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ISSN: 1870-4115
pueblosyfronteras@correo.unam.mx
Universidad Nacional Autónoma de México
México
RESUMEN
En este texto se abordan algunas de las problemáticas en el acceso, por parte de los usuarios, a los cuidados
en prevención/atención/control de VIH-sida del consultorio médico del Servicio de Atención Integral (SAI),
perteneciente a una clínica de la Secretaría de Salud en San Cristóbal de Las Casas (Chiapas). En particular
aquellas vinculadas con la discriminación, y concretamente la relacionada con la orientación sexual y el
itinerario socio/cultural del usuario del SAI, en la relación médico-paciente-institución. Para ello analizo
las representaciones de los médicos del consultorio con respecto a las prácticas sexuales (y preventivas de
VIH-sida) y a los modelos explicativos del trinomio salud/enfermedad/atención de los sujetos y colectivos
destinatarios, y las praxis de cuidados en dicho consultorio.
ABSTRACT
This text addresses some problems regarding access by users to HIV-AIDS prevention/care/control
services at the medical office of Servicio de Atención Integral (SAI by its acronym in Spanish), pertaining
to a Mexican Health Department clinic in San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. It specifically focuses
on discrimination-related issues, concretely regarding the user’s sexual orientation and socio-cultural
trajectory through SAI, as well as the doctor-patient-institution relationship. The representations of the
clinic’s doctors regarding sexual and HIV-AIDS preventive practices as well as the explicatory models of
the health/disease/care triad of the subjects and collective recipients, and the clinic’s health care praxis are
analyzed.
ISSN 1870-4115
junio 2014-noviembre 2014 • pp. 95-115 volumen 9 • número 17
PROIMMSE
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Esta clasificación podemos articularla, en este al concepto de persona autóctona (de San Cristóbal
caso específico, con la correspondencia entre crite- de Las Casas), preservado por un cierto aislamiento
rios de clasificación de tipo médico y social enun- geográfico característico (desde esta representación)
ciada, en el contexto español, desde los hallazgos de de la ciudad, ahora amenazada por los riesgos, en
Fernández-Rufete (2000): este caso relativos a la salud sexual, que implican
los extranjeros y sus transgresiones en forma de
Principios de clasificación Principios de clasificación conductas y referentes nuevos encarnados simbóli-
médica basados en vías de social basados en vías de camente, en sus cuerpos foráneos alterizados, como
transmisión del VIH-sida transmisión del VIH-sida
una potencialidad portadora de ITS.
Contagio por práctica Anormalidad, perversión, des-
homosexual viación, prácticas no naturales
Le dije que tuve relaciones con un extranjero. Que es-
Contagio heterosexual Promiscuidad, irresponsabili- tuve con él dos semanas de relación y tuvimos tres ve-
dad, victimismo
ces relaciones… pero que no nos protegimos. Después
Contagio vía transmisión sanguí- Victimismo e inocencia me enteré de que andaba con otras personas, pero que
nea (hemofilia y transfusiones) tenía esa duda de que tal vez me pudo contagiar de al-
guna enfermedad, por ejemplo el sida que es muy fre-
cuente en muchas personas. Y él (el médico del SAI )
Por otra parte, existe un vector en las representa- me dijo con tono muy serio: en estas fechas no hay que
ciones del médico con respecto al origen de la per- confiarse porque el sida se extiende por todo el mundo
sona, autóctona o extranjera, vinculada con el riesgo y más si es extranjero. Me sentí regañada incluso por
potencial de ser portador del VIH-sida:47 su seriedad. Le dije, bueno, por eso vengo... (Paciente
Extranjero/migrante: promiscuo, liberal, prácticas simulada, 28 años, 2012).
sexuales inseguras, consumo de alcohol y drogas.
Autóctono/sedentario: conservador, monógamo o Creo interesante problematizar algunas de las
polígamo dentro de un margen de seguridad que re- consideraciones dominantes con respecto a la con-
mite a las restringidas redes de contacto en cuanto al cepción del modo de adquisición mayoritario: en
número y al imaginario de la seguridad geográfica este caso la transmisión por vía sexual. Un ejem-
endogámica, del compañero/a sexual, si se compara plo que visibiliza la indefinición de la modalidad de
con el extranjero/migrante. Menos consumo de dro- transmisión es el de aquellas personas, portadoras de
gas y alcohol. VIH-sida, que, por ejemplo, han sido transfundidas
Autóctono/migrante: conservador influido por en una operación y son consideradas población vul-
las prácticas, ideas y referentes de otros lugares. nerable y/o con conductas «de riesgo» (entre otras
Especialmente en el caso de los indígenas,48 bajo la los hombres que tienen sexo con hombres). Frente
amenaza de experimentar dicha novedad desde con- a la imposibilidad de establecer un criterio diag-
ductas «de riesgo» (trabajo sexual, drogas, alcohol, nóstico en cuanto a la modalidad de la transmisión
etcétera). prevalece, en el médico, un juicio de valor que, en
En este sentido, cabe resaltar la concepción de una comparativa de los factores incidentes (no solo
seguridad geográfica endogámica, la cual se aplica de tipo científico sino de tipo valorativo moral) se
al imaginario, desde muchos médicos, sobre las po- decantará por aquel factor explicativo que le parezca
blaciones indígenas,49 y se replica, de forma análoga más sensato en un campo de dos posibilidades: a) el,
supuesto, control actual de la existencia de agentes
patógenos en el plasma sanguíneo con el que se rea-
47
Estas categorías se cruzan con las mencionadas anterior-
mente, especialmente en lo referente a la orientación y práctica
lizan las transfusiones y la hipotética, y remota bajo
sexual, dando lugar a variables identificadoras de la probabili- este prisma, posibilidad de adquisición por esta vía.
dad de ser portador, así como a la mayor o menor exoneración b) Las conductas «de riesgo» de los hombres que tie-
del paciente. nen sexo con hombres (sexo anal principalmente), y
48
Aquí me refiero a aquellos que viven en sus comunidades
de origen y migran a San Cristóbal de Las Casas u otros lugares
en México o el extranjero.
49
Pese a que se pueda admitir la poligamia, la promiscui- culpabilizante (por medio de la apelación al argumento de la
dad… e incluso se vincule, desde ciertos discursos dominantes, cultura, la psicología específica o las condiciones sociales), de
a la violencia y a la idea, racista en este uso generalizador y depravación, abuso sexual dentro de la familia, maltrato, etc.
Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 105 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115
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nuevos patrones y referentes conviviendo con aque- índole socio/cultural, que tratan de explicar, si no
llos ya existentes. La lejanía o cercanía con San justificar, el hecho de que los pacientes indígenas se
Cristóbal también parece ser una variable que incide apegan menos a la consulta opera bajo la articula-
en las representaciones de los médicos en cuanto a ción de un discurso culpabilizador en una suerte de
la mayor o menor apertura a ciertas conductas se- reajuste a dos tiempos: a priori, facilitador de una
xuales, especialmente de los jóvenes, así como en el cita según la confiabilidad supuesta del paciente (va
recurso a los médicos alópatas, al atribuir a los pa- a cumplir con ella), o a posteriori, probablemente
cientes «menos rurales» más conocimiento y acceso fue su irresponsabilidad la falla virológica y si no lo
a personas que les recomiendan acudir a ellos. fue la estigmatización étnica ofrece una explicación
Los mecanismos, mencionados con anterioridad, coherente, para el representante del sistema de cui-
de culpabilización del paciente, frente a una falla dados de salud y este en su conjunto, por medio de
terapéutica,56 alegando que no tomó bien sus medi- una forma de violencia simbólica y estructural que
camentos cuando lo que sucedió es que no estaban invisibiliza su origen (y modalidad operativa, el ra-
disponibles, no se dan por igual en aquellos mestizos cismo) para ser más eficaz en su praxis. El culpable
e indígenas, tal y como he podido constatar en di- aquí no es tanto el individuo y sus conductas sino
versos testimonios. La sospecha de la toma desigual las colectividades minoritarias que hacen un uso in-
de los medicamentos, unida a las representaciones adecuado de los medicamentos y servicios que se les
y los estereotipos mencionados anteriormente y a la proporciona (en detrimento de los demás). En este
supuesta menor capacidad de protesta (al encontrar- tenor, naturalizando dicha violencia, el mecanismo
se en una posición subordinada como miembro de de autoestigmatización, por el origen étnico, opera
un grupo social minoritario), facilita un chivo ex- en la incorporación de una subordinación interiori-
piatorio «más accesible» frente a dificultades de otro zada que, en los campos sociales en los que se asu-
tipo como son la falta de recursos, o la selección, me una alterización como miembro de una minoría
en su ausencia, entre unos y otros pacientes, para su en la interacción (como es el de las instituciones de
distribución.57 Los problemas reales o supuestos, de salud), ejerce de explicación hegemónica sobre las
conductas y exclusión sufrida. Como menciona una
56
El concepto de falla terapéutica suele aplicarse a tres es- de las pacientes simuladas con respecto a su entrada
cenarios: la falla virológica, inmunológica y clínica. Para más
información sobre la falla terapéutica ver Vélez et al. (2005),
en la clínica: «Esta vez me trataron bien porque iba
así como acerca de la falla terapéutica múltiple al tratamiento vestida con mi ropa buena, no con la de Chamula
ARV y los esquemas de rescate me remito a Secretaría de Salud, (como en otras ocasiones). Creo que fue por eso»
CENSIDA (2012). (paciente simulada, 28 años, 2012).
57
El único laboratorio existente que realiza la prueba de car- Según he podido recoger en los diversos testimo-
ga viral y CD4 a los pacientes que viven con VIH-sida, perte-
necientes a la Secretaría de Salud, en Los Altos de Chiapas se nios de médicos y pacientes (que acuden al consul-
encuentra ubicado en Tuxtla Gutiérrez. Dichos controles, que torio del SAI) el tipo de información y el modo de
deben realizarse cada 3-4 meses, son muy útiles para valorar el transmitirla se selecciona en función del origen del
apego al tratamiento, y la eficacia del mismo, ya que dependien- paciente tras evaluar si va a entender, mejor o peor,
do de los niveles, virales, identificados se determina si han falla-
do los medicamentos (fallo terapéutico) y es necesario cambiar
el español, así como a compartir o no los mismos,
a otro esquema o mantener el mismo. A finales del 2011 (entre o semejantes, modelos explicativos del proceso sa-
noviembre y diciembre) se notificó a la consulta una orden de lud/enfermedad/atención capitalizando los términos
cierre del laboratorio que duró aproximadamente un mes, du- médicos relativos al diagnóstico, seguimiento y con-
rante el cual no se pudo enviar a ningún paciente a control. Al trol de la enfermedad. En el caso de los pacientes
momento de la reapertura se notificó una reducción de pruebas
de CD4 debido a un recorte presupuestario. Ello implicó que, a indígenas o bien el médico explica técnicamente, de
partir de entonces, se debían enviar de 20 a 6 pacientes por mes la misma manera que con los no indígenas hispano-
(siendo seis el número estipulado como máximo). La solución, hablantes, sin realizar un esfuerzo para traducir lin-
por parte del médico, ha sido tratar de identificar a los pacientes güística y/o culturalmente términos relativos a, por
con mayor necesidad de seguimiento para ajustarse al criterio,
viéndose obligado a abandonar el protocolo de actuación que
ejemplo, el virus de la inmunodeficiencia adquirida,
exige un control, de este tipo, por paciente cada 3-4 meses. Por el examen de carga viral o de CD4, o la explicación
otra parte, los medicamentos ARV, correspondientes a ciertos
esquemas, no han estado disponibles en alguna ocasión, debido nistración desde el CAPASIT de Tuxtla, ocasionando que el pa-
tanto al desabasto como a problemas burocráticos en su admi- ciente tuviese que irse sin su tratamiento.
Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 109 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115
Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 110 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115
o tres veces al mes, en ciertos actos y ceremonias. to, en sus efectos curativos, principalmente), para
Pese a confiar en la eficacia del tratamiento ARV y luego, tras la constatación de su fracaso, acudir a la
desear tomarlo esta era la razón por la que dudaba biomedicina. En el caso de recurrir a ello mientras
si comenzar o no a utilizarlos. Al preguntar sobre toman el tratamiento ARV suelen abandonarlo por
ello, explica, no le supieron contestar en la clínica incompatibilidad entre ambos: «los pacientes indí-
de la cabecera municipal ni en el SAI, de la clínica genas acuden generalmente a los brujos […] escu-
I, y se quedó con la duda. El epidemiólogo que me ché el caso de uno que incluso dice que cura el sida
acompañó a la entrevista le estuvo explicando que […] Existen un tipo de terapias con imanes a la que
no se convertía en veneno, sino que el efecto del me- acuden, entre otras terapias alternativas. En un caso
dicamento se neutralizaba con la ingesta de alcohol, de un paciente le dijeron que le iban a curar y que
pero que lo importante sería que lo tomara todos los suspendiese el tratamiento, biomédico, ya que podía
días y, le sugirió, que preguntase en el consultorio matarlo» (Médico en el consultorio del SAI, 2012).
del SAI acerca de ello en función de las veces que Dicha representación instaura una marcada dife-
iba a consumir alcohol. Esta entrevista, al igual que rencia con respecto a los pacientes mestizos quienes,
otras, tuvo la característica de ser una capacitación desde su punto de vista, acudirán a otras modalida-
sobre las dudas que tenía el entrevistado acerca del des de atención, o recurren a la autoatención de for-
VIH-sida, su transmisión y su atención/control médi- ma, por lo general, incluyente (por ejemplo, pueden
co. El paciente nos preguntó si había medicamentos tomar los medicamentos ARV y acudir a ritos de
que pudieran curar la enfermedad (refiriéndose, pos- sanación en su iglesia, al mismo tiempo...), ya que
teriormente, a si en España, mi país natal, eran mejo- tratarán de hacer frente a la enfermedad, como suje-
res que en México),60 así como si el VIH-sida existía tos conocedores, con todos los recursos posibles. La
en otras partes del mundo y en qué proporción. A su no exclusión y la apertura, cuando existe una infor-
vez dudaba de si podía tomar vitaminas y remedios mación y una mediación efectiva, entre los recursos
de medicina tradicional, a base de plantas, a la par terapéuticos de ambos universos de cuidados ha sido
que los medicamentos ARV. Una discusión que se ha manifestada, en las entrevistas y charlas informales,
planteado en las entrevistas con varios pacientes es por varios pacientes indígenas. Sin embargo, una
el recurso a los iloles, y a los remedios terapéuticos variable en este sentido que parece incidir es que
de la fitoterapia, para la cura del VIH-sida. La discu- sucede, mayoritariamente, con personas que se en-
sión entre medicina tradicional y medicina alopática cuentran en fase no asintomática de la enfermedad.
suele ser percibida por los médicos que he podido En un caso en particular en el que acudimos a vi-
entrevistar como una confrontación que perjudica la sitar a un paciente (adolescente) que, según le ha-
adherencia al tratamiento con medicamentos ARV. bían comentado los médicos de la comunidad al epi-
En el caso del VIH-sida, al ser una enfermedad cróni- demiólogo, no quería tomar el medicamento ARV, la
ca y asintomática en ciertos estadios, la percepción madre (acompañada de la promotora de salud) nos
de la eficacia del tratamiento es problemática y guar- mencionaba que tomaba remedios a base de plantas
da, si cabe, una mayor relación casi con un acto de fe para la enfermedad (el VIH-sida), y los medicamen-
que en las enfermedades en las que se puede consta- tos contra la tuberculosis suministrados por la clí-
tar la curación y atribuirla al tratamiento. nica. Un yerbero de San Cristóbal le proporcionaba
En este tenor, la concepción del pluralismo asis- el medicamento, el cual era traído desde Comitán.
tencial y de las trayectorias de búsqueda de atención Me sorprendió el hecho de que tomase los medi-
que tienen algunos de estos médicos, con respecto a camentos antituberculosos junto con el tratamiento
los pacientes indígenas, es que el recurso a los cura- derivado de la fitoterapia para el VIH, y sin embargo
dores tradicionales, y otras terapias alternativas a la no pudiera compatibilizarlo con los ARV. Tuvimos
biomédica, es el primero utilizado, por razones cul- una discusión acerca de la incompatibilidad de los
turales (bajo este nombre apelan a la mayor creen- medicamentos con las hierbas en la cual la madre
cia, fundada en la ignorancia y el desconocimien- comentaba que no se podían, según el yerbero, to-
mar mientras se utilizaba este remedio, que duraría
60
Lo cual me ha sucedido en otras ocasiones, con respecto aproximadamente tres semanas (ya había tomado el
a aspectos como la actualización de conocimientos respecto al primer ciclo, pero le quedaba el segundo y último).
VIH-sida, también con médicos.
Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 111 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115
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Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 114 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115
Revista Pueblos y fronteras digital • volumen 9/número 17 115 junio 2014-noviembre 2014 • ISSN 1870-4115