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Planes y Programa de Seguridad

El Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo o Programa de Seguridad e


Higiene Industrial, es el conjunto de objetivos, acciones y metodologías
establecidos para identificar, prevenir y controlar aquellos procesos
peligrosos presentes en el ambiente de trabajo y minimizar el riesgo de
ocurrencia de incidentes, accidentes de trabajo y enfermedades
ocupacionales.

El Proyecto de Política y Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo


deberá ser elaborado por el Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo, El
Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo debe contener:

 Descripción del proceso de trabajo (producción o servicios) e identificación


de los procesos peligrosos existentes.
 Política de Seguridad y Salud en el trabajo
 Planes de trabajo para abordar los diferentes riesgos y procesos peligrosos.

Descripción del proceso de trabajo

Debe describir de forma precisa las etapas del proceso productivo, la forma
de organización del trabajo, así como los objetos y los medios involucrados
en cada una, entre otros aspectos: maquinarias, equipos, materia prima,
sustancias utilizadas, subproductos y sobrantes, desechos generados,
disposición final de los mismos, impacto ambiental, organización y división
técnica del trabajo, organigrama, diagrama de flujo, descripción de las
etapas del proceso, división de las áreas y departamentos, puestos de
trabajo existentes, herramientas utilizadas, tipo de actividad, empresas
contratistas y la relación entre ellos.
Igualmente, debe identificar los procesos peligrosos detectando las
condiciones asociadas al objeto de trabajo, medio de trabajo y a la
organización y división del trabajo, que pueden causar daño al trabajador
durante el desarrollo de las actividades laborales (proceso de trabajo) por
etapas, considerando: procesos peligrosos, condiciones inseguras, número
de trabajadores expuestos a los procesos peligroso y daños que pueda
generar a la salud de los mismos.

Política de Seguridad y Salud en el trabajo

La Política de Seguridad y Salud en el Trabajo es un documento escrito que


establece el compromiso del empleador con la seguridad y salud de sus
trabajadores y los lineamientos generales en materia de prevención.
Planes de trabajo para abordar los diferentes riesgos y procesos
peligrosos

Debe diseñar planes de trabajo que respondan a los procesos peligrosos


identificados, según lo establecido en los puntos anteriores. En cada uno de
los planes defina claramente los siguientes aspectos: Objetivos, metas y
alcance; frecuencia de ejecución de las actividades; personal involucrado y
responsabilidades en cada una de las actividades; procedimiento de
ejecución de actividades previstas en el plan, especificando las acciones a
ser desarrolladas desde los puntos de vista preventivo, correctivo,
predictivo y divulgativo; y formularios e instrumentos para la ejecución de
las actividades.

Los planes de trabajo para abordar los diferentes riesgos y procesos


peligrosos deben incluir, al menos, los siguientes (siga los enlaces para
acceder a los contenidos de cada plan):

I. Información y capacitación permanente.

El Plan de Información y Capacitación Permanente tiene como objetivo


garantizar que todo trabajador reciba la formación suficiente y adecuada en
materia preventiva, tanto inicialmente en el momento de su contratación o
en un cambio de puesto de trabajo, como de forma continua a lo largo de
su vida profesional en la empresa en función de las necesidades
determinadas.

La dirección de la empresa es responsable de asegurarse de que todos los


trabajadores poseen la formación adecuada a sus funciones. Para ello se
debe establecer un plan formativo de prevención de riesgos laborales que
abarque a toda la organización, proporcionando los medios y tiempo
necesarios para su consecución.

La formación no debe utilizarse para compensar desajustes en otros


aspectos del sistema de seguridad, tales como equipos deficientemente
diseñados o instalados, inadecuadamente protegidos, o bien puestos de
trabajo y procesos que no han sido diseñados con principios de seguridad y
ergonomía. Sin embargo, se puede utilizar como un medio temporal de
control, estando pendientes de mejorar en tales aspectos.

La formación y capacitación del trabajador, tal como establece la


legislación, debe impartirse dentro de la jornada laboral o, en su defecto, en
otras horas pero con la compensación retributiva necesaria, ya que en
realidad debería formar parte de la propia actividad laboral.

El adiestramiento se deberá establecer en base a las descripciones de


trabajo, análisis de trabajo (incluyendo procedimientos de trabajo seguro),
inspecciones de seguridad y otros aspectos, tomando en cuenta: la
educación e información preventiva, la inducción a nuevos ingresos y
cambios o modificación de tareas/puestos de trabajo, y la educación
periódica de las trabajadoras y los trabajadores.

Educación e información preventiva

El programa de educación e información preventiva, en materia de


seguridad y salud en el trabajo con su respectivo cronograma de ejecución,
debe establecer al menos 16 horas trimestrales de educación e información
por cada trabajador. Dicho programa debe responder a las necesidades
detectadas y debe establecer la fecha, lugar, temática, facilitador, espacio
físico y grupos a formar, dándole prioridad a los trabajadores que estén
expuestos a mayor riesgo en el centro de trabajo.

Inducción a nuevos ingresos y cambios o modificación de


tareas/puestos de trabajo

Todo trabajador que se incorpore


por primera vez a la empresa,
independientemente de su
cargo, debe recibir una
formación de acogida, en la que
se deberían recoger temas de
carácter general, tales como:

 Política de la empresa en
prevención de riesgos laborales.
 Manual General de Prevención
con sus procedimientos
generales de actuación.
 Normas generales de prevención
de la empresa.
 Plan de emergencia.

Esta formación debe impartirse


antes de incorporarse o dentro de los primeros días del inicio del trabajo. El
tiempo requerido, así como los medios didácticos de apoyo con los que se
contará, se definirán con antelación para que la formación sea eficaz.
Debería registrarse que tal formación ha sido impartida.

Una vez finalizada la formación inicial, debe impartirse información al


trabajador para que ejecute de forma segura las actividades y en especial
las operaciones críticas propias de su puesto de trabajo.

En este sentido, elabore un Plan de inducción a nuevos ingresos y cambios


o modificación de tareas o puestos de trabajo que incluya, además de la
formación preventiva inicial, los siguientes aspectos:

 Información verbal, escrita y práctica, con recorridos en el centro de trabajo


sobre los procesos peligrosos existentes y los asociados a la actividad.
 Información verbal y por escrito de las sustancias, materiales y desechos
peligrosos existentes, con la aplicación de las regulaciones legales, las
respectivas hojas de datos de seguridad en español que deben estar
presentes en el lugar de trabajo, así como los medios y medidas para
prevenir cualquier daño a la salud.
 Información verbal y por escrito de los principios de la prevención de
riesgos existentes en el lugar de trabajo, procedimiento seguro de trabajo
acorde a las actividades a desarrollar.

Indique momento en que debe impartirse cada actividad formativa y de


capacitación, señalando además el contenido, duración, medios didácticos,
responsables y formatos para el registro de dichas actividades formativas.

Educación periódica de las trabajadoras y los trabajadores

Diseñe un plan de educación periódica que parta de la detección de


necesidades de educación de los trabajadores, en cuanto a la prevención de
accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales, en función de los
procesos peligrosos asociados a la actividad.

Debe incluir información teórica y práctica de los procedimientos inherentes


a su actividad, considerando los procesos peligrosos asociados al proceso de
trabajo; las condiciones inseguras resultantes de la acción de agentes de
riesgos físicos, químicos, y biológicos y condiciones disergonómicas o
psicosociales que puedan causar daños a la salud, reforzando los principios
de la prevención.

Al igual que en los puntos anteriores, indique el contenido del plan de


formación y capacitación permanente, el momento y la duración del
mismo, responsables y formatos para el registro respectivo.

II. Procesos de inspección.

En los sitios de trabajo se deben realizar inspecciones periódicas para


identificar condiciones inseguras e insalubres y establecer los
controles pertinentes al caso y las mejoras inmediatas.

Es importante definir los elementos a revisar y su periodicidad, ya


sean áreas determinadas de trabajo o equipos específicos. Se deberá
definir qué tipos de revisiones deben ser realizadas por las propias
unidades funcionales y qué cuestiones han de ser inspeccionadas por
personal especializado, incluso ajeno a la empresa, tal es el caso de
los aparatos a presión que han de ser sometidos a pruebas periódicas
por personal acreditado.

Para la planificación de los procesos de inspección se recomienda


seguir el siguiente procedimiento:

1. Planificar la inspección/revisión: Defina el alcance del proceso de


inspección, la frecuencia y la ruta de la revisión. La utilización de
mapas de la empresa y listados de equipos ayudan a establecer el
recorrido de la inspección y a dividir mejor el tiempo y los recursos
dedicados a este procedimiento.
2. Determinar qué se va a inspeccionar o revisar: Determine los
elementos o partes críticas de las instalaciones, máquinas y equipos
que se vayan a inspeccionar y revisar. Considere cada uno de los
elementos existentes en la actividad productiva, tales como:
maquinarias, equipos, herramientas manuales y eléctricas, medios de
manipulación, transporte y almacenamiento, escaleras, rampas,
instalaciones civiles y eléctricas, sistema de detección, alarma y
extinción de incendio colectivo, señalizaciones, servicios de
saneamiento básico, equipos de protección personal y cualquier
objeto o medio de trabajo susceptible de originar daños a la salud de
las trabajadoras y los trabajadores. Para ello es conveniente clasificar
e identificar cada elemento mediante códigos y ubicarlos en un plano
físico. Con ello se puede elaborar un inventario codificado de los
componentes que ofrecen mayores probabilidades de ocasionar algún
problema cuando se gastan, se dañan o se utilizan de forma
inadecuada.
3. Establecer un programa de revisiones e inspecciones: Elabore
un programa de inspecciones indicando objetivos,elemento a
inspeccionar, área o departamento, cronograma, responsable,
acciones a realizar, comprobación de eficiencia de la acción (firma y
fecha).
4. Elaborar listas de chequeo o de verificación: Elabore las listas de
chequeo a ser utilizadas en los procesos de inspección. Algunas listas
de chequeo las proporciona el fabricante del equipo pero en la
mayoría de los casos se tendrá que elaborar o adaptar una lista de
chequeo para acomodarse a la situación a controlar. Dichas listas se
utilizan como guías, complementándose con otros aspectos surgidos
no reflejados en las listas de chequeo, cuando se considere oportuno.
5. Determinar las personas que inspeccionarán y revisarán, así
como los recursos necesarios: Generalmente las inspecciones las
realizan los mandos directos de cada área e incluso los propios
trabajadores, pues son los que mejor la conocen y poseen ese interés
primordial y la responsabilidad por una operación segura y eficiente.
Sin embargo, cuando la dificultad o complejidad de los aspectos a
inspeccionar requiera, legalmente o no, un conocimiento específico
profundo en el tema, más allá del conocimiento de los aspectos
implicados en la realización del trabajo, se debe recurrir al
asesoramiento de especialistas o las realizarán el coordinador o el
servicio de prevención. En este sentido, indique los responsables de
efectuar los procesos de inspección y determine los materiales,
vestuario, equipos, documentos e instrumentos de medición
necesarios.

Muchas inspecciones y revisiones derivan de requisitos legales,


incluyendo, por ejemplo, la inspección de recipientes a presión,
montacargas, grúas, etc. Sin embargo, el programa de inspecciones
debería ser lo más completo posible, cubriendo todas las áreas e
instalaciones, y en especial todos aquellos equipos cuyo correcto
funcionamiento y condiciones de seguridad dependen de un adecuado
programa de revisión.

III. Monitoreo y vigilancia epidemiológica de los riesgos y procesos


peligrosos.

En función a los resultados


obtenidos en la identificación
de los procesos peligrosos
realizada, se deberán aplicar
las mediciones ambientales
correspondientes, de ser el
caso. En este sentido, se
deben efectuar monitoreos
ocupacionales, monitoreos
ambientales, para determinar
la concentración ambiental
de la sustancia en cuestión o
el nivel de intensidad del
fenómeno físico, realizar
monitoreos sobre indicadores de riesgos biológicos de exposición, a fin de
mantener un registro actualizado de las condiciones de trabajo, para
establecer acciones preventivas y de control.
IV. Monitoreo y vigilancia epidemiológica de la salud de las trabajadoras
y los trabajadores.

El Plan de Monitoreo y Vigilancia epidemiológica de la salud de los


trabajadores tiene como propósito practicar una correcta vigilancia de
la salud de las personas para, así, obtener conclusiones relevantes
relacionadas con la adecuación del puesto de trabajo a la persona,
actuar con rapidez ante alteraciones de la salud y determinar la
necesidad de introducir o mejorar las medidas de prevención y
protección de los puestos de trabajo.

Todo Programa de Seguridad e Higiene Industrial debe establecer un


sistema general de vigilancia epidemiológica de la salud de los
trabajadores, que comprenda: el registro, análisis, interpretación y
divulgación sistemática, derivada de las evaluaciones individuales,
colectivas de la salud de los trabajadores, que de forma permanente
forman parte de los elementos de vigilancia en el trabajo, así como
también, los datos derivados del registro de incidentes y accidentes
de trabajo y enfermedades ocupacionales.

La vigilancia de la salud abarca a todos los trabajadores de la


empresa que voluntariamente den su consentimiento para llevarla a
cabo. La misma deja de ser voluntaria, previo informe de los
representantes de los trabajadores, en los siguientes casos:

 Cuando la realización de los reconocimientos médicos sea


imprescindible para evaluar los efectos de las condiciones de trabajo
sobre la salud de los trabajadores.
 Cuando se deba verificar si el estado de salud del trabajador puede
constituir un peligro para él mismo, para los demás trabajadores o
para otras personas.
 Cuando así esté establecido en una disposición legal en relación con
la protección de riesgos específicos y actividades de especial
peligrosidad.

Diseñe los instrumentos a utilizar para el registro de la información


de la salud de los trabajadores y para el registro de incidentes y
accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales; asigne
responsabilidades (quién debe llevar el registro, a quién deben
informar los trabajadores en caso de un problema de salud o en caso
de un incidente o accidente de trabajo y quién debe notificar el
accidente de trabajo a los organismos competentes); y establezca los
mecanismos de información y divulgación a emplear (tipo,
características y frecuencia de publicación).
V. Monitoreo y vigilancia de la utilización del tiempo libre de las
trabajadoras y los trabajadores.

La misma importancia que


tiene el derecho a un
trabajo digno y socialmente
útil, la tiene el derecho al
descanso, ya que el
descanso no solo permite al
trabajador reponerse del
desgaste físico y mental que
todo trabajo ocasiona, sino
que le permite realizar con
libertad diversas
actividades, disfrutar de
actividades recreativas,
culturales y deportivas ,
convivir con amigos y
familiares, conocer mejor la
ciudad donde habita y otros
lugares, en resumen, gozar y disfrutar plenamente del tiempo libre.

De acuerdo con lo establece la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y


Medio Ambiente de Trabajo, publicada en Gaceta Oficial N° 38.236 del 26
de julio de 2005, los Servicios de Seguridad y Salud en el Trabajo tiene la
Obligación de velar por el respeto al tiempo de descanso de los trabajadores
y trabajadoras, así como de desarrollar programas para la recreación y
turismo social, como medio para fortalecer e incrementar la calidad de vida,
la productividad, la integración familiar y el bienestar social.

En este sentido, el Programa de Seguridad e Higiene Industrial debe incluir


un sistema de vigilancia permanente, sistemático donde se considere:
jornada de trabajo, horas extras laboradas, hora de descanso dentro de la
jornada, días de descanso obligatorio, días de descanso obligatorio
disfrutados efectivamente, días de descanso convencionales, días de
descanso convencionales disfrutados efectivamente, número de días de
vacaciones, número de días de vacaciones disfrutados efectivamente, que
garantice la utilización del tiempo libre de los trabajadores, como la
aplicación de los planes para la recreación y turismo como herramientas
para fortalecer la calidad de vida de los trabajadores.

VI. Reglas, normas y procedimientos de trabajo seguro.


Los planes de trabajo
para abordar los
diferentes riesgos y
procesos peligrosos en
determinada empresa,
deben incluir el
establecimiento de
reglas, normas y
procedimientos que
permita a los
trabajadores que
laboren en un
determinado proceso
que implique riesgos,
contar con la
información escrita comprensible, de manera de conocer los riesgos y la
forma de protegerse de ellos.

Las reglas en su propósito y forma deberán tener carácter permanente.

VII. Dotación de equipos de protección personal.

La utilización de equipos de protección personal (EPP) es el último recurso


que se debe tomar para hacer frente a los riesgos específicos y se deberá
recurrir a ella solamente cuando se hayan agotado todas las demás vías de
prevención de riesgos, es decir, cuando no hayan podido evitarse o
limitarse suficientemente por medios técnicos de protección colectiva o
mediante medidas, métodos o procedimientos de organización del trabajo.

Elabore un programa de dotación de EPP. Para ello, realice lo siguiente:

1. Identificación y localización del riesgo

A partir de la identificación y evaluación de riesgos efectuada en fases


anteriores, identifique los riesgos concretos que afectan a los puestos de
trabajo y que no se puedan evitar, por lo que requieren el uso de EPP.
Considere que cada riesgo tiene unas características propias y que frente al
mismo es necesario adoptar un tipo de protección.

A continuación se muestra un esquema indicativo para el inventario de los


riesgos con el fin de utilizar EPP.
2. Determinación de las partes del cuerpo del individuo a proteger

Cada riesgo tiene unas características propias y que frente al mismo es


necesario adoptar un tipo de protección. Para seleccionar adecuadamente
los EPP debe determinarse qué parte del cuerpo se protegerá:

 Protección de la cabeza. En aquellos puestos o lugares donde exista peligro


de impacto o penetración de objetos que caen o se proyectan.
 Protección de los ojos. En aquellos puestos o tareas que presenten un
peligro de proyección de objetos o sustancias, brillo y radiaciones directas o
reflejadas.
 Protección de oídos. Cuando
exista exposición a ruido que
exceda de un nivel diario
equivalente de 80 dBA o de un
nivel de pico de 140 dB.
 Protección de las vías
respiratorias. En aquellos
lugares en los que exista un
peligro para la salud por
exposición a alguna sustancia
tóxica o por falta de oxígeno del
aire.
 Protección de manos. En las
operaciones en que exista
peligro de cortaduras, o donde
se manipulen sustancias
agresivas o tóxicas.
 Protección de pies. En lugares donde exista peligro de impactos sobre los
pies o presencia de objetos punzantes.
 Otras protecciones necesarias según los riesgos: de piernas, piel,
tronco/abdomen o cuerpo total.

3. Elección del EPI

Indique para cada puesto de trabajo los EPP que se requieren, considerando
los siguientes requisitos mínimos:

 Deben dar una protección adecuada a los riesgos para los que van a
proteger, sin constituir, por si mismos, un riesgo adicional.
 Deben ser razonablemente cómodos, ajustarse y no interferir
indebidamente con el movimiento del usuario, en definitiva, tener en cuenta
las exigencias ergonómicas y de salud del trabajador.
 Deben cumplir con las normas técnicas vigentes.
Para mayor información sobre los EPP consulte la sección Equipos de
Protección Personal.

4. Normalización interna de uso

Es necesario normalizar por escrito todos aquellos aspectos tendentes a


velar por el uso efectivo de los EPP y optimizar su rendimiento. En este
sentido, elabore una normativa interna para el uso de los EPP que
contemple:

 En qué zonas de la empresa y en qué tipo de operaciones es receptivo el


uso de un determinado EPP; estas zonas serán señalizadas para el
conocimiento tanto de los trabajadores como del posible personal ajeno a la
empresa.
 Instrucciones para su correcto uso.
 Limitaciones de uso en caso de que las hubiera.
 Fecha o plazo de caducidad del EPP o sus componentes si la tuvieran o
criterios de detección del final de vida útil cuando los hubiere.

5. Distribución del EPI

Los EPP están destinados a un uso personal y por consiguiente su


distribución debe ser personalizada. Elabore un formato de acuse de recibo
de los EPP que indique:

 Fecha de entrega
 Fecha de las reposiciones
 Modelo entregado
 Si se instruyó en el uso y conservación

VIII. Atención preventiva en salud de las trabajadoras y trabajadores.

Cuando se diseña un Programa de Seguridad e Higiene Industrial, los


planes de trabajo para abordar los diferentes riesgos y procesos
peligrosos debe incluir un programa de vigilancia epidemiológica de
salud de los trabajadores, que garantice el derecho al trabajo, la
salud y la vida, a través del reconocimiento preventivo del médico o
médica en la evaluación de los efectos de las condiciones de trabajo.

Considere que los trabajadores tienen derecho a obtener de


los Servicios de Seguridad y Salud en el Trabajo toda la información
sobre su salud, que se encuentre a disposición del patrono, y
especialmente, la relativa a los exámenes de salud que les sean
realizados, cuyo resultado debe comunicárseles dentro de las
veinticuatro (24) horas siguientes a su obtención. Asimismo, los
trabajadores tienen derecho a la confidencialidad de los resultados
frente a terceros, los cuales sólo podrán comunicarse a éstos, previa
autorización del trabajador o la trabajadora; salvo aquella que sea
requerida por los Delegados y Delegadas de Prevención, las
autoridades judiciales y de salud, y por los funcionarios y funcionarias
de inspección del Ministerio del Trabajo y Seguridad Social y del
Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, en
cuyos casos la información requerida deberá entregarse de forma
inmediata.

De forma general, el reconocimiento médico debe efectuarse en las


siguientes situaciones:

 Una evaluación inicial de la salud de los trabajadores, después de la


incorporación al trabajo o después de la asignación de tareas
específicas con nuevos riesgos para la salud.
 Una evaluación de la salud de los trabajadores que reanuden su
trabajo tras una ausencia prolongada por motivos de salud, con la
finalidad de descubrir sus eventuales orígenes profesionales y
recomendar una acción apropiada para proteger a los trabajadores.
 Una evaluación de la salud a intervalos periódicos. Estos intervalos
están definidos para ciertos riesgos específicos, quedando el resto a
discreción de la Unidad de Vigilancia de la Salud.
 Ciertos riesgos específicos, como los agentes biológicos, cancerígenos
y las pantallas de visualización, pueden ser objeto, además, de
evaluaciones de la salud en algunos de los siguientes supuestos:
 Evaluación médica previa a la exposición; circunstancial, cuando sea
necesario por haberse detectado en algún trabajador, con exposición
similar, un daño para la salud que pueda deberse a la exposición en
cuestión, y con posterioridad al cese de la exposición o de la relación
contractual.
 Los trabajadores que vayan a cubrir un puesto de trabajo con riesgo
de enfermedad profesional deberán someterse a un reconocimiento
previo a la admisión y, una vez admitidos, a reconocimientos
periódicos que para cada tipo de enfermedad se establezcan en las
normas que, al efecto, se dictarán o hayan sido dictadas por la
autoridad laboral y/o sanitaria.

IX. Planes de contingencia y atención de emergencias.


Todo empleador, a través del Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo,
debe organizar los sistemas de atención de primeros auxilios, transporte de
lesionados, atención médica de emergencia necesaria, respuestas y planes
de contingencia. En este sentido, se deben definir los lineamientos para que
de una forma científica, metodológica y técnica, se identifiquen, evalúen y
determinen los probables escenarios y secuencialmente sean desarrollados
los planes para control de las contingencias, con definición de estrategias,
procedimientos, métodos, técnicas y con la utilización óptima de los medios
disponibles, en donde deben considerarse todas las variables involucradas,
con establecimiento exacto de funciones y responsabilidades en cada etapa.

En atención a lo anterior, como parte del Programa de Seguridad e Higiene


Industrial diseñe un plan de contingencia y atención de emergencias y
urgencias que tenga en cuenta las características de los procesos, el
tamaño y su actividad, así como la posible presencia de personas ajenas a
los mismos, con la finalidad de adoptar las medidas necesarias para su
mitigación y control.

Un plan de emergencia es
un procedimiento escrito
que permite responder
adecuada y
oportunamente con
criterios de seguridad,
eficiencia y rapidez ante
los casos de emergencias
que se puedan presentar,
mediante una acción
colectiva y coordinada de
los diferentes entes
participantes que permite
controlar y minimizar las
posibles pérdidas.

El Plan de Emergencia debe considerar y prever actuaciones frente a


situaciones catastróficas que tengan un mínimo de probabilidad de
materializarse. Entre las posibles emergencias hallamos: incendios,
inundaciones, amenazas de bomba, fugas de contaminantes y otras en
función de la actividad y ubicación de la empresa así como de otras
características que puedan aparecer.

Este plan debe recopilar documentalmente las medidas de Prevención-


Protección previstas, así como la secuencia de actuaciones a realizar ante la
aparición de un siniestro. Se trata, por tanto, de optimizar los recursos
disponibles para reducir al mínimo los posibles daños personales, perjuicios
al medio ambiente y deterioros a las propias instalaciones de la empresa.

Para desarrollar el plan de emergencias debe considerar el tipo y las


características de la empresa, teniendo en cuenta aspectos como:

 Ubicación geográfica de la empresa.


 Características constructivas del edificio.
 Accesos y salidas del recinto.
 Disponibilidad de medios extintores de protección (hidrantes, BIE…).
 Localización y características de las instalaciones y servicios.
 Actividades que se desarrollen en cada planta o sección.
 Número y características físicas/psíquicas de los ocupantes.
 Legislación específica referente al sector de la actividad correspondiente.

Elementos de un Plan de Emergencias

Bajo condiciones normales de operación y dependiendo del riesgo y la


magnitud de las instalaciones, el plan de control de emergencias debe
constar de los siguientes elementos:

 Grupo de gerencia.
 Grupo de control de emergencias.
 Grupo de apoyo médico, paramédico y de primeros auxilios.
 Grupo de restitución de operaciones.
 Asignación de responsabilidades.
 Requerimientos de comunicación.
 Logística de transporte.
 Logística de suministro.
 Equipos de protección personal para emergencias.
 Sistemas de seguridad.
 Funcionamiento de servicios básicos y de emergencias.
 Vías de acceso y salida.
 Contacto con organismos o autoridades competentes.
 Procedimiento de alerta
 Procedimiento de desalojo.
 Procedimiento de rescate y salvamento.
 Procedimientos específicos para enfrentar las emergencias (manuales para
el control de emergencias).
 Adiestramiento.
 Divulgación.
 Actualización.

X. Recursos económicos precisos para la consecución de los objetivos


propuestos.
La empleadora o el
empleador debe asignar
una partida
presupuestaria
anualmente que
constituirá los recursos
económicos necesarios,
para lograr el fiel
cumplimiento de lo
expresado en los
objetivos y la
planificación de su
Programa de Seguridad y
Salud en el Trabajo.

En este sentido, señale


todas las inversiones requeridas en materia de seguridad y salud laboral,
cuantificando las unidades requeridas, precio unitario y costo total de las
acciones. Indique la inversión necesaria en el Plan de capacitación anual, en
el Plan de emergencias, en la dotación de equipos de protección personal,
en el Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo, las inversiones
relacionadas con las mejoras en materia de ingeniería y ergonomía; en fin,
especifique las inversiones necesarias para poner en práctica cada uno de
los planes diseñados para abordas los riesgos y procesos peligrosos dentro
de la empresa.

XI. Ingeniería y ergonomía.

Una vez identificados


los riesgos se deben
buscar alternativas
que conduzcan a
eliminar y, en su
defecto, reducir o
controlar los mismos,
lo cual se puede
conseguir evitando
determinados
productos o sistemas,
utilizándolos en
cantidades mínimas y
en condiciones
óptimas y, en último
caso, proporcionando
o diseñando los sistemas de prevención más efectivos y fiables con medidas
de protección colectiva.
En esta parte del Programa de Higiene y Seguridad Industrial, señale los
cambios a introducir en materia de ingeniería y ergonomía y diseñe un
programa de mantenimiento preventivo, predictivo y correctivo a las
máquinas, equipos y herramientas del centro de trabajo. Si los cambios
implican la modificación de los procesos o procedimientos de trabajo,
deberán diseñarse los Procedimientos de Trabajo Seguro que se ajusten
al a nueva forma de efectuar el trabajo, así como los Permisos para
Trabajos Especiales, de ser necesario.

Si los cambios a introducir implican la adquisición de un equipo, a la hora de


escogerlo se deben tener en cuenta las condiciones y características de cada
puesto de trabajo, las características de las personas que van a trabajar con
el equipo, el modo de realizar el trabajo y los posibles riesgos asociados al
mismo.

Los equipos han de satisfacer una serie de condiciones finales de seguridad


según la normativa que sea aplicable en cada caso, en función del tipo de
equipo de que se trate. Además del cumplimiento de estas normativas, los
equipos deben escogerse de forma tal que sean seguros y adecuados a cada
puesto de trabajo, no sólo durante su uso, sino también durante su
mantenimiento, limpieza, transporte, puesta en marcha, puesta fuera de
servicio, desmantelamiento y retirada.

En cuanto a los materiales y productos químicos se han de escoger, siempre


que sea posible, los menos perjudiciales para la seguridad y salud de los
trabajadores que los tengan que manipular.

En definitiva se ha de procurar que las modificaciones a introducir en los


puestos de trabajo, ya sea en la forma de hacer el trabajo, en los equipos o
en los materiales y productos químicos que se empleen, no supongan la
aparición de nuevos riesgos laborales y, si esto no fuera posible, se
dispondrán las medidas preventivas necesarias para reducir al máximo
estos nuevos riesgos.
Ejemplo

Considere el siguiente ejemplo: A fin de eliminar los riesgos asociados al


levantamiento de peso excesivo y movimientos bruscos y repetitivos en los
trabajadores de una planta procesadora de alimentos para animales,
encargados de trasladar y acomodar los sacos de producto terminado en las
paletas para su almacenamiento, se decide adquirir un equipo paletizador
automático con una banda transportadora.

Al momento de seleccionar el equipo, debe asegurarse que el mismo no


implique nuevos riesgos para la seguridad y salud de los trabajadores. Por
lo tanto, se debe asegurar que el equipo posea los implementos de
seguridad necesarios, tales como seguros y guardas protectoras. Debe
adecuarse a las características del puesto de trabajo, por lo que deben
considerarse las dimensiones y posible ubicación del equipo, de manera que
no entorpezca el desarrollo de otras actividades, permita la libre circulación
por el área, así como el acceso y salida del puesto de trabajo.

Por ser un equipo automático, para su operación solo se requiere el


encendido del mismo por lo que no necesita la operación o manipulación
constante de un trabajador. En consecuencia, no se requiere efectuar
actividades de capacitación a los trabajadores para operara el equipo que
vayan más de la descripción del mismo, cómo ponerlo en funcionamiento y
cómo detener la operación.

Asimismo, se debe tomar en cuenta las necesidades de mantenimiento del


equipo, por lo que será necesario establecer un programa de mantenimiento
preventivo y correctivo, en atención a las especificaciones dadas por el
fabricante (es necesario consultar el manual del equipo), considerando
además las necesidades de formación del personal para efectuar dicho
mantenimiento.

En resumen, en el ejemplo planteado será necesario especificar las


características del equipo señalando las dimensiones del mismo, ubicación
en el puesto de trabajo (se debe elaborar un plano), operación del equipo,
necesidades de mantenimiento y las medidas de seguridad a aplicar tanto
en la operación y como en el mantenimiento del equipo.

Referencias

 Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo (NT-01-


2008). Resolución del Ministerio del Poder Popular para el Trabajo y
Seguridad Social, 6227, Diciembre 01, 2008.
 Reglamento parcial de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y
Medio Ambiente de Trabajo (Decreto No. 5.078). (2006, Diciembre
22). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 38.596,
Enero 3, 2007.

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