Trabajo práctico “El

cuidado del otro”

Institución: ICES

Alumna: Agustina M. Moyano

PROFESORA: VERONICA LASCAR 2º letras Año lectivo: 2018
En base a lo que leí en con el libro del cuidado del otro una de las
preguntas que me surgieron en cuanto lo que habla de la herencia es que,
si la violencia también es hereditaria, ya que si nos ponemos a pensar la
violencia está presente en nuestras aulas desde el comienzo, una de las
cosas que siempre vemos es que los niños son agresivos entre si y esta
violencia fue en aumento desde sus comienzos es decir hoy en día la
violencia también va por otros medio como son las redes sociales, no es
raro escucha que un chico que sufre violencia en su escuela comente que
ese mismo comportamiento de sus compañeros sigue en las redes sociales
que cabe destacar que para un adolescente es muy importante hoy en día.
En alguna de sus páginas el libro habla de la herencia educativa, yo, creo
que dentro de lo que una institución educativa pueda heredar ya sea una
forma de comportamiento, normas, formas de afrontar situaciones,
también puede haber otro tipo de herencias no tan agradables ni gustosas
para sus alumnos, es decir la herencia va más allá de un uniforme, una
estructura edilicia, o solo una forma de comportamiento por parte de sus
directivos. Los alumnos puede que también hereden ciertas actitudes,
aunque ellos no lo noten o tomen en cuenta.
La pregunta que me hice a mí misma es “¿la violencia es una herencia
educativa en los alumnos?”
si nos ponemos a pensar la violencia escolar existe desde siempre es decir
apodos, malos tratos, miradas despectivas, insultos, golpes o solo ignorar
bastan para que una persona se sienta disminuida. Pero ¿es esto
hereditario? Es decir ¿es inconsciente esta violencia o solo es una actitud
adquirida a lo largo de la vida?
Desde mi punto de vista esta violencia se ve aumentada en el secundario,
pero no se puede decir que este comportamiento no empieza desde antes
es decir empieza incluso desde el jardín de infantes. Para mí esta violencia
se genera por varias razones, una es por quien tiene el poder, otra es por
las diferencias que pueda haber entre cada chico, y la otra que pude
encontrar es por la misma masificación que se busca entre los chicos.
Para empezar a desarrollar esta idea voy a comenzar por el poder.
Desde que somos chiquitos existe este “deseo” por lo que el otro tiene, es
decir no es raro ver que un niño quiere el juguete que el otro niño tiene y
este va a hacer todo lo necesario para tenerlo, va a hacer berrinches, se va
a enojar, va a llorar, e incluso en algunos casos va a recurrir a la violencia
para quitárselo, esto es empujar o morder al otro niño o cualquier otro
tipo de forma de tomar lo que quiere.
En el primario esto se ve por lo general es quien es mejor en el colegio o
quien tiene más fuerza, en este sentido quien sea hipotéticamente mejor
según su concepto será quien tenga el poder.
Quien tenga más poder será quien tenga la oportunidad de manejar a un
grupo y de aceptar o no a otro.
En caso del secundario esto se hace más grande el poder viene de la mano
de la popularidad y la popularidad viene de la mano con la moda, el
cuerpo, las redes sociales, etc.
Y es en esta etapa de la adolescencia en que estas cosas más duelen
porque están en una etapa aun formando su carácter.
Ahora voy a pasa a las diferencias a que voy con esto, cuando un chico
presenta alguna característica que lo diferencia de los demás esto tiende a
producir roces. Las diferencias son un abanico enorme van desde la forma
de vestir, de pensar, de actuar, de sentir, si es más o menos estudioso, su
aspecto físico o su elección sexual.
Si bien esto se puedo tomar desde el primario, desde mi punto de vista
esto se ve más en el secundario donde todo está mucho más sensible.
Que es esto de la Masificación desde mi punto de vista esto se ve muy
presente desde la conciencia del yo tengo y vos no es decir esto parte
muchas veces desde la serie de moda o lo que esté marcando la tendencia
ya sea una forma de vestir, como de peinar, de actuar, de la música o de
cualquier otro tipo de acción que se ponga de moda en el momento.
Queda claro que todo esto está irremediablemente relacionado.
Volvamos a la violencia para poder hablar de esto tenemos que tener en
claro su concepto, es decir, ¿Qué es la violencia?
Según el diccionario significa esto:
La violencia es el tipo de interacción entre sujetos que se manifiesta en
aquellas conductas o situaciones que, de forma deliberada, aprendida o
imitada, provocan o amenazan con hacer daño, mal o sometimiento grave
(físico, sexual, verbal o psicológico) a un individuo o a una colectividad,
afectando a las personas violentadas de tal manera que sus
potencialidades presentes o futuras se vean afectadas.
Ahora hoy en día este comportamiento está tan arraigado en nuestros
adolescentes que se ven en las aulas.
Cuando realicé mis prácticas había un chico que sufría violencia por su
posición sexual, por lo cual este chico era motivo de burlas por parte de
sus compañeros, al menos esto fue lo que me contó su profesora, aunque
yo no presencie ningún acto violento hacia este chico.
Pero si vamos a la ley de identidad de género Nº 26.743 esta nos dice en
su primer artículo inciso a: el reconocimiento de su identidad de género.
Es decir que deben ser respetadas sus elecciones.
En el inciso b_ dice que “al libre desarrollo de su persona conforme a su
identidad de género”
¿De qué hablamos cuando decimos ser tratado de acuerdo al desarrollo de
su persona conforme a su identidad de género? Hablamos de respeto de
ser tratado con respeto, de tratar con respeto a la otra persona.
En el artículo 12 dice muy claramente que debe haber un trato digno, y
deberá respetarse la identidad de género adoptada por las personas, en
especial en niños, niñas, y adolescentes, que utilicen nombre de pila
distinto al consignado en su documento de identidad.
Es un requerimiento que el nombre de pila adoptado deberá ser utilizado
para la citación, registro, legajo, llamado y cualquier otra gestión.
Es decir, la mayoría de los alumnos no tienen conciencia de esto que todo
el mundo debe respetar esta ley que ampara el respeto hacia las personas
que deciden cambiar su género.
Otro tipo de violencia que hemos visto es la que se ejerce sobre las
mujeres y no en todas las instituciones tienen un eje de mecanismo para
evitar o reprender a quienes tienen actos de violencia.
Un ejemplo claro es cuando los chicos pasan caminando y meten la mano
bajo la pollera cuando una chica va caminando o tocan el trasero, muchas
de estas acciones no son reprendidas o se hace algo para evitarlo en las
instituciones.
Si nos ponemos a ver la ley 26.485 dice que la violencia es una violación a
los derechos humanos.
Dice por ejemplo que es una responsabilidad no omitir los deberes de
prevención y sanción de las distintas formas que asume la violencia, por
ejemplo, la institución en su mayoría hace caso omiso de este tipo de
acoso que existe en las aulas.
También esta ley explicita que la “violencia contra la mujer es una
violación a los derechos humanos y las libertades fundamentales y limita
total o parcialmente a la mujer el reconocimiento, goce y ejercicio de tales
derechos y libertades”
También dice “que es una ofensa a la dignidad humana”.
Y dice que “la eliminación de la violencia contra la mujer es condición
indispensable para su desarrollo individual y social y su plena e igualitaria
participación en todas las esferas de la vida”.
Si unimos todos estos elementos podemos llegar a la conclusión de que las
instituciones educativas no solo infringen la ley, sino que también
fomentan la violencia no los solo en el momento, sino que también la
convierten en un elemento a heredar, ya que queda como forma de actuar
frente a estas violaciones, es decir un acto nulo frente a estos actos.
Recordemos que la violencia puede ser física, psicológica, sexual,
económica y patrimonial y simbólica, y que las modalidades pueden ser
doméstica, institucional, laboral, contra la libertad reproductiva,
obstetricia y mediática (art.6).
Ya que la violencia abarca todos estos puntos es clave hablar con los
adolescentes sobre este tema, ya sea para que las mujeres puedan
identificar los tipos de violencias y si están siendo víctimas como así
también para enseñarles a los hombres que cosas no corresponde hacer y
que estos terminen siento victimarios.
Podemos llegar al punto a que la violencia termina siendo herencia ya que
no se presta atención a este foco tan importarte que hace que los alumnos
no puedan transitar su estancia en las escuelas de buen modo, y gran
parte de la culpa la tienen las instituciones al no poner al tanto a los
alumnos que están causando un gran dolor a los demás con su
comportamiento. Que las diferencias no son malas, sino que nos hacen
crecer, que la violencia por poder no es buena y que las personas deben
ser respetadas sin importar su sexo.
Todas estas cosas podrían disminuirse si empezáramos a hablarles a los
chicos desde pequeños por medio de juegos, charlar y demás
articulaciones pedagógicas teniendo en cuenta la edad de los niños, de
que las diferencias no son malas, sino que nos ayudan a crecer y a ser
mejores, y que cada uno es valioso por quién es y que no es malo ser
diferente.

Bibliografía
El cuidado del otro – Carlos Skliar.
Ley de identidad de género.
Ley 26485.
Carpeta de psicología educativa.
Aportes de blogs en internet.