Violencia de Genero

Desde tiempos de nuestros ancestros, la violencia es considerada como parte de la cultura,

ella está vinculada a los orígenes, evolución y desarrollo del ser humano. Desde la
antigüedad se han encontrado referencias en escritos de filósofos y pensadores como:
Anaximandro, Heráclito, Sofos, entre otros, y en cierto modo, el comportamiento violento
y agresivo ha estado presente a través de toda la historia y ha quedado grabado en
documentos que van desde las antiguas escrituras hasta las referencias de estadísticas
actuales.

En las épocas más remotas de la cultura humana se ha manifestado siempre la

subordinación de las mujeres respecto a los hombres. Dicho fenómeno no se ha limitado
sólo a concebir la inferioridad femenina, sino que esta ha trascendido las fronteras de lo
racional, hasta llegar incluso a manifestarse mediante comportamientos agresivos, que
confirmados por el patriarcado y ratificados luego por las sociedades, conforman la ya
histórica y universal, violencia de género.

La violencia es universal en tiempo y espacio, es decir, en el tiempo, porque ha

estado y sigue estando presente como una de las principales causas de defunción en las
mujeres, y en el espacio, porque se filtra en todas las sociedades. Históricamente, todas las
mujeres han vivido en mayor o menor grado formas de violencia, donde esta está en su
mayor parte presente, pero a menudo no es reconocida y se acepta como parte del
precepto establecido.

Desde 1993, año en que se aprobó la Declaración sobre la Eliminación de la

Violencia contra la Mujer (ONU) se reconoce que este tipo de violencia constituye uno de
los mecanismos sociales fundamentales por los que se fuerza a la mujer a una situación de
subordinación con respecto al hombre.

En la actualidad, hablar de Violencia de Género o violencia hacia la mujer, parte de

conceptos que mejor se van adaptando a la realidad en la que actualmente vivimos, pues
explican que la violencia contra las mujeres es la consecuencia de la discriminación y del
desequilibrio de poder entre las mujeres y hombres en la sociedad. También existen otros
términos que se usan frecuentemente como “violencia doméstica” o “violencia
intrafamiliar”, sin embargo, llegan a limitar el verdadero punto de estudio, además el
aspecto de la misma como, quién es la víctima, quién el agresor o cuál es el objetivo y
causa de la violencia.

La ONU la define como : “Violencia contra las Mujeres” y es todo acto de violencia
basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga , o pueda tener como resultado, un
daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para las mujeres, inclusive las amenazas de
tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad tanto si se produce en la vida
pública o privada” (Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer
(resolución de la Asamblea General 48/104 del 2 de diciembre de 1993)
 La violencia de género implica una violación a los derechos humanos que realza los
estereotipos de género y que niega la dignidad, la autodeterminación y el derecho al
desarrollo de las personas. Sin embargo, se observa que son las niñas, las jóvenes y las
mujeres las principales víctimas de ésta. Es importante puntualizar que cualquier persona,
sin importar su sexo, puede sufrir o incurrir en actos que concuerdan con violencia de
género.

Ella no es exclusiva de un área, ya que puede surgir en una relación de pareja o expareja,
relación académica, relación laboral entre pares iguales o de subordinación y entre
aquellas personas que no mantienen relación alguna. Pudiendo presentarse en un ámbito
privado o público:

a. En el ámbito privado se da la violencia familiar (manifestándose de diversas formas).

b. En el ámbito público se da en los espacios comunitarios, instituciones, escuelas, así
como áreas de trabajo.

EQUIDAD Y GÉNERO

EQUIDAD

La equidad es un principio de justicia y que trata de la constante búsqueda de la justicia

enlazando ideas de igualdad, el reconocimiento y aceptación de cada una de las
diferencias sociales.
La equidad tiene como fin, asegurar que todas las personas tengan las mismas
condiciones de vida y de trabajo sin que llegue a existir diferencias debido al extracto
social, sexo o género al que pertenezcan. Ella incluye como parte de sus ejes, el respeto y
garantía de los derechos humanos, así como la igualdad de oportunidades.
La equidad de género y la igualdad están unidas, pero no deben confundirse, ni
reemplazarse una con la otra, ya que en el caso de igualdad apela a un valor superior
jurídico de todas las mujeres, quien el principio básico es la No discriminación basada en
diferencias sexuales. Por otro lado, la equidad es una medida dirigida a cubrir carencia de
las desigualdades por cuestiones de géneros.

GÉNERO
Es importante resaltar la diferencia entre sexo y género ya que cuando hablamos de sexo,
se habla de las características físicas, biológicas con que cada persona nace y estas no son
modificables.

El concepto de género se utilizó por primera vez durante la década de 1950. Pero
no fue hasta 1968 que se demostró que lo que determina la identidad y el
comportamiento masculino o femenino no es el sexo biológico, sino las expectativas
sociales, costumbres y experiencias que atañen al hecho de haber nacido mujeres u
hombres. Es por eso que la asignación y adquisición del género es una construcción social-
cultural.
 Es por eso que género puede definirse como la condición que analiza cómo se
definen, representan y simbolizan las diferencias sexuales en una determinada sociedad.
Apuntando a las formas históricas y socioculturales en que mujeres y hombres construyen
su identidad, interactúan y organizan sus funciones. Estas formas varían de una cultura a
otra y se transforman a través del tiempo.

Por tanto, una vez descritos los términos, se puede decir que la equidad de género
es la búsqueda de valores que den a todas las personas la certeza de igualdad que atañe a
derechos y obligaciones, sin importar el nivel social, sexo u otra realidad. En este sentido,
la equidad de género promueve que diferentes comportamientos, anhelos y necesidades
de las personas, hombres y mujeres sean considerados con la misma importancia.

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