Universidad De Bogotá Jorge Tadeo Lozano

Nombre: Daniel Ernesto Velandia Vega

Profesor: Mauricio Cruz Arango
Asignatura: Arte e historia

Son varios los aspectos que ahora hacen parte de mi manera de concebir un poco los
periodos artísticos, las maneras de creación, los procesos, la labor, etc. Puesto que han sido
varias las nuevas directrices que se han puesto en evidencia para llevar a cabo esta
afirmación.
Empezando porque el artista ha asumido a lo largo de la historia varias posiciones con
respecto a su trabajo y este mismo, le ha ido sugiriendo una manera de elaborarlo, un
ejemplo claro de esta afirmación puede entenderse desde el cubismo el cual con su llegada
rompe totalmente el molde; y no sólo eso sino también la manera de trabajar pues quiebra
la necesidad de entendimiento gracias a reconocer. Es clave en este punto fijarnos en la
palabra necesidad; puesto que el espectador encuentra en el cubismo un nuevo problema
que directamente lo deja indefenso ante la obra, la información que está recibiendo le
supone una confrontación con lo desconocido y hasta ese momento crea en el sujeto un
lenguaje al cual no puede acceder. Todo esto puede generar una pregunta ¿Bajo qué
criterios se organiza la información fragmentada? Es la mayor problemática en la que
estamos inmersos es ahora la mayor tarea del arte ser pensado, tener una postura crítica
acerca de dónde y cómo estamos situados.
Entrando en otro tema que no se desliga para nada del anterior podemos ver que la
introducción de la fotografía es quizá un punto álgido en la historia, no solo del arte sino de
absolutamente todo tipo de ramas del conocimiento. Pues supone la entrada de un medio
que reformula todas las concepciones anteriores no solo de tiempo o espacio sino de
permanencia. Es en las artes dónde notamos que se convierte en una llave que empieza
abrir puertas y una de las más evidentes que se abrió fue la de permitir que prácticamente
cualquier persona tuviese la capacidad de crear una imagen, labor, que anteriormente
como bien es sabido solo llevaban a cabo los “artistas” y esto sólo gracias a años de trabajo
y estudio que les permitían pulir sus habilidades. La fotografía rompe totalmente el oficio
prácticamente estalla la labor y lo minimiza a solo oprimir un botón , es decir; es tal la fuerza
de la fotografía que aquello que en su momento podría llevar años, meses, horas en su
creación; se reducía a unos cuantos minutos y un proceso químico de revelado con el que
la persona que había oprimido ese botón obtenía como resultado una imagen, la misma
que un artista intentando reproducir le llevaría (en el mejor de los casos) unas cuantas horas
y aun así no se acercaría a la fidelidad que podría ofrecer una máquina, claro está que ésta
fidelidad va muy ligada a una forma de lectura anteriormente nombrada en la cual la
necesidad de entender es manifiesta y permite al espectador mediante experiencias
perceptuales sentir una familiaridad con lo que se representa, ya sea con la fotografía o
mediante una pintura de intereses figurativos.
La mujer que anteriormente podría limitarse a contadas artistas; encuentra con la fotografía
un soporte muy fuerte para su trabajo y el cual Entre otro de los puntos que he encontrado
comunes destaco el de ver los medios en general como una nueva manera de concebir el
arte, en el cual su uso hasta la actualidad ha dado un giro total a nuestra manera de
comprender aquello que quizá en su momento no tenía una lectura clara que nos permitiera
evidenciar cuestiones que fueran más allá de algo meramente estético, las condiciones son
cambiantes y somos afectados constantemente por ello, de allí que la relación con los
medios es claramente una intimidad también con el ser humano.
El valor de los medios va ligado a una creciente necesidad e innata naturaleza curiosa de
explorar formas que permitan articular las ideas, el mayor problema radica en ese
momento en el cual cuando se puede hacer cualquier cosa el pensamiento puede llegar a
encontrarse atorado en un sinfín de salidas que no ayudan a clarificar cuál es el mejor paso
a seguir que corresponda con una obra artística que resuelva los anteriores dilemas en una
forma sólida, claro está que actualmente las comprensiones de estos problemas no solo se
limitan a resolver las ideas que el artista puede tener. El gran e importante problema de
nuestra época, muchas ideas en un periodo fugaz dónde la inmediatez se ha convertido en
el pan de cada día y los verdaderos procesos creativos han quedado relevados a proyectos
(hablando desde la universidad) hay muy malos usos de los medios de los cuales
disponemos y las falencias del sistema educativo quedan evidentes en una facultad que
construye un “artista” que entra en un círculo vicioso, del cual solo se desprende una
necesidad de exponer, vender, ser reconocido y repetir.
Ahora cualquier persona puede decirse artista gracias a crear una imagen ya sea por una
técnica o por una labor de aplicar un verbo sobre un material, es decir, pintar, esculpir,
grabar, etc. Cuando en verdad el hecho de hacer ello no implica para nada que pueda ser
categorizado como arte, tal distinción fue claramente establecida y encuentro una afinidad
con ella pues puede entenderse el ARTE como un punto de excelencia y otra parte la cual
es la que en este momento discuto que es el arte solo como algo realizado y en el cual se
cae en un problema pues muchas veces esta realización de algo se suele categorizar como
ARTE así en mayúsculas donde tal excelencia no ha sido alcanzada. Esto lo podríamos
encapsular en un problema y es que el arte no es un valor, pues que sea significativo es una
cuestión diferente y empieza a constituir formas de evaluar procesos creativos.
El poder económico como determinante sigue siendo lastimosamente (a mi parecer) una
de las formas de distinguir el arte como una rama elitista. La capacidad adquisitiva ha
llevado a limitar un campo que tal parece cada vez más se cierra a un sector privilegiado
que puede acceder a las obras de los artistas, muchas veces siendo las personas que
adquieren este trabajo simplemente sujetos con una cantidad de dinero muy alta pero un
conocimiento artístico muy bajo, no estoy diciendo que todas las personas que se dedican
a ello, coleccionar, comprar, etc. Sean ignorantes ni nada, de hecho hay muchas personas
que son unos totales intelectuales y con un conocimiento muy alto. Pero no es un secreto
que son contadas las personas que pertenecen a ese grupo y tienen un sentido de
pertenencia con el arte mucho más alto que alguien que solo desembolsa una cantidad de
dinero y adquiere algo por un gusto muchas veces ni siquiera definido. Quizá el dinero sea
un factor que ha dado al arte una categoría, quizá también le ha situado como ahora en un
punto diferente, quizá sea una forma de pagar no solo una obra sino una actividad que va
ligada a un amplio proceso personal, el arte como disciplina integral que requiere un
proceso muy largo que implica toda la vida. Puede que tales condiciones no se tengan en
cuenta por tal motivo las catalogo con un quizá, pero en verdad este factor dinero es algo
que no podemos simplemente suprimir teniendo en cuenta el periodo actual que vivimos y
en el que el poder adquisitivo se ha hecho tan marcado.
Son estas las variables que considero han sido las más fundamentales a lo largo de las
charlas, nuevamente hay varias preguntas que han surgido a lo largo de ellas, ¿qué tan
dañina ha sido la inmediatez? ¿Qué tan desestabilizada está la identidad debido a la
cantidad de información de nuestra época? ¿Cuál es la situación actual de la facultad, con
respecto a nuestro tiempo? Sólo son unos de los interrogantes que quedan en el tintero,
que la verdad si quisiera se puedan ir articulando mucho más y esas preguntas se puedan
aclarar no solo con la herramienta que es esta clase, sino también los procesos personales
que supone la altísima autonomía artística, en la cual más allá de desfiguradas formas de
un maestro está el propio trabajo y esfuerzo que se pone en cada una de las obras.