Está en la página 1de 18

29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.

HTML

MAGISTRADA PONENTE: GLADYS MARÍA GUTIÉRREZ ALVARADO

Mediante oficio n.° 534-2015 del 16 de diciembre de 2015, emanado del Juzgado Superior Cuarto en lo
Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, fue recibido en
esta Sala Constitucional, el expediente contentivo de la decisión dictada el 9 de diciembre de 2015, por el referido
Juzgado Superior Cuarto, que declaró “…INADMISIBLE la acción de amparo constitucional interpuesta por el
ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, contra la sentencia que dictó, (sic) el día diecisiete (17) de noviembre de
dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de primera (sic) Instancia en lo Civil, Mercantil, [del] Tránsito y
Bancario de esta misma Circunscripción Judicial, con fundamento en el cardinal 4 del artículo 6 de la Ley
Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales (…)”, en el marco de una demanda por
retracto legal incoado por el ciudadano Juan Ravell Aumaitre, contra los ciudadanos Gladys Molina de Ravell y
Gustavo Juan Ravell Molina; así como contra la sociedad mercantil Buster XV Enterprises de Venezuela, C.A..
Dicha remisión se efectuó en virtud de la apelación ejercida el 10 de diciembre de 2015, por el abogado
Dhaniel Mata, actuando en su carácter de apoderado judicial del ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, en
contra de la decisión dictada el 9 de diciembre de 2015, por el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y
del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas.
El 22 de diciembre de 2015, se dio cuenta en Sala del presente expediente, designándose como ponente a
la Magistrada Gladys María Gutiérrez Alvarado, quien, con tal carácter, suscribe el presente fallo.
Los días 16 de junio, 28 de julio de 2016, el abogado Dhaniel Mata, actuando en su carácter de
apoderado judicial del ciudadano Juan Ravell Aumaitre, consignó diligencia mediante la cual solicitó
pronunciamiento en la presente causa.
El 3 de noviembre de 2016, la abogada Ana Teresa Argotti, procediendo en su carácter de apoderada
judicial de la sociedad mercantil Buster XV Enterprises de Venezuela, C.A., consignó escrito contentivo de los
hechos ocurridos a lo largo del proceso originario.
Los días 22 de noviembre de 2016, 17 de enero, 7 de marzo, 16 de mayo, 31 de julio, y 11 de octubre de
2017, así como, los días 10 de abril y 1 de octubre de 2018, el abogado Dhaniel Mata, actuando en su carácter de
apoderado judicial del ciudadano Juan Ravell Aumaitre, consignó diligencia mediante la cual solicitó
pronunciamiento en la presente causa.

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

El 24 de abril de 2019, la representación judicial de la parte apelante ratificó petición de


pronunciamiento en el presente asunto.
Realizado el estudio del caso, pasa esta Sala a dictar sentencia, previo análisis de las consideraciones
siguientes:

I
DE LAS ACTUACIONES EN EL PROCESO DE AMPARO
El 2 de diciembre de 2015, el abogado Ángel Álvarez Oliveros en su carácter de apoderado judicial del
ciudadano Juan Ravell Aumaitre, interpuso demanda de amparo constitucional, en contra de la sentencia dictada
el 17 de noviembre de 2015, por el Juzgado Noveno de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y
Bancario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas.
En la misma fecha se recibió la acción de amparo constitucional interpuesta por ante la Unidad de
Recepción y Distribución de Documentos de los Juzgados Superiores en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y
Bancario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas.
El 9 de diciembre de 2015, el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, declaró, “…INADMISIBLE la acción de amparo
constitucional interpuesta por el ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, contra la sentencia que dictó, el día
diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de primera (sic) Instancia en lo Civil,
Mercantil, Tránsito y Bancario de esta misma Circunscripción Judicial, con fundamento en el cardinal 4 del
artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales…”.
El 10 de diciembre de 2015, los abogados Ángel Álvarez Oliveros y Ana Álvarez Torrealba, apelaron de
la decisión dictada el 9 de diciembre de 2015, por el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito
de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas.
El 16 de diciembre de 2015, el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, oyó en un solo efecto la apelación ejercida.

II
DE LA ACCIÓN DE AMPARO
El accionante fundamentó su demanda de amparo constitucional en los argumentos siguientes:
Que, la sentencia proferida el día 17 de noviembre de 2015, por el Juzgado Noveno de Primera Instancia
en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y Bancario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas,
había establecido para garantizar las resultas del juicio, la absurda cantidad de DÍEZ MILLONES CIENTO
VEINTE MIL BOLÍVARES (Bs.10.120.000,00), que a su decir, comprendía el doble de las costas del juicio.
Que, la norma contenida en el artículo 286 del Código de Procedimiento Civil, era clara al establecer,
que las costas que debía pagar la parte vencida, en ningún caso podían exceder del treinta por ciento (30%); por lo
cual, la caución había debido fijarse, tomándose en consideración el valor de la demanda que había sido estimada
por el actor, de conformidad con lo previsto en los artículos 36 y 38 del mismo Código.
Que con dicha sentencia; y, la consecuente exigencia de tal caución, se le había cercenado el derecho al
debido proceso y a la tutela Judicial efectiva, que consagran los artículos 26 y 49 de nuestro texto constitucional,
toda vez, que se le impedía la labor tuitiva de su derecho, por cuanto constituía un acto violatorio, que no permitía
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

la continuación del juicio y la pronta obtención de una sentencia justa, mucho menos el ejercicio del recurso
legalmente previsto; y más aún se le apercibía con la extinción del proceso, de no consentir con el otorgamiento
de ese especialísimo tipo de fianza por una cantidad superior al treinta por ciento (30%) del valor de lo litigado.
Que además el fallo en mención le conculcaba el derecho a la igualdad y la confianza legítima,
consagrados en los artículos 21 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y 15 del Código de
Procedimiento Civil, por habérsele exigido una caución inconstitucionalmente estimada lejana al supuesto
abstracto normativo.
Que en la decisión recurrida, había incurrido en un error judicial, que no sólo le causaba un perjuicio en
el retardo del procedimiento, sino también conminado a constituir una caución, habida cuenta de la suficiencia de
bienes que tenía en el país, lo cual resultaba inconstitucional, por haber sido estimada contrariamente a la esencia
de la misma caución.
Que tal error judicial le impedía el debido proceso, por cuanto al haber errado el Tribunal en la
valoración probatoria, al haber desestimado las pruebas producidas; al resolver que era meritoria la cautio
iudicatum solvi, no obstante haber demostrado éste que poseía bienes suficientes; y, al haber fijado una caución
por un monto infinitamente superior a lo que la esencia de la figura postulaba, se le había apercibido a su
consignación, so pena de la extinción del juicio que había incoado en un lapso brevísimo de tiempo, que
presuponía la facilidad de obtener una caución en tan poco tiempo por tan elevado monto.
Que debido a tales circunstancias, solicitaba la declaratoria con lugar de la acción amparo propuesta; y,
como consecuencia de ello, la revocatoria del fallo producido por el tribunal de la causa.

III
DE LA DECISIÓN APELADA
En fecha 9 de diciembre de 2015, el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, declaró “…INADMISIBLE la acción de amparo
constitucional interpuesta por el ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, contra la sentencia que dictó, el día
diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de primera (sic) Instancia en lo Civil,
Mercantil, [del] Tránsito y Bancario de esta misma Circunscripción Judicial, con fundamento en el cardinal 4
del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales (…)”, en el marco de
una demanda por retracto legal incoado por el ciudadano Juan Ravell Aumaitre, contra los ciudadanos Gladys
Molina de Ravell y Gustavo Juan Ravell Molina, y contra la sociedad mercantil Buster XV Enterprises de
Venezuela, C.A. Del texto de la sentencia, que corre inserta a los autos, se lee, en su motiva, lo siguiente:
“(…)
La acción de amparo constitucional está concebida como una protección de derechos y
garantías constitucionales stricto sensu; que dicha acción está reservada para restablecer las
situaciones que provengan de violaciones de derechos y garantías fundamentales, pero de
ninguna forma de las reglas legales establecidas.-

Ahora bien, dispone el ordinal 4º del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos
y Garantías Constitucionales
‘Artículo 6.- No se admitirá la acción de amparo:
(...)
4) Cuando la acción u omisión, el acto o la resolución que violen el derecho o la garantía
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

constitucionales hayan sido consentidos expresa o tácitamente, por el agraviado, a


menos que se trate de violaciones que infrinjan el orden público o las buenas costumbres.
Se entenderá que hay consentimiento expreso, cuando hubieren transcurrido los lapsos
de prescripción establecidos en leyes especiales o en su defecto seis (6) meses después de
la violación o la amenaza al derecho protegido.
El consentimiento tácito es aquel que entraña signos inequívocos de aceptación.’
(Resaltado añadido).
En el caso bajo análisis aprecia este Tribunal, que la presente acción de amparo, fue incoada
por el quejoso, en virtud de la decisión que pronunció el Juzgado Noveno de Primera Instancia
en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Bancario de la Circunscripción Judicial del Ärea (sic)
Metropolitana de caracas, de fecha diecisiete (17) de noviembre del presente año, que declaró
con lugar la cuestión previa contenida en el ordinal 5º el artículo 346 del Código de
Procedimiento Civil, que había sido opuesta por la representación judicial de la parte
demandada.
Ha sido criterio reiterado y sostenido de nuestro máximo Tribunal de la República, que la
pretensión de tutela constitucional constituye el único mecanismo de impugnación procedente
en contra del fallo en mención, conjuntamente con medida cautelar de suspensión de los
efectos del auto que declaró con lugar la cuestión previa, ya que la sentencia que resuelve la
cuestión previa contenida en el ordinal 5º del artículo 246 (sic) del Código de Procedimiento
Civil, no tiene apelación.-
También se ha establecido, que para que la situación no se torne irreparable, la acción de
amparo debe ser propuesta por el quejoso, no dentro del plazo de seis (6) meses contados a
partir de la fecha en que se produjo la amenaza o violación constitucional que se ha alegado,
sino dentro de los cinco días de despacho siguientes que otorga el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil, para la subsanación del defecto u omisión declarado existente mediante
la resolución de dicha cuestión previa.-
En efecto, así lo ha dicho la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia
de fecha dos (2) de marzo de dos mil cinco (2005), donde estableció lo siguiente:
‘…Se observa, de lo que anteriormente fue reseñado, que el quejoso no incoó su demanda
de amparo contra el referido fallo antes que transcurriese el lapso para la subsanación
ni antes de que fuese declarada la extinción del proceso como consecuencia de la falta de
subsanación (ex art. 354 C.P.C.); con dicha inactividad procesal consintió tácitamente en
la declaratoria con lugar de la cuestión previa y el monto que se acordó como caución o
fianza, pues aun cuando la decisión que resuelve la cuestión previa del artículo 346.5 del
Código de Procedimiento Civil no tiene apelación (ex artículo 357 eiusdem), el supuesto
agraviado debió proponer su pretensión de tutela constitucional (único mecanismo de
impugnación procedente), conjuntamente con medida cautelar de suspensión de los
efectos del auto que declaró con lugar la cuestión previa, en el lapso que tenía para la
subsanación (dentro de los cinco días de despacho siguientes a su notificación), para que
su situación no se volviese irreparable, por cuanto, con su inactividad, causó la
terminación del proceso, que constituye una consecuencia jurídica de insoslayable
cumplimiento por el juzgador (ex parte in fine del artículo 354 del C.P.C.).
Ya ha declarado esta Sala reiteradamente que es de la naturaleza del amparo la
condición de reparabilidad inmediata de la situación lesiva de derechos constitucionales,
hasta el punto de que la acción es inadmisible cuando la amenaza no sea inmediata, o
cuando la lesión sea irreparable (arts. 6.2 y 6.3 L.O.A.); en este sentido, se ha destacado
que la inmediatez es una de las claves del amparo; por ello se afirma que, en este caso, el
quejoso no debió esperar la declaración de la terminación del proceso para la
impugnación de dicho fallo mediante el presente procedimiento, pues con ello, se insiste,

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

consintió tácitamente el supuesto agravio que se hubo producido en su esfera subjetiva


de intereses.
De tales razonamientos se concluye, en cuanto concierne al caso de autos, que sería
contraria a la naturaleza misma del amparo la admisión de su utilización después del
vencimiento del lapso que otorga la Ley Adjetiva Civil para la subsanación del defecto u
omisión declarado existente mediante la resolución de dicha cuestión previa, por cuanto
era completamente previsible por el demandante de amparo la consecuencia jurídica del
incumplimiento de su carga procesal, consecuencia, como se dijo, impuesta al
sentenciador de manera insoslayable, de allí que debió manifestar su inconformidad
dentro de dicho lapso, mediante el único mecanismo disponible (amparo constitucional
con medida cautelar) para evitar dicha consecuencia jurídica. De lo contrario, como
sucedió en este caso, consentiría tácitamente en la resolución que declaró con lugar la
cuestión previa. En este sentido, en sentencia n° 848 de 19.05.00 (caso: Baca) se
estableció que: ‘(s)e ha venido interpretando que la víctima de la lesión tiene seis (6)
meses para incoar la acción, y que por ello puede acudir al amparo así no haya apelado
o reclamado oportunamente; pero tal interpretación es contraria al numeral 4 del
artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales,
ya que la inactividad procesal del lesionado entraña signos inequívocos de aceptación de
la situación, y por lo tanto constituye un consentimiento tácito…’.-
Examinado el caso de autos, aprecia este Tribunal, tal como se desprende al folio cincuenta y
siete (57) del expediente, que en la sentencia proferida el día diecisiete (17) de noviembre de
dos mil quince (2015), por el Juzgado Noveno de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil,
Tránsito y Bancario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, se
señaló lo siguiente: ‘…Por cuanto la presente decisión, ha sido dictada en la oportunidad legal
prevista para ello no requiere la notificación de las partes…’.-
Que ante tales circunstancias, la pretensión de tutela constitucional, debía ser propuesta por el
quejoso, en el término de cinco (5) días que prevé el artículo 354 del Código de Procedimiento
Civil, para la subsanación de los defectos u omisiones indicados en el aludido fallo, contados
desde la fecha que se dictó el fallo en mención, es decir, a partir del día diecisiete (17) de
noviembre de dos mil quince (2015), fecha ésta con exclusión.
Que como quiera que de las mismas actas del proceso se evidencia, que la acción de amparo
ha sido interpuesta en fecha dos (2) de diciembre de dos mil quince (2015), considera este
Tribunal, atendiendo al criterio sostenido en el fallo parcialmente transcrito pronunciado por
la Sala Constitucional de nuestro máximo Tribunal, que la inactividad del hoy accionante en
amparo, al no proponer su pretensión constitucional en el término de subsanación que prevé el
artículo 354 del Código de Procedimiento Civil, constituyó un consentimiento tácito de la
cuestión previa contenida en el ordinal 5º del artículo 346 del mismo Código, que fue
declarada con lugar; y, trae como consecuencia la inadmisibilidad de la presente acción de
amparo constitucional de conformidad con lo establecido en el ordinal 4º del artículo 6 de la
Ley Orgánica de Amparo Sobre Derechos y Garantías Constitucionales- Así se decide…”.

IV
FUNDAMENTOS DE LA APELACIÓN
El 18 de enero de 2016, el abogado Dhaniel Mata, actuando en su carácter de apoderado judicial del
ciudadano Juan Ravell Aumaitre, consignó ante el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito
de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, el escrito fundamentando la apelación que
ejerció contra la decisión que dictó dicho juzgado superior el 9 de diciembre de 2015, mediante la cual declaró:
“…INADMISIBLE la acción de amparo constitucional interpuesta por el ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE,
contra la sentencia que dictó, el día diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

primera (sic) Instancia en lo Civil, Mercantil, [del] Tránsito y Bancario de esta misma Circunscripción Judicial,
con fundamento en el cardinal 4 del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales…”. En el referido escrito, indicó los siguientes argumentos:

“En fecha 09 de diciembre de 2015, el Juzgado Superior Cuarto, ya identificado, dictó


sentencia sobre la admisibilidad del amparo constitucional propuesto, resaltando de la misma
los siguientes extractos:
‘La acción de amparo constitucional está concebida como una protección de derechos y
garantías constitucionales stricto sensu; que dicha acción está reservada para restablecer
las situaciones que provengan de violaciones de derechos y garantías fundamentales, pero de
ninguna forma de las reglas legales establecidas.
Ahora bien, dispone el ordinal 4o del artículo 66 de la Ley Orgánica de Amparo sobre
Derechos y Garantías Constitucionales (sic).
(...)
En el caso bajo análisis aprecia este Tribunal, que la presente acción de amparo, fue
incoada por el quejoso, en virtud de la decisión que pronunció el Juzgado Noveno de
Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Banca rio de la Circunscripción Judicial
del Área Metropolitana de Caracas, de fecha diecisiete (17) de noviembre del presente año,
que declaró con lugar la cuestión previa contenida en el ordinal 5o el (sic) artículo 346 del
Código de Procedimiento Civil, que había sido opuesta por la representación judicial de la
parte demandada.
(...)
También se ha establecido, que para que la situación no se torne irreparable, la acción de
amparo debe ser propuesta por el quejoso, no dentro del plazo de seis (6) meses contados a
partir de la fecha en que se produjo la amenaza o la violación Constitucional que se ha
alegado, sino dentro de los cinco días de despacho siguientes que otorga el artículo 354 del
Código de Procedimiento Civil, para la subsanación del defecto u omisión declarado
existente mediante la resolución de dicha cuestión previa.
En efecto, así lo ha dicho la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en
Sentencia de fecha dos (2) de marzo de dos mil cinco (2005), donde estableció lo siguiente:
(...)
Examinado el caso de autos, aprecia este Tribunal, tal como se desprende al folio cincuenta
y siete (57) del expediente, que en la sentencia proferida el día diecisiete (17) de noviembre
de dos mil quince (2015), por el Juzgado Noveno de Primera Instancia en lo Civil,
Mercantil, Tránsito y Banca rio de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas, se señaló lo siguiente: 'Por cuanto la presente decisión, ha sido dictada en la
oportunidad legal prevista para ello no requiere la notificación de las partes'
Que ante tales circunstancias, la pretensión de tutela constitucional, debía ser propuesta por
el quejoso, en el término de cinco (5) días que prevé el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil, para la subsanación de los defectos u omisiones indicados en el aludido
fallo, contados desde la fecha que se dictó el fallo en mención, es decir, a partir del día
diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015), fecha esta con exclusión.
(...)
Por los razonamientos antes expuestos, este Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil
y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas,
administrando justicia y por autoridad de la ley, declara:

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

PRIMERO: INADMISIBLE la acción de amparo constitucional interpuesta por el1


ciudadano JUAN RAELL AUMAITRE (...)’
En este orden de ideas, decidió el Juzgado Superior Cuarto en cuestión declarar inadmisible el
amparo constitucional propuesto, por haber operado a su juicio un lapso especial de
consentimiento de la violación constitucional. Sin embargo, la sentencia recurrida se encuentra
viciada de nulidad por lo siguiente:
PRIMERO: No puede considerarse en ningún caso que haya inactividad del agraviado -
representación judicial del ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE- y, por tanto, que hayan
signos inequívocos de aceptación, por cuanto se ejercieron primeramente los recursos
ordinarios, antes de acceder a la vía de amparo constitucional.
En apoyo de esto, conviene traer a colación el indicado artículo 6 de la Ley de Amparo
Constitucional sobre Derechos y Garantías Constitucionales (sic) que dispone que:
‘Artículo 6: No se admitirá la acción de amparo:
(...)
4.- Cuando la acción u omisión, el acto o la resolución que violen el derecho a la garantía
constitucionales hayan sido consentidos expresa o tácitamente, por el agraviado, a menos
que se trate de violaciones que infrinjan el orden público o las costumbres. Se entenderá que
hay consentimiento expreso, cuando hubieren transcurrido los lapsos de prescripción
establecidos en leyes especiales o en su defecto seis (6) meses después de la violación o la
amenaza al derecho protegido.’
Establece la norma que siempre que hayan ocurrido actos del agraviado que permitan su
consentimiento o conformidad con la situación lesiva, no se admitirá la acción de amparo
constitucional. Estos actos presuponen en primer lugar una clara e inequívoca manifestación;
amén de que se entenderá tácitamente aceptada la situación vulneradora de institucionales, si
transcurrieren seis (6) meses desde que ocurriere ésta, sin el agraviado acuda a las vías
judiciales respectivas.
Siendo este el marco normativo, la sentencia dictada por esta Sala Constitucional en fecha 02
de marzo de 2005, citada en la recurrida, parte de los siguientes hechos controvertidos:
‘Que el 22 de enero de 2002, el Juzgado de Primera Instancia del Tránsito y Trabajo de la
Circunscripción Judicial del Estado Mérida, cuando resolvió las cuestiones previas declaró
unas sin lugar, otras como debidamente subsanadas y con lugar la cuestión previa del
ordinal 5° del artículo 346 del Código de Procedimiento Civil a de caución o fianza
necesaria para proceder al juicio), razón por la cual estableció, como caución o fianza,
sesenta millones de bolívares.
(…)
Que el 14 de febrero de 2002, el Juzgado de Primera Instancia del Tránsito y Trabajo de la
Circunscripción Judicial del Estado Mérida declaró la extinción del proceso, "...al
constatar el Tribunal la falta de prestación por parte de (su) representado de la caución o
fianza (...), la cual fue apelada oportunamente, siendo admitida dicha apelación en ambos
efectos en fecha 11 de marzo de 2002 (...), encontrándose actualmente en término para
presentar informes en Segunda tanda. (Resaltado de quien suscribe).
A estos hechos, esta Sala Constitucional aplicó el siguiente razonamiento:
‘Se observa, de lo que anteriormente fue reseñado, que el quejoso no incoó su demanda de
amparo contra el referido fallo antes que transcurriese el lapso para la subsanación ni
antes de que fuese declarada la extinción del proceso como consecuencia de la falta de
subsanación (ex art. 354 C.P.CJ (sic); con dicha inactividad procesal consintió tácitamente

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

en la declaratoria con lugar de la cuestión previa y el monto que se acordó como caución o
fianza’ (Resaltado de quien suscribe).
Nótese entonces que esta misma Sala Constitucional deja la posibilidad abierta de que antes de
que sea declarada la extinción del procedimiento, el agraviado por una sentencia que declare
procedente la cuestión previa referida a la falta de caución para proceder al juicio, puede
accionar por vía constitucional, amén de que dichas sentencias expresamente no tengan
apelación.
Esto mismo fue realizado en la presente causa, a tal punto que fue solicitado conjuntamente a
fin de que la situación no se tornase irreparable, que una vez admitido el amparo, el Tribunal se
pronunciare acerca de la pretensión cautelar consistente en la suspensión del juicio principal,
hasta tanto se decidiese la constitucionalidad de la sentencia del 17 de noviembre de 2015.
Por todo lo anterior, podrá corroborar esta Sala que en ningún momento hubieron signos
inequívocos de aceptación por parte de esta representación, toda vez que no hubo
manifestación de conformidad o aprobación de la sentencia dictada en fecha 17 de noviembre
2015; por el contrario, se intentó enervar sus efectos mediante un recurso de apelación
interpuesto en fecha 24 de noviembre de 2015, y una vez negado el recurso, se intentó enervar
sentencia en cuestión a través de la interposición del amparo constitucional.
Y es que esta solución es la que subyace en la misma sentencia citada en la recurrida, toda vez
que la Sala Constitucional nuevamente indica:
‘De tales razonamientos se concluye, en cuanto concierne al caso de autos, que sería
contraria a la naturaleza misma del amparo la admisión de su utilización después del
vencimiento del lapso que otorga la Ley Adjetiva Civil para la subsanación del defecto u
omisión declarado existente mediante la resolución de dicha cuestión previa, por cuanto era
completamente previsible por el demandante de amparo la consecuencia jurídica del
incumplimiento de su carga procesal, consecuencia, como se dijo, impuesta al sentenciador
de manera insoslayable, de allí que debió manifestar su inconformidad dentro de dicho
lapso, mediante el único mecanismo disponible (amparo constitucional con medida
cautelar) para evitar dicha consecuencia jurídica. De lo contrario, como sucedió en este
caso, consentiría tácitamente en la resolución que declaró con lugar la cuestión
previa.’(Resaltado de quien suscribe).
Es decir que, siempre que fuese declarada procedente la cuestión previa relacionada con la
falta caución para proceder al juicio, que dicha sentencia sea violatoria de algún derecho
constitucional, y siempre que no haya sido declarada la extinción del juicio principal; SERA
ADMISIBLE EN ESTOS CASOS LA ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL, toda vez
que según los dichos de la misma sentencia, NO SE ESTARÍA CONSINTIENDO
TÁCITAMENTE LOS EFECTOS DE LA SENTENCIA LESIVA.
Por ello, al no consentirse ni expresa ni tácitamente la sentencia violatoria de los derechos
constitucionales del ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, resultaba inaplicable la causal
de inadmisibilidad del artículo 6 de la Ley de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales, debiendo ser declarada CON LUGAR la presente apelación y REVOCARSE
en consecuencia la sentencia del a-quo. Así pido expresamente sea declarado.
SEGUNDO: El lapso de prescripción aplicable al presente caso, es de 6 MESES y no de 5 días
por ello la sentencia adolece del vicio de falsa aplicación de los artículos 6 de la Ley de
Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales (sic) y 354 del Código de Procedimiento
Civil.

Al respecto, el artículo 6 de la misma Ley de Amparo sobre Derechos y Garantías


Constitucionales (sic), permite distinguir dos situaciones claramente diferenciadas, a saber:
‘Artículo 6: No se admitirá la acción de amparo:
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

(...)
4.- Cuando la acción u omisión, el acto o la resolución que violen el derecho o la garantía
constitucionales hayan sido consentidos expresa o tácitamente, por el agraviado, a menos
que se trate de violaciones que infrinjan el orden público o las buenas costumbres. Se
entenderá que hay consentimiento expreso, cuando hubieren transcurrido los lapsos de
prescripción establecidos en leyes especiales o en su defecto seis (6) meses después de la
violación o la amenaza al derecho protegido.’
Nótese que, por una parte, la norma alude al consentimiento expreso, que es aquel manifestado
por el agraviado mediante una acción u omisión que directamente convalida la ocurrencia de
una situación lesiva de derechos constitucionales; mientras que por otra parte, la norma alude
al consentimiento tácito, que es aquel que se manifiesta por el transcurso de un margen de
tiempo, fijado bien en leyes especiales o en su defecto, por la misma Ley de Amparo (sic), esto
es, SEIS MESES.
Al respecto de dicha norma, el autor Rafael Chavero Gazdik, en la obra "El Nuevo Régimen del
Amparo Constitucional en Venezuela"(Editorial Sherwood, Caracas, 2001) enfatiza que:
‘Con relación al consentimiento tácito, es conveniente destacar una situación que
prácticamente ha pasado desapercibida en nuestra jurisprudencia de amparo constitucional,
nos referimos al penúltimo párrafo del ordinal 4o del artículo 6 de la Ley Orgánica de
Amparo (sic), el cual establece que 'se entenderá que hay consentimiento expreso, cuando
hubieren transcurrido los lapsos de prescripción establecidos en leyes especiales o en su
defecto seis (6) meses después de la violación o al amenaza al derecho protegido'. En efecto,
debe destacarse que el lapso de caducidad de seis (6) meses que se ha asumido como regla
se aplica únicamente cuando no existan otros lapsos en leyes especiales, de tal manera
que, si una determinada ley establece un plazo de impugnación mas reducido, ese será el
plazo que habrá de servir para determinar el consentimiento tácito.’ (Resaltado de quien
suscribe).
Una interpretación de la norma otorgada por la doctrina, indica que el lapso de seis meses es
un lapso supletorio, que solo transcurrirá a falta de un lapso especial, fijado por la materia
sobre la cual se pretenda hacer recaer el amparo. De esta forma, el autor coloca como ejemplo
que en materia contencioso-administrativa, cuando se intenta recurrir un acto administrativo,
se tiene un lapso especial fijado, por lo que quedaría excluido inicialmente el lapso de seis
meses para intentar la acción de amparo.
Ahora bien, el tenor interpretativo de la norma, y aún el que otorga la doctrina, permiten
sostener que el lapso especial alude evidentemente a un lapso para la interposición de una
acción o recurso, sin que tenga cabida consecuentemente que otros lapsos pasen a regir la
situación y que, mucho menos, otros lapsos puedan acortar o excluir, el margen supletorio de
seis meses.
En efecto, se tiene entonces que la sentencia dictada por el Juzgado Superior, aplicó un lapso
destinado a la subsanación de la cuestión previa referida a la falta de caución, como
condicionante para excluir los seis meses otorgados por la Ley de Amparo (sic); subvirtiendo
de esta a la naturaleza del mismo, a tal punto que convierte un margen de tiempo destinado a la
sanación del proceso en un brevísimo lapso para la interposición de un amparo constitucional,
lo cual no inviable en la práctica judicial venezolana, sino que además parte de un falsa
aplicación del artículo 354 del Código de Procedimiento Civil, al relacionar
DEBIDAMENTE, un lapso de subsanación con un lapso para la interposición de un amparo
constitucional, siendo que la norma primigenia (artículo 6 de la Ley de Amparo sobre Derechos
y Garantías Constitucionales (sic)) no contempla tal posibilidad.
La falsa aplicación fue definida por la antigua Sala de Casación Civil de la Corte Suprema de
Justicia en sentencia de fecha 06 de abril de 1994, como:
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

‘(...) una errónea relación entre los hechos y la norma, resultante de una defectuosa
calificación de aquéllos, o de cualquier otro error que conduzca al establecimiento de esa
falsa relación.’
De esta forma, el Juzgado a-quo efectuó una imperfecta relación entre el lapso de subsanación-
y reconocido en dicha sentencia como un lapso en el cual no cabe la interposición de recurso
ordinario alguno, por no estar previsto-, y el lapso especial para la interposición de un amparo
constitucional, el cual requiere para ser excluido, el establecimiento de un medio impugnativo
en una norma distinta a las contenidas en la Ley de Amparo sobre Derechos y Garantías
institucionales.
A fin de demostrar lo anterior, conviene tener en cuenta que el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil establece lo siguiente:
‘Artículo 354: Declaradas con lugar las cuestiones previas a que se refieren los ordinales 2o,
3o, 4o, 5o, y 6o del artículo 346, el proceso se suspende hasta que el demandante subsane
dichos defectos u omisiones como se indica en el artículo 350. en el término de cinco días,
a contar del pronunciamiento del Juez. Si el demandante no subsana debidamente los
defectos u omisiones en el plazo indicado, el proceso se extingue, produciéndose el efecto
señalado en el artículo 271 de este Código.’(Resaltado de quien suscribe).
Nótese entonces de la norma en cuestión, que EN NINGÚN MOMENTO se establece en la
misma una medio de impugnación especial que releve el lapso de seis meses establecido en la
Ley de Amparo (sic); en apoyo de esto último, inclusive, el Código adjetivo proscribe la
posibilidad de apelación de la sentencia que se pronuncia en favor de alguna de las cuestiones
previas allí aludidas. En efecto, el artículo 357 del mismo Código señala:
Artículo 357: La decisión del Juez sobre las defensas previas a que se refieren los
ordinales 2o. 3o. 4o, 5°, 6o. 7° y 8o del artículo 346. no tendrá apelación.
La decisión sobre las cuestiones a que se refieren los ordinales 9o, 10 y 11 del mismo
artículo, tendrá apelación libremente cuando ellas sean declaradas con lugar, y en un solo
efecto cuando sean declaradas sin lugar. En ambos casos, las costas se regularán como se
indica en el Título VI del Libro Primero de este Código.’ (Resaltado de quien suscribe).
Como salta a la vista, NO EXISTE UN MEDIO DE IMPUGNACIÓN por el cual pueda
considerarse como establecido un lapso que derogue o extinga el margen de seis meses que
establece la Ley de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales (sic). Con lo cual,
asumir que norma otorga al justiciable una garantía de revisión contra la sentencia de
cuestiones previas, es patentar por vía jurisprudencial una falsa aplicación de la norma, lo
cual no se agota en esto último, sino que además limita la tutela judicial efectiva del justiciable,
al gravarlo con una carga inexistente, que le priva de acceder al órgano jurisdiccional en
tiempo oportuno…”. (Negrita y resaltado del original).

V
DE LA COMPETENCIA
Debe previamente esta Sala determinar su competencia para conocer de la presente apelación, y a tal
efecto observa que mediante sentencia Nº 1 del 20 de enero de 2000 (caso: Emery Mata Millán), se estableció, a
la luz de los postulados de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el régimen competencial
para conocer de las acciones de amparo constitucional, y, en tal sentido, señaló que le correspondía a esta Sala
Constitucional conocer las apelaciones sobre las sentencias de los Tribunales Superiores (a excepción de los
competentes en materia contencioso administrativa), de las Cortes de lo Contencioso Administrativo, y de las
Cortes de Apelaciones en lo Penal cuando éstos hayan decidido una acción de amparo en primera instancia.
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

Asimismo, se observa que, conforme al contenido del artículo 25 numeral 19 de Ley Orgánica del
Tribunal Supremo de Justicia, esta Sala Constitucional es competente para conocer las apelaciones contra las
sentencias que recaigan en los procesos de amparo constitucional autónomo que sean dictadas por los Juzgados
Superiores de la República, salvo que se incoen contra la de los Juzgados Superiores en lo Contencioso
Administrativo.
Ahora bien, en el presente caso la sentencia apelada fue dictada el 9 de diciembre de 2015, por el
Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas, actuando en funciones constitucionales como Tribunal de primera instancia, y tomando
en cuenta la reiterada jurisprudencia sobre este aspecto, así como lo señalado en la vigente Ley Orgánica del
Tribunal Supremo de Justicia y el artículo 35 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales, queda evidenciado que esta Sala resulta competente para conocer de la presente apelación, y así
se declara.

VI
CONSIDERACIONES PARA DECIDIR
Precisado lo anterior, debe esta Sala constatar la tempestividad de la apelación interpuesta, a cuyo efecto
observa que la apelación ejercida por la parte accionante, fue realizada en fecha 10 de diciembre de 2015, contra
la decisión que fue dictada el 9 de diciembre de 2015, por el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del
Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas. Así las cosas y siguiendo el criterio
fijado en sentencia n.° 501 del 31 de mayo de 2000 (caso: “Seguros Los Andes”) y de conformidad con el artículo
35 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales, y en atención al cómputo
practicado por el referido Tribunal Superior que cursa al folio 400 del expediente, transcurrió un (1) día
calendario consecutivo para la oportunidad en que se interpuso el recurso de apelación; por lo que se estima que
tal recurso fue propuesto tempestivamente. Así se declara.
En igual sentido, la Sala observa que el escrito de fundamentación de la apelación resulta tempestivo,
conforme a lo dispuesto en la sentencia n.° 442, del 4 de abril de 2001 (Caso: “Estación de Servicios Los Pinos”).
Ahora bien, aprecia esta Sala que la acción de amparo constitucional fue ejercida contra la sentencia
dictada el 17 de noviembre de 2015, por el Juzgado Noveno de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, del
Tránsito y Bancario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, que declaró: “…CON
LUGAR la cuestión previa contenida en el ordinal 5to del artículo 346 del Código de Procedimiento Civil,
promovida por la representación judicial de la parte demandada. En consecuencia se SUSPENDE la presente
causa hasta que la parte actora presente fianza o caución por la cantidad de DIEZ MILLONES CIENTO VEINTE
MIL BOLÍVARES (Bs.10.120.000,00), que comprende el doble más las costas del precio por el cual la parte
actora pretende subrogarse en los derechos proindivisos del inmueble identificado en la demanda,
correspondiendo las costas procesales calculadas por este Tribunal prudencialmente en un treinta por ciento
(30%) del monto indicado, las cuales alcanzan la cantidad de UN MILLÓN TRESCIENTOS VEINTE MIL
BOLÍVARES (Bs. 1.320.000,00), en el término de cinco (05) días siguientes a la fecha de la presente decisión.
Esto en el entendido que si los demandantes no subsanan la omisión de fianza o caución en el término señalado
anteriormente, se extinguirá la causa, produciéndose el efecto señalado en el artículo 271 del Código de

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

Procedimiento Civil. Todo esto de conformidad con el artículo 354 del Código de Procedimiento Civil, en
concordancia con el artículo 350 ejusdem…”.
Por su parte la decisión recurrida en apelación dictada el 9 de diciembre de 2015, por el Juzgado
Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas, declaró inadmisible la acción de amparo interpuesta, contra el referido fallo dictado por el Juzgado
Noveno de Primera Instancia, con fundamento en lo previsto en el numeral 4 del artículo 6 de la Ley Orgánica de
Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales, al considerar que la inactividad del accionante en amparo,
al no proponer su pretensión constitucional en el término de subsanación que prevé el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil, constituyó un consentimiento tácito de la cuestión previa contenida en el ordinal 5º del
artículo 346 del mencionado código, que fue declarada con lugar.
Así las cosas, es pertinente señalar que la Sala conforme a las actas procesales, constató que el
accionante-apelante efectivamente ejerció la presente tutela constitucional una vez transcurridos el lapso de los
cinco (5) días siguientes para subsanar los defectos u omisiones –presentación de la fianza o caución exigida- en
consecuencia, ante esa inactividad la parte actora consintió de manera tácita la declaratoria con lugar de la
cuestión previa prevista en el numeral 5 del artículo 346 del Código de Procedimiento Civil y el monto que se
acordó como caución o fianza, tal como se determinó en el fallo n.° 96 del 2 de marzo de 2005, caso: “Gastón
Ariel Rossi”, ratificado el 23 de febrero de 2017, mediante fallo n.° 59, caso: “Mileny Parra Urdaneta”.
En consecuencia, esta Sala Constitucional, actuando como tribunal de alzada en el presente proceso de
amparo concluye que ante la verificación en autos del supuesto que contiene el numeral 4, del artículo 6 de la Ley
Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales y en virtud de que la inactividad de la parte
accionante al no proponer su pretensión constitucional en el término de subsanación que prevé el artículo 354 del
Código de Procedimiento Civil, constituyó un consentimiento tácito de la cuestión previa contenida en el ordinal
5 del artículo 346 eiusdem, se declara sin lugar la apelación ejercida por el abogado Dhaniel Mata, actuando en su
carácter de apoderado judicial del ciudadano Juan Ravell Aumaitre, y se confirma la decisión dictada el 9 de
diciembre de 2015, por el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción
Judicial del Área Metropolitana de Caracas, que declaró “…INADMISIBLE la acción de amparo constitucional
interpuesta por el ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE, contra la sentencia que dictó, el día diecisiete (17) de
noviembre de dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de primera (sic) Instancia en lo Civil, Mercantil,
Tránsito y Bancario de esta misma Circunscripción Judicial, con fundamento en el cardinal 4 del artículo 6 de la
Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales…”. Así se decide.

VII
DECISIÓN
Por las razones que anteceden, este Tribunal Supremo de Justicia en Sala Constitucional, administrando
justicia en nombre de la República por autoridad de la Ley, declara SIN LUGAR la apelación interpuesta por el
abogado Dhaniel Mata, actuando en su carácter de apoderado judicial del ciudadano JUAN RAVELL
AUMAITRE y, en consecuencia, CONFIRMA la sentencia dictada el 9 de diciembre de 2015 por el Juzgado
Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas, que declaró “…INADMISIBLE la acción de amparo constitucional interpuesta por el ciudadano JUAN
RAVELL AUMAITRE, contra la sentencia que dictó, el día diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015),
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

el Juzgado Noveno de primera (sic) Instancia en lo Civil, Mercantil, Tránsito y Bancario de esta misma
Circunscripción Judicial, con fundamento en el cardinal 4 del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre
Derechos y Garantías Constitucionales (…)”, en el marco de una demanda por retracto legal incoado por el
ciudadano Juan Ravell Aumaitre contra los ciudadanos Gladys Molina de Ravell y Gustavo Juan Ravell Molina, y
contra la sociedad mercantil Buster XV Enterprises de Venezuela, C.A.
Publíquese y regístrese. Remítase el expediente al tribunal de origen. Cúmplase lo ordenado.
Dada, firmada y sellada en el Salón de Sesiones de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia, en Caracas, a los 18 días del mes de Junio de dos mil diecinueve (2019). Años: 209º de la Independencia
y 160º de la Federación.

El Presidente,

JUAN JOSÉ MENDOZA JOVER

El Vicepresidente,

ARCADIO DELGADO ROSALES

Los Magistrados,

CARMEN ZULETA DE MERCHÁN

GLADYS MARÍA GUTIÉRREZ ALVARADO

(Ponente)

CALIXTO ORTEGA RÍOS


/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

LUIS FERNANDO DAMIANI BUSTILLOS

LOURDES BENICIA SUÁREZ ANDERSON

La Secretaria,

MÓNICA ANDREA RODRÍGUEZ FLORES

15-1441
GMGA

Quien suscribe Magistrada Carmen Zuleta de Merchán, respetuosamente salva su voto por disentir del
criterio sostenido por la mayoría sentenciadora que declaró: SIN LUGAR la apelación interpuesta por el abogado
Dhaniel Mata, actuando en su carácter de apoderado judicial del ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE y, en
consecuencia, CONFIRMA la sentencia dictada el 9 de diciembre de 2015 por el Juzgado Superior Cuarto en lo
Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, que declaró “…

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

INADMISIBLE la acción de amparo constitucional interpuesta por el ciudadano JUAN RAVELL AUMAITRE,
contra la sentencia que dictó, el día diecisiete (17) de noviembre de dos mil quince (2015), el Juzgado Noveno de
primera (sic) Instancia en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y Bancario de esta misma Circunscripción Judicial,
con fundamento en el cardinal 4 del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales (…)”, en el marco de una demanda por retracto legal incoado por el ciudadano Juan Ravell

Aumaitre contra los ciudadanos Gladys Molina de Ravell y Gustavo Juan Ravell Molina, y contra la sociedad
mercantil Buster XV Enterprises de Venezuela, C.A.
La mayoría sentenciadora consideró que:
…en el presente proceso de amparo concluye que ante la verificación en autos del supuesto que
contiene el numeral 4, del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales y en virtud de que la inactividad de la parte accionante al no proponer su
pretensión constitucional en el término de subsanación que prevé el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil, constituyó un consentimiento tácito de la cuestión previa contenida en el
ordinal 5 del artículo 346 eiusdem...

Se sostiene así en la sentencia adversada, el criterio consistente en que si el supuesto agraviado no ejerce
la acción de amparo dentro del lapso de cinco (5) días al que se refiere el artículo 354 del Código de
Procedimiento Civil, ello ha de entenderse como consentimiento y conformidad con la decisión que declaró con
lugar la cuestión previa opuesta.
Al respecto, la Magistrada que suscribe estima que, sostener el referido criterio implica una clara

vulneración del derecho a la defensa en general y al derecho a recurrir e interponer peticiones en particular,
vaciando de contenido incluso el derecho de acción, puesto que le impide el libre acceso a la justicia a quien
considera se le han vulnerado derechos constitucionales y se le ha infringido una situación jurídica.
Aceptar la conclusión que comparte la mayoría sentenciadora, significa desconocer el principio pro
actione que, por el contrario, ha sido rector en el desarrollo de la actividad jurisdiccional de esta Sala

Constitucional a la hora de interpretar el contenido y alcance de las normas constitucionales. En efecto, en la


sentencia se hace una distinción que no hizo el legislador en el artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre
Derechos y Garantías Constitucionales, toda vez que se crea un lapso de caducidad distinto al de seis (6) meses
que se encuentra establecido en la norma, y se crea uno nuevo que se limita a tan solo cinco (5) días, con lo cual
se configura una discriminación que atenta contra el derecho a la igualdad de los justiciables.

La Magistrada disidente considera más acertado y más cónsono con la garantía de la seguridad jurídica,
que el lapso de los seis (6) meses para interponer la acción de amparo constitucional sea el mismo tanto en los
casos de consentimiento expreso, como de consentimiento tácito. Lo contrario se presta a equívocos y puede
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

producir irregularidades dentro del proceso de amparo en particular y en el proceso civil en general, al punto que
podría crearse una incertidumbre sobre lo dispuesto en el artículo 352 del Código de Procedimiento Civil, en
virtud que allí se encuentra establecido que en caso de no haber subsanación de la cuestión previa opuesta, se
entenderá abierta una articulación probatoria de ocho días -de despacho-, para promover y evacuar pruebas,
debiendo el juez decidir al décimo día siguiente a tal articulación, por lo que se expondría innecesariamente al

demandante perdidoso en tal incidencia a elegir entre esperar el dictado de tal decisión a través de la cual puede
restablecer su situación jurídica, o interponer la acción de amparo en el lapso perentorio de cinco (5) días, para
evitar una declaratoria de inadmisibilidad como la declarada por la mayoría sentenciadora en el presente caso.
A manera de ilustración, se permite la Magistrada que suscribe el presente voto salvado, exponer algunas
de las inconsistencias que se perciben en la sentencia adversada, y así se señalan las siguientes:

Se indica que se configura el supuesto de consentimiento tácito, con respecto a la sentencia en la que se
declaró con lugar la cuestión previa contenida en el numeral 5 del artículo 346 del código adjetivo civil, y a
menos de un mes de su dictado por el Juzgado Superior Cuarto en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas (17-11-15), se interpuso la acción de amparo
constitucional (2-12-15), a través de la cual se señala, entre otras cosas, que la caución exigida era

inconstitucional “por haber sido estimada contrariamente a la esencia de la misma caución”, por ser exagerada y
por obviar que poseía bienes suficientes en el país para responder por las resultas del juicio, es decir, el accionante
arguyó razones de ilegalidad y de inconstitucionalidad con respecto a la cuestión previa declarada con lugar, por
lo que no parece lógico concluir que por parte del accionante existan signos inequívocos de aceptación de la
sentencia accionada.

La mayoría sentenciadora confirma el fallo apelado y deja incólume una incertidumbre producto de una
imprecisión en el lapso para ejercer la acción de amparo en casos como el de autos, ya que además de reducir un
lapso más garantista como el de seis (6) meses, a tan solo cinco (5) días, castiga al quejoso que no intente el
amparo antes “que transcurriese el lapso para la subsanación ni antes de que fuese declarada la extinción del
proceso como consecuencia de la falta de subsanación”, pero deja la duda en cuanto a qué sucede si la acción es

intentada luego de los cinco (5) días para la subsanación, pero antes de que se declare la extinción del proceso de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 354 del Código de Procedimiento Civil, incertidumbre que, por cierto,
es advertida por el accionante en el escrito contentivo de su recurso de apelación ante esta Sala, al afirmar que se
encuentra “…la posibilidad abierta de que antes de que sea declarada la extinción del procedimiento, el
/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

agraviado por una sentencia que declare procedente la cuestión previa referida a la falta de caución para
acceder al juicio, puede accionar por vía constitucional…”.
Estima en consecuencia quien suscribe, que en el presente caso no se configuraba el supuesto de ley
establecido en el numeral 4 del artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales, consistente en el consentimiento tácito de la violación denunciada, motivo por el cual debió

haberse ordenado el trámite del procedimiento de amparo, u ordenarse al a quo constitucional emitir
pronunciamiento sobre las demás causales de inadmisibilidad con exclusión a la contenida en el numeral 4 del
artículo 6 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales.
Queda así expuesto el criterio de la Magistrada que rinde este voto salvado.
El Presidente,

JUAN JOSÉ MENDOZA JOVER

Vicepresidente,

ARCADIO DE JESÚS DELGADO ROSALES

Los Magistrados,

CARMEN ZULETA DE MERCHÁN


Disidente

GLADYS M. GUTIÉRREZ ALVARADO

Ponente

CALIXTO ORTEGA RÍOS

/
29/10/2019 historico.tsj.gob.ve/decisiones/scon/junio/305591-0147-18619-2019-15-1441.HTML

LUIS FERNANDO DAMIANI BUSTILLOS

LOURDES BENICIA SUÁREZ ANDERSON

La Secretaria,

MÓNICA ANDREA RODRÍGUEZ FLORES

15-1441
CZdM

También podría gustarte