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VII Simposio Nacional sobre Taludes y Laderas Inestables Barcelona, 27-30 de


Octubre de

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7 authors, including:

J. M. Azañón José Antonio Peña


University of Granada University of Granada
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M. Teresa Teixidó Rosa Maria Mateos


University of Granada Instituto Geológico y Minero de España
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VII Simposio Nacional sobre Taludes y Laderas Inestables
Barcelona, 27 – 30 de Octubre de 2009
E.Alonso, J. Corominas y M. Hürlimann (Eds.)
CIMNE, Barcelona, 2009

EVALUACIÓN DE LA EFICACIA DE LOS SISTEMAS DE DRENAJE


MEDIANTE TOMOGRAFÍA ELÉCTRICA EN EL DESLIZAMIENTO
DE DIEZMA (GRANADA)

José Miguel AZAÑÓN1,2 José Antonio PEÑA 3, Teresa TEIXIDÓ 3, Rosa María
MATEOS 4, Jesús YESARES 2 , Jorge DELGADO 5,Meaza TSIEGE 6
1
Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (UGR-CSIC), Granada. jazanon@ugr.es
2
Dpto. de Geodinámica. Facultad de Ciencias. Universidad de Granada, C/Fuentenueva s/n. 18071.
Granada. jazanon@ugr.es
3
Instituto Andaluz de Geofísica y Prevención de desastres sísmicos. Universidad de Granada.
pena@ugr.es, teixido@ugr.es
4
1Instituto Geológico y Minero de España. Avda. Ciudad Querétaro s/n. 07007 Palma de
Mallorca. rm.mateos@igme.es
5
Dpto. de Fotogrametría. Facultad de Ciencias. Universidad de Jaén, C/Fuentenueva s/n. 18071.
Granada. jdelgado@ugr.es

6
Dpto. de Geodinámica, Fctad. CC. Geológicas. Universidad Complutense de Madrid,
meaza@geo.ucm.es

RESUMEN

El deslizamiento de Diezma afectó a un volumen superior al millón de m3 de material y


cortó la Autovía A-92 a su paso por el paraje conocido como Cortijo de Rías. El drenaje
de la zona afectada por el deslizamiento fue una de las principales medidas correctoras
para su estabilización. En este trabajo se presentan los resultados de una campaña de
geofísica(radar de subsuelo y tomografía eléctrica) destinada a reconstruir la morfología
en profundidad de la masa deslizada La prospección eléctrica permitió detectar las zonas
que incluían arcillas y limos margosos con valores muy bajos de resistividad (< 100 Ohm)
que fueron interpretadas como zonas saturadas de agua. Así mismo ,está técnica permitió
verificar la eficacia de los pozos drenantes ya que se detecta un incremento de la
resistividad en las proximidades de los pozos interpretados como una pérdida de
humedad de los materiales arcillosos.
INTRODUCCIÓN

La mayor parte de las técnicas geofísicas pueden ser utilizadas para el análisis, estudio
y monitoreo de los procesos hidrogeológicos que afectan al terreno. No obstante, las
técnicas que utilizan los contrastes de conductividad eléctrica son de una extraordinaria
utilidad en la caracterización de procesos superficiales que alcanzan el límite vadoso-
freático. Las inestabilidades de ladera que se enraízan en este nivel suelen estar
condicionadas o desencadenadas por el agua. Aunque la prospección sísmica,
magnetométrica y gravimétrica son eficazmente utilizadas en la investigación de estos
procesos superficiales, es la prospección eléctrica la que está suministrando unos
resultados más significativos. Este tipo de técnicas geofísicas se utilizan para reconstruir
la geometría de los deslizamientos, identificar las superficies de rotura y los límites en
profundidad de la masa deslizada. En los últimos años, las técnicas de tomografía eléctrica
se han empleado para monitorizar flujos de agua en el interior y a la base de la masa
deslizada. En este trabajo se presentan los resultados de la caracterización de la geometría
del deslizamiento de Diezma, una inestabilidad de ladera que movilizó más de 1 millón de
metros cúbicos de material próximos a la A-92. Las técnicas de prospección geofísica que
ponen de manifiesto los contrastes de conductividad del terreno nos han permitido testar la
eficacia de algunas de las medidas de contención, basada en el drenaje del terreno.

EL DESLIZAMIENTO DE DIEZMA

El deslizamiento de Diezma se produjo el 18 de Marzo de 2001 en la ladera de Rías,


afectando al P.K. 272+700 de la Autovía A-92 a su paso por el término municipal de
Diezma (Granada) (Fig. 1).

Fig. 1. Mapa de localización y esquema de unidades tectónicas de la zona de estudio.

El deslizamiento, con unas dimensiones aproximadas en planta de 500 m de longitud y 150

2
m de anchura, y una profundidad variable entre 10 y 30 m, afectó a un volumen superior
al millón de m3 de material.
El plano principal de movimiento tiene su cabecera en la antigua carretera nacional CN-
342 Granada-Murcia (Fig. 2), a su paso por la base del cerro del Centenillo (a 6 Km de
Diezma). El pie del deslizamiento se situó justo en el talud norte de la A-92.

La masa deslizada ocupó el arcén y un carril de la calzada de la Autovía en sentido


Granada-Guadix (Fig. 2). En días posteriores, el movimiento continuó, sobrepasando la
mediana (Oteo Mazo, 2003).

El deslizamiento de Diezma puede considerarse como un movimiento complejo. En su


parte superior, muestra un carácter rotacional múltiple, mientras que en su parte inferior,
dicho movimiento consiste básicamente en un flujo. Diversas lecturas obtenidas de
sondeos con inclinómetros confirman la existencia de múltiples superficies de
deslizamiento a diferentes profundidades. Dichas observaciones, junto con las realizadas
en superficie, permiten interpretar que la superficie de rotura es de tipo rotacional (Fig. 1).
Las zonas más superficiales del terreno estaban altamente saturadas en agua. El carácter
impermeable de esta superficie en forma de cuchara favoreció la inundación del suelo por
debajo del escarpe principal. La expansión lateral sobre esta superficie dio lugar a lóbulos
laterales y oblicuos con grietas de tensión en su cresta. Este movimiento generó
estructuras espectaculares de tipo slickenside sobre una capa relativamente fina. La
inclinación de las los escarpes de cabecera es inferior a 10º. El factor desencadenante de
este deslizamiento (Azañón et al., 2004 y Azañón et al., 2009) fueron las precipitaciones
(lluvia acumulada e intensidad) al igual que ocurre en otros numerosos deslizamientos de
gran importancia (Corominas y Moya, 1999; Van Asch et al., 1999; Irigaray et al., 2000).

Fig. 2. Fotografías del escarpe principal del deslizamiento a la izquierda y el pie de la masa deslizada
invadiendo la Autovía A-92.

CONTEXTO GEOLÓGICO

El área donde se produjo el deslizamiento de Diezma es una banda estructuralmente


compleja, ubicada en el contacto entre materiales correspondientes a los dos dominios
paleogeográficos principales que constituyen las Cordilleras Béticas: las Zonas Internas y
las Zonas Externas (Azañón et al., 2002). En la zona de estudio se reconocen materiales

3
pertenecientes a dos unidades tectónicas del Subbético Interno, denominadas unidades de
Cañamaya y Despeñadero (Balanyá, 1982). La unidad de Despeñadero se sitúa al sur y
cabalga sobre la unidad de Cañamaya. Ambas se incluyen dentro de lo que se ha venido
denominando “Dominio de la Dorsal Bética” (García-Dueñas y Navarro-Vilá, 1980).
Inmediatamente al sur de la Unidad del Despeñadero aflora el complejo Maláguide. Las
unidades maláguides aparecen sobre un sustrato heterogéneo representado al S por el
Complejo Alpujárride. Entre el sustrato Alpujárride y/o Maláguide y la Unidad del
Despeñadero aflora una formación arcillosa con grandes bloques incluidos en su seno. El
tamaño de estos bloques es decamétrico a hectométrico y su litología es diversa
(principalmente calizas y rocas detríticas de diferente granulometría). Es precisamente en
estos materiales donde se localiza el deslizamiento de Diezma.

METODOLOGÍA: TOMOGRAFÍA ELÉCTRICA Y RADAR DEL SUBSUELO EN


EL DESLIZAMIENTO

Con objeto de tener la mayor cantidad de información de subsuelo de la masa deslizada en


Diezma, se realizó un estudio mediante tomografía eléctrica y radar de subsuelo. Estas
técnicas muestran imágenes de subsuelo en las que se ponen de manifiesto las variaciones
en la conductividad eléctrica, pudiéndose correlacionar con las columnas de los sondeos.
Todos los puntos integrados en los perfiles se situaron con GPS de precisión, de manera
que es posible integrar la información de subsuelo obtenida dentro del modelo digital a
partir de los datos de los sondeos inclinométricos.

Mediante Radar de subsuelo se obtuvieron perfiles de menor longitud que se


superpusieron a los perfiles realizados mediante tomografía eléctrica, pudiéndose así
corroborar el resultado obtenido por los mismos. En dichos perfiles se pueden observar
cambios litológicos así como cambios de humedad dentro de las masa deslizada.

Tomografía eléctrica

La tomografía eléctrica es una técnica de investigación no destructiva, orientada a la


obtención de imágenes de resistividad 2D del interior del subsuelo. Para ello se calcula la
resistividad aparente del terreno con un dispositivo compuesto de 4 electrodos; dos que
inyectan corriente (C1 y C2) y dos (P1 y P2) que miden la diferencia de potencial que se
genera. Los electrodos están separados entre sí ciertas distancias predeterminadas.

La resistividad aparente se calcula mediante la expresión:

El lugar al que se refiere la medición se sitúa en el punto medio de los electrodos de


potencial y la profundidad es función de las distancias inter-electródicas. De este modo, al
ir cambiando la situación de los electrodos a lo largo de un perfil, se van obteniendo
sucesivas medidas de resistividad aparente para una profundidad determinada. Si
posteriormente se recorre el mismo perfil con diferente separación de electrodos se

4
obtienen lecturas que corresponden a otro nivel de profundidad.

El procedimiento normal consiste en recorrer el perfil con una separación de electrodos


determinada para obtener lecturas correspondientes a una cierta profundidad y realizar
sucesivas pasadas con diferentes separaciones de electrodos.
Con este dispositivo experimental se obtienen una colección de medidas de pseudo-
resistividad que posteriormente serán convertidas a “resistividades y profundidades
verdaderas” mediante el correspondiente tratamiento de inversión.

Previamente a la adquisición de datos se han materializado los perfiles en el terreno


mediante cintas métricas y se han tomado alrededor de una veintena de puntos de
coordenadas X, Y, Z, con una pareja de GPS bifrecuencia funcionando en modo RTK
(cinemático en tiempo real); como punto origen se ha elegido uno situado 15 cm al SSW
del refuerzo de la alberca situada al N del área de estudio (Fig. 3). Sus coordenadas se han
obtenido por GPS en modo autónomo; mientras que las demás coordenadas son relativas a
este punto. Por ello, en caso de replanteo se podrá usar el mismo punto asignándole las
coordenadas que se calcularon en su momento. El RMS horizontal de los puntos con
respecto al de origen es de unos 2 cm en la horizontal y de unos 8 cm el vertical.

Para la adquisición de datos se ha optado por un dispositivo Wenner clásico, dado que la
información previa disponible sobre el área a investigar permite presuponer que la
disposición de materiales y estructuras es predominantemente paralela a la superficie del
terreno.

Se ha elegido una distancia inter-electródica mínima de 1.5 m, adecuada para alcanzar una
profundidad de unos 18 m con una resolución aceptable en los perfiles situados al N de la
carretera antigua, y 2 m en el S de la misma. Cuando ha sido necesario (perfil
longitudinal) se han prolongado los perfiles mediante el procedimiento “roll-along”, que
permite cubrir distancias superiores a la longitud total del dispositivo con mantenimiento
de la cobertura.
Únicamente los 30 m en cada extremo del perfil quedan con cobertura de un electrodo
cada 3 m (forzado por la geometría y por el modo operatorio del sistema), para el resto del
perfil la disposición es de 1 electrodo cada 1.5 m. Análogamente, en los perfiles con
separación mínima 2 m, quedan 40 m de los extremos de los perfiles con coberturas de 4
m, mientras que los dos segmentos centrales quedan con el espaciado mínimo.

Las tomografías eléctricas han sido tratadas usado el programa Res2dinv (Geotomo
Software Inc.), el cual resuelve el problema inverso reticulando el terreno (unidades de la
malla). A todos los perfiles se le ha añadido la corrección topográfica derivada de los
datos de GPS, por lo que el cálculo se ha realizado aplicando el método de elementos
finitos usando las unidades malla. El proceso iterativo de inversión se ha fijado para un
máximo de 9 iteraciones o un error inferior al 2%.

Radar de subsuelo

El método de prospección usado en este estudio ha sido el de perfiles de reflexión

5
mediante radar de subsuelo (Georadar, GPR). Esta es la modalidad más usual de
adquisición de datos, consiste en desplazar una antena que emite pulsos de energía
electromagnética en la banda de radiofrecuencia. Los pulsos de energía viajan hacia el
interior del terreno en forma de ondas electromagnéticas y, parte de la energía que
transportan se refleja en las superficies de discontinuidad electromagnética encontradas
(originadas por cambios de litología y también por cambios en el contenido en agua dentro
de una misma litología).

Para que estas ondas se reflejen es necesario que exista un contraste notable en un
parámetro denominado constante dieléctrica entre los dos materiales en contacto. Si esto
no ocurre, no hay reflexión; de modo, que puede haber un contacto entre dos materiales de
aspecto radicalmente diferente a simple vista, pero que por tener valores similares de la
constante dieléctrica (parámetro antes aludido) no devuelve energía y son tomados por un
material único. Lo contrario también puede ocurrir: un mismo material puede tener un
distinto valor de constante dieléctrica en función de su contenido en fluidos (agua o
contaminantes líquidos). Para el caso que nos ocupa en el deslizamiento de Diezma, si la
parte superior de un material está seca y hay un cierto contenido en agua a partir de
determinada profundidad, dicho contacto, eventualmente, puede ser detectado de manera
clara.

La profundidad de penetración y la resolución dependen de las características del terreno y


de la antena utilizada. La profundidad disminuye al aumentar la conductividad del terreno;
también lo hace al aumentar la frecuencia central de la antena. Si se emplean antenas de
mayor frecuencia se obtiene más resolución y menor profundidad de penetración, y a la
inversa al disminuir la frecuencia.

La toma de datos se ha realizado a lo largo de una línea coincidente con el perfil


longitudinal PL-1 de tomografía eléctrica. La antena multifrecuencia se ha ajustado para
trabajar en la banda de 20 MHz; en teoría suficiente para alcanzar profundidades del orden
de 40 m, adecuadas al objetivo de la investigación.

Para este rango de frecuencias (20 MHz), el tratamiento de datos GPR es similar al
tratamiento de post-apilamiento (post-stack) de una sección sísmica. En el esquema
siguiente se muestra el flujo de tratamiento aplicado y su resultado sobre el conjunto de
datos.

RESULTADOS DE LA PROSPECCIÓN GEOFÍSICA

La campaña se diseñó para la obtención de un perfil longitudinal en la parte superior del


deslizamiento y cuatro perfiles transversales que nos pudieran dar la geometría en 3D del
deslizamiento (Fig. 3). A continuación se describen los resultados obtenidos en los cinco
perfiles.

6
Figura 3. Situación de los perfiles realizados en el deslizamiento.

El perfil PL-1 fue el seleccionado para combinar las metodologías de tomografía eléctrica
y de radar de subsuelo. Este perfil se inicia en la base de la alberca (origen del sistema de
coordenadas) y se extiende, en dirección SSE, a lo largo de 180 m de distancia topográfica
hasta alcanzar casi la carretera (Fig.4).

7
Figura 4. Perfil PL-1 en el que se combinaron las técnicas de tomografía eléctrica y radar.

Entre los 5.5 m y los 59.5 m del perfil y coincidiendo con éste, se obtuvo también la
sección con rádar del subsuelo (20 MHz). De forma que ambos resultados se discuten
conjuntamente (Fig. 4).

El campo de resistividades obtenido se ha interpretado teniendo en cuenta que las


litologías predominantes en la zona de estudio se componen de arcillas, limos y arenas.
Así, las bajas resistividades se han identificado con arcillas, las resistividades intermedias
a fracciones más limosas, y las altas resistividades indicarían arenas secas, conglomerados
o rocas carbonáticas.

Evidentemente, esta clasificación se ve afectada por el grado de humedad del material. El


contacto con el Maláguide se sitúa en la parte más profunda del perfil, sobre el valor de 20
Ω.m (marcado en amarillo), a partir del cual se produce un notable aumento del gradiente
de resistividad. Este contacto también se pone de manifiesto a partir de la superposición de
la sección radar con el campo resistivo coincidente, en donde el gradiente resistivo se
corresponde con la capa reflectora profunda.

El Perfil transversal PT-2 se ha desarrollado de E a W hacia la mitad del perfil


longitudinal (Fig. 5). Tiene una longitud de 120 m de distancia topográfica, con una
separación mínima de electrodos de 1.5 m. A los 72.5 m lineales se cruza con el perfil PL-
1 (en los 92 m de éste). Para este perfil, se ha utilizado la misma escala de resistividades
que en el perfil anterior. Como rasgo más significativo destacar un sector con arcillas más
plásticas/húmedas (?) en la zona central que tiende a acuñarse hacia el extremo W. En este
caso, el contacto con el Maláguide se ha detectado a partir de los 60 m lineales y hacia el

8
final del perfil, y también vendría delimitado por la isolinea de 20 Ω.m (en amarillo) de la
parte inferior del perfil (Fig. 5).

Figura 5. Perfiles PT-2 y PT-3 realizados por tomografía eléctrica.

Realizado en la misma dirección que el perfil PT-2 (de E a W), cruzando hacia el tercio
inferior del perfil longitudinal PL-1.A los 44.5 m lineales se cruza con el perfil PL-1
(coincidiendo con los 126.25 m de éste).
Se ha usado la misma geometría que en el perfil anterior, con su correspondiente
corrección topográfica. Y el campo de resistividades obtenido ha sido tratado con la
misma interpretación geoeléctrica.
Al igual que en su homólogo superior (PT-2) este perfil muestra una zona central más
arcillosa (probablemente de arcillas húmedas); mientras que los materiales laterales se
caracterizan por un aumento resistivo, que podría atribuirse a una fracción más limosa. La
isolinea inferior de 20 Ω.m (en amarillo) describiría el contacto con el Maláguides (Fig.
5).

El Perfil PT-4 (Fig. 6) se realizó en la zona intermedia limitada por las dos carreteras
secundarias (Fig. 3). Tiene 160 m de longitud y se extiende de E a W. En este caso la
distancia mínima interelectródica fue de 2 m, a fin de obtener una mayor profundidad de
investigación.

Para este sector se ha usado la misma escala cromática de resistividades, detectándose un


aumento generalizado de la resistividad en la zona central. Lo cual se ha correlacionado
con una disminución de la presencia de arcillas, que en este caso quedan restringidas a
pequeños lentejones dispersos y distribuidos en los primeros metros del subsuelo. La
información geológica disponible en esta zona intermedia (sondeos Nº 14, D-4 y D-5)
establece que el contacto con el Maláguide se realiza a los 12.3 m de profundidad entre los
60-70 m lineales y a 2.2 m hacia el final del perfil. Con estos datos la correlación del
contacto vendría marcada por la isolinea de 40 Ω.m (inicio del verde oscuro).

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Figura 6. Perfiles PT-4. La escala de resistividades puede consultarse en la Figura 6.

El perfil PT-5 (Fig. 7) se realizó encima del frente inferior de deslizamiento, posee 160 m
de longitud y transcurre en dirección E-W. Tanto el espaciado mínimo entre electrodos
como la configuración geométrica han sido los mismos que en el anterior perfil.
Este perfil muestra un campo de resistividades caracterizado por un primer nivel (suelo)
irregular y una zona media más arcillosa que va aumentando de resistividad hacia el
extremo final (debajo del sector boscoso) (Fig. 3). En su parte inferior, el gradiente de
resistividades es tal que las isolineas de 20 y 40 Ω.m distan poco entre sí. Este dato,
correlacionado con la información del sondeo Nº 2 que dista unos 10 m hacia el Sur
(proyección perpendicular), permite establecer que la superficie de despegue podría
situarse entre dichas isolineas.

Figura 7. Perfiles PT-5. La escala de resistividades puede consultarse en la Figura 6.

CONCLUSIONES

La prospección geofísica realizada sobre el deslizamiento de Diezma (Granada) con los


métodos de tomografía eléctrica y radar de subsuelo ha permitido concluir los siguientes
puntos:
• Los perfiles eléctricos han permitido establecer las zonas de mayor contenido en
arcillas del terreno, que han venido caracterizadas por resistividades inferiores a
20 Ω.m. Por debajo de este valor, el grado de disminución está ligado a una
mayor plasticidad de la arcilla y/o a un mayor grado de humedad.

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• El contacto de la masa deslizada con el substrato, constituido por el Complejo
Maláguide, ha podido determinarse apoyándose en la información geológica, de
manera que en la zona Norte estaría definido por la isolinea de 20 Ω.m. Mientras
que en la zona Centro (terreno comprendido entre las dos carreteras secundarias)
este límite lo marcaría la isolinea de 40 Ω.m. Cabe mencionar que el subsuelo
investigado en este segundo sector viene caracterizado por un ligero aumento
resistivo. En el tramo Sur se ha encontrado un límite significativo marcado por
las isolineas entre 20-40 Ω.m, pero no se ha podido discriminar si se trata de una
superficie deslizante y/o del contacto con el Maláguide.
• La inspección realizada con radar del subsuelo ha sido coincidente con una
porción del perfil longitudinal de la zona Norte y también ha puesto de
manifiesto el contacto de los materiales de derrubio con el Maláguides. Sin
embargo, se ha observado que algunos cambios litológicos como transición
arcillas-limos quedan mejor resueltos por la tomografía eléctrica.
• Como puede apreciarse en la figura 8, en la parte más septentrional del
deslizamiento de Diezma la masa deslizada presenta una menor potencia. Esta
zona está situada por encima del escarpe principal y la cuantía del movimiento
fue muy inferior. Sin embargo, el terreno muestra valores de resistividad más
bajos que pueden interpretarse en términos de mayor humedad del terreno. La
corona de pozos realizada para drenar la parte inferior de esta zona parece una
medida correctora muy adecuada a la vista de los resultados de la tomografía
eléctrica. Por tanto, la tomografía eléctrica es un método muy apropiado para la
caracterización del grado de humedad del terreno. Ejemplo de ello puede
observarse en el cambio de resistividad hacia valores más altos que se observa al
extremo Sur del perfil PL-1, en su parte central. Dicho cambio, puede atribuirse
más al efecto de desecación originado por el drenaje de los pozos
“californianos” (Fig. 4) que a una variación de la composición de las arcillas
(fracción más limosa).

Figura 8. Perfiles PL-1 y PT-2, PT-3 de la parte septentrional del deslizamiento de Diezma en el que se
aprecia el efecto de desecación de los pozos californianos del extremo meridional del perfil PL-1 (cuadro azul).

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AGRADECIMIENTOS

Este trabajo ha sido realizado gracias a los proyectos TOPOIBERIA CONSOLIDER-


INGENIO2010 CSD2006-00041, a los proyectos del Plan Nacinal I+D+I CGL2004-
03333/BTE y CGL2008-03249/BTE y a un contrato entre la Consejería de Obras Públicas
(Junta de Andalucía) y la Universidad de Granada.

REFERENCIAS

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movements in the SE Spain, 1st Assamblage of European Geosciences Union (E.G.U.), Nice.
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Cordillera and Balearic Island. En: W. Gibbons y T. Moreno (Editores), The Geology of Spain.
The Geological Society, London, pp. 401-416.
Azañón, J.M., Azor, A., Yesares, J., Tsiege, M., Mateos, R., Nieto, F., Delgado, J., López-Chicano,
M., Martín1, W., Rodríguez-Fernández, J., 2009. Regional-scale high-plasticity clay-bearing
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Balanyá, J.C., 1982. Las unidades de la zona de escamas Despeñadero-Cañamaya y su relación
estructural con la Zona Bética y el Subbético Interno (Cordilleras Béticas Centrales). Tesis de
Licenciatura, Universidad de Granada, Granada, 90 pp.
Corominas, J. y Moya, J., 1999. Reconstructing recent landslide activity in relation to rainfall in the
Llobregat River basin, Eastern Pyrenees, Spain. Geomorphology, 30, 79-93.
García-Dueñas, V. y Navarro-Vilá, F., 1980. Mapa Geológico de España E. 1:50.000. La Peza.
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Irigaray, C., Lamas, F., Hamdouni, R.E., Fernández, T. y Chacón, J., 2000. The importance of the
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Van Asch, T.W.J., Buma, J. y Van Beek, L.P.H., 1999. A view on some hydrological
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