El 28 de febrero del 2019 en puerto (rico meta) Ulises lozano sufrió el secuestro

de sus dos hijas. Desde entonces, luchó por encontrar con vida a sus dos tesoros
María y Nely.

El señor Ulises narra los hechos

Recuerdo que yo estaba descansando por el día de trabajo que realice en mi campo,
cuando escuche un grito de inmediato me dirigí al cuarto de mis hijas y allí se me
presentó un hombre armado con un fusil al que llamaban walaco, quien era un
comandante del grupo paramilitar. El hombre me citó junto con mis niñas y me dijo:
Lo necesito a usted y a sus hijas esta tarde, pasaré a las 18 horas a recogerlos”

Para sorpresa de Ulises lozano y en medio del temor que ya lo acompaña por la
amenaza, el grupo ilegal llegó media hora antes: “A le ordenaron subir a una moto
y a las otras tres niñas a una camioneta blanca con mi hijo pequeño y mis cuatro
nietos” con ese relato recuerda Blanca Meneses la pesadilla que comenzó a
padecer su vida.

Esa noche, lleno de dolor, tendría aún más escenas de pánico. Hacia las 22 horas,
el padre de las victimas regresó llorando, denunciando a todo el pueblo y a las
autoridades con un grito que aún retumba: “¡Se llevaron mis hijas, se las llevó el
comandante walaco! Él dijo que se las llevaba y que más tarde me las
entregaba”...Pero sus hijas nunca volvieron.

El comandante me exigía mensual una cuota por mis hijas o que le se diera mis
tierras en cambio de solo verlas una vez más a mis hijas. Cuenta el señor Ulises
lozano que acepto pero ellos solo buscaban apoderasen del terreno ya que
quemaron todo soy solo miraba todo en llamas pero no mire volver a mis hijas
mande un comunicado que quería saber de ellas pero desde entonces, las jóvenes
permanecieron desaparecidas durante diez años. En su cautiverio se esclareció,
según informes forenses, que hubo torturas con signos de violencia y, al mismo
tiempo, que sus restos fueron enterrados en una fosa clandestina donde
permanecieron olvidadas por las autoridades durante diez años.

Solo extorsionaron al señor Ulises quitándole lo único que tenia pasó dicho lapso
de tiempo y los restos de las dos hermanas fueron, finalmente, devueltos a su padre.

El día que fueron entregados los restos de sus hijas a el señor Ulises lozano, por
medio de la Fiscalía, en una ceremonia que tuvo lugar en las oficinas del Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos en colombia, se
aseguró que las jóvenes (la menor de ellas de tan solo 11 años) fueron brutalmente
asesinadas por los paramilitares que operaban en puerto rico meta, de acuerdo a la
organización de Derechos Humanos.
Pese a ese durísimo golpe y sin importar grandes riesgos, Ulises lozano no bajo los
brazos y empezo una lucha por muchos años en la búsqueda de la justicia por las
siempre recordadas María y Neli quienes además eran gemelas.