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Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote

Facultad de Derecho y Ciencia Política

Escuela Profesional de Derecho

CURSO:
Formación Básica Para La Magistratura

ACTIVIDAD:
Nº 06 – Investigación formativa

DOCENTE:
Ramos Herrera, Walter.

ALUMNA:
Meléndez Montenegro, Kathrina Ghiardely.

Ciclo: IV Turno: Día Grupo: “A”

CHIMBOTE –PERÚ
2019
POTESTAD JURISDICCIONAL

Antes de contestar al encabezamiento, es de necesidad evaluar los aspectos preliminares


como el poderío, que proviene de la declaración latina potes que significa potente. Este
conocimiento es conforme García Toma “la capacidad de una persona o de un grupo de
personas para determinar, condicionar, dirigir o inducir la conducta de los demás también
al respecto Ferrero Rebagliati, nos dice, es la facultad de gobernar, de dictar reglas a la
conducta ajena.”, por lo tanto, cuando el poder brota del Estado para estructurar, igualar
y presidir a una generalidad para obtener resultados comunes o de beneficio general, se
distribuye el poder político o estatal, que vendría a determinarse – comentando las
palabras del sabio Montero Aroca– como la amplitud de hacerse acatar dentro del Estado
demócrata (soberanía del pueblo). En resultado, el dominio político coge a todos los
residentes y toda la superficie geográfica del Estado, donde este ejecuta su mandato.

Sobre el mandato, Chiovenda, la deduce de la siguiente forma: es el poder relacionado al


Estado, es decir al ordenamiento de todos los habitantes para los términos de inclinación
universal. Pero este poderío único alcanza tres grandes ocupaciones: legislativa,
gubernativa (o administrativa) y jurisdiccional. Con esto queda en claro que la soberanía,
siendo una propiedad del poder político que respalda la presencia y superioridad del
Estado, como la cual, requiere actos inherentes de supremacía como el de dirigente de
justicia, entre otros, a fortiori, analizaremos el encabezamiento político peruano,
empezando por las primeras líneas del artículo 45 de la presente Constitución Política del
Perú, que manifiesta: El mandato del Estado. Quienes lo cumplen lo hacen con las
restricciones y obligaciones que la Constitución y las leyes ponen a deductivo del (TC),
el resaltado artículo establece la manifestación política del nacimiento de soberanía
común, del cual tenemos que distinguir dos poderes que son el inicio de nuestro status
quo, estos dominios son el mandato constituyente y el mandato constituido . ”

Acerca del anterior, como manifiesta el TC, es la aptitud por la cual la población, en
cuanto autorizado de la independencia, decide fundar un mandamiento constitucional. La
autoridad Constituyente, más que un motivo de invención, es un vigor de alteración, ya
que, como tal, puede llevarse cabo la refundación del resultado de la modificación
constitucional sobre nuevas hipótesis, sean dichos políticos, colectivos, mezquinos,
educativos o propiamente judiciales. El Poder Constituyente argumenta, a tres cualidades:
es singular, extraordinario y tiene un fin a opuesto sensu, el consecuente llamado dominio
constituyente producido o establecido, por Castro Patiño se sabe que es el que ejerce
sujeto a reglas existente de derecho afirmativo, para enmendar o restructurar la
Constitución, a la que también podría cambiarla totalmente, siempre que esté autorizado
para esto, de igual manera para el sabio Néstor Pedro S, es el que se despliega de acuerdo
a las líneas jurídicas de contenido y tramite que señala la constitución consistente para
reconocerlos invocamos a Sieyés “el dominio Constituyente es un comisionado de la
población, mientras que los dominios establecidos sólo son representantes de una
actividad reglamentada en sus lineamientos por la misma Constitución; en fin, como lo
ve el pueblo, como jurisdicción constituyente congénito ejercita su autoridad para hacer
un mandato constitucional, representado en la Constitución, del cual se producen poderes
legislativos obtenidos tales como el legislativo, ejecutivo y el judicial, para después
ejercer sobre ellos a través de dispositivos de elección de congreso y delegados o
colegiados. Como obtención de estas elecciones tenemos autoridades y funcionarios,
munidos de gobernantes o soberanía sobre los exclusivos, emitida de la emancipación del
“El dominio legislativo para los congresistas, la ejecutiva para el gobierno y la
jurisdiccional para audiencia y tribunales”.

Para finalizar los supuestos, se entiende por autoridad, como aquella que estriba en la
supremacía del poblado para imputar al titulado o gobernador una perspectiva de
superioridad relativo a las personas. A esto, Gimeno Sendra, manifiesta: la autoridad
viene definida por una potencia de superioridad legalmente asociada a terceros, como
resultado de esa fuerza de regularizar, que encierra, destinada a la defensa a las
inclinaciones de otros.
Consecutivamente tenemos a la autoridad que se descifra en una autoridad del Estado, de
la cual tenemos varias explicaciones, como apunta Eduardo Couture, el sentido de esta
palabra en los países latinoamericanos, tiene por lo menos cuatro significados como
recinto geográfico; como semejante de capacidad; como ligado de poderes o supremacía
de ciertos órganos del poder estatal; y su sentido exacto y experto de ocupación pública
de forjar justicia; por ello solo revisemos algunas más genéricas -como diría Alcalá-
Zamora- “a partir de un posición de panorama detenido (Derecho Legislativo) y dinámico
(Derecho Procesal)”.
Como manifiesta García Toma “el término autoridad proviene del léxico latinas ius y
dicere, que unidas quieren decir“aplicar o exponer el derecho”. Asimismo, la autoridad
implica -en el contorno del Erguido Legal- el carácter de la colocación de las leyes del
Estado referente a las personas y beneficios localizados adentro de su territorio.
Jellinek, manifiesta “la jurisdicción es una función del Estado para la protección del
derecho en su totalidad.”

Como dice Chiovenda, “la jurisdicción consiste en la actuación de la ley mediante la


sustitución de la actividad de órganos públicos a la actividad ajena”.
Según el gran experto, Alcalá-Z. y Castillo, manifiesta que la autoridad es la “emanación
o atributo de la soberanía del Estado, o sea como manifestación de los poderes o funciones
que le incumben”.
Para el maestro Devis E, “soberanía del Estado, aplicada por conducto del órgano especial

a la función de administrar justicia, para la realización o garantía del Derecho, y


secundariamente para la composición de los litigios o para dar certeza jurídica a los
derechos subjetivos, mediante la aplicación de la Ley a casos concretos, de acuerdo con
determinados procedimientos, y en forma obligatoria y definitiva.”

Según Eduardo C, dice que “función pública, realizada por órganos competentes del
Estado, con las formas requeridas por la ley, en virtud de la cual, por acto de juicio, se
determina el derecho de las partes, con el objeto de dirimir sus conflictos y controversias
de relevancia jurídica, mediante decisiones con autoridad de cosa juzgada, eventualmente
factibles de ejecución.”
Por intermedio de Martin H, “tenemos una alegación de la autoridad, más claro: “facultad

y el deber de juzgar y ejecutar lo juzgado”.

Posteriormente, autoridad es determinado -por Montero A, - como la “potestad dimanante


de la supremacía del Estado, ejercida únicamente por los juzgados y las cortes, integrados
por jueces y magistrados individualmente de ejecutar el erguido en el asunto determinado
estimando de carácter inapelable y estableciendo lo juzgado” y determina ambos
contextos para que pueda existir:
La ocupación que se otorga a esos órganos cualifica asimismo la autoridad, por lo que
hay que educarse, según la Constitución y la LOPJ, la ocupación jurisdiccional.

Los órganos a los que se dispone la autoridad no pueden ser cualquiera, tienen que ser
revestidos de una sucesión de propiedades propias que los diferencien de los restantes
órganos del Estado; estos organismos son las cortes y los juzgados, en los que los
principales de la autoridad son los magistrados y jueces.
Asimismo, hace una clase de anamnesis de la disminución del recinto del adiestramiento
de la autoridad territorial, con el apartado 3 de la Constitución de 3 de setiembre de 1791
dictada en Francia. “Los tribunales no pueden ni inmiscuirse en el ejercicio del Poder
Legislativo, o suspender la ejecución de leyes, ni asumir las funciones administrativas o
citar ante ellos a los administradores por razón de sus funciones”, posición equivalente se
vio en el apartado 242 de la Constitución de España de 1812 en que decía .“La autoridad
de emplear las leyes en las causas civiles y criminales pertenece únicamente a los
tribunales” la consecuencia de estas limitaciones han llevado a formar un contorno de
adiestramiento de la autoridad territorial en nuestra Constitución y en nuestra
clasificación legal, veamos:
Protección de los derechos de los seres humanos [artículo. 1 del T.P del C.P.C. Y el
artículo. 139,3 de la Constitución]

Acaparamiento en la implantación de condenas [C. art. 139.10]


Acaparamiento de las libertades y los derechos principales [C. art. 200]
Inspección del dominio obligado y de la validez de la intervención administrativa [C. art.
148]
“ Inspección de la legalidad de las leyes [C. arts. 200, 201 y 202]

Es de necesidad destacar que el experto Montero A, determina que el Poder Judicial es


cooperador del poder gubernativo en el Estado, y que los magistrados y jueces hacen
política, pero no como diligencia política.

Ejercer política, no quiere decir que tengamos que estar al oficio del usurpador de turno
del poder gubernativo, al inverso, es la consciencia de ejecutar una diligencia ilustre a
favor del beneficio ordinario, que radica en la protección de los derechos de cada uno de
los pobladores, incluso contra los que disponen del poder.

En aumento, entre autoridad y dominio: la autoridad jurisdiccional es la que respalda la


superioridad o supremacía del órgano territorial frente a las partes y la que hace enérgico,
en definitiva, el desempeño posterior de sus decisiones. Por tal causa Montero, prefiere
precisar a la autoridad territorial como un predominio cualificado, luego la autoridad tiene
esa señal que lo diferencia del restante:
La jurisdicción: Como ejemplo, revisemos el primer parágrafo del apartado 138 de
nuestra Constitución: La autoridad de dirigir ecuanimidad emana de la nación y se ejecuta
por el Poder Judicial por intermedio de sus órganos graduales con convenio a la
Constitución y a las leyes. De acuerdo a la legislación del T.C, aquí se distribuye al
Tribunal Constitucional y al Poder Judicial y, con sus especialidades, al Jurado Nacional
de Elecciones en elemento electivo. Posiblemente sorprenda a nuestro leyente esta
variedad de órganos jurisdiccionales envestidos del imperium obtenido de la supremacía
de esta autoridad de Erguido Público, por tanto como se vio el apartado 43 de nuestra
regla fundamental, consagra la apertura de ausencia de poderes, y úntese que el inciso 1
del apartado 139 de nuestra código de leyes, asimismo el primer art. del TUO del Estatuto
Orgánico del Poder Judicial y la resolución del TC N.º 00004-2006-PI/TC44, pronuncian
la autoridad propia de dirigir ecuanimidad del Poder Judicial, , a esto, el Tribunal
Constitucional explica que este principio no es definitivo, conjuntamente apunta, que de
la distribución y desempeño de los Poderes del Estado reglamentados por la Carta Magna
se separa el principio de asistencia de poderes, a esto se ejecuta el resultado del Tribunal
Constitucional del TC Exp. N° 00005-2006-AI/TC que expresa, el separatismo de
poderes, es un elemento del Estado con el proposito de intercambiar jurisdicciones y
competencias a cada poder que lo constituye; esto implica la ayuda entre cada uno de
estos a conclusión de optimar y adiestrar sobresalientemente sus funciones. Relación al
cambiado adiestramiento de la autoridad – que es elemento de nuevo trabajo, el de
ocupación territorial- el TC en el dictamen Exp. N.° 6167-2005-PHC/TC, se anunció
registrando fueron especiales como la autoridad arbitral y el civil, pues estos juntan las
cuatro condiciones para el adiestramiento de la jurisdicción.
Después de lo versado hasta ahora, deducimos que la potestad jurisdiccional, es la
situación de superioridad del Estado, que garantiza el ejercicio o actuación de la ley a
determinados órganos, como producto del poder político, para resolver conflictos
intersubjetivos.

PODER JUDICIAL

Montero A, es un procesalista y mantiene que, en la Constitución del Perú, semejante al


de España, pude comprenderse al Poder Judicial en dos sentidos, ya sea como poder
judicial gubernativo o de organización.
a) Como órganos capacitados de jurisdicción

Todos los órganos territoriales que disponen autoridad territorial, son cooperantes del
poder gubernamental, y gracias al principio de división de poderes [C. art. 43] y el
principio de supremacía nacional [C. art. 45], y considerando en cuenta que de acuerdo
al T.C, somos un Estado Social y Demócrata, estos se vuelven poderes comunes y por tal,
todos son Poder contencioso. Este aparente se ejemplariza por lo subsiguiente:
El art. 143 de la Constitución establece “El Poder Judicial está conformado por órganos
territoriales que disponen imparcialidad en epígrafe de la Patria, y por órganos que
ejecutan su mandato y administración”. Dichos órganos son: Corte Suprema de Justicia
y las demás cortes y juzgados que disponga su estatuto orgánico, y el (art. 152 que hace
memoria a los de Paz y a los jueces de primera instancia)

1) Los términos de los grupos delegados de inquisición no exigen los órganos


territoriales, escritos en los artículos. 97 y 139.2 de la Constitución.
2) Los elevados puestos políticos del país (funcionarios) alegan penalmente frente a la
Corte Suprema, [C. art. 100].
3) Artículo 148 establece que los juzgados contrastan la autenticidad de las decisiones
administrativas, esto es, el rendimiento del poder ejecutivo.
4) El proceder de la autoridad territorial, se ejecuta por el poder judicial, mediante sus
órganos, así lo dispone en el art. 138; prontamente el artículo. 139.1 agrega que de
carácter exclusivo.
5) “Los tribunales militares y la arbitral, tienen autoridad, acorde al art. 139.1”.
6) Se asigna ocupación territorial a las ´potestades de las Comunidades Nativas y
Campesinas, con el soporte de las Rondas Campesinas, percibiéndolas como una
autoridad particular, en el artículo. 149.
7) El T.C, obtiene el dominio de la constitucionalidad de las leyes, según él [art. 201].
8) El JNE, tiene la autoridad de dirigir ecuanimidad en elemento votante, acorde al [art.
178.4 y la STC EXP. N.° 6167-2005-PHC/TC.]

En conclusión, la Constitución hace alusión a varios órganos territoriales que les otorga
autoridad territorial, por consecuente, son Poder Judicial, los siguientes órganos:

El Tribunal Constitucional, juzgados, cortes, Corte Suprema de Justicia, tribunales


militares, jurisdicción arbitral, órganos que han de controlar la legalidad de las
resoluciones administrativas, Jueces de Paz, jueces de primera instancia y autoridades de
las Comunidades Campesinas y Nativas.

Todos estos órganos están envestidos de la autoridad territorial y cooperan en el poder


político, por consiguiente, a partir del punto de panorama político todos aquellos son
Poder Judicial en su sentido extenso.
b) Como una organización

El Poder Judicial, en su sentido más específico, es una fracción organizada del ligado de
jueces y magistrados que tienen autoridad territorial, esto quiere decir, a partir del punto
de panorama organizativo, es aquel constituido por todos sus órganos relacionados,
decretado en el art. 138, y 143 de la Carta Magna. “Estos son la Corte Suprema de Justicia,
las cortes y juzgados que determine la Ley Orgánica del Poder Judicial”.

Actualmente por un juicio de eliminación, se advierte “todo ente que no figura en los
mencionados artículos, no son Poder Judicial, a exclusión son: los tribunales militares,
arbitrales, autoridades campesinas y nativas, los magistrados del Tribunal Constitucional
y el Jurado Nacional de Elecciones”.

En resumen, el Poder Judicial organización (jueces y magistrados) es único para todo el


Estado, con Ley Orgánica con la concurrencia del Consejo Nacional de la Magistratura,
un órgano administrativo rector de las personas dotadas de jurisdicción (jueces y
magistrados) y órganos jurisdiccionales (juzgados y cortes).

Referencias bibliográficas
1)Espinoza, M. (2012) "La potestad jurisdiccional".
https://micnous.wordpress.com/2012/01/20/la-potestad-jurisdiccional-2/

EVIDENCIA DE PORCENTAJE DE PLAGIO MEDIANTE EL


PROGRAMA TURNITIN

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