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PIE Y TOBILLO

La fractura de tobillo es una de las lesiones más frecuente de tobillo, que ha ido en aumento
en los últimos años, se presenta en diferentes edades, pero sobre todo en edad joven, ya que
dentro de las causas más frecuentes se encuentra la práctica deportiva, aunque también
pueden producirse por accidentes automovilísticos, lesiones por arma de fuego, caídas u otros.
Se sabe que las fracturas de tobillo se manifiestan con dolor intenso e impotencia funcional lo
que es un grave problema sobretodo en la población económicamente activa que es donde
mayormente se presenta este tipo de fractura, más aún porque requiere tratamiento
conservador o tratamiento quirúrgico, siendo en ambos casos necesario el reposo, lo que
podría impedir continuar con la actividad laboral y en muchas ocasiones durante largos
periodos de tiempo. Este estudio se realizó en el Centro Médico Naval, en el Servicio de
Traumatología y se busca determinar la asociación entre la edad, el sexo, el peso, la actividad
deportiva, la ocupación y el lado que se encuentra mayormente afectado en las fracturas de
tobillo cuyo tratamiento ha sido el quirúrgico. Es importante abordar este tema ya que las
fracturas de tobillo quirúrgicas han ido en aumento en los últimos años en este centro y ha
demandado gastos tanto por el tratamiento como por la estancia hospitalaria, ya que en los
militares en actividad con lesiones de este tipo es necesaria su estancia en el centro hasta su
recuperación absoluta.

Las fracturas de tobillo son las lesiones que más frecuentemente encontramos en todas las
edades, predominantemente en la edad productiva en un 75%.Las fracturas de tobillo también
se denominan fracturas maleolares o fracturasluxaciones, ya que se suelen acompañar de una
alteración de la congruencia articular del tobillo, a causa de una lesión de la cápsula articular y
de los ligamentos, se conoce que son las lesiones peor tratadas. Se requiere una reducción
anatómica perfecta que permita recuperar la función total de la articulación. 1,5

. Sous JO, Ruiz JA, Brito ME, Navarro R, Navarro ME y Navarro R. Fracturas de tobillo en
deportistas. Estudio epidemiológico. Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte.2012; 13(50):257-278.

En los últimos años se ha incrementado la incidencia y prevalencia de éstas lesiones en todas


las edades. En la mayoría de ocasiones se debe a un traumatismo de baja energía que puede
ser ocasionado durante la realización de algún deporte y en menor frecuencia durante
actividades de la vida diaria. En EEUU la incidencia de fractura de tobillo es de 184 por cada
100.000 habitantes por año, en Gran Bretaña las fractura de tobillo son causa de
aproximadamente un 10% de las visitas realizadas a los Servicios de Urgencias, de las cuales 20
– 30% a causa de lesiones deportivas. 2,3
b. Fracturas:

b.1. Concepto de fractura:

La fractura puede definirse como la interrupción de la continuidad ósea

o cartilaginosa. 14

b.2. Clasificaciones

b.2.1. Clasificación según su etiología:

Hay varias circunstancias que pueden dar lugar a una fractura,

aunque la susceptibilidad de un hueso para fracturarse por una

lesión única se relaciona no sólo con su módulo de elasticidad y sus

propiedades anisométricas, sino también con su capacidad de

energía.

Según su etiología se dividen en 14:

• Traumáticas

• Espontáneas

• Patológicas

• De fatiga

b.2.2. Clasificación según su mecanismo de producción:

b.2.2.1. Fracturas por mecanismo directo: Son las producidas

en el lugar del impacto de la fuerza responsable.

b.2.2.2. Fracturas por mecanismo indirecto: Se producen a

distancia del lugar del traumatismo. Se pueden clasificar de

la siguiente forma:

b.2.2.2.1. Fracturas por compresión: La fuerza actúa en

el eje del hueso, suele afectar a las vértebras, meseta

tibial y calcáneo. Se produce un aplastamiento, pues

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cede primero el sistema trabecular vertical paralelo,


aproximándose el sistema horizontal

b.2.2.2.2. Fracturas por flexión: La fuerza actúa en dirección

perpendicular al eje mayor del hueso y en uno de sus

extremos, estando el otro fijo. Los elementos de la

concavidad ósea están sometidos a compresión, mientras

que la convexidad está sometidos a distracción. Y como el

tejido óseo es menos resistente a la tracción que a la

compresión, se perderá cohesión en el punto de

convexidad máxima para irse dirigiendo a la concavidad a

medida que cede el tejido óseo. Al sobrepasar la línea

neutra puede continuar en un trazo único o dividirse en la

zona de concavidad, produciéndose la fractura en alas de

mariposa.

b.2.2.2.3. Fractura por cizallamiento: El hueso es sometido a

una fuerza de dirección paralela y de sentido opuesto,

originándose una fractura de trazo horizontal.

b.2.2.2.4. Fractura por torsión: La torsión se define como la

deformación de un objeto como resultado de una fuerza

que le imprime un movimiento de rotación sobre su eje,

estando un extremo fijo. También puede definirse como la

acción de dos fuerzas que rotan en sentido inverso. Se

originaran las fracturas espiroideas.

b.2.2.2.5. Fracturas por tracción: Se produce por el resultado

de la acción de dos fuerzas de la misma dirección y sentido

opuesto. Son los arrancamientos y avulsiones. 9

b.2.3. Clasificación según la afectación de partes blandas:

A veces se olvida que cualquier fractura, las partes blandas

adyacentes sufre los efectos del mismo traumatismo y que esto

supondrá:

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• Un mayor riesgo de infección


• Reducción del potencial de consolidación ósea

• Modificación de las posibilidades terapéuticas

La consideración de las lesiones de las partes blandas junto a la

fractura nos servirán para establecer un pronóstico y planificar el

tratamiento, y en función de estas lesiones podemos clasificar a las

fracturas en abiertas y cerradas; según exista o no comunicación de

la fractura con el exterior.

b.2.3.1. Fracturas abiertas

Todo fractura cuyo foco se expone al medio ambiente a través

de una herida en la piel. Conllevan un mayor índice de fallo de

consolidación y un mayor riesgo de infección (generalmente

por estafilococo, aunque también por anaerobios). Las

fracturas abiertas pueden clasificarse según su pronóstico, la

más usada es la de Gustilo14:

Grado 1: Los fragmentos óseos lesionan la piel de adentro

hacia fuera, siendo la herida menor de un centímetro. Tienen

un escaso riesgo de infección. Generalmente es suficiente la

cobertura antibiótica con una cefalosporina de primera

generación y limpieza quirúrgica.

Grado 11: Heridas inciso-contusas mayores a un centímetro y

menores a diez centímetros. Tras un desbridamiento y

limpieza exhaustiva pueden ser cerradas de forma primaria

aunque deben evitarse las osteosíntesis a nivel del foco de

fractura. Debemos usar cefalosporinas y aminoglucósidos

combinados.

Grado 111: Presenta una herida mayor de diez centímetros,

habitualmente producida de fuera a dentro debido al

mecanismo de fractura, y con gran lesión de partes blandas

24

: __ .. _ •.
adyacentes. Según la lesión de partes blandas las dividimos

en:

lilA: Es posible la cobertura del hueso con los tejidos

lesionados

1118: Para la cobertura deberíamos usar injertos y/o

colgajos.

JJJC: Asocia lesión vascular. Riesgo alto de amputación. Se

incluyen aquí las lesiones por arma de fuego. 14

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.· íXOOliD5S .. -~- ~'iJ~ J ~ ·-'. ----~----- - . - -------~ . -~- -- GRADO 1 Menor a 1 cm - -----CE-
FAZOLINA 2gr CIERRE PRIMARIO

endovenoso al ·

. ingreso 1 gr EV C/ ·

6-8 HS por 48-72

horas. 27

f GRADO 11 lrEntre 1--a-1-ocrñ-- -- ~ ---¡ CEFAZOLINA -2gr- 1

l· CIERRE- TRAS

i EV (al ingreso) DESBRIDAR

~- ------- ------ ---"'·-----~-------_J . ------------------ , GRADO 111 Mayor a 1 Ocm . . : CIERRE POR 1

AMINOGLUCOSIDO

[lil-A-- ------~Es posTbfe cubrir efhueso -~3 a 5 mg/kg (al : SEGUNDA l

¡ rn:a-~-LNo-es'posfbfe-cubrlrio~--j ingreso) Después ¡INTENCIÓN j

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doble plan ATB ,

l _Lf~ego durante 3 días. 27 Í _ _ __ __ __ ___ _ _ _ --'

Cuadro: CLASIFICACIÓN DE FRACTURAS ABIERTAS SEGÚN GUST/LO.

b.2.4. Clasificación según su patrón de interrupción.

Según la continuidad ósea las fracturas se pueden dividir:

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b.2.4.1.Fracturas incompletas: La línea de fractura no abarca todo

elespesordel hueso.

b.2.4.2. Fracturas completas: Existe solución de continuidad y

afecta todo el espesor del hueso y periostio.

b.2.5. Clasificación según su estabilidad

b.2.5.1. Estables: Son las que no tienen tendencia a desplazarse

tras conseguir la reducción. Son fracturas de trazo transversal u

oblicuo, menor de 45°.

b.2.5.2. Inestables: Son las que tienden a desplazarse tras la

reducción. Son fracturas con un trazo oblicuo mayor de 45°,

excepto las de trazo espiroideo. No hay que olvidar que la

estabilidad depende más de las partes blandas que del plano de

fractura14.

14. Ramos Vertiz, Alejandro José. Traumatología y Ortopedia. Segunda

Edición. Página 224. 2011.

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