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MEJORA CONTINUA

La mejora continua, es una fuente fundamental de la industria y el desarrollo


empresarial, que intenta optimizar y aumentar la calidad de un producto, proceso o
servicio. Es mayormente aplicada de forma directa en empresas de manufactura,
debido en gran parte a la necesidad constante de minimizar costos de producción
obteniendo la misma o mejor calidad del producto, porque como se sabe, los
recursos económicos son limitados y en un mundo cada vez más competitivo a nivel
de costos, es necesario para una empresa manufacturera tener algún sistema que
le permita mejorar y optimizar continuamente.
La mejora continua no solo tiene sentido para una empresa de producción masiva,
sino que también en empresas que prestan servicios es perfectamente válida y
ventajosa principalmente porque si se cuenta con este tipo de sistema (al ser un
sistema, quiere decir que es algo establecido y conocido por todos en la empresa
donde se está aplicando) entonces tiene las siguientes características:

1. Un proceso documentado. Esto permite que todas las personas que son
partícipes de dicho proceso lo conozcan y todos lo apliquen de la misma
manera cada vez.
2. Algún tipo de sistema de medición que permita determinar si los resultados
esperados de cierto proceso se están logrando (indicadores de gestión).
3. Participación de todas o algunas personas relacionadas directamente con el
proceso.

Desde este punto de vista, una de las principales ventajas de tener un sistema
establecido de mejora continua es que todas las personas que participan en el
proceso tienen capacidad de opinar y proponer mejoras, lo que hace que se
identifiquen más con su trabajo y además se tiene la garantía que la fuente de
información es de primera mano ya que quien plantea el problema y propone la
mejora conoce el proceso y lo realiza todos los días.

Hay varias metodologías asociadas a este sistema; entre ellas están Lean
Manufacturing, Six Sigma, Kaizen, entre otras, pero se puede establecer que la
piedra angular de la mejora continua en cualquier ámbito de los procesos, productos
y/o servicios, es el llamado Círculo de Deming:
Este resume la manera de pensar y resolver problemas, que debe tener alguien que
sea parte de un proceso; de esta manera Planea (Plan) lo que va a hacer para
optimizar, Ejecuta (Do) paso a paso su estrategia, Verifica (Check) mediante
indicadores de gestión o medición de variables que se están obteniendo los
resultados esperados y Actúa (Act) de acuerdo a los valores de las mediciones que
está obteniendo para corregir o continuar por el mismo camino y empezar
nuevamente el ciclo ya sea para seguir mejorando o para lograr los objetivos
planteados en un principio.

En conclusión, la mejora continua es una forma de trabajar para hacer más


productivo y agradable el sitio de trabajo. Además tiene la gran ventaja de ayudar a
cada persona involucrada en el proceso, logrando hacer cada tarea de una manera
más simple y personal.

INGENIERÍA DE MÉTODOS

¿Qué es?

Es la implicación de procesos, útiles para la producción de productos en el menor


tiempo posible y reduciendo u optimizando los costos de su fabricación. Otros
nombres mediante los cuales se puede conocer a la Ingeniería de Métodos son
como Simplificación del Trabajo o Análisis de Operaciones.

La Ingeniería de Métodos es una de las ramas de la ingeniería que busca aumentar


la producción en una empresa, ya sea de un producto o de un servicio, esto debe
ser logrado de una manera eficiente; es de gran importancia ya que esta permite y
proporciona los métodos que son capaces de cuantificar la producción, de medirla
y de saber si es factible, cuánto dinero genera realizar una actividad económica, el
tiempo que tarda en producirse “algo”, y determinar la relación hombre – máquina.

Personajes como el famoso Harnold B. Maynard y sus respectivos asociados


definieron a la Ingeniería de Métodos algo así como una técnica que permite
simplificar procedimientos en la producción de “algo”, identificar que procesos son
necesarios y cuáles no, cómo se puede aumentar la cantidad de un producto sin
afectar la calidad y cuánto tiempo tarda dicho procedimiento.
Evolución de la Ingeniería de Métodos

La primera muestra de organización científica del trabajo data de tiempos de los


egipcios (~ 4000 a.c), en la que quedó patente su capacidad de organización en la
construcción de las pirámides. Algunos autores conceden a los egipcios el honor de
ser los más grandes “ingenieros de organización” de todos los tiempos.

Dando un salto en el tiempo, hacia 1240, Walter of Henley (Inglaterra) escribe un


tratado (Le Dite de Hosebondrie, en 1280) en el que aconseja a su hijo como vigilar
sus tierras, el ganado y sus trabajadores.

Luego en el periodo del renacimiento, Leonardo da Vinci (1452 - 1519), pintor,


escultor, narrador, músico, científico, matemático, arquitecto, ingeniero y en
definitiva un genio renacentista, destacó también en el área de organización del
trabajo. Estudió de manera sistemática las excavaciones de tierra con pala. Fue el
primer testimonio escrito sobre medición del trabajo a través de la descomposición
del trabajo en partes. Designó ciertas medidas de productividad, como el número
de palas de tierra transferida a la hora.

En 1760, un francés, Perronet, llevo a cabo amplios estudios de tiempo acerca de


la fabricación de alfileres comunes No. 6 hasta llegar al estándar de 494 piezas por
hora. Sesenta años más tarde, el economista Inglés Charles Babbage hizo estudios
del tiempo en relación con los alfileres comunes No. 11, y como resultado determinó
que una libra de alfileres debía fabricarse en 7.6892 horas.

Uno de los principales ponentes en la historia de la ingeniería de métodos y la


evolución de muchos de los procesos industriales es; Frederick Winslow Taylor
(1856 -1915), Ingeniero y economista Norteamericano.

Fue el primer promotor de la organización científica del trabajo. En 1878 efectuó sus
primeras observaciones sobre la industria del trabajo en la industria del acero. A
estas le siguieron una serie de estudios analíticos sobre tiempos de ejecución y
remuneración del trabajo. Sus principales puntos, fueron determinar científicamente
el trabajo estándar, crear una revolución mental y un trabajador funcional a través
de diversos conceptos que se intuyen a partir de un trabajo suyo publicado en 1903
llamado "Shop Management". Hoy en día, Taylor es considerado el padre de la
ingeniería industrial y de la ingeniería de métodos. Su trabajo sirvió de fundamento
principal para el desarrollo del estudio del tiempo y del movimiento, y el estudio del
trabajo.

Taylor empezó su trabajo en el estudio de tiempos en 1881 cuando laboraba en la


Midvale Steel Company de Filadelfia. Después de 12 años, desarrolló un sistema
basado en el concepto de tarea, en el cual proponía que la administración de una
empresa debía encargarse de planear el trabajo de cada empleado por lo menos
con un día de anticipación, y que cada hombre debía recibir instrucciones por escrito
que describiera su tarea en detalle y le indicaran además los medios que debía usar
para efectuarla.
Cada trabajo debía tener un tiempo estándar fijado después de que se hubieran
realizado los estudios de tiempo necesarios por expertos; en el proceso de la fijación
de tiempos, Taylor realizaba la división de la asignación del trabajo en pequeñas
porciones llamadas elementos.

En junio de 1895, Taylor presentó sus hallazgos y recomendaciones, y fueron


acogidos sin entusiasmo porque muchos de los ingenieros presentes interpretaron
su resultado como un nuevo sistema de trabajo a destajo y no como una técnica
para analizar el trabajo y mejorar los métodos.

Fue en Francia en el siglo XVIII, con los estudios realizados por Perronet acerca de
la fabricación de alfileres, cuando se inició el estudio de tiempos en la empresa,
aunque no fue sino hasta finales del siglo XIX, con las propuestas de Taylor que se
difundió y conoció esta técnica. El denominado padre de la administración científica
comenzó a estudiar los tiempos a comienzos de la década de los 80s del siglo XIX,
y desarrolló el concepto de la "tarea", en el que proponía que la administración se
debía encargar de la planeación del trabajo de cada uno de sus empleados y que
cada trabajo debía tener un estándar de tiempo basado en el trabajo de un operario
muy bien calificado. Después de un tiempo, fue el matrimonio Gilbreth el que,
basado en los estudios de Taylor, ampliara este trabajo y desarrollara el estudio de
movimientos, dividiendo el trabajo en 17 movimientos fundamentales llamados
Therblig (su apellido al revés).

Hay dos métodos básicos para realizar el estudio de tiempos: el continuo y el de


regresos a cero, en el método continuo, se deja correr el cronómetro mientras dura
el estudio; en esta técnica, el cronómetro se lee en el punto terminal de cada
elemento, mientras las manecillas están en movimiento, en caso de tener un
cronómetro electrónico, se puede proporcionar un valor numérico inmóvil.

En el método de regresos a cero, el cronómetro se lee a la terminación de cada


elemento, y luego se regresa a cero de inmediato. Al iniciarse el siguiente elemento,
el cronómetro parte de cero, el tiempo transcurrido se lee directamente en el
cronómetro al finalizar este elemento y se regresa a cero otra vez, y así
sucesivamente durante todo el estudio.

Con frecuencia, la manufactura es vista como el proceso de entrega de un artefacto


en respuesta a las necesidades de uno o más clientes. Dentro de esta visión de los
procesos de manufactura el diseño del producto juega un papel fundamental. Es
bien sabido que particularmente en procesos de manufactura pequeños, un
porcentaje predominante de los costos de manufactura de un producto se
establecen mediante decisiones que se toman en la fase de diseño de éste.

Esto implica que la mayor afectación de los costos de manufactura se realiza


durante el diseño del producto; por lo tanto, este costo depende directamente de la
capacidad de estimar costos y analizar las distintas opciones para el cada parte del
proceso. Dada su gran importancia en el desarrollo de los procesos de manufactura
y su y su incidencia en los costos de producción, el diseño de producto ha recibido
mucha atención, no sólo de las industrias sino también del ámbito académico, donde
se buscan nuevas estrategias para esta fase. Aunque hoy en día existe una gran
cantidad de métodos propuestos para el desarrollo de la fase de diseño de producto,
aún deja mucho que desear con respecto a la estimación y establecimiento de los
costos de producción. Típicamente los costos de producción se estiman como la
sumatoria de varios costos que inciden durante el proceso: costo de material, horas
de máquina, labor directa, administración y costos de ingeniería. Sin embargo, en
la fase de diseño de producto los encargados de esta estimación no siempre tienen
suficiente conocimiento en procesos de manufactura y el costo que éstos conllevan.
Este documento presenta distintas aproximaciones para el cálculo de costo de
proceso, así como un método pragmático de costeo de producto (Pragmatic Product
Costing PPC) y un caso de estudio donde se aplicó este método, con sus resultados,
discusiones y conclusiones.

CHARLES W. BABBAGE

Charles Babbage nace en Teignmounth, Gran Bretaña, el 26 de diciembre de 1791,


fue un brillante matemático y científico en el área de la informática, conocido por
inventar máquinas calculadoras programables.

En el año 1814 Charles Babbage obtuvo su diploma de licenciatura en la


Universidad de Cambridge y al año siguiente creó en compañía de J. Herschel la
Analytic Society con el propósito de mejorar la enseñanza de las matemáticas en el
Reino Unido. En 1816, fue nombrado miembro de la Royal Society y en 1829 dio
clases en la universidad de Cambridge.

Especialista en la teorías de funciones y el análisis algebraico, Charles Babbage se


enfocó en la creación de una máquina que pudiese realizar tablas matemáticas. Fue
así como en 1833 creó la “máquina diferencial” la cual permitía calcular logaritmos
e imprimirlos.

Al terminar la “máquina diferencial” dirigió sus esfuerzos a diseñar una máquina


analítica que procesara instrucciones aritméticas. En esta oportunidad contó con la
ayuda monetaria del gobierno inglés y con Ada Lovelance, quien sería la primera
programadora de la historia.

La máquina analítica de Charles Babbage

Uno de los inventos más destacados de Charles Babbage es la máquina analítica,


la cual diseñó entre los años 1833 y 1842. Este artefacto podía podría programar
cualquier tipo de cálculos. Su trabajo estuvo inspirado en el telar de Joseph Marie
Jacquard, el cual funcionaba con el uso de tarjetas perforadas para elaborar diseños
en el tejido. Charles Baggage diseñó la máquina analítica con dispositivos en los
cuales entraban tres tipos de tarjetas perforadas, un procesador aritmético para el
cálculo numérico, una unidad de control, y una memoria que almacenaba números
hasta ser procesados.

Muchos consideran la máquina analítica como el primer computador de la historia,


además, la máquina analítica tenía una parte que imprimía los resultados, la cual
se servía para varios tipos de tipografía. En este sentido, se podría decir que la
maquina analítica tenía incluido una impresora.

El prototipo de la máquina analítica contaba con las piezas de una computadora


moderna. Esta tenía memoria, dispositivos de entrada, unidad central de
procesamiento e impresora. Lamentablemente este prototipo nunca llegó a ser
construido en escala real, no contó con el presupuesto para construir la maquina
analítica ya que esta requería de muchas piezas y una gran cantidad de espacio,
además de estos elementos en contra, se le sumaba que para hacer funcionar la
máquina se requería la potencia de una locomotora. Por eso, muchos de sus
detractores apodaban a la maquina como, “La locura de Babbage”.

Otros de los aportes de Charles Babbage se vieron reflejados en:

- La creación de la Sociedad Analítica para promover el cálculo de Leibniz.


- La publicación Philosophical Transactions relacionada con el cálculo de
funciones.
- Sus estudios del comportamiento climático a través del estudio de los anillos
de los árboles de gran edad.
- Su participación como miembro activo de la Sociedad de Astronomía y de
Estadística, en las cuales aportó varias publicaciones científicas.

HENRY TOWNE

Towne fue un ingeniero mecánico y empresario estadounidense, conocido como


uno de los primeros sistematizadores de gestión; nació en Filadelfia en 1844, asistió
a la Universidad de Pennsylvania desde 1861 hasta 1862, donde fue miembro de
St. Anthony Hall, pero no completó un título. La universidad más tarde le otorgó una
maestría honoraria.

Como presidente de la compañía manufacturera Yale y Towne durante 48 años,


Towne actuó como instrumento directo en la implementación de nuevos métodos
administrativos en las plantas de su empresa. Los editores de Industrial
Management, The Engineering Magazine proponen a Towne como el incuestionable
pionero de la administración científica; afirman que ya en 1870 Towne iniciaba la
aplicación sistemática de métodos administrativos eficientes y que su conferencia
“El ingeniero como economista”, presentada ante la Sociedad Americana de
Ingenieros Mecánicos en 1886, probablemente inspiró a Frederick W. Taylor a
dedicar el trabajo de toda su vida a la administración científica.
Towne fue uno de los primeros ingenieros en ver la gestión como un nuevo rol social
para los ingenieros y que el desarrollo de técnicas de gestión era importante para el
desarrollo de la profesión de ingeniería. Expuso sus ideas sobre la función de
gestión del ingeniero en su conferencia "El ingeniero como economista". Fue elegido
Presidente de la ASME en 1888, y su discurso presidencial continuó abordando a
cómo mejorar la eficiencia de la tienda y los trabajadores.

HENRY GANTT

Gantt es otro de los grandes cooperadores, quienes trabajaron con Taylor. Allí
cambió el concepto de penalización al trabajador, propuesto por Taylor, por uno de
incentivo (mayor remuneración), premiándose también a su capataz, cuando el
rendimiento del obrero era superior al resto de su grupo. El 1917 desarrolló un
método gráfico sencillo para la planificación de las distintas actividades que se
deben realizar, para alcanzar un objetivo que ha sido previamente fijado hoy
conocido como “DIAGRAMA DE GANTT”.

Por último, merece igual reconocimiento los aportes realizados por Henry Ford
(1863-1947) con su idea de fabricación en proceso continuo, donde el artículo que
se fabrica recorre un itinerario establecido dentro de la planta, y los operarios, a lo
largo de este itinerario, van ejecutando una única y específica tarea sobre todos los
artículos que van transitando por su lugar de trabajo. Al final del recorrido tenemos
el artículo terminado con todos sus componentes incorporados. Este aporte
contribuyó, además de incrementar considerablemente el rendimiento de la
producción, a uniformizar la calidad de los artículos producidos con este nuevo
método, Ford contribuyó, además, extendiendo el concepto de estandarización de
Whitney hasta crear el comercio de repuestos para automóviles, dando origen a las
partes intercambiables o normalizados comunes hoy en día.

Aplicaciones de la Ingeniería Industrial

La ingeniería industrial, se interesa en incrementar la eficiencia de los procesos y


en disminuir los costos de lo que se produce u ofrece. Pero, para ello el ingeniero
industrial posee una serie de aplicaciones para la realización de su objetivo
fundamental antes descrito:

Estudios de Movimientos y Tiempos


Higiene y Seguridad Industrial
Control de Calidad
Control de Inventario
Distribución de Plantas y Manejo de Materiales
Ubicación de Plantas Industriales
Investigación de Operaciones
Estudios de Movimiento y Tiempo

Resulta lógico que los primeros pasos de esta rama naciente de la ingeniería hayan
sido dados dentro del área de métodos, movimientos y tiempos, puesto que esta
área de la ingeniería industrial es la que se relaciona más directamente con el
proceso productivo, para lo cual se requiere un conocimiento bastante profundo del
producto y de todas las operaciones necesarias para fabricarlo.

El estudio de movimiento y tiempos se efectúa para tener una mejor idea de la


cantidad de productos que se pueden producir y de la posibilidad de aumentar la
producción, claro está si la producción standard no corresponde a la producción
observada. Los estudios de movimientos y tiempos deben evaluar él porque del
incumplimiento de las metas fijadas, por ser el área más directa al proceso
productivo, permite reducir costos de producción, eliminar movimiento innecesario,
reducir el esfuerzo físico y por ende la fatiga. No perdiendo de vista su objetivo, que
podríamos resumirlo en una sola palabra optimización.

FREDERICK WINSLOW TAYLOR

Taylor, ingeniero norteamericano que ideó la organización científica del trabajo,


nacido en la ciudad de Germantown (Pennsylvania) en 1856 y muerto en Filadelfia
en 1915. Procedente de una familia acomodada, abandonó sus estudios
universitarios de Derecho por un problema en la vista y a partir de 1875 se dedicó
a trabajar como obrero en una de las empresas industriales siderúrgicas de
Filadelfia.

Su formación y su capacidad personal permitieron a Taylor pasar enseguida a dirigir


un taller de maquinaria, donde observó minuciosamente el trabajo de los obreros
que se encargaban de cortar los metales, fue de esa observación práctica de donde
Taylor extrajo la idea de analizar el trabajo, descomponiéndolo en tareas simples,
cronometrarlas estrictamente y exigir a los trabajadores la realización de las tareas
necesarias en el tiempo justo.

Este análisis del trabajo permitía, además, organizar las tareas de tal manera que
se redujeran al mínimo los tiempos muertos por desplazamientos del trabajador o
por cambios de actividad o de herramientas; y establecer un salario a destajo en
función del tiempo de producción estimado, salario que debía actuar como incentivo
para la intensificación del ritmo de trabajo.

Taylor se hizo ingeniero asistiendo a cursos nocturnos y, tras luchar personalmente


por imponer el nuevo método en su taller, pasó a trabajar de ingeniero jefe en una
gran compañía siderúrgica de Pennsylvania (la Bethlehem Steel Company) de 1898
a 1901.
Taylor se rodeó de un equipo con el que desarrolló sus métodos, completó sus
innovaciones organizativas con descubrimientos puramente y publicó varios libros
defendiendo la “organización científica del trabajo”.

La organización científica del trabajo o taylorismo se expandió por los Estados


Unidos desde finales del siglo XIX, auspiciada por los empresarios industriales, que
veían en ella la posibilidad de acrecentar su control sobre el proceso de trabajo, al
tiempo que elevaban la productividad y podían emplear a trabajadores no
cualificados en tareas manuales cada vez más simplificadas, mecánicas y
repetitivas.

Aportaciones de F. Taylor

Taylor desarrolla cinco principios de la administración los cuales le dan atribuciones


y responsabilidades a la gerencia, ellos son:

1. Principio de Planeamiento: sustituir el trabajo del improvisado del obrero, por


métodos basados en procedimientos.
2. Principio de Preparación: selección de los trabajadores de acuerdo con sus
aptitudes y habilidades para producir más y mejor.
3. Principio de Control: controlar el trabajo para verificar que el mismo se esté
ejecutando correctamente.
4. Principio de Ejecución: distribuir las atribuciones y responsabilidades para
que la ejecución del trabajo sea disciplinada.
5. Estudiar y Analizar el trabajo realizado por el obrero, es decir como lo hace.

El modelo de la administración científica de Taylor recibió una serie de críticas a lo


largo de la historia dentro de las principales críticas efectuadas en ese periodo se
pueden nombrar algunas:

- Mecanismo de la administración científica

La administración científica le dio atención al elemento humano, se preocupó por


las tareas, organización y ejecución, y a los factores directamente relacionados con
el cargo y función del operario, que sería el tiempo y el movimiento, A esta teoría se
le conoce como “teoría de la maquina”.

- Súper especialización del operario

En la búsqueda de la eficiencia, la administración científica preconizaba la


especialización del operario a través de la división de toda operación en sus
elementos constitutivos. Estas formas de organización de tareas no solo privan a
los trabajadores de satisfacción en el trabajo, si no lo que es peor, violan la dignidad
humana.

- Visión microscópica del hombre


La administración científica se refiere al hombre como un empleado tomado
individualmente, ignorando que el trabajador es un ser humano y social _
valorizando apenas la fatiga muscular e ignorando un tipo de fatiga más sutil que la
nerviosa. La fatiga era considerada exclusivamente un fenómeno muscular y
fisiológico, estudiado principalmente a través de los datos estadísticos.

Taylor consideró los recursos humanos y materiales no tanto recíprocamente


ajustables, sino sobre todo, al hombre trabajando como un apéndice de la
maquinaria industrial. En cuanto a este aspecto fue duramente criticado y tildado de
haber cometido un error como pionero.

- Ausencia de comprobación física

La administración científica es también criticada por el hecho de pretender elaborar


una ciencia sin presentar comprobaciones científicas de sus proposiciones y
principios. El método utilizado por Taylor es un método empírico y concreto donde
el conocimiento se alcanza por la evidencia y no por la abstracción: se basa en
datos aislados observables por el analista de tiempos y movimientos.

- Enfoque incompleto de la organización

Para muchos autores la administración científica es incompleta, parcial e inacabada,


por restringirse apenas a los aspectos formales de la organización omitiendo
completamente la organización informal y principalmente, los aspectos humanos de
la organización. También interacciones entre muchas variables críticas, como el
compromiso personal y la orientación profesional de los miembros de la
organización, el conflicto entre los objetivos individuales y los objetivos
organizacionales, etc.

- Limitación del campo de aplicación

Sus principios y métodos carecen de una complementación más amplia, pues Taylor
encara el problema de la organización racional del trabajo, partiendo de un punto
limitado y específico en la empresa, lo cual fatalmente limita y restringe su enfoque,
ya que no considera con mayor detalle los demás aspectos de la vida de una
empresa, tales como los financieros y comerciales, entre otros.

- Enfoque prescriptivo y normativo

La administración científica se caracteriza por la preocupación en establecer y


prescribir principios normativos que deben ser aplicados como una receta en
determinadas circunstancias, para que el administrador pueda tener éxito. Busca
estandarizar ciertas situaciones para poder patronear la manera como deberán ser
administradas. Es un enfoque dirigido a recetas anticipadas, a soluciones enlatadas
y a principios normativos que deben regir el cómo hacer las cosas dentro de las
organizaciones. Esa perspectiva muestra a la organización cómo debería funcionar,
en lugar de explicar su funcionamiento.

- Enfoque de sistema cerrado

Visualiza las empresas como si existieran en el vacío, o como si fuesen entidades


autónomas, absolutas y herméticamente cerradas a cualquier influencia venida de
fuera de ellas; se caracteriza por el hecho de visualizar solamente aquello que
sucede dentro de una organización, sin tener en cuenta el medio ambiente en que
está situada.

Es un enfoque de sistema cerrado y su comportamiento es mecánico, previsible y


determinístico: sus partes funcionan dentro de una lógica inmodificable. Sin
embargo las organizaciones nunca se comportan como sistemas cerrados y no
pueden reducirse a sólo algunas pocas variables o a algunos aspectos más
importantes.

REVOLUCIÓN INDUSTRIAL

Sin duda, el elemento clave o que dio origen a esta revolución fue la gran patente
de James Watt que propulsó un cambio profundo que dio alas a lo que
posteriormente sería llamada como Revolución Industrial. Se trataba de la máquina
de vapor, que se aplicó a la locomotora y de ahí se pasó a un avance tecnológico
sin precedentes.

Por otro lado, una sociedad más liberal fomentó el que se introdujeran nuevos
elementos que contribuyeran al avance industrial. Se necesitaba más carbón, se
generaba más energía, y se buscaba aumentar la productividad de los recursos
propios. La mente se había abierto a la economía y la eficiencia.

A ello contribuyó también la política expansionista de determinados países que hizo


que el capitalismo se expandiera por el mundo. Adam Smith fue el pionero de este
librecambismo, bajo la idea de que esa libertad influiría en el desarrollo de una
nación pero también influyó el país en el que se originó.

Es por ello que se puede decir que antes de ver con detalle todas las etapas de la
revolución industrial, cabe añadir que es realmente importante que esta arrancara
o se produjera en Gran Bretaña. Pocos libros de historia explican esto pero lo cierto
es que la revolución industrial fue posible debido a la existencia de una monarquía
liberal y no absolutista, que consiguió evitar el panorama de revoluciones que en
aquella época se extendían en otros países. Gran Bretaña estaba libre de guerras,
y aunque estuvo involucrada en algunas, no se desarrollaron en su territorio de
modo que pudieron ser el escenario en el que se gestó una revolución que tenía
que ver con la industria y no con la guerra.

La primera gran etapa de la Revolución Industrial fue la que se desarrolló entre los
años 1760 y 1870. Fue un periodo marcado por los continuos inventos. En el año
1800, Volta inventaría la pila eléctrica. Stephenson inventó la primera locomotora
de vapor en el año 1814. En 1825 se inauguró la primera línea de pasajeros.

En 1834 fue Richard Roberts el que ideó el telar y la máquina de hilar. En 1837,
Morse inventa el telégrafo y se da el primer gran impulso a las comunicaciones. En
1863 se inaugura el primer sistema de metro del mundo en Londres. En 1868 se
lanza el primer ferrocarril transcontinental.
Pero al mismo tiempo, la sociedad comenzó a profundas transformaciones
marcadas por hechos que conducían a la implantación de unas ideas mucho más
modernas y liberales. La Revolución Francesa fue fundamental para que esas ideas
se propagaran por Europa.

Pero también la victoria de los ingleses en la Batalla de Trafalgar sirvió en cierto


modo para fomentar el auge de la Revolución Industrial. Lo que a simple vista
parecería una catástrofe para franceses y para la Revolución Industrial española,
hizo que Gran Bretaña, la gran propulsora de la Revolución, se hiciera con el
dominio del mar en el Mediterráneo. Se abrieron así las vías para un comercio global
y al mismo tiempo los canales necesarios como para que las ideas librecambistas
que tanto se defendían en Inglaterra llegaran aún más lejos.

Cambios sociales que trajo la Revolución Industrial

Este proceso también tuvo sus puntos negros, resaltando especialmente el caso de
la explotación laboral. Sin embargo, la Revolución Industrial cambió de manera
radical la sociedad de la época y modificó totalmente las formas de vida de la
mayoría de la población en muchos aspectos, siendo totalmente imposible explicar
el devenir de la sociedad actual sin tener en cuenta los procesos derivados del
avance de la Revolución Industrial.

En primer lugar, el aumento de las fábricas y su necesidad de disponer de mano de


obra supuso que miles de personas dejaran las actividades que habían llevado a
cabo durante generaciones en los campos y fueran a la ciudad en busca de una
vida mejor. Antes de la llegada de la Revolución Industrial, generalmente la
producción manufacturera estaba a cargo de los gremios, asociaciones cerradas
que ejercían un férreo control sobre los productos y las personas que los producían,
haciendo imposible una producción libre en la que cualquier persona que así lo
deseara pudiera participar. Además de los gremios, en territorios donde el comercio
era muy importante, como Inglaterra u Holanda, se había popularizado un sistema
por el cual un empresario daba materias primas a algunas familias campesinas por
un dinero para que realizaran una parte del trabajo de producción y luego se llevaba
el producto para terminarlo de fabricar en otro lugar. Este proceso, bastante
extendido en el ámbito de la producción de tejidos, no dejó de ser una actividad
residual y eventual en los años previos a la Revolución Industrial, por lo que la
mayoría de la población subsistía trabajando en la agricultura o la ganadería,
actividades que apenas daban para sobrevivir.

La proliferación de las fábricas dio a muchas personas la posibilidad de optar por


una nueva ocupación que, aunque enormemente dura, podía proporcionarles un
jornal fijo con el que mantenerse, algo que las actividades agrícolas y ganaderas,
siendo también enormemente duras, no estaba en condiciones de asegurarles,
sobre todo en épocas de hambrunas o cuando los problemas meteorológicos hacían
mella en la cosecha.

Por lo tanto, la Revolución Industrial supuso el primer gran éxodo masivo del campo
a la ciudad. Las principales urbes que se beneficiaron de la Revolución Industrial
multiplicaron su población en muy poco tiempo, algo para lo que no estaban
preparadas, por lo que las condiciones de vida de los trabajadores que llegaban a
ella eran enormemente pobres. El hacinamiento, salubridad y limpieza se hicieron
constantes, las enfermedades y los problemas de todo tipo hicieron rápida enfoque
en una población desnutrida que trabajaba hasta la extenuación. Pero, además,
también hay que remarcar que las ciudades y los gobiernos también se tuvieron que
adaptar a este crecimiento desmedido y fue entonces cuando se empezaron a
popularizar los sistemas de limpieza públicos y se instauraron normativas
relacionadas con la salud pública y la construcción que fueron las bases de las
legislaciones modernas para esos ámbitos, aspectos en los que anteriormente no
se había reparado al no ser necesarios.

Además, la industrialización también mejoró la vida de la sociedad en general. La


mejora de las carreteras y la popularización de medios de transporte cada vez más
rápidos y efectivos también permitieron que llegasen a la ciudad más alimentos en
menos tiempo, lo que mejoró la calidad de vida de las personas que vivían allí. Por
otro lado, la disminución en los costos de producción permitió el acceso de mucha
más gente a productos que anteriormente solo se podían permitir a los más ricos,
entre ellos productos de primera necesidad como la ropa o el calzado. Además, el
avance de la industria del papel llevó también a la popularización de la prensa
escrita y a la aparición de libros más pequeños a precios reducidos que podían ser
adquiridos por la inmensa mayoría de la población.
Por último, la Revolución Industrial, a través de todas las mejoras que trajo consigo,
hizo aumentar la esperanza de vida de la población en general y, pese a las
condiciones de vida a las que tuvieron que enfrentarse los primeros trabajadores de
esas fábricas, la calidad de vida mejoró enormemente con el paso del tiempo
gracias a los avances industriales y a las medidas de protección y salubridad que
se fueron imponiendo con el paso del tiempo.

DEFINICIÓN DE SISTEMA Y DE ENFOQUE DE SISTEMA

Sistema

Un sistema es "un objeto complejo cuyas partes o componentes se relacionan con


al menos alguno de los demás componentes", puede ser material o conceptual.
Todos los sistemas tienen composición, estructura y entorno, pero solo los sistemas
materiales tienen mecanismos (o procesos), y solo algunos sistemas materiales
tienen figura (forma).

Cuando se habla de sistema(s), se puede hablar también del sistemismo, el cual es


una corriente filosófica desarrollada por el epistemólogo argentino Mario Bunge que
establece que todo es un sistema o un componente de un sistema.

Para Bunge todas las ciencias, salvo la física, estudian sistemas de alguna clase, la
biología estudia bio-sistemas, la sociología socio-sistemas y la tecnología tecno-
sistemas.

La concepción sistemista de Mario Bunge, si bien divisible en 10 tipos de


sistemismo, tiene dos aspectos principales, uno ontológico y otro gnoseológico.

Aspectos ontológicos

El sistemismo ontológico que Bunge defiende y postula que el mundo es un sistema


de sistemas, es decir que toda cosa concreta es un sistema o un componente de
algún sistema. Un sistema es, en efecto, un objeto complejo estructurado, cuyas
partes están relacionadas entre sí por medio de vínculos pertenecientes a un nivel
determinado. Además, los sistemas se caracterizan por poseer propiedades
globales que sus partes componentes no poseen.

Por ejemplo, en el nivel micro físico, un átomo es un sistema compuesto por


protones, neutrones y electrones vinculados por fuerzas físicas. Una sociedad
humana, en cambio, es un sistema compuesto por personas y diversos subsistemas
sociales unidos entre sí por vínculos de varios tipos: biológicos, políticos,
económicos, etc.

Sin embargo, Bunge reconoce que los sistemas físicos son los únicos que pueden
estar compuestos por cosas que no son sistemas, tales como partículas
elementales. Aun así, las cosas que no constituyen sistemas son componentes de
alguno y todo sistema (con excepción del universo) es un subsistema de un sistema,
de ahí que no incluya a la física dentro de las ciencias que estudian sistemas de
alguna clase.

Para Bunge, la cosmología sistémica es una especie de síntesis de paradigmas


cosmológicos como el holismo, el jerarquismo, el tychismo, el dinamismo, la
dialéctica, el atomismo y el mecanicismo.

Aspectos gnoseológicos

Al poseer la gnoseología sistémica raíces ontológicas, no se desarrolla


independiente de su ontología. Gnoseológicamente, el sistemismo exige que,
puesto que el mundo es un sistema, el conocimiento de él también debe serlo; exige,
además, la combinación de las estrategias top-down o microrreductiva y bottom-
down o macrorreductiva, debido a que al estar las totalidades constituidas por
componentes que interactúan entre sí el comportamiento de cada uno de estos
últimos sólo puede ser comprendido en relación con los otros y su contribución a la
totalidad.

Enfoque de Sistema

El enfoque sistémico es, sobre todo, una combinación de filosofía y de metodología


general, engranada a una función de planeación y diseño. El análisis de sistema se
basa en la metodología interdisciplinaria que integra técnicas y conocimientos de
diversos campos fundamentalmente a la hora de planificar y diseñar sistemas
complejos y voluminosos que realizan funciones específicas.

Las principales características del Enfoque de Sistemas son:

 Interdisciplinario
 Cualitativo y Cuantitativo a la vez
 Organizado
 Creativo
 Teórico
 Empírico
 Pragmático

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