Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Caso Cerrado PDF
Caso Cerrado PDF
Rafael Llamazares y Joaquín Torres constituyen el equipo de arquitectura conocido como A‐cero.
Después de diseñar su propio estudio acometen un pequeño proyecto, el Bar Casa Pilar, y vuelven a
cruzar las líneas de la imaginación con un trabajo ambicioso pero de gran equilibrio de formas. El éxito
es inmediato y allí conocerán a Amancio Ortega (Inditex), quien
no tarda en encargarles su propia casa, y tras ésta, el diseño de
la cadena de tiendas Often.
El siguiente gran proyecto será el diseño de La Finca de
Somosaguas, donde se crea un parcelario exclusivo para la
construcción de unas 180 grandes casas. Las viviendas que
realiza el estudio resultan singulares en sus formas, por más que mantengan un aire de familia, basadas
en la creencia tanto de Torres como de Llamazares de que en arquitectura tan importante es la función
como la forma.
La clave del trabajo de A‐cero está en mantener el hilo conductor de la idea a lo largo de todo el
proceso, desde el inicio hasta la fase crucial de la dirección de obra. En este sentido el “qué” es tan
importante como el “cómo”. El proyecto debe elaborarse partiendo del concepto más general hasta
completar la definición del último detalle que lo materializa.
A‐cero experimenta actualmente un proceso de internacionalización importante, con proyectos en
Europa, EAU, Líbano, Rusia, Arabia Saudi, y EE.UU
Una revolución de la construcción: la construcción modular
La distribución tradicional del sector de la construcción ha sido localizar el producto en una posición fija,
siendo los trabajadores, máquinas, herramientas y materiales los que se mueven alrededor del
producto. Como principales inconvenientes de esta distribución de
punto fijo destaca la escasa flexibilidad en los tiempos de
fabricación, ya que el flujo de fabricación no puede ser más rápido
que la actividad más lenta, la necesidad de una inversión elevada en
equipos específicos y la elevada monotonía de los trabajos, que
puede afectar a la moral del personal.
La finalidad es obtener las ventajas que ofrece un trabajo en cadena: una mejora de acabados,
calidades, plazos de entrega, precio, etc. Es la especialización de cada fase del proceso constructivo,
incorporando los avances tecnológicos y eliminando los tiempos muertos y los problemas derivados de
las inclemencias del mismo. Estandarización, modularidad, tecnología, control de calidad y tiempos,
mano de obra especializada, etc.
Podría compararse históricamente con las mejoras que introdujo Henry Ford en la industria del
automóvil.
Esta forma de producir viviendas representa unas ventajas análogas a las de la producción en serie de
cualquier otro producto, permitiendo no sólo una importante reducción de tiempos de ejecución, sino
también una clara reducción de costes, un espectacular incremento de la seguridad laboral y una
importante mejora en aspectos relativos a impacto medio
ambiental, favoreciendo además el desarrollo de un fuerte
tejido industrial a través de la propia fábrica.
Uno de los aspectos más novedosos de este sistema de
construcción es que no compromete el resultado final en
cuanto a criterios de usabilidad, habitabilidad, calidad, o con
respecto a la tipología de los materiales utilizados. El Sistema
de Construcción Modular está basado por la secuencia e interconexión de prismas regulares, los cuales
mediante su combinación, permiten formar casi una infinidad de formas y usos, alcanzando
prácticamente la totalidad de las necesidades de los usuarios.
“Vi que tenía que empezar a hacer algo con el tema del prefabricado porque me parecía que el proceso
de construcción tradicional era muy largo y traumático, un punto de conflicto con los clientes”, explica el
Joaquín Torres.
Las ventajas de la construcción modular, con producción en taller y montaje en obra, tiempos más
cortos y mano de obra más especializada, incrementan los resultados en cuanto a calidad y precio del
producto final no comparables con la construcción tradicional, exigiendo al tiempo un control mayor de
las fases iniciales de diseño, dado que absolutamente todo debe ser diseñado y controlado de
antemano, no existiendo lugar a la improvisación.
A‐cero cuenta desde Junio de 2011 con una moderna fábrica en Onda (Castellón) con 3.500 m2 de
superficie, tres entradas para camiones, tres puentes grúa (dos exteriores y uno interior), también
cuenta con dotaciones para el personal, oficinas e instalaciones, de 150 m2. Diariamente, en la fábrica
trabajan unos 30 empleados y ésta tiene capacidad para abordar simultáneamente un total de siete
viviendas.
En esta apuesta por la construcción industrializada, inicialmente se desarrollan dos tipos de vivienda de
85 m2 desde 94.000€ y 107 m2 desde 118.000€, aunque en la actualidad existen ya más de 12 modelos
de viviendas estandarizadas. Con este mismo sistema constructivo se pueden realizar modelos
personalizados. Con un plazo de construcción de 20 semanas. Se entregan completamente equipadas y
terminadas incluyendo baños, cocina, calefacción e iluminación. Además se ofrece la posibilidad de
contratar interiorismo, paisajismo, cierre de parcela, piscina, etc.
Una vivienda cada 8 horas
A‐cero demuestra que una vivienda se puede levantar en ocho horas. En una sola jornada se colocaron
los módulos que componen una de sus casas en Oleiro (La Coruña) basadas en los principios de la
construcción industrializada. Las piezas de este mecano doméstico llegaron por carretera desde Onda
(Castellón).
Uno de los camiones góndola, que transportaba un elemento clave para la sujeción de los módulos, se
averió a una hora de A Coruña. A pesar del contratiempo, la vivienda quedo terminada a media tarde y
solo quedarán los remates de ensamblaje y acabado.
La vivienda instalada es el modelo estándar Basic, uno de los más modernos diseñados por A‐cero Tech,
con una superficie de 115 metros cuadrados y un precio de 118.000 euros. La vivienda cuenta con
garaje, porche exterior y cubierta transitable.
“Estamos haciendo casas pequeñas como esta, pero también viviendas de mil metros cuadrados,
oficinas, un club de pádel, etc. Esto es una manera nueva de construir, que se puede hacer de mayor o
menor calidad”, afirma Torres.
En Japón, más del 40 % de la edificación ya se hace con arquitectura prefabricada, y en Alemania supera
el 30 %. “En España es complicado porque todo está enfocado al proceso artesanal, desde la formación
del arquitecto hasta las licencias de los ayuntamientos. Todo está organizado para que el tiempo sea un
factor secundario en la construcción, y hoy el tiempo es fundamental en la vida de todos”, señala el
director de A‐cero.
Más difícil todavía: Un rascacielos en 3 meses.
Estos mismos principios están siendo utilizados por otras empresas a nivel mundial. Así, por ejemplo,
Broad Group pretende construir en un tiempo de tres meses Sky City, la cual será la torre más alta del
mundo, con 838 metros. Para hacer más creíble esa proeza arquitectónica, hay que tener presente que
la constructora BSB (Broad Sustainable Buildings) ya fue capaz de levantar a finales del 2011 un hotel de
30 pisos en tan solo 360 horas (15 días). Ubicada a orillas del lago Dongting, en la provincia de Hunan, la
construcción tiene 17.000 metros cuadrados de superficie y está diseñada para resistir terremotos de
hasta 9º en la escala de Richter. El secreto de la empresa
radica en la propuesta de un nuevo proceso constructivo,
basado en módulos prefabricados.
Broad cuenta con dos plantas en donde los edificios se producen por secciones –recámaras, baños,
comedores‐ con todo e instalaciones eléctricas, hidráulicas y demás infraestructura, que luego se
transportan a su lugar final, donde son ensambladas como si se tratara de piezas de Lego.
Las ventajas de la construcción modular parten de la sistematización del proceso productivo, que hace
que el 90% del edificio se "fabrique" en un entorno controlado. De esta forma se tiene un control
absoluto sobre los costes, se simultanean los procesos, se dispone de un stock de materiales y
componentes ya elaborados, y se sustituyen los procesos intensivos en mano de obra por procesos
automatizados.
Estas características redundan en un control de calidad en origen, un incremento notable de la
seguridad, y una amplia disminución de los residuos y de la contaminación acústica. Con la ventaja
añadida de que su desarrollo no se ve afectado por las inclemencias meteorológicas.
Ahora están dispuestos a romper el techo actual con Sky City One: una mole de 838 metros (220 pisos),
bastante menos esbelta que la de Dubai. Todo ello en la ciudad china de Changsha (capital de la
provincia de Hunan). En el caso de SKY City, la edificación se llevará a cabo con el uso de la tecnología
Modular BSB (Broad Sustainable Building), que fue desarrollada por la misma empresa a cargo del
proyecto. Esto permitirá la construcción de cinco niveles por día, gracias al uso de elementos
prefabricados. Broad Group enfoca su tecnología BSB al desarrollo de "edificios hechos en fábrica", los
cuales se caracteriza por la resistencia que presentan a temblores de
alta magnitud; por la conservación de energía de las estructuras, la
purificación del aire y la durabilidad de los mismos; así como por los
ahorros en materiales durante la edificación, mismos que están libres
de plomo, radiación y asbesto, al igual que la reducción de los
desperdicios de construcción.
Si bien BSB parecer haber firmado ya un acuerdo con las autoridades locales de Changsha, el proyecto
aún está pendiente de ser aprobado por el gobierno central.
Fuentes: Información corporativa de A‐cero (http://www.a‐cero.com) y de Broad Global (http://www.broad.com).
1. Analizar las ventajas e inconvenientes de la construcción modular frente al sistema
tradicional.
2. Identificar otros sectores a los que podrían aplicarse los principios de la construcción
modular.