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CI: 23508075
Dariana Jiménez. CI: 24474272
Humberto Zanotti. CI: 23408285
SIT 2. Exposición 1
Internet de las cosas
Internet de las cosas (IoT ó IdC) es un concepto que se refiere a una interconexión digital
de objetos cotidianos con internet. Es, en definitiva, la conexión de internet más con objetos
que con personas. También se suele conocer como internet de todas las cosas o internet en
las cosas. Si los objetos de la vida cotidiana tuvieran incorporadas etiquetas de radio, podrían
ser identificados y gestionados por otros equipos de la misma manera que si lo fuesen por
seres humanos. El concepto de internet de las cosas fue propuesto en 1999, por Kevin
Ashton, en el Auto-ID Center del MIT, en donde se realizaban investigaciones en el campo
de la identificación por radiofrecuencia en red (RFID) y tecnologías de sensores.
La empresa estadounidense Cisco, que es quien está detrás de la iniciativa del internet de
las cosas, ha creado un “contador de conexiones” dinámico que le permite estimar el número
de “cosas” conectadas desde julio del 2013 hasta el 2020. La conexión de dispositivos a la
red a través de señales de radio de baja potencia es el campo de estudio más activo del internet
de las cosas. Este hecho explica por qué las señales de este tipo no necesitan wi-
fi ni bluetooth.
El término internet de las cosas se usa con una denotación de conexión avanzada de
dispositivos, sistemas y servicios que va más allá del tradicional M2M (máquina a máquina)
y abarca una amplia variedad de protocolos, dominios y aplicaciones. Una cosa, en la internet
de las cosas, puede ser una persona con un implante de monitor de corazón, un animal de
granja con un transpondedor de biochip, un automóvil que tiene sensores incorporados para
alertar al conductor cuando la presión de los neumáticos es baja, o cualquier otro objeto
natural o artificial al que se puede asignar una dirección IP y darle la capacidad de transferir
datos a través de una red.
Aplicaciones
Las aplicaciones para dispositivos conectados a internet son amplias. Múltiples categorías
han sido sugeridas, pero la mayoría está de acuerdo en separar las aplicaciones en tres
principales ramas de uso: consumidores, empresarial, e infraestructura. George Osborne, ex
miembro del gabinete encargado de finanzas, propone que la IoT es la próxima etapa en la
revolución de la información, refiriéndose a la interconectividad de todo: desde el transporte
urbano hasta dispositivos médicos, pasando por electrodomésticos. IoT puede tener
aplicaciones en casi cualquier área. Estos sistemas podrían encargarse de recolectar
información en diferentes entornos: desde ecosistemas naturales hasta edificios y fábricas,
por lo que podrían utilizarse para monitoreo ambiental y planeamiento urbanístico.
Sistemas de compra inteligentes, por ejemplo, podrían seguir los hábitos de compra de un
usuario específico rastreando su teléfono móvil. A estos usuarios se les podrían ofrecer
ofertas especiales con sus productos preferidos o incluso guiarlos hacia la ubicación de los
artículos que necesitan comprar. Estos artículos estarían en una lista creada automáticamente
por su refrigerador inteligente en su teléfono móvil. Pueden encontrarse más casos de uso
en aplicaciones que se encargan de la calefacción, el suministro de agua, electricidad, la
administración de energía e incluso sistemas inteligentes de transporte que asistan al
conductor. Otras aplicaciones que puede proveer el internet de las cosas es agregar
características de seguridad y automatización del hogar.
A. Aplicaciones de consumo
Un porcentaje creciente de los dispositivos IoT son creados para el consumo. Algunos
ejemplos de aplicaciones de consumo incluyen: automóviles conectados,
entretenimiento, automatización del hogar, tecnología vestible, salud conectada y
electrodomésticos como lavadoras, secadoras, aspiradoras robóticas, purificadores de aire,
hornos, refrigeradores que utilizan Wi-Fi para seguimiento remoto.
El término “IoT empresarial” (EIoT, por sus siglas en inglés) se usa para referirse a todos
los dispositivos en el ambiente de los negocios y corporativo. Para 2019, se estima
que EIoT comprenderá cerca de un 40% o 9.1 millardos de dispositivos.
C. Administración de infraestructura
A. Medicina y salud
Los dispositivos de IoT pueden utilizarse para el rastreo remoto de pacientes y sistemas
de notificación de emergencias. Estos dispositivos pueden variar desde monitores de presión
sanguínea y control de pulsaciones, hasta dispositivos capaces de seguir implantes
especializados, como marcapasos, pulseras electrónicas o audífonos sofisticados. Algunos
hospitales comenzaron a utilizar "camas inteligentes" que detectan cuándo están ocupadas y
cuándo un paciente intenta levantarse. También puede ajustarse automáticamente para
asegurar que el paciente tenga un soporte adecuado sin interacción del personal de
enfermería.
B. Transporte
La gran ventaja es que en un futuro cercano podremos controlar todos los aparatos
electrónicos desde un dispositivo móvil y podremos alimentarlos de información para tener
una experiencia más personalizada o incluso para comprender mejor los hábitos propios,
facilitando nuestra vida exponencialmente.
Sensores
Los sensores son los soldados de la Internet de las cosas, las piezas de hardware que hacen
el trabajo crítico de los procesos de monitoreo, mediciones y recolección de datos. Ellos son,
muchas veces, una de las primeras cosas que las personas piensan al imaginar el IoT. Los
sensores son dispositivos sofisticados que son frecuentemente usados para detectar y
responder las señales eléctricas u ópticas. Un sensor convierte el parámetro físico (por
ejemplo: temperatura, presión sanguínea, humedad, velocidad, etc.) en una señal que puede
ser medida eléctricamente.
Existen ciertas características que necesitan ser consideradas a la hora de elegir un sensor:
• Precisión
• Condiciones ambientales: generalmente existen límites de temperatura/humedad
• Alcance: límite de medición del sensor
• Calibración: esencial para la mayoría de los dispositivos de medición, una vez que las
lecturas cambien con el tiempo
• Poder de decisión: mayor incremento detectado por el sensor
• Costo
• Repetición: la lectura que varía es repetidamente medida dentro del mismo ambiente.
Se pueden usar esos dispositivos en casi todos los ambientes de IoT, desde el piso de la
fábrica hasta los campos agrícolas. En las fábricas, estos sensores pueden medir
continuamente la temperatura de una máquina para garantizar que permanezca dentro de un
límite seguro. En las haciendas, pueden ser utilizados para rastrear la temperatura del suelo,
agua y plantas para maximizar la producción.
D. Sensor de humedad
La agricultura es el área que más desperdicia agua en el mundo. Los agricultores usan el
70% del agua dulce del mundo, pero el 60% es desperdiciada debido al uso de sistemas de
irrigación con fuga, métodos de aplicación ineficientes y el cultivo de culturas sedientas, de
acuerdo con World Wildlife Fund. Sensores de presión pueden ser utilizados para determinar
el flujo de agua a través de tubos y para notificar a una persona o al equipo responsable
cuando algo necesite ser corregido. Éstos también son usados en vehículos inteligentes y
aeronaves para determinar la fuerza y la altitud, respectivamente.
F. Sensores de nivel