Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Clases de Adverrrrrvios
Clases de Adverrrrrvios
Adverbios de Tiempo. Expresan información sobre el momento en que se realiza la acción del verbo: Ahora,
antes, mañana, tarde, mientras, aún, recién, cuándo, jamás, después, anoche, luego, siempre, ya, ayer, anteayer,
entonces, temprano, todavía, hoy, antenoche, pronto, nunca.
Ahora vamos.
Adverbios de Lugar. Expresan información sobre el lugar donde se realiza la acción del verbo: Acá, arriba,
encima, afuera, adonde, aquí, cerca, abajo, junto, allende, allí, allá, lejos, fuera, delante, enfrente, alrededor, atrás,
dondequiera, dónde, ahí, dentro, detrás, debajo, donde.
Estamos acá.
Adverbios de Cantidad. Expresan información sobre la cantidad que implica la acción del verbo: Mucho, casi,
menos, harto, demasiado, mitad, más, excepto, salvo, cuanto, poco, tanto, algo, sólo bastante, medio, además, tan,
muy, nada.
Adverbios de Modo. Expresan información sobre la manera en que se realiza la acción del verbo: Bien, mal,
despacio, como, cómo, cual, cuál, apenas, aprisa, adrede, así.
Lo hizo adrede.
Adverbios de Afirmación. Expresan certeza sobre la acción del verbo: Sí, cierto, verdaderamente, realmente,
ciertamente, seguramente, también.
Adverbios de Negación. Expresan negación sobre la acción del verbo: No, nada, tampoco, nunca, jamás.
No olvidaré tu comportamiento.
Adverbios de Duda. Expresan duda sobre la acción del verbo: Quizá, acaso, tal vez.
Por otra parte, son regionalismos también las palabras que se usan específicamente en
determinadas regiones, como, por ejemplo, designar los frijoles de distintas formas dependiendo
del país: fríjoles en Colombia, caraotas en Venezuela o habichuelas en Puerto Rico.
La palabra regionalismo, como tal, se forma a partir del término regional, que se refiere a lo que es
perteneciente o relativo a una región, y el sufijo -ismo, que indica 'actitud o tendencia'.
Regionalismo político
Se habla de regionalismo en política en referencia a las ideologías o movimientos que tienen
como objeto la defensa y valoración de la región propia, de sus características distintivas en
lo natural (paisaje, geografía, recursos) y lo cultural (tradiciones, costumbres).
El regionalismo surge como reacción al centralismo, y, pese a que no pretende cuestionar la
existencia de una unidad política superior (la de la nación), sí se plantea exigir al Estado políticas
que atiendan las necesidades específicas locales, así como una redistribución justa de la renta
nacional.
Vea también:
Federalismo
Descentralización
Regionalismo lingüístico
Se conocen como regionalismos lingüísticos todas aquellas palabras, giros o construcciones
sintácticas que son propias de una región determinada. A veces, incluso, palabras que en una
región significan una cosa, en otra pueden referirse a una completamente distinta. A continuación,
algunos ejemplos de regionalismos léxicos en la lengua española:
Autobús: camión (México), guagua (Cuba), camioneta (Venezuela), ómnibus (Argentina).
Dinero: guita (Argentina), pasta (España), lana (México), real (Venezuela).
Trabajo: chamba (México), curro (España), laburo (Argentina).
El arcaísmo son expresiones o palabras del español antiguo, que se utilizan
frecuentemente como si fueran parte del lenguaje actual.
En el arcaísmo se utilizan algunas palabras que han desaparecido de la lengua española,
pero que en los países latinoamericanos se siguen usando en el habla cotidiana, esto
mediante sinónimos o variantes modernas de la misma palabra.
El arcaísmo se divide en dos tipos, que son el arcaísmo absoluto y el arcaísmo relativo.
Ejemplos de arcaísmo:
Los modismos son expresiones que se utilizan en diferentes países, con el fin de representar cierta
situación con palabras que no se adecuan o refieren a ello en su completa significación. Varía de acuerdo
las costumbres del país en la que es utilizada, pues se genera debido a la visión y uso de las palabras que
en esa zona se tenga, habiendo, incluso, distintos modismos a nivel regional y que, de hecho, no son
utilizados en el resto del territorio restante.
Modismo
Representan, de alguna manera, la cultura de un país y a su gente, además del entorno y los objetos con
los que se familiarizaron, pues son los componentes que suelen agregar a las diferentes frases.
Usualmente, se tiende a confundir a los modismos con los refranes, siendo esto muy errado pues, los
últimos, están muchos más ligados a la enseñanza de la buena manera de vivir la vida, siendo todo
descrito con palabras que son muy conocidas, pero alterando su orden para dar rima y sea realmente
considerado un refrán. Los de más uso son los que han sido pronunciados por varias generaciones.
Hay algunos modismos que son conocidos y utilizados en variedades de países, entre las que se
encuentran: “ahogarse en un vaso de agua”, tomando referencia a la tendencia a confundirse o la falta de
ideas de cómo solucionar un problema, al igual que retrata a un individuo agobiado por cualquier giro
inesperado; “hacer castillos en el aire”, se utiliza para describir a un sujeto o un grupo de los mismos, que
suelen ser muy fantasiosos y no caen en cuenta de la realidad que viven; “tirar la toalla”, por su parte,
habla sobre el rendimiento de una persona ante una situación o acción. Similar a las anteriormente
nombradas, existen diversas expresiones utilizadas.
carbón casas charco compañero corazón formada invierno lloró muñeco nevar pueblo ra
yos tormenta viejecito
El muñeco de nieve
Érase una vez un (1) en las altas montañas de los Pirineos. Como
había dejado de (2), después de varios días de una terrible (3)
todos los niños, ansiosos de libertad, salieron de sus (4) y empezaron a
corretear por la blanca y mullida alfombra recién (5).
Nuria, la hija única del herrero del pueblo, tomando puñados de nieve con sus
manitas hábiles, se entregó a la tarea de moldearla.
--Haré un (6) como el hermanito que hubiera deseado tener --se dijo.
Le salió un niñito precioso, redondo, con ojos de (7) y un botón rojo por
boca. La pequeña estaba entusiasmada con su obra y convirtió al muñeco en
su inseparable (8) durante los tristes días de aquel (9). Le
hablaba, le mimaba...
Pero pronto los días empezaron a ser más largos y los (10) de sol más
cálidos... Y el muñeco se fundió sin dejar más rastro de su existencia que
un (11) de agua con dos carbones y un botón rojo. La niña (12)
con desconsuelo al descubrirlo. Un (13), que buscaba en el sol
tibieza para su invierno, le dijo dulcemente:
--Seca tus lágrimas, bonita, porque acabas de recibir una gran lección: ahora
ya sabes que no debe ponerse el (14) en las cosas breves o que
desaparecen.