Es importante tener presente que, en un entorno público, las
medidas siguientes pueden ser más importantes que el uso de un TAPABOCAS para evitar la transmisión de la gripe. Personas en buen estado de salud:
Manténgase a no menos de un metro de toda persona
con síntomas gripales, y: absténgase de tocarse la boca y la nariz; limpie sus manos frecuentemente, lavándolas con jabón y agua o frotándolas con un pañuelito empapado en alcohol, (3) especialmente si van a estar en contacto con la boca o la nariz, o con superficies posiblemente contaminadas; permanezca el menor tiempo posible cerca de personas que pudieran estar enfermas; permanezca el menor tiempo posible en lugares muy concurridos; mejore la renovación del aire en el hogar, abriendo las ventanas todo cuanto sea posible.
Personas con síntomas gripales:
Permanezca en el hogar si no se encuentra bien, y
aténgase a las recomendaciones de salud pública impartidas por sus autoridades; manténgase a la mayor distancia posible (como mínimo, un metro) de las personas que no presenten síntomas; al toser o estornudar, cubra su boca y nariz con algún objeto de tela u otro material apropiado, para retener las secreciones respiratorias. Una vez utilizado, deseche inmediatamente el material o lávelo. Lávese las manos inmediatamente después de entrar en contacto con secreciones respiratorias; renueve el aire del recinto donde se encuentre abriendo las ventanas todo cuanto sea posible.
Si se utilizan tapabocas, es esencial usarlas y desecharlas
adecuadamente para evitar que sean ineficaces y que su uso incorrecto agrave el riesgo de contagio.
Asegúrese de que cubre su boca y nariz, y anúdela
firmemente para reducir al mínimo la separación entre el tapabocas y la cara; mientras esté utilizándolo, evite tocarlo: siempre que toque un tapabocas usado, limpie sus manos lavándolas con agua y jabón o frotándolas con un pañuelito empapado en alcohol;en cuanto el tapabocas esté húmedo, cambielo por otro limpio y seco.
Intentar llevar una vida sana: si llevas unos hábitos saludables
y una dieta equilibrada puedes evitar que bajen tus defensas y mantener fuerte tu sistema inmune.
Protégete bien de los contrastes de temperatura: cuando
entres y salgas a la calle en épocas de frío y calefacciones abrígate debidamente en cada caso.
Vacunarse: Es la mejor forma de prevenir la gripe.
Estrategias en la Alimentación para Evitar un Resfriado o
Gripe La primera cosa que querrá hacer cuando sienta la amenaza de resfriado o gripe es evitar TODOS los azucares, endulzantes artificiales y alimentos procesados. El azúcar es particularmente dañino para su sistema inmunológico- que necesita estar reforzado y no debilitado, con el fin de combatir una infección emergente. Esto incluye el jugo de frutas y todo tipo de granos (ya que descomponen el azúcar en su cuerpo). Idealmente, debe encargarse de sus problemas de nutrición, sueño, ejercicio y estrés al momento de sentir que se está enfermando. Esto es cuando aumenta las estrategias para que su sistema inmunológico sea más efectivo.
Asegúrese de tomar mucha agua purificada. El agua es esencial
para el funcionamiento óptimo de cualquier sistema en su cuerpo y ayudará con el escurrimiento nasal y secreciones. Usted debería tomar el agua suficiente para que de ese modo su orina sea de color amarillo claro.
Y en cuanto al caldo de pollo, sí, de hecho ayuda a reducir los
síntomas del resfriado. El pollo contiene amino ácidos naturales llamados cisteínas, que pueden ayudar a disminuir el moco en sus pulmones y a hacerlo menos pegajoso para que pueda ser expulsado fácilmente. Sin embargo, las sopas enlatadas, procesadas no funcionan como la versión hecha en casa. Para obtener mejores resultados, prepare su caldo fresco usted mismo (o pídale a un amigo o familia que lo haga) y hágalo caliente y picoso con mucho chile. Las especias acelerarán la liberación de fluidos acuosos en su boca, garganta y pulmones, lo que lo ayudará diluir el moco respiratorio para que le sea más fácil toser y expulsar.
La vitamina C: Un antioxidante muy potente, utilizado en su
forma natural como la acerola, que contiene micronutrientes relacionados. Puede tomar varios gramos cada hora hasta que se mejore a menos que comience a presentar diarrea.
Aceite de orégano: Mientras mayor sea la concentración de
carvacol, más efectivo será. El carvacol es el antimicrobiano más potente que ayuda la respuesta inmunológica.
Propóleo: Una resina de abeja y uno de los compuestos más
antimicrobianos de amplio espectro del mundo, el propóleo también es la fuente más rica de ácido cafeico y apigenina, dos compuestos que ayudan en la respuesta inmunológica.
Un té hecho de la combinación de flor de saúco, milenrama,
eupatorio, tilo, menta y jengibre, bébalo caliente y a menudo combate el resfriado o gripe. Lo hará sudar, que es útil para erradicar el virus de su sistema.
Extracto de hoja de olivo: Las culturas antiguas egipcias y
mediterráneas le daban una variedad de usos para la promoción de la salud y es ampliamente conocida como un producto natural, no tóxico que construye el sistema inmunológico.
Al Primer Signo de Síntomas del Resfriado: el Zinc al Rescate
Cuando se toma zinc durante los primeros síntomas, el zinc podía
reducir el tiempo que dura el resfriado a aproximadamente 24 horas. La revisión incluyó 15 pruebas controladas al azar, que consistían en 1,360 participantes de todas las edades. Se encontró que el Zinc reduce de gran manera la severidad de los síntomas.
FACTORES DE ESTILO DE VIDA QUE PUEDEN DEBILITAR AL
SISTEMA INMUNOLÓGICO, SOLOS O COMBINADOS, INCLUYEN: Comer mucha azúcar, en particular la fructosa, y muchos granos. La persona promedio consume cerca de 75 gramos de fructosa al día y cuando se consume fructosa a ese nivel puede ser devastador para el sistema inmunológico.
Una de las formas en las que hace esto es al desequilibrar la
flora intestinal. El azúcar es el “fertilizante” de las bacterias patógenas, levaduras y fungi (tipo de hongo) que pueden hacer que su sistema inmunológico sea atacado por virus respiratorios. La mayoría de las personas no se dan cuenta que el 80 por ciento de su sistema inmunológico en realidad recae en el tracto gastrointestinal. Es por eso que controlar su consumo de azúcar es CRUCIAL para optimizar su sistema inmunológico.
Sería inteligente limitar el consumo total de fructosa a menos de
25 gramos al día si tiene buena salud, o menos de 15 gramos al día si tiene presión arterial alta, diabetes, enfermedades del corazón o es resistente a la insulina.
Deficiencia de vitamina D, como resultado de la falta de
exposición al sol: La vitamina D es un sorprendente y efectivo agente antibacterial
No descansar lo suficiente
No hacer el suficiente ejercicio
Utilizar estrategias que no sirven para hacerle frente a los