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Kant se da cuenta del valor de la razón para que los seres humanos podamos

confirmar nuestras opiniones y para entendernos unos con otros fundándonos en la


capacidad que tenemos todos de comprender lo que es lógico.Debemos esforzarnos
en ser lo más racionales que podamos aunque sea difícil actuar conforme a la razón
ya que el hombre solo puede llegar a ser hombre a través de la educación y el hombre
solo es lo que la educación hace de él.Pienso que a lo largo de la obra de Kant, se
tratan con claridad dos temas muy importantes en la realidad y en la filosofía. Primero:
la razón nos presenta el deber como una ley objetiva, es decir, como algo que
tenemos que cumplir porque es lo razonable independientemente de nuestra voluntad,
y lo segundo es que aunque la lógica nos diga lo que tenemos que hacer, estamos
hechos de una forma que no nos sentimos obligados por esa lógica y podemos hacer
incluso lo contrario aunque sepamos que el resultado va a ser desastroso. Un ejemplo
sería un alcohólico que vuelve a beber aunque sabe que no le conviene.Hoy en día se
tiene en cuenta que el hombre no es tan solo un ser racional, sino un ser que a la vez
razona y siente. Este es un punto de vista que Kant no tuvo en cuenta y por tanto se
ha quedado algo superado al tratar de descubrir la naturaleza humana como
simplemente racional.No obstante, esta crítica a Kant es verdadera si consideramos a
los seres humanos porque no somos máquinas de razonar como los ordenadores,
pero es válida cuando consideramos el conjunto de la vida social ya que la sociedad
en sí no funciona conforme a la razón.Otro campo en el que Kant sigue siendo muy
válido hoy día es en las relaciones entre distintas culturas, por ejemplo: no es posible
si no se es musulmán entenderse con los musulmanes en torno a cualquier precepto
de su religión, a no ser que encontremos un lenguaje común que nos permita llegar a
un acuerdo, y este lenguaje común no puede ser de ninguna religión, sino que solo
podremos entendernos usando la lógica que es común a todos los seres humanos, por
lo que si, según Kant, tenemos la buena voluntad de ser razonables los unos y los
otros podremos llegar a un acuerdo válido para todos.Otro tema de actualidad
relacionado con la ética kantiana es el actual debate de la aceptación de la eutanasia
en nuestra sociedad. Según Kant debemos actuar por deber sea cual sea nuestro
sentimiento, nuestras ganas de morir, o las circunstancias trágicas que nos rodeen. En
este caso, el deber consistiría en conservar la vida, porque según los imperativos
categóricos deberíamos de actuar según una ley que se tornara universal para todo el
mundo; y si optamos por dejar de vivir, si todo el mundo tuviera la misma actuación, la
vida se extinguiría. Aún así, el debate sigue vigente, ya que hay muchos tipos de
enfermedades y las circunstancias, a mi parecer, siempre se tienen en cuenta.
Ética:

La ética kantiana es, pues, aquello que es bueno en sí mismo: la buena voluntad. Un
sujeto puede tener cualidades tales como inteligencia abundante, habilidades manuales,
capacidad calculativa, ingenio o destreza general, pero si éstas cualidades no van
acompañadas de una buena voluntad, no tienen por qué ser necesariamente buenas;
es más, pueden incluso ser malas (la destreza en un asesino, por ejemplo). Así, Kant
introduce la noción de buena voluntad como fundamento básico de su ética, como cosa
que es buena por sí misma. Esta buena voluntad es la que debe llevarnos a actuar de
una forma tal que la máxima de mi acción (es decir, el principio subjetivo que orienta mi
actuación) deba quererla como si fuera una ley universal.

Kant separó las éticas en:

 Éticas empíricas
 Éticas formales

La ética debe ser universal y, por tanto, vacía de contenido empírico, pues de la
experiencia no se pueden extraer deberes universales, sino solo planteamientos
prudenciales condicionados por la experiencia sensible. Debe, por lo mismo, ser a
priori, es decir, anterior a la experiencia y autónoma, esto es, que la ley le viene dada
desde dentro del propio individuo y no desde fuera. Los imperativos de esta ley deben
ser categóricos y no hipotéticos que son del tipo «Si quieres A, haz B».

Kant sintetiza su pensamiento, y en general «el campo de la filosofía en sentido


cosmopolita», en tres preguntas:
 ¿Qué debo hacer?
 ¿Qué puedo saber?
 ¿Qué me está permitido esperar?,

Que pueden resumirse en una sola: ¿Qué es el hombre?.

A la primera interrogante trata de dar respuesta la moral. A la segunda, el análisis de la


Crítica de la razón pura en torno de las posibilidades y límites del conocimiento humano.
A la tercera trata de responder la religión.

Kant hizo tres formulaciones:

1.-Actúa solo según esa máxima que puedas querer al mismo tiempo que se convierta
en una ley universal.
2.-Actúa como si la máxima de tu acción, por tu voluntad, haya de convertirse en ley
general de la naturaleza.
3.-Actúa de tal forma que utilices la humanidad, tanto en tu persona como en la personal
de cualquier otro, siempre como fin y nunca como simple medio.
En mi opinión Aristóteles tiene razón a la hora de decir que la felicidad tiene que estar
vinculada a la razón. El hecho de ser seres humanos y poseer características nos
diferencian de los animales en muchos aspectos .En mi opinión cada ser tiene unas
características que le son propias y le llevan a un fin, como es el caso de las plantas
éstas están hechas de cualidades que sólo le permiten alimentarse y crecer, lo mismo
en el caso de los animales estos actúan según instintos matan para comer, se
reproducen sin importarles donde y cuando, en fin actúan según sus hombre debería
de ser así también, si poseemos la razón y la capacidad de pensar, deberíamos de
utilizarla tal y como usamos otros aspectos, para llegar a un fin que es la sabiduría.
Cuando discutíamos sobre este tema en el aula, se oye alrededor y de una manera
mayoritaria que las personas serian felices si pudieran vivir toda su vida alimentándose
y que estas personas no comprenden el verdadero significado de la razón y la
felicidad, en un cierto modo están ciegos, Realmente serias feliz, viviendo como un
cerdo, comiendo y creciendo, sin ninguna meta?, creo que muchas personas están
ciegas por que están demasiado influenciadas por la sociedad en que vivimos,
admirando a personas que no usan la razón ( cualidad propia humana), sino que se
rigen por los placeres y formas para llegar a estos. En el caso de los niños ,a
Aristóteles los excluye de esta felicidad, esta en lo cierto lo hace bien ya que los niños
apenas están empezando a usar la razón , son como “animalitos” felices por comer y
jugar como los animales pero que con el paso del tiempo irán aprendiendo y
razonando hasta comprender el uso de la razón para ser feliz.

Ética:
Toda acción humana se realiza en vistas a un fin, y el fin de la acción es el bien que se
busca. El fin, por lo tanto, se identifica con el bien. Pero muchas de esas acciones
emprendidas por el hombre son un "instrumento" para conseguir, a su vez, otro fin, otro
bien.
Felicidad: Es la meta o fin (telos) que el ser humano pretende alcanzar es la felicidad.
La felicidad es un objetivo complejo al que deben contribuir otros bienes menores sin
los que sería imposible alcanzarla. Aristóteles distingue a este último respecto:

a) Bienes externos: riqueza, honores, fama, poder...


b) Bienes del cuerpo: salud, placer, integridad...
c) Bienes del alma: la contemplación, la sabiduría.

Virtud: Costumbre del buen obrar.


Imposible que exista la felicidad sin la virtud: la felicidad es "la actividad del hombre
conforme a la virtud" La virtud se adquiere por el hábito, y no exclusivamente a través
de la educación y el saber, como sostenían Sócrates y Platón. Saber qué es el bien, no
implica hacer el bien. Por eso, junto a un buen entendimiento que nos ayude a
determinar fines y medios, es necesaria la voluntad, que es lo que nos mueve o
impulsa a obrar. A este saber obrar conforme a la razón, lo llama
Aristóteles prudencia:una de las virtudes éticas básicas.

Las virtudes éticas:


Son adquiridas a través de la costumbre o el hábito y consisten, fundamentalmente, en
el dominio de la parte irracional del alma (sensitiva) y regular las relaciones entre los
hombres. Las virtudes éticas más importantes son: la fortaleza, la templanza, la justicia.

Las virtudes dianoéticas:


Se corresponden con la parte racional del hombre, siendo, por ello, propias del intelecto
(nous) o del pensamiento (nóesis). Su origen no es innato, sino que deben ser
aprendidas a través de la educación o la enseñanza. Las principales virtudes dianoéticas
son la inteligencia (sabiduría) y la prudencia.

Voy a comparar las teorías éticas de Kant y Aristóteles. Teniendo en cuenta que los
sistemas éticos son hijos de su tiempo y que entre ambos autores hay una distancia
cronológica de más de 2000 años vamos a ver como el sistema ético detien e
diferencias con el de aristoteles. Un primer punto de divergencia entre ambos es la
distinta caracterización que hacen de la ley moral: mientras que para Kant la ley
moral se define por su universalidad y necesidad, para Aristóteles, al contrario la ley
moral se define por su universalidad, pero no por su necesidad. Así, para el filósofo
griego la ética es un saber práctico que no tiene que por que ser necesario. Como
consecuencia de esto, la ética kantiana se basa en un solo imperativo categórico
válido para todas las circunstancias posibles. Al contrario, en el caso de Aristóteles, la
ética esta formada por muchos imperativos hipotéticos, tantas como circunstancias
posibles se puedan dar. En relación con lo anterior las éticas de los dos autores
tienen un fundamento distinto. En el caso de Kant la ley moral no se basa en la
experiencia, sino en el propio sujeto que es capaz de concebir la ley moral. Aristóteles,
al contrario, es la experiencia, en consonancia con su empirismo, el fundamento de la
ley moral, ya que es el hábito y la práctica constante, (la experiencia) los que nos
llevan a un obrar correcto. Su fundamento es. Pero la diferencia más fundamental
entre ambos autores es la siguiente: para Kant el cumplimiento de la ley moral es un
fin en si mismo, no un mero medio para algo, para un premio. Al contrario, para
Aristóteles, la virtud es un medio para conseguir el Bien Último Supremo del hombre
que es la felicidad. Por esta razón, la ética aristotélica es una ética material, es decir
esta dotada de un contenido concreto. Alcontrario, la ética kantiana es una ética
formal: lo que importa no es tanto el contenido de la ley moral, sino su forma, y su
cumplimiento estricto, es decir, es una ética basada en el deber, por encima de la
felicidad. Así una conducta es moral si es universalizable, no si nos lleva a la felicidad.
Esta nos dice Kant no es el fin, pero si la consecuencia. El deber no nos tiene porqué
hacer felices, pero si que nos hace dignos de felicidad: para Aristóteles tenemos que
ser prudentes (estudiar los casos particulares) al aplicar un principio moral, mientras
que en Kant debemos ser respetuosos con la ley moral, a pesar de las
circunstancias.. la ética de ambos autores tiene un carácter comunitario claro: tanto
Kant como Aristóteles consideran que la ética es una forma de vida que esta
necesariamente relacionada con la polis, o en el caso de Kant, con la humanidad en
su conjunto. Los dos buscan mejorar la sociedad en la que viven, los buscan ilustrar,
en el caso de Aristóteles con una ética más terrena, más cercana al sentido común,
más complaciente con la finitud del ser humano; en el caso de Kant con una ética más
rigorista que no cesa de buscar un fundamento incondicionado que va más allá de las
limitación del ser humano.

La ‘Naturaleza’ no es un tema predominante en la filosofía occidental, pero tampoco


en las grandes tradiciones orientales (índicas, chinas). Esto no quiere decir que deje
de entrar por completo a la reflexión filosófica, sino que es tratado como un tema de
segundo orden. En el pensamiento greco-occidental, al realizar (en Sócrates) un ‘giro
antropológico’ y hasta ‘epistemológico’, la Naturaleza (physis) se convertía en ‘objeto’
de estudio e investigación por parte del ‘sujeto’ gnoseológico. Platón estableció
además el criterio axiológico de la ‘inferioridad’ ontológica de la physis con respecto al
mundo ideal de los eidé (esencias ideales). A pesar de que Aristóteles reivindicara la
materialidad y empireia, la physis (Naturaleza) sólo servía de trampolín filosófico (o
científico) para llegar a la meta ta physika (lo metafísico como lo espiritual). Salvo en
algunas excepciones (Renacimiento, Romanticismo), la tradición dominante de
Occidente considera la ‘Naturaleza’ una realidad ‘desanimada’ y bruta, una res
extensa (Descartes: una ‘cosa extensa’) o simplemente una mega-máquina mecánica.
El mecanicismo (como corolario del cientificismo) acabó con la entelejeia aristotélica,
el conatus spinoziano, el élan vital bergsoniano o el hilozoísmo de Wundt.

Desde una década, vivimos una secuencia de crisis, tanto a nivel continental como
global, que parecen ser la manifestación aún parcial de una crisis civilizatoria mayor: el
equilibrio ecológico está deteriorado de tal manera que huracanes, inundaciones,
sequías y nuevas enfermedades se turnan a una velocidad cada vez mayor.
Esta “crisis ecológica” viene acompañada de una crisis “alimentaria”, una crisis
“financiera”, una crisis “económica”, sin hablar de las crisis de legitimidad política en
muchas partes del mundo, de la crisis de valores, de la crisis “religiosa” y de la crisis
de “sentido” para la generación joven con mirada al futuro.

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