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u```Las capacidades de los grandes cerebros```

• Asociaciones.
• Inteligencia Irradiante.
• Producción.
» ¿Cómo usar la gama completa de nuestras habilidades mentales?
» ¿Qué es cartografía mental?
» ¿Cómo debemos usar nuestra capacidad de pensamiento? (Poder del pensamiento)
» ¿Cómo se potencia?
» ¿Cómo se logra el acto de recordar?
» ¿Cómo ha evolucionado la inteligencia humana?
¿Cómo puedo mejorar mi trabajo?
Alfabeto emocional.
Asociaciones

La corteza asociativa y sus funciones:


Denominamos corteza asociativa a la parte de la
corteza cerebral (la parte más externa y visible
del encéfalo) encargada principalmente de
asociar y vincular entre sí las diferentes
informaciones procedentes de regiones
cerebrales encargadas de los diversos sentidos
o de poseer los programas necesarios para la
realización del movimiento.
1. Corteza asociativa unimodal
El córtex de asociación unimodal es el que se encarga de procesar la información
proveniente de un único sentido o de cara a realizar una única función (como el
movimiento). Se trata de aquellas áreas que se vinculan al procesamiento e integración
de información sensorial o motora. Permiten entre otras cosas el reconocimiento e
interpretación de los estímulos.
2. Corteza asociativa multimodal
Este tipo de corteza se encarga de integrar las informaciones de diferentes modalidades
sensoriales, permitiendo la interpretación del entorno y la planificación y ejecución de
operaciones mentales o conductas.
3. Corteza asociativa supramodal
Este tipo de corteza asociativa se diferencia de las anteriores por el hecho de que no
trabaja directamente información de ninguna modalidad sensorial, si no que se vincula a
aspectos cognitivos. A menudo se considera multimodal.
Pensamiento Irradiante
Una de las bases de nuestro cerebro que inspira el concepto de los “mapas mentales”
es el llamado “Pensamiento Irradiante”. Se trata de la forma natural y automática de
trabajar de la mente humana. Cada una de las ochenta mil millones de neuronas que
forman nuestro cerebro funciona como un potente microprocesador y transmisor de
datos. Del mismo modo que cada neurona se ramifica y establece conexiones con las
que le rodean, nuestro cerebro irradia líneas de pensamiento que se expanden desde el
centro hacia la periferia, encadenando unas ideas con otras. La cantidad de información
que percibimos es tan grande que el cerebro debe procesarla y codificarla, y lo hace
usando principalmente asociaciones e imágenes.
Las asociaciones conectan unas ideas con otras y las imágenes las dotan del énfasis
necesario para que sean más fáciles de recordar. Así es como aprendemos y podemos
recurrir a la enorme base de datos que tenemos en nuestro cerebro, para acceder a
contenidos aprendidos o para usarlos de cara a crear otros nuevos.
DIBUJAR EJEMPLO DE SIGMUN FREUD
Plasticidad neuronal
"La plasticidad cerebral se refiere a la capacidad del sistema nervioso para cambiar su
estructura y su funcionamiento a lo largo de su vida, como reacción a la diversidad del
entorno. Aunque este término se utiliza hoy día en psicología y neurociencia, no es fácil
de definir. Se utiliza para referirse a la los cambios que se dan a diferentes niveles en el
sistema nervioso: Estructuras moleculares, cambios en la expresión genética y
comportamiento.”
¿Qué es cartografía mental?
También conocidos como “Mapa mental”, es un esquema visual que reúne lo mejor de
los mundos del lenguaje y las imágenes. Podría llamarse algo así como un navegador
visual, que contiene en medida proporcional las ideas clave y dibujos, en un contexto
espacial.
¿Cómo debemos usar nuestra capacidad de pensamiento?
Recordamos lo verdaderamente importante, lo que es capaz de emocionarnos, porque
activa en nosotros las regiones cerebrales y las hormonas que ayudarán a guardar ese
recuerdo. Un sabio mecanismo al que podemos ayudar si escuchamos a la neurociencia.
¿Cómo se potencia el pensamiento?
La comprensión de significados se potencia a través de la adquisición de la habilidad de
la lectura, la expresión del significado se desarrolla mediante la habilidad de la escritura.
El origen del pensamiento es el habla y el pensamiento organizado surge por el
razonamiento. Una tarea importante consiste en concientizar, sensibilizar y preparar a
los facilitadores para que a su vez puedan enseñar a los alumnos a distinguir un
pensamiento confuso de un pensamiento eficaz, un razonamiento correcto de uno
incorrecto.
La meta fundamental de la educación es enseñar a la gente a pensar, y para estimular y
mejorar el pensamiento en el aula es necesario estimular el lenguaje y realizar progresos
en los procesos de razonamiento.
El pensamiento es un proceso propio de cada persona, y está determinado por los
ambientes externo e interno que la rodea. Lo anterior lleva a considerar algunos aspectos
como elementos clave para la formulación de programas orientados hacia el desarrollo
de habilidades para pensar.
1. Gran parte del pensamiento ocurre en la etapa de la percepción.
2. La manera como las personas ven el mundo que les rodea está condicionada por sus
experiencias previas, sus conocimientos y sus emociones.
3. El pensamiento está determinado por la perspectiva particular de cada persona.
4. El ser humano tiende en forma natural, a dejarse llevar por sus emociones antes de
utilizar la razón para guiar y equilibrar sus pensamientos.
El desarrollo del pensamiento y el aprendizaje son integrales.
Contemplan la adquisición de los conocimientos y el logro de las facultades, la
disposición, las actitudes y los valores requeridos por las personas para realizar
exitosamente gran variedad de actividades y para actuar en una diversidad de ambientes
y circunstancias.
Mediante el desarrollo del pensamiento es posible ampliar, clarificar, organizar y
reorganizar la percepción y la experiencia, lograr visiones más claras de los problemas,
situaciones, dirigir deliberadamente la atención, regular el uso de la razón y la emoción,
desarrollar sistemas y esquemas para procesar información, desarrollar modelos y
estilos propios de procesamiento, aprender en forma autónoma, tratar la novedad,
supervisar y mejorar la calidad del pensamiento.
Recordamos lo verdaderamente importante, lo que es capaz de emocionarnos, porque
activa en nosotros las regiones cerebrales y las hormonas que ayudarán a guardar ese
recuerdo. Un sabio mecanismo al que podemos ayudar si escuchamos a la
neurociencia.
¿Cómo se logra el acto de recordar?
Recordamos lo verdaderamente importante, lo que es capaz de emocionarnos, porque
activa en nosotros las regiones cerebrales y las hormonas que ayudarán a guardar ese
recuerdo. Un sabio mecanismo al que podemos ayudar si escuchamos a la neurociencia.
En cierta ocasión, alguien preguntó a Albert Einstein qué es lo que hacía cuando tenía
una idea nueva, si la apuntaba en un papel o en un cuaderno especial. Al parecer, el
sabio contestó con contundencia: “Cuando tengo una idea nueva, no se me olvida”. Nada
más cierto: cuando algo nos emociona tanto como una idea nueva e interesante, es casi
imposible olvidarla. Lo que nos emociona no se olvida, y no importa que sean alegrías o
disgustos. El cerebro retiene esas situaciones porque la emoción que las acompaña
activa las regiones implicadas en la formación de las memorias, como el hipocampo y la
corteza cerebral. Además, la liberación de hormonas como la adrenalina contribuye a
reforzar la memoria de las situaciones emocionales. Y como lo que nos emociona son
las cosas importantes, las emociones sirven para que solo lo importante se registre en la
memoria.
Si estudiamos bajo los efectos de una sustancia estimulante como la cafeína, por
ejemplo, suele ocurrir que la mejor manera de recordar lo aprendido es volver a la misma
situación, es decir, bajo los efectos de la misma sustancia. Si no, podemos quedarnos
en blanco en el examen. En este caso, el olvido, más que en una pérdida de memoria,
consiste en la incapacidad de acceder a la misma. Por eso solemos recordar más tarde
lo que no podíamos evocar en el momento de la prueba.
Además, el recuerdo puede depender también del contexto ambiental en que nos
hallamos, como cuando no reconocemos a una persona si la vemos en un lugar diferente
al de donde solemos encontrarla, o cuando no recordamos lo que hemos ido a buscar a
la cocina y necesitamos volver al comedor para acceder a la memoria. La mejor manera
de facilitar el recuerdo consiste, entonces, en situarnos en un contexto orgánico y
ambiental lo más parecido posible al original, cuando adquirimos la información.
Entonces, ¿cómo aprendemos para no olvidar? Las propiedades de las memorias que
se forman durante el aprendizaje y su posterior recuerdo dependen de la estrategia
mental utilizada para generarlas. Algunas son hábitos, memorias inconscientes, precisas
y rígidas, como la de saber nadar, escribir sin faltas, hablar una lengua extranjera o el
cálculo mental rutinario. En estos casos, la práctica repetida es lo mejor para adquirir la
destreza y perfección que buscamos.
¿Cómo ha evolucionado la inteligencia humana?
La mayor parte de los seres vivos son capaces de realizar acciones que pueden ser
consideradas inteligentes o al menos el resultado de un proceso de reacción adecuado
ante las circunstancias cambiantes de su medio ambiente. Sin embargo, la inteligencia
o los procesos intelectuales que desarrollan los seres humanos son enormemente
superiores a los que logran los organismos de cualquier otra especie. El cerebro humano
adulto es un órgano sumamente complejo: pesa aproximadamente 1.500 g, lo que
representa solo el 2% del peso corporal pero consume igual cantidad de energía que
todo el músculo esquelético en reposo. Aunque el cerebro humano presenta una
estructura típicamente primate, revela algunas características que lo distinguen y lo
individualizan plenamente.
El proceso de evolución y humanización del cerebro del Homo sapiens (H. sapiens) lo
convirtió en un órgano único y diferente, alcanzando el mayor tamaño relativo entre todas
las especies, pero además le permitió una reorganización estructural de tejidos y circuitos
en segmentos y regiones específicas. Esto explica las notables capacidades cognitivas
del hombre moderno, en comparación no solo con otros miembros de su género, sino
con otros miembros más antiguos de su propia especie.
La evolución del cerebro requirió la coexistencia de 2 mecanismos de adaptación. El
primero involucra cambios genéticos que ocurren a nivel de especies y el segundo ocurre
a nivel individual e involucra cambios en la organización de la cromatina o cambios
epigenéticos. Entre los mecanismos genéticos se encuentran: a) cambios en regiones
genéticas codificantes que conducen a cambios en la secuencia y actividad de proteínas
existentes; b) los procesos de duplicación y deleción de genes previamente existentes;
c) cambios en la expresión génica a través de modificaciones en las secuencias
reguladoras de diferentes genes, y d) síntesis de ARNs no codificantes.

Finalmente, en esta revisión se describen algunas de las más importantes diferencias


cromosómicas reportadas entre humanos y grandes simios, que también han contribuido
al proceso de evolución y humanización del cerebro del H. sapiens.
Alfabeto emocional

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