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ODONTOLOGIA

OCTAVO “A”

CIRUGIA DENTOMAXILAR
TRABAJO GRUPAL :
PREOPERATORIO
ESTUDIANTE:
ANDREINA ALCIVAR MOREIRA
KATIUSKA VELEZ ALAVA
PAOLA SANTANA DAZA
JHONATAN COLLANTES
BLANCA VALLADARES
INTRODUCCION

l resultado final de cualquier operación depende no sólo de la intervención quirúrgica, sino también

de que el cuerpo responda de una manera adecuada. Por ello, es fundamental un examen

preoperatorio que ofrezca un conocimiento previo de la situación en la que se halla el paciente.

El examen preoperatorio que se realiza al paciente antes de cualquier intervención quirúrgica es

fundamental para el éxito de cualquier operación. Es un requisito previo que valorará su estado

actual de salud.

El término preoperatorio se utiliza, generalmente, en el campo de la medicina, y recopila las

diferentes etapas previas a toda operación quirúrgica. Lo habitual es que antes de cualquier

intervención, el paciente tiene que someterse a un estudio de su organismo para que las

posibilidades de éxito sean mayores.

El análisis preoperatorio comienza con un repaso al historial clínico del paciente. Este examen será

decisivo para conocer la reacción a la anestesia así como a la intervención quirúrgica en general

el periodo anterior a la intervención quirúrgica, prepara al paciente ante la operación y ayuda a

evitar posibles complicaciones del intraoperatorio y del postoperatorio. Podría resumirse como

todo lo referente al paciente hasta que el instante que se realiza la intervención


PERIODO PREOPERATORIO

Abarca desde la realización de la amnanesis, de la exploración clínica de los estudios radiológicos

y complementarios que sean imprescindibles para efectuar un correcto diagnostico – todo lo cual

dará lugar o no a una indicación quirúrgica -hasta la preparación del paciente para un acto

quirúrgico .

Comprenderá los apartados tan distintos como una información inteligible para el paciente, de las

circunstancias que motivan la indicación de la intervesion quirúrgica y de sus posibles

repercusiones inmediatas y diferidas, su preparación psicológica o la prescripción de una

premedicación determinada y adecuada al caso particular de que se trate . (Gay; Berini , 2010)

Datos biograficos

Estos datos incluyen nombre completo del paciente, la dirección donde vive, su edad, sexo,

ocupación, así como el nombre de su médico de atención primaria. El clínico debe usar esta

información junto con la impresión que obtiene de la inteligencia del paciente y de su personalidad,

para determinar la fiabilidad del paciente. Esto es importante porque la validez de la historia clínica

que proporciona el paciente depende ante todo de la fiabilidad del mismo. (Ellis, 2010)

Motivo principal de la consulta

Hay que preguntar a cada paciente cual es el motivo o problema por el que acude a la consulta, lo

que se puede llevar a cabo mediante un formulario que complementa el propio paciente o bien con

la transcripción de su respuesta (si es posible de forma literal) estas declaraciones ayudan al clínico
a establecer las prioridades a la hora de realizar el historial clínico y la planificación del

tratamiento. (Ellis, 2010)

Historia del motivo principal de la consulta

El paciente debe describir la historia del motivo de su consulta o dolencia, en particular en el

momento de su aparición inicial, cualquier cambio habido desde que apareció y su influencia sobre

o por otros factores.

Las descripciones del dolor deben incluir el comienzo, la intensidad, la duración, la localización e

irradiación así como otros factores que empeoran o mitigan el dolor. Además hay que investigar

cualquier síntoma constitucional como fiebre, escalofríos, letargo,anorexia,malestar y debilidad

que pueda estar asociado con el síntoma principal. (Ellis, 2010)

Historial medico

Los cuestionarios de salud se deben redactar de forma clara con lenguaje llano y no deben ser

my largos.para disminuir la posibilidad de que los pacientes aporten respuestas incompletas y

para cumplir las normas de Health Insurance Portability and Accountability Act para transmitir

información sanitaria el consentimiento por escrito del paciente. (Gay; Berini , 2010)

Revision por sistema

Antes de empezar una intervesion quirúrgica siempre se debe controlarse una serie de signos

vitales que consideramos básicos: frecuencia cardiaca y frecuencia del pulso periférico-

generalmente tomado en la arteria radial, presión arterial- medida en el brazo, la frecuencia

respiratoria y la temperatura corporal.

Examen físico
Refiere (Tejada, 2013)

Debe ser metódico y sistemático, la recogida de los hallazgos de un examen físico debe ser un

ejercicio de descripción detallada

Simetrías y Asimetrías faciales

 Plano Sagital Medio

 Plano super Ciliar

 Plano sub nasal

 Plano Sub mentoniano

Los Ganglios Linfáticos. Adenopatías

la palpación se debe realizar de una forma metódica bimanualmente con la cabeza del

paciente relajada por la Parte posterior y anterior del paciente.

Exploración de la ATM

La palpación de la articulación temporomandibular se realiza bilateralmente en máxima

intercuspidación (boca cerrada con dientes en oclusión) y durante la apertura bucal.

 El explorador se sitúa detrás del paciente y colocalos dedos índice y medio en el

área preauricular, mientras que su dedo meñique se introducirá en el conducto

auditivo externo.

 Desde esta posición se pide al paciente q ue abra y cierre la boca, de esta manera

podemos Obtener signos patológicos de la articulación como son los ruidos

articulares, o la presencia de dolor durante los movimientos de apertura y cierre.


Examen intraoral

Un buen examen de la boca requiere que el examinador ponga en uso la mayoría de sus sentidos.

La inspección por visión directa o indirecta debe hacerse con buena iluminación, es recomendable

usar una lupa para aumentar el tamaño de las estructuras anatómicas y/o lesiones. La palpación

con las yemas de los dedos debe ser hecha con guantes, puede ser digital o bidigital. La olfación

nos ayuda en el diagnóstico de algunas enfermedades que tienen un olor .

 Labios

 Carrillos

 Paladar duro

 Paladar blando

 Lengua

 Encias

Métodos de evaluación

Según (Ellis, 2010)

Inspección

 Cabeza y cara: forma general ,simetría distribución del pelo

 Orejas : reacción normal a los sonidos

 Boca:dientes mucosa,faringe,labios,amigdalas.

 Cuello: tamaño de la glándula tiroides, distención venosa yugular

Palpación

 Articulación temporomandibular crepitación e inflamación


 Paranasal: dolor sobre los senos

 Boca : glándulas salivales, suelo de la boca,labios,musculos de la masticación

 Cuello :tamaño de glándula tiroides, ganglios linfáticos

Percusión

 Paranasal: resonancia sobre los senos

 Boca : dientes

Auscultación

 Articulación temporomandibular : chasquidos crepitaciones

 Cuello: carótida

Estudios complementarios

 Estudios radiográficos de calidad suficiente con la realización del número de placas y tipo

de placas o proyecciones adecuadas

 Examen psicológico Según la profundidad que requiera el caso.

ENTIDADES QUE CONSTITUYEN RIESGO QUIRÚRGICO

ENFERMEDADES CARDIACAS

Los problemas cardiacos que con mas frecuencia tienen relación con la cirugía bucal comprenden:

CORONOPATIAS:

Angina de pecho
Obstrucción del aporte arterial del miocardio, ocurre principalmente en hombres en torno a los 40

años de edad también esta extendida entre mujeres posmenopáusicas. La fisiopatología básica

de la enfermedad es un estrechamiento progresivo o espasmos (o ambos) de una o mas arterias

miocárdicas y las capacidad de las arterias coronarias de aportar sangre oxigenada . la demanda

miocárdica de oxigeno puede aumentar por un esfuerzo, por ansiedad

El miocardio se esquimiza lo que produce una sensación de presión en la región subesternal del

paciente que puede irradiar hacia el hombro izquierdo y el brazo y hacia la mandíbula. El paciente

se puede quejar que tiene una gran incapacidad para respirar de forma adecuada. El malestar típico

desaparece cuando disminuyen los requerimientos y aumenta el aporte de oxigeno al musculo

cardiaco. (Ellis, 2010)

Infarto de miocardio

Resultado de un desequilibrio entre aporte y demanda de oxigeno produce disfunsion y muerte

celular generando una area una necrosis miocárdica, tiende a servir de nidos de arritmias, el

tratamiento consiste en limitar los requerimientos de trabajo al miocardio , se recomienda por lo

general que los procedimientos de cirugía oral electivos mayores se difieran al menos durante 6

meses después del infarto. (Ellis, 2010)

Accidente cerebrovasculares (ictus)

Ocurre cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se rompe o es taponado por un

coágulo u otra partícula. Debido a esta ruptura o bloqueo, parte del cerebro no consigue el flujo de

sangre, oxígeno y glucosa, que necesita. Estos pacientes suelen tomar anticuagulantes y si son

hipertensos toman fármacos antihipertensivos (Ellis, 2010)

Arritmias
Es un trastorno de la frecuencia cardíaca (pulso) o del ritmo cardíaco. El corazón puede latir

demasiado rápido (taquicardia), demasiado lento (bradicardia) o de manera irregular.

Una arritmia puede no causar daño, ser una señal de otros problemas cardíacos o un peligro

inmediato para su salud, estos pacientes pueden estar tomando anticoagulantes o tener un

marcapasos permanentes.los marcapasos no suponen una contraindicación en cirugía oral se debe

limitar la cantidad total de adrenalina a 0,04mg. (Alvarez, 2016)

Endocarditis infecciosa

Es la inflamación del revestimiento interno de las válvulas y cavidades cardiacas (endocardio),

producida por la infección por un microorganismo, generalmente bacterias, que crecen formando

unas estructuras características conocidas como vegetaciones. (Cedeño & Rivas, 2012)

Hipertensión

Por fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre a su

cuerpo. La atención de pacientes pocos controlados (200/110) se usa un protocolo de reducción de

ansiedad y la monitorización de los signos vitales , el uso de anestésicos locales con adrenalina

debe hacerse con precaución después de la cirugía se recomienda que estos pacientes reciban

atención medica para su hipertensión. La cirugía oral en pacientes con hipertensión grave(220/110)

debe posponerse

ENFERMEDADES RENALES

Insuficiencia renal

Los pacientes que padecen Insuficiencia renal aguda no presentan alteraciones significativas a

nivel oral
los riñones pierden de repente la capacidad de filtrar los desechos de la sangre

Requieren consideraciones específicas previas al tratamiento odontológico, en especial en relación

con el sangrado, riesgo de infección y medicación. De acuerdo con la condición clínica del paciente

debe establecerse un programa de mantenimiento dental. (Alvarez, 2016)

PROBLEMAS PULMONARES

Asma

Es causada por una inflamación (hinchazón) de las vías respiratorias. Cuando se presenta un ataque

de asma, los músculos que rodean las vías respiratorias se tensionan y su revestimiento se inflama.

Esto reduce la cantidad de aire que puede pasar por estas. Interconsulta con el neumólogo tratante

para el control efectivo de la enfermedad y de esta manera reducir las probabilidades de

broncoespasmo durante el acto quirúrgico, además de asegurar el tratamiento de las vías

respiratorias superiores en caso de infección e investigar si el paciente a recibido o no terapia con

glucocorticoides (dosis y frecuencia) debido a que esto pueden causar crisis adrenales (Cedeño &

Rivas, 2012)

ENFERMEDADES HEPÁTICAS

Enfermedades causadas por virus, como la hepatitis A, la hepatitis B .Enfermedades causadas por

drogas, venenos o toxinas o por ingerir demasiado alcohol. Los ejemplos incluyen enfermedad por

hígado graso y cirrosis, hígado, enfermedades hereditarias, como hemocromatosis y

la enfermedad de Wilson. Es necesario modificar dosis o evitar fármacos que requieran

metabolismo hepáticos.

ENFERMEDADES ENDOCRINAS
Causada por una producción disminuida de insulina

Manifestaciones orales

Enfermedad periodontal

Xerostomía

Candidiasis

Manejo clínico

Colaboración con el endocrinólogo

Buena historia clínica

Tratamiento convencional ante pacientes bien controlados

Tratamientos matutinos Recomendar alimentación y medicación normal

Antibióticos de amplio espectro

Mediciones de la glucemia: Ideal entre 120-180 mg/dl

PREOPERATORIO DE UN TERCER MOLAR INCLUÍDO

Diagnostico.- Se basa en una correcta historia clínica y un minusioso examen clínico y

radiológico. Anotando todos los datos que estos estudios nos aportan, suele ser muy fácil establecer

un correcto diagnóstico lo cual es primordial para efectuar el tratamiento más pertinente en cada

casi en particular. (Gay; Berini , 2010)

Historia clínica

Es preciso comenzar el estudio del paciente con una correcta anam- nesis, investigando todos los

antecedentes que puedan ser de interés, sin descuidar todos los signos y síntomas del proceso o

enfermedad actual. (Gay; Berini , 2010)


Examen clínico

 Examen general. Buscaremos signos y síntomas sistémicos; así, em- pezaremos con el

registro de la temperatura axilar, tensión arterial, pulso y frecuencia respiratoria, etc.

 Examen regional. Investigaremos la presencia de tumefacción ex- trabucal, adenopatías

cervicales, trismo, disfagia, etc.

 Examen local. Examinaremos la región del tercer molar, buscando la presencia de

tumefacción. sumración, uleeración, etc.

 tario inferior.

Exploraremos con una sonda roma la posible existencia de una fís- tula, y en su caso, la presencia

de un tercer molar en su profundidad. Re- visaremos ambos lados del piso bucal, anotando si hay

dolor, indura- ción, caries, patología periodontal, etc.

Debe investigarse si el tercer molar o el segundo molar superior trau- matizan el capuchón mucoso

que recubre el cordal inferior, este trau- matismo provoca la persistencia de la inflamación. (Gay;

Berini , 2010)

Examen radiológico

El estudio radiológico es imprescindible y para ello haremos las siguientes placas radiográficas:

 Ortopantomografía

 Radiografia periapical intrabucal del tercer molar o de la región donde pueda estar ubicado

(figura 12.27).

 Radiografía oclusal de la zona del tercer molar. Se realiza sólo cuando nos interesa conocer

la inclinación hacia lingual o vestibular del cor- dal o el estado del hueso de estas zonas.
 Radiografias extrabucales del tipo de la proyecc n lateral de crá neo desenfilada de

maxilares. Puede ser útil en aunque la radiografía panorámica de los maxilar más nos da

información sobre los cuatro cordales (figura 12.40). unas ocasiones es mejor, y ade

multáneamenie

Para hacer una correcta interpretación radiográfica es necesarño com* parar y corelacionar

constantemente la clínica con la imagen radie gráfica.

 Al realizaro interpretar las radiografías debe tenerse presente

 El area de estudio debe aparecer en el centro de la radiogralia deben obtenerse al menos 2

proyecciones distintas. En gencr rs nacemos una ortopantomografía y una radiografía

intranu ca que 2 del tercer molar.

 Los puntos de contacto deben aparecer abiertos, Jo que el centro del rayo ha pasado en

ángulo recto a través del ared posición.

 Puede existir cierta superposicision de las cuspides de los dientes anteriores.

 Deben verse los tejidos blandos existentes en la zona.

 Todas las interpretaciones radiográficas tienen que apoyarse en hallazgos clinicos.

Después de tener un estudio radiográfico adecuado, el profesional debe valorar para interpretar

correctamente cada punto diagnóstico que pueda estar presente.

La radiovisiografia nos permite exprimir al máximo el estudio radiográfico mediante los

programas informáticos que facilitan colorear el nervio dentario inferior. (Gay; Berini , 2010)

Indicaciones de extraccion quirurgica de terceros molares


Por lo general los terceros molares son las piezas que presentan más irregularidades durante su

desarrollo, puesto que podrían encontrarse frente a accidentes mecánicos o físicos.

Estas piezas empiezan su formación alrededor de los 8 años de edad terminando su amelogénesis

a los 18 o 20 años y completando su ápico-formación entre los 20 a 23 años.1

Como consecuencia de ser las últimas piezas en concluir su formación es común que los terceros

molares se presenten como:

Pieza Incluida; cuando el diente se encuentra completamente cubierto por el hueso y con el saco

folicular íntegro una vez pasada su fecha de erupción.

Una de las causas más comunes de estas alteraciones es la falta de espacio en los arcos dentarios,

o la presencia de algún obstáculo provocado por ciertas alteraciones patológicas, como

malformaciones dentarias, quistes, tumores, infecciones o estados postraumáticos.

Como principal tratamiento ante piezas incluidas, retenidas o impactadas debe realizarse la

extracción de la pieza en cuestión, puesto que a medida que avanza la edad del paciente la

extracción se hace más difícil, por otra parte puede surgir un aumento en la incidencia de

morbilidad de los tejidos locales, pérdida o lesión de los dientes adyacentes o del hueso y posibles

lesiones de estructuras vitales, por lo cual es necesario tomar en cuenta las estructuras de las

respectivas arcadas diferenciando de esta forma la exodoncia de los terceros molares superiores de

los inferiores, puesto que ambas piezas se encuentran rodeadas de estructuras importantes como la

tuberosidad del maxilar y el conducto dentario.

Tercer molar inferior


La extracción de terceros molares inferiores puede presentarse como un trabajo relativamente

simple como extremadamente difícil, el factor principal determinante de la dificultad de extracción

es la accesibilidad, que está determinada por los dientes adyacentes u otras estructuras que

dificulten el acceso o la vía de salida. Es necesario también la realización de estudios

complementarios, como la obtención de una radiografía panorámica que muestra la imagen más

precisa de la totalidad de la anatomía de la región y es la de elección frecuente para planificar la

extracción de terceros molares y en algunas circunstancias una radiografía peri-apical bien

posicionada que podría ser de similar utilidad, al igual que una radiografía TC de haz cónico,

facilitando de ésta forma la angulación del eje mayor del tercer molar con respecto al eje mayor

del segundo molar, por lo cual la clasificación de la dificultad y el sistema de abordaje de la pieza

dental dependerá de angulación de los terceros molares clasificando las diferentes retenciones en:

• Retención mesio-angular: Es reconocida como la retención de menor dificultad puesto que el

diente es retenido con inclinación hacia el segundo molar en dirección mesial. La retención mesio-

angular es la más frecuente constituyendo aproximadamente el 43% de los dientes retenidos.

• Retención horizontal: Cuando el eje mayor del tercer molar es perpendicular al segundo molar

el diente retenido se considera horizontal la cual es normalmente más difícil de extraer por lo cual

es necesario optar por la cirugía con odonto-sección incluida la técnica de osteotomía, donde se

realizara un abordaje por vestibular evitando de esta forma la innecesaria afección a estructuras

vecinas.

• Retención vertical: El eje mayor del diente se encuentra paralelo al eje mayor del segundo molar,

esta retención es a segunda más frecuente y es la tercera en dificultad de extracción.


• Retención disto-vestibular: Es aquella con angulación más difícil para la extracción, en la

angulación disto-angular el eje mayor del tercer molar está angulado hacia distal o atrás, alejándose

del segundo molar, esta retención es denominada como la de mayor dificultad por que el diente

tiene una trayectoria de salida que discurre por la rama ascendente y su extracción requiere una

intervención quirúrgica importante.

Tercer molar superior

La clasificación de los terceros molares superiores presentan mínimas variaciones respecto a la

angulación dando tres tipos de tercer molar superior los cuales son: retención vertical, retención

disto-angular y retención mesio-angular. ocasiones muy raras se encuentran posiciones extrañas

como; transversal, invertida u horizontal. Las mismas angulaciones de los terceros molares

inferiores originan grados de dificultad en la extracción de las piezas superiores, las retenciones

mesio-angulares son las más difíciles de extraer por que el hueso que cubre la retención y tiene

que ser eliminada está en la cara posterior del diente y es mucho más grueso que en la retención

vertical o disto-angular, además el acceso es de mayor dificultad si existe un segundo molar

erupcionado.

La mayoría de los terceros molares están angulados hacia la cara vestibular de la apófisis alveolar,

lo que hace que hace que el hueso que la cubre sea fino en ésta zona, por lo tanto fácil de eliminar,

pero en ocasiones la pieza está situada hacia la cara palatina de la apófisis alveolar lo que da como

resultado que el diente sea mucho más difícil de extraer porque es necesario eliminar gran cantidad

de hueso para lograr el abordaje ideal. Un abordaje desde el paladar tiene el riesgo de lesionar

nervios y vasos del agujero palatino, por lo cual la combinación de una evaluación radiográfica y

manual de la tuberosidad del maxilar puede ayudar a determinar la posición de la pieza; 6 es decir

que si el diente se encuentra dirigido hacia vestibular se encuentra un abultamiento palpable en


esta zona, por otra parte si el diente está posicionado hacia palatino se encuentra como un defecto

óseo a nivel de esta región. Por otra parte el factor que causa dificultad en la extracción de terceros

molar es la raíz, la mayoría de los terceros molares superiores presentan raíces fusionadas cónicas,

pero con frecuencia se presentan raíces finas no fusionadas con dislaceración.

Es necesario también tomar en cuenta el ligamento periodontal, es decir que cuando mayor sea el

espacio del ligamento menor es la dificultad durante la extracción. El folículo que rodea la corona

del molar también tiene influencia en la dificultad de la extracción si el espacio folicular es amplio

será de mayor facilidad la extracción de la pieza por lo contrario si el espacio es delgado o

inexistente será más difícil al tomar en cuenta la valoración de la angulación del molar, la

determinación del tipo de retención que presenta la pieza, la densidad ósea y la posición de los

terceros molares en general se puede determinar la técnica quirúrgica a seguir. (Cedeño & Rivas,

2012)

Relación con el borde anterior de la rama ascendente

Otro método para clasificar los terceros molares inferiores retenidos se basa en la cantidad de

diente retenido que está cubierto por el hueso de la rama ascendente. Esto se conoce como

clasificación de Pell y Gregory también denominados clase 1 2 y 3 de Pell Y Gregory. Para esta

clasificación es importante que el cirujano examine cuidadosamente la relación entre el diente y

la parte posterior de la rama ascendente. Cuando el diámetro mesiodistal de la corona está

completamente por delante del borde anterior de la rama ascendente se trata una relación clase 1.

Si el diente está angulado en dirección vertical, las posibilidades de que el diente erupcione hacia

una posición normal son buenas siempre y cuando la formación de las raíces no sea completa.
Si el diente se sitúa detrás de forma que aproximadamente la mitad está cubierto por la rama, la

relación de dicho diente con la rama es de clase 2. En una situación de clase 2, el diente no puede

erupcionar en completa libertad con respecto al hueso que cubre la corona y su cara distal debido

a una pequeña lámina del hueso que cubre la parte distal del diente.

La relación entre el diente y la rama es de clase 3 cuando el diente se localiza por completo dentro

de la rama ascendente. Evidentemente, la relación de clase 1 es la que proporciona la mayor

accesibilidad al diente retenido y, por lo tanto, es la que más facilita la extracción. La relación de

clase 3 proporciona de la menor accesibilidad y por eso es la más difícil. (Gay; Berini , 2010)

Relación con el plano oclusal

La profundidad del diente retenido con respecto a la altura del segundo molar adyacente

proporciona el siguiente sistema de clasificación para determinar la dificultad de extracción de una

retención.

Este sistema de clasificación también fue propuesto por Pell y Gregory se llama clasificación

A,B,C de Pell y Gregory. En esta clasificación el grado de dificultad se mide por el grosor del

hueso suprayacente es decir, qué grado de dificultad aumenta a medida que se incrementa la

profundidad del diente retenido, a medida del diente se hace menos accesible se vuelve más difícil

dividir y preparar un punto de apoyo, y la dificultad global de la operación aumento

sustancialmente.

Una retención de clase A es aquella en que la superficie oclusal del diente retenido este nivel o

casi al nivel del plano oclusal del segundo molar. Una retención de clase B es un diente retenido

como una superficie oclusal entre el plano oclusal y la línea cervical del segundo molar.
Finalmente, la retención de clase C es aquella en la que la superficie oclusal del diente retenido

está por debajo de la línea cervical del segundo molar (Gay; Berini , 2010)

Contraindicación para la extracción de dientes retenidos

Todos los dientes retenidos deben extraerse a menos que haya contraindicaciones específicas que

justifiquen dejarlos en su sitio. Cuando los posibles beneficios pesan más que las posibles

complicaciones y riesgo, el procedimiento debe realizarse. De la misma manera, cuando los riesgo

son mayores que los posibles beneficios, el procedimiento debe diferirse.

Las contraindicaciones para las extracciones de los dientes retenidos se relacionan principalmente

con el estado físico del paciente.

Edades Extremas

La edad avanzada es un riesgo más común para la extracción de los dientes retenidos, a medidas

que el paciente envejece el diente se vuelva más calcificado, y por lo tanto menos flexible, y es

menos probable que se deforme ante la fuerzas de la extracción dental. El resultado es que debe

eliminarse más hueso quirúrgicamente para quitar el diente en su alveolo

De la misma manera., a medida que envejece, el paciente responde de modo menos favorable y

con más secuelas postoperatorias. Un paciente de 18 años puede tener molestias e inflamación 1 o

2 días después de extraer un diente retenido, mientras que el mismo proceso puede dar el lugar a

un periodo de recuperación de 4 o 5 días en un paciente de 50 años.

Finalmente, si el diente ha estado retenido en la apófisis alveolar muchos años sin enfermedad

periodontal, caries o degeneración quística, es poco probable que aparezca dichas secuelas

desfavorables.
Estado de salud deteriorado

Un estado de salud general deteriorado es un riesgo para la extracción de un diente retenido.

Si el diente es asintomático, su extracción quirúrgica debe considerarse opcional. Si la función

cardiovascular o respiratoria o las defensas del huésped para combatir la infección están

gravemente afectadas, o si el paciente tiene una coagulopatia adquirida o congenitica grave, el

cirujano de pensar en dejar el diente en la apófisis alveolar. Pero si el diente se vuelve sintomático,

el cirujano y el medico del paciente deberían planificar su extracción con secuelas quirúrgicas y

postoperatorias mínimas

Probable daño excesivo de estructuras adyacentes

Si el diente retenido está en una zona en la que su extracción puede poner en gran peligro nervios,

dientes o puentes previamente construidos, quizás sea prudente dejarlo en su sitio. (Tejada, 2013)

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