“LLAMADA A UN DESTINO”

“Porque si callas absolutamente en este tiempo, respiro y liberación vendrá de

alguna otra parte para los judíos; mas tú y la casa de tu padre pereceréis. ¿Y quién
sabe si para esta hora has llegado al reino?” (Ester 4:14)

Ester, era una huérfana, judía, una mujer prácticamente insignificante, criada por su
tío Mardoqueo. Quién se convierte en la esposa oficial del rey Asuero. Amán, la
segunda figura del reino, quería la destrucción de los judíos y trata de manipular al
rey para que se decrete su ejecución. Dios utilizo a Ester para salvar a su pueblo.
Ester arriesgó su vida por amor a su pueblo acercándose al rey sin haber sido
llamada.
Dios define el destino de cualquier persona que guarda sus prioridades divinas.
Quiero decirte que Dios te ha llamado con un propósito, has sido llamada a un
destino maravilloso que Dios tiene preparado para ti. ¿Cómo cumplir con el
propósito de Dios?:
1. Ser obedientes: La reina Ester vivió en total sumisión obedeciendo a las
autoridades que Dios había colocado por encima de ella. El que me ama,
obedecerá mi palabra, y mi Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en
él. (Juan 14:23 NVI )
2. Prepararnos Espiritualmente: antes que Ester se presentara ante el rey
convoco al pueblo en ayuno de 3 días, para cumplir el propósito de Dios
debemos prepararnos espiritualmente ya que en nuestras vidas pueden
haber luchas constantes que pueden desviarnos de ese llamado que Dios
tiene preparado para nosotros. “porque las armas de nuestra milicia no son
carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,” (2
Corintios 10:4)
3. Debes tener paciencia: así como Ester tuvo paciencia para esperar el
momento en que Dios le pediría salvar a su pueblo presentarse ante el rey
sin ser llamada y denunciar a Aman. Dios te mostrará su gloria, sus
bendiciones todo lo que Él tiene preparado para ti, pero tienes que
comprender la importancia de esperar el tiempo de Dios. “Vestíos, pues,
 como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de
benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;” (Colosenses
3:12)

Debemos estar dispuestas a responder al llamado de Dios. Pueda que no

entendamos ahora lo que Dios muchas veces tiene preparado para nuestras vidas,
en cada aspecto que Él nos posicionará, vendrá un momento donde nos demos
cuenta de por qué hemos pasado ciertas experiencias en el transcurso de nuestra
vida, conocido determinadas personas, realizado determinadas actividades etc,
Dios tiene el control absoluto de nuestras vidas llegará ese momento donde todo
encajará, veremos hacia atrás y nos vamos a dar cuenta que nosotras también
estábamos en el lugar adecuado, así como sucedió con Ester. "Y sabemos que a
los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme
a su propósito son llamados". (Romanos 8:28)

¡Fuiste llamada a un destino!