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Mezcla sincronizada de temas musicales

Entre las técnicas de los DJ de club, muchas de ellas originadas en la cultura del turntablism típica
del hip hop, básicamente se precisan dos aparatos que permitan reproducir el sonido y alternar
consecutivamente entre uno y otro, de modo que se cree una corriente continua de música sin
saltos y unos conocimientos previos de teoría musical para conseguir que se pueda realizar de
manera rítmica, armónica y sin cacofonía.

En primer lugar hay que tener en cuenta el tempo de ambos temas musicales, (el tempo o
velocidad de un tema de música de baile se mide en BPM, pulsaciones por minuto) que son los
golpes de bombo y de caja o palmada en un minuto.

Además, hay tener en cuenta el compás, que en la música Dance es normalmente de 4x4. Cada
compás consta de 4 tiempos que a su vez están unidos por grupos de compases que pueden ser de
8-16-32... tiempos.

También es necesario disponer de, al menos, dos fuentes independientes de reproducción de


música grabada y a ser posible, disponer de un ajuste fino de la velocidad para ajustar el ritmo de
los temas a mezclar (pitch). Inicialmente se usaban plato giradiscos y Magnetófono.
Posteriormente se incorporó el DAT y con el desarrollo informático, el software adecuado para la
realización de las mezclas, que , además de medir todos los parámetros necesarios
automáticamente, suelen incluir la posibilidad de realizar auto-mezclas.13

Mezcla acompasada

Es la forma más limpia y menos arriesgada de realizar una mezcla. Se consigue sincronizando los
BMP y los compases de los temas a mezclar.

Consiste en acompasar en preescucha el segundo tema respecto al que está sonando e ir subiendo
lenta y progresivamente su volumen al llegar al punto de mezcla deseado sin bajar el volumen del
que se está reproduciendo, manteniendo ambos durante varios compases a máximo volumen,
bajando entonces el del primer disco rápidamente quedando el nuevo tema reproduciéndose ya
en solitario.

Para conseguir una buena armonización es aconsejable ajustar bien los compases y realizar la
mezcla en los puntos de ambos temas en que sólo aparecen parte de los elementos sonoros,
evitando así posibles estridencias o cacofonías. Los temas discotequeros tienen preparado para tal
efecto el inicio del tema, un break o dos centrales y uno final para elegir cuando se quiere realizar
la mezcla y cambio de tema.
Mezcla al vuelo

La preparación de este tipo de mezcla es muy parecida a la de la mezcla acompasada. Consiste en


comenzar la mezcla directamente con el volumen del nuevo tema al máximo, arrancando desde
estar parado, con lo cual es muy complicado de realizar. Para conseguir un buen resultado con
esta mezcla debemos conocer muy bien nuestros aparatos de reproducción ya que el arranque y
acompasamiento del tema a mezclar ha de ser "instantáneo". A continuación, al igual que en
cualquier otra mezcla acompasada, se mantenienen ambos temas durante varios compases.

Mezcla falsa al vuelo

Este tipo de mezcla no supone tanto riesgo como la mezcla al vuelo. El efecto es igual a la mezcla
al vuelo, pero el procedimiento es como la mezcla acompasada con la diferencia de que el
volumen se sube al máximo al llegar al punto de mezcla y no poco a poco.

Corte al vuelo

Es una variante de la mezcla a vuelo. En el momento en que se suelta el segundo disco se baja el
volumen del primero muy rápidamente, por lo que no hay mezcla acompasada, hay un cambio
drástico de tema que para conseguir una buena armonización es recomendable que el cambio se
produzca manteniendo el tempo del tema anterior en el siguiente golpe.

Al tratarse de un corte desde posición parada, se puede aprovechar para cambiar de estilo musical
o de velocidad.

Corte falso al vuelo

Se realiza la preescucha igual que en la mezcla acompasada, con la diferencia de que al llegar el
momento deseado de la mezcla los volúmenes de ambos temas se intercambian.

Al tratarse de un falso corte no se puede aprovechar para cambiar de velocidad, pero se consigue
el efecto de un cambio estético que no pierde ni el ritmo ni el orden de compás

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