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¿Consanguinidad o Cruza?

Consanguinidad en las palomas.

Los principios de la consanguinidad se aplican algo diferente en las palomas comparados con el
método que se usa en otros animales incluidas las aves de corral. En el caso de las palomas, las
ninfas, los canarios etc., los polluelos se producen de parejas, mientras que, por supuesto, con
los caballos, el ganado, los perros, los conejos etc. no, un perro macho puede ser apareado a
una serie de hembras dentro de un espacio comparativamente corto de tiempo, y en las aves de
corral un gallo se desempeña con un número de gallinas en un gallinero.

El objetivo de la consanguinidad es el producir las buenas características de las palomas que se


están utilizando, y evitar, las imperfecciones o las debilidades constitucionales, hasta donde sea
humanamente posible.

Por la mala consanguinidad uno puede con igual facilidad componer las imperfecciones como en
la buena consanguinidad uno puede fijar las características deseables. Así pues se puede decir
que la consanguinidad es una navaja de doble filo, y es esencial utilizar un filo de la navaja
solamente, una habilidad no difícil de realizar si el colombófilo usa el sentido común.

Selección y eliminación.

La regla de oro de la consanguinidad se puede expresar en dos palabras selección y


eliminación: La selección de compañeros adecuados según lo indicado por el físico (aspecto) y el
pedigrí; y la eliminación despiadada de cualquier paloma que por cualquier razón o defecto no
califique.

El resultado del plan de la consanguinidad “le dará a usted satisfacción o decepción según sea la
calidad de las palomas usadas en el equipo de reproductoras en cada temporada de crianza, y
esto es la calidad de las palomas apareadas y su compatibilidad la una para la otra como
compañeras, evaluadas por ambas cosas el aspecto y el pedigrí.

La consanguinidad cerrada nunca debe practicarse al menos que el colombófilo este convencido
que las palomas que él utiliza tienen las cualidades que el desea fijar en su familia; y él debe
determinar sus méritos no solamente en su aspecto, si no en su conocimiento de la apariencia
de los antepasados.

En la crianza de ganado el pedigrí es casi tan importante como las características externas.
Todas las familias tienen sus buenos puntos y sus malos puntos. Las mejores familias tienen
pocas imperfecciones; las familias peores tienen la mayoría de las imperfecciones. No estoy
interesado en las familias peores.

Al poner las bases o cimientos de una raza o familia es deseable comenzar con algunas parejas
de palomas de la mejor calidad posible, y que éstas tengan pocos defectos y obviamente que
tengan características satisfactorias. No necesariamente necesitan ser ejemplares que hayan
ganado grandes premios y compradas caras, sino que deben ser por lo menos palomas como a
las que nosotros los colombófilos describimos como buenos animales reproductores confiables,
que posean todos los puntos deseables de la casta y pocos puntos malos, puntos de los cuales
ellas tendrán algunos, porque yo nunca he visto paloma o animal perfecto.

Pero las debilidades solamente deben estar en puntos de menor importancia; las imperfecciones
o defectos importantes no deben ser tolerados. La moraleja es comprar las mejores palomas que
usted pueda al principio y tener pocas parejas pero realmente buenas en vez de muchas parejas
pero de calidad inferior.

La fabricación de un pastel.

A continuación la anécdota del pastel que se puede poner como ejemplo para la crianza de
palomas.Si un ama de casa tiene que hacer un pastel ella debe tener los ingredientes correctos
o el pastel no será un buen pastel. Más que eso: ella debe mezclar esos ingredientes
correctamente, y esa mezcla para hacer el pastel es igual de importante a la que se debe aplicar
en los conocimientos de un criadero.

Los buenos ingredientes en nuestro pastel son las palomas con las cuales comenzaremos. La
mezcla es la selección con destreza de los compañeros, y con el transcurso del tiempo
tendremos una raza que críe palomas ganadoras con regularidad. Pero en nuestra mezcla del
pastel habrá algunos ingredientes que no queremos en nuestro pastel ya terminado. Pero uno
puede eliminar éstos por medio de la consanguinidad, ligada a una estricta eliminación. En las
primeras etapas del plan para la realización de la consanguinidad aparecerán pichones que
exhibirán deterioros, y ellos serán inferiores a sus padres. Los deterioros son defectos de la
familia que no necesariamente se ven en los padres pero que ellos los llevan ocultamente. Es
debido al aspecto de tales pichones como estos en las primeras fases de la consanguinidad que
la consanguinidad a menudo es criticada como práctica, mientras que debería ser elogiada por
esta misma razón. Si los padres no hubieran sido relacionados entre si los defectos pudieran
haber seguido siendo latentes indefinidamente, mientras que ahora se han vuelto leves y
pueden ser eliminados.

Los pichones que el colombófilo pondrá a criar serán los que exhiban las mejores cualidades de
la familia y los que serán eliminados son los que presenten las peores características de la
familia. La consanguinidad ha traído lo no deseado a la superficie. Continúe con este proceso de
segregación, y a su debido tiempo usted tendrá palomas que prácticamente no lleven ningún
defecto oculto y que sean de buen aspecto, y que, por lo tanto, sean capaces de criar progenie
de clase superior. Que sean de hecho como lo que parecen, ejemplares reproductoras, a
diferencia de una paloma que se mira igual de buena, pero que es inferior como reproductora
porque lleva serios deterioros latentes. Un ejemplar tal como este es el resultado de las
frecuentes cruzas. Para ponerlo simple y breve, la consanguinidad produce palomas que son
homocigóticas para sus propias buenas características, y la cruza mas a menudo que no
produce palomas que son heterocigóticas.

La consanguinidad no crea.

La consanguinidad en sí no introduce nada. No implanta buenos puntos o malos. Únicamente


forja lo mejor de lo que ya está allí. Por lo tanto la necesidad de tener todos los buenos puntos
(los ingredientes del pastel) a su disposición, con el propósito de condensarlos todos dentro
eventualmente. Las mejores palomas que usted críe. El ejemplar que los tenga todos, y que no
tenga ni siquiera cerca ninguno de los defectos en ninguna de las materias, es uno de esos
individuos excepcionales el cual llegue a ser famoso.

El hacer consanguinidad con palomas de mala calidad llevaría a la producción de una raza o
familia de calidad inferior, aunque las palomas criadas todas serán de un mismo tipo en general
debido al efecto de la consanguinidad. Una consanguinidad acertada produce palomas que
todas tengan una semejanza a la familia, pero son de alta calidad, no mediocres.

Más adelante en este artículo les daré ejemplos de ganaderos que han alcanzado un éxito
excepcional sin la introducción de cruzas en lo absoluto; y hay algunos otros que dicen que las
cruzas no son necesarias. Con lo tanto que me gusta la consanguinidad, no estoy totalmente de
acuerdo sobre esta opinión, y no creo que nadie deba introducir nunca una paloma sin relación a
su criadero, a pesar de los riesgos acompañantes de la cruza. La necesidad puede presentarse
si el colombófilo tiene alguna deficiencia de la buena calidad en las palomas con los cuales él
comenzó a construir una familia. En mi propia experiencia, a pesar de la eliminación despiadada
y la selección meticulosa, puede haber veces que uno como colombófilo estando practicando la
consanguinidad noté que ciertos defectos se están viendo con algo de frecuencia en los
pichones. Esto no sucede siempre, pero es una ocurrencia de la cual nos tenemos que ocupar
cuando pase. Y el único método es traer la cruza de la manera que describiré en, “La cruza”.

Grado de relación (parentesco).

Cuando practico la consanguinidad, no me preocupo si la relación entre las dos palomas que
formen una pareja es cercana o lejana porque se que las dos palomas son las apropiadas como
compañeras. No crío deliberadamente con palomas estrechamente relacionadas porque sean
estrechamente relacionadas; Prefiero una relación algo más distante si puedo alcanzar mi
objetivo.

De hecho, después de algunas temporadas con una consanguinidad habilidosa uno puede estar
seguro de la alta calidad del pedigrí de cada paloma en el palomar de cría, y estar seguro de que
no hay defectos o características latentes no deseables, cuando se alcanza este punto el pedigrí
casi (no enteramente) es ignorado y las compañeras se seleccionan solamente por el análisis de
cualidades visibles.

A menudo me preguntan si hay alguna relación particular de las palomas al aparearlas la cuál me
guste mas, siempre que las dos palomas que se aparearán satisfagan en lo que concierne a su
aspecto. Puedo contestar solamente a esto de una manera general, como será entendido debido
a lo que he dicho en el último párrafo.

Me gusta juntar tío con sobrina, tía con sobrino, primos, padre con hija, madre con hijo, abuelo
con nieta, abuela con nieto. Me gusta aparear particularmente medio hermano con media
hermana cuando el padre de ambos es un palomo con mérito excepcional. Nunca apareo
hermano con hermana a menos que los dos hermanos sean excepcionalmente de alta calidad.
Los descendientes del hermano con la hermana pueden solamente tener en su composición
genética las características semejantes de los dos padres, y usted probablemente no produzca
de tal apareamiento una paloma mejor que cualquiera de sus padres.

Por otra parte, una paloma criada de padre con hija, por ejemplo, puede tener una dosis doble de
alguna cualidad particular deseable llevada por el padre, como les explicaré completamente más
delante. La consanguinidad implica que el colombófilo deba concentrarse en la mejora de una
característica a la vez hasta que él haya cubierto todos los puntos y produzca ejemplares que se
aproximen a la perfección. Y les diré como lograr esto: Intensifiqué la restructuración poco a
poco.

¡Mi experiencia es que usted no podrá alcanzar cierto punto rápidamente si usted intenta hacerlo
todo a la vez, el consejo es que usted podrá lograrlo mas bien si hace un progreso lento y seguro
haciendo un poco a la vez, y esto, yo sé, que es la experiencia de los mas hábiles colombófilos!

Asumiendo que este consejo fuera adoptado significaría que el producir palomas reproductoras
de la más alta calidad sería un proceso muy largo que a nadie le gustaría, por eso le digo lo
siguiente:

Pienso que el tratar con una característica apropiadamente a la vez no significa que se deba
llevar a cabo exactamente al pie de la letra. La experiencia me ha enseñado que si la
consanguinidad se maneja hábil y sistemáticamente, uno puede, temporada tras temporada,
mejorar todas las características. Si un colombófilo se concentrara en una cualidad particular
descuidando todas las otras, llevaría obviamente muchos años para producir ejemplares buenos
en todos los puntos. Y sé que en la consanguinidad realmente se debe tratar solo una
característica a la vez, por eso es necesario que cuando seleccionemos las compañeras y
formulemos un plan de crianza le demos prioridad a esa característica de la cual la familia o raza
es más débil. Más delante les explicare todo esto.

Es necesaria mucha paciencia.

Muchos colombófilos jóvenes tienen demasiada prisa por criar muchas palomas ganadoras.
Anticipan el establecimiento de una familia de mérito diremos dentro un par de temporadas.
Mientras que quizás criaran algunas ganadoras en sus comienzos, ellos no deben esperar tener
su propia raza o familia capaz de producir muchas palomas ganadoras, y casi cada paloma que
crían es un potencial padre o madre de ganadoras, hasta que tres o cuatro temporadas han
pasado. Ellos Deben tener paciencia. Ellos deben ser cuidadosos y hábilmente edificar lo que
ellos visualizaron cuando comenzaron. Entonces a su debido tiempo tendrán su recompensa.

Como tesis general, yo diría que el periodo de tiempo que toma para alcanzar el objetivo es
gobernado por dos factores iguales de importantes, la calidad de la fundación del criadero, y la
capacidad demostrada por el colombófilo en la selección y la eliminación. Hay opiniones
divididas en cuanto a cual paloma de la pareja es más importante, el macho o la hembra. Mi
opinión es que casi son de igual importancia, pero si tengo que inclinarme por una de ellas me
voy por la hembra, aunque según la enseñanza genética, un sexo no tiene más poder sobre la
calidad del descendiente que el otro sexo.

¿Entonces por qué tengo preferencia por la hembra como fuerza para la cría? ¿Soy ilógico?
Intentaré analizar mi propio pensamiento en esta materia. La hembra es, por decirlo así, la tierra
de la cual nace la planta (nuestros pichones). Y la fuerza de la planta es gobernada en gran parte
por la calidad de la tierra de la cual brota. Para continuar con la analogía, si la hembra es fuerte y
vigorosa con ella hereda las buenas características desarrolladas al máximo (en fin, ella es tierra
buena) que deriva automáticamente que sus pichones tendrán tales constituciones, y que las
buenas cualidades que han heredado se desarrollaran al mas completo grado posible.

Reflexionando en este ángulo del tema tiene que ser apreciado que los buenos puntos
heredados no se demuestran siempre en una paloma o un animal completamente como lo harían
si no hubiera desarrollo deteriorado, y en este contexto no me estoy refiriendo a ese desarrollo
deteriorado obvio debido a la enfermedad o desnutrición, sino a la misma circunstancia en un
grado mucho menor atribuible a una consecuencia prenatal o debilidad congénita en una
condición similar en la madre.

Esto no es un dogma, es teoría, pero es apoyado por mi observación de muchos criaderos de


palomas en 45 años o mas que he sido aficionado de las palomas. Frecuentemente he
observado que un colombófilo que tiene hembras inferiores a sus machos progresa poco,
mientras que he visto colombófilos que han alcanzado el máximo éxito cuando sus machos
reproductores son de un poco menos calidad que las hembras.

A este respecto, he notado a menudo un gran error por parte de algunos colombófilos. Van y
compran un macho de clase superior probablemente en las subastas, y después, en otra
subasta, intentan comprar una hembra buena que le vaya al macho para aparearla con él. Muy
seguido Las hembras no son tan buenas como los machos, y los pichones que crían son
decepcionantes.

Palomas de la fundación.

Algunas veces descubrimos que somos el dueño de una paloma que es excepcionalmente
prepotente. Para la ilustración asumiremos que es un macho. Puede que no sea uno de nuestros
grandes campeones. Puede ser inferior en presentación o cualidades volando que su hermano,
pero cría pichones con cualidades sobresalientes. De hecho, es un ejemplar el cual todas las
buenas características de su familia están reunidas y no tiene ningún defecto visible u oculto. Es
totalmente homocigótico para todo lo que es bueno en la casta de la cual él desciende. Incluso
cuando está apareado con hembras inferiores, engendra buenos pichones, aunque nunca
debería tener una hembra de calidad inferior como compañera por esta razón: Los pichones
criados de este valioso macho y la hembra comparativamente pobre en calidad, aunque puede
que sean buenos voladores, no se espera que sean buenos reproductores debido a la influencia
inevitable de la madre en su constitución genética. Ahora éste es el palomo prepotente, que
probablemente nunca críe un pichón que nos decepcione, a este es al qué de verdad podemos
llamar padre de la fundación. Una vez que el colombófilo descubra que tiene un palomo valioso,
que solo se encuentran en un porcentaje de uno-en-quinientos, el padre fundador (puede ser una
madre), entonces él puede establecer una línea dentro de su propia familia innata poniendo a
criar las hijas y las nietas de nuevo con el padre, o los mejores hijos del padre, nietos y así
sucesivamente, de hecho, volviendo siempre hacia atrás a los descendientes directos de la línea
del palomo fundador en el cual está establecida la línea.

Esto me trae al punto favorable en el cual terminar este capítulo y pasar a la consanguinidad,
porque para el colombófilo el uso de los machos de la fundación (a veces hembras) es de suma
la importancia.

El cruce (cruzamiento).

Como he dicho anteriormente en este artículo, no soy uno de ésos que cree que la cruza nunca
sea necesaria, y no quisiera que mis lectores tengan la idea de que dos palomas sin relación no
puedan criar un pichón excepcional. Las grandes campeonas han salido de los cruces. Pero
entre esas ganadoras ha habido muchas que no han podido nunca producir un descendiente de
mérito. Yo personalmente no hago los cruces a menos que las circunstancias me lo exijan.

Sé que hay casos donde se ha alcanzado el éxito sin nunca haber hecho un cruce, y de algunos
de éstos casos me referiré mas delante. Mas sin embargo, yo alego que sin importar que tan
hábil o detallista sea el que hace la consanguinidad, éste quizás tenga que ejercitar un cuidado
meticuloso para evitar el fijar hasta cierto punto cualquier defecto, debilidad constitucional,
infertilidad u otras características hereditarias, a veces después de un grado de consanguinidad
aparece un defecto inesperado. Algunos de los pichones repentinamente decaen en algún punto
particular o él colombófilo se da cuenta que no puede llevar a cabo más mejoramiento en cierta
característica, porque ninguna de las palomas reproductoras que él ha estado utilizando ha
tenido esa característica lo suficientemente buena para producirla. Cualquiera de estos
acontecimientos se debe aceptar como una luz roja, y el colombófilo debe actuar sin demora. El
tiempo ha llegado de hacer los cruces o semi-cruces, estos últimos de preferencia si responden
completamente al propósito. Por ejemplo, supongamos que hay una declinación en el tamaño en
una casta en la cual la pequeñez es reconocida como siendo indeseable. Asumiremos que nos
obliga a que introduzcamos una paloma sin relación (parentesco), de acuerdo con las
circunstancias. El ejemplar comprado debe ser de mediano a grande, y que no sea deficiente en
una de las otras características que tenemos establecidas en nuestro propio criadero, aunque
este ejemplar puede llevar latente debilidad en uno o más de éstos, debido a que un antepasado
o antepasados la tenían, lo cual por supuesto, es por está razón que el cruce es peligroso. Para
rectificar la posibilidad que he indicado debemos convencernos, si eso es posible, que los
familiares de los cruces no fallen en otras características, y que estos sean de calidad muy
buena en general. Si los cruces vienen de un palomar en el cual el dueño ha practicado la
consanguinidad correctamente las palomas serán de mas valor y menos peligroso el cruce,
porque es más probable que sean dominadoras para sus propias buenas características.

Mezcla de cruces (cruzas).

Habiendo comprado la paloma para el cruce (que asumiremos es un macho, aunque esto no
necesariamente tenga que ser así) ahora tenemos que injertar sus buenas cualidades en nuestra
propia familia innata; y esto lo podemos hacer de la siguiente manera:

a. Aparear este macho con la hembra más buena de nuestras reproductoras. Aparear la mejor
hembra hija de esta pareja con su padre. Sus descendientes tendrán una dosis doble de su
padre, y cuando las apareemos con otros miembros de nuestra propia familia deben producir
pichones que reflejen el beneficio de los cruces.

b. Aparee el macho para el cruce con dos hembras, así producirá medios hermanos y medias
hermanas, y cuando los apareemos juntos, saldrán pichones que contienen una dosis doble del
macho usado para el cruce, y alternadamente pueden utilizarse con un efecto beneficioso similar
a ésos producidos con el método a.

c. Proceda a la intensificación de los buenos puntos del cruce (particularmente las


características, mejoramiento el cual fue el propósito de haber introducido este cruce) apareando
la mejor nieta de nuevo con su abuelo (los cruces). Este sistema de crianza apareando hacia
atrás con los cruces puede continuar si la nueva sangre traída ha tenido el efecto deseado.

d. Emplee lo que se conoce como “clasificando”, término descrito con respecto al método de
introducir una nueva línea a una línea ya establecida. Esto lo leí en un libro, un libro muy
informativo en este género, y es como sigue:

Criando por fuera, o a veces llamado cruce, es la introducción de una paloma o palomas de otra
raza pura, sólo uno o algunos apareamientos para asegurarnos de que la casta que cruzamos
introduzca un cierto carácter particular deseado, o infundir en la línea pura que ya tenemos una
chispa de sangre nueva con el objetivo de adquirir mas vigor en nuestras palomas. Luego la
progenie de los cruces la apareamos nuevamente dentro de la línea pura en las generaciones
sucesivas hasta que el porcentaje de la sangre del cruce sea prácticamente insignificante.

Este método de crianza es útil para introducir a una raza pura una cierta característica deseada
que no posea o en la cuál sea débil, siempre que la característica sea reconocible para poderla
seleccionar. Clasificando o calificando es absolutamente similar al cruce pero diferencia un poco
en el programa de crianza seguida después del primer cruce. Mientras que la crianza por fuera y
el cruce se hacen de un familia sobre una paloma o palomas, y la progenie se aparea
nuevamente dentro de la raza o familia original, en la clasificación los cruces se hacen
(generalmente, sobre un macho) y la progenie se aparea de nuevo a este macho en vez de a la
raza original.

Así, en la crianza por fuera, la nueva sangre se agrega en pequeña cantidad a la familia o raza
original, mientras que en la clasificación la familia original es substituida gradualmente por la
nueva sangre. La clasificación es utilizada principalmente para el ganado, las aves de corral, y
otros criadores de animales que tengan criadero de calidad inferior y deseen levantar la calidad
de esta raza con el menor gasto posible.

¡Así pues, un ganadero que posee animales de calidad regular cargara a sus bacas con un toro
fino de una cierta casta pura deseada (y pagara solamente por el servicio) y criara para atrás la
progenie a este o a un toro similar otra vez, y así sucesivamente por dos o tres generaciones,
momento en el cual la calidad media de la manada será realzada definitivamente, y con un
pequeño costo!

Reducción del riesgo.

En mi propia experiencia, con las palomas, he encontrado que ha sido generalmente ventajoso
cuando he decidido hacer los cruces y traer varias nuevas palomas en vez de solamente una, y
por esta razón: El cruce en el mejor de los casos es una tarea aventurada, no tan aventurada
cuando hay relación distante, y siempre es posible que el nuevo palomo introducido “no pegue”
con cualquiera de las compañeras que le asignemos. Pero las posibilidades de encontrar “que
pegue”, por supuesto, se incrementan si usted puede hacer varios apareamientos en cruce en
vez de solamente uno. Cuando usted pueda determinar los méritos de los pichones, usted
entonces puede decidir continuar trabajando solamente con uno de los cruces usados en la
primera temporada de cría, y su progenie, que le ha dado la satisfacción y los otros quizás muy
poca o nada. He mencionado que el cruce es una tarea aventurada, pero este riesgo se puede
reducir si el palomo viene de un criadero, cuyos miembros sean distantes o cercanos al suyo,
pero que se han criado en una diferente parte del país. Ocurre a menudo que el semi-cruce es
más provechoso, especialmente para promover lo qué se conoce como el vigor híbrido, asociado
generalmente con los convencionales cruces completos.

Como un ejemplo de lo bueno que puede venir a ser un semi-cruce recuerdo hace muchos años
que un reconocido colombófilo había establecido una familia de palomas muy buenas con el
trabajo de una consanguinidad atinada. Fui a visitarlo y le compré algunas palomas, y algunas de
esas palomas se las vendí a otro colombófilo, y ambos tuvimos muy buenos resultados con
dichas palomas, ambos hicimos consanguinidad constantemente. Y los descendientes de las
palomas que le vendí al amigo colombófilo eran mejores que los míos en algunos aspectos, y los
míos mejores que los de él en otros aspectos, luego a este amigo le compré algunas de las
mejores palomas de su criadero. Y estas las aparee con las mías, y el resultado fue
sorprendente. El progreso con esta variedad de palomas fue fenomenalmente rápido.

Un resultado desastroso.

También recuerdo una experiencia con el cruce en mi propio palomar, un resultado el cual fue
trágico. Tenía yo algunas palomas reproductoras de la raza Sion algo buenas, que me
satisfacían en todas las características, aunque en mi opinión requerían una mejora en las alas.
Otro colombófilo que, a propósito, no tubo nada de culpa por lo qué sucedió, tenía unas muy
buenas palomas Sion mejores que las mías en el aspecto de las alas. Las palomas Sion de él no
tenían absolutamente ninguna relación con las mías. Así que decidí hacerle un cambalache una
mía de la raza Desmet por un macho Sion para así hacer un cruce con las mías, pero en vez de
ejecutar la operación de la manera cautelosa y gradual descrita arriba, la hice de una manera al
por mayor. En la segunda temporada de cría después del cambalache prácticamente todos los
pichones contenían mi propia sangre y la sangre del cruce, y eran tan malos que arruine mi
propio criadero, y aprendí una lección, aunque las parejas que aparee en esos dos años eran
excelentes en cuanto al físico, eran diferentes en las características latentes llevadas por sus
antepasados que era imposible mezclar correctamente las dos familias.

Quienes se adhieran, al método de dos o más líneas hacen solamente semi-cruce por fuera,
como les enseñe, a menos que suceda que se necesita traer un distinto cruce en una u otra de
las dos o más líneas. Arriba utilicé la expresión “vigor híbrido”. Se considera generalmente que
cuando se aparean dos animales no relacionados hay un aumento en la fuerza constitucional de
los descendientes debido a la improbabilidad de que ambos tengan el mismo defecto físico, y,
por lo tanto, el vigor de uno supera la debilidad del otro. Pero esto de ninguna manera es una
regla, puede variar.

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