Johanna Berenice Contreras Lugo

Grupo: L61 Matrícula: 1628061

30 de enero de 2019
Lectura de Crátilo
Me es difícil decantarme totalmente por una u otra de las posturas que se discuten
en Crátilo, principalmente porque los argumentos de Sócrates me hacen plantearme
numerosas dudas respecto a lo que él dice y lo que yo creo. Si bien no es de manera
completa, mi apoyo va hacia la forma en que Hermógenes asegura se asignan los
nombres, puesto que también creo que son los hombres los que asignan a los
objetos el nombre que ellos creen conveniente. Mi postura viene principalmente de
una lectura que hice hace algún tiempo de la Dialéctica de la ilustración de Theodore
Adorno y Max Horkheimer, en donde se toca el tema de la construcción social y
como las cosas tienen un nombre y un valor que es asignado por las personas, por
lo que una misma cosa puede tener distintos nombres.

Veo similitudes entre lo que afirma Hermógenes y lo que dicen Adorno y

Horkheimer, pues Sócrates dice también en Crátilo que son los legisladores y no los
hombres comunes los que designan el nombre de las cosas, por su sabiduría,
mientras que en la Dialéctica de la ilustración se dice que las personas u
organizaciones de alto poder, como el gobierno o la iglesia, son las que designan
los objetos y su valor, de manera que lo que han dicho estas figuras de influencia
en la sociedad es lo que es respetado como el verdadero nombre. No importa si
para una persona lo que vale para intercambiar por productos son las piedras, la
sociedad considera que es el dinero lo que tiene un valor, por lo que es con lo que
se negocia, si alguien comparte la creencia de las piedras y entre ellos realizan los
intercambios existe también una construcción social, mas no significa que el valor o
nombre asignado se convierta en el nombre real, por decirlo de alguna forma.

Sin embargo, la razón por la que no puedo decir que apoyo totalmente la postura
de Hermógenes, es que también veo razón en lo que afirma Crátilo, al considerar
que hay nombres que se asignan por la esencia de la persona u objeto, y que al
analizar el nombre tal y como lo hace Sócrates, se puede entender su función o en
el caso de una persona, lo que es y hace. A pesar de esto, considero que a lo que
se refieren Crátilo y Sócrates, es más bien a la etimología, y no que los nombres
hayan nacido por la naturaleza de un algo, sino que se busca una manera de
nombrar ese algo en base a sus características, y es el hombre el que decide cuáles
son las principales por las que debe ser nombrado.

Veo razón en ambas posturas, por lo que no puedo apoyar una por completo, al
contrario, creo que al considerar los argumentos de ambas y tomando en cuenta las
construcciones sociales, se puede dar otro punto de vista, que, de cierta manera,
considero representa Sócrates al dar sus opiniones y contradecir a los otros dos
personajes de la obra.