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Drogas
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atamiento
o y Preven
nción
 

Uniddad II- 1° Parte- Material

M de
d Lecturra: Modalidades d
de
Interrvención

El grrupo com
mo estrattegia de la terapé
éutica
La agrupabilidad de la consulta
¿Cóm
mo pensar el espacio
o grupal? ¿Por qué agrupar?

La modalidad
m de trabajjo consiste
e en agrupar las co
onsultas en reuniones
que tienen
t una
a frecuenc
cia seman
nal, con el objetivo de que la
as personas
puedan expres
sar e inte
erpelar su
u visión p
particular en un co
ontexto qu
ue
resultta contene
edor.

Cuan
ndo hablam
mos de grupos,
g no
os referim
mos no al concepto
o de grup
po
terap
péutico ps
sicoanalític
co que es
staría cara
acterizado
o por un encuadre y
meto
odología diferente
d por
p ser grrupos cerrrados, hom
mogéneoss y con un
na
dinám
mica de tra
abajo dete
erminada.
Por eso
e hablam
mos de la agrupabilidad de la
a consulta a partir d
de la cual e
en
una primera
p in
nstancia observamo
os que pod
der encon
ntrarse con otros qu
ue
están
n atravesando la mis
sma situac
ción es co ntenedor en sí mism
mo. Quienes
concurren adv
vierten que
e no están solos en
n su dolo
or y esto a
actúa com
mo
én y posib
sosté bilita identificarse co
on otros. L
La identific
cación con el otro e
en
un prrimer mom
mento aliviia la angus
stia inicial y disminu
uye las anssiedades.
En algunas co
omunidade
es puede llegar a p
percibirse
e por el c
contrario u
un
ento de la
aume as ansieda
ades y de la vergüe
enza por las repressentaciones
socia
ales que ex
xisten en los discurs
sos de cad
da comuniidad y es p
por ello qu
ue
es muy
m imporrtante gen
nerar esto os en loss cuales sse posibilite
os espacio
repen
nsar y dec
construir estos
e preju
uicios y m
mitos socia
ales que estigmatiza
an
el pro
oblema.

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Cons
sideramos que:

- Lo grupal conmociona al individuo

i que esta ensimism
mado en ssu
dolor, lo
o arranca de su aislamient
a to y lo ssitúa fuera de lug
gar
generand
do la aperrtura a pen
nsar otras posibilida
ades de ac
ccionar.
- La rique
eza grupa
al es uno
o de los modos d
de interve
ención qu
ue
posibilita
a la produc
cción de formas de subjetivid
dad alterna
ativas.
- El desafío que te
enemos po
or delante
e es penssar en un
na situació
ón
grupal que
q no aplane las diferenc
cias, niegu
ue la sing
gularidad o
reduzca la diversid
dad.

o nos dic
Como ce Percia en su lib
bro Pensa
ar lo Gru
upal “El g
grupo es la
produ
ucción de
e un espacio comú
ún en el q
que se rea
aliza una implicació
ón
difere
ente”.

La modalidad grupal para el aborrdaje con ffamilias ess un instru

umento qu
ue
posib
bilita circular y vehic
culizar la palabra, e
entendemo ud1
os siguiendo a Freu
que lo que no se puede decir, se actúa
a y lo
o que no sse quiere rrecordar, se
repite
e.
La dinámica grupal posiibilita una instancia de pensa
amiento donde pod
der
escuc
charse a uno mismo
o, a otros y reflexionar.
Si bie
en, como decíamos antes, las
s particula
ares de esste dispossitivo grup
pal
no responden a lo qu
ue estricttamente sse entiende como
o un grup
po
terap
péutico, sí tiene efec
ctos terapéuticos so
obre las pe
ersonas, e
es decir, qu
ue
por su
s configuración y metodolog
m gía aborda
a eficazme
ente el pro
oblema qu
ue
despliegan las familias.

                                                            
1
 S. Freu
ud, (1856‐1939
9) Medico Neu
urólogo Austríaaco. Creador deel Psicoanálisiss. 

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Es in
nteresante
e la conce ción que realiza Ullloa2, a p
eptualizac partir de ssu
ajo con grrupos acotados, donde pudo
traba a numerossidad social
o definir la
como
o el campo donde cuentan
c ta
antos suje
etos de cu
uerpo pressente com
mo
sujetos hablantes cuenta
an. Y plantea un pri mer cuenttan que tie
ene que v
ver
con la mirada en
e recipro
ocidad, por eso siem
mpre tratab
ba de

traba
ajar en rue
eda porqu
ue es lo primero
p que hace al sujeto social. Y el
q
segundo cuentan tiene que ver con
c el suj eto singular, con lo
o que pud
do
decirr.
En un
u grupo es importante qu
ue cada u
uno pueda
a decir sobre sí. L
La
posib
bilidad de trabajar en
e rueda para
p poder sostenerr lo múltip
ple y lo un
no,
es co
ondición de pensar en
e grupo.

Para comenza
ar a decir es neces
sario que se estab
blezca un vínculo d
de
confiabilidad con
c quien
nes participan del e
espacio p
pero sobre
e todo co
on
quien
n está coo
ordinando el grupo, sabemos que los procesos se
e dan en u
un
tiemp
po y ese tiiempo req
quiere de establecer
e r nuevos v
vínculos.

En cuanto
c a los crite
erios para
a esta a grupabilid
dad de la consultta,
coinc on Bleger y Pasik3 que
cidimos co q plant ean lo sig
guiente: “L
Los criterio
os
de agrupabilid
a dad, es decir
d las condicion
nes que determinan que u
un
pacie
ente pueda
a ser bene
eficiado co
on una ps icoterapia
a grupal, sson tema d
de
discu
usión. Pro
obablemen
nte esto se deba
a a que estas indicaciones
depe
enden de tantas
t varriables que
e los crite
erios están
n muy lejo
os de poder
ser absolutos.
a Estas va
ariables no
n son so
olo relativ
vas al pac
ciente, sin
no
tamb
bién al gru
upo, al momento
m grupal,
g a la instituc
ción a la que pued
da
perte
enecer el grupo, y también
n, por qu é no, a variables relativas a
carac
cterísticas del o de los terapeutas”

                                                            
2
 Entrevvista a Fernanddo Ulloa “En laa numerosidad social hay algoo de puesta enn escena” Cuaddernos de Cam
mpo
2 año 2007.
2

3
Psicotterapia psicoan
nalítica grupal: Psicoanálisis grupal.
g Cuándo
o, cómo, porqu
ue Laura Blege
er - Néstor Passik
 

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Noso
otros con
nsideramo
os necesarias lass entrevistas pre
evias a la
incorrporación al grupo si
s fueron solicitadas
s aciente o tuviesen u
s por el pa un
fin estrictam
mente d
diagnóstic
co.

Finalmente el armado de
d un gru
upo depen
nde de m ctores pero
muchos fac
ningu
uno tan po
oderoso como
c la vo
oluntad y confianza
a de los prrofesionales
implicados en dicho instrumento.

La contenció
ón y la orrientación
A partir
p de la casu
uística clíínica pud
dimos ob
bservar y describ
bir
deterrminadas caracterís
sticas de cómo ll egan a n
nuestra c
consulta las
familias. Esta descripc
ción nos servirá l uego parra enfoca
ar nuestras
interv
venciones.

- Emocion
nalmente desorganiz
d zada y dessbordada
- La única solución posible
p es
s la interna
ación
- Se busca
a una respuesta inm
mediata y m
mágica
- El proble
ema se deposita en la persona
a que consume
- Está esta
ablecido un
u vínculo de agresio proches
ones y rep
- La comunicación se
s encuenttra interru
umpida

mo podem
¿Cóm mos acompañar el proceso
p d
de las fam
milias? A ttravés de la
conte
ención y la
a orientación.

Contener implica ser so

oporte de las emociones y se
entimiento
os de otro
os,
pudie enerse ante las mismas. La contención
endo soste uce a través
n se produ
de la ESCUCHA
A Cuando los profes
sionales esscuchamo
os el sentirr del otro es
funda
amental en
ntender es
s que eso que dice e
es lo que ssiente, perrtenece a ssu
realid
dad psíqu
uica. Tal vez creamos qu
ue está e do, que lo
equivocad
obsta
aculiza para actuar o que no
o lo ayuda er momento
a, pero en un prime

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debe
emos gene
erar el esp
pacio para
a expresar y tramittar esos sentimiento
os
para luego dar lugar a pe
ensar cam
minos altern
nativos de
e accionar.
ste sentido
En es o la funció
ón primord
dial en la q
que se basa el dispo
ositivo es la
conte
ención, es decir de sostén
s em
mocional.
Sabemos que en toda situación
s de
d crisis o proceso de camb
bio emerge
en
las ansiedade
a s básicas
s que ca
aracterizan
n la angustia o e
el malesttar
obsta
aculizando
o el tránsiito hacia acciones eficientess. Desde e
el marco d
de
interv
vención re
esultan im
mprescindibles cierttas actitu
udes y aptitudes e
en
función de la contención
c n que conffiguran el posiciona
amiento qu
ue posibiliita
abord
dar la problemática
a desde la necesida d y/o dem
manda de las familias
que consultan:
c

-La disociación
d n instrume
ental, es un recurso fundamental que p
permite, por
un lado, la reso
onancia es
spontánea
a con el ot ro generando un ac
cercamiento
desde la em
mpatía y, por otro lado, la distancia óptima o
orientada a
estab
blecer el cuadro de situación para visua
alizar la prroblemátic
ca puntuall.

-La capacidad
c de escuc
cha, implic
ca una esc
cucha múlltiple lo cu
ual signific
ca
que en
e ese inte
ercambio no se está escucha
ando a una
a sola perrsona sino
oa
toda una histo
oria vincula
ar que ha configura
ado la sing
gularidad de quien la
expre
esa; se esc
cucha a alguien que
e es porta
avoz, es decir, que habla por sí
mism
mo y por un contexto
o grupal fa
amiliar.

Se trata también de una

a escucha especializ
zada porq
que es dire
eccional. S
Su
carác
cter de direcciona
d alidad permite
p v
visualizar una dim
mensión d
del
problema, que
e en nuestro abord
daje es la dimensión vincularr, y facilittar
accio
ones hacia
a una reco
onstrucció
ón de las redes de
e comunic
cación y u
un
replanteo de lo
os vínculos
s.

Contener denttro de estta dinámic

ca grupal posibilita
a elaborar y processar
las emociones, hay un tiempo ne
ecesario p
para que las personas pueda
an
habla
ar, confiar y posteriormente escuchar
e llas interve
enciones ttendientess a
conm
mover y propiciar
p modalida
ades diferrentes de
e vinculac
ción a las
estab
blecidas.
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La orientación
n se planttea entonces como
o un proc
ceso secundario a la
conte
ención en el que la persona que
q pudo poner en palabras ssu angustia,
se sintió soste
enida y puede
p darr inicio a la reflex
xión acom
mpañado d
de
UCHAR las
ESCU s intervenc
ciones y/o
o sugerenc
cias del profesional a cargo d
de
la din
námica gru
upal.

La orientación
o n estará enfocada en orde
enar el p
problema expresad
do,
conso
olidar nue
evas herram
mientas y fortalecerr los recurrsos intern
nos. De essta
mane
era se da lugar parra comenz
zar a penssar en la posibilida
ad de hac
cer
algo diferente frente lo que
q está sucediendo
s o.

La configuración de la
a primera consulta
a que vim
mos, en c
cuanto a la
inmediatez y la solución
n mágica en la bús queda de
e respuesttas frente al
males
star, son caracterís
sticas de la socied
dad de co
onsumo a
actual y d
del
consu
umidor de drogas en particular. En este sen
ntido el g
grupo va a
posib
bilitar desa
andar el individualismo y la inmediate
ez de resp
puestas por
las qu
ue las fam
milias están
n atravesadas.

Vamo
os a cerrrar esta primera parte
p de la Unida
ad II con una frase
motiv
vadora de
e Albert Einstein “No
o pretend amos que
e las cosass cambien si
siemp
pre hacem
mos lo mismo. La crisis
c es la
a mejor b
bendición que pued
de
derle a personas y países,
suced p porrque la cri sis trae prrogresos”..

La próxima semana, en la 2° parte d

de esta u
unidad II,, vamos a
des
sarrollar cuáles
c son las fun
nciones e intervenciones po
osibles de
el
coo
ordinador del grupo
o.

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