Introduccion a
la Arquitectura
en México
Manuel Rodriguez Viqueira
LIMUSAFigura 50. Templo del Dios descendent
La apaticion del juego de pelota y del tzompantli altar donde se
ofrendan Ios erdneos de los muertos en sacrificio, también es un
reflejo de la herencie plistica de los valles del altiplano.
En forma simultines aparecen elementos caracteristicos de la
arquitectura maya, como las bovedas falsas, mascarones con la
deidad de la Iluvia, tronos en forma de jaguar y fachadas Tisas
En Mayapén y Tulim, que tambien se desarrollaron bajo la
influencia tolteca, agarece un elemento adicional: el muro perime-
tral, probablemente de caricter defensivo. ‘También caracteris
de estas ciudades es la construccién de templos sobre basa
tos bajos, decorados con estueos donde aparecen personajes de
ceabeza que eaen: EI Dios Descendente, los cuales es probable que
simbolicen la puesta del Sol.
110 Introduccion a la Argutectura en Mésico
La arquitectura colonial
A rartir del siglo XVI la arquitectura en México dependid de
las cortientes estilisticas del exterior y en particular de los acon-
twcimientos en Espatia y el continente europeo, Al inicio de la
‘conquista florecta en Europa la arquitectura reracentista yen
Espatia se expresabe a través del Plateresco,
similitudes con la escuela del Quattrocento italiano, aunque eon
‘mayor riqueza decorativa: ejemplo significative de esta variante
es a fachada de la Universidad de Salamanca (1516-1560), de
autor anonimo, Por otra parte, en la segunda mitad del siglo surge
1 Herreriano, estilo centrado en los efectos de monumentalidad
¥y de masa; el monumento mas importante y earueteristico es el
‘Monasterio del Escorial (1563-1584, Juan B. de Toledo y Juan de
Herrera), manicrista, gcométrivo y desprovisto de omamentacidn,
siguiendo al Cinquecento italiano, y que influye notablemente en
a arquitectura, de los siglos posteriores, en los tertitorios conquis-
tados,
stilo que presentaba
iglo XVI en México.
La conquista espaiiola de Mesoamérica se caracteriz6 por sus dos
vertientes: la militar y la religiosa, Después del dominio militar, la
conversién a la fe cristiana de los pueblos indigenas fue el cauce
de la consolidacion de las estructuras de pod:
‘rdenes religiosas que realizaron esta labor: franciscanos, domini-
fueron tres las
nos y agustinos, Las edificaciones conventuales que construyeron,
son la expresion anquitecténica més significativa del siglo XVI en
Mexico.
Los primetos constructores, tal vez misioneros, no tenfan la
formacion requerida, y sus referentes ee asociaban sobre todo con
la arguitectura de las ciudades espaitolas, de caracter medieval, y
10s incipientes ejemplos del Renacimiento espatiol, el platereseo.
De esta manera, ef repertorio formal entremezcla elementos de las
arquitecturas roménicas, géticas, mudejares y renacentistas, lo que
dio por resultado, en el continente americano y particularmente en
‘Méxieo, una expresion muy particular,
El con unto conventual estaba formado de manera fundamental
Por seis elementos: el atrio, el convento, la capilla abierta, el tem-
plo, laluerta y el cementerio.
Figura 52, Acolman,fackada del convento de la
Una de las caracteristicas generales es ou aspecto defensivo, (Onten del seuatnes,
expresido a través de clementos tipicos de la arquitectura militar:
almenas, troneras, pasos de ronda, garitones y predominio del
‘macize sobre el vano.
El conjunto conventual de Atlatlauhean (Morelos), de hecho
‘mantiene intactas todas las earacteristicas de los eonventos del
iglo XVI. El atrio es un espacio abierto de grandes dimensiones,
colocado sobre una plataforma ligeramente clevada y rodeada por
lun muro, El acceso es a través de las arcadas reales, la principal
‘en el je del templo hacia el poniente (en ocasiories también a tra-
vvés de accesos secundarios que se encuentran en el eje transversal,
dividiendo el atrio en cuatro cuadrantes). En el punto central se
ccoloca la eruz atrial en forma axial. En el perimetro, en Ia parte
interior del muro atrial, se ubican las eapillas posas, que se usan
Para posar las figuras religiosas durante las procesiones.
‘Se atribuye al atrio la funcion de espacio abierto que comple-
i ‘menta a la capilla abierta; esta tiltima en principio es un sencillo
presbiterio, un espacio delante del altar para oficiar la misa, que
con cl tiempo evoluciond y adquirié dimensiones significativas
¥ espacios complementarios: coro, bautisterio, sacristia, como en
‘Teposcolula, Oaxaca, o Zinacantepec, Estado de México.
Figura $1. Acolman, converto dela Orden
de os lgustnas, entremezcls elementos dela
larguitectura medieval yplatresca.
72 Introduction «la drguittira sFigura $3. Copilaobiertayconvento de Teposcoila
Las capillas abiertas aparecen de distintas maneras, ya sca inte-
gradas al edificio conventual o al templo, y exentas. En el primer
caso se ubican ya sea en el portal de peregrinos o en el claustro
alto a manera de baleén, como en Acolman, o en uno de los costa-
dos de la nave.
Es probable que el origen de la capilla abierta se vincule con la
necesidad de oficiar misa en un espacio provisional en tanto se
construye el templo; sin embargo, su aceptacion y Ia posibilidad
de conjuntar un mayor niimero de personas, convistié en costum-
bre utilizarlas en las principales celebraciones religiosas. También
fue frecuente Ia transformacion de capillas abiertas en templos
ceubiertos,
‘Los templos tambien son seni, con cl presbitero orientado
hacia el orto el acces hacia el poniente, Por lo general, nose
nilizan tomes y las fachadas se rematan en spare superior con
cespadaias, De reminiscencias medievales son la masividad del
taificio, los contrafueresy arbotantes ns aberturas on parts In,
1 Introduccion a ta Argitectura
Figura $4.Copllaabicrta deb
comnto de Tlabmanaleo
los arcos ojivales y conopiales. En cambio, de influeneia renacen-
tista es Ia decoracion plateresca, trabajada en pronunciado relie=
‘ve, que realza el acceso y la ventana coral, donde los prneipales
clementos decorativos son columnas, entablamentos, casctones,
tableros ricamente decorados, medallones, grutescos y escudos.
_Ejemplos significativos del plateresco mexicano son AcoIman y
Cuitzeo,
E] edificio conventual consiste en una construccién reswelta por
‘medio de erujias que rodea a un patio de proporciones candrangu-
lares con aljibe al centro. EI edificio es de dos niveles; en su parte
baja se encuentran los locales relacionados con las actividades
propias del convento, cl portal de peregrinos y la porteria; en la
parte superior se encuentran las celdas y la biblioteca, asi eomo el
acceso al coro del templo
1sLa arquitectura de los siglos XVII y XVII
‘A finales del siglo XVI se conjunta una serie de eondicionantes
que motivarian un impulso renovador en la arquitectura. El cree
1iento de la poblacién eriolla en el ambito urbano, el discurso de
ta contrarreforma y las aspiraciones sociales de colonos y erollos,
favorecieron a incorporacién de las nuevas corrientes esilisticas
presentes en Espaia y Europa. Asi, con la leyada de arquitectos
{yatistas formados en talleres europeos de la epoca. y junto con
éllos libros y trtados que aetualizaron los conocimientos de los
ya establecidos, se suscito el surgimiento de expresiones arqui-
tectonieas maniristas, pero ye con un espirita barroco, donde se
cemplean los mismos elementos del vocabulario clésico, pero en
forma arbitraria, sin espetar su distribucion tradicional, aten-
tos sobre todo a conseguir efectos de capricho, de articulacion
dinimiea, y a subdividir las superficies en campos independientes,
tratados con absoluta libertad, que a su vez son entremezclados en
‘casiones con elementos del estilo herreriano, mas geométrico y
sobrio, De esta manera, las primera eatedrales (Mérida en 1598,
Figura $5. Ciudad de México, Catedral Me-
Inopolitana (1573-1813).
16 Introduccion la Argitecura
Puebla y México) que se construyeron a lo largo de los siglos
XVII y XVIII reflejan estas caracteristicas, considerdndose las dos
‘iltimas las mas importantes, tanto por su magnitud como por st.
influencia en el desarrollo del estilo barroco en México.
En términos espaciales no se siguieron los principios del barroco,
salvo algunas excepciones ya avanzado el siglo XVIII, como en la
Capilla del Pocito (1777 a 1791) en el eerro del Tepeyae, obra de
Francisco Antonio Guerrero y Torres, donde la eipula es eliptica y
la planta se manejé con gran libertad formal.
La arquitectura barroca en México se divide, por lo general, en
dos momentos: el barroco hispanico o sobrio propio del siglo
XVI yel barroco exuberante o churriguereseo mexicano que se
ddesarrolld durante el siglo XVIII. Al primer periodo se le earacte-
riza por el uso de la copula y los eampanarios en los exteriores, en
tanto que en el interior la decoracién es mis o menos austera. Al
segundo, por la utilizacion del tezontle, la cantera, los azulejos y
la traceria de argamasa en los exteriores, y en el interior Ia apa-
riclon de los exuberantes retablos dorados y las decoraciones de
yeseria.
En realidad, lo distintivo del barroco mexicano es la exuberancia
‘omamental, que se da en forma fundamental en Ja arquitectura
religiosa en los retablos de madera, los interiores y las fachadas de
hs iglesias
Los retablos fueron parte fundamental de los interiores barrocos,
donde se integraron las tres artes: pintura, eseultura y arqui-
tectura, Estin hechos con madera entallada que forma la parte
anterior decorativa frente al espectador y de toda una estructura
de sostén oculta en la parte posterior. El frente se compone de
‘cuerpo, calles y entreealles, el z6ealo y las columnas con enta-
blamentos, asi como de esculturas, pinturas sobre tabla, 6leos,
frisos, frontones, nichos y bastidores, En tanto, el soporte esta
resuelto con postes, vigas, tablones y bastidores. Entre Jos ejem=
plos mas significativos se encuentran el Retablo de los Reyes de
”Figura $6. Pragmento de la decoracn en la
Copa det Rosai gen de Santo Doming
‘on Puebla
Figura $7, Copllo de! Rosario, en la iglesia.
ddeSonto Domingo en Puch,
la Catedral Metropolitana y los retablos de la iglesia del antiguoy
colegio jesuita en Tepotzotlin,
En los interiores se utiliz6 la yeseria y la argamasa; en las re=
giones de Puebla, Tlaxcala y Oaxaca se da su mayor desarrollo,
Resalta no sélo por la riqueza formal sino ademas por la poli-
cromia y el recubrimiento eon Kiminas de oro, Gnutescos, cintas,
roleos, querubines y guimaldas decoraron arcos, muros intetiores
yy bovedas, lo que result6 en obras espectaculares, como la Capilla
del Rosario, en la iglesia de Santo Domingo en Pucbla, ola iglesia
fen Santa Maria Tonanzintla,
Las fachadas tambien fueron ricamente decoradas; para ello se
utiliz6 la piedra y la argamasa, ésta, con su caricter moldcable y
aplicada sobre nicleos de ladrillo y piedra, permitié generar una
gran exuberaneia de formas en funcion de las necesidades expresi~
‘vas ¢ iconogrificas de las portadas; ejemplos significativos son la
iglesia de La Valenciana en Ia ciudad de Guanajuato, 0 cl mismo
sagrario de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.
178 Introduccion ata Arguitectora
Los materiales desempefiaron un papel determinante para obte~
ner los efectos de riqueza decorativa, Se usaron distintos tipos de
piedra, entre los que destaca el tezontle, combinados eon elemen-
tos de argamasa, ladrillo y azulejo. El azulejo se utilizo como
ecubrimiento de cipulas, volviéndose esto un elemento caracte~
tistico de los templos barrocos. Tambien se usé en la decoracién
de fachadas tanto de edificios religiosos como civiles, entre los
«que destacan Ia iglesia de San Francisco Acatepec, la Casa de los
‘Muiiecos, en Puebla, y la Casa de los Condes del Valle de Orizaba
(0 de los Azulejos), en la Ciudad de México.
La bonanza econdmica que se vivio en el siglo XVI propicio el
surgimiento de una arquitectura civil significativa, que si bien
‘en su esquema de organizacién espacial no tuvo modificaciones
sustanciales, en su apariencia y calidad artistica adquitio dimen-
siones palaciegas. Por lo general, estin resueltas en dos niveles:
planta baja con entresuelo y piso principal. La decoracién de las
Figura $8. Casa de lo Condes de Orizaba
(de tos Azuleos), 1586, Cauda de Mexicoperior con un pretil decorado. Caractertstica es la prolongacién de
Jas jambas de los vanos mis allé de los dinteles, hasta la comisas,
estos enmareamientos en ocasiones estin diferenciados del resto
de a fachada por un evidente contraste en materiales y texturas
Piedra con ladrilo,tezontle con aplanado, cantera con azulejo.
Figura 61 Patio interior del Palacio de los Condes
de Santiago de Calimaya, 1777, Cudad de Mesico
Figura $9, Palacio de los Condes de Santiago
do Calimaye, 1777, Cuda de México.
fachadas se realiz6 de muy variadas formas, donde el acceso, y
sobre éste, el vano del salon principal, estin jerarquizados por una
‘mayor decoracién, ya sea mediante jambas ricamente decoradas
‘6 elementos arquiteetonicos omganizados a la manera barroca. Los
niveles estan mareados con elaridad por comisas y en la parte su
Figura 60. Detalles decoratvosen ta fachada
i ‘del Palacio de los Condes de Santiago de Cali-
‘maya, 1777, Cudad de Misico.
80 nrc a la Arguitectura
srFigura 62.Patio interior delaCasade los Con-
der de Heras y Soto, 1780, Cindad de Mexico.
Las construcciones palaciegas se concentran de modo fundamen-
tal en la Ciudad de México; resaltan Ja ya mencionada casa de los
Condes del Valle de Orizaba (0 de los Azulejas) y la Casa de los
Mascarones, ambas realizadas por el arquitecto Lorenzo Rodri-
‘guez, asi como la de los Condes de Calimaya, autoria del arquitee-
{to Francisco Antonio Guerrero y Torres.
La tradicién decorativa del mundo prehispinico y la riqueza
‘ommamental del barroco, dicron por resultado una expresion muy
particular y propia de tierras americanas, y que los estudiosos del
barroco mexicano intentan clasifiear de acuerdo con las caracte~
risticas tipologicas en sus distintos momentos y iambitos geogr-
ficos, Fn este aspecto predomina Ia idea de una clasificacion a
partir de la forma del fuste de las columnas, en la que apareeen
los términos de barroco de estrias moviles, barroco tablereado,
barroco trtéstilo, barroco salomOnico, barroco estipte, ultrabarro~
0, eteétera; sin embargo, es un asunto polémico y encontraremos
diversas opiniones al respecto.
82 Introduccion a la crguitectara
La arquitectura del siglo x1x
La arguitectura del siglo XIX en México tiene dos momentos
significativos. Uno, de escasa actividad en la construccién, que
perdura hasta la década de 1870 y esti relacionado con la corrien-
te estilistica neoclisica, y otro vinculado al periodo histbrico del
porfiriato, entre 1876 y 1910, de intensa actividad edilicia, durante
el cual florece la arquitectura eeléctica.
La arquitectura neoclisiea en México esti unida a la fundacién de
la Academia de las Nobles Artes de San Carlos de la Nueva Espa-
fia en 1785. A partir de su fundacion se establecieron las nuevas
directrices estilisticas en cuanto a la arquitectura, y predominaron
los esquemas clisicos griegos y romanos; se rechaz6 en forma
tajante el estilo barroco. Se convirtié en la difusora del nuevo pen-
samiento arquitectonico en Europa derivado del academicismo,
‘Su papel fie determinante, ya que a partir de 1792 se le concede
la prerrogativa de aprobar los proyectos antes de su construccion,
y solo aceptaba aquellos cuyos disefios correspondian a la nueva
tendeneia,
Fn la arquitectura, el neoclasicismo representa una simplifica-
cidn: las lineas rectas dominan sobre las curvas, existen menos
contrastes de voliimenes y menos adornos. La simetria se gene~
raliza, dinteles y columnas reemplazan los arcos. L.os frontones
tiangulares sustituyen a los circulares, y las balaustradas reapa-
recen sobre los edificios.