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¿Cuáles son las características epistemológicas de los neoclásicos?

Neide Guerrero Siza

Facultad de Jurisprudencia, Ciencias Sociales y Políticas (UCE) – Ecuador

Octubre 31 del 2016

Introducción:

El objetivo de este escrito es poder explicar las causas para que la economía
neoclásica declarara una revolución epistemológica en el marco de una sociedad que
está inaugurando el concepto de modernidad, donde la secularización a nivel de las
ciencias permite un pensamiento que rompe con lo trascendental e impone una lógica de
funcionamiento que se basa en la razón.

La ciencia económica, ya separada de la política, surge con la influencia


mecanicista y atomista de Newton y Descartes respectivamente, en el último tercio del
siglo XIX, en un contexto donde la ilustración había calado en la mayoría de los
académicos, quienes brindaban sus conocimientos heterogéneos para la construcción de
paradigmas en la comunidad científica. Nacer de las ciencias duras les permitía
distinguirse de la política económica, pensando que de esta forma la economía
marginalistas de los neoclásicos tendría una epistemología distinta a las ya propuestas
por Smith, Ricardo, entre otros.

Es así como los pensadores marginalistas dan el concepto de homo economicus,


siendo este el hombre racional y egoísta que siempre va a poner prioridad en maximizar
su beneficio, como si fuera algo mecánico inherente al hombre, y trasladan este
concepto a un lenguaje matemático que les permitirá calcular oferta, demanda y punto
de equilibrio.

Uno de los primeros dice Naredo, en identificar que la ciencia económica no ha


tenido una ruptura epistémica es Marshall, diciendo que el proceso que esta ocurriendo
es una ¨visión moderna de las viejas doctrinas, una extensión y un desarrollo de ese
pensamiento¨ (Naredo, 2003:185). Quien también sabe expresar con una frase muy
contundente que ¨todo está en Smith¨.
Las aportaciones que han hecho los marginalistas a la ciencia económica, es su
precisión y coherencia interna ligado específicamente al análisis matemático que ellos
hacen. De este modo construyen su teoría utilitarista y del consumo, las cuales les
permite usar la misma ontología que usaba Smith en su libro ¨La Riqueza de las
Naciones¨, al igual que las mismas categorías.

De este modo es fácil identificar las semejanzas entre los clásicos y los
neoclásicos, al igual que las diferencias, ya que si bien su base es la misma el enfoque y
metodología varían en muchas otras cosas.

Algo que les caracteriza mucho a estas corrientes económicas es, pensar en el
hombre como un individuo egoísta que se antepone primero ante cualquier situación,
además de que se plantean el problema de la escases al darse cuenta que en el mundo
que vivimos los recursos son limitados, mientras que en la sociedad las necesidades
surgen una tras otra sin fin.

Una revolución en la ciencia económica de la época será para los neoclásicos,


darle un nuevo enfoque a las categorías ya establecidas siglos atrás para entender la
economía, estas son: la riqueza, la producción, el consumo, el trabajo, el capital, entre
otras, desprendiéndose del sentido de enriquecimiento o el preferir una ganancia mayor
que los demás. Para los neoclásicos las mercancías funcionan de manera decreciente
ante la utilidad marginal, esto es cuan beneficiosos es para mí, consumir más o menos
de un producto, de esta forma el hombre tiene la libertad de elegir, o tomar decisiones
constantemente para aumentar su beneficio que le llevara al fin último que es la
felicidad.

Para justificar este argumento Jevons y Marshall serán los que definan lo que
determina el valor, y en este punto hacen una fusión de su pensamiento con el de los
clásicos, estableciendo que el valor dependerá del pasado (tiempo de trabajo, insumos,
sueldos, etc.) y del futuro (cuan útil es para el consumidor) de esta forma se establecerá
la oferta y la demanda en el mercado y, el punto de equilibrio se dará cuando los dos
factores ya mencionados se realicen en el precio de las mercancías, de esta forma la
maximización del beneficio será tanto para el vendedor como para el comprador,
reduciéndolo todo a las relaciones de mercado.
La corriente neoclásica además expresa que la base de la economía es la
satisfacción de los individuos como una función exclusiva de los bienes y servicios
consumidos, de esta forma trasladan el eje central de la economía al consumo, o como
Marx decía a la realización de la plusvalía, explicando que si el consumo no se realiza,
la utilidad de ese producto es cero, por lo tanto sacan del centro a la producción que
para los clásicos era lo fundamental para el aumento de la riqueza o ganancia.

Plantean la teoría del consumidor, donde le dan relevancia al individuo y sus


preferencias, comportamiento, estilo entre otras características que pueda tener el
individuo para que de este modo el mercado tenga la facilidad de ofrecerle o darle
varias opciones para que la persona pueda realizarse, ya que la felicidad del mismo es la
utilidad que reporta el consumo, esto se lo ve como una relación de mutuo acuerdo,
donde lo deshumanizante de este proceso se oculta en el mercado.

Conclusiones:

El proceso que ha tenido la ciencia económica a través de sus diversas corrientes


en la historia, nos permite ver que los conceptos de hace 250 años siguen vigentes, se
han transformado y servido de base para muchos otros pensadores, a manera de
complementar ese pensamiento en lugar de desecharlo.

Los neoclásicos afirmaron tener una ruptura con los anteriores pensadores
económicos en la formulación de lo que es y encierra la ciencia económica, sin darse
cuenta que cambiar el enfoque no es cambiar la base del objeto de estudio. Sin embargo
el aporte que hicieron a la economía en la actualidad aun es usado, no solo para
aplicarlo, sino también para que funcione como base de nuevas corrientes de
pensamiento económico o para criticar sus déficits. Es importante reconocer el aporte
que hicieron, en lugar de desechar todo ese conocimiento que ha sobrevivido durante
siglos.

Bibliografía:
(Naredo, JM, 2003, ¨La Economía en Evolución¨ Historia y perspectivas de las
categorías básicas del pensamiento económico, Madrid-España, Siglo Veintiuno)

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