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EXCEPCION A LA REGLA "LOCUS REGIT ACTUM" EN MATERIA

DE TRANSMISION O CONSTITUCION DE DERECHOS REALES


SOBRE INMUEBLES

por Rosa Chodos de Halac


y Edith MazzuccoBarthe

INDICE

Derechode la forma
Carácter de la regla "locus regit actum" en el Derecho Internacional
Privado Alrgentino.
Excepción a la regla "locus regit actum" en materia de adquisición o
transñerencía de derechos reales sobre inmuebles. ..
Validézde los contratos sobre transferencia o constitución de derechos
reales celebrados en instrumento privado.
Hipotecas constítuídas en el extranjero - Art. 3129del C. Civil.
Tratados de Montevideode 1889y 1940.
Conclusiones.
DERECHO DE LA FORMA
En el derecho internacional privado, las formas extrínsecas de
'Losactos jurídicos, están sometidas a la "locus regit actum", es decír,
que la exterioridad del acto, se rige por las leyes del lugar de su cele-
bración.
Es importante entonces:destacar que las formas extrínsecas, se
refieren al ínstrumento, a la visibilidad, a la envoltura exterior del
negocio jurídico, y se dividen en: no-formales y formales, y estas se
subdividen en: ad-probatíonem y ad-solemnítatem, y a su vez estas
últimas en auténticas y no auténticas.
a) Las formas ad-probationem, sirven para justificar la exís-
tencia del acto jurídico, y su 'Omisiónno invalida.el mismo, esta rorma
comprende tanto a los instrumentos públicos como a los privados, y
a ciertos signos reveladores de la voluntad, que aunque son verbales,
la ley les otorga eficacia, como sucede con las contratos cuyo valor no
excede de diez mil pesos (art. 1193y arto 2246).
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b) Las formas ad-solemnítatem, en cambio hacen a la existencia
misma del acto, sin ellas éste no exíste (arts. 975-977 C.C.), es nulo
de nulidad absoluta, por revestir este carácter las nulidades de forma
(art. 1044).
En nuestro derecho las formas ad-solemnítatem estarían esta-
blecidas en los arts, ,975 a 978, 838, 1183, 1810 a 1814, 1455, 2071, etc.
Pueden a ISU vez dívídírse en auténticas, como por ejemplo, la
escritura pública, que es un instrumento auténtico, en el que inter-
viene un funcionario público, a quien el estado ha investido de la po-
testad fedante (legislada en el Título IV, de la Sección n, del Libro
TI del Código Civil).
No-auténticos, que aunque son ad-solemnítatem, porque no pue-
den faltar, ya que sin ellas el acto no existe, necesítan del concurso
de otro medio que les de fecha cierta para oponerlas a terceros, como
ocurre con el testamento ológrafo y el instrumento privado cuyas fir-
mas deben ser reconocidas (art. 1034-1035 y 3692 C.C.).
En el derecho ínternacíonal privado se discute si las formas ad-
solemnítatem se rigen también, por la "locus regit actum", porque
en ellas el acto o contenido se encuentra tan estrechamente unido a
la forma que es en aJIgunoscasos difícil escíndírlos,
Calandrelli cree que dada la amplitud y claridad de los términos
empleados en los arts, 12 Y 950, la "locus regít actum" se aplica tam-
bién a i1as formas ad-solemnítatem, entendiendo que el Código con-
sagra la competencia de la ley no solamente en cuanto a la naturaleza
de la solemnidad muo en cuanto a la exigencia de una solemnidad
cualquiera sea. (1)
Carácter de la regla "locus regit aetum" en el Derecho Internacional
Privado Argentino.
Los arts. 950 y 12 del Código Civil Argentino establecen en
cuanto a las formas de los actos, que estos se regirán por la "locus re-
git actum".
Art. 950: "Respecto a Las formas y solemnidades de los actos
jurídicos, su validez o nulidad será juzgada por las leyes y usos del
lugar en que los actos se realízaren (art. 12)".
El arto 12 también adopta la misma solución pero se refiere es-
pecíficamente a los contratos y a todo instrumento público; dice tex-
tualmente: "Las .rormas y solemnidades de los contratos y de todo ins-
trumento público, lSOIl regidas por las leyes del país donde se hubieren
otorgado". (2)
otra .norma concordante con los artículos citados es el arto 1180
que reñríéndose a los contratos entre presentes, dice: "La forma de los
contratos entre presentes será juzgada por las leyes y usos del lugar
en que se han concluído". y el mismo Vélez en la nota a este artículo,
nos remite a las citas del arto 12, lo que demuestra que ambos tienen
la misma fuente. La primera parte del artículo 1181, que trata de la

( 1) De acuerdo Vivo, Dra. Kaller de Orchansky, Dra. Margarita Argúas. En contra


Romero del Predo, Salvat.
(2) Este artículo de Vélez tiene como fuente, el artículo 10 del Código de Luisiana,
y el Código Civil francés que adopta este principio pero sólo para los testamen-
tos, y la obra de Story "Conflict of Laws".

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forma de los contratos entre ausentes adopta la "locus regit ac:tum",
aunque luego en su Segundo párrafo se inclina por la ley del favor
negotíí.
Un problema importante en el Derecho Internacional Privado
Argentino, es determinar si la norma "locus regit actum" es impera-
tiva e facultativa, es decir si los contratantes pueden adoptar las for-
mas que rigen en el lugar del otorgamiento del acto o la ley personal.
De la redacción dada a los artículos 12, 950 Y 1180 del C. Civil,
se deduce que la norma es imperativa, ya que dichos artículos no esta-
blecen una opción iEmJtre la lex loci y Ira ley personal. NrueSltroCódigo a
diferencia de otros códigos, no autoriza a las partes a sujetarse en
cuanto a la forma, a las leyes del domicilio o a las del lugar en que
se otorga el acto. Solamente las partes estarían autorizadas a utilizar
otra forma que no sea la del lugar de la celebración, cuando el Código
así las faculta, como en el caso de las disposiciones de última voluntad
(arts. 3636-3638 y 3825). y dice Llerena que las mismas excepciones
prueban que el principio es absoluto. (3)
Pero no coincidimos con este autor, en cuanto no acepta para
las formas de 1a3 actos jurídicos, la teoría del favor negotio patrio,
'receptado en ¡el inc. 4 del. arto 14 del Código Civil, ya que para él esta
norma sólo se refiere al contenido del acto y al. artículo 1181, pero
nunca a la forma de los actos, porque ello significaría una derogación
de lo dispuesto por los arts. 12 y 950 C.C.
Creemos que en este inciso 4 del arto 14, no sólo se refiere a la
forma de los actos sino también al fondo o contenido del negocio jurí-
díco, yen cuanto importa una limitación a las normas de derecho in-
ternacional privado debe ser interpretado en forma restríetíva, (4)
El mismo establece una excepción, por 1a cual un acto celebrado
en el extranjero afectado de nulidad total o parcial. por vicio de forma,
es válido en nuestro país, cuando tuviera una forma admitida por la
ley argentina, de 10 contrario el acto será nulo, no porque [o esta-
blezca la ley argentina, sino porque así lo dispone la ley del lugar
donde el mismo se celebró. (5)
Por ello Lazeano dice que la ley argentina interpreta que los
contratantes no pueden haber intentado un acto nulo, dándole valí-
déz, y si ésta resulta de nuestro derecho interno, no depende, pues de
la intención de las partes de aplicar el inc. 4 dlel mencionado artículo,
ya que ellas pueden ignorar nuestras propias leyes, se trata, única-
mente, de una racional interpretación de su voluntad a favor del
negocio, y sígue diciendo que nuestra ley no se elige, se invoca sola-
mente, y esto en el caso de que la otra ley anule el acto, No es posible
acudir a ella si no se presenta la nulidad, no hay así, un supuesto de
forma facultativa que la dejara sometida, desde el comienzo a la elec-

(3) Otra excepción a la regla "locus regit actum", la constituyen las leyes que
otorgan a los cónsules atribuciones notariales o de funcionarios públicos, para
los actos en que intervienen nacionailesresidentes en el lugar de actuación del
funcionario, celebrados para cumplirse en el domicilio o patria de las partes.
(4) LAZCANO, CARLOS ALBERTO: Derecho Internacional Privado, ed. Platense,
La Alata, 1965, pág. 405.
(5) LAZCANO, CARLOS ALBERTO: ob. cit., pág. 405 expresa: "Cuándo la ley
del lugar impone formas y solemnidades cuya violación motiva sanciones qu,e
no son de nulidad, como multas o actos complementarios,la ley argentina no se
aplica, porque el inciso 4 det!artículo 14 sólo contempla la nulidad".

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ción de los interesados. (6)
Por 10 tanto las partes deben someterse a la locus regit actum,
lo contrario importaría, darle la libertad a estas para optar por su
ley personal, y permitirles usar en nuestro país formas extrañas a
nuestra ley, lo que no €\SItá
ni en el espíritu ni en el contenido del ínc.
4 del arto 14.
Respecto de las formas ad-solemnitatem, las mismas también
quedan 'SOmetidasa la ley del lugar de la celebración, como ya expre-
sáramos, pero siempre queda al poder jurisdiccional la facultad de
desconocer estos actos, cuando 'ellas puedan ser contrarios al espíritu
de la legislación local, o afectar la .seguridad del tráfico jurídico, o
sean totalmente ajenos a nuestras costumbres y tradiciones, resguar-
dando de esta manera el orden público interno (art, 14 ine. 1-2 y 3
C.C.).
Excepción a la regla "Ioeus regit aetum" en materia de adquisición
o transferencia de derechos reales sobre inmuebles. (7)
La doctrina contemporánea, en el derecho internacional pri-
vado ,distingue entre: el derecho real en sí mismo, que es regido por
la Iex rei sitae; la capacidad de las partes por la ley personal (del
domicilio o nacionalidad); el negocio jurídico causal por el que se
opera la transferencia o constitución del derecho real (contrato de
compraventa, de donación, de permuta, etc.) sometido a la lex causae
o sea la ley del lugar de ejecución o cumplimiento; la forma. de dicho
acto jurídico, a La locus regit actum, o sea a la ley del lugar de SIU
celebración.
Esta distinción es importante para determinar el alcance de las
normas de derecho internacional privado interno, porque la mutación
o cambio de los derechos reales se produce a través de los derechos
personales o creditorios, por ello es imprescindible distinguir el nego-
cio jurídico causal, que sólo produce obligaciones personales, pero
que no es un medio idóneo para transferir de manera inmediata el
derecho real, ya que sólo otorga un derecho a la cosa, un jus ad rem;
de los requisitos indispensables para la transferencia o constitución
de derechos reales sobre inmuebles, que en nuestro derecho son: el
título, escritura pública (portante del negocio jurídico causal); el
modo: la tradición; y se perfecciona por su oponibilidad a terceros
interesados por la inscripción regístraí.
El artículo 10 del Código Civil establece: "Los bienes raíces
situados en la República son exclusivamente regidos por las leyes del
país, respecto de su calidad de tales, a los derechos de las partes, a
la capacidad de adquirirlos, a las modos de transferirlos, y a las so-

(6) LAZCANO, CARLOS ALBERTO: ob. cit. pág. 406. opina: "El texto del inciso
4 indica que la ley argentina es para casos excepcionales y no una alternativa
con el artículo 12. Se aplica cuando el juez, al examinar la relación, halla que
la regla aplicable es la del mismo artículo, investiga la ley a que ella remite y
que anula el acto. Sólo entonces la excluye, aplicando la suya propia si lo
valida, aunque las partes nada digan acerca de nuestra ley. En caso negativo,
el acto es anulado por aplicación del artículo 12, que lleva a la ley del lugar
y no por la Iey argentina interna, en que existe excepción a la validez, único
caso que la haría aplicable.
(7) 'En el presente trabajo se consideran los bienes singularmente (ut singuli) y no
como componentes de una universalidad de derecho (ut universitas).

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Iemnídades que deben acompañar esos actos, El titulo por lo tanto,
a una propiedad raíz, sólo puede ser adquirido, transferido o perdido
de conformidad con las leyes de la República".
La crítica que se hace a esta norma es que la mísma es uni-
lateral en el. sentido que sólo contempla la situación de inmuebles
ubicados en territorio argentino y no en general a los inmuebles cual-
quiera sea el lugar de su situación. Pero esta norma se explica, "por-
que los inmuebles, son parte del territorio que en toda nación inde-
pendiente deben hallarse sujetos únicamente a su propia soberanía,
ningún estado hasta ahora ha consentido en el ejercicio de una juri&-
dicción extraña, la cual se considerarla depresivo de la independen-
cia y dignidad del que lo tolerase". (8)
De acuerdo a ella, la calidad de bien inmueble o mueble se
rige por la ley de la situación (arts, 2313 Y con.c. del C.C.); esta ley
también determina si el bien está dentro o fuera del comercio, por
su inalienabilidad absoluta o relativa (arts. 2337, 2336 Y 2338 del C.C.).
La lex rei sitae también rige la capacidad de hecho y de derecho
de las partes, estableciendo en este caso una excepción a la ley del do-
micilio, e igualmente es ella la que califica el negocio jurídico a través
del cual se produce la mutacíón del derecho real, porque en este caso
de inmuebles coinciden la lex rei sitae con la lex causae (la ley del
lugar de cumplimiento o ejecución del contrato arto 1209 del C. Civil).
Respecto a los derechos reales que pueden constituírse sobre
bienes situados en nuestro país, la norma es absoluta al respecto y
sólo reconoce aquellos que la ley crea y permite (art. 2502 y 2503 C.C.
y ley 13.512) y establece además los límites y restricciones al. dominio
(T. IV del L. m del C.C.), por lo que la autonomía de la voluntad
prácticamente desaparece en este ámbito y las partes deben someterse
rigurosamente a la Iex reí sitae. Esta es la que también determina los
requisitos neeesaríos para la transferencia o constitución de los dere-
chos reales (art, 10 última parte " ... a los modos de transrerírlos, y
a las solemnidades que deben acompañar esos actos, El titulo por 10
tanto, a una propiedad raíz, sólo puede ser adquirido, transferido o
perdido de conformidad con las leyes de la República". Lo que se ex-
plica porque sobre lds bienes inmuebles el estado ejerce un dominio
eminente, y ellos forman parte de uno de los elementos de íntegracíón
del mismo junto con Iel elemento personal.
Así el principio general que establece que la forma de los actos
jurídicos debe regirse por la norma "locus regit actum", tiene su ex-
cepción en materia de bienes raíces, ya que el articulo dispone: "Los
bíenes situados en la República son exclusivamente regidos por las le-
yes del país, respecto ... a. los modos de transferirlos y a las solemni-
dades que deben acompañar esas actos ... ", concuerda este articulo
con lo que dispone el arto 1211 "Los contratos hechos en país extran-
jero para transferir derechos reales sobre bienes inmuebles situados
en la República, tendrán 11' misma fuerza que los hechos en el terri-
torio del ~o, siempre que constaren de instrumento público y se
presentaren legalizados ... ".
La excepción a la "Jocus regit actum" establecida por los arts.
10, 1211 Y el arto 3129 del Código Civil referido a las hipotecas, es de

(8) Dr. CORTES: Vi.ta. Filealea, Tomo l. pág. 371.

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cará.ct&r-r.~tivº .."y__
@_lQ debe entenderse a la exigencia del instrumento
,/ ¡:>~_!>lico,
y permite la recepción del derecho extranjero, en cuantó=el
carácter de éste y sus solemnidades se regirán por la ley del lugar de
su celebración. Es decir, que la excepción se refiere a la necesidad ine-
ludible de una forma auténtica, el instrumento público, pero los requí-
sitos del mismo, calidad del funcionario que le da autenticidad, se
rige por la ley donde el mismo se celebra. y esta es la interpretación
que nos dá el mismo codificador en la nota ad artículo 1211, que dice:
"CUando decimos que los contratos de que habla el artículo deben
constar de instrumentos públicos ,no se exige que precisamente sean
hechos por notarios o escribanos públicos ... " y sigue diciendo Vélez
que hay naciones como Austria. Prusia, etc., en las cuales los jueces
son los únícos que dan autenticidad a los actos, y los notarios se limi-
tan a protestar letras, o a recibir contratos die las personas que no
saben escribir. Respecto de estos contratos hechos en estas naciones,
aunque los instrumentos no sean hechos ante 'escribanos, deben Ser
comprendidos entre los que el artículo llama instrumentos públicos.
El segundo requisito índíspensable en cuanto a la forma, es la
legalización de los instrumentos públicos celebrados en el extranjero,
a partir de la cual tendrán la autenticidad necesaria, que los equipara
a los celebradas en el país.
SIipor ellos se transfiriese el dominio de bienes raíces, dice el
arto 1211 - segunda parle, la tradición de éstos no podrá hacerse con
efectos jurídicos hasta que estos contratos se hallen protocolizados por
orden de un juez competente. Es decir que para la posesión de derecho,
es indispensable cumplir con el requisito previo de la protocolización,
de lo contrario nos encontraríamos ante una posesión de hecho, ya
que la tradición no produciría los efectos traslativos del dominio.
De esta forma, el codificador pone en manos del poder jurisdic-
cional ,la protección del orden públicc interno; ante la presentación
del documento auténtico, el juez debe calificar tanto las formas ex-
trínsecas del instrumento como las Intrínsecas, y si ambas no afectan
f 1 orden público argentino, ordena. su protoeolízacíón, designando al
notario con jurisdicción para el caso.
Una vez efectuada la protocolización del instrumento público
foráneo, las partes podrán efectuar la tradición del inmueble con
efectos jurídicos, no es indispensable que el instrumento público se
halle inscripto, ya que el artículo 1211 no lo exige, ni ello surge tam-
poco del nuevo artículo 2505 reformado por la ley 17.711. Porque en
nuestro derecho la inscripción no es obligatoria y el derecho real ínter-
partes se perfecciona con el título y modo y la inscripción sólo perfec-
ciona el derecho real por su oponibilidad a terceros interesad os (con
la. excepción del arto 20 - ley 17.801).
Para la protocolización y posterior inscripción del docwnento,
en el Registro Inmobiliario de la jurisdicción que corresponda, por e:t
lugar de situación del inmueble, el notario deberá solicitar previa-
mente los certificados administrativos correspondientes y el certifi-
cado prescripto por el arto 23 - ley 17.80i, a partir del cual se produce
el bloqueo regístral, debiendo ingresar y anotar el título en los térmi-
nos y bajo las prescripciones del ordenamiento argentino, ley 17.801
Y decreto reglamentario local. Ya que todo lo referente a la publicidad
se rige por la lex reí sitae.
Es importantísima en esta etapa la intervención del notario en

15%
la calificación del documento, respecto sobre todo al aspecto formal
del mismo para que se le adjunten todos los elementos catastrales y
registrales índíspensables para posibilitar su inscripción. (9)
En la doctrina contemporánea del derecho internacional pri-
vado se considera de orden público internacional, los efectos extrate-
rritoriales de la publicidad hecho mediante la inscripción en los regis-
tros. (10)
Validez de los contratos sobre transferencia o constitución de derechos
reales celebrados en instrumento privado.
Como ya lo expresáramos es indispensable distinguir entre los
requisitas necesarios para transferir el dominio de la causa de la trans-
ferencia.
El artículo 10 nada dice sobre la ley aplicable al negocio jurí-
dico causal contenido en el instrumento público, pero el artículo 1209
del C.Civil, determina: "Los contratos celebrados en la República o
fuera de ella, que deban ser ejecutados en el territorio del Estado, serán
juzgados en cuanto a su validez, naturaleza y obligaciones, por las
leyes de la República, sean los contratantes nacionales o extranjeros".
Por lo que en el caso de contratos sobre inmuebles la lex causae coín-
cidirá con la lex rei sitae, y a ésta se sometería el negocio jurídico
causal.
Esta distinción es de notoria importancia, ya que si el negocio
jurídico causal fuese celebrado en instrumento privado en el extran-
jero, y debidamente autenticado mediante la legalización, si bien no
constituye un medio idóneo para la transferencia o mutación del de-
recho real sobre el bien, valdrá en nuestro país como obligación de
hacer, de acuerdo a lo dispuesto por los arts. 1184 inc. 1, 1187 Y 1185
del C. Civil.
Creemos que ésta es la interpretcaión correcta, el. artículo 10
impone la lex rei sitae, para la transferencia del derecho real; ya que
nada dice respecto del contrato causal. es el artículo 1209el que deter-
mina que éste debe regirse por la lex causae que en este caso parti-
cular de inmuebles coincide con la lex rei sítae, y para nuestro Código
cuando la forma fuese exigida ad-probationem, la falta de la misma
no se traduce en un anulidad absoluta del acto, sino que da origen a
una obligación de hacer fungible, la de otorgar el instrumento público.
La interpretación que sostiene que el negocio jurídico causal,
debe hacerse "ab-initio" en instrumento público, se basa en una inter-
pretación literal del texto del artículo 1211 que habla de "contratos",
entendemos que el legislador intentó aclarar que estos contratos si no
estuvieran redactados en instrumento público carecerían de fuerza

(9) Como la publicidad se rige, por la lex rei sitae, es indispensable agregar al do-
cumento extranjero, los elementos indispensables, para poder cumplir con los
principios registrales, como por ejemplo: el d·e especialización.
( 10) EJ Código de Bustamante y Sirvén, en su artículo 136 dispone que son de orden
público internacional, las normas que crean y regulan los registros de la pro-
piedad e imponen su necesidad respecto de terceros. Y el artículo 137 esta-
blece, que se inscribirán en los estados contresctuales los documentos o títulos
inscribibles, otorgados en otros, qu", tengan fuerza en el primero, con arreglo
al Código, así como también las ejecutorjas a que dé cumplimiento de acuerdo
al mismo, en el Estado a que el registro corresponda, o tenga en él fuerza de
cosa juzgada.

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para producir la mutación o cambio del derecho real, luego de llenados
los requisitos die la legalización y protocolización, ya que carecerían
de un elemento indispensable para la transferencia del derecho real,
el título idóneo. Pero de allí a manifestar que estos contratos celebra-
dos en instrumento privado en el extranjero y debidamente legalizados,
son nulos de nulidad absoluta para las leyes argentinas, creemos que
es una interpretación errónea de nuestros textos legales. (11)
Una cosa es el título indispensable para la transferencia o cons-
titución del derecho real y otra el contrato o negocio jurídico causal.
CUando la forma del contrato o negocio jurídico causal fuese
exigida en instrumento público, ad-solemnitatem, como en el caso de
la donación de bienes inmuebles (art. 1810 C.C.), el instrumento en
el que está contenido es al mismo tiempo titulo apto para la transfe-
rencia del dominio.
Pero si la donación de inmuebles se hubiere realizado en ins-
trumento privado, en nuestro país es nula de nulidad absoluta. Deber
mos distinguir entonces si dicha forma es apta para la lex fori. Si la
lex fori fuera la argentina, dicho contrato sería nulo de nulidad abso-
luta de acuerdo a lo dispuesto por los arts. 1810 y 1211, porque afec-
taría el orden público interno.

HIPOTECAS CONSTITUIDAS EN EL EXTRANJERO


Art. 3129 del C. Civil
En cuanto a la forma de constitucilón de hipotecas, el artículo
3129 nos remite a lo dispuesto por el artículo 1211, pero además para
que produzca efecto respecto de terceros, debe inscribirse en el Regis-
tro de Hipotecas en el término de seis días desde aquel en que mereció
aprobación judicial el pedido de protocolización, para que los efectos
de la anotación se retrotraigan al día de la providencia judicial.
Tratándose de hipotecas constítuídas en el país, los efectos de
la anotación se retrotraen al día de la instrumentación del acto, si el
título es presentado en el término de 45 días al Registro, desde la
fecha de su otorgamiento.
Este tratamiento distinto no configura una desigualdad y está
justificado por las siguientes razones, dice la Dra. Kaller de Orchans-
ky: "el instrumento público otorgado en el extranjero no es un instru-
mento público para nosotros, después de legalizado se transforma en
auténtico, la providencia judicial que ordena la protocolización es ya
un instrumento público, que prueba la existencia del derecho constí-
tuído y le dá fecha cierta".
Si la hipoteca fuera presentada fuera de término, produce sus
efectos respecto de terceros desde el día de su anotación, en ambos ca-
sos.
Lo que sí es criticable es que la ley 20.089,al modificar el plazo
contenido en los arts. 3137 Y 3149 del C. Civil y arto 5 de la ley 17.801,
no haya reemplazado el término de seis días del artículo 3129, para

(1 1) LLERENA, BALDOMERO: Concordancias y Comentarios al Código Civil Argen-


tino, ed. jacobo Peuser, Bs. As., 1899, T. 1, pág. 45, expresa: "Si el acto no
tuviera las formas legales exigidas en el país de ,su otorgamiento, creemos que
en la Republica valdría como obligación de hacer, con arreglo a lo dispuesto
en el Art. 1187".

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establecer un régimen armónico y permitir en el caso de este artículo
la presentación al Registro del título en el plazo de 45 días desde la
fecha de la providencia judicial que ordene la protocolización, ya que
en el plazo del mismo es prácticamente imposible obtener todos la;
certificados administrativos requeridos.
También en el caso de las hipotecas, el legislador ha deposítado
en el poder jurisdiccional, el deber de resguardar el orden público in-
terno, a él corresponde no sólo calificar las formas extrínsecas sino
también las intrínsecas.
La nota al artículo 3129, ordena que el Juez debe observar tam-
bién el contenido, o sea que la hipoteca tenga una causa lícita para
nuestras leyes. Si la deuda principal en cuya garantía se constituye
la hipoteca, tiene una causa ilícita para nuestras leyes, como serían
las deudas de juego de suerte y azar, aunque estén autorizadas en el
país donde se otorgó la hipoteca, ésta no produciría ningún efecta
para nuestras leyes.

TRATADOS DE MONTEVIDEO DE 1889 Y 1940


El tratado de Derecho Civil Internacional de Montevideo de
1889 Y el Tratado de 1940 en general se apartan de la regla "locus
regit actum".
El Tratado de 1889, en su artículo 32, rechaza la "loeus regít
actum" y €8tablece que la forma de los actos jurídicos debe regirse
por la lex causae, es ésta la que determina si es necesario que lOSmis-
mos se hagan por escrito y la calidad del documento correspondiente.
Pero en el artículo 39 se establece: "Las formas de los instrumentos
públicos se rigen por la ley del lugar del cumplimiento de los contratos
respectivos" .
Esta excepción a favor de la ley del lugar de la celebración res-
pecto de los instrumentos públicos, se explica por la intervención de
un funcionario público que debe aplicar necesariamente la ley de su
país. Dice, Vico, que la aplicación de la regla "locus regit actum" es
obligatoria para los actos auténticos (art. 39) y no podría ínvocarse
en su contra el ine. 4 del arto 14 del Código Civil para validarlos, porque
tal disposición no rige para el tratado, euya aplicación está limitada
por el artículo 4 del protocolo adicional.
Es criticable que el Tratado de 1889, haya adoptado para regir
las formas de los actos jurídicos (con excepción de los instrumentos
públicos), la ley del lugar de BU cumplimiento o ejecución, porque en

(12) VICO, CARLOS M.: "Curso de Derecho Internacional Privado", Bs. As.• 1927,
V. 11. pág. 91 adhiere a nuestra opiniOn: "que "los requisitos formales tienden
simplemente a garantizar por medio de una prueba preconstituída la eficacia
y la certidumbre de los vínculos que se crean por el instrumento. Si ésto ha
sido otiginariamente hecho bajo forma privada. pero se transforma luego en
un instrumento público mediante el cumplimiento de los requisitos a cuya exis-
tencia la ley subordina esta transformación. las leyes. que están interesadas
por un principio de ética legislativa, en dar validez a 108 actos jurídicos que
las partes realizan. no pueden negar eficacia a actos en los cuales el requisito
formal viene a cumplirse posteriormente".
( I3) MOISSESDE E5PANES. LUIS: "Las obligaciones naturales en el Derecho Civil
Argentino", Tema de un curso. ed. Biffignandi S. R. L.. Córdoba. 1967. opina
que en este caso no obstante lo dispuesto en el Art. 515. Inc. 5 del C. C.. se
trataría LO de un supuesto de obligación natural. sino de obligación ilícita.

155
la práctica esta forma puede dar lugar a dificultades insalvables, ya
que el lugar de cumplimiento puede ser impreciso, o el contrato debe
cumplirse en varios países, y porque una cosa es determinar que la
calidad del documento se rige por la ley de ejecución y otra más grave
aún es someter las solemnidades y requisitos de éste a la misma. . ...
En el tratado de 1940en cambio, la exclusión de la regla "locus
regit actum" es relativa. El artículo 36 dispone: "La ley que rige IQS
actos jurídicos decide sobre la calidad del documento correspondiente.
Las formas y solemnidades de los actos jurídicas se rigen por la ley del
Iugar donde se celebran u otorgan. Los medias.de publicidad por la ley
de cada Estado".
Por lo tanto la calidad del documento se ríge por la ley del lugar
die ejecución o cumplimiento del acto y las formas o solemnidades del
mismo por la ley del lugar de su celebración. Los medias de publicidad,
se someten a la ley de cada estado.
Respecto de los bienes, los Tratados de Montevideo, no distin-
guen entre bienes muebles o inmuebles, la norma es similar para am-
bos Tratados. El artículo 32 del Tratado de 1940, dispone: "Los bienes,
cualquiera sea su naturaleza, son exclusivamente regidos por la ley
del lugar donde están situados en cuanto a su calidad, a su posesión,
a su enajenabilidad absoluta o relativa y a todas las relaciones de de-
recho de carácter real de que son susceptibles". Es decir, que adoptan,
la Lex rei sitae. De todo lo expuesto surge, que respecto de la forma
el Tratado de Montevideo, de 1940, adopta un sistema similar al del
Código Civil Argentino, en materia de transferencia o constitución de
derechos reales sobre bienes inmuebles.

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CONCLUSIONES:

1. Dada la amplitud de los términos de lo.. Arts. 12 y 950 del Código Civd, la
norma "Iocus regit actum", se aplica tanto a Ias formas ad-probationem como
a las ad-solemnitatem.
2. Esta norma es imperativa y las partes sólo están autorizadas a utilizar otra
forma que no sea la de la ley del lugar de la celebración, cuando el Código
así las faculta, como es el caso de Ials disposiciones de última voluntad (Arts.
3636,3638 y 3825 C.C.). La disposición del inciso 4 del artículo 14, no
convierte en facultativa la norma, ya que éste sólo puede invocarse cuando la
ley del lugar de celebración anula el acto.
3. La excepción conterrida en los Arts. 1211 y 3129 a la "Iocus regit actum", es
de carácter relativo y sólo debe entenderse a la exigencia del instrumento pú-
blico, en cuanto permite la recepción del derecho extranjero, ya que las solem-
nidades del mismo se regirán por la ley del lugar de su celebración.
4. Una vez legalizado y protocolizado por orden de juez competente, el instrumento
público foráneo, es título idóneo para transferir el dominio de bienes inmuebles,
situados en la República. Sólo después de cumplidos estos requisitos, la tradi-
cion podrá efectuarse con efectos jurídicos. Para su oponibilidad a tercero.
interesados es indispensable, la anotación del instrumento en el Registro Inmo-
biliario respectivo.
5. Si el negocio jurídico causal, a través del cual se pretende la transmisión o
mutación del derecho real sobre bienes inmuebles, fuese celebrado en instru-
mento privado en el extranjero, y Se presentare debidamente autenticado me-
diante la ,Iegalziación, no constituye un medio idóneo, un título suficiente, para
la transferencia o constitución de un derecho real, pero valdrá en nuestro país
como una obligación de hacer, d'e acuerdo a lo dispuesto por los Arts, 1184 inc.
1, 1187, 1185 C. Civil.
6. Es conveniente la modificación del plazo de 6 días, establecido en el artículo
3129 para la inscripción de las hipoetcas provenientes del extranjero extendién-
dolo a 45 días a partir de la fecha de la providencia judicia,l que ordene la
protocolización, a fin de establecer Un régimen armónico con los Arta. 3137,
3139 del C.C. y el artículo 5 de la Ley 17.801.
7. El Tratado de Derecho Civil Internacional de Montevideo de 1940, establece
repsecto de la forma de los actos jurídicos, para la transmisión o constitución
de derechos reales sobre inmuebles, un sistema simila.r al del Código Civil Ar-
gentino.

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