINE. Así, es preferible, como primera elección, el uso de medidas no
En condiciones fisiológicas, las PG no parecen jugar un importante papel en la función farmacológicas, tales como el reposo, bajar peso, el uso de bastón, la rehabilitación,
renal. Sin embargo en individuos comprometidos, por ejemplo con depleción de sal y el paracetamol o la codeína.
volumen, las PG juegan un importante papel, manteniendo la perfusión renal y la filtra-
ción glomerular, gracias a su efecto vasodilatador. En estos sujetos, los COXIB causan
retención de sodio y potasio, provocan edemas periféricos e incluso hipertensión, si-
milar a lo que sucede con los AINE clásicos. Además, se ha comprobado que en an- 5.1.2.4 Otros mecanismos de acción de los AINE
cianos hipertensos, la inhibición de la COX-2 puede provocar edemas y aumento de la Los AINE, además de la inhibición de la síntesis de PG, interfieren con la activación
presión arterial, con un importante incremento del riesgo cardiovascular. Estos efectos de los neutrófilos en respuesta a factores quimiotácticos, impidiendo así, que éstos
deben ser considerados en pacientes de riesgo como los que presentan insuficiencia adquieran capacidad para agregarse, adherirse al endotelio vascular o degranularse y
cardiaca congestiva o enfermedad hepática con propensión a la retención de sodio. liberar múltiples mediadores de la inflamación (histamina, serotonina, cininas, leucotrie-
La SER recomienda que a los pacientes con riesgo renal se les debe restringir el uso nos, PG). La actividad antiinflamatoria de los AINE, por tanto, al prevenir la producción
de AINE. Hasta la fecha no disponemos de pruebas o “evidencias” suficientes para y liberación de sustancias susceptibles de sensibilizar o activar las terminaciones sen-
saber si un AINE o COXIB tiene mejor perfil de riesgo de acontecimiento adverso renal sitivas, contribuye al efecto analgésico de estos fármacos.
que el resto.
474 475
paciente musculoesquelético
La clasificación tradicional de los AINE como agentes de acción exclusivamente perifé- con aumento de la liberación y concentración de PG, como ocurre en los casos de
rica no es válida en la actualidad. Actualmente, se considera que uno de los mecanis- obstrucción uretral y su correspondiente cuadro clínico de cólico nefrítico.
mos implicados en la acción a nivel central de los AINE está mediado por la inhibición
de la síntesis de PG a este nivel. Pero esta acción analgésica también está mediada En relación con el efecto analgésico a nivel central, parece que la modulación del
por mecanismos centrales multifactoriales (Tabla 2). Todos estos mecanismos pueden sistema, serotoninérgico juega un destacado papel. En este sentido, se ha consta-
actuar de forma sinérgica, aumentando así la eficacia de los AINE en el proceso noci- tado como el paracetamol puede estimular la actividad de las vías serotoninérgicas
ceptivo, los cuales actualmente no se conocen en profundidad. descendentes que inhiben la transmisión de las señales nociceptivas en la médula
espinal. Otras teorías postuladas en relación a este punto implican a los receptores de
aminoácidos excitatorios (receptores NMDA del glutamato), que podrían ser regulados
Tabla 2. Posibles mecanismos implicados en la acción analgésica a la baja (“down-regulation”).
central de los AINE
Inhibición de la síntesis de PG en SNC.
5.1.3.2 Acción antiinflamatoria
Aumento ácido kinurénico, antagonista de aminoácidos excitadores.
La actividad antiinflamatoria de los AINE es variable, la participación de las moléculas
Puesta en marcha de mecanismos serotoninérgicos y catecolaminérgicos centrales. de adherencia celular en el endotelio, la presencia de mediadores solubles quimiotác-
Mediación en la liberación de opioides endógenos. ticos, la actividad funcional de los neutrófilos y linfocitos y la capacidad moduladora
de todos ellos en conjunto sobre la reacción inflamatoria, constituyen pilares transcen-
Prevención del fenómeno de sensibilización central. dentales, no sólo para su comprensión, sino también para su eventual modificación
farmacológica en las distintas fases del proceso.
Reducción de la hiperalgesia inducida por la estimulación del receptor NMDA.
Disminución de la liberación de sustancia P.
5.1.3.3 Otras acciones farmacológicas
5.1.3 Acciones farmacológicas de los AINE Otras acciones farmacológicas de estos fármacos se refieren a su acción antitérmica,
como consecuencia de la inhibición en la síntesis de PG a nivel del SNC, su acción
La actividad farmacológica de los AINE (Tabla 3) es común a todos ellos, aunque, se antiagregante plaquetaria vinculada al efecto inhibidor de la COX-1, y con especial
admiten diferencias entre ellos cuando se evalúa su actividad clínica, su toxicidad y la interés en el caso del ácido acetilsalicílico, que induce un descenso significativo de los
predicción del efecto clínico. niveles de tromboxano (TXA2) plaquetario, con repercusión sobre la agregación de es-
tas células y en sus mecanismos fisiológicos de la coagulación sanguínea. Finalmente,
la actividad farmacológica uricósica de alguno de los AINE (fenilbutazona) se atribuye
a un mecanismo competitivo a nivel renal, cuya consecuencia final es la inhibición del
5.1.3.1 Acción analgésica
transporte de ácido úrico desde las tubulares al intersticio renal.
La acción analgésica de estos fármacos es relevante en dolores de intensidad leve
y moderada, con eficacia variable, según el fármaco seleccionado, poniéndose de
manifiesto su actividad analgésica frente a mialgias, dolores musculoesqueléticos, dis-
menorrea, dolores postoperatorios y también en los de origen neoplásico, constitu-
yendo una opción aceptable de medicación adyuvante con analgésicos opioides. Esta
actividad analgésica es también evidente en algunos dolores de tipo cólico que cursan
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las PG en el tracto digestivo es, por un lado, mantener la homeostasis de la mucosa Por otra parte, la hepatotoxicidad por paracetamol es una de las causas más frecuen-
gastrointestinal, participando en la protección y reparación de los diferentes compo- tes de fallo hepático agudo y se puede producir tras una ingesta aguda superior a
nentes preepitelial, epitelial y postepitelial de la barrera mucosa (producción de moco 7,5gr o en ingesta crónica superior a 4gr/día. La toxicidad se debe a la acumulación de
y bicarbonato, esencialmente), y, por otro, provocar vasodilatación en la misma para un metabolito tóxico, N- acetyl- p- benzoquinona-imida, que es conjugado con gluta-
conseguir la correcta oxigenación y subsiguiente neutralización de los hidrogeniones tion, un compuesto antioxidante del hígado, volviéndose inocuo. En caso de sobredo-
(H+), cuando se altera la permeabilidad celular. sis las vías de conjugación y el metabolito se fija de forma covalente a los aminoácidos
azufrados de los hepatocitos, conduciendo a la necrosis de la célula hepática. La ad-
ministración de N-acetilcisteína reduce la necrosis hepática y previene el daño hepático
la fijarse al metabolito y permitir la recuperación del glutation.
5.1.4.2 Efectos renales
La incidencia de daño renal inducido por AINE ha sido estimada en un 5% de los pa-
cientes que toman estos fármacos, aunque esta cifra se eleva a un 20% en pacientes 5.1.4.4 Efectos hematológicos
considerados de riesgo. La mayor parte de las lesiones renales por AINE suelen ser
reversibles, si se identifican a tiempo y se suspende la medicación, y se asocian a dosis Los AINE afectan a la función plaquetaria y al tiempo de sangrado. Se ha demostrado
elevadas durante tiempo muy prolongado. La incidencia de lesiones renales por para- que el AAS afecta de forma distinta la producción de los dos tipos de eicosanoides que
cetamol es mucho menor, ya que inhibe en menor medida las PG periféricas´ hemos comentado (PGI2 y TXA2). Este AINE actúa mediante acetilación irreversible de
COX-1 que impide la formación plaquetaria de TXA2 durante toda la vida de la pla-
Otros mecanismos etiopatogénicos, mucho más infrecuentes, involucrados en el daño queta (7-10 días). Por contra, las células endoteliales pueden sintetizar nuevas COX-1.
renal por estos agentes, son la acción directa de metabolitos nefrotóxicos y reaccio- De esta forma, la administración de dosis bajas de AAS a voluntarios sanos origina una
nes alérgicas de hipersensibilidad. Las manifestaciones clínicas de las lesiones renales inhibición acumulativa de la producción de troboxanos plaquetarios, mientras que su
por AINE pueden ser de cuatro tipos: Alteraciones hidroelectrolíticas (relativamente administración a largo plazo sólo suprime parcialmente la formación de PGI2 vascular.
frecuentes), el fallo renal agudo que ocurre entre el 0,5% y 1% de pacientes que to- Al contrario que el AAS, el resto de AINE inhiben reversiblemente la COX-1. El resto
man AINE, el síndrome nefrótico con nefritis aguda intersticial, menos frecuente (0,01- de AINE, al contrario que el AAS, poseen una capacidad para modificar el tiempo de
0,02% de los pacientes expuestos a AINE) y la necrosis papilar, que es el efecto tóxico sangrado bastante más reducida, de carácter dosis-dependiente y sin exceder nunca
renal menos común de los AINE, aunque es el más grave. los límites de la normalidad.
Otros problemas hematológicos, de mayor gravedad, que pueden causar los AINE son
distintos tipos de discrasias sanguíneas (agranulocitosis, neutropenia, anemia aplá-
5.1.4.3 Efectos hepáticos
sica). Aunque la probabilidad de aparición de estos trastornos puede llegar a ser 12
Está demostrado que entre los AINE con mayor potencial hepatotóxico se encuentran veces superior en pacientes expuestos a AINE frente a los no expuestos, la incidencia
sulindaco, fenilbutazona, indometacina y diclofenaco. Por contra, fenamatos y deriva- de este problema es tan sólo de 6,2 casos por millón personas que toman AINE y año.
dos del oxicam poseen una menor capacidad lesiva. Un 3% de pacientes que toman
AINE, varios de ellos (ibufenaco, benaxoprofeno, droxicam) tuvieron que ser retirados
de su comercialización por su elevada hepatotoxicidad. 5.1.4.5 Otros efectos adversos
Mención especial merece la hepatotoxicidad asociada al síndrome de Reye. En estos Se han descrito reacciones de hipersensibilidad a distintos AINE, aunque su incidencia
casos, junto a la encefalopatía propia de este cuadro, aparece una esteatosis hepática en la población general parece ser muy pequeña. Las reacciones dermatológicas más
microvesicular. Aunque se ha asociado casi en exclusiva a pacientes pediátricos trata- graves se deben a fenilbutazona y oxifenbutazona, mientras que los derivados propió-
dos con AAS, recientemente se han descrito casos de síndrome de Reye en adultos nicos (sobre todo ketoprofeno) se han implicado, en mayor parte, en el desarrollo de
bajo tratamiento con AAS. Se ha especulado que el empleo de AAS en la fase aguda reacciones de fotosensibilidad.
de las infecciones virales infantiles favorece el desarrollo de este síndrome.
482 483
paciente musculoesquelético
La precipitación de ataques asmáticos ocurre en, aproximadamente, un 10% de pa- Tabla 6. Características farmacocinéticas de los AINE
cientes adultos que toman AINE y cuentan con una historia de asma. Esta situación
prototipo.
es más frecuente con AAS. Los leucotrienos LTC4, LTD4 y LTE4 son potentes agentes
broncoconstrictores y, por tanto, el bloqueo de la COX por los AINE puede derivar la vía (%) (%) (μg/ml)
metabólica del ácido araquidónico hacia su formación, con los consiguientes efectos
broncoespásticos. Ácido acetilsalicílico > 80 0,25-0,3 14 Variable 9,3 1,4 150-300
Algunos AINE, como los salicilatos, pueden ocasionar tinnitus, pérdidas de audición y Paracetamol > 95 1,5-3 63 20 5 3 10-20
vértigos. Otros, como indometacina, se han relacionado con la aparición de mareos,
Fenilbutazona > 95 49-142 12 96 0,023 1 50-150
cefaleas, confusión, depresión y alucinaciones. Con naproxeno e ibuprofeno se han
descrito disfunciones cognitivas, confusión, irritabilidad, perdida de memoria, etc., so- Naproxeno 99 11-20 63 99 0,13 <1 > 50
bre todo en pacientes ancianos. Un efecto adverso raro de los AINE es la meningitis
aséptica, que ha sido reportada en pacientes que han tomado ibuprofeno, sulindaco, Indometacina 98 1-16 70 90-99 2 15 0,3-3
tolmetina y diclofenaco. También se han descrito trastornos de la menstruación (hipo-
Ketorolaco 80 4,6-6,2 0,11* > 99 0,02- 60 0,3-5
o amenorrea) con indometacina, naproxeno y diclofenaco. 0,037
Etodolaco > 73 6-7,4 25,2 99 40,8 < 40
5.1.5 Aspectos farmacocinéticos de los aine Diclofenaco 54 1-2 8,4 96 4,2 <1
Los AINE sufren un importante metabolismo hepático, lo que implica una dependen- Piroxicam 100 30-60 7 99 0,05 <5 5-6
cia metabólica y riesgo de interacción con otros fármacos capaces de influir en el
metabolismo hepático o ser sustrato del mismo. Presentan una elevada unión a pro- Ácido mefenámico > 90 3-4 91 99 <6
teínas plasmáticas (>90%), aunque fácilmente disociable. Esto puede traducirse en
Nabumetona > 80 24 7,5 > 99 0,26** <1 17-42
interacciones con otros medicamentos, por desplazamiento mutuo, provocando una
modificación de las concentraciones séricas libres. Los AINE presentan también una * l/Kg, **l/Kg.
buena distribución (por difusión pasiva pH-dependiente), que alcanza casi todos los
tejidos y fluidos del organismo. Esta última característica se ve favorecida por la gran
liposolubilidad de estos agentes.
5.1.6 Empleo clínico de los aine en el dolor musculoesquelético
En la Tabla 6 se recogen los principales parámetros farmacocinéticos de los AINE pro-
totipo de los distintos grupos farmacológicos. Los AINE son excelentes analgésicos, y se utilizan con frecuencia para el tratamiento
de dolores de intensidad leve a intensa, incluyendo el dolor musculoesquelético. A
diferencia de los analgésicos opioides, los AINE presentan un efecto techo en su curva
dosis-respuesta de los AINE. Por tanto, tras alcanzar su techo analgésico, no se ob-
tendrá una analgesia adicional, pero si aumenta la posibilidad de aparición de efectos
secundarios.
484 485
paciente musculoesquelético
Tabla 7. NNT y AINE. Datos de The Oxford League Table of Analgesic Paracetamol 500 561 61 3.5 2.2-3.3
Efficacy Paracetamol 1500 138 65 3.7 2.3-9.5
Principio Activo Dosis (mg) Nº pacientes Alivio del NNT IC Paracetamol 1000 2759 46 3.8 3.4-4.4
dolor de al
menos el 50% Ibuprofeno 100 396 31 4.3 3.2-6.3
(%)
Ibuprofeno 800 76 100 1.6 1.3-2.2 AAS 600(650) 5061 38 4.4 4.0-4.9
Ketorolaco 20 69 57 1.8 1.4-2.5 Paracetamol 600(650) 1886 38 4.6 3.9-5.5
Ketorolaco (IM) 60 116 56 1.8 1.5-2.3
Diclofenaco 100 411 67 1.9 1.6-2.2 Ibuprofeno 50 316 31 4.7 3.3-7.9
Piroxicam 40 30 80 1.9 1.2-4.3 Tramadol 100 882 30 4.8 3.8-6.1
Paracetamol + Codeína 1000+60 197 57 2.2 1.7-2.9 Ketorolaco (IM) 10 142 48 5.7 3.0-53.0
Oxicodona IR + Parace- 5+500 150 60 2.2 1.7-3.2 Codeína 60 1305 15 16.7 11.0-8.0
tamol
Diclofenaco 50 738 63 2.3 2.0-2.7 Placebo >10,000 18 NR NR
486 487
paciente musculoesquelético
dependerá básicamente de las circunstancias del paciente, del perfil del AINE y de la Figura 7. Algoritmo para el manejo general de los AINE, de acuerdo
experiencia del profesional sanitario. con el Documento de Consenso de la Sociedad Española de
En líneas generales, en procesos agudos es aconsejable utilizar los AINE durante el Reumatología y el Colegio Mexicano de Reumatología
(tomada de Loza, 2011).
menor tiempo posible y a la dosis tolerada suficiente para ser eficaz, mientras que en
los procesos crónicos, los AINE se deben utilizar a la dosis mínima necesaria para
mantener respuesta clínica favorable, evaluando siempre los factores de riesgo de
acontecimientos adversos y monitorizando su posible aparición.
En cualquier caso, el uso de los AINE estará condicionado, no sólo por la respuesta
clínica del paciente, sino también por la aparición de acontecimientos adversos (como
se ha relatado también en apartados previos).
La vía de administración más frecuentemente utilizada para los AINE, es la vía oral,
aunque existen, como hemos comentado previamente, presentaciones para adminis-
tración por vía rectal, parenteral (intramuscular e intravenosa) y tópica.
488 489
paciente musculoesquelético
- Anónimo. Subgrupos ATC y Principios activos de mayor consumo en el Sistema Nacional de 5.2.1 Introducción
Salud en 2010. Inf Ter Sist Nac Salud 2011; 35: 4.
En nuestro arsenal terapéutico disponemos en la actualidad de un gran número de
- Bori Segura G, Hernandez Cruz B, Gobbo M, et al. Uso apropiado de los antiinflamatorios sustancias dotadas de actividad antidepresiva. Se han propuesto varias clasificaciones
no esteroideos en reumatologia: Documento de Consenso de la Sociedad Espanola de Reu- siguiendo diversos criterios: estructura química, introducción cronológica en la clínica,
matologia y el Colegio Mexicano de Reumatologia. Reumatol Clin 2009; 5: 3-12. etc., pero, no sólo desde un punto de vista teórico, sino también práctico, considera-
- Herndon CM, Hutchison RW, Berdine HJ, et al. Management of Chronic Nonmalignant Pain
mos que la más apropiada es aquella que los clasifica a tenor de su perfil bioquímico
with Nonsteroidal Antiinflammatory Drugs. Pharmacotherapy 2008; 28: 788-805. (Tabla I). Como puede observarse, los antidepresivos son agentes muy heterogéneos
desde el punto de vista bioquímico, por lo que pueden considerarse como fármacos
- Hinz B, Brune K. Paracetamol and cyclooxygenase inhibition: is there a cause for concern? “poco limpios”. Una característica común de todos los antidepresivos, comercializados
Ann Rheum Dis 2012; 71: 20-25. hasta el momento, es su capacidad de incrementar las tasas de monoaminas (nora-
drenalina, serotonina y algunos también de dopamina) en la hendidura sináptica, por
- Krotz F, Schiele TM, Klauss V, Sohn HY. Selective COX-2 inhibitors and risk of myocardial
infarction. J Vasc Res 2005; 2: 312-324. lo que incrementan la transmisión mediada por estas monoaminas (Fig. 1). Este efecto
se relaciona con la puesta en marcha de una serie de mecanismos de adaptación
- Loza E. AINEs en la práctica clínica. Lo que hay que saber. Inf Ter Sist Nac Salud 2011; 35: que dan lugar al efecto antidepresivo y con toda probabilidad al efecto analgésico.
88-95. Además, los antidepresivos, en distinta medida según el tipo farmacológico, van a blo-
quear una serie de receptores centrales que son, en líneas generales, los responsables
- Munir MA, Enany M, Zhang JM. Analgésicos no opioides. Med Clin N Am 2007; 91: 97-111.
de los efectos adversos de estos agentes (Tabla II).
- The Oxford League Table of Analgesic Efficacy. Disponible en: http://www.jr2.ox.ac.uk/ban-
dolier/booth/painpag /Acutrev/Analgesics/Leagtab.html .
- Telleria-Diaz A, Schmidt M, Kreusch S, et al. Spinal antinociceptive effects of cyclooxygenase 5.2.2 Antidepresivos tricíclicos
inhibition during inflammation: Involvement of prostaglandins and endocannabinoids. Pain
2010; 148: 26-35. Los ADT han sido los agentes antidepresivos más estudiados desde el punto de vista
clínico en el tratamiento del dolor, considerándose como el “patrón” con el que compa-
- White WB, Campbell B. Blood Pressure Destabilization on Non-steroidal Anti-Inflammatory rar la eficacia de los nuevos antidepresivos. Aunque su manejo no es fácil, ya que hay
Agents: Acetaminophen Exposed?. Circulation 2010; 122: 1779–1781. que realizar una progresiva titulación de la dosis y suelen presentan molestos efectos
adversos (Tabla II), su eficacia analgésica en diferentes procesos dolorosos hace que
se les consideren unos coadyuvantes de amplio espectro, por lo que son empleados
en dolores crónicos no cancerosos, como el de algunos procesos reumatológicos,
dolor neuropático, así como en el dolor psicógeno o somatomorfo (Tablas III y IV).
490 491
paciente musculoesquelético
Tabla 1: Clasificación de los antidepresivos según Figura 1: Influencia de los fármacos antidepresivos
su mecanismo de acción en la neurotransmisión monoaminérgica
FAMILIA Acrónimo Fármaco
prototipo
Inhibidores de la recaptación de serotonina y nora- ADT Imipramina
drenalina con acción antagonista de diversos recep-
tores (antidepresivos tricíclicos o heterocíclicos)
Inhibidores irreversibles de la MAO (monoaminooxi- IMAO Fenelzina
dasa)
Inhibidores de la recaptación de noradrenalina con AD 2ª generación Maprotilina
acción antagonista de diversos receptores
Antagonistas de autorreceptores α2 Mianserina
Inhibidores selectivos de la recaptación de dopamina ISRD Bupropion
Inhibidores selectivos de la recaptación de seroto- ISRS Fluoxetina
nina
Inhibidores reversibles de la MAO RIMA Moclobemida
Inhibidores de la recaptación de serotonina y antago- Nefazodona
nistas de los receptores 5-HT2
Antagonistas de auto- y heterorreceptores α2 y NaSSA Mirtazapina NA: noradrenalina; 5HT: serotonina; DA: dopamina; ADT: antidepresivos tricíclicos; ISRS:
receptores 5-HT2 y 5-HT3 inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina; IRNS: inhibidores selectivos de la
Inhibidores selectivos de la recaptación de noradre- IRNA Reboxetina recaptación de noradrenalina y serotonina; IMAO: inhibidores de la mono-amino-oxidasa.
nalina
Agonistas melatoninérgicos y antagonistas de los Agomelatina
receptores 5-HT2C
492 493
paciente musculoesquelético
Tabla 2: Efectos terapéuticos y adversos de los antidepresivos Bloqueo receptores histaminérgicos ADT Sedación, Somno-
en función de su actividad farmacodinámica. H1 mirtazapina lencia, Aumento
de peso, Mareos,
Actividad farmacodinámica Fármacos Efecto Efectos adversos Hipotensión
antidepresivos terapéutico Bloqueo de receptores adrenér-
Inhibición recaptación serotonina ADT Antidepresivo Náuseas, Nervio- gicos
ISRS sismo, Insomnio, Receptores α1 centrales y ADT ¿Ansiolítico? Hipotensión ortos-
Venlafaxina Disfunción sexual periféricos tática, Vértigo,
Taquicardia refleja,
Inhibición recaptación ADT Antidepresivo Taquicardia, Hiper- Sedación, Priapismo
noradrenalina Venlafaxina Analgésico tensión, Temblores,
Reboxetina Disfunción sexual Receptores α2 ADT Antidepresivo
Activación receptores 5-HT Regulación a la baja de la densidad ADT Antidepresivo
5-HT1A postsináptico ADT Antidepresivo de receptores β-adrenérgicos ISRS
IMAOs Ansiolítico
ISRS Inhibición de la monoaminooxidasa IMAO Antidepresivo Hepatotoxicidad,
Mirtazapina Crisis hipertensivas,
Cefaleas, irritabili-
5-HT1D ISRS Cefaleas, migrañas dad, Trastornos es-
fera sexual, Edemas,
5-HT2 ISRS Antidepresivo Insomnio, Ansiedad, Insomnio
Antiobsesivo Disfunción sexual, ADT: antidepresivos tricíclicos; ISRS: inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina; IMAO: inhibidores de la
Antibulímico Agitación, Acatisia mono-amino-oxidasa
Tabla 5: Pautas posológicas “analgésicas” de antidepresivos 5.2.2.1 Eficacia clínica de los ADTs como analgésicos
y anticonvulsivantes utilizados en cuadros dolorosos crónicos A partir de 41 ensayos clínicos controlados, Lynch revisó la eficacia de los ADTs en
no cancerosos, cuya eficacia se ha constatado mediante el manejo de diferentes cuadros dolorosos y confirmó que estos antidepresivos son
estudios clínicos eficaces como analgésicos en dolor neuropático, distintos tipos de cefaleas, algunos
procesos reumatológicos y dolor central. Asimismo, pese a que son pocos los estu-
Familia Fármaco Pauta posológica dios controlados en dolor canceroso, algunos estudios abiertos y la experiencia clínica
ADTs Amitriptilina 10-25 mg / día (mejor por la noche). soportan su eficacia analgésica. La amitriptilina es el ADT más estudiado; Lynch reco-
Imipramina Incremento de 10-25 mg / semana hasta 75-150 mg / día (o gió 16 estudios controlados, de los cuales el más reciente fue realizado en 1990, en
niveles plasmáticos específicos). dolor clasificado como “psicogénico”. Posteriormente, se han publicado algunos más;
Desipramina 25 mg / día. a título de ejemplo, Martín-Araguz et al. han realizado en España un estudio compa-
Nortriptilina Incremento de 25 mg / semana hasta 150 mg / día (o niveles rativo doble-ciego entre mirtazapina y amitriptilina en cefaleas crónicas tensionales y
plasmáticos específicos).
Schreiber et al. un estudio comparativo con fluoxetina en dolor musculoesquelético. El
ISRS Fluoxetina 10-20 mg / día hasta 80 mg / día (fibromialgia). segundo ADT más contrastado en la revisión de Lynch es la imipramina, con 8 ensayos
Paroxetina
controlados, seguido de la doxepina y de la clomipramina, con 6 ensayos controlados
Otros antidepresivos Venlafaxina 37,5 mg / día. en cada caso. Asimismo, el metabolito desmetilado de la imipramina, la desipramina,
Incremento de 37,5 mg / semana hasta 300 mg /día
de acción inhibidora selectiva de la recaptación noradrenérgica, fue ensayado en cua-
Bupropion 100 mg / día. tro ocasiones.
Incremento de 100 mg / semana hasta 200 mg / 2 veces día
(400 mg / día).
496 497
paciente musculoesquelético
res en lo referente al alivio del dolor, aunque no mejoran significativamente la capacidad 5.2.2.2.1 Dosificación analgésica
funcional del paciente, y además son peor tolerados. Más recientemente, se ha podido
comprobar que este efecto beneficioso parcial es independiente de sus propiedades Hay que recordar que el efecto analgésico de los ADTs puede presentarse a dosis
antidepresivas. Por otra parte, se ha podido evidenciar que los inhibidores selectivos inferiores o iguales a las antidepresivas. Del mismo modo, el efecto analgésico se
de la recaptación de serotonina (ISRS) son ineficaces en el dolor crónico de espalda, inicia antes que el efecto antidepresivo; a veces aparece a las 24 horas de iniciado el
por lo que se postula que en el efecto parcial analgésico observado con los ADTs, tan tratamiento y si a la semana no ha aparecido con las dosis recomendadas lo mejor es
sólo a dosis elevadas, participa la inhibición de la recaptación de noradrenalina, cosa buscar otra alternativa terapéutica.
que no hacen los ISRS. Por su parte, en los dolores artríticos, la eficacia de los ADTs
El empleo de amitriptilina, que es el ADT más utilizado, debe comenzarse con dosis
es muy discutible, ya que de ponerse de manifiesto sólo lo es en combinación con los
bajas (por ejemplo, 10-25 mg), preferiblemente al acostarse, y aumentar gradualmente
anti-inflamatorios no esteroideos (AINEs).
hasta encontrar una dosis óptima para aliviar el dolor (entre 75 y 150 mg/día suele ser
suficiente), efecto que puede aparecer a los pocos días y antes que el efecto antide-
presivo. La aparición de efectos adversos graves limita el escalado de dosis. Con las
5.2.2.2 Efectos adversos y contraindicaciones de los ADTs empleados como coadyu- dosis más elevadas, se recomienda determinar niveles plasmáticos, que no deben
vantes analgésicos superar los 500 ng/ml, así como realizar un electrocardiograma. Con respecto a la
nortriptilina y desipramina, estas aminas secundarias deben ser iniciadas, en el trata-
El empleo de ADTs no está exento de efectos adversos (Tabla II). Los principales efec- miento del dolor neuropático, a dosis de 10-25 mg/día, también preferentemente por
tos secundarios de estos fármacos son consecuencia de su actividad sobre distintos la noche, e incrementarla 10-25 mg/día cada 3-7 días, según la tolerancia, hasta dosis
tipos de receptores. Así, su actividad anticolinérgica puede provocar efectos adver- máximas de 75-150 mg/día. Si los niveles plasmáticos son inferiores a 100 ng/ml, la
sos como sequedad de boca, estreñimiento, visión borrosa, retención urinaria, dis- titulación puede continuar hasta que sea necesario, y se deben esperar, al menos, 6-8
función sexual o glaucoma. Asimismo, por su capacidad de bloqueo histaminérgico semanas para poder observar el efecto analgésico completo. La Tabla V recoge las
pueden inducir un aumento de peso (hasta 0,5 kg/mes), y el bloqueo de los receptores pautas posológicas de los antidepresivos en su uso como analgésicos.
α-adrenérgicos puede tener como consecuencia la hipotensión postural. La toxicidad
de la amitriptilina, principal ADT en el campo del dolor, se incrementa cuando la dosis
supera los 100 mg/día, siendo evidentes sus efectos anticolinérgicos, con riesgo de
cardiotoxicidad y la sedación. Estos efectos son más marcados en pacientes debilita- 5.2.3 Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina
dos y en ancianos, así como en aquellos que presentan patología cardiaca, en los que
Durante la década de 1990, los ISRS alcanzaron un importante nivel de empleo clínico,
podríamos decir que están contraindicados, así como en los pacientes con glaucoma
no sólo como antidepresivos, sino también en diversos cuadros ansiosos y en muchas
de ángulo cerrado.
otras patologías, habiéndose estudiado también, en diferentes ensayos clínicos, su
Por último, todos los ADTs presentan una serie de contraindicaciones. Algunas son papel en distintos cuadros dolorosos. En este sentido, el interés por los ISRS se basa
absolutas, como el infarto de miocardio reciente, mientras que otras son relativas, en presentar un perfil diferente de efectos adversos, que les hace, en líneas generales,
como las cardiopatías y los trastornos del ritmo cardíaco, la hipertrofia prostática, el ser mejor tolerados y más seguros en sobredosis que los ADTs. Por otra parte, su
glaucoma de ángulo agudo o la epilepsia, casos todos ellos en los que se debe evaluar dosificación es sencilla, ya que suele bastar con un comprimido al día, lo que facilita la
el estado concreto de cada paciente. Debido a su perfil farmacodinámico, los ADTs cumplimentación y evita errores en la posología. En este sentido, los ISRS se emplean
pueden inducir arritmias, en ocasiones letales, en pacientes con isquemia coronaria. a dosis iguales o ligeramente superiores a las empleadas como antidepresivos (Tabla
En pacientes con infarto de miocardio reciente, insuficiencia cardiaca o arritmias, los V). Este es un detalle diferencial importante con los ADTs que, como hemos señalado
ADTs deben sustituirse por gabapentina o por opioides. previamente, pueden ejercer propiedades antinociceptivas a dosis inferiores a las an-
tidepresivas.
498 499
paciente musculoesquelético
A la dosis inicial de 20 mg/día, resultó eficaz en el tratamiento de la fibromialgia, tanto no se obtiene respuesta a los ADTs, cuando estos están contraindicados o cuando han
en estudios controlados como abiertos, si bien, al igual que con otros agentes em- aparecido efectos indeseables con estos agentes.
pleados en esta patología, existen datos discrepantes. En este sentido, Arnold et al.
han realizado un estudio randomizado, paralelo, doble-ciego frente a placebo, en 60
mujeres diagnosticadas de fibromialgia. La fluoxetina mejoró de forma significativa la
5.2.4 Otros antidepresivos
sintomatología clínica global, la fatiga, la depresión y el cuadro doloroso respecto al
placebo. En conclusión, parece ser que este ISRS mejora algunos síntomas de la fibro- En este grupo se incluyen una serie de antidepresivos (Tabla I) cuya única característica
mialgia y aunque el número de puntos dolorosos mejoró más que con el placebo, este común es su comercialización posterior a los ISRS y que sus mecanismos de acción
dato no alcanzó significación estadística. A las mismas conclusiones llegó el metaaná- primarios son diferentes a los de los antidepresivos ya comentados.
lisis de Häuser et al., confirmando una buena evidencia en la eficacia frente al dolor, un
efecto pequeño en el humor depresivo y una ausencia de efecto positivo en la fatiga y La venlafaxina es un inhibidor de la recaptación de serotonina, a dosis bajas, y de
en los problemas de sueño. Puesto que fluoxetina es bien tolerada por los pacientes y noradrenalina, a dosis más elevadas (IRNS). Su mecanismo de acción es similar al de
las alternativas son limitadas, sería conveniente la realización de más estudios contro- los ADTs, pero con una mayor limpieza bioquímica, al no bloquear receptores adrenér-
lados, para definir su perfil clínico en este complejo cuadro doloroso. gicos, colinérgicos o histaminérgicos, por lo que su perfil de tolerabilidad es superior
al de los ADTs. El hecho de que este antidepresivo tenga un mecanismo de acción
Por su parte, la eficacia analgésica de fluoxetina en pacientes con dolores artríticos se similar al de los ADTs, junto con una similitud estructural con el tramadol, analgésico
ha puesto de manifiesto en un ensayo clínico controlado: la eficacia de fluoxetina fue con propiedades opioides que, al igual que la venlafaxina, inhibe la recaptación de
superior al placebo y a amitriptilina, siendo además mejor tolerada que el ADT. Asimis- serotonina y noradrenalina, ha incrementado el interés por conocer el papel de este
mo, algunos casos reportados parecen hablar de un perfil prometedor de la fluoxetina IRNS en distintos cuadros algésicos. Asimismo, la duloxetina, otro agente IRNS se ha
en este tipo de dolor. Por otra parte, en un estudio controlado frente a amitriptilina, en postulado como un agente capaz de mejorar la sintomatología somática de la depre-
pacientes con dolor musculoesquelético, ambos antidepresivos produjeron un alivio sión y en especial el dolor.
moderado o bueno del dolor en alrededor del 80% de los pacientes, no existiendo dife-
rencias de eficacia significativas entre ellos, por lo que se propone a la fluoxetina como Se ha estimado para la venlafaxina, en el tratamiento del dolor neuropático, un NNT de
alternativa en pacientes que no toleran a la amitriptilina. En este sentido, es posible 3,1 (Tabla IV). Igualmente, la venlafaxina parece prometedora en la mejoría del dolor y
que a este efecto analgésico contribuyan las propiedades anti-inflamatorias exhibidas discapacidad de pacientes con fibromialgia, siendo este efecto independiente de su
por fluoxetina en modelos experimentales de inflamación, hecho que comparte con efecto antidepresivo o ansiolítico.
amitriptilina, imipramina y trazodona, pero no con sertralina.
Otro IRNS, la duloxetina, que también ha demostrado su eficacia analgésica en dife-
El citalopram, en dos estudios controlados frente a placebo, a las dosis de 20-40 mg/ rentes modelos animales de dolor, constituye el primer antidepresivo no tricíclico que
día, evaluado de forma global, fue ineficaz en la fibromialgia. Aunque algunos paráme- ha recibido la aprobación expresa de la autoridades sanitarias para el tratamiento del
tros mejoraron, como el bienestar general, en los pacientes que cumplieron el trata- dolor en la neuropatía diabética. En un metaanálisis, Häuser et al. confirmaron que la
miento, estos efectos beneficiosos fueron transitorios. duloxetina poseía una gran evidencia de eficacia en el control de los síntomas doloro-
sos, afectivos y relacionados con el sueño, pero carecía de eficacia en el control de la
En el tratamiento del dolor crónico de espalda, 20 mg/día de escitalopram se ha mos- fatiga (Tabla III).
trado tan eficaz como 60 mg/día de duloxetina en un estudio randomizado de 13
semanas.
En conclusión, la evidencia clínica con los ISRS como coadyuvantes analgésicos (Tabla 5.2.5 Interacciones farmacológicas de los antidepresivos
III) no supera a la existente con los ADTs. Sin embargo, los ISRS son fármacos más
seguros en sobredosis, mejor tolerados y de manejo posológico más sencillo. Por La mayor parte de las interacciones farmacocinéticas en las que se ven involucrados
consiguiente, el empleo de ISRS en el dolor crónico debe reservarse a casos en que los antidepresivos son debidas a la modificación de los procesos hepáticos de me-
tabolización de medicamentos. La mayoría de los agentes antidepresivos son fárma-
500 501
paciente musculoesquelético
cos ampliamente metabolizados por el complejo enzimático del citocromo P-450, el Tabla 7: Interacciones medicamentosas más relevantes
principal sistema enzimático involucrado en las reacciones de metabolización de fase
clínicamente de los antidepresivos.
I o de oxidación (Tabla VI). Pero, además, estos fármacos, salvo los de más reciente
introducción (mirtazapina, reboxetina y duloxetina) son potentes inhibidores de dife- FÁRMACO EFECTO MECANISMO
rentes isoenzimas de esta familia, básicamente los CYP2D6, CYP3A4 y CYP2C, lo ADT F. simpaticomiméticos Hipertensión, arritmias Inhibición captación neuronal
que puede redundar en potenciales interacciones medicamentosas al ser empleados
clínicamente. Clonidina, guanetidina ⇓ efecto antihipertensivo Inhibición captación neuronal
IMAO Alimentos ricos en tiramina Crisis hipertensivas ⇑ liberación catecolaminas
Tabla 6: Fármacos antidepresivos como substratos o inhibidores ADT, ISRS, petidina Excitación, hipertensión, coma Síndrome serotoninérgico
de los distintos isoenzimas del CYP450, según
datos procedentes de estudios in vitro y ensayos clínicos. Aminas simpaticomiméticas Crisis hipertensivas ⇑ síntesis y ⇓ metabolismo de
noradrenalina
CYP2D6 CYP1A2 CYP2C CYP3A4 ISRS ADT Intoxicación por ADT Inhibición metabolismo
hepático
Amitriptilina Terfenadina, astemizol Arritmias ventriculares Inhibición enzimas hepáticos
Clomipramina
Warfarina ⇓ efecto anticoagulante Desplazamiento proteínas
Desipramina plasmáticas
Imipramina ADT: antidepresivos tricíclicos; ISRS: inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina;
IMAO: inhibidores de la mono-amino-oxidasa.
Nortriptilina
Trimipramina La Tabla VII recoge las interacciones farmacológicas más importantes, desde el punto
de vista clínico, de los antidepresivos.
Fluvoxamina
Fluoxetina
Paroxetina 5.2.6 Anticonvulsivantes: indicaciones, contraindicaciones, toxicidad y
Sertralina dosificación en el tratamiento del dolor
Citalopram 5.2.6.1 Carbamazepina
Venlafaxina La carbamazepina es un derivado del iminoestilbeno, emparentado químicamente con
Duloxetina los ADTs. Su mecanismo de acción es central y periférico. Su acción central se pone
de manifiesto al disminuir la excitabilidad de los núcleos reticular dorsal y caudal del
Trazodona trigémino, mientras que su acción periférica se basa en la disminución de la conduc-
Nefazodona tancia al Na+ y K+, al modular los canales de Na+ dependientes de voltaje, por lo que
Moclobemida impide la actividad espontánea ectópica característica del dolor neuropático en las
fibras Aδ y C, sin alterar la propagación nerviosa normal o fisiológica (Figs. 2 y 3).
Bupropion
Mirtazapina Desde el punto de vista clínico, existen algunos trabajos clásicos publicados sobre el
empleo de carbamazepina en el control del dolor neuropático, incluyendo algunos en-
Reboxetina
sayos clínicos controlados, aunque no todos ellos tienen los requerimientos de calidad
(substrato), (inhibidor).
502 503
paciente musculoesquelético
de los estudios clínicos actuales. En 1962, se demostró que la carbamazepina era Figura 3: Mecanismos implicados en la acción de los fármacos
eficaz en pacientes con neuralgia del trigémino.
anticonvulsivantes
En un estudio más reciente, la carbamazepina fue superior a la gabapentina en el sín-
drome del túnel carpiano. Pese a que el estudio clínico se realizó en un corto número
de pacientes, estos datos pueden ser de interés para el tratamiento de pacientes que
no sean susceptibles de cirugía.
5.2.6.2 Gabapentina
504 505
paciente musculoesquelético
conducta, en la bulimia y en el abuso de sustancias. Sin embargo, las indicaciones de 900 mg/día al tercer día. Debido a la vida media de gabapentina, la dosificación se
aprobadas, en las que existe constancia de eficacia clínica, con un fuerte respaldo completa en tres tomas al día. La dosis se irá incrementando hasta alcanzar 1800 mg/
bibliográfico, son las de anticonvulsivante y como analgésico en el dolor neuropático. día a los 14 días de iniciado el tratamiento. Una vez alcanzada esta dosis, se irá incre-
mentando hasta conseguir el efecto terapéutico, sin que aparezcan efectos adversos,
La gabapentina interactúa con la subunidad α2δ de los canales de Ca2+ dependiente o hasta una dosis máxima de 3600 mg/día (Tabla V).
de voltaje tipo N, P y Q. De este modo, la gabapentina modula la entrada de este ion
en la neurona, por lo que se inhibe la liberación de diversos neurotransmisores, entre
los que se encuentra el glutamato y el aspartato. (Figs. 2 y 3).
5.2.6.3 Pregabalina
Un punto a destacar de la gabapentina es su sencillo perfil farmacocinético, que la dife-
rencia de la complejidad de otros agentes antiepilépticos en este sentido. La absorción La pregabalina es un análogo del GABA, que, sin embargo, carece de actividad sobre
de gabapentina es rápida, aunque existe una variabilidad interindividual, y dependiente mecanismos de acción gabérgicos. Tampoco afecta a los canales de Na+. La prega-
de las dosis. Aproximadamente se absorbe el 60% de una dosis de 300 a 600 mg. La balina, al igual que la gabapentina, es un potente ligando de la subunidad α2δ de los
vida media es de 5-7 horas, lo que haría aconsejable su administración tres veces al canales de Ca2+ dependientes de voltaje, por lo que disminuye la entrada de Ca2+ y
día. No se fija a las proteínas plasmáticas ni es metabolizada en el hígado, careciendo en consecuencia la liberación de aminoácidos excitatorios. Así pues, la pregabalina,
de efectos inhibidores o inductores sobre las isoenzimas del citocromo P450, por lo un análogo de alta potencia de la gabapentina, con mejor biodisponibilidad, muestra
que es eliminada en forma inalterada por el riñón. Todo ello hace que las interacciones propiedades ansiolíticas, anticonvulsivantes y analgésicas en un amplio espectro de
farmacocinéticas, tan frecuentes con otros FAEs, sean mínimas con gabapentina. La modelos animales.
eliminación renal no se ve afectada por la edad, aunque lógicamente puede verse alte- La pregabalina en monoterapia ha demostrado ser superior al placebo en pacientes
rada en caso de insuficiencia renal. afectos de fibromialgia. La tolerabilidad de pregabalina en estos estudios fue buena,
La gabapentina también ha sido ensayada en pacientes con fibromialgia en un estudio presentándose mayor somnolencia y mareos que con el placebo.
randomizado, doble-ciego y controlado con placebo de 12 semanas de duración. La
dosis de gabapentina fue de 1200-2400 mg/día. El porcentaje de pacientes respon-
dedores (reducción superior al 30% en la escala Brief Pain Inventory) con gabapen-
tina fue superior a placebo (51% vs. 31%; p = 0,014). Más recientemente, Häuser et
al. efectuaron un metaanálisis del tratamiento con gabapentina y pregabalina en esta
patología, en el que incluyeron 6 ensayos controlados (n = 3478) y constataron que
ambos anticonvulsivantes aportaban una gran evidencia en la reducción del dolor, en Bibliografía
la mejoría del sueño y de la calidad de vida, pero no en el humor depresivo.
- Carette S, Bell MJ, Reynolds WJ, et al. Comparison of amitriptyline, cyclobenzaprine, and
Los efectos adversos más habituales de gabapentina son la somnolencia y mareos, placebo in the treatment of fibromyalgia. Arthritis Rheum 1994; 37:32–40.
sobre todo al inicio del tratamiento, y menos frecuentemente molestias digestivas y - Sindrup SH. Antidepressants in chronic pain. In: Jensen TS, Wilson PR, Rice ASC (Eds).
edema periférico. Estos efectos requieren control de la dosificación, pero pocas veces Clinical Pain Management: Chronic Pain. London: Arnold, 2003, pp 239–249.
obligan a suspender el tratamiento. En líneas generales, la gabapentina es bien tolera-
da y segura en estos pacientes, observándose menos efectos adversos que con los - Sindrup SH, Jensen TS. Efficacy of pharmacological treatments of neuropathic pain: an up-
ADTs, y careciendo de interacciones farmacológicas, lo que la distingue de la mayoría date and effect related to mechanism of drug action. Pain 1999; 83:389–400.
de fármacos empleados en el tratamiento del dolor neuropático crónico. Si se realiza - Sindrup SH, Bach FW, Madsen C, Jensen TS. Venlafaxine versus imipramine in painful poly-
un escalado adecuado de dosis, se consiguen disminuir los efectos adversos y au- neuropathy. A randomized, controlled trial. Neurology 2003; 60:1284–1289.
mentar la adherencia al tratamiento por parte del paciente. Se debe iniciar con gaba-
pentina a la dosis de 300 mg el primer día, mejor al acostarse, para alcanzar la dosis
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510 511
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diagnósticos con anestésico local intrarticulares pueden ser de gran utilidad en el diag- 5.3.1.5 Dolor radicular
nóstico diferencial. Los bloqueos diagnósticos confirman una prevalencia de dolor sa-
croiliaco en el 10-19% de los pacientes con dolor lumbar crónico. El ganglio de la raíz dorsal es una estructura importante etiopatogénico de dolor radi-
cular. La irritación de los axones de un nervio espinal o de las neuronas del ganglio de la
Están indicados los bloqueos articulares y periarticulares con anestésicos locales y raíz dorsal por compresión o por sustancias inflamatorias es un mecanismo importante
corticoides de depósito. En los últimos años se han descrito también varias técnicas en la fisiopatología del dolor radicular. Cualquiera de estos factores eventualmente
de radiofrecuencia convencional o rizolisis de la articulación y su inervación con el ob- conducen a cambios en los canales iónicos en funcionamiento, con hiperexcitabilidad
jeto de hacer más duradera la analgesia conseguida en los bloqueos. resultante y la actividad espontánea aberrante del ganglio de la raíz dorsal, que se
interpretan como dolor radicular.
512 513
paciente musculoesquelético
pleado en la actualidad es la discolisis con ozono al 30% que aunque todavía tiene Otra de las fuentes de dolor lumbar es la articulación facetaria, que se puede tratar con
una evidencia limitada es una técnica utilizada durante años con buenos resultados en una radiofrecuencia del ramo medial como se comentó previamente. Sin embargo en
esta patología. aquellas columnas con instrumentación es habitualmente imposible llegar a ellas con
radioscopia. Se necesitaría la aplicación de un TAC con el incremento de radiación y
coste que supone.
5.3.1.7 Estenosis de canal En los casos de dolor radicular se puede hacer tratamiento intervencionista mediante
bloqueos epidurales o radiculares con anestésico local y/o corticoides, radiofrecuencia
En la estenosis de canal existen técnicas
Figura 5. Radiofrecuencia de la metámera afectada ya sea transforaminal (prácticamente imposible en pacientes
invasivas que pueden ayudar al control de
los síntomas, aunque no son tratamiento de raíz por vía epidural caudal instrumentados) o vía caudal. También se puede utilizar técnicas de epidurolisis que
de L5 consiste en la introducción vía caudal de un catéter hasta llegar a liberar las adhe-
etiológico y, al ser habitualmente una pa-
rencias o fibrosis que pueden ser responsables de la patología del paciente, y poder
tología degenerativa, no es curativo. Sin
depositar los fármacos deseados directamente sobre las áreas afectadas. Esta técnica
embargo, es resolutivo junto con el trata-
se describió con suero salino hipertónico, pero en la actualidad muchos la realizamos
miento médico en un número importante
con suero salino normal debido a la incidencia de lesiones neurológicas por la hiper-
de pacientes. Las técnicas más frecuente-
tonía del suero.
mente realizadas y las que más evidencia
tienen son la inyección caudal de esteroi- En pacientes refractarios a estas terapias pueden ser tratados con epiduroscopia, La
des y/o anestésicos locales y la infiltración utilización de esta técnica es compleja, requiere un entrenamiento exhaustivo y no esta
epidural. Si lo que predomina es el dolor disponible en muchas Unidades de Dolor. Por otro lado en manos expertas es segura
radicular se puede realizar simultáneamen- y eficaz, aunque no definitiva, ya que el dolor recidiva en la mayoría de los pacientes.
te una radiofrecuencia epidural vía caudal
o bipolar (asociando una radiofrecuencia Por último la técnica más eficaz en el tratamiento del SEF es sin lugar a dudas la esti-
bipolar). mulación de los cordones posteriores de la médula, siendo esta la que más evidencia
tiene a largo plazo en estos pacientes.
514 515
paciente musculoesquelético
El abordaje caudal también puede ser utilizado para inyectar anestésicos locales y/o
esteroides en el espacio epidural. Esto se realiza mediante la inserción de una aguja Tabla 1
epidural a través del hiato sacro en el espacio epidural en el canal sacro. Este abordaje
precisa obligatoriamente el uso de una técnica de imagen (fluoroscopia o ecografía) CONTRAINDICACIONES ABSOLUTAS CONTRAINDICACIONES RELATIVAS
para asegurar el correcto posicionamiento de la aguja ya que esta técnica a ciegas Sangrado activo/Anticoagulación Laminectomia en el lugar de inyección (sólo con
produce una falsa inyección en un 30% a 40% de los casos. escopia)
Inhibición recaptación noradrenalina Alergia a fármacos a inyectar (evitarlo)
El éxito de los esteroides epidura-
les se basa en el hecho de que la Infección sistémica
Figura 6 inflamación en el espacio epidural y
las raíces nerviosas secundario a la DM incontrolada
compresión mecánica de una hernia Enfermedad neurológica progresiva
Epidural needle
de disco u otro mecanismo es un fac-
tor significativo en la causa de dolor Síndrome de cauda equina
radicular. Debido a que el dolor radi-
cular puede originarse a partir de la
inflamación del espacio epidural y de Existen unas contraindicaciones e indicaciones claras que deben seguirse (véase tabla
la raíz del nervio, los efectos analgé- 1). Están pueden aplicarse como reglas generales al resto de las técnicas invasivas.
Catheter sicos de los corticoesteroides puede
estar relacionada con la inhibición de
la fosfolipasa A2 con disminución de
5.3.2.2 Radiofrecuencia
la inflamación resultante de inhibición,
de la transmisión neural en nocicep- La RF consiste en una corriente eléctrica de alta frecuencia entre un electrodo activo
tiva las fibras C, y la reducción de la y una placa de paciente, que produce calor y destruye el tejido que se encuentra alre-
permeabilidad capilar. dedor del electrodo. (figura 8)
Los generadores que se usan en los procedimientos de control del dolor por radiofre-
Figura 7 cuencia dan una corriente alterna, de baja Intensidad y de muy alta frecuencia: aprox.
500.000 Hz. Cuando la corriente pasa a través de los tejidos, éstos oponen resistencia
(esta resistencia es realmente la impedancia. (Omhs)) con lo que parte de la corriente
se convierte en Calor: RF convencional.
516 517
paciente musculoesquelético
los periodos silentes entre ciclos se elimina el calor –por conductividad y por el efecto Recientemente se ha desarrollado otro Figura 9. Radiofrecuencia
de la vascularización– que se ha creado durante las partes activas del ciclo) en conclu- concepto nuevo en el campo de la radio- bipolar sobre la raíz de L4
sión no se produce una lesión en el tejido porque no hay aumento de la temperatura, frecuencia que es la radiofrecuencia bipolar
y por ello puede utilizarse en nervios con fibras motoras y no sólo sensitivos. en el que el campo eléctrico se crea entre
dos puntas activas de dos electrodos y no
Los cálculos sobre los campos de radiofrecuencia muestran que el campo magnético entre una placa y una punta activa de un
es insignificante, por lo que parece más probable que el efecto clínico de la radiofre- electrodo. Se han descrito la utilización en
cuencia sea debido al campo eléctrico, los cambios rápidos en el campo eléctrico o articulaciones, disco y en el tratamiento del
la alta densidad de corriente. Una hipótesis verosímil sería que la membrana de las dolor radicular (creando un campo entre un
fibras nerviosas tiene una función de condensador. Debido al gran campo eléctrico, electrodo insertado por vía caudal y otro vía
los agujeros en este condensador pueden quedar bloqueados. Esto podría bloquear transforaminal).
parcialmente la transmisión del estímulo a lo largo de la fibra nerviosa, mientras que la
anatomía de la neurona puede no verse alterada. La vaina de mielina puede proteger Las ventajas de las técnicas de la radio-
a las fibras de mayor calibre de este efecto. Otros posibles mecanismos de acción frecuencia sobre otros métodos neuro-
pueden ser: la hiperestimulación de las aferencias nerviosas como ocurre con la esti- destructivos son: a) se puede controlar el
mulación eléctrica transcutánea de nervios, la inducción de un mediador químico por tamaño de la lesión; b) se puede controlar
la corriente de radiofrecuencia, y el efecto placebo. en todo momento la temperatura en el extremo del electrodo; c) se puede comprobar
la localización del electrodo mediante el empleo de la impedancia, la frecuencia y el
voltaje de la corriente eléctrica; d) los electrodos de radiofrecuencia pueden emplearse
para diferentes modalidades de tratamiento; e) estas técnicas pueden realizarse bajo
Figura 8 anestesia local y escasa sedación; f) el procedimiento no es totalmente destructivo,
existiendo recuperación de la función nerviosa; g) escasa morbilidad, si se realizan las
técnicas apropiadamente; y h) las lesiones pueden repetirse nuevamente si se reapa-
rece el dolor.
5.3.2.3 Epiduroscopia
518 519
paciente musculoesquelético
La técnica consiste en acceder al espacio epidural es a través del hiato sacro por me- ampliaron las indicaciones de esta técnica al Figura 10
dio de un introductor. Posteriormente se pasa el epiduroscopio que lleva insertada en dolor de origen vascular al demostrarse que
una de sus luces un fibra óptica que permite visualizar el espacio epidural. El objetivo aumentaba el flujo periférico. La EME es la
fundamental de la técnica es identificar estructuras patológicas tales como zonas in- estimulación eléctrica de la médula espinal a
flamadas (flogosis), zonas de neo-vascularización, y fibrosis en el canal epidural de la través de electrodos implantados en la mis-
región lumbar (L1-S1). Una vez identificadas se procede al tratamiento aprovechando ma con objeto de producir parestesias en las
la visión de estas estructuras. áreas de dolor. El objetivo de la EME es ob-
tener más del 80% de cobertura de las áreas
Las indicaciones en la actualidad son: pacientes con dolor radicular debido a FBSS de dolor mediante parestesias, así como
y/o estenosis del canal lumbar que no respondan al tratamiento conservador. Ejemplos mantener, como mínimo, una reducción del
típicos de estas situaciones son: la estenosis espinal, el dolor lumbar con o sin irradia- 50% del dolor al año de seguimiento.
ción sin diagnóstico claro y la coxigodinia.
Estudios a doble ciego han demostrado que
Las principales contraindicaciones a esta técnica son: la existencia de coagulopatía, in- el control de la ciática persistente es mucho
fección, embarazo, déficit neuronal central y/o periférico en fase no estabilizada o diag- mejor mediante neuroestimulación medular
nosticado, la epilepsia, el antecedente de vasculopatía cerebral de tipo aneurismático- que con la reintervención quirúrgica. La ciru-
angiomatoso, la patología ocular en fase de estudio y/o evolutiva (retiniana, glaucoma), gía en muchas ocasiones origina un empeo-
estenosis cervical con mielopatía, cefalea persistente. La técnica debe ser realizada ramiento de la sintomatología previa.
en pacientes conscientes o con ligera sedación y como en cualquier procedimiento Figura 11
invasivo es fundamental la aceptación y comprensión de la técnica por el paciente. En cuanto al mecanismo por el que produce
un alivio del dolor, se ha demostrado que la
Las potenciales complicaciones de esta técnica son raras pero cabe destacar: Infec- EEM producía un aumento de los umbrales
ción (desde subcutánea a epidural), aracnoiditis, meningitis, hemorragia intracraneal o de excitación para la sensibilidad vibratoria
retiniana, disestesias, parestesias, parálisis, lesión de una raíz nerviosa, cefalea post- y táctil. Por otro lado parece que produciría
punción dural y el incremento del dolor. un aumento de los niveles de sustancia P en
el líquido cefalorraquídeo, implicando en ello
Muchas de estas complicaciones son evitadas mediante la aplicación de técnicas bá-
a mecanismos supraespinales. Además la
sicas de precaución para procedimientos invasivos, rigor en la esterilidad-asepsia, y el
EEM induce una inhibición segmentaria de
uso de indicadores clínicos basados en la respuesta del paciente.
las fibras vasoconstrictoras y a nivel cervical
alto induce cambios en el flujo y metabolismo
cerebrales.
5.3.2.4 Estimulación de cordones posteriores
Posee una nula mortalidad y una escasa
La estimulación eléctrica de la médula espinal es una técnica que viene utilizándose morbilidad si se aplica cuidadosamente. Su
con éxito desde el año 1967 para el tratamiento del dolor crónico, siendo hoy en día principal desventaja es el precio de los dis-
una de las técnicas más avanzadas que se utilizan en las Unidades de Tratamiento del positivos y su mayor eficacia en el dolor radi-
Dolor especializadas. La EEM fue la repuesta clínica a la teoría de la puerta de entrada cular, aunque con la creación de los nuevos
formulada por Melzack y Wall en 1965. Los primeros resultados clínicos de esta técni- dispositivos el dolor lumbar es también una
ca fueron publicados por Shealy 1967, Wall y Sweet 1967 y Sweet y Wepsic 1968. Las diana alcanzable en el tratamiento del síndro-
experiencias clínicas siguieron aumentando apareciendo grupos de investigadores que me de espalda fallida con EME.
la aplicaron en el dolor neurálgico o neuropático de origen periférico. Posteriormente se
520 521
paciente musculoesquelético
5.3.2.5 Infusión espinal 5.3.3 patología articular Figura 12. Infiltración articular
degenerativa de rodilla
Desde 1976, Yaks y Rudy descubrieron el efecto analgésico de la morfina por vía
espinal en experimentación con ratas. En 1979, Wang y col. usaron por primera vez Las tres articulaciones más frecuentemente
morfina intratecal para control del dolor oncológico con excelentes resultados, demos- afectadas por la patología degenerativa son
trando que con pequeñas dosis de opiáceos el efecto analgésico era muy superior a la rodilla, el hombro y la cadera.
las otras vías de administración.
Todas se pueden beneficiar del bloqueo in-
El término analgesia medular selectiva fue sugerido por Cousins y col. en 1979, con trarticular, aunque en rodilla y cadera no es
objeto de destacar la diferencia existente entre la analgesia obtenida mediante un blo- curativo. A diferencia de estos, en el hombro
queo con anestésicos locales y el conseguido mediante la administración de morfina asociado a una adecuada rehabilitación, la
por vía espinal. recuperación puede ser total.
Las principales ventajas de la morfina por vía espinal son la mayor potencia con meno- Respecto a los bloqueos articulares pue-
res dosis, el menor desarrollo de tolerancia y minimización de los efectos indeseables den ser realizados con corticoides (con o Figura 13. Bloqueo del nervio
que la administración de opioides tiene por otras vías. sin anestésicos locales), ácido hialurónico
supraescapular
y plasma rico en factores. Los corticoides
Otra de las ventajas de la infusión espinal es poder mezclar fármacos y obtener un
suelen tener una duración aproximada de
efecto sinérgico de los fármacos. Los fármacos más empleados son los mórficos (es-
un mes, son más rápidos en efecto e igual
pecialmente morfina), los anestésicos locales y el ziconotide (bloqueante de los cana-
de eficaces en las artrosis avanzadas que el
les del calcio a nivel del asta dorsal de la médula). Este último es sólo útil en el dolor
ácido hialurónico. Los ácidos hialurónicos
neuropático.
tienen más evidencia de efecto que los cor-
La administración a largo plazo de opiáceos es válida para todo tipo de dolor crónico, ticoides en medio plazo (desde 8 hasta 15
cuando han fallado los anteriores tratamientos, y se ha probado la eficacia de los mis- semanas) que los corticoides en artrosis de
mos. La administración intratecal de opiáceos debería ser considerada cuando el dolor bajo grado perdiéndose esta diferencia en
no se controla con los tratamientos convencionales por vía oral y sistémica en dosis artrosis avanzadas. El plasma rico en fac-
apropiadas o se asocian con efectos secundarios incontrolables. tores tiene ensayos clínicos frente a ácido
hialurónico demostrando mayor eficacia en
analgesia, funcionalidad y duración en artro- Figura 14. Bloqueo articular
sis de bajo grado a moderado, perece ser de la cadera
5.3.2 6 Vertebroplastia y cifoplastia que estas diferencias desaparecen en casos
Ambas técnicas están indicadas en el tratamiento de las fracturas vertebrales. Permi- de artrosis avanzadas.
ten, mediante la inyección de cemento, el relleno de la zona aplastada con la fractura y Otras técnicas que pueden emplearse en el
son analgésicas siempre y cuando sean agudas. En los últimos estudios publicados se tratamiento de estas patologías es la radio-
ha visto que la eficacia analgésica de estas técnicas no es valorable cuando la fractura frecuencia en articulaciones (rodilla), cadera
lleva más de 3 meses y es claramente eficaz por debajo de las 6 semanas (ver más y en el tratamiento del hombro aplicando una
ampliado en técnica quirúrgica). radiofrecuencia pulsada sobre el nervio su-
praescapular.
522 523
paciente musculoesquelético
5.3.4 SDRC Figura 16. Situación anatómica En pacientes refractarios a estos tratamientos, la estimulación de la médula espinal o
de la cadena simpática incluso la cerebral profunda, han demostrado ser eficaces en el control del dolor y el
Entre las posibilidades de tratamiento inter- aumento de la calidad de vida.
vencionista en el SDRC podemos ver los blo-
cervical
queos simpáticos, la radiofrecuencia de las (ganglio estrellado) Finalmente también se puede realizar la infusión de fármacos por vía intratecal existien-
cadenas simpáticas, los bloqueos epidurales do algunos estudios con mórficos, anestésicos locales, baclofeno y ziconotide.
o de plexos nerviosos, la estimulación de la
médula espinal y la infusión intratecal de fár-
macos.
524 525
paciente musculoesquelético
- Manchikanti L, Derby R, Benyamin RM, Helm S, Hirsch JA. A systematic review of mechanical La CPB consiste en reducir la fractura introduciendo un impactor que al hincharse por
lumbar disc decompression with nucleoplasty. Pain Physician. 2009 May-Jun;12(3):561-72. insuflación (balón) separa los platillos vertebrales y abre una cavidad que se rellena con
cemento óseo a baja presión estabilizando así la fractura. A diferencia de la vertebro-
- Markman JD, PhilipA. Interventional approaches for the treatment of pain, Med Clin N Am plastia, la maniobra de apertura de la cavidad tiende a corregir la deformidad espinal.
91 (2007) 271 – 286 *
La CPB tiene superior eficacia frente al tratamiento conservador en alivio del dolor du-
- Nocom G, Ho KY, Perumal M. Interventional management of chronic pain. Ann Acad Med rante 3-36 meses y capacidad funcional a 6 meses. Ambos procedimientos, VP y CPB
Singapore. 2009 Feb;38(2):150-5. **
son similares en alivio del dolor a 24 meses, aunque CPB aporta la corrección de la de-
- Pulsed radiofrequency treatment in interventional pain management: Chua NHL, Vissers KC, formidad cifótica. Entre sus principales complicaciones destacan, la fuga de cemento
Sluijter ME Acta Neurochir (2011) 153:763–771mechanisms and potential indications—a re- y la aparición de nuevas fracturas aplastamientos. La seguridad de estos procedimien-
view. tos se consideró satisfactoria, si bien se produjo un incremento de la mortalidad global
del 44%, probablemente relacionado a la progresión de la enfermedad en aquellos
- SGNM: GUIA PRÁCTICA DE INFUSION ESPINAL. Spanish Group of Neuromodulation.(Edi-
pacientes en los que se realizó por una fractura aplastamiento de origen neoplásico.
tor: G. Cerdá-Olmedo, M.L. Franco Gay, j. Insausti, M. D. López Alarcón, J.M. López Millán,
V. Monsalve Dolz, L.A. Moreno Cuartas, J. Pérez-Cajaraville, M. Tió Felip, E. Uriarte Brizuela)
526 527
paciente musculoesquelético
que la fusión espinal no aporta ventajas cuando se compara con una rehabilitación in- 5.4.3 Técnicas quirúrgicas en la radiculopatía cervical
tensiva con énfasis en los componentes de terapia cognitiva conductual, pero es leve-
mente superior a un programa de rehabilitación más tradicional. Sin embargo, menos En los pacientes con radiculopatía cervical por hernia discal, se puede valorar el trata-
de la mitad de los pacientes puede esperar resultados óptimos. No está claro tampoco miento quirúrgico ante el fracaso del tratamiento conservador, siempre que exista una
que exista beneficio clínico de la fusión instrumentada sobre la no instrumentada. adecuada correlación anatomoclínica, un déficit neurológico progresivo y la presencia
de mielopatía cervical.
Para el dolor irradiado con hernia discal, se han propuesto la discectomía abierta o la
microdiscectomía. También se proponen como alternativas a la fusión vertebral, las La discectomía cervical anterior (DCA) es una técnica de descompresión realizada por
prótesis de disco lumbar y los dispositivos interespinosos. En la revisión sistemática un abordaje anterior y que puede asociarse o no a una fusión/artrodesis con placa
de Chou et al., se establece que en los pacientes que tienen un cuadro de dolor radi- y/o injerto en casos de provocar inestabilidad, al eliminar el ligamento vertebral común
cular, la discectomía abierta convencional tiene mejor resultado a corto plazo (6 a 12 anterior, el disco y en ocasiones el ligamento vertebral posterior.
meses) que el tratamiento conservador. Los resultados a largo plazo (a partir de los 2
La DCA con o sin fusión, produce una rápida mejoría (en 3-4 meses) del dolor cervical
años y hasta los 10 años) son al menos similares, aunque probablemente mejores, a
irradiado al brazo, de la debilidad y de la pérdida sensorial, comparado con el trata-
los obtenidos con el tratamiento conservador. La discectomía abierta convencional y
miento conservador a base de inmovilización con collarín cervical o fisioterapia, aunque
la microdiscectomía ofrecen resultados similares a corto plazo. La discectomía abierta
sus resultados se igualan a largo plazo (12 meses). Existe la posibilidad de recurrencia
convencional es superior a la quimionucleolisis. Además, el coste-efectividad de la
de los síntomas entre el 11% al 38% de los pacientes. Sería recomendable establecer
discectomía abierta convencional frente al tratamiento conservador es alto.
el coste-efectividad y evaluar algunos riesgos propios de la intervención quirúrgica. No
El tratamiento recomendado para una radiculopatía por hernia discal debe existe evidencia sobre si los resultados de la DCA son mejores o no a la DCA asociada
pasar primero por un tratamiento conservador mediante fármacos y rehabili- a fijación con placa, ni entre la DCA y la prótesis discal, debido a que los estudios exis-
tación intensiva, planteando la necesidad quirúrgica ante el fracaso de este. tentes son series de casos clínicos o estudios de cohortes o estudios con deficiencias
metodológicas.
Para los pacientes con estenosis de canal sintomática, existe evidencia de que la
cirugía es moderadamente mejor que el tratamiento conservador aunque se puede En casos de estenosis foraminal, se realizará una foraminotomía anterior preservando
esperar mejoría en ambos grupos de pacientes. el disco. Este procedimiento se recomienda en el tratamiento de la radiculopatía cer-
vical para reducir el dolor cervical e irradiado, debilidad y los déficits sensoriales, con
Dos nuevos procedimientos, como son las prótesis de disco intervertebral para aque- una eficacia entre el 52% al 99% dependiente del estudio. Existe una recurrencia de
llos casos de degeneración discal, y los dispositivos o implantes interespinosos, para los síntomas en más del 30% de pacientes. Debido a que los principales estudios son
los casos que mejoran con la flexión de la columna, pueden ser de utilidad, pero a series de casos clínicos o estudios de cohortes con inadecuado diseño, no es posible
día de hoy no está establecida su seguridad a largo plazo y, debido a las deficiencias establecer una firme recomendación.
metodológicas de los estudios existentes, no puede establecerse una recomendación.
En casos de hernias laterales puede ser necesario recurrir a un abordaje posterior, me-
Para la espondilolistesis degenerativa, la cirugía se recomienda en aquellos casos sin- diante una laminoforaminotomía posterior. Consiste en la resección del borde superior
tomáticos de estenosis lumbar asociado a grados menores de espondilolistesis dege- y externo de la lámina, junto a la porción correspondiente de la faceta. Puede utilizarse
nerativa, cuyos síntomas no mejoren con otros tratamientos conservadores o interven- como opción quirúrgica en la radiculopatía cervical sintomática, con desplazamiento
cionistas, en comparación con la evolución natural de la enfermedad. Sin embargo, la lateral del disco o espondilosis que curse con estrecho receso lateral, aunque los estu-
descompresión quirúrgica aislada tiene una escasa evidencia, ofreciendo mejores re- dios existentes son series de casos clínicos, por lo que la evidencia es escasa.
sultados su asociación a técnicas de fusión vertebral con instrumentación. En nuestros
días no existe información que permita establecer si la instrumentación póstero-lateral
es o no mejor que la fusión de 3600.
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paciente musculoesquelético
5.4.4 Técnicas quirúrgicas en el dolor de hombro - En casos de artrosis de rodilla unicompartimental, las osteotomías de
realineación podrían ser una opción.
Ante todo cuadro doloroso de hombro, se debe determinar si se trata de una lesión
crónica/degenerativa o aguda. Se recomienda la artroplastia total de rodilla en pacientes artrósicos con:
- Dolor de rodilla de gran intensidad que limita las actividades diarias, incluyendo
Las lesiones del manguito rotador llegando a la rotura completa del mismo, son fre-
caminar, subir escaleras, levantarse de una silla y necesitando del uso de
cuentes en personas con inflamación y degeneración, siendo en ocasiones asintomá-
bastones o andadores.
ticas y en otras son causa de dolor crónico moderado. Las diferentes modalidades de
tratamiento conservador en estos casos ofrecen similares resultados, sin riesgos qui- - Dolor moderado o intenso en reposo, durante el día y la noche.
rúrgicos añadidos. El síndrome de compromiso subacromial o “impingement”, la tendi- - Inflamación o hinchazón de la rodilla que no ceda a los tratamientos habituales.
nosis y la bursitis subacromial, obedecen a una misma causa degenerativa, en la que - Deformidad articular.
participa la fricción y abrasión del manguito rotador, contra el arco acromial (formado - Fracaso de otros tratamientos como AINEs, infiltraciones de corticoides,
por la porción anterior del acromión, el ligamento coracoacromial y la articulación acro- lubricantes articulares, fisioterapia u otras cirugías.
mioclavicular), causando una inflamación crónica y posterior rotura. En estos casos, la
descompresión o acromioplastia aislada debe ser realizada tras el fracaso de al menos Los pacientes deben ser evaluados de forma individual, no siendo la edad un factor
6 semanas de tratamiento conservador adecuado. En todos los casos se recomienda limitante de este procedimiento.
finalizar con terapia física/ocupacional.
La artroplastia total de rodilla es un procedimiento coste-efectivo en adultos con artro-
El primer tratamiento que debemos recomendar en pacientes con dolor sis de rodilla avanzada.
crónico de hombro es conservador.
530 531
paciente musculoesquelético
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M A N U A L D E C O N S U LTA
AULA DE DOLOR
6. OPIOIDES
musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
Los opioides han sido y son unas herramientas de primer orden para el control del opioide y su acción analgésica es el parámetro de referencia comparativo con otros
dolor. En este sentido, es preciso resaltar la importancia de la valoración individual opioides. Por su parte, los alcaloides semisintéticos se obtienen mediante modificacio-
de las dosis, lo que combinado con las medidas para reducir los efectos adversos, nes químicas sencillas de opioides naturales como la morfina, codeína u oripavina. La
constituyen las claves para optimizar el manejo del dolor con estos medicamentos en codeína, a su vez, es la sustancia inicial para la obtención de otros alcaloides semisin-
el paciente afecto de un cuadro doloroso. Además, hay que tener presente que con téticos, como la dihidrocodeína y la hidrocodona. La oripavina, que no se utiliza como
los avances en la investigación, la compleja interacción entre sustancias activas sobre analgésico con fines terapéuticos, es útil para la fabricación de otros opioides, como la
los receptores opioides va siendo mejor conocida. Tan solo un mejor conocimiento de oxidocona, la etorfina y la buprenorfina. También es la sustancia inicial para la síntesis
estas disciplinas hará que nuestros pacientes puedan tener un mejor y más correcto de los antagonistas naloxona, naltrexona, nalorfina y nalbufina.
abordaje del dolor.
Hemos elaborado una clasificación conjunta que viene recogida en la Tabla 1, donde
se muestran los principales opioides de acuerdo con su origen y su estructura química
y su empleo en España como analgésicos, antitusígenos o para el tratamiento de de-
6.1 Clasificación de los opioides pendencias y sobredosis de opioides.
Opiáceo: toda sustancia derivada del opio, independientemente de que tenga activi-
dad analgésica (morfina) o carezca de ella (papaverina).
6.1.2 Clasificación por su estructura química
Opioide: cualquier sustancia con afinidad (capacidad de fijarse) por los receptores
opioides, independientemente de que los estimule (agonistas; agonistas parciales) o La clasificación estructural de los opioides, que viene recogida en la Tabla 2, pone de
los bloquee (antagonistas). Existen opioides endógenos (péptidos opioides) y exóge- manifiesto como, a partir de estructuras similares, se pueden conseguir agentes que
nos (derivados naturales y semisintéticos del opio, así como opioides sintéticos). sean capaces de fijarse al receptor y de producir fenómenos contrapuestos, actuando
como agonistas o antagonistas. Asimismo, esta clasificación nos permite observar
Analgésicos opioides: es la denominación más correcta para referirse a estos fárma- cómo cambios importantes en la estructura pentacíclica de la morfina (existen deriva-
cos, cuando los empleamos para el control del dolor. dos desde bi hasta hexacíclicos) mantienen su capacidad de fijarse sobre el receptor
y modificar, cuantitativa y cualitativamente, los efectos opioides. Asimismo, esta clasifi-
Endorfinas: término que se ha generalizado para denominar a todos los péptidos cación estructural nos ayuda a conocer el farmacóforo (elementos estructurales comu-
opioides endógenos. nes con rasgos estéricos y electrónicos necesarios para la interacción con el receptor
Analgésicos morfínicos: denominación empleada para todos los analgésicos opioi- responsable del efecto principal de un grupo de moléculas) de los opioides.
des, por ser la morfina el prototipo de alcaloide aislado del opio.
Por tanto, nos referiremos a este tipo de fármacos, en el contexto que nos ocupa
6.1.3 Clasificación por su potencia analgésica
como analgésicos opioides. Existen diversos criterios para clasificar a los opioides. Así,
pueden clasificarse por su origen y por su estructura química. Desde que se instauró la clásica escalera analgésica de la OMS, los opioides se han
clasificado por su potencia analgésica. Así, se habla de fármacos analgésicos mayores
o potentes, entre los que tenemos a la morfina como prototipo y opioides débiles o
6.1.1 Clasificación por su origen menores como la codeína o el tramadol. Este agente, además de su actividad opioide
débil, ejerce sus efectos analgésicos por mecanismos no opioides, como la inhibición
La clasificación más clásica es la basada en el origen de los opioides. De acuerdo a de la recaptación de noradrenalina y serotonina, similares a los de los antidepresivos
ello, los opioides pueden ser alcaloides naturales del opio, derivados semisintéticos, tricíclicos. En la Tabla 2 se recogen los opioides potentes comercializados en España
o sintéticos. La morfina y la codeína son los principales alcaloides naturales extraídos marcados con (P) y los débiles marcados con (d).
directamente del opio con propiedades analgésicas. La morfina es el prototipo de
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paciente musculoesquelético
Tabla 1: Clasificación de los agentes opioides, según su Tabla 2: Clasificación opioides según estructura química
origen. Estructura química y principales indicaciones
Estructura pentacíclica:
Alcaloides naturales del opio Derivados semisintéticos Opioides sintéticos Derivados del opio:
de los alcaloides del opio Morfina (P), codeína (d), tebaína
Derivados semisintéticos:
Derivados Fenantrénicos: Derivados de la Morfina: Fenilpiperidinas: agonistas
Codeína*[5] Etilmorfina Petidina (Meperidina)* [2] Etilmorfina, heroína (diacetilmorfina), dihidrocodeína,
Morfina*[5] Heroína Fentanilo*[2] agonista/antagonista mixto
Tebaína Oximorfona Alfentanilo Nalorfina
Oripavina Hidromorfona*[5] Sufentanilo Derivados sintéticos morfinónicos:
agonistas
Derivados Isoquinolínicos: Derivados de la Oripavina: Difenilpropanolaminas: Oximorfona, oxicodona (P),
Papaverina Buprenorfina*[6] Metadona*[2] agonista/antagonista mixto
Noscapina*** Oxicodona*[5] Dextropropoxifeno*[2] Nalbufina
Etorfina antagonistas puros
Naloxona, naltrexona.
Derivados de la Codeína: Morfinanos:
Estructura hexacíclica (oripavinas):
Dihidrocodeína*** [5] Butorfanol agonistas
Hidrocodona Dextrometorfano***[4] Etorfina, ciprenorfina,
Tramadol*[2] Nalbufina antagonista
Naloxona**[5] Diprenorfina
Naltrexona**[5] agonista parcial
Buprenorfina (P)
Benzomorfanos:
Estructura tetracíclica (morfinanos).
Pentazocina*[3] agonista
*Comercializados como analgésicos. ** Comercializados como antagonistas opioides y en dependencias. Levorfán, dextrometorfano (D)
*** Comercializados como antitusígenos o analgésicos asociados. antagonista
[x]Estructura química: [2] bicíclica; [3] tricíclica; [4] tetracíclica; [5] pentacíclica; [6] hexacíclica Levalorfán
agonista/antagonista mixto
Butorfanol
Estructura tricíclica (benzomorfanos).
agonistas/antagonistas mixtos
Pentazocina (P), ketociclazocina, ciclazocina
Estructura bicíclica.
4-Fenilpiperidinas. Agonistas
Petidina (meperidina) (P), fenopiridina, tilidina, profadol, loperamida, difenoxilato
1,2- y 1,3-diaminas. Agonistas
Fentanilo (P), sufentanilo, alfentanilo, remifentanilo.
Derivados de 3,3-difenilpropilamina. Agonistas
Metadona (P), L-acetilmetadol, dextropropoxifeno(d)
Aminotetralinas.
Dezocina.
ciclohexano
Tramadol (d)
hexahidroazepina
Meptazinol
(P) opioides potentes (d) opioides débiles
(comercializados en España)
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paciente musculoesquelético
6.1.4 Clasificación según la relación del opioide con sus receptores Tabla 3: Clasificación de los agentes opioides,
Esta clasificación, basada en la relación fármaco-receptor, es la que a nuestro entender según su relación receptorial
tiene mayor relevancia farmacológica y clínica. En ella se contempla la afinidad, como
Grupo Denominación:
capacidad de fijarse sobre el receptor, y la actividad intrínseca, como capacidad de Farmacológica Receptor μ Receptor δ Receptor κ
estimular en mayor o menor medida al receptor, así como el espectro del opioide sobre IUPHAR OP3, OP1, OP2,
los tres principales tipos de receptores (μ, δ, κ) (Tabla 3). De esta forma, los opioides Biología molecular MOR DOR KOR
pueden ser: Representantes
- Agonistas puros o totales: presentan afinidad y máxima actividad intrínseca Agonistas puros Bremazocina +++ ++ +++
Codeína + + +
sobre los receptores opioides μ (morfina, oxicodona, fentanilo, etc.). Además, Dextropropoxifeno +++ +? +?
pueden tener acciones sobre otros receptores opioides, por ejemplo δ ο κ, Etorfina +++ +++ +++
pero la característica definitoria es su acción máxima sobre el receptor μ. Fentanilo +++ +/0 0
- Agonistas parciales: poseen afinidad por los receptores μ, pero exhiben Hidromorfona +++ + 0
Levofarnol +++ 0 0
una actividad intrínseca inferior a la de los agonistas puros. Administrados Meperidina ++ + +
solos se comportan como agonistas, pero en presencia de un agonista Metadona +++ + +?
puro pueden comportarse como antagonistas. Sobre los otros receptores Morfina +++ + ++
opioides su comportamiento es variable y en el caso de la buprenorfina, único Oxicodona ++ + ++
representante de este grupo comercializado en España, puede comportarse Sufentanilo +++ + +
Tramadol + +? ++
como agonista débil (δ) o como antagonista (κ).
Agonistas parciales Buprenorfina ### + -
- Agonistas-antagonistas mixtos: pueden fijarse sobre varios tipos de receptores
opioides, pero sobre el receptor μ lo hacen como antagonistas o agonistas Agonistas antagonistas Pentazocina* - ? ##
parciales, nunca como agonistas puros, mientras que sobre el receptor κ se mixtos Nalorfina -- 0 ##
comportan como agonistas o agonistas parciales (pentazocina, es el único Butorfanol - ? ##
Nalbufina -- ? ##
comercializado en España).
Antagonistas Naloxona --- - --
- Antagonistas puros: presentan afinidad por los receptores opioides, en especial Naltrexona --- - ---
por el receptor μ, pero carecen de actividad intrínseca (naloxona y naltrexona).
Agonista: +++ (potente); ++ (moderado); + (débil)
Antagonista: --- (intenso); -- (moderado); - (débil)
Agonista parcial ### (gran afinidad); ## (afinidad moderada); # (baja afinidad);
Actividad intrínseca: 0 (ausencia de); 0/+, (mínima);
Efectos inciertos ?
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paciente musculoesquelético
6.2 Acciones farmacológicas de los opioides 6.2.1 Modificaciones del estado de ánimo
La actividad farmacológica que exhiben los opioides es tan amplia que los efectos re- Los opioides producen habitualmente estados de euforia, así como de tranquilidad
sultantes se pueden observar sobre una gran parte de sistemas del organismo. Estos y somnolencia. La base neurobiológica de estas acciones podría encontrarse en la
efectos son casi siempre el resultado de la acción de los opioides sobre una gran va- acción inhibidora que ejercen los opioides sobre la descarga neuronal del locus coeru-
riedad de receptores (Tabla 4), situados sobre poblaciones de neuronas específicas, y leus, estructura relacionada con la génesis de sensaciones de alarma, miedo y ansie-
pueden ser de carácter excitatorio o depresor, aunque la respuesta predominante en el dad. Asimismo, se ha comprobado que se produce una activación de las neuronas
ser humano es la inhibidora. En cualquier caso, el SNC es la diana más importante de dopaminérgicas. Este aumento de la actividad dopaminérgica está relacionado con los
los opioides y su influencia afecta no sólo a acciones farmacológicas de asentamiento efectos euforizantes de los opioides.
central sino también periférico, por lo que nos centraremos en este punto.
Por el contrario, en ocasiones los opioides pueden provocar disforia, en especial cuan-
do no existe dolor, siendo más frecuente en mujeres y ancianos que toman opioides
Tabla 4: Principales efectos del estímulo de los receptores por primera vez relacionada con la activación de receptores. Algunos opioides, como
opioides los agonistas-antagonistas (pentazocina, butorfanol, etc.), administrados a dosis tera-
péuticas, no producen euforia, pero sí una marcada sedación, que incluso es superior
Receptor μ (OP3) Receptor δ (OP1) Receptor κ (OP2) a su capacidad analgésica.
Analgesia supraespinal Analgesia supraespinal Analgesia supraespinal
Analgesia espinal Analgesia espinal Analgesia espinal
6.2.2 Depresión del reflejo de la tos
Depresión respiratoria Depresión respiratoria
Los opioides deprimen el reflejo de la tos mediante un efecto directo sobre el centro
Euforia Disforia y efectos tusígeno del bulbo raquídeo.
psicotomiméticos
Dependencia Dependencia
Tolerancia Tolerancia Tolerancia 6.2.3 Acción analgésica
Náuseas y vómitos Náuseas y vómitos Esta es la acción farmacológica más importante de los opioides. Los opioides van a
actuar sobre ambos componentes. Los opioides, administrados a dosis moderadas
↓ Motilidad gastrointestinal Inhibición apetito a un sujeto con dolor, alivian o disminuyen las molestias o suprimen por completo el
dolor sin afectar otras modalidades de sensibilidad sensoriales (tacto, vibración, vista,
Sedación Sedación oído, etc.) ni su estado de consciencia. La acción analgésica de los agonistas puros
es dosis dependiente y de tipo continuo; por ello en la práctica clínica es importante,
Rigidez muscular
en lo posible, mantener niveles con pocas fluctuaciones, evitando desde el punto de
Miosis Miosis vista farmacocinético pautas posológicas que provoquen picos (Cmax) y valles (Cmin)
excesivos que se acompañarían, respectivamente, de efectos indeseables y falta de
Bradicardia Hipotensión Hipotensión protección analgésica.
Disminución diuresis y retención Aumento diuresis por Los opioides son más eficaces en dolores sordos y continuos, los dolores por desafe-
urinaria inhibición ADH
rentación (postherpético, lesiones nerviosas, miembro fantasma), así como los espas-
Liberación ACTH Liberación ACTH mos musculares, son considerados clásicamente como más resistentes a la acción
de los opioides, si bien esta resistencia está sometida a discusión, a la luz de estudios
clínicos recientes realizados con estos agentes.
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paciente musculoesquelético
La acción analgésica de los opioides también depende del tipo de agente utilizado.
Figura 1. Vías y centros de control del dolor y lugares de actuación
Así, los agonistas μ, como la morfina, son capaces de aliviar cualquier tipo de dolor
e incluso suprimir las respuestas vegetativas a la estimulación nociceptiva. El efecto
analgésica de los opioides
analgésico no tiene “techo”, es decir que si incrementamos la dosis del analgésico
podemos llegar a conseguir un alivio completo del dolor. Además, el dolor es el mejor
antídoto de la depresión respiratoria, lo que explica que se puedan dar dosis muy
elevadas de morfina, por ejemplo en grandes quemados, sin que aparezca depre-
sión respiratoria, mientras el dolor esté presente. Sin embargo, los agentes mixtos
agonistas-antagonistas, como la pentazocina, aunque también proporcionan un buen
grado de analgesia, que es dosis dependiente en dolores de intensidad intermedia,
tienen lo que se denomina un “efecto techo” que no les permite aliviar dolores de ma-
yor intensidad. Asimismo, los agonistas parciales, como la buprenorfina, por su lenta e
incompleta disociación receptorial, tienen lo que se denomina un efecto “en meseta”,
“campana” o de “U invertida” consistente en que el incremento de la dosis, por encima
de un determinado nivel, no se acompaña de un mayor efecto analgésico e incluso
este puede disminuir. En el caso del tramadol, su actividad analgésica no es solamente
opioide, ya que este fármaco se comportaría con un doble mecanismo, opioide débil,
e inhibidor de recaptación de serotonina y, en menor medida noradrenalina como los
antidepresivos.
6.2.3.1.1 Control nociceptivo en el sistema aferente posterior de la médula. Adicionalmente, los opioides con afinidad sobre receptores κ
y μ favorecen indirectamente la acción de la metencefalina endógena a nivel espinal.
En relación con la acción de opioides a nivel de aferencias, hemos de señalar que los Además, estimulando receptores μ puede inhibir neuronas que contienen colecistoki-
opioides actúan a nivel de los nociceptores (Figura 1). En efecto, se han encontrado nina (CCK), reduciendo así el antagonismo que la CCK, tanto en condiciones fisioló-
receptores opioides μ, δ y κ en terminales aferentes primarias, especialmente en pro- gicas como en el dolor neuropático, ejerce sobre la analgesia inducida por receptores
cesos inflamatorios en los que los macrófagos liberan opioides endógenos. Además, opioides.
la administración local de opioides produce analgesia, demostrada en clínica tras ad-
ministración intraarticular, y lo que resulta más interesante es que agonistas μ y κ están
también dotados de un importante efecto antiinflamatorio local.
6.2.3.1.2 Control nociceptivo en el sistema eferente
Además, los opioides interactúan con receptores de las aferentes primarias que pene-
tran en el asta posterior de la médula y frenan la entrada del impulso nociceptivo. Los Los mecanismos supraespinales de control del dolor nacen en la substancia gris pe-
receptores μ están localizados en fibras de diámetro medio y grande, los δ en fibras de riacueductal del cerebro medio (SGPA) y en la médula rostral ventromedial (RVMB). En
diámetro grande y los κ en fibras de diámetro pequeño y medio, lo que podría explicar estas estructuras nacen vías ascendentes y descendentes encargadas de controlar
las diferencias observadas en la regulación del dolor cuando se emplean agonistas se- diversos componentes del dolor. La SGPA y la RVMB son eslabones de una cadena
lectivos de estos receptores. La estimulación de estos receptores presinápticos frena nociceptiva moduladora que contienen en si toda la maquinaria necesaria (neuronas,
la liberación de SP (sustancia P), neurokinina A, aspartato y glutamato, responsables terminaciones y receptores opioides, especialmente receptores μ y κ) para producir
de la transmisión del impulso nociceptivo hasta las neuronas secundarias del asta analgesia. Estas vías son sensibles a los opioides endógenos y exógenos.
544 545
paciente musculoesquelético
La zona del asta posterior que recibe los impulsos de las vías descendentes, nora- 6.3 EFECTOS ADVERSOS DE LOS OPIOIDES
drenérgicas y serotoninérgicas, contiene neuronas que liberan encefalinas y éstas ac-
túan directamente sobre receptores opioides presinápticos de las aferentes primarias, La mayor parte de los efectos secundarios de los opioides son consecuencia directa
disminuyendo la liberación de neurotransmisores excitadores, SP y glutamato, y por de las acciones farmacológicas de los mismos. Los efectos adversos más frecuentes
ende la entrada del impulso nociceptivo. En líneas generales, se puede afirmar que la de la terapéutica opiácea son las náuseas y los vómitos, que pueden llegar a presen-
analgesia inducida por opioides se debe al conjunto de todas estas acciones, en dife- tarse hasta en un 50% de pacientes. La somnolencia y confusión pueden darse, en
rentes niveles del SNC; vías aferentes, centros de control del dolor, vías descendentes, especial en administración aguda, ya que son susceptibles de tolerancia. Otros secun-
y también a nivel de nociceptores periféricos. Es interesante destacar que los opioides darismos propios de estos analgésicos recuerdan a los síndromes anticolinérgicos, ya
se pueden considerar los analgésicos más completos, ya que van a actuar a todos los que se pueden apreciar miosis, retención urinaria y, sobre todo, estreñimiento.
niveles anatómicos comentados, gracias a que en todas estas localizaciones existen
péptidos y receptores opioides.
6.3.1 Efectos gastrointestinales
Los opioides ejercen una acción inhibidora sobre el funcionalismo del aparato digesti-
vo, que se caracteriza por una disminución de la motilidad gastrointestinal, con lo cual
el vaciamiento gástrico se demora, y de las contracciones propulsoras intestinales,
mientras que el tono antral y el tono de la válvula ileocecal y del esfínter anal están
aumentados. Estos efectos son secundarios a una acción vagal y a la estimulación de
los receptores opioides μ y δ del plexo mientérico.
Además, los opioides producen una reducción de las secreciones gástricas, por un
efecto indirecto debido al aumento de secreción de somatostatina, y a nivel intestinal
de las secreciones biliares y pancreáticas. La manifestación clínica más significativa de
estas acciones es el conocido estreñimiento por opioides, en el que también influye
un grado de indiferencia ante estímulos defecatorios. Este efecto astringente es me-
nos marcado en el caso de los agonistas-antagonistas mixtos, como la pentazocina.
A este efecto se produce muy poca tolerancia. El estreñimiento es el efecto adverso
más frecuente observado con el uso continuado de los opioides clásicos, por lo que
es conveniente tratarlo a título preventivo con dieta, hidratación, e incluso laxantes
preferiblemente osmóticos.
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paciente musculoesquelético
Es de destacar que este antagonismo de la naloxona a nivel intestinal, cuando se tolerancia. El riesgo es mayor en pacientes de edades avanzadas, sujetos debilitados,
administra por vía oral, no se produce a nivel sistémico, ya que la naloxona sufre el alcohólicos, pacientes tratados con otros depresores del SNC, enfermos hepáticos, y,
fenómeno denominado del primer paso hepático, por el cual se convierte en metabo- sobre todo, pacientes con patología respiratoria, especialmente aquellos que presen-
litos glucuronoconjugados inactivos en casi su totalidad, siendo su biodisponibilidad tan insuficiencia respiratoria crónica. Su incidencia es menor con las preparaciones de
plasmática de menos del 2%. Esta mínima cantidad de naloxona es insuficiente para liberación sostenida.
antagonizar los efectos farmacológicos sistémicos de oxicodona, la cual presenta una
biodisponibilidad del 87% en el torrente sanguíneo, por lo que mantiene su potencia
analgésica.
6.3.4 Efectos neuroexcitatorios y miosis
Algunos efectos neuroexcitadores observados en clínica pueden ser el nistagmo, mo-
6.3.2 Inducción de náuseas y vómitos vimientos oculares inespecíficos a la flexión de una extremidad y convulsiones tónico-
clónica de una o varias extremidades, aunque esto sólo se manifiesta a dosis elevadas.
Todos los opioides que estimulan los receptores μ dan lugar, en mayor o menor me-
dida, a la aparición de náuseas y vómitos, probablemente por estimulación directa de La morfina, puede dar lugar a movimientos tónico-clónicos, tras su administración epi-
la zona gatillo del vómito, situada en el área postrema del bulbo raquídeo. Estas mani- dural. Asimismo, tienen la capacidad de provocar rigidez muscular. Esta rigidez parece
festaciones constituyen los efectos adversos más frecuentes dentro de la terapéutica deberse a una acción directa de los opioides sobre los núcleos grises basales y a la
con analgésicos opioides, sobre todo en pacientes ambulatorios (40% de náuseas, hiperactividad subsiguiente de la motoneuronas alfa.
15% de vómitos) y en posición erecta. Ello es debido a que estos efectos están re- Los opioides, con la excepción de la petidina, que puede provocar midriasis, se ca-
lacionados con un aumento de la sensibilidad vestibular provocado por los opioides. racterizan por producir miosis de manera específica, gracias a la excitación directa del
Los antipsicóticos clásicos y las benzamidas controlan estos efectos. A este efecto se núcleo mesencefálico de Eddinger-Westphal, que a través del parasimpático, inerva la
produce tolerancia. pupila. Al efecto miótico se produce muy poca tolerancia. En caso de intoxicación por
opioides, junto al coma y la depresión respiratoria, son patognomónicas la denomina-
das pupilas puntiformes o en “alfiler”.
6.3.3 Depresión respiratoria
Los opioides pueden provocar una depresión del centro respiratorio, situado en el
tronco cerebral, y en consecuencia de la actividad respiratoria por una disminución de 6.3.5 Efectos neuroendocrinos
la sensibilidad de los quimiorreceptores centrales frente a la hipercapnia y a la hipoxia.
Los opioides tienen representación de sus tres familias tanto en hipotálamo como
Al igual que la acción analgésica, la depresión respiratoria presenta un perfil receptorial
en hipófisis, por tanto pueden originar modificaciones de los niveles de determinadas
diferencial, de forma que los agonistas μ ejercen una acción depresora en mayor grado
hormonas gracias a su acción central directa sobre el eje hipotálamo-hipófisis. A dosis
y de manera más intensa que los agonistas δ.
analgésicas, las modificaciones hormonales carecen de relevancia clínica. A dosis más
La acción depresora respiratoria varía ostensiblemente con la dosis, vía de adminis- elevadas, como las empleadas de forma aguda en anestesia, los opioides aumentan
tración (es máxima por vía intravascular y mínima por vía oral, epidural o transdérmica) las concentraciones de prolactina, βMSH y de hormona de crecimiento (GH), sin em-
y velocidad de acceso del opioide al SNC, que dependerá de la liposolubilidad del bargo, esta última no se afecta por la administración de morfina o β−endorfina. Por
agente. La depresión respiratoria tiene una incidencia de casos graves que no supera el contrario, disminuye la liberación de hormona tirotropa (TSH), folículo estimulante
el 1%, siendo su aparición proporcional a la dosis, vía de administración, sobre todo la (FSH), luteinizante (LH) y β−endorfina. En caso de administración crónica, posible-
intravenosa, y a la potencia analgésica del fármaco opioide. Es un fenómeno al que se mente debido a la aparición de fenómenos de tolerancia, estas modificaciones no son
produce rápida tolerancia. Se presenta en individuos que reciben el opioide por prime- perceptibles, aunque se ha descrito amenorrea, en las mujeres en tratamiento crónico,
ra vez o en sujetos que, por llevar tiempo sin administrarse el opioide, han perdido la debido a la inhibición de la liberación de FSH y LH.
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paciente musculoesquelético
Sobre la hormona antidiurética (ADH) poseen un efecto dual. Por un lado estimula la 6.3.9 Efectos inmunológicos
secreción de esta hormona por activación de receptores μ y por otro lado la inhibe
por activación de los receptores κ. Aunque su origen no es central, se ha observado Los opioides pueden inhibir o aumentar la función inmunitaria, según el contexto en el
también, en el caso de la morfina, una hiperglucemia, secundaria a un aumento de la que se empleen, pero en pacientes con dolor sus efectos parecen ser más positivos
secreción de adrenalina suprarrenal. que negativos.
Los efectos cardiovasculares inducidos por los opioides son complejos, ya que inter- La sobredosificación y la intoxicación aguda por opioides se caracteriza por el desarro-
vienen factores nerviosos, vasculares, cardíacos así como los efectos consecuentes llo inicial de estupor, que puede evolucionar hacia el coma, la aparición de depresión
a la depresión respiratoria. En este sentido, si la ventilación pulmonar está asegurada, respiratoria, retención urinaria, flaccidez muscular y una serie de alteraciones metabó-
la función cardiovascular se afecta poco por la acción de los mórficos. La estabilidad licas secundarias. El tratamiento de estos cuadros pasa por la administración de anta-
hemodinámica es una característica muy importante de los opioides, aunque se ha gonistas opioides, como la naloxona IV, además de otros apoyos de tipo respiratorio y
descrito la aparición de vasodilatación, tanto arterial como venosa, que podría ser electrolítico. La naloxona se pauta a la dosis de 0,4 mg por vía intravascular, debido a
consecuencia directa de la acción depresora de los opioides sobre el centro vasomo- su corta vida media la administración debe repetirse varias veces a intervalos cortos en
tor bulbar, o bien el resultado de un mecanismo indirecto por liberación de histamina. dependencia del opioide responsable de la sobredosis.
Sin embargo, hemos de tener en cuenta que los opioides en asociación con otros de-
presores cardiovasculares pueden acentuar la bradicardia y causar hipotensión y que
sus efectos varían en función de la familia de fármacos utilizada. 6.3.11 Opiofobia
Este, es considerado por algunos autores el efecto adverso más importante de los
opioides. La opiofobia afecta al personal sanitario, pacientes, familiares y a la propia
6.3.7 Efectos genitourinarios sociedad. Se ha hecho en demasiadas ocasiones un paralelismo entre las situaciones
patéticas observadas con el uso “recreativo” de los opioides y el empleo clínico de
Los opioides pueden provocar fenómenos de urgencia y dificultades en la micción, estos agentes. El concepto de que dependencia física y tolerancia son sinónimos de
que pueden llegar a retención urinaria, debidos a un aumento del tono del músculo adicción, el miedo a ésta, los temores a la depresión respiratoria y al desvío de consu-
detrusor vesical y del esfínter. Este efecto está mediado por el estímulo de receptores mo, junto con una burocracia excesiva y no siempre necesaria para la receta de estos
μ y δ encefálicos y medulares y es susceptible de tolerancia. agentes, han hecho que en muchas ocasiones los pacientes se hayan visto privados
del grupo más importante de analgésicos de nuestro arsenal terapéutico. La falta de
formación del personal sanitario no ha sido ajena al fenómeno de la opiofobia. En este
contexto, es importante que el médico controle las presiones indiscriminadas por parte
6.3.8 Efectos dermatológicos
de pacientes que exigen un continuo incremento de las dosis del opioide, pero que no
Las dosis terapéuticas de morfina producen vasodilatación cutánea, con enrojecimien- castiguen a aquellos que pueden beneficiarse con un uso adecuado y controlado de
to de la piel de cara, cuello y parte alta del tórax. Estos cambios pueden deberse en los mismos.
parte a la descarga de histamina, y quizá sean la causa de la sudoración y prurito, así
como de la urticaria que suele observarse en el sitio de inyección, que ocurre en oca-
siones después de la administración de morfina. Este fenómeno no es mediado por
los receptores de opioides, ni bloqueado por la naloxona. Se observa con morfina y
petidina, pero no con oximorfona, metadona, fentanilo o sus derivados.
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paciente musculoesquelético
Tabla 5: Características farmacocinéticas de las principales 6.4 FENÓMENOS DE NEUROADAPTACIÓN A LOS ANALGÉSICOS
vías de administración de opioides OPIOIDES
Vía Ventajas Inconvenientes Esta neuroadaptación se puede traducir por fenómenos de tolerancia, caracterizados
Oral Comodidad, Afectación por vaciado gástrico, por pérdida de eficacia o por disminución de los efectos indeseables, o por dependen-
Posibilidad de autoadministración, Biodisponibilidad variable cia, manifestada por el síndrome de abstinencia cuando se suspende de forma brusca
Independencia del paciente (primer paso hepático), el opioide.
Absorción lenta,
No uso en problemas digestivos (Vómitos, obs-
trucción intestinal),
No uso en pérdida de consciencia
6.4.1 Tolerancia a los opioides
Sublingual Sin primer paso hepático Biodisponibilidad variable (dosis deglutida)
Absorción moderada pero directa El fenómeno de tolerancia es un estado de adaptación del organismo al medicamento
Rectal Independiente motilidad gastroin- Absorción lenta por el que, tras la administración repetitiva del opioide, se produce una disminución
testinal, Interrupción por defecación de la duración o de la intensidad de la respuesta farmacológica, lo que obliga a un
No necesita dispositivos, Biodisponibilidad variable (primer paso hepático incremento de las dosis. La tolerancia se desarrolla frecuentemente con los opioides,
No molestias digestivas parcial)
tanto para los efectos terapéuticos como adversos, aunque no afecta por igual a las
Nasal Sin primer paso hepático Vía en fase de estudio diferentes acciones de estos agentes. Así, se produce tolerancia de forma rápida, para
Independiente motilidad gastroin- Biodisponibilidad variable
testinal su efecto analgésico, euforia o disforia, embotamiento mental, sedación, nauseas, vó-
Absorción rápida y directa mito, efecto antidiurético, antitusígeno o para la depresión del centro respiratorio. Por
Transdérmica Sin primer paso hepático Absorción lenta y variable el contrario, no aparece tolerancia, o aparece muy lentamente, para la bradicardia,
Independiente motilidad gastroin- el estreñimiento, miosis, convulsiones, alteraciones de la libido en el varón, ni para la
testinal amenorrea en la mujer. La tolerancia a los opioides es cruzada para un mismo receptor,
Subcutánea Biodisponibilidad importante (90%) Dependencia flujo sanguíneo es decir que si se desarrolla tolerancia al receptor μ un opioide que actúe sobre recep-
Menor fluctuación niveles opioide Inicio de acción lento tor μ y δ pierde su eficacia sobre el primero, pero puede seguir ejerciendo su efecto a
Uso por personal no especializado No uso con problemas de coagulación través de este segundo receptor.
Inhalatoria Efectos rápidos Respuesta variable
Independiente motilidad gastroin- Vía en fase de estudio Desde el punto de vista clínico, hemos de señalar que la tolerancia al efecto analgésico
testinal Biodisponibilidad variable (cantidad expirada) de los opioides no aparece por igual en todos los pacientes. De hecho, muchos pa-
Absorción rápida y directa cientes con dolor crónico no canceroso (DCNC), mantienen alivio del dolor con dosis
I.M. Absorción y rápido inicio acción, Corta duración de acción estables del opioide durante tiempo prolongado. Incluso en pacientes cancerosos, la
Ajuste de dosis según dolor, Riesgo de sobredosificación tolerancia a los opioides es pocas veces un problema clínico. Por otra parte, hemos
Biodisponibilidad absoluta Necesidad de control
de considerar que siempre que se necesita un incremento de la dosis analgésica no
ACP estamos ante un fenómeno de tolerancia, ya que ese incremento puede ser secun-
dario a una dosificación insuficiente o con un intervalo demasiado largo o se deba a
Epidural Absorción moderada a rápida Biodisponibilidad del 2-4 % en LCR una progresión natural de la enfermedad, como suele suceder en el caso de pacientes
con procesos reumatológicos. En cualquier caso, de producirse una tolerancia a los
Intradural Dosis muy bajas Poco controlable (sin catéter) opioides, esto no suele ser un problema clínico con los agonistas puros ya que, en los
Biodisponibilidad absoluta en LCR tipos de dolor en los que estos agentes son eficaces, sólo deberemos incrementar la
Absorción inmediata
dosis hasta conseguir el alivio deseado del dolor. Además, mientras el dolor persiste
el incremento de dosis no suele acompañarse de un incremento de la depresión res-
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paciente musculoesquelético
piratoria. Sin embargo, no sucede lo mismo con los agonistas-antagonistas o con los obligaciones que le procura la droga. Además, esta conducta se produce también en
agonistas parciales que, como se ha comentado, presentan un techo analgésico que ausencia de un síndrome de abstinencia. El craving presenta múltiples componentes
no se supera cuando se aumenta la dosis. que difieren entre las distintas drogas y también entre los distintos individuos.
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paciente musculoesquelético
6.5 interacciones farmacológicas de los analgésicos opioides Cuando exista la posibilidad de una interacción farmacocinética y sea necesaria la
administración de opioides, las alternativas más seguras la constituyen la morfina, la
Cabe destacar la potenciación de los efectos depresores centrales ejercidos por los hidromorfona y la oximorfona, opioides que no emplean el CYP450 y se metabolizan
opioides cuando se administran concomitantemente con otros psicofármacos, como exclusivamente por una reacción de fase II, mediante glucuronoconjugación.
hipnóticos, ansiolíticos, neurolépticos, antidepresivos o anestésicos, práctica, por otro
lado, bastante habitual. Con respecto a los antipsicóticos, es bien conocido el hecho De todos los isoenzimas CYP, los responsables del metabolismo de la mayor parte
de que la clorpromazina incrementa los efectos sedantes y mióticos de la morfina, y de los opioides son el CYP2D6 y el CYP3A4. A pesar de que el isoenzima CYP2D6
potencia sus acciones analgésicas. Otras sustancias psicoactivas capaces de producir es cuantitativamente el menos importante de los enzimas del citocromo P-450 en el
una interacción sinérgica parecida a la anteriormente descrita son los anticonvulsivan- hígado (un 5% del total), es responsable del metabolismo de una gran cantidad de
tes. Pero, sin lugar a dudas, el ejemplo más típico de interacciones farmacodinámicas fármacos, entre los que se encuentran los opioides, además de la mayoría de los an-
de tipo aditivo lo constituye las interacciones de los opioides con el alcohol. tidepresivos y antipsicóticos, así como otros agentes no psicofarmacológicos, como
los antagonistas β-adrenérgicos, antiarrítmicos del tipo 1C y algunos agentes utilizados
Sin embargo, las interacciones farmacológicas suelen emplearse también como una en quimioterapia. Otro factor a considerar en la trascendencia clínica del CYP2D6 es
práctica terapéutica, ya que permite, en determinadas circunstancias, disminuir la do- el número de fármacos que ejercen una acción inhibidora sobre este isoenzima, entre
sis necesaria de opioide para alcanzar el grado de analgesia deseado. En este sen- los que se encuentran la quinidina, cimetidina, ritonavir, antipsicóticos y antidepresi-
tido, cabe destacar la asociación de opioides y antidepresivos tricíclicos, asociación vos. En este sentido, los ISRS, por inhibición del isoenzima CYP2D6, pueden reducir
relativamente frecuente en el tratamiento de pacientes con dolor crónico en los que considerablemente el efecto analgésico de la codeína, ya que su metabolito activo es
se suelen desencadenar cuadros depresivos. El uso adecuado de esta combinación la morfina. Por su parte, el isoenzima CYP3A4 es el responsable del metabolismo de
permite una mejoría de la sintomatología dolorosa y depresiva, con una dosis menor de la metadona. En este caso, hay que ser especialmente prudentes con la administra-
opioides. Otro ejemplo viene dado por la administración concomitante de opioides con ción concomitante de agentes inhibidores de este isoenzima, como la fluvoxamina,
benzodiazepinas o antipsicóticos dentro del campo de la anestesiología. nefazodona, ritonavir o ketoconazol. Por el contrario, la administración de inductores
de esta isoenzima, como los barbitúricos, ciertos anticonvulsivantes (fenitoína o carba-
Otro tipo de interacción farmacodinámica, potencialmente peligrosa, tiene lugar cuan- mazepina), la rifampicina o la zidovudina, ocasiona una disminución significativa de los
do los opioides se administran simultáneamente con inhibidores de la monoaminooxi- niveles séricos de metadona.
dasa (IMAOs), antidepresivos capaces de potenciar las acciones de los opioides, pu-
diendo dar lugar a un cuadro tóxico. Esta situación se ha observado especialmente
en el caso de la petidina. Anecdóticamente, también se han reportado algunos casos
de interacciones por potenciación de la neurotransmisión serotoninérgica entre ISRS
y opioides.
Los opioides también pueden presentan interacciones farmacológicas entre ellos mis-
mos. A título de ejemplo, cuando se adiciona o se sustituye un agonista opioide puro
por un opioide agonista-antagonista, se puede precipitar la aparición de un síndrome
de abstinencia. La buprenorfina, por su propiedad agonista parcial, puede provocar un
síndrome de abstinencia en pacientes dependientes a opioides agonistas puros. Del
mismo modo, la administración de antagonistas opioides, como la naloxona, o agonis-
tas-antagonistas, como la pentazocina, a individuos incluidos en programas de trata-
miento con metadona puede inducir un severo síndrome de abstinencia, que se puede
contemplar también como una interacción farmacodinámica de tipo antagónico.
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paciente musculoesquelético
Tabla 6: Interacciones farmacológicas más relevantes de los agentes Fentanilo Anticonvulsivantes Disminución efecto fentanilo Inducción enzimática
opioides Benzodiazepinas Depresión respiratoria e hipotensión Desconocido
Beta-bloqueantes Disminución respuesta hipertensiva y
Enflurano bradicardia inicial
Opioide Interacción con… Efecto Mecanismo IMAOs Potenciación toxicidad de fentanilo
Buprenorfina Benzodiazepinas Potenciación depresión SNC Efecto aditivo Nifedipino Aumento toxicidad Mecanismo no estable-
Bupivacaína Potenciación efecto anestésico y cido
prolongación analgesia Hipotensión intraquirúrgica severa
Halotano Aumento efecto y duración de acción Reducción FSR por Meperidina Aciclovir Potenciación depresión SNC Reducción excreción
de buprenorfina halotano /Petidina Anfetaminas Aumento efecto analgésico petidina
IMAOs Potenciación depresión SNC Efecto aditivo Anticoagulantes Potenciación efecto anticoagulante Reducción metabolismo
Mepivacaína Potenciación efectos de mepivacaína orales ACOs
Metadona Síndrome de abstinencia Efecto antagónico Anticonceptivos Aumento excreción meperidina no
Codeína Anestésicos inhal. Potenciación efecto anestésico Efecto aditivo orales metabolizada
Anticolinérgicos Potenciación depresión SNC Sinergismo ADTs Aumento depresión respiratoria por Efecto aditivo
Caolín Reducción efecto de la codeína meperidina
Desflurano Potenciación depresión SNC Efecto aditivo Antihipertensivos Potenciación efecto hipotensor
Dextropropoxi- Amilsulpride Potenciación depresión SNC Efecto sinérgico Barbitúricos Potenciación depresión SNC Aumento metabolitos
feno Anfetaminas Potenciación estimulación SNC y Beta-bloqueantes Potenciación toxicidad de meperidina petidina
convulsiones Butirofenonas Potenciación depresión SNC
Anticoagulantes Riesgo de hemorragias Desplazam. unión pro- Cimetidina Toxicidad severa en dializados y Reducción excreción
orales teínas depresión respiratoria petidina
ADTs Aumento toxicidad de ADTs Difenilhidantoína Disminución efecto de meperidina Aumento eliminación
Benzodiazepinas Potenciación depresión SNC Efecto aditivo petidina
Carbamazepina Aumento efectos de carbamazepina Inhibic. metabolismo Diuréticos Potenciación efecto hipotensor
Cimetidina Aumento efecto tóxico hepático Fenotiazinas Potenciación depresión SNC Mecanismo aditivo
dextropropoxifeno en dializados IMAOs Síndrome serotoninérgico/síndrome Mecanismo no estable-
Difenilhidantoína Potenciación efecto tóxico de Efecto aditivo sobredosis opioide cido
difenilhidantoína Isoniazida Aumento efecto tóxico isoniazida
Doxepina Riesgo toxicidad por aumento Ritodrina Riesgo arritmias e hipotensión Efecto aditivo
metabolito de doxepina Ritonavir Aumento efectos adversos meperi-
Fenobarbital Aumento efecto tóxico de fenobarbital dina
Flupentixol Potenciación depresión SNC Efecto aditivo sigue
Loratadina Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Nicotina Disminución metabolismo de
dextropropoxifeno
Orfenadrina Estimulación del SNC e hipoglucemia
Risperidona Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Ritonavir Aumento efectos adversos de Inhibición eliminación
dextropropoxifeno
Tetrabamato Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Tiagabina Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Trazodona Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
sigue
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paciente musculoesquelético
Metadona Anestésicos gene- Potenciación depresión SNC Efecto aditivo Morfina Amisulpride Potenciación depresión SNC Efecto sinérgico
rales Anticoagulantes Potenciación efecto anticoagulantes Reducción metabolismo
Anticoagulantes Potenciación efecto anticoagulante Reducción metabolismo orales ACOs
orales ACOs Anticonceptivos Aumento aclaramiento morfina Inducción enzimática
ADTs Potenciación depresión SNC Efecto aditivo orales
Barbitúricos Riesgo de síndrome de abstinencia Aumento excreción ADTs Potenciación depresión SNC y de Efecto sinérgico
metadona analgesia
Beta-bloqueantes Potenciación toxicidad metadona Atropina Potenciación efectos atropínicos
Buprenorfina Riesgo de síndrome de abstinencia Antagonismo farmaco- Benzodiazepinas Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
lógico Cimetidina Potenciación toxicidad morfina
Carbamazepina Riesgo de síndrome de abstinencia Aumento excreción Clebopride Potenciación depresión SNC
metadona Clonidina Potenciación depresión SNC
Cimetidina Riesgo de síndrome de abstinencia Reducción niveles me- Dexanfetamina Potenciación analgesia morfina
tadona Dimenhidrinato Potenciación depresión SNC
Difenilhidantoína Riesgo de síndrome de abstinencia Reducción niveles me- Diuréticos Inhibición efecto diurético en insufi-
tadona ciencia cardiaca
Fenotiazinas Potenciación depresión SNC Efecto aditivo Fenotiazinas Potenciación analgesia Efecto aditivo
Fluoxetina Potenciación efectos metadona Aumento niveles meta- Flupentixol Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
dona Glimepiride Reducción efecto hipoglucemiante Efecto antagónico
IMAOs Potenciación efectos metadona/Esti- Efecto aditivo Glisentide Reducción efecto hipoglucemiante Efecto antagónico
mulación SNC IMAOs Inhibición efecto analgésico y eufori-
Pentazocina Riesgo de síndrome de abstinencia Antagonismo farmaco- zante morfina
lógico Litio Potenciación depresión SNC
Rifanpicina Riesgo de síndrome de abstinencia Aumento excreción Loratadina Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
metadona Metoclopramida Riesgo depresión respiratoria
Zidovudina Disminución efecto metadona Inducción enzimática Neostigmina Potenciación depresión SNC
sigue Piridostigmina Riesgo depresión respiratoria Efecto aditivo
Procarbazina Potenciación depresión SNC
Prociclidina Potenciación depresión SNC
Risperidona Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Rivastigmina Riesgo depresión respiratoria Efecto aditivo
Sibutramina Potenciación depresión SNC
Tetrabamato Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Tiagabina Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Trazodona Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
Valeriana Potenciación efecto sedante Efecto aditivo
sigue
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paciente musculoesquelético
Oxicodona Alfentanilo Potenciación depresión SNC Efecto aditivo 6.6 Perfil diferencial de los diferentes analgésicos opioides
Analgesicos opioi- Potenciación depresión SNC Efecto aditivo
des 6.6.1 Analgésicos opioides mayores
Antieméticos cen- Riesgo depresión respiratoria, hipo- Efecto aditivo
trales tensión, sedación 6.6.1.1 Morfina
Benzodiazepinas Riesgo depresión respiratoria, hipo- Efecto aditivo
tensión, sedación De todos los agentes opioides existentes en la actualidad, la morfina es el más repre-
Carbamazepina Riesgo depresión respiratoria, hipo- Efecto aditivo sentativo y su farmacocinética la más conocida, por lo que nos servirá de prototipo a la
tensión, sedación
Fenotiazinas Riesgo potenciación hipotensión Efecto aditivo hora de comentar las características farmacocinéticas de estos analgésicos. En primer
Fluoxetina Disminución efecto analgésico Inhibición enzimática lugar, no obstante, hay que hacer constar que una característica propia de este grupo
Naltrexona Reversión de efectos de la sobredosis Antagonismo de fármacos es la gran variabilidad interindividual existente desde el punto de vista
de oxicodona farmacocinético, lo que hay que tener presente a la hora del ejercicio clínico.
Succinilcolina Potenciación bloqueo neuromuscular Efecto sinérgico
Sufentanilo Potenciación depresión SNC Efecto aditivo El prototipo de analgésico opioide, la morfina, se absorbe relativamente bien cuando
Pentazocina Metadona Riesgo síndrome abstinencia Antagonismo farmaco- es administrada por vía oral. Sin embargo, debido al intenso fenómeno de primer paso
lógico hepático que sufre, junto a mecanismos de metabolización existentes en la luz y en las
Nicotina Disminución niveles plasmáticos Inducción enzimática
pentazocina paredes gastrointestinales, su biodisponibilidad apenas supera el 25-30%. Además,
existe una gran variabilidad interindividual. En estas circunstancias, su Tmax oscila
Tramadol IMAOs Riesgo toxicidad severa Mecanismo no estable-
cido entre 20 y 120 min. Aunque la concentración plasmática de este fármaco, administra-
Levomepromazina Aumento riesgo convulsiones do por vía oral, es aproximadamente 1/5 a 1/2 de la alcanzada por vía intramuscular,
IMAOs (inhibidores de la mono-amino-oxidasa), ADTs (antidepresivos tricíclicos), ACOs (anticoagulantes orales), existe una relación lineal entre la dosis administrada y el nivel plasmático alcanzado, de
FSR (flujo sanguíneo renal) forma que los ajustes analgésicos son relativamente precisos.
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paciente musculoesquelético
La vida media de eliminación (T1/2) de la morfina oscila entre 2 y 3 horas, aunque La oxicodona es metabolizada en hígado por el isoenzima CYP2D6 y del CYP3A4. El
existen diferencias interindividuales. Este hecho obliga a administrarla cada 4 horas, primero da lugar a un metabolito activo, la oximorfona, que es un agonista de recepto-
con objeto de evitar la reaparición del dolor. Los metabolitos de la morfina, sobre todo res opioides μ. Aunque la oximorfona es 14 veces más potente que la oxicodona, sólo
la M3G, se eliminan en mayor medida por filtración glomerular. Un pequeño porcentaje alcanza una proporción del 2%, por lo que juega un papel escaso en la analgesia indu-
(5-10%) se elimina por heces, tras haber sufrido un proceso de circulación entero- cida por oxicodona. La oxicodona puede actuar “per se” sobre receptores opioides κ.
hepática. También se eliminan pequeñas cantidades por la leche materna, lo que habrá Desde el punto de vista de la tolerabilidad, la oxicodona tiene un perfil similar al de la
de tenerse en consideración durante el periodo de lactancia. Aproximadamente, el morfina, aunque produce menos alucinaciones y prurito que la morfina.
90% de la excreción total de morfina tiene lugar durante las primeras 24 horas.
Oxicodona es uno de los opioides mejor estudiados desde el punto de vista clínico ya
Existen preparados de liberación prolongada de morfina que se administran cada 12 que ha sido estudiada en todos los tipos de dolor: oncológico, no oncológico, neu-
horas. ropático, postoperatorio e incluso visceral. Es también importante tener presente que
no se requiere ajuste de dosis en ancianos, ni tiene restricciones especiales de uso en
enfermos no tratados previamente con opioides. Oxicodona no se ve alterada por la
ingesta de alimentos y no tiene efecto inmunosupresor.
6.6.1.2 Oxicodona
Existen preparados de oxicodona de liberación inmediata por vía oral, así como so-
La oxicodona es un agonista puro no selectivo de los receptores opioides, derivado
luciones inyectables, de utilidad para su empleo como medicación de rescate y esta
semisintético de la tebaína, empleado desde la segunda década del siglo XX. Existe
última además para la analgesia controlada por el paciente.
una formulación de liberación inmediata, principalmente para el tratamiento de las cri-
sis de dolor irruptivo. Esta formulación de liberación rápida tiene un inicio de acción en
30 minutos y una duración de 4 horas, con uso principalmente para titulación y trata-
miento del dolor irruptivo, si bien se ha demostrado menor necesidad de medicación 6.6.1.3 Oxicodona+naloxona
de rescate con oxicodona que con morfina.
Uno de los avances más importantes en el campo de los opioides viene de la mano
La oxicodona se ha introducido en nuestro país en una formulación oral de liberación de una asociación, oxicodona con naloxona, que permite disminuir el problema clínico
sostenida (sistema Acrocontin®, desarrollado por Mundipharma). Estos comprimidos más importante de los opioides: el estreñimiento y otras molestias digestivas. La jus-
poseen una liberación bifásica, inicialmente rápida (T1/2 de absorción de 37 minutos) tificación del uso de naloxona se basa en que este antagonista opioide, administrado
en la que se absorbe el 38% de la dosis, ocasionando una rápida aparición de la anal- por vía oral, se metaboliza en el hígado, mediante un fenómeno de primer paso, por lo
gesia y posteriormente más controlada, que determina las 12 horas de duración de su que su biodisponibilidad tras administración oral es inferior al 3%, cantidad que es aún
acción. La T1/2 de eliminación de oxicodona es 4,5 horas, lo que conduce a alcanzar inferior en el SNC por lo que no antagoniza los efectos centrales de la oxicodona. Sin
el estado estacionario aproximadamente en un día. Estos comprimidos de liberación embargo, tiene un efecto local a nivel intestinal que hace que los efectos de oxicodona
prolongada poseen una biodisponibilidad oral comparable a la oxicodona oral conven- sobre los plexos mientéricos, resposables de la motilidad y secreciones, sean antago-
cional (87%). nizados. Esta preparación que, como señala Power (2011) en una excelente revisión
sobre avances en el tratamiento del dolor, fue diseñada para reducir el reto del ‘estreñi-
La oxicodona posee una potencia analgésica dos veces superior a la de la morfina. miento inducido por opioides en el manejo del dolor crónico’, se denomina Targin®).
Los comprimidos de liberación prolongada deben tomarse a intervalos de 12 horas, La asociación contiene oxicodona y naloxona en una proporción de 2:1, tiene distintas
aunque la pauta posológica dependerá de la gravedad del dolor, del historial previo del presentaciones que se administran cada 12 horas (oxicodona: naloxona 5:2,5mg; 10:5
paciente, de las necesidades analgésicas, del peso corporal, etc. A los pacientes a los mg; 20:10mg; 40:20mg). El objetivo es evitar los efectos secundarios gastrointestina-
que se les administra morfina oral antes de la terapia con oxicodona deben recibir su les de la oxicodona y diversos estudios han demostrado que se mantiene la eficacia
dosis diaria teniendo en cuenta que 10 mg de oxicodona oral equivalen a 20 mg de analgésica y se minimiza la disfunción intestinal inducida por los opioides. Incluso en
morfina oral. pacientes que no han tomado nunca un opioide, la administración de oxicodona y na-
loxona preserva la función intestinal sin afectar a la eficacia analgésica.
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paciente musculoesquelético
Si nos centramos en su eficacia en dolor musculoesquelético, Vondrackova et al (120), de una historia previa de tratamiento con opioides, en cuyo caso la dosis inicial se basa
en un ensayo aleatorizado y controlado con placebo, estudió la eficacia analgésica en el requerimiento de opioides las 24 horas previas, tras una conversión equianalgé-
y seguridad de oxicodona en combinación con naloxona en pacientes dolor crónico sica de morfina. En pacientes no tratados previamente con opioides, el tratamiento se
moderado o grave, llegándo a la conclusión de que la asociación mostró una eficacia inicia con 12,5 ó 25 μg/h. Los parches deberán ser cambiados cada 72 horas, ajus-
analgésica comparable con oxicodona de liberación prolongada, pero también mejoró tando gradualmente la dosis cada 3 días, con incrementos de 25 μg/h (dependiendo
la disfunción intestinal y por lo tanto la aceptabilidad del tratamiento a largo plazo. del aporte suplementario de otros opioides). Del mismo modo la suspensión del trata-
miento con parches de fentanilo debe ser también gradual.
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paciente musculoesquelético
Por estos motivos, desde el punto de vista del tratamiento del dolor crónico, la presen- Desde la perspectiva metabólica, la buprenorfina se elimina mayoritariamente en su
tación transdérmica de buprenorfina goza de gran predicamento, en parte motivado forma inalterada (66%), aunque también sufre metabolismo hepático a través del ci-
por estar exenta del requisito de la receta de “tóxicos y estupefacientes”, junto con tocromo CYP3A4 y/o por glucuronoconjugación. Si se administra conjuntamente con
la comodidad de administración por esta vía, gracias a su elevada lipofilia, bajo peso inhibidores del CYP3A4 (como por ejemplo, algunos inhibidores selectivos de la recap-
molecular y elevada potencia analgésica, que han permitido su formulación en parches tación de serotonina, eritromicina, metronidazol, norfloxacino, fluconazol, ketoconazol,
transdérmicos de tres tamaños diferentes con 20, 30 y 40 mg, que liberan durante 72 ritonavir, indinavir, saquinavir, gestodeno, amiodarona, omeprazol o zumo de pomelo),
horas dosis de 35, 52.5 y 70 μg/h de buprenorfina, respectivamente. Mediante esta la eficacia de buprenorfina transdérmica y sus posibles efectos adversos pueden ver-
vía de liberación, los niveles terapéuticos pueden alcanzarse entre las 12 y 24 horas, se intensificados. Por el contrario, si se administra con inductores del CYP3A4 (por
aunque con el parche de 35 μg/h los niveles eficaces mínimos no se alcanzan hasta ejemplo, carbamacepina, fenobarbital, fenitoína, primidona, dexametasona, rifabutina
pasadas treinta horas, y se mantienen estables al sustituir el parche cada 3 días. o rifampicina), la eficacia de la buprenorfina transdérmica se ve disminuida.
En relación con el efecto analgésico, la buprenorfina, como opioide potente, se encuen- Los efectos adversos habituales son los de tipo digestivo y la aparición de reacciones
tra dentro del tercer escalón analgésico de la OMS (dolores intensos que no responden locales del tipo de prurito, eritema y exantemas en la zona de colocación del parche
al tratamiento con opioides menores), al igual que la morfina, oxicodona, fentanilo o transdérmico.
meperidina. Hay que tener presente que los agonistas parciales, como la buprenorfina,
por su lenta e incompleta disociación receptorial, presentan lo que previamente hemos
descrito como efecto “techo”, “campana” o de “U invertida”. Sin embargo, algunos
6.6.1.6 Hidromorfona
autores señalan que el efecto techo de buprenorfina se manifiesta para la depresión
del centro respiratorio, pero no para la analgesia en humanos, aunque según otros este La hidromorfona es un derivado semisintético de la morfina, con propiedades agonista
efecto techo se ha observado asimismo en clínica para la analgesia. de los receptores μ, mostrando una afinidad débil por los receptores δ. Desde el punto
de vista clínico, la hidromorfona oral es aproximadamente 5 veces más potente que la
Con respecto a la formulación transdérmica, se recomienda comenzar el tratamiento
morfina y tiene una duración del efecto más corto. Por este motivo, se ha preparado
con el parche de menor concentración (35 μg/h) en pacientes sin tratamiento opioide
una presentación galénica de liberación osmótica que permite alcanzar niveles tera-
previo. Algunos autores recomiendan incluso una dosis inicial inferior. En caso de que
péuticos con una sola administración diaria. En España, no existen formulaciones de
el paciente esté sometido ya a tratamiento opioide, se tendrá en cuenta el tipo de
liberación rápida de hidromorfona, pero si existe una formulación de liberación prolon-
opioide, la vía de administración y la dosis previa, para ajustar las necesidades trans-
gada de administración cada 12 horas (Palladone® Continus). La unión de hidromorfo-
dérmicas de buprenorfina. En este caso puede provocar síndrome de abstinencia. Si
na a proteínas plasmáticas es baja (<30 %) y se metaboliza fundamentalmente por glu-
el paciente ya está en tratamiento con parches de buprenorfina y necesita analgésicos
curonoconjugación, siendo el metabolito principal la hidromorfona 3-glucurónido, que
adicionales (dolor irruptivo, por ejemplo), se recomienda la toma adicional de 0,2-0,4
no es activo. A diferencia de la morfina, no se produce 6-glucurónido lo que, en caso
mg/día de buprenorfina sublingual, o el empleo de un analgésico no opioide, ya que
de acumulación, disminuye su potencial de depresión respiratoria. La hidromorfona de
en estos casos la medicación de rescate con un agonista puro podría ser ineficaz. Al-
liberación prolongada cada 24h. presenta una farmacocinética lineal, en un intervalo
gunos clínicos emplean como medicación de rescate el tramadol, pensamos que más
de dosis de 8 a 64 mg, con un aumento en las concentraciones plasmáticas (Cmax)
que por su acción agonista opioide débil, por sus propiedades analgésicas secunda-
y en la exposición total (AUC) proporcional a la dosis, lo que facilita su manejo clínico.
rias al aumento del funcionalismo de noradrenalina y serotonina.
La dosis inicial de hidromorfona de liberación prolongada debe ser 8 mg cada 24 horas
La buprenorfina es un opioide que posee un bajo índice de producción de depresión
por vía oral. En pacientes tratados con opioides, la dosis inicial se debe basar en la
respiratoria, aunque responde mal al tratamiento con naloxona. Otra característica di-
dosis diaria del opioide anterior, usando los factores equianalgésicos estándares.
ferencial de la buprenorfina, en relación con su perfil de seguridad, es que apenas
ocasiona cambios significativos en los parámetros cardiovasculares.
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paciente musculoesquelético
6.6.1.7 Metadona elevan significativamente los niveles plasmáticos de metadona. Fenómenos similares
pueden ocurrir con otros inhibidores CYP3A4, como nefazodona, ritonavir o ketocona-
La metadona es un agonista puro de los receptores opioides de origen sintético. Este zol. El metabolismo de la metadona también es inhibido por el diazepam, originándose
fármaco, gracias a su buena absorción oral, debido a su gran liposolubilidad, y a una un aumento de los niveles plasmáticos de este opioide. El resultado de esta interac-
potencia analgésica similar a la de la morfina, es susceptible de ser utilizado en el ción conlleva un incremento de la acción analgésica y del riesgo de toxicidad. Por el
tratamiento del dolor oncológico y en rotación de otros opiáceos. Se ha sugerido una contrario, la administración de inductores de este isoenzima, como los barbitúricos,
función particular en el dolor neuropático basada en su capacidad de actuar antago- ciertos anticonvulsivantes (fenitoína o carbamazepina), la rifampicina o la zidovudina,
nizando al receptor NMDA. Sin embargo, este efecto no es exclusivo de la metadona, ocasiona una disminución significativa de los niveles séricos de metadona, junto a un
sino que lo presentan también la morfina, fentanilo, codeína o meperidina. Además, incremento de su metabolito pirrilodona, con la consiguiente posibilidad de originar un
es un efecto no dependiente de la estimulación de receptores opioides, ya que se síndrome de abstinencia, resistente incluso a un incremento importante de la dosis de
pone de manifiesto también tras la administración del antagonista naloxona. Por otra metadona. Por su parte, la metadona, por un mecanismo no establecido, puede inhibir
parte, no hay pruebas clínicas para apoyar la propuesta de que la metadona tiene una el metabolismo de la zidovudina e incrementar también las concentraciones plasmá-
función particular en el dolor neuropático de origen maligno. La metadona también ha ticas de su metabolito 3-amino-3-deoxitimidina, responsable este último de muchas
sido ensayada en el dolor postoperatorio. Su principal aportación es la gran duración de las reacciones adversas del agente antirretroviral, como la anemia. Por este motivo,
de la analgesia (20 a 24 horas, tras una sola dosis de 20 mg intravascular administrada hay que plantearse una reducción de la dosis de zidovudina (o su sustitución por otro
después de la inducción anestésica). Además de su empleo como analgésico, la me- fármaco) en pacientes HIV que continúan consumiendo heroína o se encuentran en un
tadona se emplea también para la desintoxicación y el tratamiento de mantenimiento programa de metadona.
de personas adictas a la heroína u otros opioides, gracias a su capacidad para prevenir
o paliar los síntomas agudos del síndrome de abstinencia asociado a drogas como la
heroína o la morfina.
6.6.1.8 Petidina o meperidina
En relación con su perfil de seguridad diferencial, la metadona es capaz de provocar
la aparición de movimientos coreicos en las extremidades superiores y de inducir tras- La petidina es un agonista puro de los receptores opioides de origen sintético, que se
tornos del lenguaje, como resultado de su interferencia en la liberación de dopamina ha utilizado en cuadros dolorosos agudos, como el dolor del parto, debido a su bre-
cerebral. La incidencia de náuseas y vómitos también es superior a la de otros opioi- vedad de acción, a su potencia y a su dificultad para atravesar la barrera placentaria,
des, mientras que prácticamente carece de efectos antitusígenos y euforizantes. Con preferentemente por vía intramuscular (50-100 mg a intervalos de 3 horas). Puesto
la administración crónica, la acumulación en los tejidos lleva a un potencial de toxicidad que tiene propiedades anticolinérgicas, se ha empleado en espasmos dolorosos de
superior al de otros opioides, por lo que hay que realizar una titulación adecuada de la la musculatura lisa, en neuralgia y en intervenciones quirúrgicas, por vía intratecal.
dosis. Los regímenes de dosis a intervalos fijos que se realizan durante varios días se Sin embargo no es aconsejable en otros tipos de dolores agudos, como en el angor
asocian con un alto riesgo de morbilidad grave y mortalidad. inestable prolongado que no responde a los vasodilatadores, pues puede ocasionar
alteraciones del estado circulatorio y hemodinámico.
La farmacocinética de la metadona es compleja y está sometida a variaciones indi-
viduales importantes. Entre las características farmacocinéticas mas relevantes de la La petidina, al contrario que el resto de opioides, puede provocar midriasis, por su
metadona se encuentra su elevada biodisponibilidad por vía oral (80-90%), su capaci- actividad parasimpaticolítica. Además, éste es uno de los analgésicos opioides que se
dad de unión a la alfa-1-glicoproteína (60-90%) y su prolongada vida media de elimi- asocia en mayor medida con la aparición de reacciones dermatológicas (prurito, rash o
nación (hasta 47 horas). urticaria), debidas habitualmente a la liberación de histamina o a reacciones alérgicas,
así como a efectos adversos cardiovasculares y neurológicos. Por el contrario, a pesar
Además, la metadona es un fármaco metabolizado fundamentalmente por el isoen- de ser un potente analgésico, exhibe muy poca actividad antitusígena.
zima CYP3A4, lo que hay que tener presente en relación con posibles interacciones
medicamentosas. Así, hay que ser especialmente prudentes con la administración El metabolismo hepático de la petidina da lugar a un metabolito activo de prolongada
concomitante de agentes inhibidores de este isoenzima, como la fluvoxamina, pues vida media (normeperidina), dotado de propiedades neurotóxicas (calambres, hiperre-
se ha demostrado que con este inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina se flexia, temblores, convulsiones, etc.), que son más manifiestas en caso de sobredosi-
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ficación o en pacientes con insuficiencia renal. En estos pacientes, la eliminación del 6.6.2.2 Tramadol
metabolito tóxico se ve retrasada, por lo que permanece más tiempo en el organismo
ejerciendo su acción nociva. El tramadol es un opioide débil, que además presenta la capacidad de inhibir la recap-
tación de monoaminas, como lo hacen los antidepresivos, por lo que se comportaría
En relación con las interacciones farmacológicas, destaca una, de naturaleza farmaco- como un agente mixto. Desde la perspectiva galénica, también se ha desarrollado una
dinámica, potencialmente peligrosa. Se trata de la administración conjunta de ciertos formulación de liberación prolongada de tramadol, merced a una matriz lipofílica que
opioides, sobre todo la petidina, con inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAOs), libera el fármaco de forma controlada, permitiendo una farmacocinética lineal durante
antidepresivos capaces de potenciar las acciones de estos analgésicos, pudiendo dar 24 horas. El tramadol, fármaco muy utilizado en nuestro medio en el segundo escalón
lugar a un cuadro tóxico, en el que, además de la depresión respiratoria, se han des- analgésico de la OMS, está indicado en procesos dolorosos, tanto agudos como cró-
crito excitación, delirio, hiperpirexia y convulsiones. nicos de intensidad moderada. El tramadol es el analgésico opioide que más afectado
se ve en casos de polimorfismo genético del isoenzima hepático CYP2D6.
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paciente musculoesquelético
6.7 Empleo clínico de los analgésicos opioides en el dolor debido a la falta de pruebas (evidencias) sólidas, y no pueden considerarse como ‘nor-
mas de aplicación obligatoria’ sino más bien como una ayuda a la toma de decisiones
musculoesquelético clínicas de acuerdo con los datos disponibles.
La indicación fundamental de los agentes opioides es el tratamiento del dolor mode-
Los opiáceos tienen también una larga historia de uso en el tratamiento del dolor agu-
rado o intenso, independientemente de su etiología. Los opioides se han venido utili-
do y dolor postquirúrgico y también en el tratamiento del color oncológico y en cuida-
zando en el abordaje del dolor agudo, del dolor crónico y en técnicas anestésicas, así
dos paliativos, sin embargo, en algunos medios, su uso en el DCNO sigue siendo un
como en la cobertura de maniobras dolorosas quirúrgicas o diagnósticas que no pre-
tema de debate. Su eficacia a largo plazo, sus efectos secundarios físicos y psicoló-
cisan anestesia. Asimismo, el empleo de opioides en el dolor crónico canceroso es una
gicos, entre los que destaca el miedo a la dependencia, siguen estando presente en
indicación establecida y no discutida. En los últimos años ha aumentado el consenso,
la literatura.
a veces con algunas voces discrepantes, sobre el empleo de morfina y otros opioides
en dolores crónicos graves no cancerosos, con etiología clara y hallazgos objetivos Una reciente revisión Cochrane que examina efectividad y seguridad de los opiáceos
que lo sustentan, como pacientes reumatológicos con enfermedad avanzada, en los a largo plazo en el tratamiento del DCNO, encontró que el 23% de los pacientes
que han fracasado otras alternativas terapéuticas. (n=3.040) había suspendido la toma de opiáceos orales debido a efectos adversos
como el estreñimiento, las náuseas y las cefaleas. Sin embargo, la presencia de efec-
Las enfermedades osteomusculares y el dolor musculoesquelético asociado son una
tos secundarios graves, como la adicción, eran raros. Otros de los motivos de abando-
de las causas principales de discapacidad a nivel mundial. El dolor debido a la artritis
no de la terapia opioide a largo plazo era un alivio insuficiente del dolor. Sin embargo,
reumatoide, a la artrosis, a la cirugía de lesiones del sistema musculoesquelético y
los pacientes que usaron opioides durante al menos 6 meses obtuvieron un alivio del
a las fracturas óseas son comunes en nuestra sociedad. Mientras que la mortalidad
dolor clínicamente significativo.
en estas condiciones es en general baja, provocan una tasa importante de discapa-
cidad, gastos sanitarios y una mala calidad de vida, que son en gran parte debido al Puesto que en la actualidad existen opioides que permiten conseguir efectos analgé-
dolor musculoesquelético asociado. Como la edad promedio de la población se va sicos de larga o corta duración es importante saber utilizar ambas alternativas en el
incrementando, el impacto de condiciones musculoesqueléticas en nuestra sociedad DCNO. Los opioides de acción corta se han asociado con una mayor incidencia de
aumentará en paralelo. El tratamiento del dolor crónico no oncológico puede consi- tolerancia y dependencia. En alguna revisión se ha podido constatar que algunos pa-
derarse como un desafío, teniendo en cuenta la compleja interacción entre factores cientes preferían opioides de acción corta, sin embargo, los pacientes que tomaban
fisiológicos, cognitivos y sociales y la necesidad de un manejo sostenible y seguro a opioide de larga duración tuvieron una mejor respuesta al tratamiento y percibían una
largo plazo. mejor calidad de vida. Las formulaciones de liberación prolongada mejoraron el cum-
plimiento terapéutico y redujeron el dolor y la sensación de angustia relacionada con el
La disponibilidad de nuevos agonistas opioides y nuevas formulaciones ha contribuido
mismo por lo que podían concentrarse mejor en las actividades diarias lo que mejoraba
a un renovado interés en su prescripción en el dolor crónico no oncológico. La tecnolo-
su calidad de vida.
gía farmacéutica, que permite ampliar y controlar la liberación de un fármaco, ha hecho
coincidir el efecto analgésico con el patrón temporal del dolor. En estos momentos, Para los médicos de atención primaria, el DCNO es engorroso de tratar y muestran con
clínicamente existen opioides que permiten tratar tanto el dolor de fondo como el dolor frecuencia preocupaciones sobre el posible abuso, desviación de consumo y adicción.
irruptor e incidental. Para ello es fundamental conocer las características farmacoci- En muchas encuestas manifiestan una falta de formación específica y problemas buro-
néticas de cada opioide con los que contamos en nuestro arsenal analgésico. Ello cráticos con la receta de estupefacientes. Estos aspectos crean barreras que dificultan
va a permitir mejores resultados funcionales y una mejor calidad de vida de nuestros el tratamiento óptimo de este tipo de dolor. Además, los efectos secundarios y algu-
pacientes. El tratamiento farmacológico del dolor debe ser contemplado como parte nos factores psicológicos de los pacientes, como un pobre afrontamiento, ansiedad y
de una amplia gama de intervenciones específicas. depresión, también han sido identificados como barreras para el eficaz tratamiento del
dolor. De hecho, existen estudios en los que se recoge que el 35% de los médicos no
En la actualidad se han publicado un amplio número de guías terapéuticas encamina-
habían recetado opioides de acción prolongada para el tratamiento del DCNO.
das a ayudar a los clínicos en la prescripción de opioides para el DCNO (Dolor crónico
no oncológico). En general, estas directrices se basan en consensos de expertos,
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paciente musculoesquelético
Muchas guías terapéuticas recomiendan una serie de aspectos que podrían apartar En relación con el metabolismo de los opiáceos, se sabe que muchos de los metabo-
las barreras descritas y facilitarían la realización de una correcta utilización de opioides litos generados son tan activos o más que la sustancia original. Así, en el caso de la
en el DCNO. morfina, el metabolito M6G es bastante potente (de 10 a 100 veces más potente que la
morfina), y en casos de insuficiencia renal este metabolito puede acumularse y producir
Antes de iniciar la terapia crónica con opioides, se debe realizar una historia y examen efectos tóxicos. Este caso sería aplicable también al tramadol. La insuficiencia renal
físico y analítico del paciente, incluida una evaluación del riesgo de abuso o dependen- es frecuente en casos de pacientes polimedicados, así que cambiar a un opioide que
cia de sustancias. El factor que parece ser más predictivo de uso indebido de opioides lógicamente mantenga las propiedades farmacodinámicas pero que respete el riñón
es una historia personal o familiar de abuso de alcohol o de drogas, así como la pre- sería muy aconsejable. Un caso similar podría darse en situaciones de insuficiencia
sencia de enfermedades psiquiátricas. hepática.
Se debe considerar la terapia opioide como una opción si el DCNO es moderado o En líneas generales, los opioides potentes μ son los preferidos porque producen una
intenso, impide la función normal o produce al paciente una mala calidad de vida y los analgesia sin techo y en caso de evolución del cuadro doloroso se puede corregir
beneficios terapéuticos potenciales superan los inconvenientes. incrementando la dosis. En el tratamiento de fondo parecen preferibles los opioides
de liberación sostenida, ya que minimizan picos, responsables de efectos adversos
La evaluación de beneficios y riesgos, mediante una historia de seguimiento, el exa-
y valles responsables de fases de desprotección analgésica. Puesto que el paciente
men físico y pruebas diagnósticas apropiadas, debe realizarse no solo antes sino tam-
puede presentar dolor incidental, es necesario tener prevista esta contingencia con
bién de forma continuada durante la terapia con opioides. La existencia previa de
opioides de inicio rápido y corta o media duración de efecto. En este sentido, no
estreñimiento, náuseas, enfermedad pulmonar y deterioro cognitivo son predictores
existen formulas fijas y el tratamiento debe ser individualizado, sin incrementar la dosis
de riesgo de efectos adversos relacionados con el opiáceo. El empleo de agentes con
del tratamiento continuo, salvo que existan más de tres episodios de dolor incidental
una menor afectación digestiva, como la asociación de oxicodona naloxona, podrían
diarios. La dosis adecuada será de un 10 a un 20% de la dosis total de opioide en
ser de elección en estos pacientes.
el caso de la morfina y la oxicodona de liberación rápida. En cualquier caso, la OMS
Asimismo, otra recomendación recogida en la mayor parte de las guías terapéuticas es recomienda que se utilice el mismo principio activo para el rescate que el que se use
la obtención del consentimiento informado por parte del paciente. En este se deben para el tratamiento de base. De este modo, si el paciente presenta un dolor irruptivo
recoger objetivos, expectativas, riesgos y alternativas a la terapia opioide así como de comienzo brusco y escasa duración, se debe pautar un opioide de acción muy
un plan de gestión de que recoja las responsabilidades del paciente respecto al trata- rápida y de duración muy corta, como es el fentanilo transmucoso. Si el dolor irruptivo
miento. es de inicio más insidioso o si es de larga duración estarán indicados los opioides de
acción corta por vía oral: morfina y oxicodona de liberación inmediata. También en el
En casos de una inadecuada respuesta clínica a un determinado opioide o frente a seguimiento del paciente es importante ver si existe dolor al final de dosis y tener en
la aparición de efectos adversos intolerables, las alternativas terapéuticas pasan por cuenta que en determinados pacientes, el intervalo de dosificación debe ser mas corto
realizar un tratamiento más agresivo de los efectos adversos, recurrir al uso de coadyu- (8 horas para morfina y oxicodona de liberación controlada y 48 horas en el caso de
vantes analgésicos u otras intervenciones, o bien cambiar a otro opioide alternativo. fentanilo transdérmico).
Esto último se conoce como “rotación de opioides”. Según los datos publicados, esta
práctica está extendida entre un 10 a un 80% de los pacientes.
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Tablas patologías específicas Paraceta- Disminuir dosis Disminuir dosis:++. Pueden Puede ser usado: aumentar
mol producir fallo hepático en dosis inicial y el intervalo entre
FARMACOCINÉTICA INSUF. RENAL INSUF. HEPÁTICA OBESIDAD alcohólicos dosis
Fco.LS Fco.NLS Metamizol ? ? ?
Fracción libre unión a ↑ ↑↑ ≅ ≅
albúmina Oxicodona Ajustar dosis Evitar en estadios avanzados ?
/Naloxona
Fracción libre unión AGG ≅o↓ ↓≅o↑ ↓ ↓
Tapenta- Ajustar dosis Disminuir dosis ?
Vol. distribución central ≅o↑ ↑ ↑ ↑ dol
Vol. distribución total ≅o↑ ≅o↑ ↑↑↑ ↑ Hidromor- Ajustar dosis Disminuir dosis ?
fona
Eliminación hepática Fármaco: ≅ Alta extracción: ↓↓↓ Fase1: ≅ Fase1: ≅ Recomendaciones de uso de analgésicos en Insuficiencia hepática y renal.
Metabolitos: ↓↓ Baja extracción: ≅ o ↓ Fase2: ↑ Fase2: ↑ +++: imprescindible; ++: Importante
Eliminación renal ↓↓↓ ≅ o ↓ (estadios finales) ↑ ↑
Comentario Influencia diálisis: Muy dependiente de la
muchísimo causa y estado
Cambios farmacocinéticas en la insuficiencia renal y hepática. Vol.: volumen; Fco. : fármaco; LS: liposoluble; NLS: no liposoluble
AAG: ácido α1-glicoproteina. ↑: Aumento. ≅: sin cambios significativos. ↓: descenso
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
6.9 Uso Práctico de los opioides Es curioso observar que a pesar de lo que a priori pensamos de los efectos secunda-
rios de un opioide mayor deben ser mayores que los de un opioide menor (tramadol),
6.9.1 Otros conceptos sobre los opioides sin embargo esto no es siempre así. Por ejemplo, existe un estudio comparativo que
demuestra que la oxicodona es mejor tolerada a dosis bajas que el tramadol a dosis
¿En que paciente los puedo usar? ¿Tengo que tomar precauciones en algunas pa- equipotentes.
tologías?
Por ello, hay que individualizar y asumir que no todos los pacientes tienen que nece-
En principio en todos los pacientes con dolor intenso que no responde a analgéscios sariamente pasar por un 2º escalón de analgésicos previo a la utilización de un opioide
comunes. mayor.
Al igual que con otros fármacos depresores del sistema nervioso, deberemos ser cau-
tos en las dosis en pacientes frágiles, con mucha patología asociada o con deterioro
cognitivo. ¿Cuándo cambiar de tramadol a opioide mayor?
En pacientes que presenta pluripatología habrá que actuar según las guias dadas en el El paso de tramadol a un opioide mayor se hace prioritario en tres circunstancias:
manual (ver pacientes pluripatológicos y ancianos)
1.- Dolor intenso que no responde a opioides menores.
2.- Escalada de dosis de tramadol sin eficacia analgésica.
3.- La existencia de efectos secundarios con el tramadol.
Papel de los opioide menores en el dolor crónico.
La escalera analgésica de la OMS fue descrita en 1980 para guiar las pautas del do-
lor nociceptivo y evitar que los médicos no utilizasen todos los recursos terapéuticos ¿Cuál debe ser la dosis de inicio en un paciente joven?
que se disponen para conseguir paliar el dolor (oncológico y no oncológico). En esta
conocida escalera previo a la utilización de los opioides mayores se recomienda el uso La dosis de inicio se sitúa habitualmente en 10-30 mg/12h de morfina oral u equiva-
de opioides menores (aquellos con techo analgésico). En España a día de hoy los dos lente, por ejemplo 5/2,5 mg de oxicodona/naloxona. Con esta pauta en 24-36 horas
opioides menores existentes son la codeína y el tramadol. tendremos concentraciones plasmáticas estables. Es deseable reevaluar al paciente
en 1 semana, aunque basta con un contacto telefónico que nos permita saber dos
La codeína tiene limitada su utilización por 3 cosas: existe asociada a paracetamol aspectos: por un lado la eficacia analgésica y por otro la tolerancia al tratamiento (si
(con dosis limitadas a 3 gr/día), segundo es un profármaco y precisa convertirse a han existido efectos secundarios). En caso de existir poca eficacia analgésica se puede
morfina para ser eficaz (se satura su metabolización) y tercero en un 7% de la pobla- doblar la dosis y si por el contrario aparecen efectos secundarios que no podemos
ción caucasiana existe una alteración genética que hace que no se produzca la enzima evitar para mejorar la tolerancia podemos disminuir la dosis a 10 mg/12h.
que transforma la codeína en morfina (siendo por lo tanto ineficaz). Estos tres motivos
han relegado la codeína a un plano muy posterior en el tratamiento del dolor crónico
intenso. ¿Cuál debe ser la dosis de inicio en un paciente anciano?
El tramadol que es el opioide menor por excelencia disponible actualmente en España. En pacientes ancianos y/o frágiles se recomienda ser cauto en el inicio de la terapia y
Se caracteriza por ser un opioide débil, ya que sólo un 40% de su acción lo consigue en el ascenso de dosis. Una forma segura de comenzar es con 10 mg/12h. Esta dosis
por esta vía, el otro 60% lo realiza inhibiendo la recaptación de serotonina y noradrena- será insuficiente en muchos de ellos pero permite titular lentamente y evita la aparición
lina (o sea potenciando las vías inhibitorias descendentes). Como el resto de los opioi- de efectos secundarios (principalmente sedación y somnolencia).
des menores, tiene un efecto techo situado en 400 mg y por encima de estas dosis no
aumenta su efecto y puede producir toxicidad importante. Al igual que en pacientes jóvenes es deseable realizar un contacto en 1 semana para
ver eficacia y seguridad.
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¿Qué medicación de rescate puedo pautar? Decir una fecha exacta de seguimiento es imposible y depende de cada paciente, pero
si que podemos decir que no debe ser superior a 3 meses.
Frecuentemente nuestros pacientes precisan tratamiento adicional para momentos en
el día o situaciones ocasionales en el que existen picos o aumentos de dolor. Para Puede darse el caso de que en el seguimiento el paciente se presente con un EVA<3
estas ocasiones es bueno dejar siempre una puerta abierta en el tratamiento del pa- y además tenga efectos secundarios del tratamiento, en este caso se debe considerar
ciente. De este modo le explicaremos que en el caso de aparecer dolor puede tomar disminuir la dosis del opioide en un 25% y reevaluar en las siguientes 24-48 horas.
medicación de rescate.
En el seguimiento del paciente es siempre importante pautar analgesia no sólo basal
Podemos pautar como medicación de rescate opioides de liberación rápida como la sino dejar analgesia de rescate por si el paciente no estubiese bien controlado.
morfina/oxicodona de liberación rápida u otro opioide menor que sea de liberación
rápida o incluso con un fármaco de distinto mecanismo de acción como un AINE o En cada control es importante valorar la eficacia del tratamiento y la necesidad de res-
paracetamol. cates, el motivo de los mismos y ajustar todo el tratamiento adecuadamente.
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En el caso concreto de la metadona, es particularmente importante entender la amplia Otro factor nada desdeñable y de gran importancia en la rotación de opioides es la
variabilidad que existe en cuanto las dosis equivalentes con la morfina, dependiendo metabolización por un determinado citocromo y las posibilidades de interacciones me-
y pudiendo variar de 1:1 a dosis bajas de morfina a 20:1 en dosis elevadas (>300 dicamentosas. Muchos fármacos utilizados en pacientes con dolor crónico son meta-
mg/día). Además, se puede producir acumulación y toxicidad cardiaca, por lo que se bolizados por la vía del citocromo P450 en sus isoformas 3A4 y 2D6. En tales casos,
recomienda siempre comenzar con la mínima dosis y escalar según necesidades del puede verse disminuido el efecto del opiáceo o aumentada su toxicidad. La rotación
paciente siendo deseable monitorizarle. de opioides positiva puede reflejar, en estos casos, cambios producidos en las interac-
ciones medicamentosas
Hasta ahora hemos visto diferentes factores que pueden contribuir a la consideración
6.9.4 Rotación de opioides: fundamento clínica de la rotación opioides, pero tal vez el factor más determinante sea la aparición
de una incompleta tolerancia cruzada entre opiáceos que justifique la rotación. La tole-
Es conocido que algunos pacientes que son tratados principalmente con morfina para
rancia analgésica a un opiáceo se define como la reducción en la potencia después de
el dolor crónico manifiestan una no adecuada analgesia o efectos indeseables intole-
administraciones repetidas, con lo que son necesarias dosis más altas para alcanzar el
rables. Para reducir la toxicidad de la morfina y manejar mejor el dolor existen varias
mismo efecto analgésico. La tolerancia también se desarrolla a algunos efectos inde-
opciones, pero principalmente se barajan las siguientes: un tratamiento más agresivo
seables, y es particularmente interesante clínicamente ya que si se cambia de opiáceos
de los efectos indeseables, el uso de coadyuvantes analgésicos u otras intervenciones.
esta tolerancia permanece, lo que resulta bastante positivo.
Otra opción es cambiar a otro opioide alternativo lo que se conoce como “rotación de
opioides”. En algunos casos la rotación de opioides se establece para mejorar la anal- La tolerancia incompleta a los opiáceos se ha explicado de varias maneras. Una de
gesia, en otros casos para reducir la toxicidad. las explicaciones es excluyente porque postula que son necesarias más dosis de opiá-
ceos porque el proceso que infiere el dolor continúa su curso. Asimismo, se desarrolla
Una pregunta que se hace frecuentemente en relación a la rotación de opiáceos es
tolerancia a algunos efectos, por ejemplo naúseas y somnolencia pero otros como el
cuales son los fundamentos racionales para esta práctica. Se han sugerido varias teo-
estreñimiento permanecen en igual intensidad.
rías e hipótesis en este sentido, que van desde aquellas relacionadas principalmente
con el metabolismo de los opiáceos, pasando por la propia patofisiología del dolor, Farmacológicamente hablando se ha postulado que la tolerancia incompleta es el re-
factores genéticos, interacciones farmacológicas o tolerancia cruzada incompleta. sultado de una unión preferencial de un opiáceo por un determinado subtipo de recep-
tor opiáceos o por el uso de una vía diferente de transmisión del mensaje antinocicepti-
En relación con el metabolismo de los opiáceos, se sabe que muchos de los metabo-
vo a través de diferentes segundos mensajeros. También se ha barajado la posibilidad
litos producidos son tan activos o más que la sustancia original. Así en el caso de la
de que la tolerancia sería incompleta entre opiáceos con diferente estructura o perfil de
morfina, el metabolito M6G es bastante potente, en casos de insuficiencia renal este
unión a diferentes receptores opiáceos. Sin embargo a nivel celular es difícil de extraer
metabolito puede acumularse y producir efectos tóxicos. Este mismo caso sería similar
una conclusión ya que este mecanismo es bastante similar por ejemplo a nivel de los
con dextropropoxifeno o con tramadol. La insuficiencia renal es frecuente en casos de
receptores mu-opiáceos. Así, los efectos indeseables resultantes de la activación del
pacientes polimedicados, así que cambiar a un opiáceo que lógicamente mantenga las
mismo receptor opiáceo no van a mejorar cambiando a una dosis equianalgésica de
propiedades farmacodinámicas pero que respete el riñón sería muy aconsejable. Un
otro opiáceo que actúe por el mismo receptor.
caso similar podría darse en situaciones de insuficiencia hepática.
Sin embargo, algunos efectos indeseables pueden estar ligados a la fijación sobre re-
Los factores genéticos son igualmente importantes. La capacidad de metabolizar un
ceptores opiáceos del subtipo delta o kappa, aún manteniendo la fijación mu-opioide,
fármaco es diferente individuo a individuo, así por ejemplo la capacidad de metabolizar
luego esos efectos indeseables pueden ser diferentes entre opiáceos, lo que también
codeína a morfina difiere en algunos pacientes. Del mismo modo, pueden existir varia-
justificaría la rotación de opioides.
ciones de expresión genética en un determinado receptor opioide, tanto en la densi-
dad, es decir el número de receptores disponibles, como en la sensibilidad o afinidad La activación diferencial sobre diferentes subtipos de un mismo receptor también ha
por diferentes agonistas opiáceos, lo que hace que la eficacia analgésica difiera entre tratado de explicar la tolerancia cruzada. Así por ejemplo se sabe que existen dos sub-
individuos aún con un mismo agente opioide analgésico. tipos de receptores mu-opiáceos mu-1 y mu-2, el primero media una analgesia espinal
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paciente musculoesquelético
supraespinal y el segundo espinal, e incluso hay evidencia que el receptor mu-1 no la dosis de la metadona para el control analgésico, podrá ser reducida
participa en la depresión del centro respiratorio y que el mu-2 está involucrado en los posteriormente para volver a la de mantenimiento cuando el episodio de dolor
efectos centrales de la morfina sobre el tracto gastrointestinal. haya pasado.
El uso de agonistas-antagonistas está contraindicado en estos grupos
de pacientes ya que tienen techo terapéutico y pueden desencadenar un
6.9.5 Problemas psiquiátricos y dolor asociado síndrome de abstinencia con incremento del dolor en los enfermos físicamente
dependientes. La utilización de agonista parcial será más indicada.
La incidencia de trastornos psiquiátricos es claramente superior en los pacientes que En todos estos pacientes en el caso de presentarse un síndrome doloroso
sufren dolor. De hecho, los síntomas psiquiátricos en los pacientes con dolor, deben agudo localizado, las técnicas invasivas de anestesia regional pueden ser una
ser inicialmente interpretados como una posible consecuencia del dolor no controlado. buena alternativa para evitar el empleo de dosis crecientes de opioides.
Por tanto, una vez se controle el dolor, se debería realizar un nuevo estudio mental para
Además, en estos dos últimos grupos habrá que prever un aumento
saber si persiste el problema.
significativo de la ansiedad y el estrés que el dolor puede producir en estos
El dolor no controlado será uno de los factores de riesgo para el desarrollo de depre- pacientes, derivando en ciertos casos en la reaparición de las conductas de
sión en el paciente oncológico, e, incluso para una incidencia mayor de suicidio. abuso de drogas.
Los efectos secundarios de los psicofármacos deberán ser tenidos en cuenta a la hora
de instaurar el tratamiento analgésico, ya que pueden ocasionar más problemas que Como conclusiones en los pacientes adictos o con historia previa de adicción, será
la sequedad de boca. muy importante fijar los límites del tratamiento, para evitar el abuso de opioides. Para
ello, debe controlarse ante testigos el tratamiento oral diario y es conveniente la utili-
Un concepto especial dentro de los pacientes con patología psiquiátrica son los pa- zación de un contrato de opioides firmado por el paciente en el que se puede incluir
cientes con historia de abuso de drogas. Esta es una población pequeña pero muy que se determinarán analíticas de orina para ver uso de otras sustancias ilegales. En
difícil de manejar. Dentro de este colectivo podemos encontrar tres supuestos: cualquier caso si el paciente precisa un tratamiento con opioides, es candidato a ser
1) Adictos activos en el momento en que precisan control analgésico manejado por un especialista y llevar un control exhaustivo de la medicación con un
único prescriptor.
Tienen un grado mayor de tolerancia, por lo que precisan mayores dosis
iniciales e intervalos más cortos que los recomendados en la población
general. Además, será necesario el tratamiento de los desórdenes
psicológicos, ansiedad y depresión, que estos pacientes tienen con mayor
frecuencia.
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paciente musculoesquelético
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paciente musculoesquelético
Cuando se produce una hiperalgesia por El tratamiento de la HIO incluye la reducción de la dosis de 6.11 Dudas habituales
opioides todos los opioides deben ser opioides pero para conseguir la analgesia puede ser necesa-
retirados ria la rotación a otro opioide P: ¿Los opioides producen depresión respiratoria?
Los opioides agonista/antagonista son A dosis equianalgésicas todos los opioides producen la mis- R: Se da en menos de un 1% de los casos, pero en pacientes con dolor crónico el
más seguros que otros opioides porque no ma depresión respiratoria. Los opioides agonista/antagonista
producen depresión respiratoria y previe- tienen dosis techo para la analgesia y para los efectos adver- efecto es incluso menor. Y es todavía menos probable en opioides de liberación pro-
nen la adicción sos (depresión respiratoria), pero esto es a dosis superiores longada.
a las utilizadas en clínica. La depresión respiratoria de la
Buprenorfina no es reversible completamente por Naloxo-
na. Probablemente la Buprenorfina sea más adecuada en
pacientes con abuso de opioides, pero hay pocos estudios P: ¿Los opioides producen adicción?
que lo avalen
R: Usados para el tratamiento del dolor esta complicación es poco frecuente y no se
debe confundir con el síndrome de abstinencia producido ante la retirada brusca del
fármaco (igual que sucede con los ansiolíticos, corticoides, betabloqueantes ). No se
6.10.1 Uso de los opioides en el tratamiento del dolor crónico debe confundir la necesidad de analgesia con adicción o debilidad del paciente.
R: El alivio del dolor es una sensación de bienestar que no debe ser confundida con
la euforia.
R: Este efecto secundario aparece en un tercio de los tratados en los primeros días y
se resuelve rápidamente por la aparición de tolerancia.
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paciente musculoesquelético
P: ¿Son eficaces los opiáceos usados por vía oral.? 6.12 Implicaciones legales
R: Aunque la disponibilidad del fármaco varía de forma individual, la OMS recomienda A pesar de que la mayoría de los pacientes cuyo dolor es tratado con opiáceos reciben
la vía oral como primera opción. dosis estables de los mismos, siendo mínimos sus efectos sobre la función cognitiva y
psicomotora, así como suelen remitir las náuseas y los vómitos (no así el estreñimien-
to), siguen siendo sus efectos adversos y el temor a la adiccioón causa de rechazo e
P: ¿El uso de opiáceos anula el efecto de otros analgésicos usados con posterioridad? infrautilización de estos fármacos. Podemos unir a esto las normas y reglamentos inne-
cesariamente estrictos que impiden que la población acceda a los opioides mayores.
R: Los opioides se usan para el tratamiento del dolor moderado e intenso ante el
fracaso de otros analgésicos y no tienen una dosis límite. Una vez suspendido su uso
el organismo olvida sus efectos y los demás analgésicos conservan su eficacia. De
hecho, ante dolores mixtos se utilizan junto a otros medicamentos coadyuvantes con- 6.12.1 Conducción
siguiendo mayor eficacia y menores efectos adversos.
Los opioides pueden disminuir la capacidad para conducir en algunos pacientes, es-
P: ¿Usar opiáceos equivale a estado terminal ? pecialmente por interacción con otros fármacos que estén tomando y fundamental-
mente en inicios y ajustes de tratamiento. Al inicio del tratamiento debe advertirse de
R: La indicación del uso de opiáceos está determinada por la intensidad del dolor y no ello, aconsejando que se abstengan de conducir o que lo hagan con cuidado.
por el pronóstico vital del paciente. El enfermo terminal no suele precisar opiáceos y el
uso de dosis elevadas puede provocar hiperalgesia y excitación, complicando la muerte. Parece ser que pacientes con dolor conducen mejor cuando éste lo tienen controlado.
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El número de envases por receta no podrá ser mayor de cuatro ni superar los necesa-
rios para un mes de tratamiento, de acuerdo con laa pauta prescrita.
Un proyecto
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