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¿Por qué la Biblia enseña sobre el dinero y las

posesiones?

LECCIÓN #1 Dios nos ama y porque se preocupa por nosotros, nos ha


dado pautas en su palabra para manejar el dinero de la
mejor manera y para agradarle a él. Isaías 55:8-9 dice:
FINANZAS
“Porque mis pensamientos no son los de
CRISTIANAS ustedes, ni sus caminos los míos –afirma el
SEÑOR- Mis caminos y mis pensamientos son
más altos que los de ustedes; ¡más altos que
los cielos sobre la tierra!”

A. LA FUNCIÓN DE DIOS.
1. ES EL DUEÑO, LEVÍTICO 25:23:
“La tierra no se venderá a perpetuidad, porque la tierra es mía y ustedes no
son aquí más que forasteros y huéspedes.”
Cuando nos damos cuenta de que Dios es el dueño de todo, cada decisión sobre lo que
vamos a gastar o invertir se vuelve una decisión espiritual.

2. DIOS TIENE EL CONTROL, DANIEL 4:34-35:


“Entonces alabé al Altísimo; honré y glorifiqué al que vive para siempre: Su
dominio es eterno; su reino permanece para siempre…Dios hace lo que quiere
con los poderes celestiales y con los pueblos de la tierra. No hay quien se
oponga a su poder ni quien le pida cuentas de sus actos.”
Nosotros podemos tener paz al saber que nuestro amante Padre celestial tiene el control
de cada situación a la que nos enfrentemos, y que él tiene la intención de valerse de cada
una con un buen propósito.

3. DIOS PROVEE PARA NUESTRAS NECESIDADES, FILIPENSES 4:19:


“Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las
gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.”
Dios cuida de su pueblo, y no necesita de una situación económica próspera para
satisfacer nuestras necesidades. Dios, tal y como se revela en la Escrituras, es muy
diferente de cómo se lo imagina mucha gente. Con mucha frecuencia la gente no
reconoce su amor, y la grandeza de su poder. Tenemos que cambiar nuestra imagen
mental de Dios procurando entender lo que la Biblia nos dice sobre Él.

B. NUESTRA FUNCIÓN.
1. DEBEMOS SER FIELES MAYORDOMOS DE LAS POSESIONES DE DIOS,
1 CORINTIOS 4:2:
“Ahora bien, a los que reciben un encargo se les exige que demuestren ser
dignos de confianza.”
Mayordomía significa administrar las pertenencias de otro. Dios es dueño de todo lo que
nosotros tenemos y nos ha dado la responsabilidad de administrar nuestras cosas, de
una manera fiel, de acuerdo a los principios de la Escritura acerca de las finanzas.

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2. LA LEALTAD CON RESPECTO A LAS POSESIONES DE OTRO PUEDE
DETERMINAR LO QUE USTEDES ESTÁ DANDO, LUCAS 16:12:
“Y si en lo ajeno no han sido honrados, ¿Quién les dará a ustedes lo que les
pertenece?”
No entender los principios financieros de Dios, el no tener “criterio bíblico” en el manejo
del dinero suele llevarnos a tener principios de vida incorrectos. Los principios y valores
incorrectos nos llevan a actitudes incorrectas. Y las actitudes incorrectas nos llevan a
tomar malas decisiones en el campo financiero.

CONCEPTOS LA POBREZA LA PROSPERIDAD LA MAYORDOMÍA


Las Posesiones Malignas Un Una
Son: Derecho Responsabilidad
El Sólo cubre Es para Sirve
Trabajo: Necesidades Volverse a
Físicas Rico Cristo
El Pueblo de Pobre Rico Fiel
Dios es:
El Incrédulo Rico Pobre Infiel
es:
Yo Porque Debo Para Obtener Porque Amo
Doy: Hacerlo Algo a Dios
Al Gastar lo Temor sin Irresponsabilidad y Devoción y
hago con: Gozo siendo consumista Responsabilidad

C. LA FUNCIÓN DE DIOS CON RESPECTO AL TRABAJO.


1. DIOS CREÓ EL TRABAJO PARA BENEFICIARNOS. LA PRIMERA TAREA QUE
DIOS LE ASIGNÓ A ADÁN FUE EL TRABAJO, GÉNESIS 2:15:
“Dios el SEÑOR tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo
cultivara y lo cuidara.”
Dios estableció el trabajo como el medio principal para que suplamos nuestras
necesidades y espera que nosotros trabajemos. 2 Tesalonicenses 3:10:
“El que no quiera trabajar, que tampoco coma”

2. DIOS NOS HA DADO HABILIDADES PARA NUESTRO TRABAJO, ÉXODO 36:1:


“y a quienes el SEÑOR haya dado la pericia y habilidad para realizar toda la
obra del servicio del santuario.”
Dios nos ha dado diferentes habilidades. Él no valora a una persona más que a otra por
la destreza que tiene, sin embargo, si valora si somos fieles mayordomos de lo que Él
nos ha dado.

3. DIOS NOS DA EL ÉXITO, GÉNESIS 39:2-3:


“Ahora bien, el SEÑOR estaba con José y las cosas le salían muy bien.
Mientras José vivía en la casa de su patrón egipcio, éste se dio cuenta de que
el SEÑOR estaba con José y le hacía prosperar en todo.”
Nosotros tenemos responsabilidades, pero debemos darnos cuenta de que es Dios quien
nos dará el éxito.

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4. DIOS CONTROLA LOS ASCENSOS Y AVANCES LABORALES, Salmo 75:6-7:
“La exaltación no viene del oriente, ni del occidente, ni del sur, sino que es
Dios el que juzga: a unos humilla y a otros exalta.”
Aunque nos sorprenda mucho, no somos quienes controlamos, quienes nos
ascenderemos (enalteceremos) a nosotros mismos; es el Señor quien controla nuestro
éxito y ascensos.

D. EL PAPEL DE NUESTRO TRABAJO.


1. DEBEMOS TRABAJAR DURO, 2 TESALONICENSES 3:8-9:
“ni comimos el pan de nadie sin pagarlo. Al contrario, día y noche trabajamos
arduamente y sin descanso para no ser una carga a ninguno de ustedes. Y lo
hicimos así, no porque no tuviéramos derecho a tal ayuda, sino para darles un
buen ejemplo.”

2. EL TRABAJADOR DILIGENTE Y ESMERADO RECIBIRÁ BENDICIONES:


a. La provisión adecuada. Proverbios 6:6-8:
“¡Anda perezoso, fíjate en la hormiga!¡Fíjate en lo que hace y adquiere
sabiduría! No tiene quien la mande, ni quien la vigile ni gobierne; con todo, en
el verano almacena provisiones y durante la cosecha recoge alimentos.”
b. La Riqueza. Proverbios 10:4:
“las manos hábiles atraen riquezas”
c. El Liderazgo. Proverbios 12:24; 22:29:
“El de manos diligentes gobernará; pero el perezoso será subyugado.”
“¿Has visto alguien diligente en su trabajo? Se codeará con reyes, y nunca
será un Don Nadie.”

3. EL TRABAJADOR PEREZOSO SUFRIRÁ CONSECUENCIAS.


a. La Pobreza. Proverbios 10:4:
“Las manos ociosas conducen a la pobreza.”
b. Las dificultades. Proverbios 15:19:
“El camino del perezoso está plagado de espinas, pero la senda del justo es
como una calzada.”
c. La muerte. Proverbios 21:25:
“La codicia del perezoso lo lleva a la muerte, porque sus manos se niegan a
trabajar.”

E. NO DEBEMOS TRABAJAR EXCESIVAMENTE.


El trabajar duramente debe equilibrase con las demás prioridades de nuestra vida.
Si nuestro trabajo requiere demasiado tiempo y energía, al punto de que dejemos de lado
nuestra relación con Cristo o el cuidado de nuestros seres queridos. Significa que
estamos trabajando en exceso. Éxodo 34:21:
“Trabaja duramente seis días, pero descansa el séptimo. Ese día deberás
descansar, incluso en el tiempo de arar y cosechar.”

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F. LOS CUATRO PROPÓSITOS DE DIOS PARA EL DINERO.

1. PROVISIÓN: 1 TIMOTEO 6:8.


“así que, teniendo sustento y con qué cubrirnos, seamos contentos con esto.”
▪ Establecer dependencia diaria de Él. Autosuficiencia vs Dependencia, Mateo
6:11.
▪ Profundizar nuestro amor por el Señor. Dios nos ha creado de tal manera que le
necesitamos. Solo somos completos en Cristo. Colosenses 2:10, Juan 15:5.
▪ Desarrollar un espíritu de gratitud. La gratitud es resultado del contentamiento
con lo básico, en la medida que nuestras expectativas crecen, nuestra gratitud
disminuye. Romanos 12:3.
▪ Enseñarnos a vivir dentro de nuestro presupuesto. El contentamiento nos ayuda
a resistir la publicidad, que en suma trata de convencernos de que no somos
felices sin lo que ella ofrece. Si nos sentimos que tenemos más de lo que
merecemos entonces no necesitaremos más. 1Timoteo 6:6.
▪ Ayudarnos a disfrutar lo que tenemos. El descontento destruye nuestra
capacidad de disfrutar lo que Dios nos ha dado, porque nuestra mirada estará en
lo que suponemos Dios debe darnos, no en lo que ya nos dio. Hebreos 13:5.

2. DIRECCIÓN: SALMO 37:7.


“Quédate quieto en la presencia del señor, y espera con paciencia a que él
actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera.”

▪ Aumentar nuestra fe y visión. Podemos estar seguros de que si Dios nos señala
una dirección clara, y lo confirma por medio de la palabra, El proveerá cualquier
cosa que sea necesaria para llevar a cabo esa instrucción. Fe también es
discernir qué es lo que Dios quiere lograr en y a través de nuestras vidas.
Hebreos 11:7.
▪ Determinar quién es el Señor de nuestra vida. Es fácil decir que es nuestro Señor,
esto se confirma cuando somos obedientes a los impulsos y limitaciones que El
impone a nuestras decisiones diarias. 1 Timoteo 6:17.
▪ Protegernos de cosas dañinas. Pareciera que no importa cuánto nos de Dios,
siempre queremos más, (Adán y Eva). 1 Timoteo 6:9.
▪ Enseñarnos paciencia. La paciencia es necesaria para la madurez espiritual, hay
que pasar por tribulaciones para alcanzarla. Santiago 1:3-4.
▪ Concentrarnos en la verdadera riqueza. A medida que Pablo maduraba su fe,
llegó a entender como lo temporal compite con lo eterno. Filipenses 3:7-8.

3. COMUNIÓN: ROMANOS 12:13.


“Compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la
hospitalidad.”

▪ Unir a los cristianos. En medio de la adversidad ayudar al necesitado para


complementarnos unos a otros. 2 Corintios 8:14.
▪ Manifestar lo que distingue al cristiano. Algo distintivo es el celo por las buenas
obras. Tito 2:14, 2 Corintios 9:8.

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▪ Iniciar acción de gracias. Dar para las necesidades de otros significa que estos
darán gracias a Dios, no solo se suplirá una necesidad, sino que se inicia un
derramamiento de gratitud para con Dios y el dador. 2 Corintios 9:11.
▪ Multiplicar nuestro potencial de dar. Dios compara el dar con la siembra de un
cultivo. 2 Corintios 9:6.

4. DEMOSTRACIÓN: MALAQUÍAS 3:10.


“y probadme ahora en esto, dice jehová de los ejércitos, si no os abriré las
ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que
sobreabunde.”

▪ Motivar al creyente a confiar en El. En los tiempos de Elías el pueblo de Israel


intento adorar a Dios y servir a Baal al mismo tiempo. 1 Reyes 18:21.
▪ Purificar nuestras vidas y motivaciones. Es de entender que para experimentar
la provisión divina debemos buscarle con un corazón puro y sin motivaciones
egoístas. Salmo 66:18.
▪ Traer al incrédulo a la salvación. Cuando el creyente tiene una relación correcta
con su Señor, quienes no lo son y observan los resultados de la provisión divina,
son atraídos a querer disfrutar lo mismo. Cuando Dios se manifiesta el incrédulo
se acerca. Hechos 5:12-14.
▪ Glorificar a Dios. Cuando su pueblo le alaba por lo que El hace. Podremos dar
testimonio de la respuesta a nuestras necesidades. Salmo 50:15.

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