Ética, deontología y los Colegios Profesionales

Waynner Guillén Jiménez

Colegio Profesional de psicólogos de Costa Rica

“Para saber si alguien tiene ética, no hay que preguntarle por su carnet, sino por su
comportamiento”

Esta frase, me hace reflexionar primero en lo que significa ser profesional, definitivamente no eso
portar un carnet o estar inscrito a un colegio o poseer un título universitario, en algunos casos una
persona tiene estas dos condiciones y no es visto como profesional por sus usuarios, como decir el
Dr. Alban Brenes, psicólogo y miembro distinguido de nuestro colegio profesional en un acto de
juramentación “un profesional no debe de compártase irresponsablemente, o de manera
inapropiada, no debe de utilizar su ejerció para hacer anuncios políticos, religiosos o mencionar
alguna iglesia, menos hacer anuncios de sus negocios o realizar propaganda y sacar beneficios
personales, su vocabulario debe ser de un profesional , su actitud y conducta la de una persona
dispuesta a prestar un servicio a los demás reflejo que ama lo que hace ” pero en las profesionales
hay de todo, aunque cumplan con estos dos requisitos; Un titulo, y una colegiatura.

Se es profesional en la medida que se realice la profesión o el oficio de manera responsable,

comprometida y siempre como un servicio.

“Una profesión, cualquiera que sea es la ocupación que se desarrolla con el fin de colaborar con el
bienestar de la sociedad”, esta debiera ser el principio básico y vocacional para la elección de una
carrera universitaria. Es una definición simple, pero refleja el fin último de un ejercicio profesional,
el principio de No Dañar, no se estudia para hacer daño…

Ahora bien el Estado es quien debe garantizar este bienestar de la sociedad en todas sus formas, de
ahí que sea el estado quien delega a los colegios profesionales velar por el ejercicio responsable de
los profesionales.

Todo profesional está y debe estar sometido a controles sociales más o menos rigurosos que
permitan exigirle responsabilidades de muy diversa índole en relación con sus actos, de ahí la
necesidad de establecer unos principios éticos.

De esta manera el Estado delega a los Colegios Profesionales la definición de estos principios del
buen deber y al final del buen actuar de esta manera garantizan el derecho de los usuarios de
recibir un servicio responsable y profesional.

Sala IV.

“Para el ejercicio de la profesión se requiere en primer término, una autorización dada

esencialmente por el título universitario. Una vez obtenido esa autorización, el profesional que
desee prestar sus servicios profesionales está sujeto a la serie de regulaciones emitidas tanto por el
estado como por el Colegio Profesional en el marco de sus competencias. Dentro de las
regulaciones impuestas por el Estado encontramos la necesidad de colegiarse para ejercer la
profesión, que se justifica por las potestades de control y fiscalización respecto del ejercicio de la
profesión y por el interés público presente en el correcto desempeño de la actividad profesional.”

Da la impresión de que los colegios tienen una función de policías… pero hay otras funciones de los
colegios que muchos no se ven o no se conocen; la capacitación continua, las actividades de
integración, las gestiones políticas para abrir nuevos espacios laborales, las consultas antes los
poderes supremos o instituciones, entre otros, todo en procura de un desarrollo integrar de sus
agremiados.

Quisiera mencionar Voto 5483-95 de la sala constitucional, ante una acción de inconstitucionalidad
en contra de la colegiatura obligatoria, esto para concluir sobre la naturaleza de los colegios
profesionales.

“Se comprende bien que una profesión titulada es un servicio esencial a la comunidad y que su
buena presentación al publico es igualmente importante, por lo que publico también debe ser la
función reguladora y disciplinaria de esa profesión y el ente que la lleva acabo.”
De esta manera la fiscalización del buen ejercicio profesional no depende solo de los Colegios sino
de los mismos usuarios que al sentir que los servicios brindados por un profesional no son los
adecuados, no son científicos, o no corresponden a un comportamiento moral y ético, pueden
interponer las denuncias respectivas, en lo ético/deontológico en cada unos de las fiscalías de los
Colegios en lo civil en las instancias que correspondan, sin embargo una puede llevar a la otra.

Dos elementos importantes de los colegios:

1. El Titulo y la colegiatura.
2. Fiscalización del ejercicio ético

La ética profesional siempre va estar referida a una ética normativa o el cumplimiento de un código
deontológico que regula mi buen deber y mi buen actuar,…a fin de garantizar la calidad y
confiabilidad de los servicios que se brinden, así como la no afectación de terceros.

Esta ética normativa delegada por el Estado no debe ser vista como forma de no libertad, más bien
una forma de conducirme en un espacio ético y seguro, ya que en el ejercicio de la profesión
siempre surgen dudas, ¿puedo hacer esto?, ‘¿lo debo hacer?, …si lo hago incurro en alguna falta ?,
tendré consecuencias por lo que hago…

Muchos colegios regulan este ejercicio a través de los códigos de ética y los diferentes reglamentos,
la procuraduría ha realizado un amplio estudio de las competencias y potestades reglamentarias de
los colegios profesionales. “Un colegio ejerce su competencia en las materias que suponen el
control de la actividad de sus miembros, que se debe reflejar en las actuaciones profesionales
serias, honradas y dignas en beneficio de los participantes que utilizan los servicios… en resumen,
las atribuciones de los colegio profesionales involucran la protesta reglamentaria sobre el ejercicio
de la profesión…”

Nuestro colegio cuenta con una serie de normativas que regulan el ejercicio de la profesión, su
función no es la de ser un policía, un ente persecutor, sino más bien un ente promotor del buen
ejercicio de la profesión, de esta manera elevamos nuestra disciplina no solo como ciencia, sino
como referente a los problemas sociales.

Nuestro colegio profesional regula el ejercicio profesional a través de su Código de ética y

deontológico que cumplen una triple función:

1. Fijar una serie de criterios de carácter científico-funcional para el ejercicio de la profesión,

con el objetivo de dar operatividad y eficacia a las actividades ejercidas en el ámbito
cubierto por las normas establecidas.

2. Brindar orientaciones éticas para el ejercicio de la profesión.

 3. La posibilidad de imponer sanciones disciplinarias a los colegiados que incumplan los
dictados del código de ética y deontológico.

Código de Ética y Deontológico

del CPPCR

Capítulo I: Disposiciones Generales

Capítulo II: De las responsabilidades en la práctica profesional

Capítulo III: Sobre el cobro de Honorarios

Capítulo IV: Sobre el secreto profesional

Capitulo V: Sobre los informes, investigaciones y publicaciones

Capítulo VI: Relaciones entre profesionales en psicología

Capitulo VII: Relación con el Colegio

Capítulo VIII: Sobre el T.H. y sus procedimientos

Capitulo IX: Disposiciones Finales

HOMBRE SOY; NADA HUMANO ME ES AJENO

Los profesionales que trabajamos en el campo de la salud, lo social, la educación, la seguridad, en

fin los que trabajamos en procura bienestar de los demás, gozamos de una gran oportunidad ya
que trabajamos con personas al igual que nosotros, con una diferencia que nosotros prometimos a
la patria y al colegio cumplir con nuestras leyes, reglamentos y código de ética el día que nos
juramentamos como parte de una gremio profesional….