LECCIÓN 19. La ciudadanía de la Unión.

1. Consideraciones generales.

Los ciudadanos europeos podemos ser considerados como una piedra angular de las normas
europeas y de sus políticas. Sin embargo, hemos recorrido un largo camino para que se nos
tenga en cuenta y todavía queda bastante camino por recorrer.

El proceso de integración se construye sobre un objetivo de integración económica, en

consecuencia, el estatuto de la persona quedaba subordinado al aspecto económico, es decir
los derechos y obligaciones solo operaban cuando se realizaban actividades en el ámbito
económico. Esto es que se considera al ciudadano en cuanto haga una operación económica.

Esta situación va a cambiar a través de una creación de la ciudadanía europea, la ciudadanía de

la unión. Este es un concepto no económico donde las personas van a ocupar un papel central
en el proceso de integración europea.

Los orígenes de este concepto se sitúan en el parlamento en la década de los 80, donde se
propone crear una ciudadanía de la UE presentando el proyecto spinelli, que es el proyecto de
la UE. El proyecto contenía la intención de crear una ciudadanía de la unión, sin embargo, el
proyecto no fue aceptado. Aun con todo, los estados eran conscientes de la separación existente
en aquel entonces entre los estados miembro y las personas, por lo que ese mismo año se
empiezan a aproximar a la idea de unión europea. Para ello, los jefes de estado se reúnen en
Francia y plantean la creación de una identidad europea para acercar las comunidades a las
personas. Con esa finalidad, se empiezan a adoptar varios instrumentos simbólicos como el
himno común, el 9 de mayo como día de Europa, una bandera común, el pasaporte único,
permiso de conducir unificado o las señalizaciones comunes entre fronteras. Una serie de
instrumentos que tienen carácter simbólico, pues trata de visibilizar el proceso de integración
ciudadana, instrumentos que se quedan ahí, en ese plano visual, porque no aportan derechos
especiales, concretos.

En los 90 se da un paso decisivo, con anterioridad al tratado de Maastricht, concretamente en

su preparación, cuando España presento una propuesta preparatoria del tratado de la unión:
“hacia una ciudadanía europea”. Esta propuesta no fracasó, sino que fue asumida por la
comisión y finalmente, tras adoptar el tratado de la unión se incorporó su contenido en el
preámbulo del tratado de la unión y en el art.2 como uno de los objetivos de la unión, como un
objetivo de integración. Los derechos concretos se introducen en el tratado de la comunidad
europea a partir del arrt.20, convirtiéndose en objetivos finalistas y no económico.

Actualmente la ciudadanía se regula en el TFUE art.20 párrafo 1: se crea una ciudadanía de la

unión será ciudadano de la unión toda persona que ostente la nacionalidad de un estado
miembro automáticamente. A partir de aquí hay que destacar el ámbito de aplicación personal
y el de aplicación material, es decir, los derechos concretos que contiene.

a) ámbito de aplicación personal.

Se aplica de manera complementaria y no sustitutiva de la nacionalidad de los estados, es decir

coexiste y se superpone a las nacionalidades estatales. Por tanto, se adquiere el estatuto de
ciudadanía cuando se adquiere la de un estado miembro y se pierde automáticamente al perder
la nacionalidad de un estado miembro. No se requiere actuación alguna, es un proceso
automático. A partir de aquí los nacionales van a disfrutar de derechos nuevos en su estado y
en otros EEMM con independencia de la actividad que ese nacional lleve a cabo. Tienen por
tanto un doble vinculo político: el vínculo jurídico político con su estado y otro con el de la unión.

b) Ámbito de aplicación material.

Art.20.2 del TFUE según el cual los ciudadanos de la UE serán titulares de los derecho y sujetos
de los deberes previstos en los tratados. Tienen entre otras cosas los siguientes derechos:

1. Derecho de circular y residir libremente en el territorio de los EEMM.

2. Derecho de sufragio activo y pasivo en las elecciones ddel parlamento europeo y
municipales en el estado miembro en el que residan en las mismas condiciones que los
nacionales de ese estado.
3. Derecho a acogerse cuando se encuentran en el territorio de un tercer estado en el que
no está representado su estado nacional a la protección de las autoridades diplomáticas
y consulares de cualquier EEMM en las mismas condiciones que los nacionales de esos
estados.
4. Derecho de formular consultas ante el parlamento europeo.
5. Retribuir al defensor del pueblo europeo.
6. Derecho de dirigirse a las instituciones y órganos consultivos de la unión en una de las
lenguas del tratado y de recibir la contestación en esa misma lengua.

De aquí destacamos:

 Algunos de estos derechos a se venían disfrutando con anterioridad sobre la base del
principio de no discriminación como el 1.
 El tratado de funcionamiento añade derechos nuevos: el derecho de iniciativa
ciudadana (iniciativa normativa del art.24) y el derecho de acceso a los documentos de
la unión (no regulado aquí, sino en las disposiciones generales, art.15.3).
 La carta de derechos fundamentales recoge todos estos derechos de ciudadanía pero
además a lo largo de la carta podemos encontrar otros derechos que afectan al
ciudadanía:
- Derecho de acceder a epedientes que nos afectan
- Igualdad ded acceso en prestaciones de sS y ayudas sociales en otro EEMM
- A ser oído en otras instituciones de la ue…

2. El Estatuto de ciudadanía de la Unión.

3. Los derechos del ciudadano de la Unión.