Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Facilitador: Maestrantes:
Msc. Luis Villalba
Aular Cristian
Bello Luimar
Duven Anais
Iguaran Eladio
Vivas Greibys
Puerto Ordaz, Noviembre 2019
Estado:
Origen:
Muchas sociedades humanas han sido gobernadas por estados durante milenios,
sin embargo, la mayoría de las personas en la prehistoria vivían en sociedades sin
estado. Los primeros estados surgieron hace unos 5500 años junto con el rápido
crecimiento de las ciudades, la invención de la escritura y la codificación de nuevas
formas de religión. Con el tiempo, se desarrolló una variedad de formas diferentes,
empleando una variedad de justificaciones para su existencia (como el derecho
divino, la teoría del contrato social, etc.). Hoy, sin embargo, el estado-
nación moderno es la forma predominante de estado a la que están sometidas las
personas.
La palabra Estado viene del latín status, y este del verbo stare (estar parado). De
ahí pasó a significar a algo parado, detenido, como en statu quo. El verbo stare se
vincula con una raíz indoeuropea *sta-, que está presente en el verbo
griego ίσταμαι (histamai que se puede traducir como: establecer, poner en pie,
detener, estar en pie).
Una parte de la doctrina aplica la idea de Estado a todas las formas políticas
asumidas a lo largo de la historia por las comunidades independientes, con lo que
quedan comprendidas en ella, incluso, la polis griega o el imperio romano.
Sin embargo, con mayor precisión, otros autores limitan el concepto a una
forma política históricamente concreta, aunque difieren en cuál se al tiempo de
aparición. Así, para unos es la forma política generada por la civilización occidental
inmediatamente después del imperio carolingio. Para otros nace con los reinos
medievales de la Baja Edad Media y, en fin, para un tercer sector, el Estado aparece
con el Renacimiento. En todo caso, estos planteamientos historicistas han
enriquecido y matizado el concepto de Estado.
Definiciones:
El concepto de Estado difiere según los autores, pero algunos de ellos definen el
Estado como el conjunto de instituciones que poseen la autoridad y potestad para
establecer las normas que regulan una sociedad, teniendo soberanía interna y
externa sobre un territorio determinado.
Características:
Territorio y Fronteras:
División de poderes:
En los Estados modernos existe una clara división de poderes que agiliza los
procesos y evita la corrupción. Clásicamente, se diferencian tres poderes:
Funcionarios:
Constitución:
Ejército:
Recursos:
Todos los Estados tienen previstos modos para obtener recursos; el más habitual y
extendido es la recaudación de impuestos. Con esos fondos el Estado debe atender
a los gastos en salud y educación, entre otros.
Intervención en la economía:
Elementos de Estado:
Territorio:
Suele definirse como la porción del espacio en que el Estado ejercita su poder.
Siendo éste de naturaleza jurídica sólo puede ejercitarse de acuerdo con normas,
creadas o reconocidas por el propio Estado. El ámbito espacial de validez de tales
normas es precisamente el territorio en sentido político.
La significación del territorio se manifiesta en dos formas distintas una negativa,
positiva la otra. La significación negativa consiste en que ningún poder extraño
puede ejercer su autoridad en este ámbito sin el consentimiento del Estado; la
positiva, en que todas las personas que viven en el mismo ámbito se encuentran
sujetas al poder estatal.
Población:
Poder:
Toda sociedad organizada ha menester de una voluntad que la dirija. Esta voluntad
constituye el poder del grupo.
Durante la Edad Media los individuos que, por necesidad, estaban sometidos
al poder feudal, lucharon siempre, en forma más o menos visible, por su libertad.
Aquellos que lograban escapar de las cargas señoriales acudían a las precarias
ciudades que, paradójicamente, eran consideradas "comunidades de hombres
libres", a pesar de estar sometidas al dominio del rey. Fue produciéndose
una centralización progresiva.
En pleno absolutismo la autoridad real impera sobre una nación (concepto asociado
a un territorio delimitado) y surge el concepto jurídico político de frontera.
Se puede decir que desde el surgimiento del ser humano se ha ido socializando con
demás grupos de comunidades, estas aunque fueran comunidades pequeñas, son
comunidades políticas formadas por los hombres, que después ahí surgiría
entonces el Estado como una organización política que aplicaría uno de los fines el
bien común. Sin duda los griegos concibieron a las polis griega como un complejo
de problemas jurídicos, sin embargo, fue mérito de los romanos concebir al Estado
en términos jurídicos, estableciéndolo como un conjunto de competencias y
facultades. También a través de la historia se ha ido definiendo al Estado como casi
sinónimo de gobierno, unificando los seres humanos para vivir una forma de
organización más clara, claro con sus representantes en ello, el Estado en efecto
es una organización humana como diría González Uribe, que va sufriendo
transformaciones a lo largo del tiempo, va evolucionando y dando lugar a diversas
formas que pueden ser reconocidas con más o menos facilidad en el tiempo y lugar
en que aparecieron.
La doctrina consideraba a la societas una institución de iure gentium, esto es, una
originada en el consentimiento. Las societas y por ende las civitas, es creada por
los hombres. Que las societas sea una institución creada por el consentimiento,
permite aplicar toda la doctrina que sobre el consentimiento se aplica a
las obligaciones y contratos . En la formación del Estado participan una serie de
cosas que al parecer el primer dato o fuente, es el grupo de personas que es
necesario y útil para constituir el Estado y a través de la historia no nos
equivocamos; "la humanidad es la existencia de un conjunto de habitantes que se
asienta sobre un territorio determinado, lo es cuál es la población".
Esto surge pues de una convivencia en territorio y población, que son elementos
para la constitución de un Estado y así darle vida jurídica, organización y soberanía
sobre todo, teniendo todos estos factores entonces el Estado empezaría a tomar un
orden jurídico y político sobre la vida y forma de sus habitantes que lo conforman,
es entonces cuando se dice que Estado no crea el Derecho, sino el Derecho crea
al Estado. De aquí no se trata pues de hacer un conocimiento acerca de la historia
política del Estado, sino de una historia jurídica de que hablemos de
una estructura y organización y aún límites del mismo, trataremos de cómo estaba
en el pasado su formación jurídica y si este, era susceptible de hablarse de
una personalidad jurídica y sujeta entonces de derechos y obligaciones. A esto se
sugiere un elemento importante del Estado, esto es, un elemento ya no físico sino
formal, que vendría siendo la autoridad, ya que dicho elemento es el que lleva a
la sociedad al bien común, o como lo define y clasifica González Uribe "para llevar
adelante el bien público cuenta el Estado con un elemento de decisiva importancia,
que es quizá el que lo caracteriza más visiblemente: la autoridad o poder público".
Los actos del príncipe. Correlativamente con lo antes recordado, el acto del príncipe
era como un acto de Dios, por encima del orden jurídico; su versión en el Estado
constitucional fue la teoría de los actos de imperio, primero y de los actos de
gobierno o institucionales, después. Los actos de gobierno son actos del poder
ejecutivo que no pueden ser impugnados judicialmente, del mismo modo que los
actos del príncipe no podían ser llevados a la justicia.
Esto, en el campo del derecho administrativo tiene un efecto primordial para hacer
efectiva la responsabilidad del Estado a través de los servicios públicos que otorga
y respecto de sus funcionarios, pero todo esto tiene que estar apegado al derecho
y a una legalidad, como decía Hariou que el principio de legalidad y su garantía en
el contencioso administrativo y el de la responsabilidad patrimonial de la
administración son los dos grandes pilares sobre lo que se asienta el derecho
administrativo y como dice Miguel Iribarren Blanco, becario del área de derecho
mercantil y de la empresa de la facultad de derecho de la universidad Oviedo, quien
en su exposición de motivos de la Ley de Expropiación Forzosa dice que hay dos
correctivos de la prerrogativa de la administración que reclama el instinto popular
que la administración actúe, pero que obedezca a la Ley; que actúe pero que pague
el perjuicio, también se evita una inevitable secuela incidental de daños residuales
y una constante creación de riesgos que es preciso evitar que revierta al azar sobre
un patrimonio particular en verdaderas injusticias, amparadas por un injustificado
privilegio de exoneración.
Pero el término Estado tiene un significado que es la organización del poder político
centralizado de una comunidad nacional, ahora el término Estado, para las
doctrinas contemporáneas, tiene un significado que es idéntico a comunidad
humana. El Estado es la comunidad nacional soberana, la nación moderna que ya
ha logrado su independencia de otras naciones, este significado de la palabra
Estado, coincide con la vieja palabra de polis, cuando Aristóteles habla de polis, se
refiere a la comunidad humana. Pues bien para los modernos, el Estado seria la
nación que vive en un territorio y que ha conquistado su soberanía.
Esta corriente estudia todos los fenómenos sociales de manera que el Estado es un
capítulo de la ciencia social, y para los que estudian al Estado, vista desde un punto
de organización, este estudia y analiza al Estado, como un fenómeno social,
ciertamente, pero como algo distinto de lo social, es un fenómeno que se produce
en la sociedad. Si la teoría del Estado tiene autonomía, si es
una disciplina particular, ello quiere decir que el Estado tiene una peculiaridad
dentro de lo social, esto es, como la organización política de una comunidad
humana. El Estado es un ente político real, constantemente se habla de él bajo
múltiples aspectos y en una infinita gama de situaciones.
Como concepto formal, el Estado es único, denotando una idea abstracta que se
proyecta diferentemente, a través de sus distintos elementos y que también
lógicamente son formales, en los diversos estados históricamente dados.
El Poder Público Nacional
Los Estados son entidades autónomas, con personalidad jurídica plena, y quedan
obligados a mantener la independencia, soberanía e integridad nacional, cumplir y
hacer cumplir la Constitución y la ley de la República.
Para poder optar al cargo de Gobernador de Estado se debe cumplir con los
siguientes requisitos:
• Mayor de 25 años.
• De estado seglar.
El Poder Público Municipal o los Municipios son unidades políticas primarias que
tienen personalidad jurídica propia y autonomía. Se les considera primordial dentro
de la organización nacional. Está enmarcado dentro de lo que se denomina las
Entidades Locales, constituidas por:
1. Los Municipios.
El Municipio como figura jurídica y territorial, muy importante dentro del Estado,
debe reunir una serie de elementos para constituirse como tal:
4. Capacidad económica; capacidad para generar recursos propios para cubrir los
gastos de gobierno y administración, así como para prestar y satisfacer los servicios
mínimos que requiere.
El Municipio debe ser dirigido por un funcionario público llamado Alcalde, y por un
Concejo Municipal. El Alcalde es un ciudadano que es elegido para dicho cargo por
una mayoría relativa, en votación universal, directa y secreta, tal como lo establece
la Ley Orgánica del Sufragio. El Alcalde es la máxima autoridad ejecutiva del
Municipio, y para optar a éste cargo público se requiere:
2. Mayor de 25 años.
3. De estado seglar.
Es la rama legislativa o deliberante del Municipio, y tiene por objeto legislar sobre
las materias competencia del Municipio, así como ejercer control de la rama
ejecutiva del municipio. De tal forma que el Municipio es una especie
de célula imprescindible dentro de la conformación del Estado y del Gobierno,
puesto que es de allí de donde se deriva lo que se conoce como República, es decir,
los Municipios son la base para la conformación del Estado y del Gobierno.
Está formado por la Asamblea Nacional la cual está integrada por diputados
elegidos en cada entidad Federal elegirá tres diputados. Los pueblos indígenas de
la República Bolivariana de Venezuela elegirán tres diputados de acuerdo con lo
establecido en la ley.
A partir del Capítulo II del Poder Ejecutivo Nacional sección primera del Presidente
o Presidenta de la República: es el Máximo órgano del poder Ejecutivo y cumple
funciones de Jefe de Estado, Jefe de Gobierno, Comandante en Jefe de la Fuerza
Armada Nacional, primer representante al exterior y jefe de la Administración
Pública Nacional.
El derecho:
El concepto de derecho proviene del latín “directum”, que significa aquello que
está conforme a la regla. Se caracteriza por estar compuesto de una serie de
normas jurídicas, que regulan las relaciones, entre dos o más personas, que posean
obligaciones y derechos de forma recíproca.
Los juristas han elaborado numerosas definiciones del derecho a lo largo de los
siglos. Sin embargo, no existe una definición que goce de aceptación generalizada.
Derecho objetivo. Tiene que ver con todas aquellas normas que regulan el
accionar de las personas en el interior de la sociedad y a esta en su totalidad.
Dentro del derecho objetivo se puede hablar del:
• Derecho Público: Es el que tiene el objetivo de regular los vínculos entre los
individuos, personas físicas, y también a las entidades privadas con los distintos
órganos del poder público. Aquí se encuentra además el derecho constitucional que
es una rama del derecho público, por el cual se definen mediante el estudio y
análisis a las leyes que definen la norma de un Estado.
• Derecho Procesal: Es la rama destinada a la aplicación de las normas del
derecho. Aquí encontramos el derecho internacional para regular la conducta de los
estados, el derecho penal para determinar qué conductas son las consideradas
delictivas, y el derecho administrativo que tiene el objetivo de la administración
pública.
• Derecho Privado: Regula las relaciones jurídicas entre las personal, es decir
entre agentes que no son de carácter público, sino que están en igualdad de
condiciones. Como por ejemplo el derecho civil que abarca las actividades
cotidianas, cuestiones familiares, también conflictos sobre la propiedad.
Norma social: Este el sistema de reglas más grande existe, ya que engloba en sí
misma otros subconjuntos de normas que señalaremos más adelante. Cuando nos
referimos a social, estamos haciendo referencia directa a una sociedad y a su
contexto, donde existe diversidad de personas que requieren de orden para
asegurar una buena o aceptable convivencia.
Dentro de estas normas sociales, existen otras dos que sí deben ser cumplidas
porque son sancionables. Estas son:
Norma penal: Son conductas que están establecidas delitos y son penadas
por ley y no tiene derecho a objeción.
Norma jurídica: Reglamento que controla todo tipos de delitos y conductas
impropias o de desviación jurídica.
La norma jurídica:
Las normas jurídicas también están definidas por los caracteres de la positividad,
la validez, la vigencia, la imperatividad, la certeza, la justicia, la obligatoriedad, la
coactividad, la legalidad, la objetividad, la generalidad y la abstracción. Sin embargo,
la forma en que tales caracteres están presentes en las diferentes normas y en el
Derecho en cuanto ordenamiento jurídico no es idéntica.
Bilateralidad
Existe una antigua tradición doctrinal según la cual para que haya Derecho tiene
que haber sociedad. Esta doctrina se recoge formulada como tesis en un aforismo
latino, que dice: ubí Ius, ibi societas, donde hay Derecho, hay sociedad.
Radicalmente entendida, esta tesis alude tanto a la innata predisposición social del
hombre, que hace que el vivir en sociedad sea una condición existencial
peculiarmente suya, como a una de las notas esencialmente constitutivas del
Derecho, como es la bilateralidad o alteridad en el sentido genuino del término. Por
lo tanto, los instrumentos de que se vale el Derecho para regular las relaciones
encuentran en la bilateralidad uno de sus elementos distintivos.
La certeza supone que se conoce cuáles son las leyes, cuál es su contenido y
cuáles son las sanciones a causa de su incumplimiento. La certeza no es una
circunstancia que se refleje en las normas jurídicas; más que un requisito del
Derecho, es un objetivo que se trata de conseguir a través de ciertos elementos,
como son la preferencia por la generalidad y la abstracción, la claridad en la
redacción de las normas, la publicación de las misma en los distintos Boletines
Oficiales, etc.
En nuestro ordenamiento jurídico, la seguridad está reconocida dentro de los
llamados principios constitucionales del Derecho, junto a otros seis que no son sino
instrumentos para conseguir que nuestro ordenamiento jurídico esté dotado de
seguridad.
Coercibilidad y coactividad:
Lo mismo sucede con el resto de las normas. Una norma es válida cuando cumple
todas las condiciones que el sistema establece para reconocer a las normas como
pertenecientes al mismo. Las condiciones de validez son distintas en los diferentes
sistemas, como también lo son dentro de un mismo sistema a propósito de cada
tipo de norma.
Eficacia:
Las normas jurídicas son creadas para conseguir determinados objetivos. Como ya
sabemos, el Derecho es un instrumento para ordenar la sociedad de acuerdo con
un cierto modelo o proyecto ideológico, filosófico, etc. Cuando el legislador dicta una
norma, en principio hemos de pensar que lo hace para algo, para producir un
impacto en la sociedad a través de la orientación de las conductas de los
destinatarios. A veces, las normas se muestran como instrumentos idóneos para
alcanzar esos fines y entonces se dice que son eficaces. Por lo tanto, cuando se
alcanzan los objetivos para los que se aprobó una determinada norma, se dice que
ésta es eficaz. En un sentido político la eficacia de las normas alude a la
satisfacción o realización de las finalidades u objetivos sociales o políticos en vista
de los cuales fueron establecidas esas normas.
Con todo, cuáles sean las finalidades que persiguen las normas es cuestión que no
siempre resulta clara. A veces, los motivos del legislador se encuentran explícitos
en las exposiciones de motivos que preceden a los textos normativos y a veces no.
Puede que las explicaciones contenidas en las exposiciones de motivos sean
honestas y puede que no sea así.
Por último, otro elemento del Derecho, es el llamado valor de la norma: una norma
debería adaptar o armonizar su contenido a unos criterios de justicia.
Parece una cuestión indiscutible: el Derecho tiene algo que ver con la justicia,
aunque sólo sea porque esa relación se halla firmemente arraigada en nuestro
lenguaje cotidiano.
Toda sociedad se rige, al menos, por dos tipos de normas: las morales y las
jurídicas. Por lo tanto, determinar la justicia o la injusticia de una norma jurídica es
una tarea análoga a la de establecer su validez o invalidez.
Por tal razón se puede decir que, una norma es justa cuando su contenido se
adecua a lo establecido en otra norma, esta vez no jurídica sino moral. Ya sabemos
que cuando hablamos de Moral nos estamos refiriendo a dos cosas distintas: el
conjunto de valores comunes vividos en una sociedad, es decir, la llamada moral
social; pero también nos referimos a lo que se denomina moral individual o crítica,
es decir, aquella asume un sujeto y que le sirve para evaluar la justicia o la injusticia
de una norma.
Por su origen
Atendiendo al origen o a las fuentes de donde proceden, podemos distinguir los
siguientes tipos de normas:
Legales:
Son normas escritas dictadas por los órganos legislativos competentes del Estado.
Una ley aprobada por las Cortes Generales, una Orden ministerial, cualquier
disposición emanada de las Comunidades Autónomas, o el bando de un alcalde son
ejemplos de este tipo de normas.
Habitualmente necesitan un acto solemne de promulgación, que acredita la
existencia de la misma (publicación en el Boletín Oficial correspondiente).
Consuetudinarias:
En los ordenamientos jurídicos modernos suele afirmarse que no puede existir una
norma consuetudinaria que no esté de acuerdo con la ley, no siendo admisible la
costumbre “contra legem”.
Jurisprudenciales:
Normas que provienen de la actividad judicial llevada a cabo por algunos tribunales.
Tienen dos manifestaciones:
Por un lado, la doctrina que de modo reiterado establezca el Tribunal Supremo. Así
lo recoge nuestro Código Civil en el art. 2.6: “la jurisprudencia complementará el
ordenamiento jurídico con la doctrina que de modo reiterado establezca el Tribunal
Supremo al interpretar y aplicar la ley, la costumbre y los principios generales del
Derecho”.
Por otro lado, la sentencia de un Tribunal, en cuanto que dicho fallo es un mandato
por el que se regulan las relaciones entre las partes afectadas por dicha sentencia.
Negociales
Las contenidas en las cláusulas de los contratos o negocios jurídicos, puesto que lo
establecido en ellas por las partes les obliga jurídicamente.
Primarias
Aquellas que ocupan la escala más alta o importante dentro del ordenamiento
jurídico, es decir, las que se sitúan en el más alto rango jerárquico.
Desde esta perspectiva puramente formal, puede decirse que la norma primaria es
la Constitución de cada Estado.
Secundarias:
Para clasificar las normas desde el punto de vista jerárquico, podría combinarse el
criterio formal y material del concepto de fuentes del Derecho. El resultado sería el
siguiente:
Esto quiere decir que las normas taxativas imponen siempre una prescripción
(mandato o prohibición) insoslayable, que ha de cumplirse de manera incondicional
para que surtan efectos jurídicos.
Dispositivas
Aquellas que pueden dejar de aplicarse a una situación jurídica concreta por
voluntad expresa de las partes.
Aquellas cuya sanción consiste en la nulidad de los actos que las vulneran,
recayendo además otro tipo de sanción sobre el infractor, especialmente para
resarcir de los daños que hubiera podido ocasionar.
Leges perfectae
Aquellas en las que la violación produce únicamente el efecto de la nulidad del acto
sin que se sobreañada sanción alguna para el infractor de la norma.
Aquellas que no establecen la nulidad de los actos contrarios a las mismas, es decir,
no impiden que los actos de violación de las normas produzcan efectos jurídicos.
Sin embargo, establecen determinadas sanciones, castigos o efectos desfavorables
que recaen sobre el infractor.
Leges imperfectae
Aquellas normas cuya infracción no solamente no produce la nulidad del acto, sino
que tampoco imponen sanciones al infractor. Son muy numerosas, especialmente
en el ámbito del Derecho público y del Derecho internacional, a pesar de que gran
parte de la doctrina no las acepta como normas jurídicas.
BIBLIOGRAFÍA.
https://www.monografias.com/trabajos6/hises/hises.shtml
Dubreuil, Benoít (2010). Human Evolution and the Origins of Hierarchies: The
State of Nature. Cambridge University Press. p. 189. ISBN 978-0-521-76948-
8. Archivado desde el original el 4 May 2016.
https://concepto.de/derecho/#ixzz63xlDHXJU