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Universidad Santa María

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Comunicación Social

Profesor: Alumno:

Javier Reinaldo Pérez Matos, Leimy

C.I: 25.579.918

Villalobos, Jeanhaiver

C.I.: 27.475.608

Caracas, 26 de agosto de 2019


El piano viejo

Esta obra es un cuento literario del autor Venezolano Rómulo Gallegos, en donde destaca la

familia, el poder de decisión y el que nunca hay que olvidar nuestras raíces, siempre

valorando aquellos que nos ayudaron a formarnos, a ser quienes somos, como nuestros

padres.

La obra relata la historia de cinco hermanos los cuales se fueron alejando poco a poco dejando

a su padre solo, uno a uno;

 Luisana.

 Carlos.

 Ramón.

 Ester.

 María.

Estos hermanos que componen el núcleo familiar. Cuatro de ellos tomaron caminos

diferentes: Primero fue Ester quien casada con un hombre rico se alejó de todos. Luego María

quien se enamoró de un hombre sin brillo, y con fama sin limpieza. En seguida Carlos un

hombre aventurero, de carácter impulsivo y aventurero. Ya por último Ramón una persona

arisca al que siempre le gustó el dinero. Todos tomaron caminos diferentes con un poco de

fortuna, excepto uno Luisana.

Su padre, recordaba mucho a sus ingratos hijos, ya que no lo iban a visitar, sin embargo,

en su último lecho de muerte, pidió a su hija mayor que siempre las puertas de su hogar

estuvieran abiertas para sus hijos y le dijo “Tú serás la paz y la concordia”.
Luisana fue una joven que toda su vida se sintió apartada de su familia con un dolor interno,

una tristeza, era una persona cohibida ya no era incluida en actividades cotidianas, tanto así

era, que hasta su padre se olvidaba de contarla entre sus hijos. Ella, al crecer, al convertirse

en una mujer, en la soledad de su casa llevaba una vida simple.

Ella con aquella paz se sentaba al piano de su madre, tocaba aunque muchas teclas ya

no sonaban, pero una, rompía las armonías, sonaba a destiempo o no sonaba, esta tecla hacia

feliz a Luisana ella decía “Se parece a mí, no servimos sino para romper las armonías” Al

cabo de un rato esa tecla sonaba y ella decía “Oigan a Luisana ahora es cuando viene a

sonar”.

Una mañana Luisana muere tranquilamente sobre el piano, presionando aquella tecla.

Sus hermanos la encontraron y la enterraron, en la tarde sólo hablaban de la repartición de

los bienes de la muerta.

Estos hermanos, secretamente se odiaban, se tenían envida, era una dulce violencia,

un rencor que los amargaba, pero, había algo que no les dejaba estallar… Luisana quien

siempre intercedía por los demás para que no pelearan entre ellos y se incluyeran unos a

otros. Ahora sin Luisana cada uno comprendía que ya no había nada que los unía y todo ese

odio, rencor, envidia, amargura al fin iba a estallar.


Recordando las palabras del padre “Tú serás la paz y la concordia”. Ahí, en ese

momento se dieron cuenta del porque ese respeto inmenso hacia Luisana y del papel tan

importante que desempeñaba, un papel honorable, mantenerlos a todos unidos como lo quería

su padre.

Repartiéndose los bienes, empezó una disputa por ver quien se quedaría con la mejor

parte de esa fortuna, esa discusión empezó a crecer y crecer, cada uno exclamaba de manera

agresiva lo que le tenía que decir a los demás, los hombres saltaron de sus asientos

desafiándose a muerte las mujeres no lograban tranquilizarlos… De repente, en un receso del

ruido por la discusión, en lo más recóndito de aquella casa se escuchó una nota, una nota que

sale del piano viejo y abandonado en el que callo Luisana, presionando su tecla favorita.

Todos guardaron sus armas, sintieron que Luisana había vuelto con ese suave sonido,

dulce y destemplado, ahí estaba ella, su alma simple pero buena, sí, era ella quien al morir su

dedo permaneció sobre aquella única tecla, su tecla favorita, la cual de pronto sonó, como

siempre, a destiempo. Entonces Ester en el silencio de aquella sala exclamo:

“Oigan a Luisana”.

Fin

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