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¿Qué son?
Cuando hablamos de aguas residuales, estamos haciendo referencia a todo tipo de agua que
haya sido afectada de forma negativa por la acción del ser humano.
En este sentido, las aguas residuales son todas aquellas aguas que han sido usadas en los
entornos domésticos y urbanos, en las industrias. Es agua con una gran cantidad de elementos
contaminantes, ya sean sólidos o disueltos en la misma.
Respecto a la contaminación que pueden portar las aguas residuales hay que decir que se trata
de una variedad casi tan amplia como las acciones que el ser humano puede realizar sobre ellas.
Se pueden encontrar productos químicos, productos sólidos, metales pesados y también restos
orgánicos.
Este tipo de aguas residuales son generadas por la escorrentía superficial de las zonas agrícolas,
la cría de animales y el pastoreo de los mismos. Este tipo de vertimientos presenta gran cantidad
de contaminantes, como sólidos en suspensión, generados por las excretas de los animales,
químicos limpiadores con presencia altos contenidos de sustancias contaminantes, usados para
desinfectar los corrales de los animales, pesticidas usados por veterinarios y criadores de
animales, plaguicidas y fertilizantes, los cuales son empleados por los agricultores en las
diferentes plantaciones para cuidar y mejorar los diferentes cultivos
Las aguas residuales de origen industrial son aquellas aguas que presentan residuos de tipo
orgánico, inorgánico o materiales en suspensión, que son empleados en actividades de tipo
industrial como en procesos de producción. El caudal y la composición de este tipo de aguas son
muy diferentes y presentan mayor complejidad que el de aguas residuales de otro tipo
Este tipo de aguas son las que más contacto directo tienen con los seres humanos, se originan a
partir de excretas, residuos domésticos y comerciales, arrastres de lluvia e infiltraciones. Los
principales contaminantes que aparecen en este tipo de vertimientos son: objetos de gran
tamaño en estado de suspensión en el afluente, arenas, grasas, aceites, contaminantes
emergentes o prioritarios, coliformes fecales, entre otros
Acción tóxica: Que muchos de los compuestos minerales y orgánicos que contienen esas
aguas residuales provoca sobre la flora y la fauna natural de los cuerpos receptores y
sobre los consumidores que utilizan estas aguas.
Polución térmica: Generada por ciertos residuos líquidos industriales que poseen altas
temperaturas.
Estas aguas residuales, antes de volver a la naturaleza, deben ser depuradas. Para ello se
conducen a las plantas o estaciones depuradoras, donde se realiza el tratamiento más adecuado
para devolver el agua a la naturaleza en las mejores condiciones posibles.
Sedimentación: proceso por el que las partículas caen al fondo gracias a la acción de la
gravedad. Pueden eliminarse hasta un 40% de los sólidos que contienen las aguas
Flotación: consiste en la retirada de espumas, grasas y aceites ya que debido a la baja
densidad que tienen se sitúan en la capa superficial del agua. También pueden
eliminarse partículas de baja densidad, para lo que se inyectan burbujas de aire
facilitando su ascensión.
Neutralización: consiste en la normalización del pH, es decir, ajustarlo a un valor en el
que es típicamente el valor del agua normal.
Lodos activos: se trata de un proceso aerobio que consiste en añadir flóculos o grumos
de materia orgánica con microorganismos al agua residual e infiltrar constantemente
oxígeno para que se produzcan las reacciones.
Filtros verdes: se trata de cultivos que se riegan con aguas residuales ya que estos
tienen la capacidad de absorber sus compuestos.
El tratamiento terciario consiste sobre todo en la eliminación de los agentes patógenos, sobre
todo bacterias fecales y de los nutrientes. Este tratamiento es opcional y normalmente se hace
cuando el agua se va a reutilizar
Radiación ultravioleta: La radiación ultravioleta impide la reproducción de los
microorganismos e impide que desarrollen su capacidad de infección. Es capaz de
eliminar en torno al 99% de los microorganismos.
Intercambio iónico: Técnica utilizada para retirar sales en bajas concentraciones y para
ello se emplean unas resinas que son capaces de retener iones temporalmente.