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RECURSOS NATURALES – UNIDAD 9 (Régimen jurídico de los semovientes)

RÉGIMEN JURÍDICO DE LOS SEMOVIENTES


COSAS MUEBLES. PROPIEDAD
El art 227 CCC establece que “Son cosas muebles las que pueden desplazarse por sí mismas o por una fuerza externa”, por
lo tanto, los semovientes (animales) son cosas muebles.
Respecto a la estructura jurídica de la propiedad de los semovientes, se aplica la Ley 22.939, que establece que:
 Se presume, salvo prueba en contrario, que:
- el ganado mayor marcado.
pertenece a quien haya registrado a su nombre el diseño de
- el ganado menor señalado.
- el ganado porcino señalado o identificado con alguno de la marca, señal o el medio de identificación alternativo
los medios alternativos previstos por el art 1º de la ley. aplicado al animal.
 Se presume, salvo prueba en contrario, que las crías no marcadas o señaladas pertenecen al propietario de la madre,
siempre que las crías se encuentren al pie de la madre.
 Los animales de pura raza deben inscribirse en los “registros genealógicos” respectivos. Sin embargo, esta inscripción solo
tiene efectos perfeccionadores del título de adquisición (es declarativa), por lo que la falta de inscripción no produce
efectos respecto del derecho del propietario, pero sí respecto de terceros. Además, en los ejemplares de pura raza, la
marca o señal podrá ser sustituida por tatuajes o reseñas.
Quedan excluidos de este precepto los caballos pura sangre de carrera, porque tienen una regulación específica (ley N°
20.378) que establece que su inscripción en los registros genealógicos es de carácter constitutivo, por lo tanto ineludible.
 Cuando los semovientes no estén marcados ni señalados, o su marca o señal no sea clara, se aplica el art 1895 CCC, que
establece que “La posesión de buena fe del subadquirente de cosas muebles no registrables que no sean hurtadas o
perdidas (esta sería una excepción) es suficiente para adquirir los derechos reales principales, excepto que el verdadero
propietario pruebe que la adquisición fue gratuita…”.
EL GANADO
Son animales cuadrúpedos domésticos (porque el hombre los cría) destinados a la explotación ganadera (carne, leche,
pelaje, etc) y a la carga. El ganado se clasifica en:
1. Mayor: vacas, bueyes, caballos y mulas. 2. Menor: ovejas, cerdos y cabras.
No constituyen ganado:

 Los cuadrúpedos salvajes (ej: cabra de monte).  Animales bípedos (ej: gallinas, patos, etc).
MARCAS Y SEÑALES. LEGISLACIÓN NACIONAL Y PROVINCIAL. CÓDIGOS RURALES
El señalamiento de semovientes se originó debido al “cuatrerismo” (robo de ganado), ya que los dueños de animales
empezaron a marcarlos como una forma de protegerlos y acreditar su propiedad. Al principio cada provincia tenía un sistema
propio, hasta que en 1983 se dictó la Ley de Unificación del Régimen de Marcas y Señales, Certificados y Guías (22.939).
Medios de identificación (art 1):
 Marca: es la impresión de un dibujo o diseño que se efectúa sobre el animal por medio de hierro candente, de marcación
en frío o de cualquier otro procedimiento que asegure la permanencia en forma clara e indeleble, que autorice la
Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos del Ministerio de Economía y Producción.
 Señal: es un corte, incisión, perforación o grabación hecha a fuego, en la oreja del animal.
 Caravana: es un dispositivo que se coloca en la oreja del animal mediante la perforación de la membrana auricular.
 Tatuaje: es la impresión en la piel del animal de números y/o letras mediante el uso de puntas aguzadas, con o sin tinta.
 Implante: es un dispositivo electrónico de radiofrecuencia que se coloca en el interior del animal.
Para obtener el registro del diseño de una marca, señal o medio alternativo de identificación exclusivo para la especie
porcina, deberá cumplirse con las formalidades establecidas en cada provincia (art 2).
No se admitirá el registro de diseños de marcas iguales, o que pudieran confundirse entre sí dentro del ámbito territorial de
una misma provincia. También se comprenden aquellos diseños que, al superponerse a otro, lo cubra totalmente.
Si estuviesen ya registradas en una misma provincia marcas iguales o susceptibles de ser confundidas entre sí, el titular de
la más reciente deberá modificarla (art 3).
El registro del diseño de las marcas y señales confiere a su titular el derecho de uso exclusivo por el plazo que las
respectivas legislaciones provinciales establezcan, pudiendo ser prorrogado de acuerdo con lo que dichas normas
dispongan. Este derecho es transmisible y se prueba con el título expedido por la autoridad competente (art 4).
Es obligatorio para todo propietario de semovientes tener registrado a su nombre el diseño que empleare para marcar o
señalar. Queda prohibido marcar o señalar sin tener registrado el diseño que se emplee (art 5).
Es obligatorio para todo propietario de hacienda marcar su ganado mayor (durante el 1° año de vida del animal) y señalar
su ganado menor (antes de los 6 meses de edad). En el ganado porcino se autoriza también el uso de alguno de los otros
medios alternativos de identificación animal indicados en el artículo 1º de la presente ley (antes de los 45 días de edad). En
los ejemplares de pura raza, la marca o señal podrá ser sustituida por tatuajes o reseñas (art 6 y 7).
El incumplimiento de las obligaciones establecidas en el presente Título (arts 5 a 8) privará al propietario de los animales de
los derechos que esta ley le acuerde referentes al régimen de propiedad del ganado, sin perjuicio de las multas que
establecieren las legislaciones locales (art 8).
Ley Provincial de Marcas y Señales (5542)
Capítulo I - Disposiciones generales

Art 1º.- La marca y la señal constituyen signos de identificación colectiva, para el ganado mayor y el ganado menor, respectivamente.

Art 2º.- Todo productor agropecuario está obligado a marcar su ganado mayor y señalar su ganado menor, pudiendo utilizarse como
complemento la señal en el ganado mayor.

Art 3º.- Una vez registradas, la marca y la señal constituirán bienes exclusivos de las personas a quienes se hubiesen concedido y se
transmitirán a los herederos. Sus titulares podrán también disponer su transmisión, por contrato o por disposición de última voluntad,
pero el derecho de la marca o la señal en sí mismo no será susceptible del embargo ni de ejecución por los acreedores.

Art 4º.- La imposición legítima de la marca o la señal constituye un acto posesorio ostensible que servirá para calificar los actos
posteriores de posesión ejercidos sobre los animales que las llevan.

Art 5º.- La Secretaría Ministerio de Agricultura y Ganadería, a través de la Oficina de Marcas y Señales, será la autoridad administrativa
de aplicación de la presente Ley.

Art 6º.- La marca deberá registrarse por orden de departamento y la señal por el de pedanía, salvo la excepción prevista por el art 19.

Art 7º.- Quedan exceptuados de la obligación establecida por el Artículo 2º los propietarios de animales de pedigree, que serán
identificados conforme lo dispongan los respectivos Registros, según especies y razas.

Art 8º.- La omisión de la marca o la señal en el ganado de edades mayores a las fijadas en el artículo 46, implica salvo prueba en
contrario, presunción de mala fe contra su poseedor.

Art 9º.- Los productores agropecuarios están obligados a registrar las marcas y señales a utilizarse, prohibiéndose el uso de marcas o
señales no registradas.

Art 11º.- La inscripción de las marcas y señales se hará por la autoridad de aplicación, la que hará constar el dominio de la marca o señal
en un boleto que servirá de título y durará por el término de 10 años.
Juntamente con el boleto, la Oficina de Marcas y Señales entregará al titular un sello facsímile de la marca o señal (con leyenda alusiva
a la firma y/o establecimiento a que pertenece), e incorporará en sus registros los duplicados de uno y otro.

Art 12º.- Los ganaderos deberán estampar el sello a que se refiere el artículo anterior en toda la documentación que mantengan o
extiendan relativa al ganado de su marca o señal.

Art 13º.- La marca consiste en un dibujo, letras, números o signos, los que deberán estamparse con hierros candentes o por cualquier
otro procedimiento autorizado por la autoridad de aplicación y que produzca análogo efecto.

Art 14º.- La marca deberá tener una dimensión máxima de diez centímetros y mínima de siete, en todos sus diámetros, salvo la que se
aplique en la quijada, cuya dimensión máxima se reducirá a siete centímetros y la mínima a cinco.

Art 15º.- Las señales consisten en signos o cortes en las orejas, conforme a un catálogo de dibujos que dispondrá la Oficina de Marcas y
Señales.

Art 16º.- No se admitirá la coexistencia en un mismo departamento de dos marcas iguales o muy semejantes, salvo la excepción
prevista por el artículo 41. Cuando corresponda, deberá anularse la marca últimamente inscripta.

Art 17º.- No podrán coexistir dos señales iguales o semejantes en una misma Pedanía o en Pedanías colindantes o situadas a una
distancia de menos de 30 kilómetros. Si las hubiere, deberá anularse la señal más reciente.
Art 19º.- Los productores agropecuarios cuyos predios se ubiquen en 2 o más departamentos, serán registrados para el otorgamiento
de la marca en el departamento por el que los mismos opten.

Capítulo II – Adquisición y pérdida de la marca o señal

Art 20º.- El derecho sobre la marca o la señal se adquiere por la inscripción en el Registro que a tal efecto llevará la autoridad de
aplicación; como así también por la anotación de las respectivas transferencias en los casos de sucesión a título universal o singular.

Art 21º.- El derecho sobre la marca o la señal se pierde:

a) Por el transcurso del plazo fijado en el art 11, siempre que no fueren renovadas en la forma y dentro de los términos que establece
esta Ley.
b) Por la anulación prevista en los artículos 16 y 17.
c) Por transferencia de los derechos.
d) Por renuncia expresa del titular.
e) Por disolución total o extinción de la sociedad o asociación titular.
f) Por sentencia judicial.
g) Por cancelación declarada por autoridad competente.
h) Por la pérdida de la calidad de productor agropecuario.

Capítulo III – Del registro

Art 22º.- Para poder registrar una marca o señal ante la autoridad de aplicación, se deberá presentar la solicitud pertinente con los
requisitos que establece el artículo 27 y acreditarse, además, el carácter de productor agropecuario (propietario, locatario, u ocupante
legal de inmueble rural en la Provincia), salvo el caso de las que por motivos especiales se confieran a entidades públicas, a las
municipalidades o a las comunas, con la finalidad que provee la última parte del artículo 79.

Art 23º.- Toda marca o señal que se inscriba será catalogada mediante una numeración inmutable, correlativa y progresiva, que servirá
para determinarla.
En el boleto a que se refiere el artículo 11º, constarán los siguientes datos: nombre del propietario o los propietarios, domicilio,
matrícula individual, Departamento o Pedanía en los que se utilizarán la marca o la señal; número, libro, folio y serie que correspondan
según asientos del Registro; diagrama reproduciendo el dibujo o los cortes propios de la marca o la señal; impresión del pertinente sello
del ganadero; fecha de inscripción y de vencimiento y categoría o cantidad de animales que dicho boleto ampara.

Art 25º.- Las solicitudes para inscripción, renovación, transferencias, duplicado, rectificación, cambio o ampliación hasta tres
departamentos, ampliación de títulos o cambio de categoría, deberán ser presentados en los formularios especiales que proporcionará
la Oficina de Marcas y Señales y con el sellado que establezca la ley.

Art 26º.- Los interesados podrán proponer, en los casos en que resulten procedentes, el diseño o las características que fuesen de su
predilección.
Cuando resulten inadmisibles los diseños propuestos por los interesados, la Oficina de Marcas y Señales les asignará el que sea más
aproximado y se encuentre en condiciones de otorgarse.

Art 27º.- Las solicitudes a que se refiere el artículo 25 tendrán el carácter de declaración jurada, debiendo consignarse los siguientes
datos: nombre del o de los titulares, matrícula individual, antigüedad como productor agropecuario, departamento o pedanía,
ampliación de los mismos, en qué se utilizarán la marca o señal, indicación de la municipalidad, municipalidades o comunas
correspondientes y domicilio del o de los interesados.
La firma de éstos o, en su caso, la impresión dígito pulgar serán autenticadas por el funcionario de la Oficina de Marcas y Señales que
recepcione la solicitud, o por ante Escribano Público, Juez de Paz, Intendente Municipal o Presidente de la Comisión Comunal del lugar
del domicilio.

Capítulo IV – De la renovación

Art 29º.- Los titulares de boleto de marca o señal, a fin de conservar sus derechos deberán requerir su reinscripción dentro del lapso
comprendido entre los 3 meses anteriores a su vencimiento y los 6 meses posteriores al mismo.

Art 31º.- Producido el vencimiento de un boleto de marca o señal, el mismo carecerá de todo efecto legal; pudiendo solicitarse su
reinscripción, sin embargo de ello, dentro del término de dieciocho meses.
Transcurrido este último término sin haberse solicitado la reinscripción, se operará automáticamente la caducidad del correspondiente
boleto de marca o señal, pudiendo acordarse el mismo diseño a quien lo solicite, registrándoselo como nueva marca o nueva señal.

Capítulo VI – De los duplicados y rectificaciones

Art 33º.- En caso de pérdida o destrucción total o parcial de un boleto de marca o señal, o del sello fascímile, la autoridad de aplicación
deberá otorgar el duplicado correspondiente, dejándose expresa constancia en el nuevo boleto de su calidad de tal y de la advertencia
de que el mismo deja caduco y sin efecto el original.

Capítulo VII – Del cambio de departamento y/o pedanía


Art 37º.- Cuando un productor agropecuario, titular de boleto de marca o señal, traslade su explotación a otro Departamento o
Pedanía, deberá solicitar, según el caso, el cambio respectivo. Se le otorgará con preferencia el mismo diseño que ya tiene en uso para
su marca o señal; pero si esto no resultara posible por encontrarse registradas la misma o semejante marca o señal, el interesado
deberá solicitar un nuevo boleto.

Art 37º Bis.- Cuando un productor agropecuario, titular de boleto de marca o señal, amplíe su explotación a otro departamento,
conserva dicha titularidad en los términos que establece el artículo 41.

Capítulo VIII – De la ampliación (o cambio de categoría)

Art 38º.- Se establecen 7 categorías de boletos de marca o señal, los que autorizarán a sus propietarios para imponerlas hasta la
cantidad de ganado que figuren en aquellos:

1º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar a señalar hasta 10 animales;


2º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta 50 animales;
3º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta 100 animales;
4º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta 500 animales;
5º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta 1500 animales;
6º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta 5000 animales;
7º. CATEGORÍA: Autorizando a marcar o señalar hasta la cantidad que se declara, en unidades de mil, en más de 5000 animales.

Capítulo IX – De la clasificación

Art 40º.- Las marcas se clasificarán, según su diseño, en las siguientes series básicas:

 serie A: dos letras sueltas, unidas o una dentro de la otra;


 serie B: dos números sueltos, unidos o uno dentro del otro;
 serie C: una letra y un número;
 serie D: un número y una letra;
 serie E: figura cerrada con una letra o un número adentro;
 serie G: figuras diversas, divididas en tres subseries: a) figuras determinadas; b) figuras cerradas indeterminadas; c) figuras abiertas
indeterminadas.

No se acordará inscripción o renovación de marcas que puedan producir borrones o manchones o que fuesen poco claras.

Art 41º.- Toda marca deberá llevar el signo característico del departamento sobre el cual fue acordada.

Art 42º.- El diseño de las marcas será dibujado en el boleto dentro de un círculo dividido por dos diámetros (uno vertical y otro
horizontal) y cuadriculándose por división de dichos diámetros en diez partes iguales.
El sello otorgado juntamente con la marca reproducirá la misma en forma exacta, según el dibujo del boleto.

Art 43º.- Las señales se clasificarán conforme al catálogo a que se refiere el artículo 15º, dibujándose los signos o cortes en un diagrama
que exhiba de frente ambas orejas y la parte frontal de la cabeza del animal.

Art 44º.- La inscripción nueva o la renovación de señales no serán acordadas:

a) cuando los cortes propuestos destrocen una o las dos orejas;


b) cuando la señal sea igual o tan parecida que pueda producir confusión con otra ya acordada en la misma Pedanía o en una Pedanía
distante menos de 30 km;
c) cuando no esté comprendida en el catálogo que menciona el artículo 15º.

Capítulo X – De la marcación y señalada

Art 46º.- Es obligatorio marcar el ganado mayor antes de cumplir el año y señalar el ganado menor antes de cumplir 6 meses de edad.

Art 47º.- El ganado vacuno deberá marcarse de la siguiente manera: la primera marca en la quijada, la grupa o en la parte baja de la
pierna, desde el garrón hacia arriba, siempre por el lado izquierdo del animal; las remarcas, en la parte baja de la pierna derecha,
ubicándolas sucesivamente desde el garrón hacia arriba, en el lugar más próximo al garrón o, en su caso, a la remarca anterior.

Art 48º.- El ganado equino, mular y asnal, deberá marcarse indistintamente en la quijada izquierda o en la parte baja de la pierna del
mismo lado, aplicándose, también sucesivamente, desde el garrón hacia arriba, las remarcas que pudieren ser necesarias.

Art 49º.- El señalamiento del ganado mayor o menor deberá efectuarse invariablemente en ambas orejas.

Art 50º.- Queda terminantemente prohibido contramarcar y practicar marcas o señales en otras partes del animal, que no sean las
indicadas en los artículos precedentes.

Art 51º.- La marca se impondrá en la posición que figura en el boleto. Todo cambio o variante en la colocación o diseño de una marca o
señal, deberá contar para su validez con la autorización previa de la autoridad de aplicación.
Capítulo XIII – Del contralor

Art 80º.- De todo boleto de marca o señal que se otorgue, como asimismo de su ulterior renovación, ampliación, transferencia o
enmienda de cualquier género que se registre, se tomará razón por la municipalidad o comuna que corresponda. La Oficina de Marcas y
Señales comunicará a las diversas municipalidades o comunas, las novedades que le conciernen.

Capitulo XIV – De las penalidades

Art 92º.- Serán pasibles de una multa equivalente al cuádruplo del importe del sellado que se ha evadido, aquéllos que estando
obligados a registrar boleto de marca o señal a su nombre no lo hiciesen y aquéllos a quienes se les comprobare falsedad en su
declaración.

Art 93º.- Incurrirán en una multa de hasta un 30% del valor de los animales marcados o señalados, los que para hacerlo hayan usado
marcas o señales ajenas o no registradas; y en una multa de hasta el 15% del valor de los mismos animales, los titulares de las marcas o
señales que las hubiesen facilitado o que hayan consentido su empleo expresa o tácitamente.

Art 95º.- Todos aquéllos que en el dibujo de la marca no coloquen el signo que caracteriza al Departamento, o no reproduzcan
fielmente el diseño que se les haya otorgado, o excedan el máximo o no alcancen el mínimo de las medidas permitidas, se harán
pasibles a una multa de hasta el cinco por ciento (5%) del precio de los animales indebidamente marcados.

Art 96º.- Los productores agropecuarios que no marquen o señalen los animales dentro de los plazos establecidos o en los lugares
indicados o permitidos por la presente Ley, serán pasibles de una multa de hasta el veinticinco por ciento ( 25%) del valor de los
animales de que se trate.
En igual multa incurrirán quienes vendiesen sus animales, estando los boletos de Marca o Señal vencidos.

Art 97º.- En todos los casos en que se comprobare ocultamiento en la declaración o documentación relativas al total de cabezas en
existencia, se aplicará una multa de hasta el veinticinco por ciento (25 %) del valor de los animales encubiertos.

Art 101º.- Para la determinación de las multas a que se refiere este capítulo, el valor de los animales se establecerá por la última y
menor cotización registrada para la especie en la ciudad de Córdoba, con respecto al día del descubrimiento de la infracción.

Código rural de Córdoba


Título X – De las marcas y señales

Art 149.- Es prohibido la construcción de marcas que no quepan en un cuadrado de 15 centímetros por costado, bajo la multa de 15
pesos nacionales al constructor.

Art 150.- Es igualmente prohibido construir marcas sin permiso especial de la autoridad encargada al efecto o construir mayor número
de ejemplares que el expresado en el permiso, bajo la misma multa, tanto el constructor como el que hubiere mandado construirlas.

Art 151.- No es lícito usar señales que trocen una o las dos orejas, o más de la mitad de ellas, bajo la multa de cincuenta centavos
nacionales por cada animal.

Art 153.- En el caso de que aparezcan dos marcas de igual forma, o que resulten tales por un simple cambio de posición, la autoridad
inutilizará la más reciente, y su dueño quedará obligado a variarla.

Art 156.- El registro de la marca se hará ante el Sub-Intendente de Policía, y el de la señal ante los Jueces de Paz.

Art 157.- Los asientos en los registros, y los boletos que se expidieren a los interesados, expresarán:

1º. El nombre del propietario.


2º. El número de orden.
3º. El Departamento, Pedanía y la estancia o propiedad rural en que estuvieren los ganados
4º. El diseño de la marca y la descripción de la señal.

Art 158.- Las transferencias del derecho de marcas o señales, deben ser registradas por el adquirente, bajo la misma multa, dentro del
término de tres meses desde que se hubieren verificado.

Art 162.- La marca en primer lugar, y en segundo la señal; establecen a favor de sus dueños, salvo prueba en contrario, la presunción de
propiedad respecto de todo animal que las lleve.

Art 163.- El dominio de la marca y señal se prueba por el acto del registro, y en su defecto, por el uso notorio que de ellas hiciere el
ganadero.

Art 164.- En el caso en que un animal tenga dos marcas o señales, la presunción estará a favor de la más antigua.

SISTEMAS: Existen principalmente 3 sistemas:


1. La marca o señal crea una presunción “iuris et de iure” (no admite prueba en contrario) de la propiedad del animal.
2. La marca o señal crea una presunción “iuris tantum” (admite prueba en contrario) de la propiedad del animal (Arg).
3. La marca o señal sólo prueba la posesión de buena fe.
CERTIFICADOS Y GUÍAS
El “certificado de adquisición” es un documento que constituye el título de la transmisión de propiedad de ganado. La ley
22.939 establece que, para transmitir la propiedad del ganado, las partes tienen la obligación de otorgar el certificado y
hacerlo autenticar por la autoridad local competente (es un instrumento público). El certificado debe contener (art 13):
a. Lugar y fecha de emisión.
b. Nombre y apellido de las partes y en su caso de sus representantes, sus domicilios y documentos de identidad.
c. Especificación del tipo de operación de que se trata, matrícula del título de la marca, señal o medio alternativo de
identificación exclusivo para el ganado porcino, y diseño de éstos o el tatuaje de la reseña correspondientes en los
animales de raza.
d. Especificación de la cantidad de animales comprendidos en la operación, indicando su sexo y especie.
e. Firma del transmitente o de su representante. La firma del transmitente podrá ser suplida por la del consignatario.
f. Firma y sello del oficial público competente que autenticare el certificado.
Art 14: La transmisión de dominio de los animales de pura raza, podrá perfeccionarse mediante acuerdo de partes por la
inscripción del acto en los registros genealógicos y selectivos.
La “guía de tránsito” es un documento que acredita la licitud del transporte de ganado. Cualquiera que transporte ganado,
aunque sea entre campos de un mismo propietario, tiene la obligación de extender una guía de tránsito. La expedición de
guías es competencia de las provincias.
El art 17 de la ley 22.939 establece que “Cuando se trate de animales de pedigrí o puros registrados que no tuviesen marca
o señal o medio alternativo de identificación exclusivo del ganado porcino, las guías que por ellos se extiendan deberán
mencionar esa circunstancia y suministrar los datos que puedan contribuir a individualizar cada animal”.
Por su parte el Código Rural de Córdoba establece:
- Art 227.- Nadie podrá sacar de la jurisdicción de un municipio, ni trasladar dentro de ella ganados, sin estar munido de la
correspondiente guía de tránsito. Su transgresión hará pasible al propietario de la hacienda de una multa equivalente a 5
veces el importe dejado de abonar por derechos a tasas que al efecto se fije en la ley impositiva anual.
- Art 228.- No se expedirá ninguna clase de guía sin la presentación de los documentos que acrediten la propiedad del
ganado o fruto que se pretende sacar o trasladar.
- Art 235.- Los certificados-guía a que se refiere el presente título serán expedidos por los municipios de la Provincia en la
forma y condiciones que reglamente el Poder Ejecutivo.
- Art 236.- Los municipios podrán celebrar convenios con las autoridades policiales, delegando en ellas la función que les
compete en virtud de esta ley, y en los casos en que el Poder Ejecutivo lo estime conveniente.
D.T.A.: al respecto, la Ley Provincial de Marcas y Señales (5542) establece que:
- Art 53: A los fines administrativos, sólo el “Documento para el Tránsito de Animales” (DTA) -formulario 151- en uso por el
SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria), o el que lo sustituyere en el futuro, es el único
documento válido para controlar y registrar transacciones y/o traslados de semovientes y frutos del país que se realicen
en todo el territorio provincial desde cualquier origen o destino.
- Art 54: El DTA o el que lo reemplazare en el futuro, será otorgado con las formalidades establecidas por el SENASA y la
presente Ley.
- Art 55: Los certificados de tránsito o las constancias equivalentes otorgadas fuera de la Provincia, de conformidad con las
leyes del lugar de emisión, tendrán el valor que éstas le confieren en cuanto sea compatible con las disposiciones del
presente Capítulo.
- Art 56: La confección del DTA será competencia del SENASA, reservándose la Secretaría de Agricultura y Ganadería del
Ministerio de la Producción y Finanzas de la Provincia, funciones de contralor.
- Art 57: El productor, al solicitar conformación del DTA, deberá presentar el boleto de su marca o señal, para el cotejo de
las anotaciones efectuadas y asentar el movimiento de ganado y la cantidad y existencia del mismo.
- Art 62: Las empresas y los transportistas no deberán recibir carga de ganados o cueros, sin exigir la exhibición del DTA,
debiendo dejar constancia en sus registros del número de orden y de los datos esenciales.
- Art 79: Bajo ninguna circunstancia se podrá emitir DTA por animales que legalmente deberían encontrarse marcados o
señalados y no lo están.
REGISTROS GENEALÓGICOS
La propiedad de los ejemplares de pura raza se probará por el respectivo certificado de inscripción en los registros
genealógicos y selectivos reconocidos, que concuerde con los signos individuales que llevaren los animales (art 11 ley
22.939). Los animales de pura raza no son marcados a fuego (por sus características particulares) sino que son identificados
(además de estar registrados) mediante un tatuaje en la oreja que lleva un numero particular, el cual es registrado junto
con el nombre del animal, un prefijo que representa a su criador, sus características físicas, fecha de nacimiento y los datos
de sus padres.
La raza es el conjunto de animales de una misma especie que tiene características similares transmitidas genéticamente
(heredadas). Un animal es de “pura raza” cuando su raza no fue mezclada con otra (no fue cruzado).
Existen en el país registros genealógicos de 6 especies, creados por la Sociedad Rural Argentina:
1. El "Herd Book", para la especie bovina.
2. El "Stud Book", para la especie equina.
3. El "Flock Book", para la especie ovina.
4. El "Swine Book", para la especie porcina.
5. El "Ass Book", para la especie asnal.
6. El "Dog Book", para la especie canina.
EQUINOS (Ley Nacional de Equinos N° 20.378)
Art 1°: La inscripción de animales equinos de sangre pura de carrera en los registros genealógicos reconocidos por el
Ministerio de Agricultura y Ganadería acredita su origen, calidad, como ejemplares de pedigree y la propiedad a favor del
titular. Se considerarán como tales registros genealógicos los actualmente existentes, los cuales deberán ajustar su
organización y funcionamiento a las condiciones que establezca el Poder Ejecutivo nacional, que los controlará a través del
Ministerio de Agricultura y Ganadería, así como a los que, de acuerdo con dichas condiciones, se reconozcan en el futuro.
Art 2°: La transmisión del dominio de los animales a que se refiere el artículo anterior sólo se perfeccionará entre las partes
y respecto de terceros (tiene efectos constitutivos en este caso, y no declarativo como en el caso del registro del resto de
animales de pura raza) mediante la inscripción de los respectivos actos en los registros genealógicos.
Los registros genealógicos estarán habilitados para cumplimentar la anotación de actos de disposición, medidas
precautorias, gravámenes u otras restricciones al dominio convenidas entre las partes u ordenadas por disposición judicial.
RÉGIMEN DE DOMINIO DE OTROS SEMOVIENTES. OTRAS FORMAS DE ADQUIRIR EL DOMINIO: APROPIACIÓN
Para el CCyC, los animales silvestres (animales que viven libres e independientes del hombre) son considerados “res
nullius” (cosa sin dueño), por lo que el dominio sobre ellos se adquiere por apropiación (acto de aprehensión material
sobre ellos (ej: caza, pesca)). Sin embargo, hay leyes nacionales que protegen zonas de riqueza de flora y fauna.
Art 1947 CCC: Apropiación. El dominio de las cosas muebles no registrables sin dueño, se adquiere por apropiación.
a) Son susceptibles de apropiación:
i. las cosas abandonadas;
ii. los animales que son el objeto de la caza y de la pesca;
iii.el agua pluvial que caiga en lugares públicos o corra por ellos.
b) No son susceptibles de apropiación:
i. las cosas perdidas. Si la cosa es de algún valor, se presume que es perdida, excepto prueba en contrario;
ii. los animales domésticos, aunque escapen e ingresen en inmueble ajeno;
iii.los animales domesticados, mientras el dueño no desista de perseguirlos. Si emigran y se habitúan a vivir en otro
inmueble, pertenecen al dueño de éste, si no empleó artificios para atraerlos;
iv.los tesoros.
Art 1948 CCC: Caza. El animal salvaje o el domesticado que recupera su libertad natural, pertenece al cazador cuando lo
toma o cae en su trampa. Mientras el cazador no desista de perseguir al animal que hirió tiene derecho a la presa, aunque
otro la tome o caiga en su trampa. Pertenece al dueño del inmueble el animal cazado en él sin su autorización expresa o
tácita.
Art 1949 CCC: Pesca. Quien pesca en aguas de uso público (no son de uso público los lagos no navegables, porque su uso y
goce pertenece a los particulares o al dominio privado del Estado), o está autorizado para pescar en otras aguas (privadas),
adquiere el dominio de la especie acuática que captura o extrae de su medio natural.
Art 1950 CCC: Enjambres. El dueño de un enjambre puede seguirlo a través de inmuebles ajenos, pero debe indemnizar el
daño que cause. Si no lo persigue o cesa en su intento, el enjambre pertenece a quien lo tome. Cuando se incorpora a otro
enjambre, es del dueño de éste.
FAUNA: CONCEPTO
Es el conjunto de especies animales que habitan en una región geográfica, que son propias de un período geológico. En
sentido más amplio, todos los animales forman parte de la fauna, más allá de sus diferentes características.
La fauna puede dividirse en fauna silvestre (animales que viven libres e independientes del hombre) y fauna doméstica
(animales sometidos al dominio del hombre). Los especialistas también hablan de la fauna en proceso de domesticación,
con aquellos animales silvestres que, criados por el hombre, pierden sus características salvajes.
LEY DE PROTECCIÓN DE LA FAUNA
Es una ley de adhesión, no de presupuestos mínimos, aunque ella misma establece que algunas de sus normas se aplican a
las provincias aunque no se hayan adherido.
La ley declara que la fauna silvestre que habita el territorio de la República (así como su protección, conservación,
propagación, repoblación y aprovechamiento racional) es de interés público y todos los habitantes de la Nación tienen el
deber de protegerla (art 1).
A los fines de esta ley se entiende por fauna silvestre:
1) Los animales que viven libres e independientes del hombre, en ambientes naturales o artificiales.
2) Los bravíos o salvajes que viven bajo control del hombre, en cautividad o semicautividad.
3) Los originalmente domésticos que, por cualquier circunstancia, vuelven a la vida salvaje convirtiéndose en cimarrones.
Se aplica esta ley: a la caza, hostigamiento, captura o destrucción de crías, huevos, nidos y guaridas, tenencia, posesión,
tránsito, aprovechamiento, comercio y transformación de la fauna silvestre y sus productos. No se aplica a animales
comprendidos en leyes sobre pesca.
La autoridad de aplicación podrá prohibir la importación, introducción y radicación de ejemplares vivos, semen, embriones,
huevos para incubar y larvas de cualquier especie que puedan alterar el equilibrio ecológico, afectar actividades
económicas o perturbar el cumplimiento de los fines de esta ley.
Indemnización (se aplica a todas las provincias, aunque no se hayan adherido): cuando el cumplimiento de este deber (el
de proteger la fauna) cause perjuicios comprobados, deben ser indemnizados, por el Estado nacional o provincial.
Permisos: se necesita permiso de la autoridad de aplicación para dar libertad a animales silvestres en cautiverio y para
introducir desde el exterior productos y subproductos, manufacturados o no, de especies de la fauna silvestre autóctona
cuya caza, comercio, tenencia, posesión y transformación estén vedadas en toda la región de su hábitat natural.
Aprovechamiento de la fauna silvestre: el propietario del campo puede aprovechar la fauna silvestre que lo habita
transitoria o permanentemente, debiendo protegerla y limitar racionalmente su utilización para asegurar la conservación
de la misma.
Comercio interprovincial e internacional: para su transporte y comercio interprovincial, el propietario, administrador,
poseedor o tenedor legítimo del fundo, proveerá al cazador de un documento donde conste el producto de la caza. Si no lo
pudo obtener lo debe pedir a la autoridad competente más próxima, la que lo otorgará siempre que acredite haber cazado
dentro del fundo con el debido permiso. Al vender o ceder los animales de la caza y sus productos y subproductos, se
transfieren los documentos que los amparen.
Protección por obras: deben consultarse previamente a las autoridades nacionales o provinciales sobre:
 Los proyectos de obras (como desmonte, secado y drenaje de tierras inundables, modificación del cauce de rio,
construcción de diques y embalses) que puedan causar transformaciones en el ambiente de la fauna silvestre.
 El uso de productos venenosos o tóxicos que contengan sustancias residuales nocivas.
Delitos y sus penas:
 Cazar animales silvestres en campo ajeno sin autorización: prisión de 1 mes a 1 año + inhabilitación especial por hasta 3
años.
 Cazar animales silvestres cuya captura o comercialización estén prohibidas o vedadas: prisión de 2 meses a 2 años +
inhabilitación especial por hasta 5 años.
 Cazar animales silvestres utilizando armas, artes o medios prohibidos: prisión de 2 meses a 2 años + inhabilitación
especial por hasta 5 años.
 Estas penas se aplicarán también al que a sabiendas transportare, almacenare, comprare, vendiere, industrializare o de
cualquier modo pusiere en el comercio piezas, productos o subproductos provenientes de la caza furtiva o de la
depredación.
Infracciones y sanciones: las infracciones cometidas en violación de las disposiciones de esta ley, serán sancionadas con:

 Multa.
 Comiso de los animales, pieles, cueros, lanas, pelos, cuernos y demás productos, subproductos y derivados en infracción.
 Suspensión o cancelación de la licencia de caza deportiva.
 Suspensión, inhabilitación o clausura de los locales o comercios.
CAZA
Es la acción ejercida por el hombre, mediante el uso de artes, armas y otros medios apropiados, persiguiendo o apresando
ejemplares de la fauna silvestre con el fin de someterlos bajo su dominio apropiándoselos como presa, capturándolos,
dándoles muerte o facilitando estas acciones a terceros.
Límites a la caza: el PEN y cada pcia deben establecer las limitaciones a la práctica de la caza. Requisitos para practicar la caza:
1. Tener la autorización del dueño, administrador, poseedor o tenedor del fundo.
2. Tener la licencia correspondiente previo examen de capacitación (dada por la Nación o por las provincias adheridas a la ley).
ANIMALES INVASORES: DAÑO PRODUCIDO POR EL GANADO. CÓDIGO CIVIL Y CÓDIGOS RURALES
Art 1757 CCC: Hecho de las cosas y actividades riesgosas. Toda persona responde por el daño causado por el riesgo o vicio
de las cosas, o de las actividades que sean riesgosas o peligrosas por su naturaleza (ej: explotación de la energía nuclear),
por los medios empleados o por las circunstancias de su realización.
La responsabilidad es objetiva. No son eximentes la autorización administrativa para el uso de la cosa o la realización de la
actividad, ni el cumplimiento de las técnicas de prevención.
Art 1758 CCC: Sujetos responsables. El dueño y el guardián son responsables concurrentes del daño causado por las cosas.
Se considera guardián a quien ejerce, por sí o por terceros, el uso, la dirección y el control de la cosa, o a quien obtiene un
provecho de ella. El dueño y el guardián no responden si prueban que la cosa fue usada en contra de su voluntad expresa o
presunta.
En caso de actividad riesgosa o peligrosa responde quien la realiza, se sirve u obtiene provecho de ella, por sí o por terceros,
excepto lo dispuesto por la legislación especial.
Art 1759 CCC: Daño causado por animales. El daño causado por animales, cualquiera sea su especie, queda comprendido en
el artículo 1757.
Código Rural de Córdoba: Título XII – De los animales perdidos
Art 177.- Todo individuo que encontrare en su campo animales ajenos, que no sean sus colindantes, está obligado a dar
aviso al Juez de su Pedanía dentro del término de 8 días.
Art 179.- El Juez procederá inmediatamente a depositar los animales en persona de responsabilidad, debiendo preferir al
dueño del campo en igualdad de circunstancias.
Art 180.- El Juez de Paz deberá dar recibo al ganadero en cuyo poder se encontraren los animales, con designación de la
marca y la señal.
Art 181.- El Juez de Paz transmitirá el aviso al dueño de los animales, si residiere en la Pedanía, y en caso contrario al Jefe
Político del Departamento.
Art 183.- Si la marca y señal fueren desconocidas, el Juez de Paz dará aviso al Jefe Político del Departamento, y pondrá
carteles durante treinta días en las puertas del Juzgado, con el diseño de la marca y la descripción de la señal.
Art 184.- El Jefe Político hará publicar a más tardar dentro de 5 días, en un diario del lugar, 6 avisos con intervalo de 10 días
uno de otro, y con las designaciones expresadas en el artículo anterior, respecto a la marca y señal.
Art 187.- El que reclame sus animales, deberá pagar previamente al dueño del campo, por derecho de aparte, diez centavos
nacionales por cabeza de ganado mayor y dos centavos por ganado menor, y al depositario dos centavos diarios de pastaje
por cabeza de la primera clase, y medio centavo por la de segunda, debiendo contarse el tiempo desde que tuviere lugar el
depósito o se hubiese dado el aviso al Juez de Paz.
Art 188.- Si verificada la última publicación, o transcurridos dos meses después de haberse dado el aviso al dueño de los
animales, no ocurriere nadie a reclamarlos, el Jefe Político lo comunicará al Juez de Paz del lugar en que se encontraron
para proceder a venderlos en remate público.
Art 192.- Queda absolutamente prohibido disponer de animales perdidos, en otra forma que la prescripta en éste título,
bajo la multa de cincuenta pesos nacionales a cada funcionario que intervenga en la venta, y de la responsabilidad por los
daños y perjuicios.
RODEOS, MEZCLAS Y APARTES:
Código Rural de Córdoba: Título XIII – De las mezclas y aportes
Art 195.- Cuando el comprador de los ganados no los hubiese marcado o distinguido de otra manera de los del vendedor, y sufriere
dispersión en la marcha, a menor distancia de 20 kilómetros, se presumirá que ha habido mezcla de ellos, si el campo no estuviere
cercado.

Art 196.- Todo individuo que tenga ganados en campos que no sean de bosque o sierra, estén o no cercados, tiene obligación de parar
rodeo, en días fijos y durante 5 horas, dos veces al mes, desde el 1º de Marzo hasta el 30 de Agosto, y una vez en los demás meses, bajo
la multa de diez pesos nacionales, que será aplicada a solicitud de los que hubieren asistido al establecimiento con el objeto de apartar
sus animales.

Art 198.- Todo ganadero tiene derecho a exigir que su vecino declare ante el Juez de Paz los días que elija para reunir sus ganados, o en
su defecto a que el Juez los determine.

Art 199.- Los Jueces de Paz podrán eximir de la multa al ganadero que hubiera tenido justa causa, para faltar a la obligación de parar
rodeo.

Art 200.- Además del rodeo ordinario, y desde el 1º. De Marzo hasta el 30 de Agosto, todo ganadero está obligado a pararlo al día
siguiente de aquél en que se solicitare, cuando los apartadores residieren a mayor distancia de quince kilómetros.

Art 201.- Los individuos que residieren a menor distancia de quince kilómetros apartarán los animales en los rodeos ordinarios.

Art 202.- Todo acarreador que sufriere dispersión en los arreos de ganados tiene derecho a que el dueño o encargado del campo le
pare rodeo al día siguiente de solicitarlo.

Art 203.- El comprador de ganados que sufriere dispersión en la marcha tiene asimismo derecho a que el vendedor le pare rodeo al día
siguiente de solicitarlo.

Art 204.- Además de los casos en que es obligatorio el rodeo de los Jueces podrán ordenarlo a solicitud de parte si fuere necesario.

Art 205.- El ganadero está obligado en todo tiempo, sino pudiere parar rodeo, a permitir, en el mismo día en que sea requerido, que los
apartadores entren en el campo bajo su vigilancia y aparten los animales que les pertenezcan.

Art 206.- El que difiriese la obligación de parar rodeo o permitir la entrada en el campo, pagará una multa de diez pesos nacionales a
solicitud de parte, y además dos pesos en beneficio de los apartadores por cada vez que se hubieren presentado al establecimiento sin
conseguir su objeto.

Art 207.- No es obligatorio el rodeo ni el permiso para entrar al campo, después de las doce del día.

Art 208.- La recogida se hará siempre por los puntos que determinen los apartadores, sin perjuicio de que ella sea dirigida por el dueño
del campo.

Art 209.- El que solicite el rodeo deberá ayudar por lo menos con dos hombres a recoger el ganado y contenerlo en el punto en que su
dueño acostumbre pararlo.

Art 210.- El apartador no podrá exigir que el rodeo esté parado más de cinco horas.

Art 211.- Si estando parado el rodeo, se presentaren varios apartadores, y el dueño quisiera permitir que aparten simultáneamente,
tendrán la preferencia los que residieren a mayor distancia, con excepción del que lo hubiere solicitado.

Art 212.- El dueño del campo podrá exigir orden judicial para permitir el aparte a personas que justifiquen su derecho con el objeto de
marca o señal, o a quien creyere debidamente autorizados.
Art 213.- El ganadero que hubiere dado aviso de los animales ajenos, con arreglo a lo prescripto en los artículos 171 y 172, no podrá
permitir que sean apartados del rodeo sin orden judicial.

Art 214.- Ningún ganadero podrá impedir en tiempo alguno que se inspeccione el rodeo que tuviere parado, a sus abrevaderos durante
las horas debidas, bajo la multa de diez pesos nacionales que se aplicará a solicitud de parte.

Art 215.- Si se mezclaren rebaños de ganado menor, el dueño del campo en que se encontraren estará obligado a permitir
inmediatamente el aparte en sus corrales, bajo la misma multa impuesta al que niega rodeo.

Art 216.- El ganadero de cuyo campo se aparten animales ajenos, sean o no de sus colindantes, tendrá derecho de cobrar diez centavos
por cabeza de ganado mayor y dos centavos por ganado menor.

Art 217.- Si los animales pertenecieren a los colindantes, y ellos no ocurrieren a sacarlos, el ganadero podrá dar aviso al Juez de Paz, y
éste ordenará que se saquen dentro del tercer día.

Art 218.- Además del derecho de aparte establecido por el artículo 210, el ganadero podrá cobrar desde que hubiere dado aviso, dos
centavos diarios por cabeza de ganado mayor, y medio centavo por ganado menor, pudiendo retener los animales hasta que se le
pague uno y otro derecho.

Art 219.- Todo ganadero que tuviere en campo no cercado mayor número de animales que el que pueda contener, estará obligado a
sacar el exceso a solicitud de sus vecinos, en el término que el Juez de Paz le señale.

Art 220.- El Juez de Paz procederá previo al correspondiente dictamen pericial y podrá aplicar veinticinco pesos nacionales de multa por
cada vez que se faltare a la obligación.

Art 221.- Es prohibido tener rodeos de terneros orejanos bajo la multa de un peso nacional por cabeza.

Art 221.- Todo el que transfiera, consigne o traslade hacienda, deberá munirse de la correspondiente documentación ante los
municipios de la Provincia.

RÉGIMEN PENAL: HURTO CAMPESTRE Y ABIGEATO


Hurto simple: Art 162: Será reprimido con prisión de 1 mes a 2 años, el que se apoderare ilegítimamente de una cosa
mueble, total o parcialmente ajena.
Hurto campestre: Art 163: Se aplicará prisión de 1 a 6 años en los casos siguientes:
1º. Cuando el hurto fuere de productos separados del suelo o de máquinas, instrumentos de trabajo o de productos
agroquímicos, fertilizantes u otros insumos similares, dejados en el campo, o de alambres u otros elementos de los cercos.
Abigeato o cuatrerismo: Art 167 ter: Será reprimido con prisión de 2 a 6 años el que se apoderare ilegítimamente de 1 o
más cabezas de ganado mayor o menor, total o parcialmente ajeno, que se encontrare en establecimientos rurales o, en
ocasión de su transporte, desde el momento de su carga hasta el de su destino o entrega, incluyendo las escalas que se
realicen durante el trayecto.
La pena será de 3 a 8 años de prisión si el abigeato fuere de 5 o más cabezas de ganado mayor o menor y se utilizare un
medio motorizado para su transporte.
El término “abigeato” proviene del latín “ab agere” que significa “echar por delante”, ya que este delito se realiza arriando
a los animales por delante sacándolos del campo de su dueño.
Abigeato agravado: Art 167 quater: Se aplicará reclusión o prisión de 4 a 10 años cuando en el abigeato concurriere alguna
de las siguientes circunstancias:
1. El apoderamiento se realizare en las condiciones previstas en el artículo 164.
2. Se alteraren, suprimieren o falsificaren marcas o señales utilizadas para la identificación del animal.
3. Se falsificaren o se utilizaren certificados de adquisición, guías de tránsito, boletos de marca o señal, o documentación
equivalente, falsos.
4. Participare en el hecho una persona que se dedique a la crianza, cuidado, faena, elaboración, comercialización o
transporte de ganado o de productos o subproductos de origen animal.
5. Participare en el hecho un funcionario público quien, violando los deberes a su cargo o abusando de sus funciones,
facilitare directa o indirectamente su comisión.
6. Participaren en el hecho 3 o más personas.
SANIDAD Y CALIDAD DE LOS PRODUCTOS AGROBIOLÓGICOS Y AGROALIMENTARIOS
SANIDAD ANIMAL. LEGISLACIÓN NACIONAL Y PROVINCIAL
Ley Nacional de Policía Sanitaria Animal N° 3959
La aplica el PEN en todo el país, en lugares donde aparezcan enfermedades contagiosas para los animales y nocivas para las
personas; tiende a preservar la salud y la riqueza ganadera.
Objetivos:
1. Defender el ganado contra la invasión de enfermedades contagiosas exóticas.
2. Controlar los productos, subproductos y derivados del ganado.
Autoridad de aplicación: el PEN y cada gobernador, como agente natural de la provincia, ejercerán el poder de policía.
Obligaciones:

 El PE debe hacer una lista taxativa (“nomenclatura reglamentaria”) de las enfermedades en cuestión, pudiendo modificarla.
 Todo propietario o encargado de animales enfermos o que se sospeche que han sido contagiados debe:
- Denunciar la situación ante la autoridad correspondiente.
- Aislarlos inmediatamente.
- Aislar, enterrar adecuadamente y denunciar los animales que ya hayan muerto.
Control: lo realiza la autoridad correspondiente, asegurándose que se cumpla con el aislamiento del animal ante un caso
denunciado. Además, examina a los animales para saber de dónde surgió la enfermedad y lo pone en conocimiento del PE,
quien luego de comprobar que la enfermedad pertenece a la lista, puede aislar, secuestrar y prohibir el tránsito de los
animales de las zonas infectadas, para desinfectar y destruir los animales y las cosas que puedan ser vehículos de contagio.
Indemnizaciones: los dueños de animales, objetos y construcciones mandados a destruir tienen derecho a exigir una
indemnización (al Estado) en dinero igual al valor de éstos al hacer la destrucción. Si la enfermedad por la que se destruyó
al animal era mortal, o si el propietario no cumplió con las normas sanitarias, no habrá indemnización.
Transporte: los vehículos para cargar animales deben cumplir con las condiciones de comodidad, seguridad e higiene,
desinfectar los embarcaderos y demás locales que hayan ocupado los animales, personas y objetos que hayan estado en
contacto con ellos.
Sanciones y penalidades: la inobservancia de las obligaciones se castiga con multa y sanciones de otro tipo (ej: prohibición
de comercializar).
Ley Provincial N° 8417
Art 1.- La prevención, control y erradicación de las enfermedades animales infectocontagiosas y parasitarias que puedan comprometer
a la producción pecuaria o que afecten a la salud humana, se regirán por las disposiciones de la presente Ley.

Art 2.- El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Recursos Renovables, o el organismo que en el futuro lo reemplazare, será la Autoridad
de Aplicación de la presente Ley.

Art 3.- La Autoridad de Aplicación tendrá a su cargo la implementación de los Planes Sanitarios que serán necesarios para la prevención,
control y erradicación de las enfermedades previstas en el artículo 1.

Art 5.- Toda persona física o jurídica, que tenga fehaciente conocimiento de la existencia de animales afectados o sospechosos de
estarlo por las enfermedades comprendidas en el artículo 1 de la presente Ley, está obligada a realizar en forma inmediata la denuncia
de tales hechos a la Autoridad de Aplicación.

Art 6.- Sin perjuicio de cumplir con la obligación de denunciar la existencia de animales afectados o sospechosos de estarlo, el
propietario o encargado de los mismos, deberá suministrar a la Autoridad de Aplicación la información que se le requiera respecto de
los animales a su cargo, como asimismo proceder al aislamiento del o de los animales enfermos, separándolos de los sanos en forma
inmediata.

Art 7.- La Autoridad de Aplicación podrá intervenir por denuncia o de oficio. Para el cumplimiento de la presente Ley podrá solicitar el
apoyo de la fuerza pública cuando lo considere necesario.

Art 8.- La Autoridad de Aplicación al constatar la existencia de cualquiera de las enfermedades referidas en el artículo 1 podrá declarar
infectados o infestados el establecimiento región o zona afectada según la gravedad de las circunstancias y estará facultada para aislar,
interdictar, clausurar, secuestrar o prohibir la venta, tránsito o consumo de los animales de las áreas afectadas.

Art 9.- La Autoridad de Aplicación deberá comunicar el hecho y las medidas implementadas, en forma inmediata al Poder Ejecutivo
Nacional a los fines de actuar coordinadamente en las tareas de prevención y control.

Art 11.- Queda estrictamente prohibido criar y/o alimentar animales en basurales o con material proveniente de los mismos.
Art 12.- El transporte de animales provenientes de la producción pecuaria deberá cumplimentar las condiciones sanitarias de seguridad
que se establezcan reglamentariamente.

Art 14.- Los ingresos que se perciban por servicios prestados a solicitud de terceros y de multas establecidas en la presente Ley, serán
depositadas en la Cuenta Fondo Agropecuario Provincial.

Art 17.- Constituyen contravenciones a la presente Ley:

a) No denunciar, en forma inmediata, ante la Autoridad de Aplicación, cuando se tenga fehaciente conocimiento de la existencia de
animales infestados o infectados con las enfermedades previstas en el artículo 1.
b) No suministrar la información requerida por la Autoridad de Aplicación, respecto de los animales a su cargo.
c) No cumplimentar las medidas de prevención y aislamiento dispuesto por la Autoridad de Aplicación, en las zonas afectadas.
d) El tránsito o venta de animales infestados o infectados por las enfermedades previstas en el artículo 1.
e) Criar y/o alimentar animales en basurales o con material proveniente de los mismos.
f) El transporte de animales provenientes de la producción pecuaria que no cumpla con las normas higiéni f) El transporte de animales
provenientes de la producción pecuaria que no cumpla con las normas higiénico-sanitarias de seguridad que se fijen por vía
reglamentaria.
g) Cualquier otro acto u omisión violatoria de esta Ley y su reglamentación.

Art 18.- Las contravenciones a la presente Ley serán sancionadas con:

a) Multas: graduables entre 1 y 300 salarios mínimo, vital y móvil.


b) Decomisos: del o de los animales afectados que pongan en riesgo la salud humana o de semovientes.
c) Clausura e Inhabilitación: de locales, corrales o predios con peligro de contagio o propagación de enfermedades.
d) Secuestro: de todo medio de transporte que por sus condiciones sanitarias represente un peligro de contagio hasta que cesen
dichas condiciones.

ORGANISMOS. FUNCIONES
A nivel nacional, la defensa sanitaria ganadera y agrícola es ejercida en nuestro país por el SENASA (Servicio Nacional de
Sanidad y Calidad Agroalimentaria), que es un organismo descentralizado, con autarquía económica y administrativa y
dotado de personería jurídica propia, dependiente del Ministerio de Agroindustria de la Nación, encargado de:
a. Ejecutar las políticas nacionales en materia de sanidad y calidad animal y vegetal e inocuidad de alimentos de su
competencia.
b. Fiscalizar y certificar la calidad de los productos y subproductos de origen animal y vegetal, sus insumos y residuos
agroquímicos.
c. Prevenir, erradicar y controlar enfermedades animales y plagas vegetales.
d. Registrar, habilitar, clausurar y fiscalizar las plantas de procesamiento, acondicionamiento, transporte y comercialización
de los productos.
e. Verificar el cumplimiento de la normativa vigente.
f. Controlar el tráfico federal y las importaciones y exportaciones de productos, subproductos y derivados de origen animal
y vegetal, productos agroalimentarios, fármaco-veterinarios y agroquímicos, fertilizantes y enmiendas.
A nivel provincial, la defensa sanitaria ganadera está a cargo de la Comisión Provincial de Sanidad Animal (COPROSA),
integrada por 1 representante titular y 1 suplente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Recursos Renovables, quien
ejercerá su presidencia. Sus funciones son:
a. Dictar su reglamento interno.
b. Asesorar a la Autoridad de Aplicación en todo lo concerniente a la Sanidad Animal.
c. Realizar el seguimiento y evaluación de los planes sanitarios.
d. Promover tareas de prevención y difusión en materia de sanidad animal.
e. Propender al dictado de la normativa necesaria para la implementación de planes y controles sanitarios.
f. Proponer la coordinación de las acciones provinciales y regionales que en materia de sanidad animal deban efectuar en
forma conjunta la Nación, las Provincias y entes autónomos.
TRAZABILIDAD Y CADENAS AGROALIMENTARIAS
Los sistemas de trazabilidad son sistemas de información que permiten identificar cada una de las etapas que atraviesa un
producto, desde sus orígenes (materia prima) hasta su consumo (ese proceso es lo que se denomina “cadena
agroalimentaria”). La finalidad de la trazabilidad es mantener un control sobre la inocuidad (incapacidad para hacer daño)
de los alimentos a lo largo de la cadena alimentaria. De esta manera, si aparece un problema, se dispone de la información
necesaria para identificar las causas, adoptar las medidas correctoras y, si es necesario, retirar la partida del mercado.
COMERCIALIZACIÓN DE CARNES, PRODUCTOS Y SUBPRODUCTOS. RESEÑA HISTÓRICA. JUNTA NACIONAL DE CARNES
La legislación sobre el comercio e industria de la carne comenzó con varias leyes (11.226, 11.227 y 21.740). Las cuales
resultaron ineficaces porque eran incumplidas debido a la ausencia de una autoridad que ejerciera el poder de policía,
hasta que en 1933 se obtiene la Ley de Carnes (11.747) bajo el gobierno de Agustín P. Justo.
Esta ley creó la “Junta Nacional de Carnes”, organismo autárquico integrado por representantes de la Sociedad Rural
Argentina, las sociedades rurales del interior, los frigoríficos privados, las empresas industrializadoras y un miembro que no
tuviera intereses en la producción y comercio de la carne. Su función era controlar la producción, comercialización y
exportación de la carne, y clasificar las carnes y los cortes de acuerdo a lo establecido en la ley.
La Junta fue reemplazada por varias leyes hasta que dejó de ser un organismo autárquico y se convirtió en una
dependencia estatal, más tarde reemplazada por el “Instituto Ganadero Argentino” (Ley 13.991).
En el año 1955 se recrea la Junta Nacional de Carnes, volviendo a ser una entidad autárquica, pero ahora integrada por
representantes del Estado y del comercio de carnes, sin representación de los frigoríficos.
En la década del 70, la Ley 20.535 establece que las funciones de la Junta Nacional de Carnes ya no se limitarán, como antes,
a promover la producción, almacenamiento, transporte y comercialización de carnes, sino también a controlar y participar en
la producción, almacenamiento, transporte y comercialización.
En 1991, como parte de la reforma económica dispuesta por el presidente Carlos Menem, se disolvió la Junta Nacional de
Carnes, junto con otras entidades similares (como la Junta Nacional de Granos, el Instituto Nacional de Vitivinicultura y el
Instituto Nacional del Algodón).
LEY NACIONAL DE CARNES (N° 21.740, de 1978)
Capítulo I - Funciones, competencias y jurisdicción

Artículo 1.- La Junta Nacional de Carnes tendrá por objeto, dentro de los límites de sus atribuciones, promover la producción, y
promover y controlar el comercio y la industria de ganados y carnes a fin de lograr satisfacción de la demanda interna, y el desarrollo de
las exportaciones.

Artículo 2.- Corresponderán a la competencia de la Junta Nacional de Carnes los ganados y carnes, de las especies bovina, ovina,
porcina, equina, caprina, sus productos y subproductos. Por decreto del Poder Ejecutivo Nacional se podrán excluir algunas de estas
especies y de incluir otras productoras de carnes, cuando las condiciones de su producción, industrialización y comercialización, así lo
aconsejen.

Artículo 3.- La Junta Nacional de Carnes tendrá jurisdicción en todo el territorio de la República y funcionará como entidad autárquica,
dentro del ámbito de la Secretaría de Estado de Agricultura y Ganadería, en el Ministerio de Economía. Podrá estar en juicio como
actora o demandada.

Artículo 4.- La Junta Nacional de Carnes será un órgano de ejecución de la política establecida por el Poder Ejecutivo nacional en
materia de ganados y carnes. El control de legitimidad de sus actos corresponderá a la Secretaría de Estado de Agricultura y Ganadería
de la Nación, con arreglo a las disposiciones de la legislación respectiva.

Capítulo II - Dirección y administración

Artículo 5.- El directorio de la Junta Nacional de Carnes estará constituido por 1 vicepresidente y 8 vocales designados por el Poder
Ejecutivo Nacional.

Artículo 8.- El mandato de todos los miembros del Directorio durará 4 años, renovándose los vocales por mitades cada 2, haciéndolo
por sorteo la primera vez. Podrán ser redesignados.

Artículo 9.- Las decisiones se adoptarán por mayoría de votos y en caso de empate el presidente tendrá doble voto. Para sesionar se
requerirá la mitad más uno de los miembros del directorio, de los cuales el número de representantes del Estado presentes no debe ser
menor que el de los representantes del sector privado.

Artículo 10.- El presidente ejercerá la representación legal de la Junta Nacional de Carnes, la que podrá delegarse conforme a la
reglamentación que dicta el directorio.

Capítulo III - Atribuciones y deberes del directorio

Artículo 13.- El directorio de la Junta Nacional de Carnes es el máximo órgano de decisión de la misma y tendrá las siguientes
atribuciones y deberes:

a) Aplicar y hacer cumplir esta ley, sus decretos y resoluciones reglamentarias.


b) Establecer la organización de la Junta Nacional de Carnes y dictar sus reglamentos internos.
c) Proyectar el presupuesto de la Junta Nacional de Carnes y elevarlo al Ministerio de Economía para su aprobación.
d) Proyectar el programa anual de acción y elevarlo juntamente con el presupuesto para el mismo período.
e) Establecer las normas de clasificación y tipificación del ganado y de las carnes destinadas al consumo y a la exportación y de todos los
productos y subproductos de la ganadería, fijando el tiempo y las zonas en que regirán.
f) Conocer e investigar los resultados de explotación de los diferentes sectores comprendidos dentro de su competencia.
g) Mantener actualizada la información que permita evaluar las necesidades de radicación de plantas industrializadoras y mercados de
hacienda en todo el país, balanceando el desarrollo interregional y compatibilizando tanto la demanda interna como la externa, para
información de los interesados.
h) Autorizar el registro de plantas industriales, mercados mayoristas, exportadores, matarifes, plantas faenadoras y demás comerciantes
en ganados y carnes y sus establecimientos, de acuerdo con las normas establecidas en el capítulo VII, y una vez cumplidos los
requisitos de seguridad e higiene que correspondan.
i) Establecer las normas de comercialización de ganado, de las carnes y subproductos ganaderos que en un régimen de libre
concurrencia, armonicen los intereses de los productores, industrializadores, comerciantes y consumidores.
j) Establecer las normas de calidad y especificaciones técnicas a que deberá ajustarse la exportación de carnes y subproductos
ganaderos y reglamentar la aplicación de las sanciones previstas en esta Ley al respecto.
k) Adoptar las medidas necesarias para propender a un moderno y ágil abastecimiento del mercado interno, orientando la producción,
comercialización de ganados y carnes y su industrialización.
l) Adoptar las medidas necesarias para promover las exportaciones de carnes y subproductos.
m) Fiscalizar los embarques y el empleo de las bodegas utilizadas para el comercio de carnes.
n) Asesorar al Poder Ejecutivo Nacional sobre todo lo relacionado con la producción, el comercio o la industrialización de ganados y
carnes, sus productos y subproductos.
o) Previa autorización del Ministerio de Economía y cuando la intervención de la Junta Nacional de Carnes sea exigida por los
compradores del exterior, podrá concertar convenios de exportación de ganados y carnes, productos y subproductos.
p) Aplicar las sanciones previstas en esta Ley por las infracciones a la misma.
q) Publicar las informaciones relativas a la ganadería, al comercio y la industria de carnes, elaborar estadísticas y realizar censos, así
como publicar y divulgar las informaciones económicas y técnicas y de comportamiento del mercado interno y externo y su
evaluación para asesoramiento de todo el sector.
r) Estudiar y proponer las medidas necesarias para evitar o atemperar los ciclos ganaderos y sus consecuencias.
s) Coordinar con el Servicio Nacional de Sanidad Animal, el control de las normas sanitarias en vigencia, en todos aquellos aspectos que
hacen al transporte, industrialización y exportación de ganados y carnes, productos y subproductos y derivados, a fin de asegurar el
cumplimiento de las mismas.
t) Además de las funciones y atribuciones establecidas precedentemente, el directorio de la Junta Nacional de Carnes tendrá todas
aquellas otras que sean conducentes al mejor cumplimiento de esta ley.

Capítulo VII - De los inscriptos y sus obligaciones

Artículo 20.- Las personas y entidades que intervengan habitualmente en el comercio y/o industrialización de ganados y carnes de las
especies mencionadas en el art 2, sus productos y subproductos, con destino al consumo interno o a la exportación y los
establecimientos o locales en que aquellas se realicen, deberán estar inscriptos en el registro que llevará la Junta Nacional de Carnes,
de conformidad con los reglamentos que dicte.

Artículo 21.- La inscripción a que se refiere el artículo anterior obliga a la persona o entidad correspondiente a:

a) Llevar su contabilidad en base a los libros exigidos por el Código de Comercio.


b) Presentar las memorias, balances, inventarios, estadísticas y cualquier otra información que se le requiera.
c) Facilitar, en todo lugar, el acceso para examinar y verificar la contabilidad, libros auxiliares, registros, correspondencia, archivos y
demás documentaciones, con la sola excepción de los procedimientos o fórmulas industriales secretas que pertenezcan al dominio
de la inventiva.
d) Llevar los libros, registros y correspondencia a que se refieren los incisos anteriores, en idioma nacional, observando en sus
anotaciones el sistema métrico decimal.

Artículo 22.- La falta, suspensión o cancelación de la inscripción prevista en esta ley, no impedirá el ejercicio de las atribuciones
acordadas a la Junta Nacional de Carnes, ni eximirá a los sometidos a su régimen de las obligaciones y responsabilidad que se
establecen para los inscriptos.

Artículo 23.- La Junta Nacional de Carnes no inscribirá personas físicas o jurídicas cuando el interesado o alguno de sus integrantes
estuviera inhabilitado por infracción a la presente ley, y a la legislación penal o comercial, desempeñándose como director,
administrador general o síndico, mandatario o gestor. Asimismo, excluirá a las que estuvieran inscriptas cuando dentro del término que
le fije no excluyan al inhabilitado.

Capítulo VIII - Ventas de ganado al peso vivo

Artículo 25.- Toda transacción sobre ganado vacuno de las especies que determine la Junta Nacional de Carnes, entre las establecidas
en el artículo 2, ya sea con destino al consumo interno o a la exportación, deberá efectuarse al precio unitario de tanto el kilogramo de
peso vivo.
El precio deberá ser fijado por las partes, antes o después de la pesada de los animales, como asimismo después de su sacrificio de
acuerdo con la clasificación y tipificación oficial para el ganado y las carnes, pero siempre referido al peso vivo de los animales.

Artículo 26.- El régimen legal del artículo anterior regirá en las zonas del país establecidas por las reglamentaciones de la Ley 11.228 y
disposiciones concordantes de leyes posteriores, así como de las correspondientes al capítulo VIII de la presente ley.
Todos los establecimientos o lugares públicos donde se comercie con ganados incluidos en estas prescripciones, deberán contar con las
balanzas necesarias, habilitadas y fiscalizadas de conformidad con las disposiciones pertinentes.

Capítulo IX- Infracciones, sanciones y recursos

Artículo 27.- Toda infracción a las disposiciones de la presente ley, sus decretos y resoluciones reglamentarias, previo sumario en que se
asegurará el derecho de defensa y se valorará la naturaleza de la transgresión, los antecedentes del infractor y el perjuicio causado será
reprimida con:

a) Apercibimiento
b) Multa.
c) Suspensión o cancelación de la inscripción.
Podrá disponerse el decomiso de la mercadería (ganados y carnes, sus productos y subproductos) cuando no se justifique el origen
lícito; cuando se invoque o exhiba, con relación a ella, documentación falsa o adulterada, cuando se hayan infringido las
disposiciones sanitarias; y cuando medie peligro para la salud del posible consumidor.
Si como consecuencia de la infracción cometida resultare la obtención de un beneficio ilícito para el infractor o terceros, al importe
de la multa se sumará el de ese beneficio aunque sobrepase el límite fijado. En caso de reincidencia, se podrá imponer
conjuntamente la suspensión o cancelación de la inscripción.

Artículo 28 - Sin prejuicio de la disposición general del artículo anterior será reprimida con la aplicación de las penalidades establecidas
en el mismo:

a) Cualquier práctica comercial, ardid o recurso destinado a inducir a engaño en el comercio de ganado, carnes o subproductos.
b) Incurrir en cualquier práctica o acuerdo que tienda a limitar la libre competencia comercial.
c) Ocultar o alterar los verdaderos beneficios de su comercio o industria y/o participar en cualquier procedimiento que tenga ese fin.
d) Toda acción u omisión, práctica o conducta desleal, maliciosa o negligente, que afecte el prestigio de la industria o comercio de
carnes de nuestro país.

Artículo 29.- El incumplimiento de las obligaciones impuestas por los Artículos 21 y 22 de esta Ley hará pasibles a las personas físicas
culpables o entidades responsables de las sanciones establecidas en el Art. 27 de este cuerpo de normas.

Artículo 32.- La suspensión o cancelación de la inscripción, implicará el cese de las actividades y la clausura del establecimiento o local a
los efectos de la presente Ley. A tal fin, estas sanciones serán notificadas por la Junta Nacional de Carnes a las autoridades pertinentes,
a los efectos de que no se practique inspección sanitaria alguna, no se otorgue ninguna clase de certificados que sirvan para facilitar las
operaciones de compra, venta, transporte, faena, elaboración, almacenamiento o exportación de ganado, carnes, sus productos y/o
subproductos.

Artículo 33.- Cuando los infractores sean sociedades, los directores, gerentes, administradores y síndicos que hayan intervenido en las
operaciones ilícitas, serán personal y solidariamente responsables.

Artículo 34.- Las acciones para imponer sanción por infracciones a esta ley, sus decretos y resoluciones reglamentarias, prescribirán a
los cinco (5) años. El término para la prescripción comenzará a contarse desde la fecha de la comisión de la infracción.

Capítulo X - Disposiciones Generales

Artículo 40.- Las autoridades nacionales, provinciales y municipales, así como también los organismos descentralizados prestarán a la
Junta Nacional de Carnes la colaboración necesaria para el cumplimiento de sus fines.

Artículo 41.- Todo miembro o empleado de la Junta Nacional de Carnes, que divulgue o utilice en beneficio propio o ajeno, información
que llegare a su conocimiento, con motivo del desempeño de sus funciones, será exonerado, sin perjuicio de las sanciones penales que
pudieren corresponderle.

Artículo 43.- Los actos derivados de las atribuciones conferidas en esta Ley que requieran aprobación del Poder Ejecutivo Nacional
tramitarán a través de la Secretaría de Estado de Agricultura y Ganadería por conducto del Ministerio de Economía.

LEY FEDERAL DE CARNES (Ley Nº 22.375: Régimen de habilitación y funcionamiento de los establecimientos donde se
faenen animales, se elaboren y depositen productos de origen animal)
Art 1º — Facúltase al Poder Ejecutivo Nacional a reglamentar en todo el territorio del país el “régimen de habilitación y funcionamiento
de los establecimientos donde se faenan (matar reses y prepararlas para el consumo) animales y se elaboren o depositen productos de
origen animal”. Dicho régimen comprenderá los requisitos de construcción e ingeniería sanitaria, los aspectos higiénico-sanitarios,
elaboración, industrialización y transporte de las carnes, productos, subproductos y derivados de origen animal destinados al consumo
local dentro de la misma provincia, Capital Federal y Territorio Nacional, los que deberán transitar con la correspondiente
documentación sanitaria.

Art 2º — Las autoridades Provinciales y las competentes de la Capital Federal y del Territorio Nacional de la Tierra del Fuego, Antártida
e Islas del Atlántico Sur, ejercerán el contralor sobre el cumplimiento de la reglamentación en sus respectivas jurisdicciones por
intermedio de los organismos que ellas determinen, pudiendo dictar las normas complementarias que requiera la mejor aplicación de
sus disposiciones. Sin perjuicio de ello el Servicio Nacional de Sanidad Animal, concurrirá para hacer cumplir la reglamentación en todo
el territorio del país, asistiendo a los organismos locales, determinado los sistemas de control sanitario, supervisando su ejecución y
requiriéndoles la aplicación de las sanciones previstas en el Artículo 4º de la presente ley, pudiendo disponer por sí la clausura
preventiva de los establecimientos, a cuyo efecto se lo faculta para solicitar el auxilio de la fuerza pública.

Art 3º — Cuando la autoridad sanitaria nacional clausure preventivamente un establecimiento, informará de inmediato a la autoridad
sanitaria local la medida adoptada y las razones que la motivaren requiriendo su intervención para la aplicación de las sanciones que
pudieren corresponder. La autoridad sanitaria local comunicará a la autoridad sanitaria nacional el levantamiento de la clausura,
cuando de acuerdo a las normas y reglamentaciones de vigor hayan desaparecido las causas que la provocaron.

Art 4º — Toda infracción a las normas de la presente ley y a las reglamentaciones que se dictaren en cumplimiento de sus disposiciones,
dará lugar a la aplicación de las siguientes sanciones, las que podrán ser acumuladas:

a) Apercibimiento.
b) Multas graduables entre un mínimo de Quinientos Mil Pesos ($ 500.000.—) y un máximo de Quinientos Millones de Pesos ($
500.000.000.—).
c) Suspensión de hasta Un (1) año o cancelación de la inscripción en los respectivos registros.
d) Clausura temporaria o definitiva de los establecimientos.
e) Inhabilitación temporaria o definitiva y comiso de los productos involucrados en la infracción. De acuerdo con los antecedentes del
infractor, la gravedad de la infracción y la naturaleza de los hechos, podrá disponerse además el comiso de los elementos e
instrumentos utilizados en la comisión del hecho.

Los importes de las multas previstas en el inciso b) serán reajustables semestralmente por el Ministerio de Economía, Secretaría de
Estado de Agricultura y Ganadería, de acuerdo con la evolución del índice de precios al por mayor nivel general suministrado por el
Instituto Nacional de Estadística y Censos o el organismo que lo reemplazare.

Será de aplicación el mismo índice para la actualización de los montos de las multas impuestas, entre la fecha en que debieron pagarse
y aquella en que se hagan efectivas.

El destino del importe de las multas será establecido por disposiciones locales.

Art 5º — Las sanciones serán impuestas por la autoridad sanitaria local, previo sumario y de acuerdo al procedimiento que en cada
jurisdicción se establezca, sin perjuicio de la posterior revisión por el órgano jurisdiccional de competencia local.

Art 6º — El Poder Ejecutivo Nacional (Ministerio de Economía - Secretaría de Estado de Agricultura y Ganadería) queda facultado para
suspender temporariamente la vigencia del régimen o para determinar su aplicación progresiva, por razones fundadas y de acuerdo con
cada provincia.

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